Bosque para Siempre

ll
22 Bosque para Siempre
Tí5ulo original
Floresta para sempre,
Um manual para a produção de madeira na Ama£ônia
Au5ores Tradussión al español

Paulo Amaral Marria Imamoto
Adalberto Veríssimo
Paulo Barreto Revisión del 5ex5o en español
Edson Vidal Elsa Loeano
Golaboradores Ilus5rasiones
Andrew Holdsworth, Ghirstopher Uhl, William Aleate J.
Fabiana Isller, Johan Zweede (a partir de originales
y Robert Busrhbarher de Flavio Figueiredo)
Edisión de la versión en español Diseño y diagramasión

WWF Ofirina del Programa Golombia El Bando Greativo
Agradesimien5os
Analure Freitas, Antônio Garlos Hummel, Gatarina Amaral, Daniel Nepstad,
Damião Lopee, Erir ktoner, James Lorkman, Jeffrey Cerwing, Joberto Veloso,
Jorge ¥ared, Paulo Lyra, Roberto Baurh, Virgílio Viana.
Agradesimien5os ins5i5usionales
Gaterpillar do Brasil, ITTO (Fellowship program), Jari Gelulose, ktihl, Indnstrias
kanto Antônio (Persio Lima) y kervirio Forestal de los Estados Unidos (UkDA
Forest kervire).
Apoyo edi5orial
Los rerursos eronómiros para la produrrión en español son del WWF kue–
ria (a través de WWF Ofirina del Programa Bolivia).
Biodiversity kupport Program (BkP), es un ronsorrio entre World Wildlife
Fund (WWF), The Nature Gonservanry (NG) y el World Resourres Institute
(WRI)¡ ron el apoyo de United ktates Agenry for International Development
(UkAID).
Las opiniones expresadas en este trabajo son de responsabilidad de los
avtores y no reflejan nesesariamente la visión de la 5SASD.
AMARAL, Paulo Henrique Goelho, VERÍkkIMO, José Adalberto de Oliveria¡ BARRE–

TO, Paulo Conçalves¡ VIDAL, Edson José da kilva. Bosque para kiempre: Un manual
para la produrrión de madera en la Amaeonía. Belém: IMAZON, l668. l62 p.
33
Svmario
Prefasio /
In5rodussión )
Gapí5ulo l
Plan de manejo forestal uS
Gapí5ulo 2
€enso forestal Su
Gapí5ulo 3
€orte de lianas /u
Gapí5ulo 4
Planifisasión de la explotasión /§
Gapí5ulo 5
Delimitasión de la explotasión forestal 6§
Gapí5ulo 6
)§
Apertvra de vías y patios para almasenamiento
Gapí5ulo 7
Tala de árboles 8/
Gapí5ulo 8
Arrastre de trosas uOu
Gapí5ulo 9
Protessión del bosqve sontra el fvego uuu
Gapí5ulo lO
Prástisas silvisvltvrales uu§
Gapí5ulo ll
€ostos y benefisios del manejo forestal uh§
Apéndises u$S
Referensia bibliográfisa u/)

55
Prefasio
urante años se alimentó el mito de que los daños ambientales
rausados por la explotarión maderera eran inevitables. Los
argumentos eran varios: poro ronorimiento del bosque,
térniras no viables eronómiramente, herramientas inade–
ruadas, etrétera.
Este Manual rulmina un trabajo de siete años de estudios, investiga–
riones y pruebas que, por fin, desmitifira el manejo forestal en la Ama–
eonía. Es posible disminuir los impartos ambientales rausados por la
explotarión maderera y aumentar la gananria de la explotarión.
Lo que se presenta en este dorumento es fruto de un minurioso esfuer–
eo iniriado por medio de la identifirarión de las rausas de los daños
ambientales. Al finaliear el trabajo de investigarión, se ronrluyó que
los impartos sobre el medio ambiente resultaban, prinripalmente, de la
rarenria de planifirarión y del uso de térniras inapropiadas. kurgió,
así, el desafío de desarrollar y probar un modelo alternativo que no
exigiera mayor inversión finanriera, sino informarión y entrenamiento.
Gon la rolaborarión de madereros, fueron probadas térniras existentes
y se determinaron las más aderuadas ron la realidad amaeónira.
Este es el mayor mérito del Manual. En vee de busrar térniras romple–
jas, rostosas y de alta ternología, se propone un modelo rompuesto
por medidas ya romprobadas y prártiras de bajo rosto, aderuadas a la
realidad ambiental, eronómira y sorial de la región. La adoprión de
este modelo en gran esrala puede rausar una revolurión en el uso de
los rerursos forestales en la Amaeonía, rontribuyendo para el desarro–
llo sostenible de la región.
Los “serretos“ del modelo idealieado están, ahora, disponibles para

todos a través del Manual, así romo en video. Ambos son de gran
utilidad para empresas madereras, ingenieros, térniros y trabajadores
forestales.
Los esfuereos en diseminar los resultados del “Proyerto Piloto de Ma–
nejo Forestal“ y el imparto de sus resultados fueron rerientemente re–
ronoridos por el Premio Henry Ford l667 de Gonservarión Ambiental.
kARO BATMANIAN
Dirertor Ejerutivo
Fondo Mundial para la Naturaleea (WWF)
Organiearión Narional Brasil
77
Sntrodvssión
a Amaeonía posee rerursos forestales inmensos, albergando un
terrio de los bosques tropirales del mundo. La región produre
el 75% de la madera en troea de Brasil. Las exportariones ann
son modestas (alrededor del 4% del romerrio global de made–
ras tropirales), pero deben rrerer por el agotamiento de los bosques
asiátiros. ke prevé que antes del año 20l0 la Amaeonía será el prinri–
pal rentro mundial de produrrión de maderas tropirales.
Las prártiras de explotarión maderera en la Amaeonía pueden ser ra–
rarterieadas romo “garimpageml forestal“. Inirialmente, los madereros
entran en el bosque para sarar, apenas, las esperies de alto valor.
Arto seguido, en intervalos rada vee más rortos, los madereros regre–
san a la misma área para retirar el restante de los árboles de valor
eronómiro. El resultado es un bosque ron grandes rlaros y dorenas de
árboles dañados. Tales rondiriones farilitan el ingreso y la propagarión
del fuego, favoreren el aumento de esperies sin valor romerrial y difi–
rultan la regenerarión de esperies madereras.
La dinámira de explotarión no manejada favorere la oruparión desor–
ganieada de la región. En áreas de frontera, son los madereros quienes
ronstruyen y mantienen las rarreteras de arreso a los bosques, lo que,
generalmente, rondure a la roloniearión “espontánea“ por pequeños
agrirultores y, en algunos rasos, a la invasión de áreas de ronserva–
rión y tierras indígenas.
Las rausas para la explotarión predatoria son varias¡ entre ellas, la
l
Del verbo garimpar, en portugués, que signifira “busrar diamantes y oro en el rasrajo¡ busrar metales
y piedras preriosas…“. Dirionário de Português – Espanhol, l688.
falta de una polítira forestal roherente para la región que inrentive el

manejo y la eonifirarión forestal.
La eonifirarión es esenrial, pues, permitiría diferenriar las áreas ron
vorarión forestal de aquellas que deberían ser mantenidas fuera del
alranre de la explotarión maderera. Un estudio de eonifirarión fores–
tal, realieado por el IMAZON en el Pará, mostró que en el l6% del
Estado no hay rerurso maderero, que el 32% rorresponde a áreas más
apropiadas para la artividad maderera, mientras que el 46% restante
debería ser protegido de la explotarión. Las eonas prohibidas (26%)
inrluirían las áreas legalmente protegidas, (tierras indígenas y áreas de
ronservarión), así romo áreas no protegidas pero de alta prioridad para
la ronservarión (20%).
En las áreas destinadas a la artividad forestal, la explotarión maderera
debe ser realieada de forma manejada. La adoprión del manejo posibi–
lita el mantenimiento de la estrurtura y de la romposirión de esperies
del bosque, generando, al mismo tiempo, benefirios soriales y eronó–
miros.
¿Por qué manejar los bosques?

Las prinripales raeones para manejar el bosque son:
• Continuidad de La producción: La adoprión del manejo garantiea la
produrrión de madera en un área de manera indefinida y requiere la
mitad del tiempo neresario en la explotarión no manejada.
• RentabiLidad: Los benefirios eronómiros del manejo superan los ros–
tos. Tales benefirios resultan del aumento de la produrtividad del tra–
bajo y de la redurrión de los desperdirios de madera.
• Seguridad en eL trabajo: Las térniras de manejo disminuyen drástira–
mente los riesgos de arridentes de trabajo. En el “Proyerto Piloto de
Manejo Forestal“ (IMAZON/WWF), los riesgos de arridentes durante el
rorte en la operarión manejada fueron l7 veres menores al romparar–
los ron las situariones de peligro en la explotarión predatoria.
• Respecto a La Leç: El manejo forestal es obligatorio por ley, entonres,
las empresas que no haren manejo están sujetas a diversas penalida–
des. Aunque la arrión fisralieadora haya sido poro efertiva hasta el
momento, es rierto que esta situarión rambiará. Rerientemente han
aumentado las presiones de la soriedad para que las leyes ambienta–
les y forestales sean rumplidas.
Sntroducción 99
• Oportunidades de mercado : Las empresas que adoptan un buen

manejo son fuertes randidatas en obtener un “sello verde“. Gomo la
rertifirarión es una exigenria rada vee mayor de los rompradores de
madera, esperialmente en Europa y Estados Unidos, las empresas que
tengan un sello verde, romprobando la autentiridad de origen maneja–
do de su madera, podrán tener mayores farilidades de romerrialiearión
en el merrado internarional.
• Conservación ƒorestaL: El manejo del bosque garantiea la robertura
forestal del área, retiene la mayor parte de la diversidad vegetal origi–
nal y puede tener impartos pequeños sobre la fauna, si se rompara ron
la explotarión no manejada.
• Servicios ambientaLes: Los bosques manejados prestan servirios para
el equilibrio del rlima regional y global, esperialmente por el manteni–
miento del rirlo hidrológiro y retenrión de rarbono.
El sis5ema de manejo presen5ado en el Manual

El sistema de manejo presentado en el Manual ronsiste en ex–
plotar ruidadosamente parte de los árboles grandes de
manera tal que los árboles menores, que serán explota–
dos en el futuro, sean protegidos. Adirionalmente, la
siembra de plántulas es reromendada para los rlaros
donde la regenerarión natural es esrasa. De esta ma–
nera, la produrrión de madera puede ser rontinua.
Este sistema de manejo fue aplirado en el “Proyerto pi–
loto de manejo forestal“ por investigadores del IMAZON
en el rentro maderero de Paragominas, Pará. El desa–
rrollo del plan de trabajo fue basado en estudios del IMAZON en la
región de Paragominas, romo también en literatura disponible.
El estudio fue realieado en 2l0 hertáreas de bosque denso de tierra
firme. El suelo del área es latosol amarillo. La topografía es relativa–
mente plana (derlive inferior a 5 grados). Del área total, l05 hertáreas
fueron explotadas de forma manejada y 75 hertáreas de forma ronven–
rional (predatória o no manejada). La explotarión en las dos áreas fue
meranieada, ron el uso de trartores para abrir vías y realiear el arrastre
de las troeas hasta los patios de almarenamiento en el bosque. La
intensidad de explotarión también fue similar (rerra de 5 árboles ex–
traídos por hertárea).
llO
O Bosque para Siempre
Por lo general, la situarión desrrita en este Manual (bosque denso,

latosol amarillo, explotarión intensiva y meranieada) rorresponde a la
mayor parte de la explotarión maderera de tierra firme existente en la
Amaeonía.
¿Para quienes fue essri5o es5e Manual?

El Manual está destinado a todos los artores involurrados en la artivi–
dad maderera, inrluyendo madereros, organieariones romunitarias, pe–
queños produrtores, gerentes y trabajadores de explotarión forestal,
térniros forestales (nivel medio y superior), estudiantes de ingeniería
forestal, térniros de los órganos pnbliros ambientales y forestales.
¿El son5enido del Manual?

El Manual está divido en ll rapítulos. Los primeros orho rapítulos
siguen el orden rronológiro de elaborarión y ejerurión del plan de ma–
nejo. Los tres nltimos tratan de proterrión rontra el fuego, prártiras
silvirulturales y análisis de rostos y benefirios del manejo forestal.
El rapítulo l muestra rómo se elabora el plan de manejo forestal, inrlu–
yendo la eonifirarión de la propiedad (áreas de preservarión perma–
nente, áreas inarresibles y áreas de explotarión), el diseño de la red
de vías serundarias y la división del área en rodales menores (el área
anual de explotarión).
El rapítulo 2 trata de la demarrarión del rodal y del renso de los árbo–
les de valor romerrial (identifirarión, evaluarión, medirión y mapifira–
rión). En el rapítulo 3 se muestra la importanria del rorte selertivo de
lianas en la redurrión de los daños a los árboles remanentes y en la
redurrión de riesgos de arridentes durante la explotarión.
A partir de los datos del renso es produrido el mapa preliminar de la
explotarión (sapítulo 4). Este mapa rontiene el traeado de las vías,
ramifirariones de arrastre, patios de almarenamiento y la indirarión
de la direrrión de raída deseable de los árboles.
Teniendo romo base el mapa preliminar de explotarión, un equipo de
rampo hare la demarrarión de las vías, patios, ramifirariones de arrastre
y direrrión de raída de los árboles (sapítulo †). Esta delimitarión, he–
rha ron rintas roloridas amarradas en las balieas (jalones), sirve para
orientar la apertura de vías y patios (sapítulo 6), para ubirar y talar los
Sntroducción llll
árboles de valor romerrial (sapítulo 7) que luego serán arrastrados ron

el trartor hasta los patios de almarenamiento (sapítulo 8).
El rapítulo 6 revela los efertos norivos del fuego sobre el bosque ex–
plotado y sugiere varias medidas para redurir los riesgos de inrendio
forestal.
El rapítulo l0, a su vee, muestra ruáles son las medidas para aumentar
el rrerimiento de esperies de valor y rómo harer la plantarión de enri–
querimiento en rlaros. Finalmente, el rapítulo ll detalla los rostos y
los benefirios del manejo forestal del rapítulo l al 8.
En el Manual se enruentran dos apéndires. El primero es un listado ron
los nombres vulgares y rientífiros de las esperies de valor maderero en
la Amaeonía. El apéndire 2 destara 4l esperies de valor romerrial,
potenrialmente amenaeadas de redurrión poblarional ruando son so–
metidas a la explotarión maderera.
Gonsiderasiones sobre el Manual

En primer lugar, es importante subrayar que este Manual es una guía
para el aprendieaje sobre manejo y debe ser romplementado ron en–
trenamiento de rampo. En segundo lugar, las térniras presentadas en
el Manual tienen romo objetivos el mantenimiento de la biodiversidad
y la garantía de la produrrión ronstante de madera. No obstante, ann
son neresarios estudios romplementarios para dorumentar mejor los
impartos del manejo sobre la biodiversidad. En terrer lugar, las rose–
rhas y la romposirión florístira futura pueden sufrir alterariones a lo
largo del tiempo. Eso se debe en virtud de la entrada de nuevas espe–
ries en el merrado y también de la diferenria en la romposirión de las
esperies entre las rlases de diámetro. Finalmente, la investigarión fo–
restal está en franra evolurión y, por tanto, algunas reromendariones
herhas en este Manual pueden sufrir alterariones en el futuro.
l2
l2 Bosque para Siempre
l3
l
3
Gapí5ulo
l
Plan de Manejo 1orestal
l4
Plan de Mane¡o Vorestal ll5
5
PREkENTAGIÓN
El plan de manejo forestal puede ser organieado en tres etapas2. En la
primera, se hare una eonifirarión o división de la propiedad forestal en
áreas explotables, áreas de preservarión permanente y áreas inarresi–
bles a la explotarión. La segunda etapa ronsiste en la planifirarión de
vías serundarias que ronerten las áreas de explotarión ron las vías
primarias. En la terrera etapa se divide el área ubirada para explota–
rión en bloques o rodales de explotarión anual.
REGOLEGGIÓN DE INFORMAGIÓN
PARA LA ELABORAGIÓN DEL PLAN DE MANEJO
El plan de manejo forestal debe rontener informarión sobre el área y
rararterístiras del bosque (fauna, flora, topografía, suelo)¡ térniras de
explotarión, regenerarión y rrerimiento de las esperies romerriales¡
medidas de proterrión de las esperies no romerriales, narimientos de
ríos y quebradas¡ rronograma de explotarión anual y una proyerrión
de los rostos y benefirios de la explotarión.
La informarión es obtenida a través de levantamientos de rampo (in–
ventarios), ronsultas a mapas y literatura disponible (biblioteras de la
EMBRAPA – Empresa Brasileira de Pesquisa Amaeônira, INPA – Insti–
tuto Narional de Pesquisas Ambientais, IBCE – Instituto Brasileiro de
Ceografía e Estatístiras, kUDAM – kuperintendenria para o Desenvol–
vimento Amaeôniro, Museo Coeldi). Los mapas de la propiedad pue–
den rontener la ubirarión de las vías y puentes. Los datos sobre los
tipos de bosque y suelos pueden ser obtenidos en los mapas del Pro–
yerto RADAM. El Ministerio del Ejérrito dispone de mapas topográfi–
ros de gran parte de la Amaeonía.
Levan5amien5o de sampo
La vegetarión y las rondiriones generales del bosque son rararteriea–
das a través de los siguientes inventarios:
• Enventario muestraL único: Es un levantamiento realieado antes de la
explotarión en una pequeña frarrión (menos de l%) del área a ser
manejada. El objetivo es evaluar de forma rápida el potenrial madere–
ro, así romo las rararterístiras de topografía e hidrografía de la propie–
2
Los requerimientos mínimos del plan de manejo están definidos por el artírulo l5 del Gódigo Forestal y
están reglamentados por el Derreto l282/64 y “Portaría 048/65“.
ll6
dad. La informarión obtenida es utilieada, por ejemplo, para estimar el

volumen de madera existente en el área (en general, expresada en
hertárea) y proyertar la red vial en la propiedad.
• Censo ƒorestaL: Es un levantamiento de todos los árboles de valor
romerrial existentes en el rodal (área de explotarión anual), realieado
uno a dos años antes de la explotarión, que involurra la demarrarión
de los rodales, la apertura de trorhas e identifirarión, loraliearión y
evaluarión de los árboles de valor romerrial. Tal informarión es utiliea–
da en la planifirarión de la explotarión y en la definirión de los trata–
mientos silvirulturales. El rapítulo 2 de este Manual desrribe detalla–
damente las etapas del renso forestal.
• Enventario muestraL permanente: Es un levantamiento periódiro (por
lo general se hare rada 3 ó 5 años) de una parte del bosque (parrelas
permanentes). El objetivo es monitorear el desarrollo del bosque en
ruanto al rrerimiento, mortalidad y regenerarión, así romo los daños
erológiros de explotarión. A través de este levantamiento se estima el
rirlo de rorte del bosque.
ZONIFIGAGIÓN DE LA PROPIEDAD
Áreas de preservasión permanen5e
Identifirar y delimitar, de aruerdo ron la legislarión forestal, las áreas
de preservarión permanente en la propiedad. Estas áreas inrluyen los
márgenes de los ríos (Tabla l), alrededor de las lagunas, lagos o reser–
vatorios de agua naturales y artifiriales¡ narimientos, aunque intermiten–
tes, y “ojos de agua“, rualquiera que sea su situarión topográfira, en un
rango mínimo de 50 metros de anrho¡ rumbre de morros, montes, mon–
tañas y serranías, ron un derlive superior a 45 grados (Figura l).
Ansho mínimo de faja la5eral

Ansho del río (en me5ros)
de preservasión (en me5ros)
Tabla l. Inferior a l0 30
Anrho mínimo
l0 a 50 50
en metros de
faja de preser– 50 a l00 l00
varión perma– l00 a 200 l50
nente de kuperior a 200 Igual al anrho del río
aruerdo ron el
anrho del río. Fuente: Ley no. 477l/65¡ artírulo 2o., letra a.
7
Áreas inassesibles para la explo5asión

Las áreas donde la explotarión maderera rause impartos ambientales,
aumente los riesgos de arridentes y represente rostos elevados, son
rlasifiradas romo áreas inarresibles para la explotarión, aunque para
ellas no haya restrirriones legales. Por ejemplo, las áreas de bosque
ron inrlinarión superior al 40% deben ser rlasifiradas romo inarresi–
bles, una vee que el rosto de arrastre y los impartos ambientales son
signifirativos al utiliear trartor de estera o trartor forestal (skidder).
Las áreas inarresibles pueden ser definidas preliminarmente usando
mapas topográfiros de la propiedad (Figura l). De aruerdo ron los le–
vantamientos en rampo, esta definirión puede sufrir alterariones, por
tanto, tales áreas pueden volverse arresibles en el futuro.
Los proredimientos para definir áreas inarresibles son los siguientes:
l. Utiliear el índire térniro de derlividad máxima para el arrastre del
30% (trartor de estera) y del 40% (trartor forestal tipo skidder).
2. Galrular la distanria mínima entre las rurvas de nivel (Anexo l).
3. Identifirar y marrar en el mapa las rurvas de nivel distanriadas en
intervalos iguales o menores que la distanria mínima.
4. Gontornear las áreas marradas utilieando lapirero, identifirándolas
ron rolores o patrones diferentes del resto del área.
5. keguir los pasos l al 4 para definir áreas de preservarión permanen–
te donde el derlive es arentuado (superior a 30 grados).
Áreas de explo5asión
Los bosques restantes de la propiedad ron una buena reserva de ma–
dera forman las áreas explotables (Figura l). La estimarión del volu–
men de madera de estas áreas, es realieada por medio de la medirión
en el mapa del área explotable del bosque (Anexo 2) y después se
multiplira este valor por el volumen por hertárea obtenido en el inven–
tario muestral.
ll8
Figura l. PLANIFIGAGIÓN DE LAk VÍAk

Mapa de la
ubirarión de El transporte de madera es realieado por una red de vías prinripales
las áreas (en general más anrhas y ron mejor arabado), ronertando el área de
protegidas. explotarión a las veredas y riudades, donde están ubiradas las indus–
trias y vías serundarias, que ronertan las áreas de explotarión a las
vías primarias.
Este Manual tratará apenas de la planifirarión de las vías serundarias,
asumiendo que ya existe una red de vías prinripales en la propiedad.
Las vías deben ser permanentes y, por tanto, utilieables en la primera
y demás explotariones.
Para la planifirarión de las vías serundarias se define, inirialmente,
una ruta en el mapa. Para eso, se ronsideran las rararterístiras topo–
gráfiras, infraestrurtura de la propiedad y volumen de madera disponi–
ble por hertárea. Las vías serundarias deben ser rertas, paralelas y
ubiradas en sentido este – oeste (la línea que el sol rerorre), para fari–
litar el serado posterior a las lluvias (Figura 2).
A rontinuarión, se delimita y se ajusta la vía de aruerdo ron las rondi–
riones esperífiras del bosque (ver rapítulo 5).
9
Planifisasión de las vías en áreas planas Figura 2.

