Anda di halaman 1dari 63

El Agua Subterránea en

el Ciclo Hidrológico
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Introducción

E
l agua, elemento central de la presente disciplina, aparece en nuestro entorno bajo
los tres estados posibles: sólido, líquido y gaseoso. Más importante, sin embargo, es
su carácter dinámico: no sólo se producen constantemente cambios de estado en
todas direcciones (fusión, evaporación, condensación, congelación...), sino que el agua
se encuentra en constante movimiento (glaciares, ríos, corrientes marinas, circulación
atmosférica, flujo subterráneo). La energía solar, principalmente, actúa de fuerza motriz
generando movimientos masivos del agua en toda la superficie terrestre. Este carácter
dinámico da lugar a una constante recirculación del agua presente en la hidrosfera, de
forma que es imposible separar cualquier parte del ciclo “vital” del agua sin caracterizar
adecuadamente el conjunto que rige la dinámica de esta compleja maquinaria. Ya en
1942, Meizer consideró el ciclo hidrológico como el concepto central de la hidrogeología.

Dirección Académica

www.cadperu.com

3
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Indice

Introducción........................................................................................................ 3

UNIDAD I............................................................................................................... 9

EL CICLO HIDROLÓGICO.................................................................................... 11

UNIDAD II............................................................................................................ 29

MODELOS DE PRECIPITACIÓN – ESCORRENTÍA..................................................... 31

UNIDAD III........................................................................................................... 49

ESCORRENTÍA HIPODERMICA (EH) ESCORRENTÍA DIRECTA (ED)............................. 51

ACTIVIDADES DE AUTOAPRENDIZAJE.................................................................... 59

BIBLIOGRAFÍA...................................................................................................... 61

RELACIÓN DE LECTURAS...................................................................................... 63

www.cadperu.com

5
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Competencia del módulo

Brindar los conocimientos hidrológicos como base para realizar un análisis hidrogeo-
lógico.

Entender los cálculos hidrológicos a fin de comprender el ciclo hidrológico y la im-


portancia con el subsuelo.

Unidades didácticas

UNIDAD 1 UNIDAD 2

El Ciclo Hidrológico Modelos de Precipitación – Escorrentía

UNIDAD 3

Escorrentía Hipodermica (EH) Escorrentía


Directa (ED) www.cadperu.com

7
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

NIDA

D
U I

El Ciclo Hidrológico

Lea el Texto de
1 esta unidad
3

Ver
videoconferencia 2 Realice
actividad
www.cadperu.com

9
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

EL CICLO HIDROLÓGICO
El Ciclo Hidrogeológico describe el movimiento del agua, pasando
por todas sus fases, y como se denomina ciclo, no puede interpre-
tarse ni un principio ni un final. Lo más intuitivo, es considerar una
primera fase del agua que precipita, el vapor de agua contenido
en la atmósfera se condensa alrededor de las partículas, y por el
peso cae y se desplaza de la atmósfera a la superficie terrestre.
Durante este trayecto el agua precipitada puede seguir diferentes
caminos (Figura 1.1.3):

• Puede ser retenida por las plantas o edificios (intercepción


y detención superficial), de manera que una parte se eva-
porará y volverá a la atmósfera, pero otra podrá llegar a la
superficie.

• Puede caer sobre la superficie terrestre. En este caso, una par-


te del agua continuará circulando en superficie (escorrentía
superficial), dando origen a torrentes, ríos, lagos.

• Pero otra parte empezará a rellenar los poros del subsuelo,


dando origen a la infiltración a una velocidad que depen-
derá de la porosidad del terreno (disposición y tamaño de
los huecos entre los granos que componen el terreno), de
su grado de humedad.... De esta agua infiltrada, una parte
circulará por la zona más superficial (escorrentía subsuperfi-
cial o hipodérmica) pudiendo aflorar en superficie durante su
circulación y dando lugar a manantiales.

La parte restante del agua infiltrada, seguirá descendiendo por gra-


vedad y llegará a la zona saturada del subsuelo, pasando a formar
parte de las aguas subterráneas del acuífero (escorrentía subterrá-
nea). www.cadperu.com

Figura 1.1.3 Componentes del Ciclo Hidrológico. 11


Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Habiendo tomado como inicio el agua caída por precipitación, es


lógico pensar que el destino final de todas estas aguas es el mar,
de manera que por su evaporación volverán a originarse nubes de
precipitación y el ciclo volvería a empezar.

Precipitación

La precipitación se forma a partir del vapor de agua de la atmós-


fera, aprovechando los núcleos de condensación: a partir de cier-
to nivel de humedad en el aire el agua se condensa y cae por
gravedad al aumentar el peso de cada núcleo. Esta precipitación
puede presentarse de diversas formas: líquida (lluvia, llovizna), só-
lida amorfa (granizo), sólida cristalizada (nieve), intermedias (nieve
granulada, aguanieve), por condensación (rocío, niebla), por subli-
mación (escarcha).

Como ya se ha comentado, la precipitación puede considerar-


se como el origen de todas las corrientes de agua superficiales
y subterráneas, de manera que será fundamental su medición y
conocimiento para la realización de cualquier estudio de carácter
hidrológico.

Para la realización de cálculos, es necesario que el hidrólogo con-


sidere la precipitación caída en la cuenca hidrográfica (Figura
1.1.4). Ésta se define como una área o superficie del territorio en la
que el agua de lluvia que se drena por escorrentía superficial, sale
por un mismo punto de la red fluvial.

Figura 1.1.4. Cuenca hidrográfica

La medida de la precipitación expresa la altura que alcanzaría el


volumen de agua recogida sobre una hipotética superficie pla-
na y horizontal. Así, la unidad utilizada para medir la precipitación
es el milímetro (mm), que equivale a un L/m2 o a 10 m3/ha (1L/
m2=1Lx10000 m2/ha).

12
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Los datos de lluvia o pluviometría se pueden obtener en los servi-


cios meteorológicos, en las centrales hidroeléctricas, y otras
administraciones nacionales, regionales o locales, como las con-
federaciones hidrográficas o las gestoras de redes complejas de
saneamiento. Evidentemente se trata de un dato medido, no cal-
culado. Dada la variabilidad tanto espacial como temporal de la
lluvia, es extraordinariamente importante disponer de datos lo más
próximos a la zona de estudio (no siempre tenemos la suerte de
que exista una estación meteorológica en la misma), así como de
series temporales suficientemente largas para ser representativas.
Asimismo, dependiendo tanto de la climatología local como de
los temas estudiados, el grado de detalle de los datos requeridos
puede ser muy diferente; precipitación mensual o diaria (o incluso
horaria), intensidad de lluvia, temperaturas, humedades, viento, in-
solación, etc.

Escorrentía superficial

Se define como la parte del agua de lluvia precipitada que no


se infiltra en el terreno y que circula por la superficie en forma de
torrentes, ríos, arroyos, por los cauces que constituyen la red hidro-
gráfica.

Las unidades utilizadas para la escorrentía superficial son el m3/seg


(unidades de caudal); y también se utiliza el L/seg·km2 (unidades
de caudal específico), que da una idea de la escorrentía específi-
ca (o referida a la superficie de la cuenca) y sirve para establecer
comparaciones entre cuencas. A veces se utiliza el Hm3 como me-
dida del volumen aportado por un río o cuenca.

El agua en la zona no saturada

El suelo es el resultado de cambios físicos y químicos, así como de


la actividad orgánica (vegetal, biológica) sobre el substrato. La figu-
ra 1.1.5 representa esquemáticamente un corte vertical del suelo:
www.cadperu.com

Figura 1.1.5. Corte vertical del suelo. 13


Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

En función del contenido en agua del suelo, pueden diferenciarse


3 zonas principales; zona saturada, zona no saturada, y dentro de
ésta la zona de evapotranspiración.

Zona saturada: los poros, intersticios y fisuras están totalmente sa-


turados de agua, es decir, el porcentaje de agua que contiene,
coincide con el volumen de huecos y por lo tanto con la porosidad
total del material.

Es la zona por la que circulan las aguas subterráneas que con-


forman el acuífero en el que los poros están saturados al 100%,
explotables mediante pozos y manantiales. La superficie superior
que limita esta zona, es la superficie piezométrica de las aguas
subterráneas también llamada superficie hidrostática, en donde la
presión en todos los puntos es la misma, e igual a la presión atmos-
férica.

