Se propone una ontología hermenéutica analógica que permita apreciar las diversas ciencias en su coherencia

integral, como entretejidas unas con otras, analógicamente, en una indisoluble duración de tiempo, en vez de
considerarlas como antagónicas y contrapuestas intentando cancelarse mutuamente. La dicotomía hecho/valor
se encuentra subyacente en esta división y dependiendo del polo que se enfatice es al grupo de ciencias que se
le dará primacía. En la modernidad se enfatizaron los hechos y con ello las ciencias de la naturaleza relegando
a las del espíritu a meras expresiones del sentimiento; en la posmodernidad se enfatizan los valores y con ello
las ciencias del espíritu considerando a las de la naturaleza como meras construcciones sociales. Una
ontología hermenéutica analógica promueve la cooperación entre las diversas ciencias.