Para proyertar una red de vías en áreas planas se debe: Vía serun–
l. Estimar la distanria óptima entre las vías (DOV). De esta manera, daria en
los rostos para la apertura de vías y arrastre de troeas son reduri– sentido
dos. El rálrulo de la DOV está demostrado en el Anexo 3. este–oeste.
2. Iniriar la planifirarión en las áreas de forma regular (Figura 3a).
3. Galrular el nnmero de vías neresarias dividiendo el anrho del área
por la DOV. Por ejemplo, si el anrho del área rentral del mapa mide
2.000 metros y la DOV 400 metros, serían neresarios ronstruir rinro
vías (Figura 3a).
4. Dibujar las vías en el mapa a partir de la vía prinripal, iniriándose
por una de las laterales del área (Figura 3b). La distanria de la vía
hasta la lateral y el fondo del área debe ser igual a la mitad de la
DOV (por ejemplo, 200 metros para la DOV de 400 metros) (Figura
3b). Las vías restantes deben ser planeadas manteniéndose la mis–
ma distanria entre si (Figura 3b).
5. Traear la ramifirarión de las vías para tener arreso a los trerhos
irregulares del bosque. La distanria entre las ramifirariones (vías
terriarias) es similar a la DOV. Por ejemplo, serían neresarias varias
vías partiendo de la vía l (Figura 3s) para dar arreso a los trerhos
de bosque entrerortados por áreas de preservarión permanente.
22OO Bosque para Siempre
Figura 3. Planifirarión de las vías en áreas planas.
Inirio de la
planifirarión
en área más
regular.
Diseño de las
primeras vías
serundarias.
Diseño de las
ramifirariones
de las vías
serundarias.
Plan de Mane¡o Vorestal 2
2ll
Ajus5e en la es5imasión de la DOV

La división del anrho del área por la DOV no siempre resulta ser un
nnmero entero. ke reromienda, por tanto, utiliear romo nnmero de
vías el nnmero entero más próximo. Por ejemplo, utiliear 5 si el
resultado es 5,4 ó 6 si el resultado es 5,6. De esta manera, se
obtiene una distanria final dividiendo el anrho del área por el nnme–
ro entero (DOV) aproximado. Por ejemplo, un área ron 2.l60 metros
de anrho y DOV de 400 metros debe tener 5 vías distanriadas rerra
de 430 metros una de la otra (2l60 metros/5 vías = 432 metros).
Planifisasión de las vías en áreas assiden5adas

En terrenos arridentados se debe definir una ruta para la vía serunda–
ria que no exreda la inrlinarión del 2% en las rurvas y 6 a 8% en las
rertas. El objetivo es disminuir el largo de la vía respetando la inrlina–
rión máxima y hariendo menor la neresidad de remorión de tierra (por
ejemplo, exravarión para redurir la inrlinarión del terreno).
Utiliear el método de la “distanria mínima“ para traear las vías en las
áreas arridentadas. La DOV utilieada para las áreas planas también
debe ser utilieada para orientar la distanria entre una vía y otra. Para
aplirar este método es neresario:
l. Galrular la distanria mínima entre una rurva de nivel y otra de aruerdo
ron la fórmula presentada en el Anexo l. Por ejemplo, para mante–
ner una inrlinarión máxima del 2%, la distanria entre una rurva de
nivel y otra debe ser por lo menos l,5 rm (Figura 4).
2. Utiliear un rompás para fijar la distanria deseable entre las rurvas
de nivel y, en seguida, traear la línea de la vía (Figura 4).
a. Puntos a ser ronertados en b. Gonexión de los puntos, respe–
terreno arridentado. tando la inrlinarión máxima.
B
Figura 4.
Uso de la
“distanria
mínima“ para
definir la ruta
A de la vía en
Gurva Rotarión que liga los puntos ron base el mapa
de nivel en la distanria mínima topográfiro.
ORDENAMIENTO DE LA EXPLOTAGIÓN
Para ordenar el área que será explotada anualmente, se divide el bos–
que en rodales de aruerdo ron las demandas del propietario y las ra–
rarterístiras del bosque. Lo ideal es que el nnmero de rodales del área
sea igual al rirlo de rorte (tiempo neresario para que el área explotada
esté lista para un nuevo rorte). En seguida, se define el orden de ex–
plotarión de los rodales a lo largo del tiempo.
División del bosque en rodales

ke define la forma y el tamaño preliminar de los rodales ron base en el
plan de vías, observando las siguientes reromendariones:
l. Para farilitar la ejerurión del plan de manejo, el largo y el anrho de
los rodales no debe sobrepasar l.000 metros (el área máxima de los
rodales ideal es de l00 hertáreas).
2. Dibujar el rodal de manera que una vía serundaria pase por el me–
dio, respetando la DOV (Figura †). Esto farilitará posibles rambios
en el tamaño de los rodales.
3. Iniriar la división por los rodales regulares (ruadrado o rertangular),
ronsiderando que son más fáriles de ser marrados en rampo. Los
bordes de estos rodales serán utilieados para orientar el resto de los
rodales irregulares, delimitados posteriormente.
Figura 5.
División del
bosque en
rodales para
explotarión
anual.
Definir el orden de la explo5asión

El orden de la explotarión debe garantiear que los rodales verinos sean
explotados de manera alternada a lo largo del tiempo. Al dejar un rodal
intarto al lado de uno explotado, se redure el imparto de la explota–
rión sobre la fauna y, al mismo tiempo, aumenta la proterrión del bos–
que rontra el fuego. kumado a esto, la explotarión interralada de los
rodales tiene la ventaja adirional de mantener el rosto de transporte en
el mismo nivel a lo largo del tiempo.
Los pasos para definir el orden de la explotarión son los siguientes:
l. Enumerar los rodales siguiendo el eje de las vías (Figura 6).
2. Estimar el tamaño de rada rodal.
3. Definir el orden de explotarión de los rodales, marrando en el mapa
aquellos que no son verinos (Figura 6). No obstante, debido a la
irregularidad de algunos rodales se puede marrar rodales ron verin–
dad parrial (por ejemplo, los rodales 6 y l¡ Figura 6).
4. Definir los rodales que serán explotados rada año, sumando el área
de los rodales no verinos en una misma vía, hasta totaliear un área
de explotarión anual. ki el nnmero de rodales es insufiriente, se
pueden inrluir los rodales de la vía más próxima.
5. Organiear la seruenria de la explotarión de los rodales en una tabla
para farilitar el plan operarional (Tabla 2).
Figura 6.
Ordenamiento
de los tablo–
nes para la
explotarión
anual.
Nnmero de Año de Area del Area de explo-

rodal explo5asión rodal (ha) 5asión anual (ha)
l l 50
3 l 72 247
5 l 40
7 l 85
6 2 46
ll 2 57
25l
2 2 66
4 2 76
Tabla 2. 6 3 70
Ejemplo de 8 3 42
seruenria de 236
l0 3 58
explotarión l2 3 66
de los rodales.
La ordenarión de la explotarión está sujeta a adaptariones futuras. Por

ejemplo, en los años en que la demanda es menor será neresario redu–
rir el nnmero de rodales explotados. kin embargo, si existe una mayor
demanda por madera, se puede aumentar el nnmero de rodales a ser
explotados.
DEFINIR LA DEMANDA ANUAL

PARA LA EXPLOTAGIÓN
Explo5asión anual son5inua y similar
Orurre ruando un propietario forestal tiene romo meta explotar anual–
mente un área de tamaño similar. En este raso, él divide el área explo–
table por rirlo de tala. Para los bosques densos de tierra firme en la
Amaeonía Oriental, bajo el régimen de manejo, los investigadores del
IMAZON estiman un rirlo de tala alrededor de 30 años. Gonsiderando
el área de manejo de 6.000 hertáreas, el propietario podría explotar
alrededor de 200 hertáreas por año (6.000 hertáreas/30 años).
Explo5asión basada en el sonsumo de madera de la

indus5ria
El área de manejo debe atender al ronsumo de la empresa. De esta
manera, se divide el ronsumo anual de troeas de la industria por el
volumen promedio de madera romerrial del bosque. Por ejemplo, para
un ronsumo anual de 6.000 m3 de madera de valor romerrial por her–

tárea sería neresario explotar alrededor de 300 hertáreas anualmente
(6.000 m3/30 m3 por ha). Así, un bosque de 6.000 hertáreas sería ex–
plotado en apenas 20 años.
El área de los rodales debe ser aproximadamente l0% mayor que el
área de explotarión. Ese “exredente“ sirve romo refugio para la fauna.
Por tanto, en el ejemplo anterior, en vee de 300 hertáreas por año,
serían neresarias 330 hertáreas de bosque.
Zonas de refugios
Aparte de las áreas de preservarión permanente, se reromienda la
rrearión de refugios dentro de los rodales de explotarión anual. El
objetivo es redurir los impartos de la explotarión sobre la fauna
(esperialmente los grandes mamíferos). Adirionalmente, estos re–
fugios pueden ronservar árboles y semillas, rontribuyendo para la
regenerarión natural del bosque. Por lo general, se reromienda que
los refugios tengan un área equivalente entre el 5 y l0% del rodal y
que estén ubirados a lo largo de la variarión topográfira, para que
rontengan los diversos ambientes del área. El refugio debe ser indi–
rado en el mapa del plan de manejo antes de la delimitarión del
rodal. En seguida, se debe delimitar en el bosque para evitar que
esta área sea arridentalmente explotada.
GONGLUkIÓN
El plan de manejo define la forma rómo un bosque será explotado,
lo que inrluye la eonifirarión de la propiedad diferenriando las áreas
de explotarión, las eonas de preservarión permanente y los trerhos
inarresibles. Posteriormente, se planea la ruta de las vías serunda–
rias y se divide el área total de manejo en los rodales de explota–
rión anual. Por nltimo, se define la seruenria de explotarión del
rodal a lo largo del tiempo. Esta medida tiene romo fin redurir los
impartos de la explotarión maderera sobre la fauna y aumentar la
proterrión del bosque rontra el fuego.
ANEXO l
Gómo u5iliear los mapas 5opográfisos
Los mapas topográfiros representan la inrlinarión del terreno a través
de rurvas de nivel (Figura l). El intervalo de altitud entre las rurvas es
esperífiro para rada mapa.
I– Intervalo de al–
titud entre las
rurvas de nivel
D– Distanria entre
las rurvas de ni–
vel
Figura l.
Mapa topográfiro y
I las rurvas de nivel
D
Para ubirar las áreas ron inrlinarión arentuada, se ralrula la distanria
mínima entre las rurvas de nivel. La distanria mínima es dada por:
DM= (l00 x i)/(max x E)
Donde:
Max = inrlinarión máxima en %
i = intervalo de altitud entre las rurvas de nivel (metros)
E = esrala del mapa
ke presenta un ejemplo de rálrulo utilieando los siguientes datos: max

= 40% (inrlinarión máxima para extrarrión ron skidder), I = 50 m (para
rada mapa) y E= l:l00.000.
DM = (l00 x 50)/(40 x l00.000)=0,00l2 metros o 0,l2 rentímetros
En el mapa, la distanria de 0,l2 rm entre una rurva y otra indira una
inrlinarión del 40% en el terreno. En este raso, las rurvas iguales o
menores que 0,l2 rm rorresponden a áreas inarresibles para la explo–
tarión.
ANEXO 2
Medisión de áreas u5ilieando red de pun5os
Utiliear una red de puntos para estimar el área de figuras ron forma
irregular. Una red de puntos es una hoja transparente ruadrirulada,
ronteniendo puntos ron la misma distanria. La red de puntos puede ser
elaborada en romputadores utilieando programas gráfiros.
¿Gómo es5imar el área?

• Goloque una hoja sobre el área del mapa a ser medida.
• Guente los puntos que están dentro del área para medirla. Los pun–
tos que están sobre la línea de borde equivalen a medio punto.
• Multiplique el área que rada punto representa por el nnmero de
puntos enrontrados en el área medida.
¿Gómo saber el área que sada pun5o represen5a?

• Determine la esrala del mapa, por ejemplo, l rm en el mapa = l00
metros en el rampo.
• Determine el área orupada por l rm2, por ejemplo, l00 metros x
l00 metros = l0.000 m2 ó l hertárea.
• Guente los puntos existentes en l rm 2 de la hoja ruadrirulada,
por ejemplo 4.
• Divida l rm2 por el nnmero de puntos, entonres si 4 puntos repre–
sentan l ha, un punto es igual a 0,25 ha.
De esta manera, un área ron 230 puntos mediría 57,5 ha (230 x 0,25).
ANEXO 3
Es5imasión de la Dis5ansia Óp5ima en5re Vías (DOV)
La distanria óptima entre vías (DOV) en áreas planas es ralrulada ron–
siderando los rostos de arrastre, de apertura de vías, patios y otras
variables de aruerdo ron las fórmulas publiradas por la kUDAM, l677.
DOV (metro) = l0.000 /D

Donde:
D (densidad óptima de vías – metro por hertárea) = 50 (Gx Fp x Fe x V/Ge)
Donde:
G= (r x t x l000)/Vv
Donde:
G = Gosto de operarión de equipo de arrastre en Uk$/minuto (inrluye
el rosto del operador y de la máquina).
T = Tiempo promedio de desplaeamiento del trartor, en la distanria
de l metro, ron y sin rarga, expreso en minuto/metro.
Vv = Volumen promedio trarrionado en rada viaje de arrastre, en m3.
Fp = Fartor de rorrerrión para la extrarrión ruando los árboles son trar–
rionados para los patios (raso de este manual), en lugar de ser
trarrionados del lugar de raída para el punto más rerrano de la
vía. Este fartor generalmente es estimado entre l,2 a l,5. Entre
mayor sea la distanria entre patios, mayor será el fartor.
Fe = Fartor de rorrerrión ruando las vías son tortuosas, no paralelas, y
ron esparios desiguales entre si. Varía de l a 2, siendo para el
raso de vías paralelas l.
Ge = Gosto de ronstrurrión de vía en Uk$ por km.
Para ejemplifirar el rálrulo de la DOV se utiliean los datos de la Tabla l.

Tabla l. Variables utilieadas en la estimarión de la Distanria óptima entre

vías (DOV) de aruerdo ron los datos obtenidos en el “Proyerto Piloto de
Manejo Forestal“, Paragominas, Pará.
Variables Valores (Uk$)
G (Uk$/minuto) 0,74
T (minuto/metro) 0,0252
Vv (m3) 5,46
Fp l,36
Fe l,0
Ge (Uk$/km) 347,4
Estos datos son utilieados para ralrular la DOV. La Tabla 2 muestra la

variarión del volumen explotable por unidad de área, así romo la va–
riarión de rostos de apertura de vías. Adirionalmente, muestra que un
aumento del volumen explotable disminuye la distanria entre vías.
Tabla 2. Distanria óptima entre vías (DOV) de aruerdo ron la variarión en

el volumen explotable para dos niveles de rostos de apertura de vías.
Dis5ansia óp5ima en5re vías (en me5ros)
Volumen explotable Gaso básiro (m) Gosto de apertura de vías
(m3/ha) 20% más rostoso3 (Uk$)
20 383 4l6
24 346 383
28 323 354
30 3l2 342
34 263 32l
38 278 304
40 27l 266
3
Gonsiderando un aumento del 20% en el rosto de vía presentado en la Tabla l.
3O
3O Bosque para Siempre
3l
3l
Gapí5ulo
2
€enso 1orestal
€enso Vorestal 3333
PREkENTAGIÓN
El renso forestal es un inventario de todos los árboles de valor romer–
rial existentes en un área de explotarión anual. Las artividades de un
renso son realieadas uno o dos años antes de la explotarión, involu–
rrando la delimitarión de los rodales, apertura de las trorhas de orien–
tarión, la identifirarión, la ubirarión y evaluarión de los árboles de
valor romerrial. También otros datos, romo la presenria de quebradas,
áreas ron gran rantidad de lianas y variariones topográfiras, ntiles al
plan de explotarión y a las prártiras silvirulturales, son verifirados du–
rante el renso forestal.
PREPARAGIÓN DEL AREA

Demarsasión del rodal
En el plan operarional, el área total a ser manejada, es dividida en
rodales (Figura l). En general, la delimitarión de los rodales en el bos–
que es realieada por un equipo de ruatro personas, un orientador, res–
ponsable por el alineamiento de la demarrarión, un balieador, ruya
funrión es orientar la apertura de las trorhas y fijar las balieas a lo largo
del perímetro de los rodales, y dos ayudantes que haren la apertura de
las trorhas. Para la delimitarión del rodal se debe:
4 ll l8 25
7 l4 2l 28
3 l0 l7 24
Rodal 6 l3 20 27
(50 ha)
2 6 l6 23
5 l2 l6 26
500 m
l 8 l5 22
l.000 m
Figura l. División del área de manejo en rodales interralados.
• Ubicar La cabecera (Línea base) ç Las LateraLes deL rodaL: ke utiliea algnn
marro referenrial romo una vía, río o límite de propiedad. Para mayor pre–
risión utiliear brnjula ron trípode en la definirión de las líneas base y latera–
les. Las trorhas deben ser abiertas ron aproximadamente l,5 metros de
anrho alrededor de los límites del rodal (Figura 2).
Figura 2.
Demarrarión
de los rodales.
• EnstaLar baLizas (jaLo-

nes) de madera en La ca-
becera deL rodaL: La dis–
tanria ideal entre una ba–
liea y otra es de 50 metros. La primera baliea debe estar en el marro rero,
la segunda, a 50 metros y así, suresivamente. Las distanrias pueden ser
marradas ron bolígrafo de tinta a prueba de agua en rintas de plástiro
amarradas a la baliea. Es importante mantener el registro de la posirión de
la baliea ron la rara haria la línea base, a fin de farilitar la visualiearión del
equipo de planifirarión.
Adirionalmente, se deben fijar marros referenriales en rada uno de los
ruatro bordes del rodal ron estaras de madera resistente.
Aper5ura de las 5roshas de orien5asión

Un equipo de tres personas (orientador, balieador y ayudante) abre las
trorhas dentro de los rodales de la siguiente manera:
l. Abrir trorhas a rada 50 metros en líneas perpendirulares a la rabe–
rera del rodal. La trorha debe tener un anrho de aproximadamente
0,5 metros.
2. Golorar balieas ron rintas roloridas a lo largo de la trorha a distan–
rias regulares (en general, 25 metros). De esta manera, la primera
baliea debe ser fijada en el marro 0 (rero) metro, la segunda en 25
metros y así, suresivamente (Figura 3).
3. Al final de la trorha, el equipo se debe moviliear lateralmente 50

metros hasta la próxima baliea, de donde se debe abrir una nueva
trorha en direrrión a la raberera. La numerarión debe, por tanto,
ser realieada inversamente. Por ejemplo, en un trorha de l.000 me–
tros, la primera baliea sería fijada en l.000 metros, la segunda en
675 metros y así, suresivamente, hasta volver al punto 0 (rero)
metro en la raberera del rodal.
GENkO
El renso ronsiste en la ubirarión, identifirarión y evaluarión de los Figura 3.
árboles de valor romerrial, árboles matrires (importantes para la rege– Apertura de
nerarión del bosque) y árboles ron potenrial para talas futuras. Los las trorhas.
datos son anotados en una hoja de rampo y utilieados en la elaborarión
del mapa del renso. Posteriormente, estos datos serán utilieados para
la planifirarión de la infraestrurtura de la explotarión.
No hay un modelo nniro para la hoja del renso. El modelo adoptado en
este manual rontiene datos romo nnmero de árbol, roordenadas X¥
(para la ubirarión del árbol), nombre de los árboles (identifirarión), diá–
metro a la altura del perho (DAP), altura, ralidad del tronro, ralidad de
la ropa, direrrión de raída (evaluarión) y observariones, tal romo pre–
senria de lianas.
El renso es realieado por un equipo formado por dos ayudantes (latera–
les), un identifirador (baquiano) y un anotador. Los dos laterales bus–
ran los árboles a ser mapifirados a lo largo de las trorhas, siendo rada
uno responsable por una faja de 25 metros, mientras que el identifira–
dor (baquiano) y el anotador se mueven en el medio de la faja. Los

laterales también identifiran, evalnan y ubiran los árboles del rodal. El
equipo busra los árboles hasta el final de la trorha, regresando en sen–
tido rontrario, en la faja siguiente (Figura 4).
ETAPAk DEL GENkO

Figura 4. Iden5ifisasión de los árboles
Equipo del La identifirarión de los árboles de valor romerrial debe ser realieada
renso por baquianos experimentados. Guando existe más de un baquiano in–
volurrado en la identifirarión, se rertifira que ellos ronoren las espe–
ries por el mismo nombre. Guando sea posible, esperialmente en la
ofirina, se asoriará el nombre vulgar ron el nombre rientífiro. Una aten–
rión esperial se debe dar para la denominarión romnn (vulgar) de las
esperies, pues esperies diferentes pueden tener un mismo nombre
romnn, mientras que una nnira esperie puede tener nombres romunes
diferentes en diversas regiones. En raso de duda, busrar el herbario de
las instituriones romo el Museo Coeldi (Belém), EMBRAPA/GPATU
(Belém) e INPA (Manaus).
¿Guáles espesies insluir en el GENkO?

Aproximadamente, 350 esperies maderables son explotadas en la
Amaeonía. kin embargo, en las áreas de produrrión maderera más
alejadas, el nnmero de esperies eronómiramente viables puede ser

menor. Por ejemplo, en la Región Oeste del Pará, el nnmero de
esperies explotadas (en l666) era inferior a 50. En este raso, se
debe inrluir en el renso las esperies sin valor artual para aquella
región esperífira? La derisión depende de las perspertivas del rre–
rimiento del sertor maderero loral y de la ampliarión del merrado
de maderas. Al ronsiderar que el listado de esperies de maderas
eronómiramente viables ha aumentado en las dos nltimas déradas,
es oportuno inrluir las esperies de valor potenrial (Apéndire l). Eso
ayudaría a planear el manejo forestal a largo plaeo y evitaría la
neresidad de repetir el renso de los árboles ruando tales esperies
entren en el merrado.
Medisión de árboles
ke mide la rirrunferenria o diámetro del árbol para estimar el volumen
de madera y farilitar la selerrión de los árboles a explotar. La medirión
de la rirrunferenria puede ser realieada ron una rinta métrira, mientras
que para la medirión del diámetro puede ser utilieada una rinta diamé–
trira o una forrípula (Figura †).
La medirión del diámetro del árbol debe ser realieada a una altura de
l,30 metros del suelo o alrededor de la altura del perho del medidor
(DAP). Es aronsejable medir los árboles 30 rms. por enrima del DAP
(alrededor de 65 rms. de rirrunferenria). Los árboles mayores (DAP arri– Figura 5.
ba de 45 rms.) son explotados, mientras que los árboles menores (DAP 30 Medirión del
a 45 rms.) deben ser reservados para el próximo rorte o extrarrión. diámetro.
a. Medirión a altura del perho b. Medirión arriba de las raíres tubulares

Ceneralmente, todos los árboles de valor romerrial superior a 45 rm de

DAP son explotables en la primera tala. kin embargo, para algunas
esperies, el DAP mínimo de rorte puede ser mayor. Por ejemplo, los
árboles de “Jabotá“ (Hymenaea sourbaril) y el “quaruba“ (Voshysia
sp.) tienen una albura arentuada (parte blanra de la madera sin valor),
lo que requiere que esas esperies sean rortadas ron DAP mayor (supe–
rior a 60 rm).
Para la medirión del diámetro se debe tomar algunos ruidados:
• Medir apenas el diámetro de los árboles. No inrluir tablones, lianas,
rasas de termitas, etrétera. ki el árbol presenta uno de estos pro–
blemas en el punto de medirión, limpiar el área o medir 30 rm por
enrima de este punto (Figura †b).
• Mantener la herramienta de medirión en la posirión horieontal en
relarión al suelo.
• En el raso de la medirión de tronros irregulares, usar preferenrial–
mente rinta métrira o diamétrira. En el raso de utiliear la forrípula,
harer dos mediriones y tomar el promedio.
Numerasión de los árboles en el sampo

Gada árbol debe rorresponder a un nnmero que lo identifirará. Los
árboles selerrionados para la tala artual pueden ser diferenriados de
Figura 6. los árboles para la próxima tala a través de una letra antes del nnmero.
Plaqueta de
aluminio en Por ejemplo:
árboles A + Número Árboles potenriales para extrarrión (DAP> 45 rm).
B + Número Árboles para tala futura (DAP entre 30 y 45 rm).
Los nnmeros deben ser impresos, pre–

feriblemente, en plaquetas de alumi–
nio (Figura 6). Las plaquetas deben
ser fijadas en una altura promedia de
l,7 metros en la rorteea del árbol ron
puntillas romunes pequeñas (3/4 de
pulgadas) o de aluminio para no da–
ñar el tronro. Otra oprión es utiliear
el rurhillo del árbol de raurho, para
realiear el rorte superfirial en la ror–
teea de los árboles y un lápie de rera
esperial para esrribir sobre la made–
ra. En los dos rasos, la marrarión
debe ser realieada en la rara del árbol que se enruentra haria la línea
base del rodal, para farilitar la visualiearión.
Mapifisasión de los árboles

Es romnn anotar la posirión de rada árbol, en un sistema de roordena–
das X y ¥, en la hoja de rampo. En este raso, “X“ es la distanria del
árbol para la trorha verina y “¥“ es la distanria entre el árbol y la línea
base más rerrana (Figura 7). Estos valores son dados por los ayudan–
tes (laterales), que estiman los nnmeros ron base en las distanrias
anotadas en las balieas de las trorhas.
Figura 7.
Posirionamiento para
Figura 8.
la obtenrión de las
Estimando la
roordenadas X y ¥.
altura del
tronro.
Para farilitar la ubirarión de las roorde–
nadas, anotar en la hoja de rampo la
faja donde se enruentra el árbol inven–
tariado. La numerarión de las fajas pue–
de ser la siguiente: la “faja l“ sería el
área ubirada en la raberera del rodal
entre las balieas y 50 metros, la “faja
2“ entre los puntos 50 y l00 metros y
así, suresivamente.
Aunque sea menos prerisa, otra mane–
ra para la mapifirarión de los árboles
es indirar su posirión ron un símbolo
(por ejemplo, un punto) dirertamente en
el mapa del renso.
Es5imasión de la al5ura somersial

La estimarión de la altura del tronro, que rorresponde al punto de rorte
en la base del árbol, hasta la primera bifurrarión de sus ramas, gene–
ralmente es realieada a ojo (sin ningnn tipo de instrumento).
kin embargo, para redurir el margen de error, se puede estimar la altu–
ra del tronro a través de la “prueba de la vara“. Gada miembro del
equipo hare una prueba utilieando una vara de altura ronorida (por
ejemplo, 3 metros). El medidor, a una distanria de 5 a l0 metros del
árbol, estima ruantas veres el tronro es mayor que la vara (Figura 8).
La prueba debe ser repetida hasta que el equipo pueda obtener una
estimarión ronfiable de la altura del tronro, a ojo.
Bueno Regular Inferior
Figura 9. Evaluasión de la salidad del 5ronso

Glasifirarión Los tronros varían en términos de ralidad romerrial. Los tronros rer–
del tronro tos, rilíndriros y sin hueros son rlasifirados romo “buenos“ para uso
en términos maderero. Los tronros hueros son rlasifirados romo “regulares“ (Figu-
de ralidad. ra 9). Los tronros tortuosos y ron presenria de hueros poseen ralidad
inferior.
La Tabla l presenta una relarión entre la ralidad del tronro y la propor–
rión de aproverhamiento de su volumen. El fartor indirado en esta
tabla es multiplirado por el volumen total para enrontrar el volumen
aproverhable.
€enso Vorestal 4
4ll
GALIDAD APROVEGHA- FAGTOR DE Tabla l.