Zona no saturada de aireación o vadosa: es la zona localizada por


encima de la zona de circulación de las aguas subterráneas del
acuífero. El grado de saturación de los poros no es del 100% como
en el caso anterior, y esto facilita poder diferenciar zonas dentro de
este espacio:

Zona de ascenso capilar, donde el grado de saturación de los po-


ros disminuye gradualmente de abajo a arriba hasta un valor límite.
El contenido de agua de esta zona no está condicionada por
el flujo descendente del agua que se infiltra, sino por fenómenos
de ascenso capilar desde la superficie donde el agua ocupa la
totalidad de los poros, o zona saturada. El espesor de esta zona,
por tanto, disminuye al aumentar la granulometría del suelo (al igual
que el ascenso capilar disminuye con el diámetro del tubo) y esta
zona sigue las fluctuaciones de la superficie piezométrica (Heras,
1972).

Zona intermedia: en esta zona los huecos están ocupados por


agua, aire y vapor de agua.

Zona de evapotranspiración: es la zona más superficial. Tiene un


gran interés agronómico, es la zona donde se encuentran e influye
la actividad de las raíces de las plantas y donde se producen los
fenómenos de evapotranspiración. El espesor de esta zona varía
en función del clima y del tipo de cubierta vegetal. Como media,
puede considerarse un espesor de 0,5 a 2 metros, aunque como
se ha dicho depende enormemente del tipo de vegetación.

Si se produce una precipitación importante, los poros de la zona


no saturada pueden quedar temporalmente saturados de agua.

14
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Por efectos de la gravedad, este agua irá descendiendo hacia la


zona saturada, pero una parte podrá quedar retenida ocupando
algunos poros de la zona no saturada, y otra podrá circular por la
zona más superficial del subsuelo, originando la escorrentía subsu-
perficial o hipodérmica. Téngase en cuenta que estos fenómenos
de infiltración de la lluvia que cae sobre un terreno son de una enor-
me complejidad, y dependen no solo de la intensidad de lluvia, la
topografía, el tipo de terreno y la cobertura vegetal sino también
del perfil vertical del grado de humedad del propio terreno. Así, no
responde de igual forma un suelo completamente seco que este
mismo suelo completamente empapado de agua. Igualmente, la
infiltración es muy diferente para una precipitación de 100 mm se-
gún esta se haya producido en una lluvia regular que ha durado
dos días o en una tormenta de una hora.

Escorrentía subterránea

Es la parte del agua que se infiltra y que llega a la zona saturada,


incorporándose a las aguas subterráneas del acuífero. Es por tanto
una de las entradas (frecuentemente la más importante) del agua
contenida en la zona saturada, y el objeto específico de estudio de
este curso, en consecuencia condiciona el volumen de recurso dis-
ponible. Además, un aspecto muy relevante de los recursos hídricos
es que no interesan sólo cuantitativamente, sino que cualitativa-
mente también, como veremos con más detalle en el Tema 3. Di-
cho en otras palabras, cada vez son más inseparables la cantidad
de la calidad del agua en tanto que recurso, y es evidente que los
aportes de agua por infiltración de agua de lluvia constituyen un
factor esencial en la definición de las características químicas del
agua de cualquier acuífero.

Dentro del ciclo hidrológico, el agua subterránea no es una masa


estática, sino que tiene movilidad. Su recarga natural se origina en
la infiltración de las aguas provinentes de la precipitación, del cau-
ce de los ríos, torrentes, lagos.... y sus salidas naturales vienen de-
terminadas por el mar, los manantiales y por el drenaje de aguas
hacia los ríos.
www.cadperu.com

Evapotranspiración

La evaporación es el paso del estado líquido al estado gaseoso del


agua. La transpiración es básicamente el mismo fenómeno pero
que ocurre a través del sistema circulatorio de las plantas, y que a
su vez toman agua de la zona del suelo edáfico. En las superficies
cubiertas por la vegetación, se reúnen ambos conceptos de ma-
nera que la separación cuantitativa es prácticamente imposible.

15
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Tal y como indica su nombre, la evapotranspiración es un fenó-


meno físico que suma el de evaporación (fundamentalmente del
agua del suelo que puede encontrarse en cursos de agua superfi-
ciales) y el de transpiración (de carácter eminentemente vegetal).
La unidad utilizada para la evapotranspiración es el milímetro de
altura de agua, al igual que la lluvia, y que equivale a 1 L/m2 o a
10 m3/ha.

Salida al mar

Parte del agua que proviene tanto de las aguas subterráneas de


los acuíferos como de los cursos de agua superficiales, se vierte al
mar. En el caso de los ríos, este volumen de agua es importante
por su aportación de sedimentos para la formación de los deltas
y también por la aportación de nutrientes indispensables para la
alimentación de la fauna marina.

En el caso del flujo subterráneo, éste tiene un papel clave para


impedir la entrada de agua salinizada al acuífero, que afectaría la
calidad del recurso.

Intercepción y retención superficial

La precipitación no siempre llega directamente hasta la superficie


terrestre, ya que una parte poco importante puede ser intercepta-
da por la presencia de zonas urbanizadas o por la vegetación. En
el caso de la vegetación, la estimación de esta agua interceptada
se evalúa como una fracción del agua precipitada sobre la cuen-
ca, a partir de los datos obtenidos en cuencas experimentales. En
el caso de urbanizaciones deberá hacerse un cálculo de la frac-
ción de suelo impermeabilizado por efecto de la urbanización y las
infraestructuras, teniendo en cuenta sin embargo posibles pérdidas
de la red de alcantarillado que hiciesen que parte de la lluvia aca-
be infiltrándose.

BALANCE HÍDRICO

El balance hídrico, consiste en aplicar el principio de la conserva-


ción de la masa (aunque en nuestro caso se calcula en volumen,
ya que prácticamente siempre se pueden considerar constantes
las densidades a efectos de este balance). Este principio se apli-
ca a una región definida por unas determinadas condiciones de
contorno, y para un determinado periodo de tiempo. Se establece
que la diferencia entre las entradas y las salidas del sistema que se
ha definido, es igual a la variación de almacenamiento, es decir,
debe existir una igualdad entre las entradas menos las salidas y las
variaciones de agua almacenada en el sistema definido.

16
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Para calcular un balance hídrico, en primer lugar se debe definir


escrupulosamente la zona donde se aplicará y sus contornos, a
nuestra conveniencia. Así, se puede calcular el balance para una
capa de un acuífero, para el conjunto del sistema acuífero, para el
sistema acuífero más la red de aguas superficiales..., pero siempre
teniendo claro que la delimitación de este “volumen de control” es
distinto en cada caso y dará lugar a balances con unos términos
que pueden variar en número y valor. Un balance siempre respon-
de a una ecuación del tipo:

Entradas - Salidas = Variación del almacenamiento + error

1.8.2 Definición de los límites del sistema

Cabe pues insistir en la importancia que tiene el definir o delimitar


perfectamente el sistema sobre el que efectuaremos el balance,
ya que según definamos el sistema, los resultados que podemos
obtener al efectuar el balance en cada caso pueden ser radical-
mente opuestos. La elección de los límites de la zona a aplicar el
balance, pueden simplificar mucho los cálculos, haciendo coincidir
los contornos con límites impermeables, por donde no se produz-
can ni entradas ni salidas, o con divisorias de aguas, o con límites
donde se tenga información fiable del caudal que pasa.

En el caso que se considere como intervalo temporal un año, signi-


fica que para efectuar el balance se considera el espacio de tiem-
po de enero a diciembre; pero también puede querer decir que
estamos considerando el año 1999, o un año hidrológico (octubre
a septiembre), o incluso que puede ser un año promedio respecto
a algún parámetro en particular, como la lluvia o la infiltración de
lluvia.

En el supuesto que se considere el año 1999 o un año promedio


para efectuar el balance, el resultado puede no tener nada que
ver, ya que el año 1999 puede haber sido muy seco o muy húme-
do, y en cambio un año promedio se corresponde con la media
de una serie lo suficientemente extensa de años, y de cuyo valor
podría encontrarse muy alejado del valor del año 1999. Como nor-
www.cadperu.com

ma, ya podemos adelantar que siempre es imprescindible el ba-


lance en una serie lo suficientemente prolongada de tiempo como
para poder llegar a cualquier conclusión relevante. En algunos ca-
sos puede interesar sólo un periodo concreto (p.ej. el año pasado),
pero cualquier afirmación requerirá su comparación respecto a los
valores medios para que tenga algún significado (p.ej. el año pasa-
do se infiltraron 35 mm, que es el 60% de la infiltración media anual,
luego fue un año seco).

