Es por ello que se considera que la gestión integrada del agua a nivel de ciudades, regiones y
países promueve una buena relación con la tierra y los recursos asociados, con el fin de maximizar
el bienestar social y económico de manera, equitativa, sin comprometer la sustentabilidad de los
ecosistemas vitales, posibilitando el máximo bienestar social y económico.
Dentro de las cuencas encontramos a las Ciudades que son los centros poblados con dinámicas
económicas que hay en cada cuenca; también existen cuencas urbanas como es el caso de Lima
Metropolitana.
Desde un enfoque sistémico, podrían definirse a las Cuencas Urbanas como subsistemas socio-
económicos, predominantes sobre otros subsistemas bióticos.
Es por ello que la buena gestión de Cuencas Urbanas es un proceso flexible, participativo e
iterativo que integra los elementos del ciclo de aguas urbanas (suministro de agua, saneamiento,
gestión de aguas pluviales, y gestión de residuos) con el desarrollo urbano de la ciudad y la gestión
de cuencas fluviales para maximizar los beneficios económicos, sociales y medioambientales de
manera equitativa.
Como ejemplo podemos citar a La Cuenca del Río Rimac que tiene a Lima como su principal Ciudad
y que tiene que afrontar los siguientes problemas:
[8] LA REGIÓN
Actualmente las regiones en el Perú afrontan diferentes amenazas que impactarían en la vida
social y económica de su población, y que requieren conocimiento y acción política – técnica para
resolver las siguientes interrogantes:
CLIMA:
HIDROLOGÍA:
¿Cuál será la disponibilidad hídrica para atender las demandas urbanas de las regiones en el Perú?
Es el eje que apoya y dinamiza el desarrollo de las regiones, armoniza sus intereses con los
recursos del país y procura la estabilidad y crecimiento sostenido y equitativo de todo el sistema.