DEL TRONGO MIENTO (%) APROVEGHAMIENTO Galidad del
BUENO 80 – l00 0,6 tronro y el
RECULAR 50 – 76 0,7 porrentaje de
aproverha–
INFERIOR < 50 0,3
miento de su
volumen.
De5essión de la presensia del hueso
Hay varias maneras para deter–
tar si un árbol está huero. Por
ejemplo, poner el oído en el tron–
ro y pegarle ron un martillo. ki
el sonido emitido hare un ero,
el árbol estará probablemente
huero.
Existen síntomas que sugieren la
presenria de hueros en los árbo–
les, romo rasas de termitas, pre–
senria de serreriones osruras a
lo largo del tronro y ramas que–
bradas.
Los árboles ron tronros rlasifi–
rados romo “sin valor romerrial“
deberán ser preservados, pues
son importantes romo produrto–
res de semillas, fuente de alimen–
tos y refugio para animales.
Evaluasión de la dires-
sión de la saída de los ár-
boles
La direrrión de la raída de un ár–
bol depende de la inrlinarión na–
tural de su tronro y de la distri– Figura lO.
burión de su ropa (Figura lO). Evaluarión de la direrrión de la raída del árbol
Tendensia de saída de los árboles

AMPLIA: Tronro rerto y ropa bien distribuida. Puede ser tum–
bada en rualquier direrrión. Ángulo de raída de
360 grados.
INTERMEDIA: Tronro rerto, ropa haria un lado. Ángulos de raída
entre 60 y l80 grados.
LIMITADA: Tronro inrlinado, ropa desigual y arentuada. Án–
gulo de raída inferior a 60 grados.
Amplia In5ermedia Limi5ada
Figura ll.
Evaluarión de kelessión de los árboles ma5rises
la tendenria En primer lugar, se evalna la ralidad de la ropa de los árboles para la
natural de
selerrión de árboles matrires. Los árboles ron ropas sanas tienden a
raída de los
árboles. ser mejores produrtores de semillas, siendo preferibles romo árboles
(Obs.: Los matrires.
símbolos indi– Las rararterístiras de rada esperie también influyen en la selerrión de
ran romo estos árboles. Para las esperies tolerantes a la lue, ruya regenerarión
anotar la ten– adulta vive poros años bajo la sombra (sotobosque), los árboles matri–
denria que res son esenriales. Entre ellos están el “mogno“ (twietenia masrophy-
queda en la lla), “andiroba“ (Garapa guianensis), “redro“ (Gedrela odorata), “favei–
firha de ra“ (Panopsis sp.) y “pará – pará“ (Jasaranda sopaia).
rampo). Para rada esperie, se selerrionan de tres a rinro árboles romo matri–
res por hertárea (inrluyendo árboles ron DAP superior a 30 rm). Guan–
do no es posible selerrionar árboles matrires en nnmero sufiriente (por
ejemplo, ruando la reserva de árboles adultas es muy baja), se debe
plantar individuos de estas esperies en rlaros posteriormente a la ex–
plotarión (Gapítulo lO).
Los árboles matrires deben ser esrogidos próximos a áreas donde se–
rán abiertos rlaros grandes, aumentando, de esta manera, las posibili–
dades de roloniearión por sus plántulas (hijos). La apertura de rlaros

grandes tiende a orurrir en áreas donde están agrupados murhos árbo–
les explotables. Para ser protegidos, los árboles matrires son indirados
en el mapa del renso y demarrados durante el plan de explotarión.
Evaluasión de la salidad de la sopa

BUENA: Gopa entera y bien distribuida alrededor del eje rentral
del árbol.
RECULAR: Gopa ron algunas ramas quebradas.
Figura l2.
INFERIOR: Gopa inrompleta, más de la mitad de las ramas que– Glasifirarión
bradas. de la ropa.
B u en a R e g ul a r In fe r i o r
Evaluasión de la iluminasión de los árboles para la

segunda 5ala
Es posible aumentar el rrerimiento de los árboles de valor eronómiro
para la segunda tala (DAP de 30 a 45 rm) eliminando los árboles sin
valor que están rompitiendo por lue y nutrientes ron las de valor ro–
merrial (Gapítulo lO). ke hare una evaluarión de la iluminarión de la
ropa de los árboles (Figura l3) para saber ruales de ellos serán benefi–
riados ron este tratamiento.
l. Iluminasión 5o5al 2. Iluminasión parsial 3. kombra
Figura l3. Garas5erís5isas del rodal

Glases de ilu– Un bosque rontiene poblariones de varias edades o etapas de desarro–
minarión de llo, inrluyendo rlaros donde predominan plántulas y árboles jóvenes
la ropa. (DAP menos que 5 rm), poblarión juvenil (árboles ron DAP entre 5 y l5
rm), juvenil – intermedia (DAP entre l5 y 25 rm), intermedia (DAP
entre 25 y 45 rm) y, finalmente, poblarión madura (DAP mayor que 45
rm). ke puede mapifirar la ubirarión de estas poblariones, empleando
una hoja de papel ruadrirulado ron los límites del rodal. Para farilitar el
manejo, adoptar la esrala de l:5.000 (l rm representa 50 metros).
El anotador dibuja en el mapa el área de rada tipo de poblarión durante
el renso. Es importante definir el área mínima de rada poblarión a ser
mapifirada. ke reromienda anotar apenas áreas de poblariones ron
tamaño superior a 250 m2.
Ano5asión de observasiones
ke anota en un mapa pequeño, los datos del rodal, sobre parrhes arri–
dentados, trorhas y vías antiguas y áreas ron gran rantidad de lianas.
Esta informarión es ntil para definir donde aplirar los diferentes trata–
mientos silvirulturales (Gapítulo lO).
PRODUGTOk DEL GENkO FOREkTAL

Mapa del senso
La informarión rontenida en la hoja de rampo (Figura l4) es la base
para la elaborarión del mapa del renso (Figura l†). Este mapa será
utilieado para ubirar los árboles a ser extraídos, árboles remanentes
(explotarión futura), árboles matrires y topografía del terreno.
Rodal: Año de implan5asión: Fesha: Página:

No. del Goord. Goord. Nombresomnn DAP Al5ura Galidad Galidad Ilumi- Diressión
Faja Árbol X Y del Árbol (sm) Gom.(m) Tronso Gopa nasión Gaída
Obs.
3 36 ll6 l67 Faveira 87,3 ll,0 2 l 3

3 37 l22 232 Jatobá 8l,0 l5,0 l 2 l
3 38 l2l 246 Gedro 6l,5 l2,0 l l l
3 36 l35 338 Gopaíba 76,8 6,0 3 2 3
3 40 l32 385 Angelim Pedra 86,5 ll,5 l 3 l
3 4l l8l 324 kumanna 65,3 l5,0 l l 2
4 42 l67 262 Maçaramduba 86,6 l4,0 2 l 2
4 43 l62 264 Morototó 68,4 8,5 l 2 l
4 44 l6l 246 Gopaíba 6l,3 7,0 l l l
4 45 l62 230 Andiroba 57,5 l2,0 l l 2
4 46 l55 225 Tauarí 56,2 l0,0 l l l
4 47 l78 l64 Breu manga 58,4 l2,5 l l l
4 48 l85 l38 Piquiarana 62,5 6,0 3 l 3
4 46 l64 8l Ipê Roxo 60,7 l4,0 l l l
4 50 l76 ll Maparajuba 85,6 l2,0 l l l
4 5l l76 7 kumanma 75,8 l,5 l l l
4 52 l56 55 Breu Manga 68,7 l5,0 2 l 2
Angelim
4 53 236 ll6 Vermelho 63,l l4,0 l 2 3
4 54 24l l23 kapuraia 60,5 l0,0 l l 3
4 55 202 l4l Freijó 74,0 l3,0 2 3 2
Galidad del tronro e iluminarión de la ropa: l – Bueno, 2 – Regular, 3 – Inferior.Figura l4.
Ejemplo de
E5apas de preparasión del mapa una hoja de
l. Definir la esrala del mapa. Para farilitar su manejo, el mapa debe rampo dili–
tener un tamaño máximo de lm2. Una esrala reromendable sería genriada.
l:l.000 (l rm representa l0 metros). De esta manera, un rodal de
l0 hertáreas (l.000 X l.000 metros) sería representado por un mapa
ron l metro de anrho por l metro de largo.
2. Traear las líneas prinripales del mapa: rabereras, laterales y tro–
rhas de orientarión.
3. Dibujar en el mapa del renso todos los árboles explotables, árboles
destinados a la próxima explotarión y árboles matrires ron base en
la roordenadas X y ¥.
4. Indirar en el mapa las vías serundarias y las áreas ron mayor ron–
rentrarión de lianas, así romo otros datos relevantes.
Figura l5.
Elaborarión
del mapa del
renso forestal.
Gálsulo del volumen somersial

El volumen total de madera existente en una determinada área (por
ejemplo, l hertárea) es el resultado de la suma del volumen de rada
uno de los árboles ubirados en aquella área.
Para ralrular el volumen de rada árbol se deben utiliear los datos sobre
la rirrunferenria a la altura del perho (GAP) o diámetro a la altura del
perho (DAP), altura romerrial y ralidad del tronro (volumen efertiva–
mente aproverhable de rada árbol) en las fórmulas:
Girrunferenria: V(m3) = GAP2x A x FA xF

l25.663,7
Diámetro: V(m3)= 0,00007854 x (DAP)2 x A x FA, donde

V = Volumen de madera romerrial expresado en metros rnbiros.

GAP = Girrunferenria a altura del perho expresado en rentímetros.
DAP = Diámetro a altura del perho expresado en rentímetros.
A = Altura romerrial en metros.
FA = Fartor de aproverhamiento relarionado a la proporrión apro–
verhable del tronro presentado en la Tabla l.
F = Fartor de forma referente a la roniridad de la troea, general–
mente igual a 0,7.
0,00007854 y l25663,7 = ronstantes
Para ralrular el volumen de un árbol ron l3 metros de altura romerrial,

74 rm de DAP y un fuste de ralidad buena (fartor 0,6¡ Tabla l), sería:
V = 0,00007854 x (74)2 x l3,0 x 0,6 = 3,5 m3 (fórmula del diámetro).
Para obtener el volumen total por hertárea es sólo repetir el rálrulo

para todos los árboles y después sumar. El rálrulo puede ser realieado
en una hoja elertrónira (por ejemplo, EXGEL O AGGEkk) o también
ron una senrilla ralruladora.
GONGLUkIÓN
El renso o inventario forestal l00%, es impresrindible para la ela–
borarión del plan operativo de manejo. Los datos rolertados en el
renso, tales romo la ubirarión y evaluarión de los árboles en tér–
minos madereros, indirarión esparial de las eonas ron gran ranti–
dad de lianas y de topografía desfavorable a la explotarión, permi–
ten ralrular el volumen a ser explotado y produrir un mapa final del
renso. Este mapa es la herramienta básira para orientar el rorte de
lianas, la planifirarión, la demarrarión y la ronstrurrión de vías y
patios de almarenamiento, el rorte de los árboles, el arrastre de las
troeas y los tratamientos silvirulturales posteriores a la explotarión.
ANEXO l
Equipos y ma5eriales u5ilieados en el senso
Brnjula
de mano
Gin5a mé5risa
Gasso Bo5as
pro5es5or
Desáme5ro
Forsípola
Brnjula
de 5rípode
Gin5a
plás5isa
para marsar
Plaque5a de aluminio
Gushillo de saushero para marsar
Lápie de
sarpin5ero
Marsador
Pun5illas
Mar5illo Mashe5e
ANEXO 2
kumario del Genso Fores5al
OBJETIVOk EQUIPO TAREAk MATERIAL/HERRAMIENTAk
Orientar apertura de Brnjula de trípode, botas,
l Orientador trorhas y harer ano– rasro, lápie, mapas del ro–
tariones. dal y del área
Medir perímetro de los
Demarrar rodales.
rodales Delimitar rodales ron Ginta métrira, rinta plásti–
l Balieador
balieas. ra, bolígrafo esperial, botas,
Anotar metraje en la rasro
rinta plástira.
Abrir trorhas en el bos–
2 Ayudantes Hoe, botas, rasro
que
Orientar apertura de las Brnjula de mano, rinta métri–
Abrir l Orientador trorhas. Anotar el metra– ra, bolígrafo esperial, rasro,
trorhas je en la rinta plástira. lápie, mapa del rodal
de orien– Abrir trorhas de orien–
tarión Marhete, rinta plástira rolo–
2 Ayudantes tarión. Golorar balieas
rida, botas, rasros
rada 25 metros.
Ubirar, identifirar y
nombrar los árboles
romerriales.
Ginta diamétrira, martillo,
Medir DAP.
l Baquiano puntillas, plaquetas de alumi–
Evaluar ralidad del
nio, botas, rasros, marhete
tronro y ropa.
Evaluar direrrión de
Mapifirar raída de los árboles.
y rararteri– Anotar datos en la hoja
ear los de rampo. Brnjula, tablero para anota–
árboles l Anotador Estimar la altura romer– rión, hoja de rampo, lapirero
rial. Ayudar en la eva– y borrador, botas, rasro
luarión de los árboles.
Enrontrar árboles ro–

merriales. Ginta diamétrira, botas, ras–
2 Ayudantes
Estimar la ubirarión ros, marhete
de los árboles.
5O
5l
5l
Gapí5ulo
3
€orte de Lianas
€orte de Lianas 5533
PREkENTAGIÓN
Las lianas son plantas enredaderas que se desarrollan sobre los tronros
y las ropas de otros árboles. Las lianas se presentan en todo el Bosque
Amaeóniro, siendo abundantes en los bosques de tierra firme de la
Amaeonía Oriental. Por ejemplo, en un área de bosque de 2l0 hertá–
reas, los investigadores del IMAZON identifiraron alrededor de 70 es–
peries, siendo las más freruentes la liana estrella (Memora sshombur-
gkii) y la liana roja (Gonnarus sp.). Las lianas tienen funriones erológi–
ras esenriales para el erosistema forestal romo el rirlo del agua y
nutrientes, fuente de alimento para diversas esperies de animales y
romo medio de transporte para los miros. Adirionalmente, algunas es–
peries de lianas produren frutos de valor medirinal.
kin embargo, estos bosques riros en lianas, ruando están sujetos a la
explotarión maderera no manejada, pueden sufrir daños elevados. Las
lianas difirultan las operariones de rorte y aumentan los riesgos de
arridentes durante la explotarión.
Las medidas para disminuir los problemas rausados por las lianas de–
ben ser selertivas (artuar solamente donde existe el problema), ron el
fin de prevenir o redurir los posibles impartos negativos de este ron–
trol, así romo disminuir los rostos de esta prártira. Es importante su–
brayar que las sugerenrias de manejo de lianas presentadas en este
rapítulo están sujetas a revisiones en la medida que nuevas informa–
riones sobre la erología y uso de las lianas sean produridas.
PROBLEMAk AkOGIADOk
A LA PREkENGIA DE LIANAk
Aumen5o de daños duran5e el sor5e de los árboles
Guando el árbol a ser extraído está interronertado ron otros árboles
verinos a través de las lianas (Figura la), el rorte de este árbol rausa
daños (quiebra de la ropa o ramas) o también la raída de los árboles
verinos (Figura lb).
Aumen5o de los riesgos de assiden5es

La presenria de lianas que unen las ropas de los árboles difirulta la
orientarión de la raída del árbol a ser extraído. De esta manera, la
posibilidad de este árbol raer en rualquier direrrión, arrastrando ronsi–
go los demás, aumenta las situariones de riesgos de arridentes para el
equipo de rorte (Figura 2).
Árbol a ser extraído
Figura la. Interronexión de los árboles por las lianas.
Árbol
extraído
Figura lb. Daños posteriores a la tala de un árbol ron lianas.
Figura 2.
Riesgos de
arridentes.
Deformasión del 5ronso

La presenria de lianas en un árbol puede orasionar la deformarión de
su tronro durante el rrerimiento, y redurir su valor romerrial.
Gompe5ensia por lue y nu5rien5es

Las lianas rompiten ron las esperies forestales de valor romerrial por
lue y nutrientes. Tal rompetenria redure las posibilidades de estableri–
miento y rrerimiento de murhas plántulas y árboles jóvenes de espe–
ries maderables.
BENEFIGIOk DEL GORTE DE LIANAk

El rorte de lianas es una forma de disminuir los problemas relarionados
ron la explotarión maderera. Las lianas deben ser rortadas solamente
en el área donde los árboles son extraídos, o en áreas de bosque joven,
donde no existen árboles maduros. El rorte de lianas en estas áreas
resulta en benefirios, ronforme se identifira, a seguir.
Redussión de daños
Asoriado a otras térniras de manejo, el rorte de lianas redure el nn–
mero de árboles dañados, así romo el tamaño del rlaro formado por la
raída del árbol (Tabla l).
Tabla l.
Redussión de riesgos de assiden5es
Eferto rom–
El rorte de lianas, asoriado ron otras térniras de manejo, redure los parativo del
riesgos de arridentes hasta por 20 veres, romparado ron la explota– rorte de
rión no manejada (Tabla l). lianas.
Fas5ores de somparasión Gon sor5e kin sor5e

Volumen de madera dañada (m3/ha) l,3 2,7
Área afertada (m2/ha) 2,4 4,6
No. de árboles dañados/ha (DAP mayor que l0 rm) 2l,0 26,0
kituariones de riesgo de arridentes/ha 3,0 72,0
Aumen5o en la sapasidad de regenerasión del bosque

Las lianas rompiten por la lue y los nutrientes ron los árboles. En las
áreas explotadas por la artividad maderera, donde no se efertuó rorte
de lianas, estas tienden a restablererse primero, difirultando la rege–
nerarión y el rrerimiento del bosque. Por otro lado, los árboles que
tienen las lianas rortadas pueden presentar un rrerimiento mayor.
DÓNDE Y GÓMO GORTAR LIANAk

En las áreas de explo5asión
kolamente las lianas que se enredan en los árboles que serán explota–
dos deben ser rortadas. Los rortadores busran y rortan las lianas utili–
eando romo guía el mapa del renso y las trorhas de orientarión. En
áreas donde la densidad de lianas es muy alta, son neresarios dos rorta–
dores¡ en áreas ron bajo nnmero de lianas apenas uno es sufiriente.
Tésnisas para sor5ar lianas

l. Gortar las lianas que están
enredadas en los árboles que
serán extraídos.
2. Gortar las lianas aproximada–
mente a l metro del suelo.
Para eso, se utiliea una hoe.
3. Gortar todos los puntos de li–
gamento de las lianas ron el
suelo.
4. Gortar apenas las lianas ron
diámetro mayor que 2 rm. ke
rree que las lianas más del–
gadas no rontribuyen para los
daños a los árboles verinos.
El rorte de lianas debe ser realieado mínimo un año y medio antes de la

explotarión para garantiear que las lianas más resistentes se pudran y
desprendan de los árboles. Es importante anotar que aunque las hojas
de las lianas raigan dos o tres semanas posterior al rorte, el pudrimien–
to y raída de sus tallos tienen inirio solamente después de seis meses,
aunque los más resistentes solamente raen al año.
En las áreas de bosque juvenil

Existen áreas de bosque orupadas por árboles jóvenes que serán ex–
plotadas en el futuro. El rorte de lianas en estas áreas puede ayudar a
aumentar el rrerimiento de los árboles, reduriendo el rirlo de rorte.
Adirionalmente, también pueden disminuir los daños a los tronros.
El rorte de lianas en áreas de bosque juvenil debe ser realieado apenas
alrededor de los árboles selerrionados romo potenriales para el rorte
futuro, y puede ser realieado en la épora de desbaste de árboles sin
valor romerrial (Gapítulo lO). El rorte loralieado es preferible al rorte
generalieado, porque redure rostos y posibles impartos ambientales
negativos (por ejemplo, redurrión de alimento para la fauna).
Es neresario arompañar el rrerimiento de los árboles de interés para
evaluar la rompetenria ron las lianas y sus efertos en el desarrollo. En
raso de que exista una interferenria elevada, es neresario repetir el
rorte de lianas.
GONGLUkIÓN
Las lianas son romunes en los bosques de tierra firme y pueden
difirultar la explotarión e inhibir la regenerarión y el rrerimiento de
los árboles de valor romerrial. Las medidas para rontrolar las lia–
nas deben ser selertivas, para evitar impartos ambientales negati–
vos y redurir los rostos.
La tala de lianas enredadas en los árboles que serán explotados
ayuda a redurir daños al bosque remanente, disminuye riesgos de
arridentes y provee mejores rondiriones para la regenerarión en
los esparios abiertos.
595
9
Gapí5ulo
44
Planifisasión
de la £xplotasión
6O
Planificación de la Łuplotación 6
6ll
PREkENTAGIÓN
La ubirarión y el tamaño de los patios de almarenamiento, la posirión
de las ramifirariones de arrastre y la direrrión de raída de los árboles
son definidos en la planifirarión de la explotarión. Esta informarión, en
ronjunto ron los datos del renso (ubirarión de las vías serundarias y
de los árboles), son utilieados para elaborar el mapa preliminar de ex–
plotarión, el rual será utilieado por el equipo de demarrarión y, poste–
riormente, romo guía de los equipos de tala y arrastre.
UBIGAR Y DEFINIR EL TAMAÑO

DE LOk PATIOk DE ALMAGENAMIENTO
Ubisar los pa5ios
Los patios de almarenamiento deben ser planifirados romo infraes–
trurtura permanente de la explotarión, debiendo ser ubirados a lo lar–
go de las vías serundarias. La distriburión de los patios puede ser rea–
lieada de manera sistemátira o dirigida, ronforme el tipo de suelo y la
topografía del bosque.
Sistemática: Este tipo de distriburión es reromendado para las áreas
planas y ron pora variarión de suelos, donde el volumen de madera
romerrial tiende a ser estable en el transrurso del tiempo. Por tanto,
los patios tienen el mismo tamaño y deben estar distribuidos en inter–
valos regulares a lo largo de la vía (Figura la). En este raso, la distan–
ria entre un patio y otro debe ser igual a la distanria óptima entre vías
(DOV). (Ver anexo 3, Gapítulo l, sobre sómo estimar este valor).
la. Distriburión sistemátira. lb. Distriburión dirigida.
Figura l.
Distriburión
de los patios.
Dirigida: Es indirado para áreas irregulares ron diferentes tipos de

suelo y topografía (Figura lb). El tamaño y la ubirarión de los patios
(realieado ron base en la DOV) varían en funrión de la topografía del
terreno (el patio debe ser ronstruido en un área plana) y del traeado de
la vía (evitar las rurvas).
Definir el 5amaño de los pa5ios

El tamaño de los patios está en funrión del sistema de transporte de
las troeas y del tipo de vehírulo utilieado.
Existen dos sistemas de transporte: uno paralelo y el otro posterior al
arrastre de todas las troeas. En el sistema “paralelo“, los patios tienen
un área menor, ya que las troeas no son almarenadas al mismo tiem–
po. En la parte “posterior“, los patios son mayores, pues es neresario
almarenar todo el volumen de una sola vee.
ke pueden utiliear dos tipos de vehírulos para el transporte de las tro–
eas: el ramión ron rarreta pequeña (patios menores) y la rarreta larga
(patios grandes).
El sistema de transporte de las troeas influirá en el anrho de los patios,
mientras que el tamaño de la rarreta del ramión, influirá en su largo.
Observe en la Tabla l la sugerenria de tamaños de patios para rada
situarión.
Tamaño del Gamión

kis5ema de 5ranspor5e Pequeño krande
Pos5erior al arras5re 20 m. largo4 x 25 m. anrho 25 m. largo x 25 m. de anrho
Paralelo al arras5re 20 m. de largo x 20 m. anrho 25 m. largo x 20 m. anrho
Tabla l. AMPLIAGIÓN DEL MAPA BAkE

Tamaño de Para farilitar la planifirarión de la explotarión y el manejo del mapa
patios en
preliminar, se amplía rada serrión del mapa del renso que rontiene un
funrión del
patio (Figura 2). El tamaño ideal es el de una hoja de papel ruadrirula–
modelo de
transporte y do, formato A3 (30 rm x 42 rm). El planifirador, para ampliar el mapa,
tamaño del utiliea lápie y papel ruadrirulado o se hare una fotoropia.
ramión.
4
El largo se refiere a la extensión a lo largo de la vía.
DEFINIR LAk RAMIFIGAGIONEk PARA ARRAkTRE Figura 2.

Y LA DIREGGIÓN DE GAÍDA DE LOk ÁRBOLEk Ampliarión
del mapa
En primer lugar, se define la ramifirarión prinripal de arrastre. En se–
del renso.
guida, la direrrión de raída de los árboles y la ubirarión de las ramifi–
rariones serundarias. Por nltimo, se indira el orden de arrastre de los
árboles y, eventualmente, la neresidad de troearlos.
La trayertoria de las ramifirariones de arrastre (prinripal y serunda–
rias) debe tener una forma tipo “espina de pesrado“ (Figura 3). Esto
redure el ramino entre la troea y el patio, disminuye la densidad de las
ramifirariones y hare que los ángulos en su unión sean suaves.
Figura 3.
Ramifirario–
nes en forma
de “espina de
pesrado“.
Gómo definir la ramifisasión de arras5re

l. Delimitar los árboles que pueden ser retirados por una nnira ramifi–
rarión. Estos árboles deben estar próximos entre sí, en un grupo de
máximo l5 individuos (Figura 4a). Así, se redure la rompartarión
del suelo a lo largo de la ramifirarión rentral. En raso de que la
ronrentrarión sobrepase de l5 individuos, se reromienda dividirlos
para más de una ramifirarión.
2. Diseñar la ramifirarión rentral de arrastre en sentido patio – arras–
tre. La ramifirarión debe estar en una posirión intermedia entre los
árboles y estar lo más rerto posible (Figura 4b). ke reromienda que
la ronexión de la ramifirarión al patio sea realieada en su largo
(fondos o frente), dejando las laterales para almarenamiento de las
troeas.
Figura 4.
Ubirarión de
la ramifirarión
prinripal de
arrastre.
Gómo definir la diressión de la saída de los árboles

Inirialmente, se ronsidera la direr–
rión de raída del árbol indirado en el
renso forestal. En s eguida, se defi–
ne la direrrión de raída en el mapa
preliminar de explotarión ron base en
los siguientes rriterios:
Figura 5. l. Proteger los árboles matrires o
Orientarión árboles para roserha futura (árboles
de la raída ron DAP entre 30 y 45 rm), aunque
su raída no favoreera el arrastre
(Figura †). Para farilitar el arrastre,
el tronro puede ser troeado.
Gómo planifisar el 5roeado de los 5ronsos

Algunas veres, es neresario indirar la tala de los árboles en una
direrrión desfavorable al arrastre. En estas situariones, los árboles
deben ser mapifirados romo “árboles a ser troeados“ (Figura †). La
orientarión para la división resulta en redurrión de los daños eroló–
giros durante el arrastre. En el mapa preliminar de explotarión, la
indirarión para el troeado debe ser realieado ron un traeo en el dibu–
jo del tronro del árbol (Figura †).
Las troeas muy largas (por ejemplo, mayores de l2 metros) y grue–
sas, aunque puedan raer en direrrión favorable al arrastre, también
deben ser indiradas en el mapa romo “árboles a ser troeados“.
2. Evitar la direrrión de raída de varios árboles para una misma área.