17
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Finalmente cabe tener en cuenta, que para resolver el balance hí-


drico, se debe calcular cada término independientemente, y esto
aporta cierto error, ya que algunos de estos términos pueden ser
difíciles de estimar o calcular. Por esta razón, para cerrar el balance
hídrico se debe considerar un cierto error. Además, si se comparan
diferentes balances, debe tenerse la seguridad que se han calcu-
lado con metodologías equivalentes, ya que si no los resultados
dejan de ser comparables (p.ej. un balance donde la infiltración se
ha estimado como el 20% de la lluvia comparado con otro en que
se ha calculado mediante balances hidrometeorológicos diarios).
Si no es así, deben recalcularse los respectivos términos por un mé-
todo homogéneo.

1.8.3 Cálculo de los principales términos del balance

Como ya se ha comentado, el balance hídrico se calcula en tér-


minos de volumen, de manera que las unidades normalmente utili-
zadas serían los hectómetros cúbicos, considerando el intervalo de
tiempo en el que se ha considerado el balance. Puede calcularse
también expresándolo en altura de agua equivalente (mm), es de-
cir, el volumen dividido por la superficie de la zona en cuestión,
referido siempre a un determinado intervalo temporal.

En primer lugar, el término de la variación de almacenamiento,


puede estimarse a partir de la variación de los niveles piezométri-
cos al principio y al final del periodo de tiempo considerado. Es muy
útil escoger un periodo de tiempo de manera que estos niveles no
varíen desde el principio hasta el final del periodo, así se podrá con-
siderar que las reservas no han variado. De no ser así, para valorar
este término del balance, en el caso de un acuífero libre se puede
calcular a partir de la variación de los niveles piezométricos y de la
porosidad, y en el caso de un acuífero cautivo, del coeficiente de
almacenamiento.

Variación de almacenamiento = variación media de nivel pie-


zométrico x superficie x S1

Evidentemente toda esta información respecto al sistema, es decir,


sobre sus límites, y respecto al tiempo; si es una media, o un año
determinado, o un mes, debe estar presente en todas las repre-
sentaciones que se efectuan del balance para que, simplemente
ojeándolo, se pueda saber exactamente a qué se está referiendo
el balance. Este es un defecto muy molesto pero corriente, en in-
formes en cuyas tablas, gráficos, o cuadros, no especifican clara-
mente unidades, periodo temporal, ... obligando al lector a acudir
al texto para buscar aquella frase perdida donde se indica que el

18
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

balance se refiere al periodo tal.Se debe tener en cuenta también,


que a parte de la tipología de términos que participan en un balan-
ce, hay que comparar términos de órdenes de magnitud similares,
pudiéndose despreciar aquellos que en suma no son representati-
vos. Por muy sofisticada que sea la técnica que empleemos, dificil-
mente se puede aspirar a precisiones mejores que el 10%; en estas
circunstancias, si la infiltración de lluvia es 100 y la recarga del río
0,12, no tiene mucho sentido dedicar mucho esfuerzo a mejorar la
precisión de medida de esta recarga fluvial, mejor trabajamos más
a fondo los balances hidrometeorológicos y analizamos su sensi-
bilidad. Otra cuestión es que por rigor conceptual, en el esquema
del balance aparezcan todos los términos prescindiendo de su re-
levancia en el conjunto, a fin de que quede claro que el balance
está completo.

A partir de aquí, ¿cuáles son los términos que hay que tener en
cuenta en el balance? Evidentemente depende del sistema y
como se haya definido. Por ejemplo, si el balance se aplica a una
cuenca hidrográfica, las aguas superficiales intervienen en el ba-
lance. En cambio, si el balance se aplica a un acuífero, entonces la
relación con las aguas superficiales es simplemente el intercambio
o relación de agua entre el río y el acuífero.

Así pues, parece lógico preguntarse: ¿cuáles son los términos típicos
que deben emplearse en un balance en el caso de la hidrología
subterránea?

1.8.3.1. Términos naturales

Descripción

Cuando se habla de los términos naturales, se consideran aque-


llos presentes en cualquier situación independientemente de que
el acuífero está funcionando en régimen alterado o no por el
hombre, y en consecuencia los términos serían:

• La infiltración de la lluvia: que se calcula mediante los ba-


lances hidrometeorológicos (manualmente explicado en
el apartado 1.7.8 o mediante programas informáticos por
www.cadperu.com

ejemplo BALCIHS o la hoja de cálculo excel EASYBALANCE in-


cluidos en el CD entregado).

• Las interacciones con el agua superficial:

19
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

a. Los ríos que pueden ser influentes (el río aporta agua al acuí-
fero) o efluentes (el acuífero aporta agua al río) .

b. Los manantiales o surgencias, que actúan siempre como re-


bosaderos o aliviaderos de acuíferos.

c. La evapotranspiración directa, etc...

• Los aportes o salidas laterales, como consecuencia de la in-


teracción del acuífero que se estudia con otros acuíferos que
están conectados con él. Estos aportes pueden llegar a ser
importantes.

• Las conexiones con el mar, con lagos...

Cálculo

Todos estos términos deben evaluarse individualmente, mediante


los diversos métodos específicos para cada uno de ellos.

1. Para determinar la infiltración provinente del agua precipita-


da hay que evaluar la cantidad de agua total que entra al
sistema, y por tanto, se deben también considerar los apor-
tes laterales, es decir, los excedentes de eventuales cuen-
cas adyacentes que vierten a la cuenca estudiada. Por lo
tanto, posiblemente, parte de esta agua que llega a la zona
donde se aplica el balance, se infiltrará y llegará al acuífero.

La determinación del volumen infiltrado del agua procedente de la


precipitación, es muy sensible a:

• El valor de la reserva útil del acuífero que se considere ya que


depende de la vegetación, las características del suelo... y
para poder estimarlo se debe tantear diferentes valores de la
reserva útil, que correspondan a sus características para ob-
tener unos valores de infiltración y compararlos con los datos
reales que se dispongan.

• El periodo de tiempo usado en el balance, no se obtiene los


mismos valores, si se considera un balance diario que si se

20
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

considera un balance mensual. Además, para evitar el efec-


to de la reserva inicial, es recomendable empezar a calcular
el balance hidrometeorológico un poco antes del periodo
que realmente nos interesa.

A continuación se expone un ejemplo con el fin de comprobar que


según se efectúe un balance hidrometeorológico diario o mensual,
los valores que obtenemos de infiltración procedente de la lluvia,
son radicalmente diferentes.

a. Balance hidrometeorológico mensual: se tienen los datos de


la precipitación total del mes de agosto 250mm, el valor de
la reserva útil del acuífero RU=50mm y su estado al principio
del mes RI=0 y el valor de la evapotranspiración potencial del
mes considerado 160mm. Con todo, se puede establecer el
balance hidrometeorológico del mes de agosto, de manera
que se plantea el balance para este mes:

RI + P – ETP = RF (reserva final del mes de agosto) O sea: 0 + 250


– 160 = 90 mm

Como este valor supera la reserva útil (máximo 50mm), la infiltración


procedente del agua de lluvia para el mes de agosto, y por lo tanto
una de las entradas a considerar en el balance del acuífero sería
de

90 mm – 50 mm =

b. Balance hidrometeorológico diario: a continuación se realiza


el cálculo del balance hidrometeorológico diario consideran-
do las mismas condiciones iniciales que en el caso anterior.
Es preciso tener el valor de la precipitación diaria, la evapo-
transpiración potencial diaria durante todo el mes, el valor de
la reserva útil (50mm) y su estado al empezar el mes (0mm). www.cadperu.com

21
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Que es más de cuatro veces superior al cálculo del balance hidro-


meteorológico mensual. Es decir que calculando la infiltración del
agua de lluvia al acuífero a partir de un balance hidrometeorológi-
co diario o mensual, se obtienen valores totalmente diferentes. Se
puede concluir que en el caso del clima mediterráneo, para cal-
cular la recarga del acuífero procedente de la infiltración del agua
de lluvia, deben efectuarse balances hidrometeorológicos diarios,
considerando los valores reales de lluvia diaria.

Es importante comentar la no-linealidad de la infiltración respecto


a la reserva útil, es decir, el doble de reserva útil no implica la mitad
de infiltración, como puede comprobarse en los siguientes cálculos
del mismo caso anterior del balance hidrometeorológico diario del
mes de agosto, pero considerando una reserva útil de 100 mm,
que inicialmente está vacía.

Según como se hubiese distribuido la lluvia a lo largo del mes, sin


embargo, también podríamos encontrar situaciones en que al do-
blar la reserva útil la infiltración se reduce a la quinta parte. Entonces
cabe preguntarse, cómo se calcula o evalúa esta reserva útil.

Dicho factor depende normalmente del terreno, de su pendiente,


de la vegetación, de su sequedad o humedad, etc., con lo que la
mejor opción es efectuar un análisis de sensibilidad.

Actualmente con los medios informáticos de que disponemos, se


puede solucionar este balance con diferentes valores de reserva
útil, por ejemplo, 30, 50, 70, 100, 150 que son valores típicos y
realizar una comprobación. Si tenemos una evolución de niveles
en el acuífero, se podrá ver perfectamente en qué días se ha pro-
ducido la recarga, ya que se corresponden con episodios de saltos
del nivel piezométrico. Entonces, se trataría de ajustar la reserva útil
al valor a partir del cual se produce cierta infiltración en esos días
en los que hemos detectado oscilaciones de niveles, y en que la
recarga calculada es coherente con la variación de nivel.

22
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Así, a partir de la magnitud de la oscilación del nivel y conocida la


porosidad del terreno, puede estimarse la recarga, y posteriormen-
te en función de ello, ajustar cuál es el óptimo de reserva útil de la
zona en cuestión. También es frecuente poder ajustar dichos pará-
metros a partir de balances químicos basados en la composición
de las diferentes aguas.

2. En cuanto a las interacciones con la red superficial:

a. En el caso de un río, sería ideal tener estaciones de aforos


aguas arriba y en la salida del sistema analizado, con el fin
de poder evaluar la variación del caudal y por lo tanto la
cantidad de agua que puede infiltrarse hacia el acuífero o a
la inversa. Pero en la mayoría de los casos, no se dispone de
dichos elementos.

Una posible solución es intentar evaluar los aportes o pérdidas


de un río mediante la piezometría, si es posible. Es decir, to-
mando medidas del nivel piezométrico en los alrededores del
cauce del río para intentar determinar el comportamiento de
éste respecto al acuífero, y posteriormente poder estimar un
valor del gradiente (en el próximo capítulo se explicará cómo
se estiman caudales a partir de gradientes).

b. En el caso de los manantiales, puede ser más fácil determi-


nar el caudal, además, muchas veces existen estaciones de
bombeo que nos pueden proporcionar los datos o estaciones
de aforo de cabecera, generalmente más precisas que las
de los cursos medios y bajos.

c. Las diversas maneras de medir la evapotranspiración ya se


han desarrollado en la clase 1.4 y 1.5.

3. Los aportes o salidas laterales son difíciles de evaluar (como


por ejemplo parte de la lluvia infiltrada en una cuenca veci-
na), puesto que la conexión con otros acuíferos en profundi-
dad es difícil de conocer. Se podrían evaluar con la ayuda
de métodos químicos, o con estimaciones hidrogeológicas,
como ya se verá.
www.cadperu.com

4. En cuanto a las conexiones con el mar, se sabe que en los


acuíferos costeros el flujo se dirige al mar; por lo tanto una
extracción cerca de la costa puede provocar un cierto apor-
te de agua salada. Sin embargo, no siempre implicará que
existe un flujo de agua salada, a considerar en el balance.
Este tema será analizado en detalle más adelante.

23
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

1.8.3.2. Términos relacionados de la explotación del agua

Descripción

Los términos derivados de la explotación del agua recogen los que


se refieren a una actuación artificial del hombre sobre el sistema.
Por tanto, se trata sobretodo de bombeos y posibles recargas (zo-
nas de riego, pérdidas de canalizaciones..).

Cálculo

• Extracciones para abastecimientos urbanos: La información


es fácil de obtener, puesto que los caudales obtenidos nor-
malmente se utilizan para abastecer una determinada po-
blación; o bien existe una empresa que efectúa la explota-
ción y distribución del agua y, por lo tanto, se puede saber
qué cantidad de agua distribuye, o bien ésta se puede esti-
mar.

La estimación puede hacerse conociendo más o menos cuál es


la dotación por habitante y día (por ejemplo se suele considerar un
valor típico de 150 a 200 L/hab/día) de aquella zona. Evidentemen-
te esta dotación puede tener muchas variaciones, por ejemplo si
existe una red de distribución en malas condiciones, provocará
muchas pérdidas de agua (que en el balance representarán una
entrada en el acuífero del subsuelo donde se ubique la población).
En estas circunstancias, se dan casos en que la dotación unitaria,
por ejemplo, en lugar de 200 L/hab/día, pase a ser de 500 L/hab/
día.

Este aspecto puede ser menos relevante si la población está justo


encima del acuífero, ya que el que haya muchas pérdidas no tiene
demasiada importancia porque estas pérdidas se reinfiltran hacia

24
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

el acuífero. Por lo tanto, si se dice que son 200 L/hab/día (aunque


en verdad sean 500 L/hab/día), como estos 500 L/hab/día no llegan
a los habitantes, sino que 300 L/hab/día se pierden otra vez por las
conducciones, el balance neto sigue siendo 200 L/hab/día.

En cambio, si esta población está en otra cuenca, a la cuenca


donde se le extrae el agua, le estamos extrayendo 500 L/hab/día
y las pérdidas de estas conducciones se infiltrarán en otro acuífero
considerándose una recarga para este último.

Para poder estimar estas pérdidas de agua de la red de distribu-


ción, una manera es a partir del volumen de agua que realmente
consume la población (si no se tiene este valor se pueden hacer
las estimaciones de consumo por habitante y día) y el volumen de
agua que la compañía de abastecimiento extrae realmente para
satisfacer esta demanda. La diferencia entre ambos valores repre-
sentarán las pérdidas de agua de la red de distribución.

De la misma manera, las redes de saneamiento también suelen


tener pérdidas importantes que pueden devolver agua al acuífero
con un agravante, que la calidad de esta agua estará alterada.
También sería considerada una entrada al sistema a tener en cuen-
ta en el planteamiento del balance hídrico.

• Extracciones industriales: En estos casos, la única solución


es efectuar un inventario detallado, es decir, se visitan las in-
dustrias para intentar conocer sus consumos de agua, pero
como frecuentemente las industrias son cada vez más rea-
cias a proporcionar información sobre este tema, debe recu-
rrirse a efectuar estimaciones, según el proceso industrial que
llevan a cabo en cada industria.

Así, por ejemplo, puede estimarse el consumo de agua anual de


una industria papelera que fabrica tantas toneladas de papel al
año a partir de consumos específicos que se encuentran en la bi-
bliografía. Sin embargo, se debe tener en cuenta dos factores:

1. La enorme variabilidad de consumo de agua en función del


tipo de industria (Manual Custodio-Llamas Tabla 20.21, Pág.
www.cadperu.com

2.052); e incluso dentro de una misma clase de industria,


como sucede, por ejemplo, en el sector de las papeleras,
según la cantidad o la clase de papel que fabriquen, los pro-
cesos de recuperación o reutilización del agua, etc.

2. La evolución de la gestión de los recursos en el sector de


la industria. Así, por ejemplo, el sector de la papelera o el
sector de la piel, que hace unos años consumían elevadas

25
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

cantidades de agua, actualmente, y gracias a los planes de


ahorro, los impuestos, la mejora de los procesos industriales,
etc., la cantidad de agua empleada se ha reducido mucho
respecto a la utilizada anteriormente. En algunos lugares, esta
extracción de agua va ligada al pago de tasas, tributos o
impuestos sobre vertidos, de manera que en ocasiones se
puede obtener información sobre el consumo de agua de
una determinada industria a través de la administración; aun-
que ello no siempre es posible, ya que puede considerarse
una información confidencial o de tipo fiscal. El problema se
complica además cuando se producen disparidades en las
políticas de tarificación entre territorios.

• Extracciones agrícolas: Es también un tema complicado,


porque en ocasiones, pueden llegar a existir miles de pozos,
y entonces hay que actuar por la vía de las dotaciones de
riego. Uno de los métodos indirectos más empleado es el de
estudiar el tipo de cultivo, puesto que en función del tipo de
cultivo se podrá deducir el volumen necesario de agua para
regar (por ejemplo Tabla 20.17, Pág. 2.050 del Manual Cus-
todio-Llamas), que coincidirá con el volumen extraído por los
pozos. También aquí se da una gran variabilidad en función
de la tecnología de riego utilizada y las políticas de tarifica-
ción.

Se debe considerar también, como sucedía en el caso de las pér-


didas de la red de distribución de agua para el abastecimiento
urbano, los retornos de riego y las pérdidas de agua de los siste-
mas de canalización, como una entrada de agua al acuífero. Para
cuantificar correctamente esta infiltración, se debería calcular a
partir del balance hidrometeorológico sumándole a la lluvia la par-
te del agua de riego que se aplica, en las épocas que se riega, y
referido a las superficies cultivadas.