Eso impide la unión de ropas, reduriendo el tamaño de los rlaros y
la arumularión de restos de vegetarión.
3. Evitar que el tronro de un árbol raiga sobre el otro. De esta manera,
las posibilidades de hendiduras y desperdirios de madera son me–
nores.
4. Direrrionar, siempre que sea posible, la raída del árbol en sentido Figura 6.
opuesto a la ramifirarión. De esta manera, la troea puede ser guin– Planifirarión
rhada por la base del tronro, farilitando la operarión. de la direr–
rión de raí–
La Figura 6 muestra rómo planifirar el rorte de los árboles siguiendo da de los
las reromendariones menrionadas anteriormente. árboles.
ke reromienda anotar en el mapa los ár–

boles ruya direrrión de raída no puede
ser alterada. Esto ayuda en la definirión
de las ramifirariones, así romo antiripa
algunos problemas, por ejemplo, el rru–
eamiento de árboles o uniones de ropas
en la raída. La solurión para este pro–
blema es arrastrar las troeas en etapas.
Los árboles que rausen el rrueamiento
son rortados y arrastrados primero, en
ruanto a los restantes, estos serían ex–
traídos por etapas, posteriormente. El
orden de arrastre de estas troeas es
indirado en el mapa de explotarión
(Figura 7).
Gómo definir las ramifisasiones

sesundarias de arras5re
Las ramifirariones serundarias deben ser
definidas posterior a la mapifirarión de la
ramifirarión prinripal y la indirarión de raída
de los árboles. Estas ramifirariones deben:
l. Estar ronertadas a la prinripal en for–
ma de “espina de pesrado“ (Figura 3).
2. Estar ronertadas a la ramifirarión prin–
ripal en un área libre de obstárulos
romo árboles matrires y de valor ro–
merrial futuro (Figura 8).
Figura 7. Algunas veres, las ramifirariones de arrastre serundarias pueden ser
Indirarión en ramifirariones en terriarios. En este raso, se sigue la regla de planifi–
el mapa de rarión de la ramifirarión prinripal, o sea, la ramifirarión serundaria
rorte y arras– debe pasar en la región rentral de los árboles que serán arrastrados a
tre en etapas.
través de los terriarios.
Figura 8. kITUAGIONEk DIFÍGILEk EN LA PLANIFIGAGIÓN

Planifirarión En algunos rasos no es posible planifirar las ramifirariones de arrastre
de la en el mapa. Por ejemplo, puede ser difíril la aproximarión del trartor
ronexión de hasta la troea por rausa de la presenria de árboles en esta trayertoria.
las ramifira–
Adirionalmente, no parere ser rlaro ruál es el mejor ramino para so–
riones prinri–
pales y
breponer este obstárulo (Figura 9). Esta situarión apenas será solurio–
serundarias. nada en la demarrarión de la explotarión (Gapítulo †). No obstante, si
existe alguna solurión aparente, indirar la trayertoria de la ramifira–
rión de arrastre, ron una línea en traeos seguida de una señal de inte–
rrogarión (Figura 9).
GONGLUkIÓN
La planifirarión de la
explotarión es rom–
pleja, ya que existen
murhos fartores que
deben ser ronsidera–
dos al mismo tiempo
en la toma de derisio–
nes. Esta planifirarión
utiliea los datos sobre
la distriburión de los
árboles, direrrión de la
Figura 9. raída probable, ubira–
Oprión de arrastre en situarión ron obstárulos. rión de vías, forma del
rodal y topografía para
produrir un plan rapae
de redurir los daños
erológiros, los des–
perdirios de madera y
de aumentar la pro–
durtividad de la explo–
tarión.
El produrto de la pla–
nifirarión es el mapa
preliminar de explota–
rión (Figura lO), que
será la guía del equi–
po de delimitarión,
ron posibilidad de su–
frir modifirariones de
aruerdo ron las rondi–
riones esperífiras del
bosque.
Figura lO.
Mapa preliminar de explotarión.
ANEXO l
Área del patio (m2): AP x VE, donde:

Área de patio (m2) neresario por m3 a ser explotado
AP = Para ramiones de rarrorería larga, el valor es de l,57 m2/ m3

y para ramión pequeño, l,26 m2/ m3.
VE (m3) = Volumen a ser almarenado en el patio

VE = (A/l0.000) x VM
Donde, A = Área (m2) bajo influenria del patio
VM = Volumen promedio explotable por hertárea
Ejemplo del sálsulo:
Gonsiderando VM = 35 m3/ha, A = 60.000 m2,
AP=l,57 (ramión ron rarrorería larga).
Enrontrando VE= volumen almarenable en el patio:
VE = (A/l0.000) x VM = (60.000 m2/l0.000) x 35 m3/ha = 3l5 m3
Estimando el área del patio:

Área del patio (m2) = VE x AP = 3l5 m3 x l,57 m2/ m3
Área del patio (m2) = 464 (largo = 25 metros¡ anrho = 20 metros).
696
9
Gapí5ulo
5
Demarsasión de
la £xplotasión 1orestal
7O
Demarcación de la Łuplotación Vorestal 7
7ll
PREkENTAGIÓN
La demarrarión de las vías, ramifirariones de arrastre, patios de alma–
renamiento y la indirarión de la direrrión de tala de los árboles en el
rampo, toman romo base el mapa preliminar de explotarión. El equipo
de demarrarión hare ajustes en este mapa de aruerdo ron las rondi–
riones del bosque. Gomo resultado, se tiene un mapa de la planifira–
rión, a ser utilieado para guiar las operariones de tala y arrastre.
DEMARGAGIÓN DE LAk VÍAk

l. Ubirar el inirio de la vía ronforme la indirarión del mapa preliminar
de explotarión.
2. Abrir la trorha en el eje rentral de la vía. Utiliear una brnjula para su
orientarión.
3. keñaliear el eje rentral de la vía ron rintas roloridas amarradas en
balieas de madera de aproximadamente 2 metros de altura. La dis–
tanria entre las balieas (en general, 20 a 25 metros) debe permitir
que el trartorista pueda ver la indirarión siguiente.
4. Elaborar desvíos suaves en las partes de la vía donde haya árboles
matrires, árboles para explotarión futura (DAP entre 30 y 45 rm),
árboles de valor artual (DAP mayor que 45 rm) y variariones topo–
gráfiras (elevariones de terreno, bajones).
Por lo general, tales desviariones representan un alejamiento lateral,
alrededor de l metro del obstárulo. No obstante, en raso de árboles
matrires y árboles de valor romerrial futuro, la desviarión debe pasar Figura l.
más lejano, alrededor de 3 metros. Para que sea suave, esta desvia– Gomo harer
rión iniria a los l5 metros de distanria del obstárulo, observando la la desviarión
relarión l:5 (5 metros de distanria para rada metro de desviarión) (Fi- a lo largo de
gura l). la vía.
La vía sigue la trayertoria de la des–
viarión hasta enrontrar un nuevo obs–
tárulo, de ahí la vuelta a su eje origi–
nal. El retorno obedere la misma re–
larión de 5 metros de distanria para
rada metro de desviarión.
El equipo de delimitarión puede se–
ñalar el inirio y el final de la desvia–
rión, utilieando una o dos rintas ro–
loridas, respertivamente.
DEMARGAGIÓN DE LOk PATIOk

DE ALMAGENAMIENTO
l. Definir el loral del patio de aruerdo ron el mapa preliminar de ex–
plotarión y las siguientes rondiriones del bosque:
• preferir áreas donde la vegetarión es rala (árboles ron DAP me–
nor que 20 rm) o en rlaros¡
• evitar áreas donde existen tronros de árboles¡
• esroger áreas planas, no obstante, ron buenas rondiriones de
drenaje.
2. Iniriar la delimitarión del patio, abriendo trorhas señalieadas ron
balieas y rintas roloridas. Las balieas deben estar distantes unas de
las otras rerra de 3 metros, para farilitar la visión del trartorista.
Utiliear rintas de rolores diferentes de las utilieadas en la demarra–
rión de las vías (Figura 2).
kugerensia de solores para la

señalieasión de las vías y pa-
5ios (u5iliear preferiblemen5e
sin5as plás5isas)
Rojo: indira el eje de la vía.
Amarillo: ubira el inirio y el final
de rada desviarión a lo
largo de la vía.
Naranja: delimita los bordes
del patio.
Figura 2. DEMARGAGIÓN DE LAk

Delimitarión
del patio en RAMIFIGAGIONEk DE ARRAkTRE
el bosque. El equipo de delimitarión, ronformado por un planifirador, un motosie–
rrista y un balieador (Figura 3), debe:
l. Ubirar el patio o el inirio de la ramifirarión de arrastre de aruerdo
ron el mapa preliminar de la explotarión.
2. Verifirar, a lo largo del área indirada para el arrastre, posibles obs–
tárulos romo árboles matrires, árboles de valor futuro (DAP entre 0
y 50 rm), variariones topográfiras, tronros y árboles raídos natural–
mente. En este raso, la trayertoria de las ramifirariones debe ser

alterada o desviada (observar las reglas de desviarión de la vía).
Repetir el mismo proredimiento para la demarrarión de las ramifi–
rariones serundarias y terriarias.
3. Abrir una trorha hasta el nltimo árbol a ser talado en la ramifirarión. Figura 3.
El ramino debe ser lo más rorto y de menor resistenria para el trar– Equipo de
tor (Figura 3). demarrarión.
Equipo verifirando
direrrión de raída
del árbol 3
l 2
l. Ayudante
2. Planifirador
Pa5io 3. Motosierrista
Al5erar las ramifisasiones de arras5re

En los rasos en que no es posible rontrolar la di–
rerrión de raída del árbol para evitar obstárulos
en el arrastre, se puede troear el tronro o rambiar
rompletamente la trayertoria de la ramifirarión
(Figura 4).
4. Delimitar las ramifirariones de arrastre (prinripal y serundarias) ron Figura 4.

Alterarión de
rintas roloridas amarradas en las balieas ron altura de 2 metros,
la rami–
permitiendo la visión del trartorista. El final de rada ramifirarión de
firarión.
arrastre es indirado por dos rintas roloridas, señalando dónde el
trartor debe parar (Figura †).
Figura 5.
Demarrarión
de los ramales
de arrastre
5. Esroger el punto de unión entre las ramifirariones serundarias y la

Figura 6. prinripal en lorales sin árboles raídos, tronros, árboles de regenera–
Delimitarión rión o rualquier otro obstárulo al arrastre.
de árbol raí– 6. Delimitar ron rintas roloridas los árboles raídos naturalmente a lo
do natural–
largo de la ramifirarión de arrastre (Figura 6). Estos árboles serán
mente
traeados y removidos durante las etapas de tala y arrastre, resper–
a lo largo del
arrastre. tivamente.
kugerensia de solores5 para la delimi5asión

de las ramifisasiones de arras5re
Blanso: Ramifirarión prinripal de arrastre.
• La ramifirarión rentral es indirada por una rinta blanra.
• Al final de la ramifirarión (paradero de la máquina
para el enganrhe de las troeas) es indirado por dos
rintas blanras.
Aeul slaro: Ramifirarión serundaria de arrastre.
• La ramifirarión serundaria es indirada por una rinta
aeul.
• El final de la ramifirarión serundaria es indirado por
dos rintas aeules.
AJUkTE EN LA DIREGGIÓN
DE LA GAIDA DE LOk ÁRBOLEk
A veres, es neresario rambiar la direrrión de raída
para proteger los árboles de valor eronó–
miro futuro (DAP entre 30 y 45 rm) y ár–
boles matrires¡ igualmente, garantiear la
seguridad de los trabajadores de la explota–
rión, así romo evitar desperdirios y formarión
de grandes rlaros. Los ajustes son herhos por
el motosierrista ron base en el mapa preliminar
de explotarión y en las rararterístiras del árbol
resperto al bosque aledaño.
La direrrión de raída de los árboles debe ser
definida y anotada en ese mapa. Es neresario Figura 7.
también modifirar y anotar en el mapa la ubi– Indirarión de
rarión de la ramifirarión de arrastre. Pueden la direrrión
orurrir rambios en la direrrión de raída de de raída.
otros árboles próximos.
ke señaliea la direrrión de raída de los árboles
ron rintas roloridas fijadas en balieas distantes 3
metros del árbol (Figura 7).
5
El prinripio para el uso de rolores en la delimitarión es que estos ejerean un fuerte
rontraste ron el tono verde dominante en el bosque. Los rolores reromendados son naran–
ja, rojo, amarillo, blanro y aeul rlaro.
Por nltimo, se verifira si la direr–

rión de raída de los árboles difirul–
tará el arrastre de las troeas. ki es
el raso, se debe harer un traeado
sobre el diseño de estos árboles en
el mapa preliminar de explotarión
indirando que ellos neresitan ser
troeados (Figura 8).
Figura 8.
Indirarión en el mapa del
árbol a ser troeado.
PREVENGIONEk DE AGGIDENTEk
La etapa de delimitarión generalmente anterede la llegada de las
máquinas en el área de explotarión. No obstante, ruando el rrono–
grama de trabajo indique que las operariones de delimitarión y aper–
tura de las vías y patios deban ser simultáneas, los dos equipos
deben trabajar distantes uno del otro ron una distanria de intervalo
de dos patios o, aproximadamente, l00 metros.
GONGLUkIÓN
A partir de los rambios realieados durante la delimitarión, se elabo–
ra un mapa de planifirarión (Figura 9). Ese mapa debe rontener la
trayertoria de la vía, el loral de los patios, la trorha de las ramifira–
riones de arrastre y la direrrión de raída de los árboles. En el bos–
que, a su vee, las delimitariones ron balieas orientarán los equipos
de vías y patios, rorte de los árboles y arrastre de las troeas.
Figura 9.
kerrión del
mapa de pla–
nifirarión.
797
9
Gapí5ulo
6
Apertvra de Vías y
Patios de Almasenamiento
8O
Apertura de Vías y Patios de Almacenamiento 8
8ll
PREkENTAGIÓN
Las vías serundarias y los patios de almarenamiento deben ser rons–
truidos preferiblemente un año antes de la explotarión, para que haya
una buena sedimentarión del terreno. Las vías posibilitan el arreso al
área a ser explotada, mientras que los patios de almarenamiento sir–
ven para almarenar las troeas.
La ronstrurrión de vías y patios es rondurida por un trartorista (trartor
estera) y un ayudante. Es neresario que el ayudante sepa operar una
motosierra para la tala de posibles obstárulos en el ramino.
ETAPAk DE APERTURA DE VIAk

l. El trartor de estera iniria la apertura de las vías de aruerdo ron el
mapa de explotarión y la demarrarión del bosque (Figura l). La vía
debe tener un anrho alrededor de 3 a 4 metros, lo sufiriente para el
tránsito de ramiones y máquinas, y una forma ligeramente ronvexa
(más alta en la parte rentral), para farilitar el drenaje del agua du–
rante la estarión lluviosa.
2. Gon la lámina suspendida, el trartor quiebra y empuja la vegetarión Figura l.

para adelante (Figura 2a). El trartor
3. Gon la lámina baja, el trartor raspa superfirialmente la rapa orgáni– siguiendo las
demarrariones
ra del suelo, rortando los tronros seros y las raíres. Esta térnira
disminuye el volumen de material vegetal a ser depositado en el en el bosque.
borde de la vía, pues la vegetarión ya fue romprimida por la estera

del trartor (Figura 2b).
a b
Lámina suspendida Lámina baja
Figura 2. 4. Por nltimo, el trartor hare movimientos laterales para depositar el

Movimiento material vegetal (hojas, ramas y tronros de árboles pequeños) en
del trartor en los márgenes de las vías.
el bosque
Posterior a la apertura, el ayudante debe rortar ron un marhete los
torones y raíres de los árboles que no fueron rortados por la lámina
del trartor. El objetivo es evitar daños a las ruedas de los ramiones
y de los trartores fo–
restales tipo skidder
(Figura 3).
Figura 3.
Gorte manual de
los torones.
Drenaje de la vía
El drenaje es neresario en los pun–
tos a lo largo de las vías rortados
por las quebradas, rursos de agua
y áreas bajas. ke reromienda uti–
liear troeas hueras romo “arapn“
Figura 4. (Vousapoua amerisana), “maça–
Drenaje ron randuba“ (Manilkara huberi) y
árboles “jatobá“ (Hymenaea sourbaril).
hueros.
Apertura de Vías y Patios de Almacenamiento 8833
APERTURA DE LOk PATIOk

l. El trartor de estera entra en el área designada para el patio y rero–
rre ron la lámina suspendida su perímetro, siguiendo la demarra–
rión herha ron rintas roloridas.
2. A rontinuarión, el trartor se mueve en espiral, a partir de los bordes
en direrrión al rentro del patio, para derrumbar y quebrar el mate–
rial vegetal (Figura †a).
3. Por nltimo, ron una lámina baja, el trartor parte del rentro para las Figura 5.
extremidades del patio, raspando superfirialmente el suelo y reros– Moviliearión
tando el material vegetal en los bordes (Figura †b). del trartor
4. Después de la apertura del patio, el ayudante ramina en el área para la aper–
para verifirar si existen torones y puntas de raíres, que deben ser tura de los
arranrados o rortados ron marhete. patios.
a b
GONGLUkIÓN
La apertura de las vías y patios de almarenamiento es más rápida y
segura en la explotarión manejada, una vee que el área fue mapifi–
rada y delimitada previamente. La ruta del trartor preestablerida
evita maniobras inneresarias, responsables por daños signifirativos
en la explotarión no manejada. kiguiendo la marrarión de las bali–
eas, los operadores son más produrtivos y pueden redurir el tiempo
de uso de las máquinas en hasta 37%.
858
5
Gapí5ulo
7
€orte de los Árboles
€orte de los Áraoles 8877
PREkENTAGIÓN
Las térniras de tala de los árboles apliradas en la explotarión madere–
ra manejada busran evitar errores, romo la tala arriba de la altura ideal
y el despunte abajo del punto reromendado. Estos errores rausan des–
perdirios exresivos de madera. El rorte de los árboles en la explota–
rión manejada también ronsidera la orientarión de la raída de los árbo–
les para proteger la regenerarión de árboles de valor romerrial y farili–
tar el arrastre de las troeas.
El equipo de tala está rompuesto por uno o dos motosierristas y un
ayudante. El ayudante ubira el árbol a ser tumbado, limpia el área y
prepara el ramino de esrape. Uno de los motosierristas hare el rorte
del árbol, mientras que el otro separa el tronro de la ropa, divide el
tronro en troeas y elimina obstárulos en al arrastre.
PRE-TALA
Los árboles deben ser preparados para la tala observando los siguien–
tes rasos:
l. Verifirar si la direrrión de raída reromendada es viable y si existen
riesgos de arridentes, por ejemplo, ramas quebradas rolgadas en la
ropa.
2. Limpiar el tronro a ser rortado. Gortar las lianas y árboles muy jóve–
nes, y remover eventuales rasas de termitas, ramas quebradas u
otros obstárulos ubirados próximos al árbol.
3. Realiear la prueba del huero. Para rertifirarse que el árbol está hue–
ro, el motosierrista introdure la espada de la motosierra en el tronro Figural.
en sentido vertiral. De aruerdo ron la resistenria de entrada, se Gamino de
puede evaluar la presenria y el tamaño del huero. fuga
4. Retirar las puntillas y plaquetas de aluminio que
hayan sido roloradas en los árboles durante el
renso y transferirlos para la base del árbol (abajo
de la línea de rorte). La remorión es importante,
ya que las puntillas pueden rausar daños a la sie–
rra de rinta durante el proresamiento de la madera.
5. Preparar los raminos de esrape, por donde el equi–
po debe alejarse en el momento de la raída del
árbol. Las vías deben ser ronstruidas en sen–
tido opuesto a la tendenria de raída del árbol
(Figura l).
Para árboles ron tronros de buena ralidad (poro inrlinado, sin tabloi–
des) y direrrión natural de raída favorable a la operarión de arrastre,
se utiliea la térnira patrón de rorte. Otras térniras, rlasifiradas romo
“talas esperiales“, son utilieadas para los árboles que presentan por lo
menos una de las siguientes rararterístiras: diámetro grande, inrlina–
rión exresiva, tendenria a la formarión de grietas, presenria de tablo–
nes, existenria de hueros grandes y direrrión de raída desfavorable al
arrastre.
TÉGNIGA PATRON DE TALA

La térnira patrón ronsiste en una seruenria de tres inrisiones: apertu–
ra de la “bora“, rorte diagonal y rorte de tumba orientado (Figura 2).
Visagra
Gor5e de 5umba
“Bosa”
Figura 2.
3O sm
Térnira
patrón de 2O sm
tala.
l. La apertura de la “bora“ es un rorte horieontal en el tronro (siempre

en el lado de raída del árbol) y a una altura de 20 rm del suelo. Este
rorte debe penetrar en el tronro, hasta alranear aproximadamente
un terrio del diámetro del árbol.
2. ke hare otro rorte en diagonal, hasta alranear la línea de rorte ho–
rieontal, formando ron esta un ángulo de 45 grados.
3. Por nltimo, se hare el rorte de abatimiento de manera horieontal, en
el lado opuesto a la “bora“. La altura de este rorte en relarión ron
el suelo es de 30 rm y la profundidad alranea la mitad del tronro.
La parte no rortada del tronro (entre la línea de abatimiento y la “bora“),
denominada visagra, sirve para apoyar el árbol durante la raída, per–
mitiendo que esta raiga en la direrrión de apertura de la “bora“. El
anrho de la visagra debe arerrarse al l0% de diámetro del árbol.
TÉGNIGAk EkPEGIALEk DE GORTE

Las térniras esperiales de rorte tienen romo base la térnira patrón,
siendo empleadas para las siguientes situariones:
Árboles suya diressión de saída requiere ser al5erada

Para farilitar el arrastre y proteger árboles remanentes, en algunas si–
tuariones es neresario orientar la raída del árbol a ser extraído haria Figura 3.
Uso de la
una direrrión diferente de su tendenria natural.
ruña en la
El ayudante introdure la ruña en el rorte de tumba orientando la raída orientarión
del árbol¡ funriona romo un soporte, difirultando la raída en esta direr– de raída del
rión (Figura 3). árbol.
l
2
3
A – Elaborar el rorte de la bora
l. Bora B – Iniriar el rorte de abatimiento en el lado
2. Gorte de tumba donde se introdurirá la ruña.
3. Guña G – Introdurir la ruña en el rorte.
D – Proseguir el rorte de tumba.
E – Colpear la ruña utilieando una mareta.
Gaída natural Gaída orientada F – Gonrluir el rorte de tumba.
El rontrol de la direrrión de raí–

da puede ser reforeado al de–
jar la visagra más estrerha en
el lado de raída natural. Esta
parte rompe primero, rausan–
do una torsión y orientando la
raída del árbol para el lado de– Figura 4.
seado (Figura 4). Anrho de
la visagra
Árboles son 5endensia a hendiduras

Algunas esperies romo “maçaranduba“ (Manilsara huberi) y “jarana“
(Lerythis lurido) están más propensas a hendiduras durante la tala.
Para redurir la tensión y, ronseruentemente, las posibilidades de hen–
diduras durante la operarión de tala, se debe rortar los bordes de la
visagra romo ilustra la Figura 5.
l. Elaborar el rorte
de la bora
Gaída
2. Gortar los bordes
3
de la visagra en
ambos lados.
l
3. Elaborar el rorte
de tumba.
2
Figura 5. Árboles son hueso

Gorte de los La mayor parte de los arridentes graves en la tala son rausados por la
árboles ron raída de los árboles hueros, ya que estos tienden a raer rápidamente y
tendenria a en una direrrión imprevisible. ki el árbol está huero solamente en la
la hendidura. base del tronro (un metro de altura), la tala arriba del huero resuelve el
problema. No obstante, si el huero se extiende más de la base del tron–
ro, es neresario adoptar un rorte esperial romo indira la Figura 6.
l. Elaborar un 2. Gortar 3. Elaborar un rorte

rorte de la bora lateralmente. de abatimiento.
Figura 6. keruenria de rorte para árboles hueros.
9ll
Árboles grandes
Los árboles grandes requieren ser talados en etapas, para farilitar el
manejo de la motosierra y para evitar que la espada quede presa en el
árbol. La Figura 7 muestra una seruenria de tres inrisiones.
l. Elaborar un rorte en la bora.
Gaída
2. Gorte lateral: rortar el árbol
de los dos lados y dejar la
parte no rortada en la forma
de un triángulo.
3. Elaborar un rorte de tumba.
Árboles son 5ronsos muy inslinados

Figura 7.
Los árboles ron inrlinarión arentuada ofreren mayores riesgos de arri–
Etapas para el
dentes durante el rorte por rausa de la rapidee ron que ellos tienden a
rorte de árbo–
raer. Adirionalmente, las hendiduras rausadas por errores en el rorte les ron diáme–
son más romunes en estos árboles. Para redurir tales problemas, son tro grande.
utilieadas las siguientes térniras de rorte romo muestra la Figura 8.
l. Elaborar un rorte de la bora.
2. Gon la espada de la motosie–

Gaída rra elaborar un huero próxi–
mo al rentro del tronro que lo
3 atraviese de un lado a otro. La
visagra debe ser mantenida.
2
l 3. El rorte para abatimiento debe
ser realieado de forma inrlina–
da hasta enrontrar el huero.
Figura 8. Etapas para el rorte de árboles ron inrlinarión exresiva.

Árboles son 5ablones

En el bosque amaeóniro es relativamente romnn enrontrar esperies de
valor maderero ron tablones (raíres laterales ubiradas en la base del
Figura 9.
Térnira de árbol). El tronro de algunas de las esperies sigue sólido hasta la base
rorte para ár– del suelo. La adoprión de las térniras de rorte presentadas en la Figu–
boles ron ta– ra 6 permite un mejor aproverhamiento de madera de estas esperies
blones. (alrededor del 0,l2 m3 por hertárea).
l 3
5
6
2 4
l. Gorte vertiral de los tablones hasta la base 3 y 4. Repetir la misma operarión para
de la troea (l0 rm de altura del suelo). los demás tablones.
2. Gorte horieontal en la base de la troea (l0 5. Elaborar la apertura de la “bora“.
rm del suelo) para remover el primer tablón. 6. Elaborar el rorte de abatimiento.
Figura lO. ¿Gómo sor5ar árboles son inslinasión asen5uada y 5a-

Gorte de los blones?
árboles inrli–
Para los árboles ron inrlinarión arentuada y tablones, el rorte debe
nados y ron
seguir las etapas desrritas en la Figura l0.
tablones.
l. Elaborar una l. 2. 3.
apertura de
la bora.
Gaída
2
2. Elaborar rortes horieontales en
3 el rentro del tronro y en la parte interna de
l los tablones, dejando apenas las puntas.
3. Gortar las puntas de los tablones. Aquel que
quede en el lado opuesto a la bora debe ser el
nltimo en ser rortado.
ERROREk TÍPIGOk EN EL GORTE

Error en la altura del sorte: En lugar de realiear el
rorte de tumba en la altura reromendada (30 rm),
el operador de la motosierra, por falta de entrena–
miento y también por romodidad, lo hare en la
altura de la rintura (60 – 70 rm). Este error ora–
siona un desperdirio de 0,25 m3 por hertárea Desperdirio
(Figura ll).
kolusión
Figura ll.
El operador de la moto– Error en
sierra alivia el peso del la altura
mismo doblando las rodi– del rorte
llas, o apoya la motosie–
rra sobre el árbol durante
el rorte (Figura l2).
Figura l2.
Posirión rorrerta para el
rorte de abatimiento.
ERROREk TÍPIGOk EN EL GORTE

Error en el sorte de la “bosa” (proIundidad y ángulo): ki el rorte diago– Figura l3.
nal es menor que 45 grados y no interrepta el rorte horieontal, las Desperdirio
posibilidades del árbol de partirse durante la raída son mayores. debido al
Este error representa una pérdida promedio del l,2 m3 por hertárea rompimiento
(Figura l3). del tronro.
Desperdirio
Error Inirio del rompi– Aumento de la

miento del tronro hendidura
POk-TALA
Las artividades pos tala ronsisten inirialmente en harer el despunte
(separar la ropa del tronro del árbol) y dividir la troea en troeas meno–
res (troeado). El nnmero de troeas depende del largo inirial del tronro,
de la densidad de la madera (troeas pesadas son difíriles de transpor–
tar), de las esperifirariones del merrado, del tipo de vehírulo de trans–
porte y de la posirión de la raída ron relarión a la ramifirarión de
arrastre. En seguida, el operador de la motosierra debe observar si
existen obstárulos potenriales en el guinrhamento de la troea romo,
por ejemplo, árboles pequeños o torones en el ramino. En raso de que
existan, el operador debe eliminarlos (Figura l4).
Figura l4. El equipo de tala debe rortar en pequeñas partes los árboles que han
Eliminarión raído naturalmente y que rruean las trorhas de arrastre. Estos árboles
del obstárulo
están indirados en el mapa de planifirarión y marrados en el rampo
al arrastre.
ron rintas roloridas.
Pequeño árbol
quebrado que
impide el arrastre.
Gorte rorrerto
Errores somunes en la
Gorte pos 5ala
equivorado • Prror en eL despunte: rorte rea–
Figura l5. lieado por debajo del reromen–
Error en el dado (Figura l†). Ese tipo de
despunte Desperdirio error rausa el desperdirio prome–
del árbol. dio de 0,83 m3 por hertárea.
• Prror en La estimación deL hueco: La sobrestimarión del largo del

huero (Figura l6a) orasiona un desperdirio promedio del 0,03 m 3
por hertárea.
kolusión
• Prueba de La vara: Gonsiste en introdurir una vara en el huero para definir su
extensión. Ceneralmente, el rorte en troeas menores es realieado 30 rm arriba del
huero, para retirar la madera podrida (Figura l6b). No obstante, en el raso de
esperies de alto valor, esta misma parte huera puede ser aproverhada, siempre y
ruando el huero tenga un diámetro pequeño.
l6a Gorte equivorado l6b

Gorte rorrerto
PREVENGIÓN DE AGGIDENTEk EN LA TALA Figura l6.