Otra cuestión muy importante a tener en cuenta son los factores


de estacionalidad. Así, por ejemplo, en las áreas de viviendas de
segunda residencia aumenta la demanda de agua los fines de
semana, o en las poblaciones turísticas se efectúan muchas más
extracciones para satisfacer la demanda en los períodos vacacio-
nales; en ambas ocasiones, en las áreas de viviendas de residen-
cia habitual suele disminuir ligeramente la demanda.

Por último, cabe insistir una vez más sobre la importancia del fac-
tor tiempo. En efecto, para determinar correctamente el tipo de
problema, se debe determinar la escala de tiempo afectada, es

26
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

decir, si se trata de una semana, de un mes o de un año, así como


las incidencias anómalas que se hayan producido durante el perio-
do estudiado. Así, por ejemplo, en una industria puede producirse
una huelga y que durante un mes no se efectúen extracciones.
Esto provocaría que las curvas de consumo no se ajustasen al ritmo
normal de extracciones. O bien la existencia de períodos anormal-
mente húmedos en épocas de riego, que pueden hacer disminuir
notablemente los usos agrícolas. De ahí la importancia de consi-
derar adecuadamente el factor tiempo a la hora de establecer un
balance, analizando además tanto los valores para el periodo de
interés como su relación con valores promedio referidos a una serie
suficientemente larga de años.

Otros elementos antrópicos que pueden tener un papel relevante


en el planteamiento de los términos del balance, consisten en la
variación de las condiciones de contorno: en la relación río–acuífe-
ro por la construcción de embalses; pequeñas presas muy difundi-
das a lo largo de los ríos; recargas artificiales o alteración de las
superficies de inundación (generalmente reducidas por su ocupa-
ción por urbanizaciones o ejes viarios); así como la alteración de la
infiltración por impermeabilización del suelo en los núcleos urbanos
o por cambios en la densidad y tipología de especies vegetales;
o en las pendientes de las vertientes (abancalamiento); la deseca-
ción de zonas húmedas, etc.

www.cadperu.com

27
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

NIDA

D
U
II

Modelos de Precipitación – Escorrentía

Lea el Texto de
1 esta unidad
3

Ver
videoconferencia 2 Realice
actividad
www.cadperu.com

29
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

MODELOS DE PRECIPITACIÓN –
ESCORRENTÍA
Ver pdf Hidrología Superficial 3: Relación Precipitación – Escorrentía
(página 1 al 4)

INFILTRACIÓN Y EVAPOTRANSPIRACIÓN

INFILTRACIÓN

1.7.1. Introducción

El agua que penetra a través de la superficie del terreno se dice


que se ha infiltrado. De esta agua infiltrada, una parte es retenida
por el suelo, hasta alcanzar la capacidad de campo, y una vez
superada esta retención máxima, el resto del agua desciende por
gravedad hasta el nivel de saturación (o nivel freático) y se denomi-
na infiltración eficaz (o recarga por infiltración vertical).

1.7.2. Medida de la infiltración

La infiltración es uno de los términos dentro del balance hidrológico


que implican mayor incertidumbre o error. Los factores que influyen
en la capacidad e intensidad de infiltración son locales, de manera
que con los métodos de medida se obtiene ese valor de represen-
tatividad.

• Lisímetros.

• Ensayos en parcelas experimentales.

• Infiltrómetros (medición in situ): proporcionan medidas muy


locales de la capacidad de infiltración y varían mucho de un
suelo a otro, en función de sus características físicas, índice
de humedad inicial, intensidad de precipitación, dimensión
de las gotas de lluvia, vegetación.....

Se utilizan dos tipos de infiltrómetros, los de lluvia y los del tipo inun-
dación. En los primeros se aplica el agua de forma y cantidad simi-
lar a la precipitación real, en cambio en el segundo tipo el agua se
www.cadperu.com

aplica como una lámina sobre el área cerrada de manera que se


obtenga una altura constante.

1.7.3. Determinación de la infiltración en una cuenca pequeña

La curva de infiltración con el tiempo puede estimarse por medio


del análisis de un hidrograma de escorrentía, considerando así las
variaciones de la precipitación.

31
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Con un pluviómetro se puede obtener una estimación de la preci-


pitación caída en la cuenca de estudio. Mediante una estación de
aforos puede construirse el hidrograma de la avenida y evaluarse
los valores de las escorrentías hipodérmica, directa y subterránea.
En términos generales:

Infiltración = Precipitación - (Escorrentía Superficial + Evapovapo-


transpiración)

La evapotranspiración y la detención superficial podrían ser des-


preciadas mientras se produce la precipitación, de manera que si
se resta la escorrentía directa de la precipitación, se obtendrá un
valor de la infiltración.

1.7.4. Volumen de agua infiltrada en periodos de tiempo largos

El volumen de agua infiltrada varía anualmente ya que depende


de la distribución de la lluvia a lo largo del año. Para realizar el
cálculo de el volumen de agua infiltrada se pueden seguir varios
procedimientos:

• Balance hidrometeorológico anual (explicado en el aparta-


do 1.4): a partir de los valores de la precipitación, temperatu-
ra y valor de la reserva, se obtiene el valor de los excedentes
que corresponden a la infiltración del agua procedente de
la lluvia.

• Balance hídrico (ampliado en el siguiente apartado): a partir


del análisis de las oscilaciones piezométricas anuales. Consi-
derando el volumen de precipitación y las variaciones de los
niveles piezométricos puede estimarse el volumen de agua
que se ha infiltrado. Se debe tener en cuenta los valores de
las extracciones de agua por bombeos.

• Balance de cloruros. Consiste en determinar la relación entre


la concentración de cloruros en el agua de precipitación y
en el agua subterránea. En el caso que la escorrentía directa
no produzca un lavado de sales, el balance del ión cloruro se
puede expresar como

I* Ci =(P - ED)* Cp +as - av + a v

Siendo

Cp la concentración media en ppm de cloruros en la lluvia.

Ci la concentración media en cloruros en el agua subterránea o


de infiltración profunda.

32
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

as la cantidad de cloruros aportados por el terreno o añadidos


artificialmente (g/m2/año).

av la cantidad de cloruros retenida por la vegetación (g/m2/año).


a’v la cantidad de cloruros devueltos al terreno por la putrefacción
de la vegetación (g/m2/año).

1.7.5. Capacidad de infiltración

Es la máxima cantidad de agua que un suelo puede absorber por


unidad de tiempo, para unas condiciones iniciales prefijadas. Es la
altura de una lámina de agua uniforme sobre el terreno que éste
puede absorber en una unidad de tiempo. La capacidad de in-
filtración no es constante en el tiempo y se mide en mm/tiempo
(en general, mm/día o mm/hora) y puede calcularse según Horton
(Figura 1.7.1) como:

f = fc + (f0 - fc) - e

f = capacidad de infiltración en el instante t

fc = valor constante de la capacidad de infiltración que se alcanza


al cabo de un cierto tiempo

f0 = valor máximo de la capacidad de infiltración al comienzo de


la lluvia

k = constante positiva que depende del tipo de terreno. Se puede


determinar una vez conocidos f en un tiempo t, y determinamos f0
en el suelo completamente seco y fc en el suelo totalmente satu-
rado.

t = tiempo transcurrido desde el comienzo de la lluvia

www.cadperu.com

Figura 1.7.1. Representación de la capacidad de infiltración res-


pecto al tiempo según la función de Horton.

Así, si se cumple que la intensidad de precipitación es superior al


valor de la capacidad de infiltración de un determinado suelo, ésta
33
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

decrecerá según describe esta curva. Si en un determinado ins-


tante la intensidad de precipitación es inferior a la capacidad de
infiltración, ésta irá disminuyendo debido a que el suelo se irá satu-
rando progresivamente.

La intensidad de infiltración se define como la cantidad real de


agua que se infiltra en un momento dado por unidad de tiempo.

Si i es la intensidad de lluvia y f la capacidad de infiltración en el


instante t: i < f

la intensidad de infiltración será i

i>f la intensidad de infiltración es f.

El volumen infiltrado después de un tiempo t se define como:

La infiltración se expresa en mm de altura de agua. También se


utiliza el término de coeficiente de infiltración que se expresa como
(I/P)*100.

1.7.6. Factores que afectan a la infiltración

La tabla siguiente recoge las características o factores, tanto


del medio permeable como del fluido que se infiltra, que influyen
sobre la infiltración:

34
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

* La letra I representa la infiltración

** Capacidad de infiltración

1.7.7. Índices de infiltración

Se pueden utilizar diversos índices de infiltración (ver pág 347 del


manual Custodio-Llamas) que se obtienen fácilmente a partir de los
datos de precipitación y de escorrentía directa.

• Índice o de retención: Admitiendo que para una tormenta


y una cuenca determinadas con unas condiciones iniciales
dadas, el valor de la recarga de la cuenca es constante du-
rante la duración de la lluvia. Este índice representa la intensi-
dad media por encima del cual todo excedente de caudal
se transforma en escorrentía como puede verse en el siguien-
te gráfico.

• i (mm/h)Intensidad de la lluvia

• Índice W: es el valor medio de infiltración durante la tormenta,


en la que durante la duración de la lluvia neta, la intensidad
de precipitación es superior a la capacidad de infiltración.
La duración de la lluvia neta, es muy inferior a la duración
total del aguacero, con lo que la aplicación de este índice
es bastante complicado. Se calcula restando la precipita-
ción la escorrentía directa y la parte del agua de detención
superficial y representándolo en el gráfico como en el caso
anterior. Será, por lo tanto, un índice de infiltración con mayor
precisión.

EVAPOTRANSPIRACIÓN
www.cadperu.com

Se define como la suma de la evaporación y de la transpiración,


para áreas cubiertas de vegetación, dada la imposibilidad prácti-
ca de cuantificar por separado ambos fenómenos. Se definen dos
tipos de evapotranspiración: la evapotranspiración potencial y la
evapotranspiración real.

• La evapotranspiración potencial (ETP) en teoría es la evapo-


transpiración que se produciría si se cumplieran dos hipótesis:

35
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

que existe un desarrollo vegetativo óptimo y que la humedad


del suelo coincida con su capacidad de campo. De hecho,
se aplica a la evapotranspiración que se produce si la hume-
dad del suelo es suficiente para que la vegetación absorba
toda el agua que necesita sin limitación por sequedad del
suelo.

• La evapotranspiración real (ETR) representa lo que realmen-


te vuelve a la atmósfera por evapotranspiración, en las
condiciones reales del área estudiada. Ésta depende de la
cantidad de agua disponible para evaporarse en una zona
determinada, ya que si el suelo llega al punto de marchi-
tez permanente, las plantas pierden la capacidad de extraer
más agua y por tanto la evaporación real quedará limitada.

En otras palabras, la ETP es el límite máximo de la ETR.

El concepto de evapotranspiración está ligado a algunos tér-


minos que es necesario precisar:

• El uso consuntivo: Se refiere a aquellos usos del agua que im-


plican la pérdida de una parte del agua empleada. Así pues,
el uso consuntivo agrario puede identificarse con la evapo-
transpiración real en las zonas de cultivo. No obstante, mu-
chas de las técnicas de riego aplican volúmenes superiores
a éste, de manera que parte del agua de riego se infiltra. Este
retorno de riego puede estimarse en términos generales en
un 20%, aunque las nuevas técnicas más eficientes pueden
reducir mucho esta pérdida.

• Demanda de agua para riego: Es el producto de la diferen-


cia entre la evapotranspiración potencial y la evapotranspi-
ración real por el coeficiente de eficiencia: (ETP-ETR) x coefi-
ciente de eficiencia, es decir, la cantidad de agua que es
necesario aplicar al suelo para que las plantas se desarrollen
de manera óptima, teniendo en cuenta las pérdidas del sis-
tema de riego aplicado.

Para estimar el orden de magnitud del fenómeno de la evapotrans-


piración, se contabiliza que un 70% de la precipitación retorna a la
atmósfera mediante evapotranspiración; pudiéndose alcanzar en
ocasiones hasta el 90%. Así, por ejemplo, para una ETR de 3-4 mm/
día, se supone que de 30 a 40 toneladas de agua por hectárea
han retornado a la atmósfera en un día. Más adelante veremos
la forma de calcular todos estos términos con mayor rigor, ya que
estas estimaciones son demasiado groseras para cualquier calculo
de recursos de aguas subterráneas y su utilización.
36
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Métodos empleados para estimar la evapotranspiración:

• Métodos teóricos:

• Balance de energía: Se realiza un balance de energía a un


elemento de volumen con base en la superficie y que con-
tiene cobertura vegetal y está en contacto con la atmósfera.

El inconveniente de este método es que se deben tomar muestras


muy próximas a la superficie y en el caso de terrenos poco homo-
géneos esta función es complicada para obtener un valor medio
de la evapotranspiración en la parcela.

• Perfiles de humedad y velocidad del viento: La aplicación de


este método consiste en obtener unos valores de la evapo-
transpiración a partir de las medidas de los gradientes de hu-
medad y velocidad del viento. Puede aplicarse este método
para intervalos de tiempos cortos.

• Flujo turbulento de humedad: Se obtiene unos valores aplicando


unas fórmulas con las medidas realizadas en intervalos pequeños
de tiempo del flujo de vapor y del calor sensible que discurre por él.

• Métodos empíricos o semi-empíricos:

• Thornthwaite

• Turc

• Blaney-Criddle

• Penman

• Métodos directos o instrumentales:

• Evapotranspirómetros: en este caso se aplica a un suelo cu-


bierto de vegetación obteniéndose valores a partir de los
cuales puede plantearse un balance de agua.

• Lisímetros: El funcionamiento es el mismo que se ha descrito


en la medición de la evaporación, pero esta vez, el suelo
estará cubierto de vegetación, de manera que los datos cal-
www.cadperu.com

culados serán de evapotranspiración real.

• Parcelas y cuencas experimentales: el mismo funcionamiento


descrito en el apartado de cálculo de la evaporación, pero
experimentando con un suelo cubierto de vegetación, de
manera que los datos obtenidos sean de evapotranspiración.

La ETR, a su vez, se estima a partir de la ETP, mediante balances hi-


drometeorológicos que serán ampliados más adelante. El valor de

37
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

la ETP coincide con el valor máximo que puede alcanzar la ETR. Se


debe tener en cuenta el agua que realmente está disponible en la
zona y que se podrá evapotranspirar. De manera que se plantea el
siguiente balance:

Siendo P = ETR + EXCEDENTES + R

Excedentes = escorrentía + infiltración

R la variación del almacenamiento en el suelo, es decir, el valor


de la reserva de agua utilizable por las plantas al principio del pe-
riodo menos este mismo valor al final del mismo.

SIMULACIÓN HIDROLÓGICA Y ESTIMACIÓN DE LA COMPONENTE SUB-


TERRÁNEA

Tratamiento e Interpretación de hidrogramas

La cuenca hidrográfica

Concepto: La cuenca hidrográfica es un conjunto de puntos del


territorio en los que la parte del agua de lluvia que se drena por es-
correntía no subterránea sale por un mismo punto de la red fluvial.

Idealmente, una cuenca es una superficie de área cerrada en su


perímetro excepto en un punto y que cumple una relación directa
lluvia / salida.

• El relieve: Las cuencas están limitadas por montañas o terre-


nos elevados, estos límites se denominan divisorias de aguas.

38
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Otro tipo de cuenca, son las endorreicas, que se definen como


cuencas de un lago o de una red hidrográfica que no tiene un dre-
naje hacia el mar. En general, en toda cuenca, puede definirse un
cauce principal, el de más longitud y otros de secundarios. Puede
ocurrir que el caudal del río no sea constante de manera que se
considerará como cauce principal el más largo y que finalice su
trayecto en la salida de la cuenca.

1.11.1.1. Componentes del yetograma

En algunas cuencas no hay una relación directa entre una preci-


pitación considerable, y un caudal importante, es decir que lluvias
muy intensas pueden ocasionar pequeños caudales y al revés. En
gran medida este hecho vendrá determinado por la permeabili-
dad del terreno, la topografía, la vegetación, etc..

• Agua circulante:

En la denominada agua circulante se distinguen las diversas com-


ponentes que se describen a continuación:

S : agua sobre la superficie de transporte del agua (ríos)

ED : escorrentía superficial directa (agua superficial)

EH : escorrentía hipodérmica

ES : escorrentía subterránea:

ES1 : drena la cuenca


www.cadperu.com

ES2 : drena fuera de la cuenca

ES3 : aportaciones subterráneas de otras cuencas

• Pérdidas:

HS : retención (humedad del suelo) D : detención (pequeñas balsas)


INT : intercepción (vegetación) EV : evapotranspiración (vegetación
y superficies libre de agua)
39
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

1.11.1.3 La lluvia eficaz y absorción

Se puede definir el concepto de lluvia neta como la parte del total


de lluvia que ocasionará escorrentía superficial por los cauces de la
cuenca. La forma más rápida y sencilla de estimar la lluvia neta es
aplicando un coeficiente de escorrentía, en cuencas muy peque-
ñas, sobretodo si son bastante impermeables.