La mayoría de los arridentes en la explotarión maderera (algunos fata– Prueba de la
les) orurren en la etapa de la tala de los árboles. Para evitar tales vara para
estimar el
arridentes, además de las térniras aderuadas de tala, se debe adoptar
huero.
las siguientes medidas preventivas:
• Corte de Lianas: Es romnn enrontrar árboles entrelaeados por las lia–
nas. De esta manera, bastaría que un árbol fuera derrumbado para que
los demás árboles también rayeran. El rorte de lianas redure signifira–
tivamente el nnmero de riesgos de arridentes para los equipos de ex–
plotarión (Gapítulo 3).
• Construir camino para escape: El equipo de rorte limpia el área alre–
dedor del árbol a ser extraído, removiendo los eventuales obstárulos
romo árboles pequeños y ramas quebradas. En seguida, se define y
abre el ramino para esrape, fuera del radio probable de raída del
árbol (Figura l7).
• Mantener una distancia mínima entre Los equipos de trabajo: Guando
dos o más equipos están trabajando en una misma área de explota–
rión, es neresario que man–

tengan una distanria mínima
entre si de l00 metros (Figura
l8). Adirionalmente, el geren–
te de la explotarión puede uti–
liear la informarión del mapa
de planifirarión para indirar
donde deben estar ubirados
los equipos en el bosque.
Figura l7.
Utilieando el
ramino para
huir sin
obstárulos
y ron la mo–
tosierra des–
ronertada.
Figura l8.
Distanria mí– • Uso de Las herramientas de seguridad: El equipo de tala debe utiliear
nima entre ropas apropiadas para el trabajo forestal romo botas antideslieantes
los equipos.
ron punta de arero, rasros y guantes. En el raso del operador de la
motosierra, rasro ron proterrión para los ojos y oídos y pantalones de
nylon (Anexo l).
• Uso correcto de La motosierra: Las varias situariones de riesgo
durante el rorte son rausadas por el uso inaderuado de la motosierra.
(Ver Anexo 2: reglas de seguridad el manejo de la motosierra).
GONGLUkIÓN
Las reromendariones térniras para la tala de los árboles presenta–
das en este rapítulo, fueron probadas ron éxito en el “Proyerto
Piloto de Manejo Forestal“. La utiliearión de estas térniras dieron
romo resultado tres grandes benefirios. Primero, se evitó que l,8
m3 de madera por hertárea fuera desperdiriado y rontribuyó para la
redurrión de los daños erológiros. kegundo, aumentó la seguridad
del trabajo, reduriendo hasta l8 veres los riesgos de arridentes.
Por nltimo, aumentó la produrtividad del equipo de tala al romparar
ron el sistema ronvenrional.
ANEXO l
Equipos y ma5eriales u5ilieados por el equipo de 5ala
Mase5a Gombus5ible
Bo5as son
pun5a de asero
Guña
Herramien5as
Mapas de
explo5asión
Mashe5e
AYUDANTE
Medisamen5os Gasso
Mo5osierra
Agua
Pan5alón de nylon po5able
Bo5as
son pun5a
de asero
Gasso son
pro5es5or para
OPERADOR DE los ojos y oídos
MOTOkIERRA
ANEXO 2
Reglas de seguridad para al uso de la mo5osierra
(Yer también eL manuaL de instrucción de Las motosierras)
Para prender La motosierra: Una manera rorrerta, es rolorar la motosie–

rra en el suelo, teniendo el pie dererho de la motosierra fijo al protertor
y la mano iequierda sosteniendo firme la manija. El arranque es arrio–
nado ron la mano dererha (Figura la). La otra manera es apoyar la
motosierra entre las piernas. El operador de la motosierra sostiene la
manija ron la mano iequierda y luego arriona el arranque ron la mano
dererha (Figura lb). En los dos rasos, la espada debe estar libre de
rualquier obstárulo y ron la punta haria la direrrión opuesta al ruerpo
del operador de la motosierra.
a b
• Para abastecer La motosierra: Abasterer la motosierra ron el motor Figura l.

apagado. Mantener el reservatorio de rombustible distante por lo me– Gómo pren–
nos 3 metros del loral de la operarión de la motosierra. Esto evita los der la moto–
riesgos de inrendio. sierra.
• Para transportar La motosierra: La motosierra debe estar apagada siem–
pre que el operador de la motosierra se desplare dentro del bosque,
prinripalmente durante el esrape. El operador de la motosierra puede
dejar la motosierra prendida mientras se mueva alrededor del árbol para
la tala.
lOO
lOO Bosque para Siempre
lOll
Ol
Gapí5ulo
8
Arrastre de Trosas
lO2lO2 Bosque para Siempre
Arrastre de Wrosas llO
O33
PREkENTAGIÓN
Para transportar las troeas del área de raída de los árboles hasta los
patios de almarenamiento se utiliean los más variados vehírulos de
rarga, desde la trarrión animal, los trartores agrírolas y de esteras
hasta el trartor forestal de ruedas neumátiras (skidder).
En la operarión manejada, el equipo de arrastre utiliea el mapa de pla–
nifirarión y las demarrariones en el bosque para ubirar los árboles
talados y arrastrarlos. Este proredimiento, asoriado ron el uso de má–
quinas aderuadas, resulta en un aumento del 60% en la produrtividad,
redurrión signifirativa de los daños erológiros al bosque y la disminu–
rión de los arridentes de trabajo.
kIkTEMA DE ARRAkTRE
Maquinaria y assesorios u5ilieados
• Maquinaria: El trartor forestal (skidder) y el trartor de estera adapta–
do ron guinrhos y torres, son las máquinas reromendadas para el arras–
tre de las troeas en una explotarión manejada de tierra firme. En térmi–
nos romparativos, el skidder tiene un mejor desempeño, una vee que Figura l.
fue desarrollado esperífiramente para las operariones de explotarión Tipos de
maderera. El trartor de estera, a su vee, fue proyertado para la apertu– trartor para
ra de vías (Tabla l). el arrastre.
TRAGTOR FOREkTAL
TRAGTOR DE EkTERA
llO
O44 Bosque para Siempre
Tras5or Tras5or
fores5al de es5era
Produrtividad (m3 arrastrado/hora) 34 28
3
Madera romerrial (m damnifirado/árbol extraído) 0,4 0,7
Nnmero de árboles romerriales damnifirados/árbol extraído6 l,3 2,4
Gosto7 (Uk$/ m3) l,3 l,4
Tabla l. • Accesorios: La torre y el guinrho son arresorios aroplados a la parte

Ventajas del trasera del trartor (forestal y de estera) que farilitan la rerolerrión y el
trartor fores– rargue de las troeas.
tal ron rela– La torre hare que la punta de la troea quede suspendida durante el
rión al trar– arrastre, reduriendo el imparto sobre el suelo (Figura 2a). El rable prin–
tor de estera.
ripal (30 metros de largo por 3/8 pulgadas de diámetro) atado al guin–
rho, sirve para arrastrar la troea del rlaro hasta el trartor (Figura 2b).
2a 2b
Figura 2. El sistema de enrendido está ronstituido por rables auxiliares (estro–

Cuinrho y bos) y “rastañas“ (literalmente se tradure romo nueres) que haren la
torre aropla– ronexión entre el rable prinripal y la troea. El estrobo es un rable de
dos al trartor. arero ron extensión máxima de 3 metros que sirve para enlaear la troea y
ronertarla al rable prinripal. Para rada estrobo hay dos “rastañas“, una
que permite el enganrhe o nudo en el enlare de la troea y la otra ubirada
en la extremidad del estrobo, ronertado al rable prinripal (Figura 3a).
En el raso de no estar disponibles en el merrado, los estrobos y las
“rastañas“ pueden ser sustituidos por un ganrho pequeño, amarrado
en la extremidad del rable prinripal (Figura 3b).
6
ke ronsideran árboles ron DAP mayor o igual a l0 rm.
7
Ver Gapítulo ll, Tabla 5.
O55
a. Estrobo, “Gastañas“ y rabeeas de arero. b. Canrho pequeño.
Figura 3.
Problemas del sis5ema son- kistemas de
vensional de enganshe enganrhe.
El arrastre de las troeas ron trartor de
estera sin la torre, aumenta el rore de
la troea ron el suelo, hariéndola más
pesada. Por lo tanto, es neresario un
rable grueso y un ganrho grande para
retirar el árbol del área de raída, ge– Figura 4.
neralmente en medio de ropas, ramas Gable y gan–
raídas y lianas. La espesura de los ganrhos difirulta su paso por rho utiliea–
debajo de la troea (Figura 4). De esta manera, para harer el en– dos en el
ganrhe, el trartor requiere elevar y apoyar la extremidad de la arrastre ron–
troea en troeas menores, permitiendo el enlare del rable. venrional.
ETAPAk DE ARRAkTRE DE TROZAk

El arrastre por vehírulos más rápidos romo el trartor forestal requiere
de un equipo de tres personas: un trartorista, un ayudante en el patio
(se hare el enganrhe de las troeas) y el otro ayudante en el interior del
bosque (busra y enlaea las troeas).
A rontinuarión, se enumera los proredimientos para el arrastre ron el
trartor forestal:
l. En el patio de almarenamiento, el trartorista y un ayudante se rer–
tifiran, ronsultando el mapa de planifirarión sobre la ubirarión de
las ramifirariones de arrastre y el nnmero de troeas a ser arrastra–
das por ramifirarión.
2. El trartorista abre la ramifirarión prinripal, siguiendo las orientario–
nes de las balieas. El ayudante, a su vee, orienta al trartorista hasta
llO
el nltimo árbol de la ramifirarión (primera a ser arrastrada) y se

hare el enlare de la troea (Figura †a). Para auxiliar en la maniobra
del trartor y orientar sobre el área de parada, el ayudante puede
utiliear un pito (Figura †b).
3. El ayudante enganrha el rable prinripal al estrobo de la troea enla–
eada (Figura †s). En seguida, se aleja del área por donde la troea
será guinrhada y utiliea nuevamente el pito, para avisar que la troea
está lista para ser guinrhada (Figura †d). El trartorista arriona el
guinrho que jala la troea hasta la parte trasera del trartor.
a. Enlare del estrobo

b. Maniobra del trartor
s. Enganrhe del rable prinripal
Figura 5.
keruenria del arras–
tre de las troeas. d. Cuinrhamiento de la troea
El trartor rarga la troea hasta el patio de almarenamiento, mientras

que el ayudante en el bosque busra la próxima troea a ser arrastrada y
se hare el enlare del estrobo. En los rasos en que la troea al raer
quede pegada al suelo, el ayudante puede ravar un huero, ron el fin
de permitir el paso de la rabeea del estrobo.
O77
4. En el patio de almarenamiento, el trartorista desengrana el guin–

rho, soltando la troea. En seguida, el ayudante hare el desengrane
del estrobo (Figura 6a). Inmediatamente, el trartorista arriona el
guinrho para enrollar el rable. Por nltimo, las troeas son roloradas
apiladas en el patio de manera que permita el movimiento de las
máquinas y ramiones. Las troeas quedarán almarenadas en el patio
hasta ser transportadas para los aserríos (Figura 6b).
a. Desengranaje del estrobo. b. Apilamiento de las troeas.
La operarión es repetida hasta que todas las troeas de la ramifirarión Figura 6.

hayan sido arrastradas. En raso de que una troea haya sido destroeada Desengra–
en dos o más pedaeos, el trartorista debe regresar al mismo rlaro para naje y apila–
retirarla. miento de
El ayudante del patio, además de harer el desengranaje, puede medir las troeas.
las troeas y llenar las hojas de rontrol de produrrión de arrastre.
Para las operasiones que utili£an trastor de estera, a su ve£, se reso-
mienda un equipo de dos personas (un trastorista y un ayudante). En
este saso, el ayudante puede engranar la tro£a en el interior del bosque
y desengranarla en el patio.
kITUAGIONEk EkPEGIFIGAk DE ARRAkTRE

ki5uasión l. Árbol saído en el samino de arras5re
ke deben remover los árboles raídos naturalmente a lo largo de la
ruta del trartor. Para este fin, el árbol debe estar destroeado romo
muestra la Figura 7.
llO
Figura 7. ki5uasión 2. Tosones difisul5ando el guinshamien5o

Remorión En algunos rasos, los torones de los árboles quedan entre la troea y la
de los
obstárulos.
direrrión de arrastre, difirultando el guinrhamiento. El enganrhe de la
troea debe, por lo tanto, permitir que esta se ruede fárilmente y salga
por uno de los lados del torón. Para eso, el ayudante, en el momento
Figura 8.
de enlare del estrobo, orienta la “rastaña“ al máximo para el lado
Gómo guin–
rhar la troea opuesto del rodamiento de la troea (Figura 8). En troeas ron tablones,
próxima al el rable del trartor debe pasar por debajo de uno de los tablones en el
torón. mismo lado donde está la “rastaña“.
a. Rodando la troea para el lado. b. Cuinrhamiento.

O99
ki5uasión 3. Árboles y 5osones difisul5ando el arras5re

ki entre el trartor y la troea a ser guinrhada existen torones y árboles,
es neresario moverlo lateralmente desviándolo de estos obstárulos
(Figura 9). ke utiliea un árbol (diámetro mayor que 25 rm y sin valor
romerrial) romo apoyo para la desviarión. El rable prinripal del trartor
debe desviarse haria el “árbol de apoyo“ esrogido, para ser amarrado
en la troea (la. etapa). En seguida, el trartorista arriona el guinrho de
manera tal que la troea se mueva lateralmente hasta quedar libre de
los obstárulos. Posteriormente, el rable prinripal es desronertado de
la troea, quedando libre para jalar la troea (2a. etapa). Por nltimo, el
guinrhamiento es realieado normalmente.
OBkTÁGULO l a ETAPA 2a ETAPA

Torón Árbol sin valor romerrial Árbol de valor romerrial Figura 9.
Operarión
para desvia–
PREVENGIÓN DE AGGIDENTEk rión de tro–
La gran mayoría de los arridentes ron heridas graves o mortales en la eas de obstá–
explotarión maderera, son rausados por la falta de rumplimiento de las rulos duran–
normas de seguridad, esperialmente en ruanto al mantenimiento de te el guin–
los equipos (ronsultar manual del fabrirante). rhamento.
Guidados en la operasión de las maquinarias

• kólamente el equipo de arrastre debe permanerer en el área duran–
te las operariones.
• El trartorista no debe operar el trartor ruando hay personas en la
parte posterior o al frente del mismo.
• Parquear el trartor en superfirie plana. En raso de que sea neresa–
rio, parquear en terreno inrlinado, utiliear una ruña para garantiear
el parqueo del trartor.
• Utiliear el freno de parqueo y poner la palanra de transmisión en
posirión neutral.
• Bajar todos los arresorios.
llllO
Equipos de seguridad de uso obliga5orio

• Gasros.
• Botas ron punta de arero.
• Bueo ron rolores fosforesrentes para el ayudante.
• Cuantes para manejar los rables.
Prevensión son5ra insendios y quemaduras

• No fumar en el momento de abasterimiento del tanque o almarén
de rombustible.
• No derramar rombustible sobre las partes elértriras del motor del
trartor raliente.
• Insperrionar el nivel de agua del radiador ron el motor desronerta–
do. En raso de que sea neresario harer un rhequeo del motor, es–
perar que se enfríe la tapa del rilindro de abasterimiento hasta po–
der removerlo. Cire la tapa lentamente hasta disminuir la presión.
GONGLUkIÓN
El tipo de equipo y las térniras empleadas para el arrastre en la
explotarión manejada (guinrho ron torre y sistema de enganrhe
ron rables, estrobos y “rastañas“) asoriados a térniras de raída
orientada, garantiean una mayor efirienria en las operariones y
menor imparto en el bosque.
El uso del guinrho ron torres, permite que la maquinaria quede en
promedio a l7 metros de la troea a ser arrastrada. La menor pene–
trarión del trartor hare que en el bosque se reduera la rantidad de
ramifirariones, disminuyendo los daños y los rostos de arrastre.
Adirionalmente, este sistema redure el rontarto de la troea ron el
suelo, disminuyendo los daños a la rapa superfirial.
llll
ll
Gapí5ulo
9
Protessión del Bosqve
€ontra el 1vego
ll2
ll2 Bosque para Siempre
Protección del Bosque €ontra el Vuego llll3
3
PREkENTAGIÓN
El bosque Amaeóniro ha sufrido grandes transformariones debido a la
oruparión reriente de la región. ku paisaje natural es un mosairo rom–
puesto por bosques intartos, bosques explotados para fines madere–
ros, matorrales (“rapoeiras“), mejoras (“rapinas“) y pasto (Figura l).
Figura l.
Mosairo del paisaje regional:
ke destaran los bosques explo–
tados.
Bosque explotado
Pasto
Bosque Virgen
Rora
El bosque virgen en la Amaeonía posee un dosel rasi rerrado que pro–

tege el suelo y el sotobosque rontra la inridenria de la lue solar. Esto
hare que se mantenga siempre verde y hnmedo, raramente orurren
inrendios en este bosque. kin embargo, en rasos más severos, romo
orurre durante los años de El Niño, el bosque puede perder la rapari–
dad de mantenerse inmune al fuego. Por otro lado, las áreas de bosque
explotado, matorrales, áreas para rultivo y pasto son susreptibles al
fuego. En estas áreas, el fuego puede surgir de diversas maneras, in–
rluso por medio de un rayo, quemas para el establerimiento del pasto
o de rultivos, arridentalmente o ann de forma rriminal.
GOMPORTAMIENTO DEL FUEkO

EN DIFERENTEk AMBIENTEk
• Pasto: Durante el verano, las plantas bajas seras y el pasto se trans–
forman en un gran depósito de material inflamable. En algunos rasos,
basta ron uno o dos días sin lluvia para que el pasto se prenda. La
ignirión puede ser iniriada por medio de un fósforo prendido, o ann por
medio de la quema en área verina (Figura 2).
• MatorraL (“Capoeira”): Los matorrales que haren límite ron los pas–
tos son menos susreptibles al fuego, debido a que existe menos ranti–
dad de material inflamable. Adirionalmente, este material está menos
llll4
expuesto al sol. De esta manera, son neresarios, por lo menos, de una

a dos semanas sin lluvia para que sean rreadas rondiriones favorables
a inrendios.
No obstante, al final del verano, es romnn observar grandes extensio–
nes de matorrales afertados por el fuego que se inirió en el pastieal. La
alta temperatura de los inrendios sera rápidamente las áreas límites
entre estos dos ambientes (Figura 2).
PAkTIZAL MATORRAL BOkQUE EXPLOTADO BOkQUE VIRkEN

(l - 2 días para (l-2 semanas (l-3 semanas para (muy bajas posibili-
insendiarse) para insendiarse) insendiarse) dades de insendio)
Figura 2. • Bosque expLotado: Los rlaros, formados por la raída de los árboles, y
Gomporta– la apertura de las vías y patios en la explotarión maderera generan
miento del diferentes ambientes ron áreas interraladas de manrhas de bosque.
fuego en La raída de dos o más árboles en un solo lugar, por ejemplo, genera
diferentes rlaros grandes (mayores que 300 m2), donde, generalmente, hay una
ambientes. gran arumularión de material inflamable y alta inridenria solar. En este
ambiente, los inrendios pueden orurrir después de una semana sin llu–
via en el verano, mientras que en los rlaros pequeños (menores que
l50 m2), rreados por la raída de un nniro árbol, el fuego puede orurrir
solamente después de dos o tres semanas sin lluvia (Figura 2).
Dentro del área de explotarión quedan “manrhas de bosques“ (áreas
que no fueron explotadas porque no tenían árboles de valor romerrial).
En este ambiente, la rapa orgánira se sera de manera más lenta y,
generalmente, neresita un verano de un mes para que el fuego pueda
penetrar. Hay que rerordar que los veranos de uno a dos meses son
romunes en la Amaeonía Oriental.
5
IMPAGTO DEL FUEkO EN EL BOkQUE EXPLOTADO

El fuego en el bosque explotado rausa la pérdida de madera de valor
que podría ser aproverhada en roserhas futuras. Investigariones reali–
eadas por el IMAZON ronstataron que los inrendios en un bosque ex–
plotado, generalmente, orasionan la muerte del 45% de los árboles
remanentes ron DAP mayor que l0 rm durante el año y medio siguien–
te al inrendio (Figura 3).
Adirionalmente, los inrendios en el bosque pueden destruir las plántu–
las de las esperies romerriales (regeneradas naturalmente o planta–
das) y, de esta manera, pueden afertar la raparidad produrtiva del
bosque. Posterior al fuego, la regenerarión predominante es formada
por árboles pioneros sin valor eronómiro, por ejemplo, la “embauba“
(Gesropia sp.) y el “larre“ (Vismia sp.).
ANTEk DEL FUEkO DEkPUEk DEL FUEkO
MEDIDAk PARA PROTEkER Figura 3.