Coeficiente escorrentía = volumen circulado en estación aforo %

volumen precipitado

Otra manera de estimar la lluvia neta, es a partir de la capacidad


de infiltración del terreno de la cuenca, ésta expresada en mm/h se
puede representar en el yetograma del episodio de precipitación.
De manera que en los momentos en que la intensidad de precipi-
tación, supere la capacidad de absorción del terreno, se producirá
escorrentía, pero si la capacidad de infiltración supera la intensidad
de precipitación, el suelo será capaz de absorber la lluvia caída y
no se producirá escorrentía.

40
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Para determinar el valor de la capacidad de absorción, se debe


suponer que:

• su valor es constante en toda la cuenca.

• La escorrentía superficial es uniforme en toda la cuenca.

• La precipitación presenta una distribución espacial uniforme


en toda la cuenca.

De manera que conociendo el valor de la escorrentía total, se po-


drá trazar una recta paralela al eje de abcisas en el yetograma
resultando el valor del volumen que queda por encima de dicha
recta muy similar al valor del volumen de la escorrentía, obtenién-
dose así el valor de la lluvia neta. Determinando el valor de la lluvia
neta y la lluvia eficaz, se puede calcular el valor de la capacidad
media de absorción:

C= h (lluvia eficaz mm / - lluvia netamm / h)

tiempo lluvia eficaz h

La lluvia efectiva se define como la parte de la lluvia total que real-


mente llega al suelo y se define como la diferencia entre la lluvia
total y la lluvia interceptada por la vegetación.

La lluvia eficaz se define como la suma de la lluvia neta, la infiltra-


ción y el almacenamiento en depresiones.

1.11.1.4 Las precipitaciones y la infiltración

El agua de las precipitaciones que no se infiltra y no se evapotrans-


pira, se denomina escorrentía superficial o directa y se mide en mm
www.cadperu.com

de altura del agua o en unidades de volumen.

En la siguiente figura se representa el yetograma de una lluvia uni-


forme durante un tiempo t, siendo el área del rectángulo proporcio-
nal al volumen total de agua precipitada.

Desde el momento en que se inicia una tormenta, puede suceder


cierto tiempo hasta que empieza a detectarse una variación del
caudal o escorrentía directa en la estación de aforos. En la siguien-

41
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

te figura puede observarse como se reparte el agua aportada por


una tormenta individual uniforme en el espacio y tiempo.

Lluvia eficaz o neta: in = ED

S es la parte de la lluvia que cae directamente sobre superficies


de agua. Lluvia que forma la escorrentía, es lo que se mide en la
estación de aforos : ie = S + ED + EH + ES(1+3)

Absorción, es la parte de la lluvia que no produce escorrentía di-


recta:

ia = ie - in + HS +D +I +ES2 +EV Si consideramos la i (t)= cte

1.11.2 EL HIDROGRAMA

El hidrograma es la representación gráfica de la evolución tempo-


ral del caudal circulando por una sección transversal del río.

El área representa el volumen de agua que ha circulado por la


sección de control durante el intervalo temporal de representación.
Pero el interés del hidrograma en hidrología, es estudiar la respuesta
de una cuenca para una precipitación determinada.

42
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

El hidrograma superficial se define como la variación del caudal en


la salida de una cuenca. Proporciona información de cómo es la
cuenca, por esta razón una misma precipitación el hidrograma que
proporcionará será diferente en una cuenca u otra.

1.11.2.2 La forma del hidrograma.

P (mm)

G : centro de gravedad de la lluvia

Lluvia neta o eficaz

Absorción o infiltración

Q (m3/s)

t
www.cadperu.com

43
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Tiempo de base: es el tiempo desde que se inicia la crecida hasta


el final de la escorrentía directa. Es el tiempo desde que llega la
primera gota de lluvia neta a la estación de aforos, hasta que llega
la última.

Tiempo de crecida: es el tiempo des de que llega la primera gota


de lluvia neta a la estación de aforos hasta que llega la punta de la
avenida. Este tiempo es importante para la previsión de avenidas.

Tiempo de respuesta o de retraso: es el tiempo que se produce


desde el centro de gravedad de la lluvia neta (yetograma) hasta la
punta del hidrograma. Es el tiempo que tarda en llegar la máxima
intensidad de lluvia a la estación de aforos.

Tiempo de concentración: es el tiempo desde el final de la lluvia


neta hasta el final de la escorrentía directa. Es el tiempo que tarda
en llegar una gota de lluvia desde el punto más alejado de la cuen-
ca hasta la salida de la misma.

Factores que afectan a la forma del hidrograma

Factores climáticos

Características de la lluvia:

• Intensidad

• Duración

• Distribución espacial

• Movimiento de la tormenta (velocidad y dirección)

Tipos de episodio de lluvia:

• Frentes (fríos, calientes, o oclusión)

• Frentes convectivos

• Ciclogénesis mediterránea

44
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

• Gota fría

• Temporales (en el Mediterráneo): Levante

Condiciones:

• Lluvia antecedente

• Temperatura: nieve, agua, deshielo.

Factores fisiográficos

El suelo:

• Tipo

• Usos (vegetación, etc...)

• Incendios

• Déficit de humedad inicial.

• Capacidad de infiltración

Morfología de la cuenca:

• Laderas

• Pendientes

• Erosión

• Orientación

Morfología fluvial:

• Densidad

• Proporción de bifurcación

• Proporción de longitud

• Proporción de áreas

• Laminación en el transporte: retención de volumen de agua


en las llanuras de inundación con la consiguiente disminución
del caudal punta.
www.cadperu.com

Infraestructuras fluviales:

• Presas

• Encauzamientos

• Cortas (meandros fluviales rectificados o cortados)

45
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

1.11.2.3 Curva de agotamiento del hidrograma

Es la curva de descenso del hidrograma

Q = Qo * e - o t

ecuación de la curva del vaciado lineal de la cuenca.

Donde es el coeficiente de agotamiento, característico de cada


acuífero, en los apuntes se ha escrito para el momento t0.
depende de las condiciones iniciales y parámetros físicos del
acuífero.

Conclusión:

La ley exponencial corresponde a la misma teoría lineal del


hidrograma unitario: es una herramienta muy útil para separar la
componente subterránea.

46
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Principios: volumen almacenado

LnQ = Ln(Q0.t) et / t0t

LnQ = LnQ0 + Ln(e-t t)

LnQ = LnQ0 -t - t = LnQ0 - t (ecuación de recta)

Para la aportación subterránea:

Para la escorrentía directa e hipodérmica:

www.cadperu.com

47
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

48
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

NIDA

D
U III

Escorrentía Hipodermica (EH)


Escorrentía Directa (ED)

Lea el Texto de
1 esta unidad
3

Ver
videoconferencia 2 Realice
actividad
www.cadperu.com

49
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

ESCORRENTÍA HIPODERMICA (EH)


ESCORRENTÍA DIRECTA (ED)
1. Se debe pasar el gráfico del hidrograma a una gráfica se-
milogarítmica Q vs tiempo (gráfico A) o también se puede
representar una gráfica lineal lnQ vs . A continuación se ajus-
tan a rectas paralelas a la rama de agotamiento. Se calcula
la ecuación de estas rectas, como ecuaciones normales de
una recta y=ax+b, considerando dos puntos de ésta.

Y se transforman dichas rectas a las ecuaciones de la curva expo-


nencial del hidrograma Q/T sabiendo que:

De esta manera se define la ecuación de la curva exponencial de


agotamiento.

2. Separación de la aportación de la escorrentía subterránea en


el hidrograma.

Se corta la rama del caudal base en el instante de ocurrencia del


caudal pico (se traza la vertical que pase por el caudal pico hasta
que corta con la recta que define el caudal base o curva de ago-
tamiento anterior) originando el punto Ln QA. A continuación se une
este punto con el punto Ln QC de la recta que define la curva de
agotamiento posterior. Finalmente se obtiene una línea que delimi-
ta la aportación subterránea en el hidrograma (gráfico A y B).

3. Separación de la aportación superficial e hipodérmica. Por


resta directa entre el caudal de la aportación subterránea
obtenida en el paso anterior y el caudal total, se obtiene el
caudal superficial e hipodérmico. Se representa y se obtiene
una curva (gráfico C y D).

4. Separación de la escorrentía hipodérmica. En el gráfico D se


traza una recta entre el momento en que empieza el ascen-
www.cadperu.com

so de la avenida (punto X) y el punto Ln(QI-QC). Esta recta de-


limitará la aportación de la escorrentía hipodérmica (gráfico
E), se calcula su ecuación de la misma manera como se ha
hecho en el primer paso con la curva de agotamiento.

5. Separación de la escorrentía directa. Por resta directa entre


el caudal de escorrentía hipodérmica obtenida en el paso
anterior y el caudal de la escorrentía directa más la hipodér-

51
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

mica obtenida en el punto 3, se obtiene la aportación de la


escorrentía directa (gráfico F).

Finalmente se obtiene la aportación de cada escorrentía, y se


puede representar la descomposición del hidrograma en sus tres
componentes:

1.11.2.4. El hidrograma unitario

Es la aproximación lineal a la respuesta de la cuenca (medido en


la estación de aforos de la salida de la cuenca) a una lluvia neta
uniforme y constante en toda la cuenca.

Proceso de obtención: diagrama de distribución ( ver pág 388 Ma-


nual Custodio-Llamas)

La curva de diagrama de distribución del hidrograma unitario es su


representación en porcentaje del volumen total desaguado, expre-
sado en un histograma d’amplitud igual al intervalo temporal del
muestreo: “ t”.

Fracciones (en décimas) del tiempo básico

52
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Pasos a seguir:

1. se elimina el caudal de base y se obtiene la escorrentía di-


recta.

2. se calcula el diagrama de distribución para cada lluvia

3. se hace la media de los valores del pico

4. se hace la media del tiempo de ocurrencia de los picos

5. para el resto de los valores, se hace también la media

- Tiempos: Los tiempos se definen por coeficientes temporales de la


forma del hidrograma.

Tiempo de concentración de Temez:

Donde:

L : longitud total del río (cauce principal) en km

S : Pendiente media del cauce principal, siendo S= z/L


( z es la diferencia entre las cotas máxima y mínima de la cuen-
ca).

Tc se obtiene en horas

Tiempo de concentración Kirpich (o fórmula de California):

Donde:

L : longitud total del río (cauce principal) en km

J : Pendiente media del cauce principal, siendo J= z/L


( z es la diferencia entre las cotas máxima y mínima de la cuen-
ca).

Tc se obtiene en horas
www.cadperu.com

Relación entre el tiempo de concentración y el tiempo de respues-


ta: Tc=K*TD siendo K una constante para cada cuenca.

Descomposición de hidrogramas el Flujo Base

El caudal de una corriente, en general, está constituido de dos par-


tes. Una de ellas, el flujo base, proviene del agua subterránea y la
otra, la escorrentía directa, proviene de las últimas lluvias. No todas

53
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

las corrientes reciben aporte de agua subterránea, en todas las pre-


cipitationes provocan escorrentía directa. Sólo las precipitaciones
importates, es decir, intensas y prolongadas, producen un aumento
significativo en la escorrentía de las corrientes. La contribución de
agua subterránea a las corrientes de agua no puede fluctuar rápi-
damente debido a la baja velocidad del flujo.

Las corrientes en cuenca con suelos permeables, y que reciben


gran aporte de agua subterránea, muestran caudales altos soste-
nidos a lo largo del año, con una relación baja entre caudales de
avenidas (crecidas). y caudales medios. Las corrientes en cuencas
con suelos de baja permeabilidad, y que más bien aportan agua a
los acuíferos, p-:nes.altrltre.caudales.-ico y promedio, con -cauda-
les muy bajos o nulos entre crecientes. El hidrograma A de la figura
8.1 corresponde a las corrientes del primer tipo, y el hidrograma S a
las del segundo tipo. Nuestros ríos que desembocan en el Pacífico
tienen características del tipo B.

FIG. 8.1 CAUDALES MEDIOS Y CAUDALES PICOS

El hidrograma típico de una tormenta aislada (figura 8.2) consta de


una rama ascendente, un segmento de cresta y una rama des-
cendente o curva de recesión.

54
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

FIG. 8.2 EL HIDROGRAMA TIPICO

La forma de la rama ascendente está influenciada sobre todo por


las características de la lluvia que causa el ascenso. La forma de la
recesión en cambio es bastante independiente de ello y más bien
depende de las características de la cuenca (apartado 7.1). Se
asume por lo general’ que el punto de inflexión de la curva de re-
cesión coincide con el tiempo al cabo del cual cesa la escorrentía
superficial hacia los cursos; de ahí en adelante la curva representa
el aporte de agua almacenada dentro de la cuenca. El último tra-
mo de la curva de recesión representa casi completamente el flujo
de agua subterránea.

Separación en el hidrograma

En un hidrograma de crecida hay necesidad de separar lo que es


escorrentía directa y lo que es flujo base. No existe una forma única
de, hacer la separación, y puesto que las definiciones de las dos
componentes SQP un tanto arbitrarias los métodos de separación
son también arbitrarios.
www.cadperu.com

FIG. 8.3 SEPARACION EN EL HIDROGRAMA

55
Anotaciones
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Supongamos ya efectuada la separación (figura 8.3). El método


empleado debe ser tal que el tiempo de escorrentía directa T lla-
mado tiempo base sea siempre el mismo de tormenta a tormenta
de la misma duración y en la misma cuenca. Hay que tener cui-
dado con esto porque sólo así se puede aplicar el concepto de
hidrograma unitario que se estudia luego.

El primer intento realizado para efectuar la separación consiste en


terminar la escorrentía directa un tiempo prefijado después del
pico del hidrograma. Se ha formulado para este tiempo N en días:
N = a Ab

donde A es el área de la cuenca en km2 y a, b coeficientes em-


píricos. Hallados a, b, para una región, se ha sugerido aumentar N
en un 50% para hoyas largas y angostas u hoyas con pendientes
Suaves, y disminuir N en un 10% para cuencas empinadas. Sin em-
bargo, el valor de N quizá sea mejor determinarlo observando un
cierto número de hidrogramás, teniendo presente que el tiempo
base no debe ser excesivamente largo y que el incremento en
aporte de agua subterránea no debe ser muy grande.

Un procedimiento para la separación del hidrograma consiste en


prolongar la recesión anterior a la tormenta hasta un punto bajo el
pico del hidrograma (AB, figura 8.4), y conectar este punto median-
te una línea recta con uno sobre el hidrograma localizado N días
después del pico (punto C).

FlG. 8.4 METODOS DE SEPARACION

56
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico
Anotaciones

Otro procedimiento consiste en trazar simplemente la recta AC. La


dife rencia en el volumen del flujo base por estos dos métodos es
tan pequeña que se justifica la simplificación siempre y cuando,
naturalmente, se utilice consistentemente un solo. método.

Un tercer método de separación se ilustra mediante la recta ADE.


Se proyecta hacia atrás la línea de recesión hasta un punto bajo
el punto de inflexión de la rama descendente; luego se traza un
segmento arbitrario ascendente desde A (inicio de la rama ascen-
dente) hasta conectarse con la recesión antes proyectada. Este
metodo de separación es susceptible de un estudio analítico y es el
indicado cuando el aporte de agua subterránea es relativamente
grande y llega a la corriente con rapidez.

www.cadperu.com

57
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Actividades de autoaprendizaje

1. ¿Que entiendes por El Ciclo Hidrológico?

2. ¿Qué entiendes por los Modelos de Precipitación – Escorrentía?

www.cadperu.com

59
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Bibliografía

1. CHOW, V. DR. MAIDMENT Y L.W. MAYS (1924) - Hidrolía aplicada

2. FERRER, J.F. (1993). - Recomendaciones para el cálculo Hidrometeorológico de


Avenidas CEDEX, Ministerio de Obras Públicas, Madrid.

3. MINISTERIO DE FOMENTO (1999). Máximas lluvias diarias en la España peninsular.

4. MINISTERIO DE FOMENTO (2016). Norma 5.2 - IC drenaje superficial

5. MINISTERIO DEL AMBIENTE (2000 - 2002). las precipitaciones máximas en 24 horas y


sus periodos de retorno en españa.

6. PILGRIM, D. H. Y I. CORDERY (1993) - “flood runoff”

7. SALAS, L. Y J.A. FERNANDEZ (2006) Nueva tecnología para el análisis de la variable


intensidad máxima anual de precipitación ecología n° 20

www.cadperu.com

61
El Agua Subterránea en el Ciclo Hidrológico

Relación de lecturas

Lectura 1: HIDROLOGÍA SUPERFICIAL

Lectura 2: HIDROGRAMAS DE CRECIDAS

www.cadperu.com

63

Anda mungkin juga menyukai