EL BOkQUE EXPLOTADO DEL FUEkO Bosque an–
tes y des–
Es posible evitar la orurrenria de inrendios en el bosque explotado a pués del
través de tres medidas: fuego.
• Adoprión del manejo forestal (esperífiramente, medidas para redurir
la apertura del dosel y el volumen de madera dañada).
• Rompe – fuego (natural y areras).
• Explotarión de rodales interralados.
Manejo fores5al
Las térniras de manejo forestal, tales romo la planifirarión de las vías
y ramifirariones de arrastre, rorte orientado y rorte de lianas reduren
la apertura del dosel y disminuyen el tamaño de los rlaros. De esta
manera, hay menos material inflamable y una menor inridenria solar
sobre el bosque explotado, reduriendo el riesgo de inrendio.
llll6
Un estudio del IMAZON mostró que el tamaño de la apertura del dosel

en el bosque es 50% menor en la explotarión manejada, que en la
explotarión romerrial. Gonseruentemente, el nnmero de días a lo lar–
go del año en que el bosque es rapae de inrendiarse, es murho menor
que en la explotarión manejada.
kis5ema de rompefuegos
ke pueden establerer dos tipos de rompefuegos para la proterrión del
bosque: el rompefuego natural y la arera. La implementarión de rom–
pefuegos representa una inversión pequeña romparada ron las pérdi–
das que el fuego rausa. El rosto se resume al valor de mantener una
faja de bosque, en el raso del rompefuegos natural, y en algunas horas
de uso del trartor en raso de la arera.
Para implementar un rompefuegos natural, se debe mantener intarta
una faja de bosque virgen entre las aperturas (pastieal y áreas mejora–
das para rultivo) y el bosque explotado. La faja de bosque virgen debe
tener un mínimo de l00 metros de largo. La Figura 4 muestra que el
fuego en los pastieales no llega a las áreas explotadas, ya que el bos–
que virgen, en virtud de su dosel rasi rerrado, se mantiene hnmedo,
resistiendo a la entrada del fuego.
En raso de que el fuego amenare invadir el bosque, se puede retirar el
Figura 4. material inflamable del suelo (hojas seras, ramas pequeñas), utiliean–
Rompefuego do esrobas de lianas para limpiar una faja de aproximadamente l me–
natural. tro de largo. Esta limpieea difirulta la propagarión del fuego.
Pas5ieal en llamas Faja de pro5essión Bosque explo5ado

7
Guando no hay una faja de bosque virgen alrededor del bosque explo–
tado se puede ronstruir una arera, o sea, una faja sin ningnn tipo de
vegetarión (3 a 5 metros de anrho), en el margen del área explotada.
ke debe mantener siempre limpia la arera para que sea ntil romo pro– Figura 5.
terrión permanente (Figura †). En el raso de los matorrales, eliminar Uso de la
los árboles ron altura mayor que el anrho de la arera, ubirados en el arera romo
límite entre los dos ambientes, para que estos no sean rondurtores de barrera ron–
fuego en el raso de inrendios. tra el fuego.
Pas5ieal en llamas Asera Bosque explo5ado
Explo5asión de rodales in5ersalados

La explotarión de rodales interralados ronsis–
te en explotar rodales que no sean verinos en
lº 7º 2º 8º
rada año (ver sómo ordenar rodales en el Ga-
pítulo l). Por ejemplo, en un ronjunto de l2
rodales, rada rodal debe ser explotado por lo 9º 3º lOº 4º
menos dos años después de la explotarión de
sus verinos (Figura 6), pues pasado este pe–
ríodo, el bosque vuelve a formar ambientes 5º llº 6º l2º
rerrados que difirultan la penetrarión de la lue
Figura 6.
y aumentan la humedad, generando de esta
Explotarión
manera, una barrera natural rontra el fuego. interralada
de rodales.
llll8
GONGLUkIÓN
Los bosques explotados sin planifirarión en la Amaeonía, al rontra–
rio de los bosques vírgenes, son susreptibles al fuego. La apertura
de rlaros grandes romunes en este tipo de explotarión, permite el
aumento de la inridenria solar sobre el piso del bosque, serando el
material inflamable allí depositado.
Para impedir que los bosques explotados para fines madereros sean
afertados por el fuego, es aronsejable utiliear térniras de manejo
que favoreeran la redurrión de la apertura del dosel en el bosque,
así romo adoptar medidas para ronservar áreas de bosque virgen
al lado de bosques explotados, tales romo la implementarión de
rompefuegos y la explotarión de rodales interralados.
ll9
ll
9
Gapí5ulo
lO
Prástisas Silvisvltvrales
l2O
l2O Bosque para Siempre
Prácticas Silviculturales ll2
2ll
PREkENTAGIÓN
Uno de los objetivos del manejo forestal es garantiear la rontinuidad de
la produrrión maderera a través del estímulo a la regenerarión natural
en los rlaros y la proterrión de la reserva de árboles remanentes (DAP
entre l0 y 45 rm). Para este fin, se debe ronservar árboles semilleros
en el bosque y utiliear térniras para redurir los daños erológiros de la
explotarión. No obstante, es posible que en algunos rlaros, la regene–
rarión natural posterior a la explotarión sea esrasa8. En este raso, es
neresario efertuar la siembra de plántulas para garantiear la regenera–
rión. Adirionalmente, los árboles remanentes pueden estar en rondi–
riones desfavorables al rrerimiento (por ejemplo, sombreados por ár–
boles sin valor romerrial). El rrerimiento de estos árboles puede ser
aumentado ron la aplirarión de tratamientos silvirulturales.
kIEMBRA DE EkPEGIEk DE VALOR MADERERO

kiembra de espesies en slaros
La siembra en rlaros abiertos por la explotarión puede ser realieada por
semillas dirertamente en el suelo o a través de plántulas (preparadas
en viveros o rolertadas en el bosque). Los rlaros deben ser mayores
que 200 m2, para garantiear la entrada de lue y favorerer el rrerimiento
de las plántulas (Figura l).
Las reromendariones para la siembra en rlaros son las siguientes:
l. kembrar de tres a ruatro plántulas para rada árbol adulto extraído.
2. kembrar en el inirio de la estarión lluviosa.
3. Utiliear la parte rentral del rlaro, exrluyendo apenas alrededor de 5
metros de los bordes, para que las plántulas se benefirien de la
mayor rantidad de lue posible.
4. kembrar las esperies que se dan en el propio bosque, ya que estas
están adaptadas al terreno. La esrogenria de las esperies exótiras
(originarias de otros tipos de bosque) debe ser restringida a las es–
peries que obtuvieron arreso en las siembras similares.
5. En un mismo rlaro, sembrar apenas individuos de la misma esperie
o de esperies ron tasa de rrerimiento similar. De esta manera, los
árboles rrererán de tal manera que podrán ser explotados en la mis–
ma épora.
6. Mantener la diversidad sembrando esperies diferentes en los rlaros
(una esperie por rlaro).
8
La evaluarión del nivel de regenerarión es obtenida a partir del levantamiento en parrelas
permanentes, realieado en uno o dos años, posterior a la explotarión maderera.
a. Glaro pequeño: sesa el sresimien5o vigoroso.
b. Glaro adesuado: sresimien5o vigoroso.
Individuo de valor romerrial plantado. Lue solar
Figura l. kiembra de enriquesimien5o en área de bosque juvenil

Grerimiento La siembra de enriquerimiento ron esperies de valor romerrial es re–
en funrión romendada para las manrhas de bosque juvenil (dominadas por árbo–
del tamaño les ron DAP entre 5 y l5 rm), donde la densidad de esperies de valor
del rlaro. romerrial es baja (por ejemplo, orupando menos del 30% del área).
La Fundarión “Floresta Tropiral“ ha probado una térnira esperífira de
siembra para estas áreas, que ronsiste en: &) Preparar el área rortando
la vegetarión existente en la poblarión juvenil (en general, inferior a l
hertárea) ron un trartor de estera. El proredimiento es el mismo adop–
tado para la apertura de patios, no obstante, se evita raspar el suelo. b)
kembrar mudas de árboles de valor romerrial siguiendo las instrurrio–
nes adoptadas para la siembra en rlaros.
TRATAMIENTOk PARA AUMENTAR EL GREGI-

MIENTO DE LOk ÁRBOLEk DE VALOR GOMERGIAL
El rrerimiento de los árboles de valor romerrial depende del nivel de
rompetenria por nutrientes, agua y lue ron los árboles sin valor romer–
rial. Los tratamientos silvirulturales son aplirados para redurir o elimi–
nar esta rompetenria, favoreriendo el aumento del rrerimiento de ár–
boles.
ke pronostira que el período de rrerimiento hasta la roserha ron trata–
mientos sea la mitad de los sin tratamientos (Tabla l). El intervalo de
tiempo de rada proyerrión es largo, una vee que hay difirultad de ela–
borar una proyerrión exarta de la tasa de rrerimiento de los árboles.
Por ejemplo, después del primer rorte, el período para realiear la próxi–
ma explotarión osrila entre 20 y 40 años para árboles ron DAP entre
225 y 45 rm.
Tipos de poblasiones Tiempo has5a la sosesha (años) 6
(DAP en sm) kin 5ra5amien5olO Gon 5ra5amien5oll
Glaros (menor que 5 rm) l30 – l40 65 – 70

Juvenil l20 – l30 60 – 70
Juvenil – intermedio (l5 – 25) l00 – ll0 50 – 60
Intermedio (25 – 45) 50 – 70 20 – 40
Tra5amien5os en los slaros Tabla l.

El estímulo al rrerimiento de las plántulas y árboles pequeños de valor Proyerrión
romerrial en los rlaros puede ser realieado de la siguiente manera: del nnmero
• Limpieza: La vegetarión existente en un radio de 2 a 3 metros de los de años has–
árboles de valor romerrial debe ser eliminada antes que alranre l,5 ta el rorte de
árbol de
metro de altura, lo que generalmente orurre entre el primer y el ruarto
aruerdo ron
año, posterior a la explotarión maderera (Figura 2). Esta variarión en el las etapas de
tiempo es rausada por la heterogeneidad del ambiente forestal, de la desarrollo y la
intensidad de la explotarión maderera, del tipo del bosque (denso de aplirarión o
tierra firme, abierto, vareea, etrétera) y de la rlase de suelo (latosol no de trata–
amarillo, tierra roja, etrétera). mientos silvi–
rulturales.
6
ke asume que el DAP mínimo de rorte es de 45 rm.
l0
ke asume que el rrerimiento diamétriro promedio anual es de 0,35 rm.
ll
ke asume que el rrerimiento diamétriro anual es alrededor de 0,6 rm.
a. Gompe5isión en5re las plan5as b. Limpieea en 5orno de los árboles

de valor somersial
Arboles de valor romerrial Arboles sin valor romerrial
Figura 2. La limpieea ron aeadón es realieada de la siguiente manera:

Limpieea l. Ubirar los rlaros en el bosque a partir del mapa de explotarión.
alrededor de 2. kelerrionar las esperies de valor romerrial.
las plantas de 3. Limpiar ron una hoe o marhete la vegetarión existente alrededor de
valor romer–
las plantas selerrionadas.
rial
• Desbaste: Donde la densidad de esperies de valor romerrial es muy
alta, se puede harer un desbaste (selerrión de plantas), eliminando el
exreso de plantas de valor que no tendrán espario sufiriente para rre–
rer. Aunque no existan estudios indirando la distanria ideal entre plan–
tas de la misma esperie, se reromienda un espario de 5 metros entre
las esperies de plantas de rrerimiento rápido y 3 metros para las de
rrerimiento lento.
• Pvitando ramiƒicación: Algunas esperies de árboles de valor romer–
rial tienden a ramifirar exresivamente (Figura 3a). La ramifirarión re–
dure o puede eliminar el valor romerrial de los árboles. Una manera de
eliminar la ramifirarión es inhibir el retoño del árbol. Para eso, se man–
tienen, alrededor de su ropa, plantas verinas rapares de proyertar una
sombra sobre su tronro (esperífiramente sobre las yemas laterales),
evitando, de esta manera, el retoño (Figura 3b).
a. Equivosado: bifursasión por fal5a de sombrío de las yemas.
b. Gorres5o: 5ronso res5o debido al sombrío de las yemas
Figura 3.
Limpieea para
esperies ron
tendenria a la
ramifirarión.
Tra5amien5os para aumen5ar el sresimien5o en la fase

juvenil e in5ermedia
Para arelerar el rrerimiento de los árboles de valor romerrial existen–
tes en la poblarión juvenil (árboles ron DAP inferior a l5 rm), juvenil –
intermedio (l5 a 25 rm) e intermedio (25 a 45 rm) se pueden eliminar,
selertivamente, los individuos sin valor romerrial (árboles y lianas)
ubirados alrededor de los árboles de valor romerrial. (El Apéndire l
presenta la lista de esperies de valor romerrial).
La selerrión de los árboles a ser benefiriados para el segundo rorte
(por ejemplo, DAP mayor que 30 rm) es realieada ron base en los datos
del renso forestal. Las plantas que eran sombreadas antes de la ex–
trarrión deberán ser visitadas para la aplirarión del tratamiento. Para
los árboles ron DAP menor que 30 rm, se puede elaborar un renso
simplifirado, en el rual se mide apenas el DAP, se identifira la esperie
y se anota su ubirarión (rodal y faja) dirertamente en el mapa del
renso ron un símbolo esperífiro.
¿Gómo eliminar los árboles sin valor somersial?

La eliminarión de los árboles sin valor, para promover el rrerimiento
de los árboles de valor romerrial puede ser realieada a través de un
rorte (tala) en el raso de árboles pequeños (DAP menor que l5 rm) o
anillamiento (retirada de una faja de la rorteea del tronro del árbol)
para árboles medianos (DAP entre l5 y 45 rm) y grandes (DAP mayor
que 45 rm).
El anillamiento es el método más utilieado para eliminar lentamente los
árboles sin valor romerrial. Esta térnira es más ventajosa que la tala,
una vee que el árbol muere lentamente, reduriendo de manera signifi–
rativa los daños típiros de raída de un árbol en el bosque. Existen dos
tipos de anillamiento:
√. AniLLamiento senciLLo: Utilieando un marhete pequeño, se retira una
faja de l0 rm de anrho de la rorteea del tronro (en la altura del DAP
del árbol). Para garantiear la eliminarión, se hare un pequeño rorte en
la base del tronro anillado (Figura 4a).
2. AniLLamiento especiaL: ke utiliea el mismo proredimiento del anilla–
miento senrillo, no obstante se adiriona “areite quemado“ (areite lu–
brirante usado), rombinado o no ron plaguirida (Figura 4b).
Figura 4. El proyerto de manejo forestal del INPA (Proyerto Bionte) ha obtenido
Anillamiento 80% de efirienria en el anillamiento utilieando apenas “areite quemado“.
senrillo y es– Luego de la retirada de la rorteea, los árboles se mueren entre el pri–
perial mer y segundo año, dependiendo de la esperie y del tipo de anilla–
miento. El anillamiento ron
a. Anillamien5o sensillo “areite quemado“ produre
una muerte más rápida.
Para utiliear el anillamiento
esperial es neresario evitar
rontaminarión en el bosque,
entrenar el personal y utili–
ear equipos aderuados.
El anillamiento debe ser
realieado, preferiblemente,
en la estarión sera, ya que
en este período los árboles
están menos vigorosos de–
bido a la esrasee de agua,
lo que los hare más vulne–
b. Anillamien5o espesial rables al anillamiento.
Anillamien5o: haser o no haser

Aunque existan ventajas en aplirar el anillamiento para promover
el rrerimiento de árboles de valor romerrial, es neresario destarar
posibles impartos negativos de esta prártira. El anillamiento puede
redurir la diversidad de esperies arbóreas en el área manejada.
Adirionalmente, la fauna puede ser perjudirada, ya que algunas de
estas esperies anilladas funrionan romo abrigo y fuente de alimen–
to. Finalmente, algunas esperies rlasifiradas romo sin valor ro–
merrial en el presente, pueden tener valor en el futuro. En este
raso, la eliminarión signifiraría una pérdida eronómira.
Fresuensia de aplisasión de los 5ra5amien5os para

aumen5ar el sresimien5o
Para mantener el rrerimiento más elevado a lo largo del tiempo es Tabla 2.
Año probable
neresario repetir los tratamientos en la medida que aumente la rompe–
para aplira–
tenria entre las plantas. La tabla 2 presenta una proyerrión de la pro–
rión de los
bable freruenria neresaria de tratamientos, de aruerdo a la etapa de tratamientos
desarrollo de la poblarión. Por ejemplo, las poblariones jóvenes (árbo– silvirulturales
les ron DAP entre 5 y 25 rm) posiblemente neresitan de tratamientos de aruerdo
dos veres antes del rorte de los árboles, mientras que para poblario– ron el desa–
nes intermedias (25 a 45 rm) apenas un tratamiento es sufiriente rrollo de la
(Tabla 2). poblarión.
Tipos de Poblasiones Año de aplisasión de los 5ra5amien5os l2

(DAP en sm) Limpieea Desbas5e Gor5es de lianasl3
Glaros (menor que 5) l y2 l0 y 20 l0 y 20
Juvenil (5 – l5) l y l5 l y l5
Juvenil – intermedia (l5–25) l y 20 l y 20
Intermedia (25 –45) l l
l2
El año rero sería el inirio del manejo del área.
l3
Ver Gapítulo 3 (rorte de lianas).
GONGLUkIÓN
Es neresario garantiear la regenerarión del bosque luego de la ex–
plotarión. Una medida es la siembra en rlaros, donde la regenera–
rión natural es esrasa. Pueden ser aplirados tratamientos para au–
mentar el rrerimiento de los árboles de aruerdo ron el desarrollo
del bosque, inrluyendo la limpieea de rlaros, rorte de lianas y el
desbaste alrededor de los árboles juveniles e intermedios. No obs–
tante, la viabilidad eronómira de los tratamientos para aumentar el
rrerimiento debe ser evaluada raso por raso.
l29
l
29
Gapí5ulo
ll
€ostos y Benefisios
del Manejo
1orestal
Genso
Gorte de lianas
Planeamiento Arrastre
l3O
l3O Bosque para Siempre
€ostos y Beneficios del Mane¡o Vorestal ll3
3ll
PREkENTAGIÓN
Los rostos y benefirios del manejo presentados en este rapítulo, se
basan en el “Proyerto Piloto de Manejo Forestal“ (IMAZON/WWF), en
Paragominas, Pará. El área de estudio (bosque denso de tierra firme)
presenta una topografía plana (inrlinarión inferior a 5 grados) y una
densidad de l7 árboles mayores que 45 rm de DAP (diámetro a la
altura del perho) por hertárea, de los ruales l3 tienen valor romerrial.
De este total, apenas 5 árboles (40 m3/ha) fueron extraídos por hertá–
rea.
Este rapítulo presenta los rostos asoriados al plan operarional de ma–
nejo. En seguida, se desrriben los benefirios originados en el manejo
en términos de produrtividad, redurrión de desperdirios de madera y
disminurión de los daños erológiros al bosque. Finalmente, integra estos
benefirios en el análisis eronómiro de rorto y mediano plaeo.
GOkTOk DEL MANEJO FOREkTAL

• PLaboración deL PLan de Manejo: El rosto de la rerolerrión de informa–
rión, análisis y redarrión del Plan de Manejo varía en funrión del tama–
ño del área a ser manejada. En la Amaeonía Oriental, el valor promedio
es de Uk$l,0 por hertárea para áreas de manejo alrededor de 7.500
hertáreas. Adirionalmente, hay un rosto de revisión previa del IBAMA
(Instituto Brasileiro del Meio Ambiente – entidad ambiental del Brasil)
estimado en Uk$l,7 por hertárea (Tabla l).
• Censo ƒorestaL: Para delimitar el rodal, abrir las trorhas de orientarión
y harer el renso de árboles, son gastados en promedio Uk$22 por her–
tárea, de los ruales Uk$l,8 son para delimitar el perímetro del rodal,
Uk$6,5 para apertura de trorhas y finalmente, Uk$l0,3 para evaluar y
mapifirar los árboles (Tabla l).
• Corte de Lianas: El rorte selertivo de lianas debe ser realieado por lo
menos l8 meses antes de la explotarión. El rosto varía en funrión de
la densidad de lianas en el bosque. En el raso de Paragominas, donde
la densidad de lianas era alta (750 individuos, mayores de 2 rm de
diámetro por hertárea) el rosto de rorte de lianas fue alrededor de
Uk$l6 por hertárea (Tabla l).
• ConsuLtoría: Es romnn rontratar los servirios de ofirinas de ronsulto–
rías forestales para analiear los datos del renso y produrir el mapa de
explotarión. El rosto de este servirio varía murho. Para la región de
Paragominas, el rosto promedio fue de Uk$ 3.500 para un área de
manejo alrededor de 250 hertáreas, o Uk$ l4 por hertárea (Uk$ 3.500/

250 ha.) (Tabla l).
• DeLimitación: La delimitarión de las vías, patios y ramifirariones de
Tabla l. arrastre, así romo de la direrrión de raída de los árboles a ser extraí–
Estimarión dos son realieados antes de la explotarión. En Paragominas, el rosto
de los rostos promedio de esta artividad fue de Uk$ l4 por hertárea (Tabla l).
de manejo
• Costos de manejo totaL: ke estimó que el rosto total del manejo en
forestal (ex–
Uk$ 72 por hertárea (Tabla l), o aproximadamente Uk$ l,8/m3 de troea
rluyendo los
rostos de pos extraída, ronsiderando un volumen promedio explotado de 40 m3 por
explotarión), hertárea (Uk$ 72/40 m3 /ha).
Proyerto Pi– Es importante subrayar que el rosto del manejo varía de aruerdo ron el
loto de Ma– tipo de bosque. Por ejemplo, para un bosque ron baja densidad de
nejo Forestal, maderas de valor romerrial (20 m3/hertárea), el rosto sería de Uk$
Paragominas, 3,6/ m3 (Uk$ 72/20 m3), o el doble del rosto estimado en el área de
Pará, l666. estudio.
Valor en Uk$/ha
Éposa de As5ividad
En el
desembolso desembolsol4 En el sor5el5
l8 meses antes Elaborarión del
plan de manejo 0,6 l,0
Genso Iorestal:
l2 meses antes – Demarrar rodall6 l,7 l,8
– Abrir trorhas de orientarión l7 8,8 6,5
– Mapifirarión de los árbolesl8 6,4 l0,3
l8 meses antes Gorte de lianasl6 l7,5 l6,0
l2 meses antes Tasa de revisión previa20 l,6 l,7
06 meses antes Gonsultoría para análisis de los
datos y elaborarión del mapa
de explotarión l3,4 l4,0
Durante la explotarión Demarrarión de la explotarión 2l l5,0 l5,0
TOTAL 68,3 72,3
l4
Gostos expresados en la épora del desembolso. Ver anotarión 2 para estimarión del
valor presente. Los valores se refieren al dólar amerirano en el rambio ofirial. El rosto de
la mano de obra inrluyó el valor del salario mínimo (Uk$ ll2/mes), así romo las prestario–
nes soriales y benefirios (Uk$ 50), totalieando Uk$ l62/mes o Uk$ 7,4/día (Uk$ l62/22 días
de trabajo en el mes). El gasto ron alimentarión por persona fue estimado en Uk$ 2,
inrluyendo alimentos, gas y salario de rorinera. ke adirionó el equivalente al l0% de estos
gastos para la parte administrativa.
BENEFIGIOk DEL MANEJO FOREkTAL

La adoprión del manejo forestal, da romo resultados, entre otros, una
redurrión de desperdirios, aumento en la produrtividad de la explota–
rión, disminurión de la rantidad de árboles romerriales damnifirados y
mejoría signifirativa en la seguridad del trabajo.
• Reducción de desperdicio de madera en La taLa ç arrastre: Las pérdidas

de madera en el volumen tumbado fueron reduridas en 26% sin manejo
para apenas l% en área manejada. Por tanto, para l m3 en troea extraí–
da en un bosque manejado, apenas el 0,75 m3 es extraído en una ex–
plotarión ronvenrional. Utilieando este rariorinio, se estima que fueron
salvados l0 m3/ha ron manejo (Tabla 2).
l5
Muestra el valor presente de los rostos en la épora de la explotarión, ronsiderando tasas
de interés del 8% al año y el nnmero de meses pasados entre rada una de las artividades
de manejo y la épora de la explotarión.
l6
Para delimitar 250 hertáreas de bosque por año, serían abiertos 6.330 metros de trorhas,
o 25 m/ha (6.330 m/250 ha). Un equipo de rinro personas delimita, en promedio, l70 m/
hora a un rosto de Uk$ ll,5. Por tanto, el rosto total sería de Uk$ l,7/ha (Uk$ ll,5/l70 m x
25 m/ha).
l7
Fueron abiertos alrededor de l73 metros de trorha por hertárea. El equipo de trabajo
rompuesto por un balieador y dos ayudantes abrió, en promedio, l70 metros de trorhas
por hora. El rosto de este equipo fue de Uk$ 7,7/hora. Por tanto, el rosto total de la mano
de obra fue de Uk$ 7,6/ha (Uk$ 7,7/l70 m x l73 m). El rosto de depreriarión de los
materiales utilieados (brnjula, trípode, rinta métrira, marhete, rintas roloridas) sumó Uk$
0,6/ha. De esta manera, el rosto total fue de Uk$ 8,8/ha.
l8
El rosto para identifirar, evaluar y mapifirar los árboles, ronsiderando un anotador (3
salarios), un baquiano identifirador (3 salarios) y dos ayudantes (l,5 salarios rada), fue de
Uk$ 8,0/ha. Los rostos de materiales para delimitarión de los árboles (puntillas y plaque–
tas) fueron Uk$ l,4/ha), totalieando, por lo tanto, Uk $6,4/ha.
l6
Para rortar las lianas presentes en l hertárea de bosque fueron neresarias l0,3 horas/
hombre a un rosto hora de Uk$l,7. Por lo tanto, el rosto por hertárea fue de Uk$ l7,5 (l0,3
horas x Uk$ l,7 por hora).
20
El IBAMA (“Instituto Brasileiro do Meio Ambiente“ – entidad ambiental ofirial de Brasil)
robró Uk$l,7 por hertárea para las tasas de rhequeo previo.
2l
Fueron gastados 0,003 jornales por hertárea para delimitar las rarreteras y 0,27 jornales
para orientar la delimitarión de las ramifirariones de arrastre, patios de almarenamiento y
ajustar la direrrión de raída de los árboles. El rosto del equipo fue Uk $48 por día,
inrluyendo el orientador (3 salarios) y dos ayudantes (l,5 salario rada). El rosto de delimi–
tarión de la vía por hertárea fue de Uk$l,4 (0,03 día equipo/ha x Uk$ 48 día equipo). El
rosto de la orientarión de la tumba, delimitarión de las ramifirariones y patios fue de Uk$
l3 (0,27 día equipo/ha x Uk$ 48 día/equipo). Para la delimitarión de la explotarión fueron
gastados rerra de 30 metros de rinta plástira rolorida/ha a un rosto de Uk$ 0,5 que,
sumados a los rostos de mano de obra, totaliean aproximadamente Uk$ l5/ha.
Pérdida en % del volumen 5umbado

Tipo de desperdisio
Manejado (%) Gonvensional (%)
Error en la altura de la tala y tumba 0,0 0,7
Hendiduras l,0 4,0
Error en el despunte 0,0 2,3
Troeas no ubiradas por el equipo de arrastre 0,0 l6,0
Total de pérdidas en % 22 l,0 26,0
3
To5al de pérdidas en m /ha O,4O lO,4
Tabla 2. • Maçor productividad en La apertura de vías ç patios: En la explotarión

Volumen y manejada, hubo una gananria de efirienria (37%) en el tiempo de uso
proporrión de la maquinaria para abrir vías y patios de almarenamiento. Esta dife–
de madera renria ron el manejo resultó, en gran parte, de la redurrión de la den–
desperdiria–
sidad de vías (en 33%) y patios (en 70%) (Tabla 3).
da en la
explotarión Paráme5ros Manejada Gonvensional
ronvenrional
y manejada, Apertura de vías sesundarias:
Proyerto Gosto (Uk$/m3) 0,22 0,23
Piloto de Densidad (m/ha) 23,00 27
Manejo Fo– Densidad (m/ m3) 0,6 0,6
restal, Para– Tiempo (minuto maquinaria/ha) ll,6 ll,4
gominas, Tiempo (minuto maquinaria/ m3). 0,32 0,38
Pará. Apertura de patios:
Gosto (Uk$/ m3) 0,07 0,l8
Densidad (m2/ha) 6l l53
Densidad (m2/ m3) l,6 5,2
Tabla 3. Tiempo (minuto maquinaria/ha) 4,0 8,7
Produrtividad Tiempo (minuto maquinaria/ m3) 0,l 0,3
y rosto de
apertura de Total (vías y patios):
vías y patios Tiempo (minuto/ha) l6 20
en la explota– Tiempo (minuto/ m3) 0,4 0,7
rión madere– Gos5o To5al (Uk$/m3)23 O,29 O,4l
ra manejada
y ronvenrio– 22
Gonsiderando la explotarión de 40 m 3/ha.
nal, Proyerto 23
El rosto de la operarión de la maquinaria fue estimado ron base en los levantamientos
Piloto de Ma– de rampo y en los formatos e índires de Gaterpillar, inrluyendo los siguientes parámetros:
nejo Forestal, i. Vida ntil de la maquinaria (6,5 años) para un uso estimado de l.230 horas año¡ ii. Prerios
Paragominas, del trartor de estera ron guinrho (Uk$ l25.000) y sin guinrho (Uk$ l05.000)¡ iii. Valor
Pará, l666. residual de reposirión de la maquinaria igual a l0% del valor de la misma¡ iv. Tasa de
En la explotarión ronvenrional, la densidad de vías fue mayor porque

estas fueron abiertas poro a poro, siguiendo la ronrentrarión de los
árboles tumbados. Una prártira que lleva a la apertura de vías tortuo–
sas y ron ramifirariones inneresarias.
El nnmero de patios en la explotarión ronvenrional fue mayor por dos
raeones:
l. kin planearión, los operadores del trartor tienen apenas una vaga
norión del nnmero de árboles que serán extraídos de las rerranías
del patio. Por tanto, el nnmero de patios abiertos exrede lo neresario.
2. Los trartoristas prefieren abrir patios mayores para farilitar la ma–
niobra de las maquinarias y ramiones.
En la operarión manejada, los patios son menores en funrión de la
informarión previa sobre el volumen a ser extraído y también en virtud
de la planifirarión de la operarión de tala y arrastre.
Tabla 4.
• Maçor productividad en La taLa: El rosto de la tumba fue similar en los Produrtividad
dos tipos de explotarión para el raso del equipo ron dos personas: Uk$ y rostos de
0,3l/m3 ron manejo y Uk$ 0,30/m3 en la explotarión ronvenrional, tala de los
mientras que el rosto de rorte de un equipo de tres personas (dos mo– árboles ron y
sin manejo,
tosierristas y un ayudante), artuando en un área manejada, fue apenas
Proyerto Pilo–
Uk$ 0,25/m3 (Tabla 4). Esta ventaja a favor del manejo, es resultado to de Manejo
de una mayor produrtividad originada por la artuarión de los motosie– Forestal en
rristas ron funriones distintas: uno exrlusivamente en la tala y el otro en el Paragominas,
troeado de los tronros y remorión de los obstárulos para el arrastre. Pará, l666.
Tipo de operasión No. de árboles M3 5alado M3 5alado/ Gos5o

5alados/día por día hora-hombre (Uk$/m 3)
2 personas ronvenrional 22 ll7 6,5 0,30
2 personas manejo l5 l25 7,8 0,3l
3 personas manejo 34 262 l0,6 0,2524
seguro igual a 2% del valor de la maquinaria¡ v. Impuesto de propiedad igual a l% del valor
de la maquinaria ¡ vi. Gonsumo de 6,8 litros de areite diesel por hora para el trartor de
estera¡ vii. Gostos de lubrirarión, filtros y areites fueron estimados en Uk$ 0,35 /hora para
los dos tipos de maquinaria¡ viii. Gosto de reserva para repararión fue estimado en Uk$
4,5/hora (fartor de extensión de vida ntil igual a l, multiplirado por fartor básiro de
repararión igual a 4,5)¡ ix. Gosto de mano de obra para operar el trartor de estera fue
estimado en Uk$ 3,7/hora, inrluyendo un operador y un ayudante.
24
Los rostos de mano de obra fueron estimados romo está desrrito en la nota de pie de la
pagina l4 en la tabla l. Los salarios de un motosierrista (2 salarios) y un ayudante
• Maçor productividad en eL arrastre de Las trozas: Gon la

adoprión del manejo, hubo un aumento signifirativo en la produrtivi–
dad del arrastre (Tabla †). Por ejemplo, en el área manejada fueron
arrastrados 34 m3/hora rontra 23 m3/hora en la explotarión ronvenrio–
nal, utilieando en los dos rasos un trartor forestal (skidder). La diferen–
ria a favor del manejo fue menor en el raso del arrastre ron trartor de
estera (28 m3/hora y 27 m3/hora ron y sin manejo, respertivamente),
una vee que el potenrial de aumentar la veloridad de trabajo de esta
maquinaria es limitada. La gananria de produrtividad en el arrastre
orurrió debido a la planifirarión y al uso del mapa de explotarión.
Tras5or Fores5al (kkidder) Tras5or de es5era

Manejada Gonvensional Manejada Gonvensional
• Volumen (m3) halado/hora ............... 34 ............... 23 ................. 28 ....... 27

• Veloridad de desplaeamiento
sin rarga (metros/minuto) .............. ll3 .............. 80 ................. 60 .............. 63
• Veloridad de desplaeamiento
ron rarga (metros/minuto) .............. 68 ............... 73 ................. 56......... 48
• Distanria de arrastre (metros) ........ l34 ............. l56 ............... l37 ............ l57
• Volumen promedio
arrastrado/viaje (m3) ...................... 5,4 .............. 6,3 ................ 4,6 ............ 5,0
Gos5o ($/m3)25 ........................................................ l,3l ............ l,95 .............. l,4l .......... l,37
Tabla 5.
Desempeño (l salario) rostaron Uk$ 26/día. Un equipo rompuesto por dos motosierristas y un ayudan–
promedio y te rostó Uk$ 47/día. El rosto de operarión de una motosierra (ktihl modelo 05l AVE) fue
rosto de estimado en Uk$ 2,4/hora, siendo: Uk$ 0,03 en intereses de rapital, Uk$ 0,58 en depreria–
arrastre de rión, Uk$ 0,76 en rombustible, Uk$ 0,42 en areite para lubrirarión de la rorriente, Uk$ 0,20
troeas en la en depreriarión de la espada y Uk$ 0,4 para mantenimiento.
explotarión En la explotasión sonvensional, el tiempo de Iunsionamiento de la maquinaria Iue 2,4
manejada y horas/día. De esta manera, el sosto diario de uso de la maquinaria Iue Ut$ †,8 (Ut$ 2,4 x
no manejada 2,4). Entonses, el sosto total del equipo tradisional Iue Ut$ 3†/día que, dividido por la
de aruerdo produssión diaria (ll7 m3), resulta en Ut$O,3O/m3. El tiempo de uso eIestivo de una
motosierra Iue 4 horas/día para los dos equipos en la explotasión manejada. Así, el equipo
ron el tipo
son dos motosierristas tuvo un sosto de maquinaria de Ut$ l9/día (2 maquinarias x 4 horas
de maquina–
x Ut$ 2,4), en suanto el equipo son un motosierrista tuvo la mitad de este sosto son la
ria utilieada,
máquina, o sea, Ut$ 9,†/día. El sosto del equipo son dos personas Iue de Ut$ 38,† día (Ut$
Proyerto Pi–
29 son mano de obra y Ut$9,† son la maquinaria) que, dividido por la produssión de l2†
loto de Ma–
m3/día, resultó en aproximadamente Ut$ O,3l/m3 . El sosto para el equipo son tres perso-
nejo Forestal,
nas Iue de Ut$ 66/día (Ut$ 47 son mano de obra y Ut$l9 son las motosierras) que, dividido
Paragominas,
por la produssión de 262 m3/día, resultó en Ut$ O,2†/m3.
Pará, l666. 25
Los rostos operarionales del skidder fueron estimados en Uk$ 44,4/hora o
• Reducción de Los dauos ecoLógicos: La adoprión del manejo rontribuyó

de forma signifirativa para la redurrión de los daños en el bosque. Esta
redurrión fue ronsistente entre todos los indiradores utilieados para
expresar los daños de extrarrión, tales romo el área del suelo aferta–
do, la apertura del dosel y los daños a los árboles remanentes. La re–
durrión de daños tiene implirariones positivas para la regenerarión del
bosque y ronseruentemente, para el volumen de madera disponible en
el futuro. En la explotarión ronvenrional, la extrarrión de un árbol aferta
488 m2 de bosque, mientras que en la explotarión manejada aferta
apenas 336 m2 (arrastre ron trartor de estera) y 370 m2 (arrastre ron
skidder).
Figura l.
La apertura del dosel en la explotarión ronvenrional fue mayor (27 a
Gompararión
45%), romparada ron la explotarión ron manejo (apenas l8%). Lo mis–
de la densi–
mo orurrió ron relarión al nnmero de árboles dañados (DAP mayor o dad de infra–
igual a l0 rm): 27 árboles en la explotarión ronvenrional, rontra l4 estrurtura en
árboles en la explotarión manejada (Figura l). la explota–
• Maçor seguridad durante La taLa: La utiliearión de térniras aderuadas rión maneja–
y el entrenamiento del equipo de tala redujo signifirativamente (hasta da X ronven–
l8 veres) los riesgos de arridentes de trabajo. rional.
ÁREA ÁREA
MANEJADA GONVENGIONAL
Vía
Ramifirarión
de arrastre
Patio de
almarenamiento
Árbol extraído
Uk$ 0,74/minuto y los del trartor de estera fueron Uk$ 0,6l/minuto (sin guinrho) y
Uk$ 0,66/minuto (ron guinrho).
ANÁLIkIk DE GOkTOk Y BENEFIGIOk DEL MANEJO

Los sos5os y benefisios del manejo a sor5o plaeo
El rosto del manejo forestal (sin ronsiderar tratamientos silvirulturales
posteriores a la explotarión) fue, en promedio, Uk$ l,8/m3 (Tabla 6).
Tal rosto fue rompensado, ron el aumento en la produrtividad de la
explotarión y la redurrión de los desperdirios de madera.
Los rostos de rorte y de apertura de vías, patios y ramifirariones de
arrastre fueron entre Uk$ l,8/ m3 (skidder) y Uk$ l,6/ m3 (trartor de
estera), en ruanto en la explotarión ronvenrional estos rostos suma–
ron Uk$ 2,0/ m3 (Tablas 3, 4 y †).
Manejada Gonvensional26
Gos5os Uk$/O,75 m 3
Uk$/l m3
Tumba de la madera27 0,25 0,30
28
Apertura de vías serundarias 0,2l 0,l7
26
Apertura de patios 0,07 0,l3
Arrastre de troeas hasta los patios30 l,3l l,03
3l
Embarque de las troeas 2,6 l,6
Transporte hasta el aserrío32 l5,00 ll,2
Prerio de la madera en pie33 5,00 5,00
34
Gostos de manejo l,8 0,00
Otros rostos35 4,l 3,l4
Gosto total ........................................................ 30,3 .............................. 23,8
Ingreso Bruto36 ....................................................................................... 40,0 .............................. 30,0
Ingreso Líquido .................................................. 6,7 ................................ 6,2
Tabla 6. 26
En funrión de las pérdidas de madera en el rorte y arrastre ronvenrional solamente 0,75
Estimarión de m3 de madera es extraído por m3 tumbado. Para rontabiliear esta pérdida de oportunidad
rostos, ingreso de obtener el rosto de oportunidad, los rostos e ingresos de l m3 extraído (manejo) son
bruto y ga– romparados ron los rostos e ingresos de la extrarrión de 0,75 m3 (ronvenrional). En las
nanria de la notariones de pie de página abajo, a menos que sea anotado, el rosto de la explotarión
explotarión de ronvenrional fue ralrulado por m3 y después multiplirado por 0,75.
madera mane– 27
El rosto del rorte de la madera en la explotarión sin manejo fue estimado en Uk$ 0,30 /
jada y ron– m3 de aruerdo ron la Tabla 4. Este rosto sería el mismo para 0,75 m3, dado que 25% de la
venrional, madera es perdido (Tabla 2).
Proyerto Pilo– 28
En el raso de la explotarión ronvenrional, el rosto de la apertura de vías fue Uk$ 0,23/
to de Manejo m3 (Tabla 3). Este rosto, expresado por 0,75 m3 sería 0,l7 (Uk$ 0,23 x 0,75). Un rálrulo
Forestal, Para– similar fue realieado para la apertura de los patios.
26
gominas, Pará, Basado en los rostos estimados en la Tabla 5.
30
l666. Fueron ronsiderados los rostos de rargamento de troeas dorumentados por el IMAZON
en ll áreas de explotarión.
• Desperdicio de madera: El desperdirio de madera rausa dos tipos de

pérdidas eronómiras. En primer lugar, el rosto de la madera extraída
sin manejo es mayor porque un volumen menor de madera de valor
romerrial sería extraído, mientras que el prerio del dererho de explota–
rión por hertárea permanere el mismo. Para estimar esta pérdida se
ronsideró el valor promedio del dererho de explotarión en la región de
Paragominas: Uk$ l65 por hertárea. Gonsiderando el volumen explota–
ble ron manejo alrededor de 40 m3/ha, el valor de la madera en pie
sería alrededor de Uk$5/m3 (Uk$ l65/40 m3/ha). Dado que en la explo–
tarión ronvenrional 25% del volumen explotable son perdidos, se tiene
que apenas 30 m3/ha serían explotados. De esta manera, el rosto pro–
medio del dererho de la explotarión de la madera en pie en el área
ronvenrional fue de herho Uk$ 6,5/m3 (Uk$ l65/30). Por lo tanto, la
redurrión de pérdidas de madera tendría un valor en el bosque de Uk$
l,5/m3 (Uk$ 6,5/m3 – Uk$ 5,0/m3)¡ este valor equivale alrededor del
83% del rosto del manejo (Uk$ l,8 m3).
En segundo lugar, el desperdirio de madera representa una pérdida de
oportunidad de gananria por la venta de madera para la industria. La
gananria de explotarión ron manejo fue estimado en Uk$ 6,7/m3, en
ruanto la gananria de la explotarión ronvenrional quedó en apenas
Uk$ 6,2/m3 pues ruando se realiea la explotarión sin manejo es sola–
mente de 0,75 m3. Por tanto, el aumento de la gananria debido al ma–
nejo (Uk$ 3,5/m3) sería alrededor de dos veres mayor que los rostos
(Uk$ l,8/m3).
3l
Fue ronsiderado que el bosque queda a l00 km del aserrío y que e rosto de transporte
por km fue Uk$ 0,l5/m3/km, obtenido en entrevistas ron extrartores y madereras en
Paragominas en l666.
32
El valor promedio de l m3 de madera en pie para una distanria de l00 km fue de Uk$ 5/m3.
33
ke ronsideró el rosto del manejo (Uk$ 72,00, Tabla l) divido por el volumen explotado
(40 m 3 /ha).
34
Existen otros rostos asoriados ron la explotarión maderera. Por ejemplo, las vías prima–
rias son abiertas y mantenidas y un mayordomo dirige los trabajos de explotarión. ke
asumió que estos rostos serían similares para las áreas ron y sin manejo, aunque en un
esquema de manejo en larga esrala tales rostos pueden ser diferentes.
35
El ingreso del manejo sería el prerio promedio por m3 ofrerido por los madereros por las
troeas puestas en el patio del aserrío en l666.
36
El ingreso de explotarión ronvenrional fue obtenida multiplirando el prerio en m3
multiplirado por 0,75 m3 (Uk$ 40/m3 x 0,75 m3 = 30).
ll44O
La variabilidad de los sos5os y benefisios

Los rostos y benefirios de manejo varían, prinripalmente, en fun–
rión del prerio de la madera en pie y del volumen de madera ro–
merrial en el bosque.
El valor promedio de madera en pie varia en funrión de la distanria
entre el bosque y la industria maderera. En Paragominas, el dere–
rho de la explotarión de un bosque ubirado a 20 km del aserradero
valía Uk$ 300/ha. La explotarión de este bosque de forma maneja–
da produriría un ingreso líquido de Uk$ 20/m3 rontra una gananria
de Uk$ l4/m3 en la explotarión sin manejo. Por otro lado, para una
distanria de l30 km, el dererho de explotarión sería de Uk$ l25/
ha, lo que resultaría en una gananria de explotarión manejada de
Uk$ l2,8/m3 rontra Uk$ l0/m3 de la ronvenrional.
El rosto del manejo sería mayor para un bosque ron bajo volumen
de madera romerrial. En el raso de un bosque ron 20 m3/ha, este
rosto sería de Uk$ 3,6/m3 (Uk$ 72 m3 por ha/20 m3 por ha). Gonsi–
derando el valor del dererho de explotarión de este bosque igual a
Uk$ l65/ha y si los rostos de explotarión por m3 fueran similares al
estimado en el estudio en Paragominas, la explotarión manejada
daría Uk$ 8/m3 versus Uk$ 6/m3 sin manejo.
La sonslusión mas impor5an5e es que la ganansia de la explo5a-
sión manejada es mayor que la explo5asión somersial en diver-
sas si5uasiones.
Los sos5os y benefisios del manejo a largo plaeo

Los benefirios del manejo a largo plaeo pueden ser estimados a través
del valor presente del ingreso líquido de la explotarión de madera ron
y sin manejo para la primera y segunda tala. Para eso, es neresario
estimar el volumen y el nnmero de años para una segunda tala. Estu–
dios del IMAZON muestran a través de simulariones, la estimarión del
rirlo de rorte y el volumen disponible en la segunda tala ron manejo y
ronvenrional.
El volumen de madera disponible en el futuro depende del nnmero de
árboles remanentes después de la explotarión y de la tasa de mortali–
dad y rrerimiento de estos árboles.
La reserva inirial ron manejo sería mayor en virtud de una redurrión
en 30% de los daños a los árboles. Fueron ronsiderados dos situario–
4ll
nes en ruanto al rrerimiento de los árboles: 0,3 rm/año (sin aplirarión

de tratamientos para aumentar el rrerimiento) y 0,6 rm/año (ron trata–
mientos). La tasa de mortalidad fue del 2% al año posterior a la explo–
tarión para ambas áreas (manejada y ronvenrional).
Para una simularión eronómira, se ronsideró que los rostos de la ex–
plotarión y los prerios de la madera serían similares a los prartirados
en el presente. También se asumió que el bosque sin manejo solamen–
te sería explotado en el mismo año de la explotarión ron el manejo.
• YoLumen expLotabLe en segunda taLa: En el esrenario ron manejo, sería
posible arumular, en 30 años, un volumen de madera explotable próxi–
mo al obtenido en la primera tala: 40 m3/ha (ron tratamientos silvirultu–
rales) y 35/m3/ha (sin tratamientos). El volumen obtenido en el esrena–
rio sin manejo (también 30 años), a su vee, sería apenas de l7 m3/ha.
El aumento del 84% en el volumen en el manejo se debe a la redurrión
de desperdirios y daños, mientras que apenas el l6% se debe a los
tratamientos silvirulturales.
• PL vaLor Líquido presente de La expLotación de dos roserhas de madera
ron manejo sería 40% mayor (alrededor de Uk$ 500/ha) que lo de la
explotarión ronvenrional (Uk$ 365/ha).
GONGLUkIÓN
Los benefirios eronómiros del manejo superan los rostos. A rorto
plaeo, tales benefirios son resultado del aumento de la produrtivi–
dad del trabajo y de la redurrión de los desperdirios de madera. A
largo plaeo, el eferto de los benefirios de manejo (redurrión de
desperdirios de madera, mayor rrerimiento de los árboles y redur–
rión de daños a los árboles remanentes) resultaría en un ingreso
líquido mayor, asumiendo que sin manejo el bosque no sería explo–
tado a rorto plaeo.
l42
l43
l
43
Apéndises
l44
Apéndices ll4455
APÉNDIGE l
Lis5ado de Espesies Maderables
NOMBRE GOMÚN37 NOMBRE GIENTÍFIGO FAMILIA
A
Abaraterana Aniba burshellii Kostern LAURAGEAE
Abiu Brabo/Cuajará Mole Pouteria sagotiana (Baill) Eyma kAPOTAGEAE
Abiu Folha Peluda / Balatarana Esslinusa abbreviata Durke kAPOTAGEAE
Abiu Preto Pouteria Krukovii (A.G. kmith) Baehni kAPOTAGEAE
Abiu Gasra Crossa Planshonella pashysarpa Pires (ined.) kAPOTAGEAE
Abiurana Gutiti Pouteria masrophylla (A.DG) Eyma kAPOTAGEAE
Arapu Vouasapoua amerisana Aublet GAEkALPINIAGEAE
Arapurana da Terra Firme/
Tento/Tenteiro Batesia Iloribunda kpr. æ Benth GAEkALPINIAGEAE
Arapurana/Arapu Pixuna Ghamaesrista adiantiIoli (Benth)I. æ
B. var. pteridophylla (kandw) I. æ B. GAEkALPINIAGEAE
Arariquara Branra/
Quinarana Folha Verde Geissospermum vello£ii All. APOG¥NAGEAE
Arariquara/Quariquara Minquartia guianensis Aublet OLAGAGEAE
Almirante/Pau roxo Peltogyne paradoxa Durke GAEkALPINIAGEAE
Amapá Amargoso Brosimum amplisoma Durke MORAGEAE
Amapá Amargoso Brosimum guianense (Aublet) Huber MORAGEAE
Amapá Amargoso Masoubea guianensis Aublet APOG¥NAGEAE
Amapá Amargoso Verdadeiro Parahansornia amapa (Huber) Durke APOG¥NAGEAE
Amapá Dore/
Amapá de Terra Firme/ Carrote Brosimum potabile Durke MORAGEAE
Amapai/Janita/Muirapiranga Branra Brosimum lastessens (k. Moore) G.G. Berg. MORAGEAE
Amaparana Thyrsodium paraense Huber ANAGADIAGEAE
Anani da Terra Firme/Baruri Falso Moronobea sossinea Aublet CUTTIFERAE
Andira–urhi/ Urhirana/ Morregueira Andira inermis H.B.K. FABAGEAE
Andiroba Garapa guianensis Aublet MELIAGEAE
Angélira do Pará/Tapaiuna Disorynia guianensis Amsh. GAEkALPINIAGEAE
Angelim Hymenolobium seriseum Durke FABAGEAE
Angelim Branro /Angelim Pedra Hymenolobium heterosarpum Durke FABAGEAE
Angelim da Mata/Angelim Pedra Hymenolobium modestum Durke FABAGEAE
Angelim Folha Crande Hymenolobium nitidum Benth FABAGEAE
Angelim Pedra Hymrnolonium pulsherrimum Durke FABAGEAE
Angelim Pedra Verdadeiro /
Angelim Vermelho Dini£ia exselsa Durke MIMOkAGEAE
37
Los nombres romunes apareren en portugués romo en el original, debido a la diversidad de opriones para
denominar las esperies en rada región.
Angelim Rajado Verdadeiro Pitheselobium rasemosum Durke MOMOkAGEAE

Angelim/
Angelim da Mata/Angelim Aroeira Hymenolobium petraeum Durke FABAGEAE
Angelim/Angelim Pedra /
Angelim Rajado da Mata Hymenolobium exselsum Durke FABAGEAE
Angelim/Favinha Amarela Hymenolobium Ilavum Durke FABAGEAE
Angiro Anadenanthera peregrina (L.) kplg. MIMOkAGEAE
Anoera Lisania masrophylla Benth. GR¥kOBALANAGEAE
Apaeeiro Eperua Ialsata Aublet GAEkALPINIAGEAE
Arapari Masrolobium asasiaeIolium Benth GAEkALPINIAGEAE
Arararanga / Arararanga Preta Aspidosperma Album (Vall.) R. Ben. Ex. Pirhon APOG¥NAGEAE
Arararanga Aspidosperma desmanthum Benth ex. Muell. Arg. APOG¥NAGEAE
Arararanga Amarela Aspidosperma megalosarpum Muell.Arg. APOG¥NAGEAE
Arararanga Branra Aspidosperma sandwithianum Mgf. APOG¥NAGEAE
Arariba Rajado/Pau Rainha Gentrolobium paraense Tul. FABAGEAE
Aroeira Astronium urundeuva (Fr. All.) Engl. ANAGARDIAGEAE
Aroeira / Muiraratiara / Cuarita Astronium grasile Engler ANAGARDIAGEAE
Axixá/Tararaeeiro/Gapoteiro ttersulia spesiosa K. krhum kTERGULIAGEAE
B
Breu Crande Protium Apisulatum kwarte BURkERAGEAE
Breu Manga Protium guasayanum Guatrir BURkERAGEAE
Breu kururuba Trattiniskia rhoiIolia Willd. BURkERAGEAE
Breu / Amesrla /
Breu kururuba Branro Trattiniskia burseraeIolia Mart. BURkERAGEAE
Buiuçu/Buiussu Ormosia soutinhoi Durke FABAGEAE
Burra Leiteira Fisus pulshella krhott MORAGEAE
G
Garhinguba/Carmeleiro Pradosia praealta Durke kAPOTAGEAE
Gaju–açu, Gajuí Anasardium giganteum Hanr. Ex Engl. ANAGARDIAGEAE
Gasra Dore Pradosia praealta Durke kAPOTAGEAE
Gastanhade Arara/Munguba Crande Joannesia heveoides Durke EUPHORBIAGEAE
Gastanha de Mararo/Mararareruia Gouroupita guianensis Aublet LEG¥THIDAGEAE
Gastanha kapuraia Lesythis pisonis Gambess.
kubdsp. Usitata (Miers) Mori æ Pranre LEG¥THIDAGEAE
Gaxinguba Fisus anthelmintisa Mart. MORAGEAE
Gaxinguba Fisus insipida WilLdenow var. insipida MORAGEAE
Gaxiguba Fisus maxima P. Miller MORAGEAE
Gedro Gedrela odorata L. MELIAGEAE
Gedro – Branro Gedrela huberi Durke MELIAGEAE
Apéndices ll4477
Gedro–Rana/Tornillo Gedrelinga satenaeIormis Durke MELIAGEAE

Gerejeira/Imburana Torresia asreana Durke FABAGEAE
Gopaíba GapiIera retisulata Durke GAEkALPINIAGEAE
Gopaíba/Gopaíba Mari–Mari GopaiIera duskei Dwyer GAEkALPINIAGEAE
Gopaibarana GopaiIera martii Hayne GAEkALPINIAGEAE
Gorarão de Negro twart£ia sorrugata Benth GAEkALPINIAGEAE
Gorrupixá Misropholis melinoniana Pierre kAPOTAGEAE
Guiarana/Tanimbura Terminalia guianensis Eirhl. GOMBRETAGEAE
Gumaru Dipteryx odorata Willd. FABAGEAE
Gumaru Dipteryx polyphylla Huber FABAGEAE
Gumaru de Gheiro Dipteryx intermedia Durke FABAGEAE
Gumaru Ferro Dipteryx Ierrea Durke FABAGEAE
Gumaru Rosa Dipteryx magniIisa Durke FABAGEAE
Gupinba Goupia glabra Aublet GELAkTRAGEAE
E
Envira Amarela Xylopia benthami R.E.Fries ANNONAGEAE
Envira Branra/Envira Gana Xylopia nitida Dun. ANNONAGEAE
Envira Preta Dislinanona salysina (Diels). R. E. Fries ANNONAGEAE
Envira Preta Guatteria poppigiana Mart. ANNONAGEAE
Envira Preta Guatteria prosera R.E.Fries ANNONAGEAE
Envira Preta Onyshopetalum ama£onisum R.E.Fries ANNONAGEAE
Envira Preta Folha Crande Guatteria livaseae R.E.Fries ANNONAGEAE
Envira Preta–Gheirosa Guatteria shrysopetala (ktend) Miq. ANNONAGEAE
Esrorrega–Mararo/Pau Mulato Gapirona huberiana Durke RUBIAGEAE
F
Faveira/Louro Faia Panopsis sessiliIolia (Rirh.) kandw. PROTEAGEAE
Fava Amargosa/Angelim amargoso Vataireopsis spesiosa Durke FABAGEAE
Fava Amargosa/Faveira Amargosa Vatairea paraensis Durke FABAGEAE
Fava Atanã/Gore Crande/Angelim Gôro Parkia gigantosarpa Durke MIMOkAGEAE
Fava Bolarha/Faveira Tamboril Enterolobium maximum Durke MIMOkAGEAE
Fava Bolarha/Impingeira Vatairea guianensis Aublet FABAGEAE
Fava Bolota/Visgueiro Parkia pendula Benth ex. Walp. MIMOkAGEAE
Fava Orelha de Negro/Fava de Rosra Enterolobium sshomburgkii Benth MIMOkAGEAE
Fava–Arara–Turupi Parkia multijuga Benth MIMOkAGEAE
Faveira l Parkia nitida Miq. MIMOkAGEAE
Freijó Gordia sagoti L.M. Johnston. BORACINAGEAE
Freijó Branro Gordia bisolor D.G. BORACINAGEAE
Freijó Branro/Ghapéu de kol Gordia Exaltata Lam. BORACINAGEAE
Freijó/Freijorana Gordia ssabriIoia A.DG. BORACINAGEAE

Freijó/Frei Jorge/Freijó–Ginea Gordia goeldiana Huber BORACINAGEAE
Frutão Eglerodendron pariry (Durke) Baehni kAPOTAGEAE
Fura–Fura Glarisia ilisiIolia (kpreng.) W. Burger MORAGEAE
C
Clíria/Pau Dore/Mirindiba–Dore Glysydendron ama£onisum Durke EUPHORBIAGEAE
Combeira/Goração de Negro twart£ia grandiIolia Benth GAEkAPINIAGEAE
Cuajará Neoxythese robusta (M. æ Eirhl.) Aubr. æ Pell. kAPOTAGEAE
Cuajará Bolarha ty£giopsis oppositiIolia Durke kAPOTAGEAE
Cuajará Mole Franshetella samgotiana (Baill) Eyma kAPOTAGEAE
Cuajará Pedra Neoxythese elegana (A. DG.) Aubret kAPOTAGEAE
Cuajará/Abiurana Branra Pouteria guianenesis Aublet kAPOTAGEAE
Cuariuba/Oitirira Amarela Glarisia rasemosa Ruie e Pav. MORAGEAE
I
Imbaubarana Bengué Pourouma guianensis Aublet GEGROPIAGEAE
Ingá–Xixi–Vermelh/Ingá Pretinho Ingá heterophylla Willd. MIMOkAGEAE
Ipê Roxo/Pau D’arro Roxo Tabebuia impetiginosa (Mart. Ex DG.) ktandl. BICNONIAGEAE
Ipê/Pau D’arro Tabebuia insignis (Miq.) kandw. BICNONIAGEAE
Iperana Masrolobium biIolium (Aublet) Pers. GAEkALPINIAGEAE
Itanba/Itanba Abarate Me£ilaurus lindaviana krhw. æ Mee. LAURAGEAE
Itanba Amarela/Itanba Me£ilaurus itauba (Meissn.) Taubert ex Mee. LAURAGEAE
J
Jararandá do Pará Dalbergia spruseana Benth FABAGEAE
Jararenba/Cranandi/Gedro do Pantanal Gaophyllum brasiliense Gamb. CUTTIFERAE
Jarana Lesythis latiIolium IA.G. kmith) Rirh LEG¥THIDAGEAE
Jarana Lesythis lurida (Miers) Mori LEG¥THIDAGEAE
Jatereu/Matá–matá Vermelho Lesythis idatimon Aublet LEG¥THIDAGEAE
Jatobá/Jutaí–Açn/Jutaí–Crande Hymenaea sourbaril L. GAEkALPINIAGEAE
Jutaí da Váreea Hymenaea oblongIolia Huber GAEkALPINIAGEAE
Jutaí–Gira/Muirapixuna Martiodendron elatum (Durke) Cleason GAEkALPINIAGEAE
Jutaí–Mirim/Jutaí Peluda/Jatobá Hymenaea palustris Durke GAEkALPINIAGEAE
Jutaí–Mirím/Jatobá/Jutaí Vermelho Hymenaea parviIolia Huber GAEkALPINIAGEAE
Jutaí–Pororora/Pororoqueira Dialium guianensis (Aublet.) kandwith GAEkALPINIAGEAE
L
Louro Nestandra pishurim Mee. LAURAGEAE
Louro Osoteaglomerata(Ness)Mee. LAURAGEAE
Apéndices ll4499
Louro Abaraterana Osotea sostulata (Nees) Mee. LAURAGEAE

Louro Amarelo/Louro/Falsa Preriosa Lisaria rigida Kosterm LAURAGEAE
Louro Branro/Louro Prata Osotea guianensis Aublet LAURAGEAE
Louro Ganela Osotea Iragrantissima Durke LAURAGEAE
Louro Gheiroso Aniba paraense Mee. LAURAGEAE
Louro Faia Adenostephanus guianensis Meissan PROTEAGEAE
Louro Faia Euplassa pinnata (Lam.) Johnston PROTEAGEAE
Louro Faia/Louro Pimenta Ostea sanalisulata Mee. LAURAGEAE
Louro Inamuí Osotea symbarum H.B.K. LAURAGEAE
Louro Pimenta Lisaria armeniasa (Ness) Kost. LAURAGEAE
Louro Preto Lisaria sarnnella (Meissn.) Kosterm LAURAGEAE
Louro Preto Osotea baturitensis Vattimo LAURAGEAE
Louro Preto Osotea saudata Mee. LAURAGEAE
Louro Preto Gasra Vermelha Osotea petalanthera (Meiss) Mee LAURAGEAE
Louro Rosa Aniba ParviIlora Mee. LAURAGEAE
Louro Roxo Lisaria brasiliensis (Ness) Kost. LAURAGEAE
Louro Tamanro/Louro Bosta Nestandra suspidata Ness LAURAGEAE
Louro–Vemelho/Louro Camela Osotea rubra Mee. LAURAGEAE
M
Mararauba Platymissium Iilipes Benth FABAGEAE
Mararauba Platymissium trinitatis Benth FABAGEAE
Mararauba Platymissium ulei Harms FABAGEAE
Maçaranduba da Folha Crande Manilkara inundata Durke kAPOTAGEAE
Maçaranduba Verdadeira/Maparajuba Manilkara huberi ktandley kAPOTAGEAE
Maçaranduba/Balateira Manilkara bidentata D.G. Ghev. kAPOTAGEAE
Maçaranduba/Maparajuba Manilkara ama£onisa (Huber) ktandley kAPOTAGEAE
Maçaranbubinha Manilkara paraensis kAPOTAGEAE
Mandioqueira Dualea sI. lansiIolia Durke VOGH¥kIAGEAE
Mandioqueira Aeul Dualea soerulea Durke VOGH¥kIAGEAE
Mandioqueira da Váreea Dualea asuminata kprure VOGH¥kIAGEAE
Mandioqueira Esramosa Dualea paraensis Durke VOGH¥kIAGEAE
Mandioqueira Lisa Dualea albiIlora Warm. VOGH¥kIAGEAE
Mangabarana Folha Minda Dipllon vene£uelana Aubret kAPOTAGEAE
Mangirana/Mangueirana Tovomita brevistaminea (Mart.) Walp. CUTTIFEREAE
Marindiba Bushenavia grandis Durke GOMBRETAGEAE
Marinheiro/Jatanba Guarea trishilioides L. MELIAGEAE
Marupá/Tamanqueira/Paraíba/Caxeta timaruba amara Aublet kIMARUBAGEAE
Mata–Galado Lasistema aggregatum (Berg.) Rusby LAGIkTEMAGEAE
Matá–matá Preto Esshweilera blanshetiana (Berg) Miers LEG¥THIDAGEAE
ll55O
Matá–matá Preto Esshweilera odorata (Poepp) Miers LEG¥THIDAGEAE

Matá–matá Preto/Matá–matá Liso Esshweilera pedisellata (Rirhard) Mori. LEG¥THIDAGEAE
Melanrieira Alexa grandiIlora Durke FABAGEAE
Mogno/Aguano/Araputanga twietenia masrophylla king. MELIAGEAE
Muiranba Mouriria brevipes Hook MELAkTOMATAGEAE
Muiraratiara/Aroeira Astronium lesointei Durke ANARGADIAGEAE
Muirajibóia–Amarela twart£ia resurva Poepp GAEkALPINIAGEAE
Muirajuba Apuleia leiosarpa (Vog.)Mar. Br. GAEkALPINIAGEAE
Muirajuba/Muirataua /Amarelão Apuleia molaris kprure et. Benth GAEkALPINIAGEAE
Muirapiranga Eperua shomburgkiana Benth. GAEkALPINIAGEAE
Muirapiranga/Mururé Brosimum asutiIolium Huber MORAGEAE
Muirapixuna/Goração de Negro Gassia ssleroxylon (Durke) G.G. Berg. GAEkALPINIAGEAE
Muiratinga – Folha – Fina/
Gapinuri/Rapé de Indio Maquira sslerophylla (Durke) G.G. Berg MORAGEAE
Muiratinga – Folha – minda Maquira guianensis (Aublet) Hub MORAGEAE
Muiratinga/
Gapinuri/Muiratinga da Váreea Maquira soriaseae G.G. Berg MORAGEAE
Muiranba Mouriria plassshaerti Pulle. MELAkTOMATAGEAE
Muiranba–Amarela Mouriria sollosarpa Durke MELAkTOMATAGEAE
Muiraximbé/Gumarui Emmotum IagiIolium Desv. Ex. Hamilt. IGAGINAGEAE
Murupita/Burra Leiteira tapium marmieri Huber R. EUPHORBIAGEAE
Mururé Brosimum obovata L. MORAGEAE
Mururé Trymatosossus ama£onisus P. æ E. MORAGEAE
P
Pará–Pará/Garoba Jasaranda sopaia (Aublet) D. Don BICNONIAGEAE
Parirá Crande/Pinho Guiabano thi£olobium ama£onisum (Huber) Durke GAEkALPINIAGEAE
Pau Amarelo Euxylophora paraensis Huber RUTAGEAE
Pau Branro Auxemma onsosalyx (F. Allem) Taub. BORACINAGEAE
Pau Branro Drypetes ama£onisa kteyerm EUPHORBIAGEAE
Pau Branro Raputia paraenses Durke RUTAGEAE
Pau Branro/Maparana Drypetes variabilis Vitt. EUPHORBIAGEAE
Pau D’arro Amarelo/Ipê Amarelo Tabebuia serratiIolia (Vahl.) Nirholes BICNONIAGEAE
Pau de Birho Tapura ama£onisa Poep. Et Engl. DIGHAPETALAGEAE
Pau Ferro/Pau kanto Zollernia paraensis Huber GAEkALPINIAGEAE
Pau Preto/Maxirimbé Genostigma tosantinum Durke GAEkALPINIAGEAE
Pau Rainha/Muirapiranga/Amapá Brosimum rubessens Taub. MORAGEAE
Pau Rosa/Louro Rosa Verdadeiro Aniba rosaeodora Durke LAURAGEAE
Pau Roxo Peltogyne leisointei Durke GAEkALPINIAGEAE
Pau Vermelho Ghaunoshiton Kappleri (kag. ex Engl.) Durke OLAGAGEAE
Apéndices ll5
5ll
Pau–Jararé / Piriquiteira /Apijó/Piraruru Laetia prosera (P. et E.) Eirhl. FLAGOURTIAGEAE

Piquiá Garyosar villosum (Aublet) Pers. GAR¥OGARAGEAE
Piquiarana Garyosar glabrum (Aublet) Pers. GAR¥OGARAGEAE
Piquiarana Garyosar misrosarpum Durke GAR¥OGARAGEAE
Pitaira twart£ia asuminata Willd MIMOkAGEAE
Prarunba Mora paraensis Durke GAEkALPINIAGEAE
Prarunba da Terra Firme /Garhuá Trishillia Lesointei Durke MELIAGEAE
Q
Quaruba Voshysia maxima Durke VOGH¥kIAGEAE
Quaruba Voshysia obssura Warm. VOGH¥kIAGEAE
Quaruba Gedro da Terra Firme Voshysia inundata Durke VOGH¥kIAGEAE
Quaruba Vermelha Voshysia vismiaeIolia kprure ex Warm. VOGH¥kIAGEAE
Quaruba–Rosa Voshysia surinamensis ktafl. VOGH¥kIAGEAE
Quarubarana/Japura Erisma lanseolatum ktafl. VOGH¥kIAGEAE
Quarubarana/Quaruba Vermelha Erisma unsinatum Warm. VOGH¥kIAGEAE
k
kaboeiro Abarema jupunba (Willd.)
Brittont Phillip var. jupunba MIMOkAGEAE
kaboeiro Amarelo Pthesolobium desandium Durke MIMOkAGEAE
kapuraia Lesythis paraensis Durke LEG¥THIDAGEAE
keringa Itanba Hevea guaianensis Aublet EUPHORBIAGEAE
keringarana Misrandra elata Benth EUPHORBIAGEAE
korva Gouma guianensis Aublet APOG¥NAGEAE
korva Gouma masrosarpa Barb. Rodr. APOG¥NAGEAE
kurupira Amarela / kapupira /
kurupira Esramosa Bowdishia nitida kprure ex Benth FABAGEAE
kurupira da Váreea Diplotropis martiusii Benth FABAGEAE
kurupira Preta Bowdishia virgilioides H.B.K. FABAGEAE
kurupira Preta Diplotropis purpurea (Rirh.) Amsh. FABAGEAE
kumanma Geiba pentandra Caertn. BOMBAGAGEAE
T
Tararaeeiro/Arhirhá ttersulia pilosa Durke kTERGULAGEAE
Tarhi tslerolobium goeldianum Huber GAEkALPINIAGEAE
Tarhi Branro/Tarhi Preto sem Formiga Tashigalia alba Durke GAEkALPINIAGEAE
Tarhi Branro/Tarhi Branro da Terra tslerolobium paraense Huber GAEkALPINIAGEAE
Tarhi Pitomba/Tarhi Folha Dourada tslerolobium shrysophyllum Poepp. æ Endl. GAEkALPINIAGEAE
Tarhi Preto Tashigalia panisulata Aublet GAEkALPINIAGEAE
Tairhi Preto Folha Cranden /

Tarhi Pitomba Tashigalia myrmesophilla Durke GAEkALPINIAGEAE
Tarhi Vermelho tslerolobium melanosarpum Durke GAEkALPINIAGEAE
Tarhi–Branro tslerobium guianensis Benth MIMOkAGEAE
Tarhi/Garvoeiro tslerolobium panisulatum P. et Endl. GAEkALPINIAGEAE
Tamanqueira 2 Zanthoxylum regneliana Engl. RUTAGEAE
Tamaquaré Garaipa rishardiana Gamb. CUTTIFERAE
Tanimbura Bushenavia sapitata Eirhl GOMPRETAGEAE
Tanimbura Alta Terminalia argentea G. Martins GOMBRETAGEAE
Tanimbura Amarela/Garara Bushenavia parviIolia Durke GOMBRETAGEAE
Tatajuba/Bagareira Bagassa guianensis Aublet MORAGEAE
Tauari Gouratari oblongIolia Durke et. Kunth. LEG¥THIDAGEAE
Tauari Gouratari stellata A. G. kmith LEG¥THIDAGEAE
Tauari Folha Crande Gouratari guianensis Aublet LEG¥THIDAGEAE
Tauari Folha Minda Gouratari multiIlora (kmith) Eyma LEG¥THIDAGEAE
Tento Ormosia misrantha Durke FABAGEAE
Tento Ormosia paraensis Durke FABAGEAE
Tento Crande Ormosia nobilis Tul. FABAGEAE
Tento Preto Ormosia Ilava Durke FABAGEAE
Timborana/Fava Folha Fina Newtonia suaveolens (Miq.) Brenan MIMOkAGEAE
Timborana/Fava Folha Cranda Newtonia psilostoshya
U
Urhi Loiro/Urhi Endopleura ushi (Huber) Guatr. HUMIRIAGEAE
Urhirana/Paruru Vantanea parviIlora Lam. HUMIRIAGEAE
Urunba Virola suspidata Warb. M¥RIkTIGAGEAE
Urunba Branra / Urunba da Váreea Virola surinamensis (Rol. Werb. M¥RIkTIGAGEAE
Urunba da Terra Firme /Urunba Preta Virola mishelii Herhell M¥RIkTIGAGEAE
Urunbão Osteophloeum platyspermum (A. DG.) Warb. M¥RIkTIGAGEAE
Uruubarana Iryanthera sagotiana (Benth.) Warb. M¥RIkTIGAGEAE
Uruubarana Iryanthera grandis Durke M¥RIkTIGAGEAE
Uruubarana Iryanthera juruensis Warb. M¥RIkTIGAGEAE
Uxirana tasoglottis ama£onisa Benth HUMIRIAGEAE
Uxirana tasoglottis seratosarpa Durke HUMIRIAGEAE
Uxirana/Arhuá/Paruru tasoglotis guianensis Beth HUMIRIAGEAE
X
Xixá/Axixá ttersulia shishakt. Hil. kPTERGULIAGEAE
Apéndices ll5533
APÉNDIGE 2
Impas5os de la Explo5asión de Madera
kobre las Prinsipales Espesies Explo5adas
ke pueden enumerar tres prinripales impartos de la artividad maderera

sobre las esperies explotadas en la Amaeonía:
l. Eliminarión de los individuos de gran porte, los ruales son impor–
tantes para la produrrión de semillas.
2. Daños a los individuos jóvenes durante la explotarión, rausando
perjuirios a la reserva de remanentes y, de esta manera, redurir la
poblarión de riertas esperies.
3. La apertura del dosel rrea rondiriones para la entrada del fuego en
el bosque, romprometiendo las esperies menos resistentes al fuego.
De esta manera es importante, para el buen manejo del bosque, rono–

rer ruales son las esperies maderables que pueden estar sufriendo
redurrión poblarional debido a la artividad maderera. Para rontestar
esta ruestión, un estudio del IMAZON (Adriana Martini, Nelson Rosa y
Ghirstopher Uhl, l663) levantó las rararterístiras biológiras de 305 es–
peries maderables de un total de 350 explotadas en la región. Las
rararterístiras rruriales para su supervivenria frente a los impartos de
la explotarión maderera son:
l. Gaparidad de dispersar las semillas a largas distanrias.
2. Cran rantidad de individuos jóvenes en la regenerarión, prinripal–
mente en rlaros.
3. Grerimiento rápido.
4. Gaparidad de retoñar ruando son dañados por la explotarión.
5. Gorteea de espesor grueso, apta para resistir al fuego.
6. Presenria en toda la Amaeonía.
7. Densidad poblarional alta.
8. Presión de explotarión.
ke utilieó un sistema de puntajes para estas rararterístiras, en el rual

fueron atribuidos tres puntos para aquellas esperies de árboles más
rapares de soportar los impartos de la explotarión maderera¡ un punto
para las esperies mas vulnerables¡ y dos puntos para las rlasifiradas
romo intermedias.
La suma de los puntos de las orho rararterístiras de rada esperie re–
vela el grado de susreptibilidad de las mismas a los impartos de la
explotarión. Las esperies ron menor puntaje poseen rararterístiras mu–

rho mas desfavorables y, por tanto, potenrialmente amenaeadas por
los impartos de la explotarión. Por otro lado, mientras mayor sea el
nnmero, mejores serán las posibilidades de la esperie para mantener
su poblarión frente a la artividad maderera. De las 305 esperies eva–
luadas por el estudio, 4l son potenrialmente amenaeadas por la explo–
tarión (l3%) (Tabla l).
El “pau amarelo“ es un ejemplo de esperie potenrialmente amenaeada
por la explotarión, ya que renne murhas rararterístiras desfavorables
a la supervivenria. kus semillas son dispersas generalmente en un ra–
dio de apenas l00 metros¡ ruando sufre daños o rorte, tiene difirultad
de germinar y sus plántulas y árboles jóvenes son difírilmente enron–
trados en la regenerarión natural del bosque. Adirionalmente, orurre
prinripalmente en la Amaeonía Oriental (de Brasil), donde la extrarrión
maderera es rada vee más intensiva. Finalmente, es una esperie ron
pora raparidad de aproverhar la apertura del dosel rausada por la
artividad maderera.
Resomendasiones para el manejo fores5al:

• Gontrolar la retirada de maderas de las esperies rlasifiradas romo
potenrialmente amenaeadas, hasta que existan datos sufirientes
para su monitoreo o que se aleje del peligro de impartos negativos
sobre sus poblariones.
• Delimitar áreas de proterrión para mantener las poblariones de las
esperies madereras.
• En raso de que se ronfirme que ya están orurriendo pérdidas en la
diversidad genétira, es urgente romenear a pensar en la rrearión
de un banro de germoplasma de individuos selerrionados de estas
esperies, ron el fin de asegurar la preservarión de las rararterísti–
ras que les dan valor romerrial.
Apéndices ll5555
Tabla l. Listado de esperies potenrialmente amenaeadas por la explotarión maderera en la

Amaeonía (en orden alfabétiro).
Nombre Gomnn Nombre Gien5ífiso
Arapu Vouasapoua amerisana Aubl.
Arapurana/Arapu pixuna/Goração de negro Ghamaesrista adiantiIolia (Benth.)
Arapurana T. F./Tento/Tenteiro Batesia floribunda kpr. et Benth.
Arariquara/Quariquara Minquartia guianensis Aubl.
Arhua pequeno/Umiri Humiriastrum exeselsum Durke
Almirante/Pau roxo/Cuarabu Peltogyne paradoxa Durke
Amapa amargoso Brosimum amplisoma Durke
Amapa dore/Amaparama/kande Brosimum parinarioides Duke
Angelim rajado verdadeiro Pithesellobium rasemosum Duke
Apurhiqui/Mapurhiqui Pithesellobium pedisellare (D.G.) Benth.
Arararanga Aspidosperma desmanthum Benth.
Arararanga Aspidosperma album Jarq.
Arararanga branra Aspidosperma sadwithianum Mgf.
Arariba rajado/Paurainha Gentrolobium paraense Tul.
Gerejeira/Imburana Torresia asreana Durke
Gopaíba GopaiIera retisulata Durke
Gumaru Dipteyx magniIisa Durke
Guritibá Crande Rishardella masrosarpa (Hub.) Aubl.
Fava bolota/Visgueiro Parkia pendula Benth.
Frutão/Pariri Pouteria pariry (Durke) Baehni
Combeira/Goração de negro twart£ia grandiIolia Benth.
Jarareuba/Canandi/Gendro do pant Galophyllum brasiliense Gamb.
Jutá–rira/Muirapixuna Martiodendron elatum (Duke) Cleason
Louro Aritu Lisaria aritu Duke
Louro fava Euplassa pinnata (Lam.) Johnston
Louro preto Lisaria sannella (Meissn.) Kosterm
Louro vermelho/Louro gamela Osotea rubra Mee.
Mandioqueira aeul Dualea soerulea Duke
Manma Glinostemon Mahuba (A. kamp.) Kihalm.
Mogno/Aquano/Araputanga twietenia masrophylla King.
Muirapixuna/Goração de negro Gassia ssleroxylon Durke
Parkia velutinia/Esponjeira Parkia velutinia R. Benoist
Pau amarelo Euxylophora paraensis Huber
Pau de birho Tapura singularis Durke

Pau rainha/Muirapiranga/Amapa Brosimum rubessens Taub.
Roxinho Peltogyne maranhensis Hub. æ Durke
kurupira da váreea Diplotropis martiusii Bth.
Tanimbura amarela/Garara Bushenavia parvitolia Durke
Urumbarana Irganthera grandis Durke
Uxirana tasoglottis ama£onisa Benth.
l57
l
57
Referensia
Bibliográfisa
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Todos los dererhos

reservados Para mayor
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42l4 Fax: (06l)235
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Brasil) kHIk EQ 06/08
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Edisión de la versión en español Diseño y diagramasión

AMARAL, Paulo Henrique Goelho, VERÍkkIMO, José Adalberto de Oliveria¡ BARRE–

Referensia bibliográfisa u/)

Los “serretos“ del modelo idealieado están, ahora, disponibles para

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Ansho mínimo de faja la5eral

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Planifisasión de las vías en áreas planas Figura 2.

Figura 3. Planifirarión de las vías en áreas planas.

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DEFINIR LA DEMANDA ANUAL

Explo5asión basada en el sonsumo de madera de la

un ronsumo anual de 6.000 m3 de madera de valor romerrial por her–

ke presenta un ejemplo de rálrulo utilieando los siguientes datos: max

¿Gómo es5imar el área?

¿Gómo saber el área que sada pun5o represen5a?

DOV (metro) = l0.000 /D

Para ejemplifirar el rálrulo de la DOV se utiliean los datos de la Tabla l.

Tabla l. Variables utilieadas en la estimarión de la Distanria óptima entre

Estos datos son utilieados para ralrular la DOV. La Tabla 2 muestra la

Tabla 2. Distanria óptima entre vías (DOV) de aruerdo ron la variarión en

PREPARAGIÓN DEL AREA

• EnstaLar baLizas (jaLo-

Aper5ura de las 5roshas de orien5asión

3. Al final de la trorha, el equipo se debe moviliear lateralmente 50

dor (baquiano) y el anotador se mueven en el medio de la faja. Los

ETAPAk DEL GENkO

¿Guáles espesies insluir en el GENkO?

alejadas, el nnmero de esperies eronómiramente viables puede ser

a. Medirión a altura del perho b. Medirión arriba de las raíres tubulares

Ceneralmente, todos los árboles de valor romerrial superior a 45 rm de

Numerasión de los árboles en el sampo

Los nnmeros deben ser impresos, pre–

Mapifisasión de los árboles

Es5imasión de la al5ura somersial

Bueno Regular Inferior

Figura 9. Evaluasión de la salidad del 5ronso

GALIDAD APROVEGHA- FAGTOR DE Tabla l.

Tendensia de saída de los árboles

Amplia In5ermedia Limi5ada

dades de roloniearión por sus plántulas (hijos). La apertura de rlaros

Evaluasión de la salidad de la sopa

Evaluasión de la iluminasión de los árboles para la

l. Iluminasión 5o5al 2. Iluminasión parsial 3. kombra