Anda di halaman 1dari 4

Ejercicios físicos para prevenir el riesgo de caídas en mayores

Entre un 28-35% de personas mayores de 65 años o más sufren una caída al año, porcentaje que aumenta aumenta
a un 32-42% en aquellas personas mayores de 70 años. Estos datos indican la magnitud las caídas como problema
mundial de salud pública, tal y como pone de manifiesto el Reporte Global de la Organización Mundial de la
Salud en Prevención de Caídas en Adultos Mayores.

Consciente de ello, desde la Fundación Siel Bleu se propone realizar esta rutina de ejercicios, adaptados según las
capacidades y preferencias de cada persona mayor, para prevenir el riesgo de caídas:

Estos ejercicios deben realizarse en la medida que sea posible, sin llegar a la extenuación ni a sentir dolor. Es
recomendable que se vaya aumentando la cantidad y la intensidad de forma progresiva en la medida que el mayor
se vaya acostumbrando a los ejercicios y realizar actividad física adaptada varias veces por semana y si es posible bajo
la supervisión de un especialista en actividad física. Y en cualquier caso se debe consultar al médico si se siente
cualquier indisposición o se percibe signos o síntomas fuera de lo normal.

Cabe recordar que la práctica de actividad física adaptada (AFA) en personas mayores institucionalizadas reduce en
un 35% las caídas, tal y como se desprende del estudio HAPPIER. Esta investigación, realizada a nivel europeo y
promovida por la Fundación Siel Bleu, confirma el impacto positivo y preventivo de los programas de actividad
física adaptada en la calidad de vida y autonomía de las personas mayores en el ámbito residencial.
La práctica de actividad física adaptada reduce un
35% las caídas entre los mayores
La práctica de actividad física adaptada (AFA) en personas mayores institucionalizadas reduce en un 35% las
caídas, tal y como se desprende del estudio HAPPIER.

Esta investigación, realizada a nivel europeo y promovida por la Fundación Siel Bleu, confirma el impacto positivo
y preventivo de los programas de actividad física adaptada en la calidad de vida y autonomía de las personas
mayores en el ámbito residencial.

Fuente estudio HAPPIER

Desarrollado durante 12 meses en 32 residencias de mayores de 4 países europeos (Francia, Bélgica, Irlanda y
España) en el estudio HAPPIER han participado 450 residentes y pone de manifiesto la reducción del número de
caídas, un riesgo predominante para las personas mayores. Así, la práctica de actividad física adaptada permite evitar
aproximadamente una caída leve al año y una caída accidental cada 18 meses de media. Además, evita una caída
grave por persona cada 5 años.

Tal y como comenta Ferrán López, Técnico Supervisor Siel Bleu, “los ejercicios deben ser adaptados según las
capacidades y preferencias de cada uno de los participantes. Por eso, en Siel Bleu siempre empezamos nuestros
programas con una evaluación inicial de cada participante: medimos el grado de movilidad, equilibrio y fuerza.
Luego fijamos objetivos individualizados de mejora y los revisamos de manera regular. Eso nos permite medir el
impacto y ver tendencias sin olvidar la adaptación diaria según el humor, la ganas y la dinámica de grupo para cada
sesión”.

En este sentido, Leocadio Rodríguez Mañas, Jefe de Servicio de Geriatría del Hospital Universitario de Getafe,
apunta que “el ejercicio físico es un pilar fundamental en la promoción y mantenimiento de la autonomía funcional
en las personas mayores. Hoy día es la principal intervención para prevenir y tratar la fragilidad así como para
revertir, en la medida de lo posible, el deterioro funcional asociado a situaciones invalidantes, desde la artrosis de
rodilla al Accidente Cerebrovascular”.

El Dr. Rodríguez Mañas afirma que “sabemos además que hay un ejercicio para cada situación, y existen datos que
demuestran el beneficio de los programas de ejercicio incluso en personas de edad muy avanzada (mayores de 90
años) con deterioros cognitivos y discapacidad. Por tanto, los límites para promover el ejercicio físico son
escasos. Lo que sí hay que hacer es adaptarlo a las condiciones de cada paciente. Y sus beneficios se extienden,
además de al paciente, a su entorno privado (cuidadores, familiares…) y asistencial, tanto social como sanitario”.

Este experto asegura que el estudio HAPPIER es un claro ejemplo de que “cuando se planifican y desarrollan
programas de ejercicio físico que se adaptan, tanto en sus medios como en sus objetivos, a las características y
necesidades de la población concreta a quien van dirigidos, los resultados son satisfactorios. El estudio HAPPIER
aporta un programa sistematizado y reglado que puede reproducirse fácilmente en el medio residencial”.
Por otra parte, esta investigación también evidencia que la evaluación de los costes ligados a las caídas puede afectar
a los costes financieros directos de la atención médica y hospitalaria. Por ejemplo, el cálculo de coste/beneficio, en el
caso de Francia, ha puesto de manifiesto un beneficio neto año de entre 421 millones a 771 millones de euros.

El estudio HAPPIER ha contado con el respaldo de la Comisión Europea y se ha desarrollado en el marco del Año
Europeo del Envejecimiento Activo y de la Solidaridad Internacional y cuenta con el apoyo del IPP francés
(Institute de Politiques Publiques) y Danone Fondo Ecosystem.

Los resultados del estudio están disponibles a través de la plataforma actiVIDA, proyecto de colaboración entre Siel
Bleu y Nutricia, la división de nutrición médica de grupo Danone, que tienen como objetivo impulsar el
envejecimiento activo en el ámbito de las residencias mediante el Ejercicio Físico Adaptado y la Nutrición
Médica Avanzada.

Los interesados pueden consultar más información sobre el estudio HAPPIER aquí.

También le puede interesar:

 La práctica de actividad física adaptada reduce un 35% las


 Recomendaciones para prevenir el riesgo de caídas en…
 La UPNA imparte un curso de prevención de fragilidad y…
 Terapias de prevención de caídas en personas mayores
 Vídeo: Estrategias para promover la movilidad y prevenir…

Recomendaciones para prevenir el riesgo de caídas en


personas mayores
Las caídas constituyen una de las principales causas de discapacidad y fragilidad en las personas mayores, y para
prevenirlas es necesario realizar una evaluación e intervención personalizadas que aborde aspectos como la actividad
física, el ajuste de medicación o la revisión de los riesgos en el hogar, afirman desde Sanitas Residencial.

Según estudios recientes del Sistema Nacional de Salud, alrededor de un 30% de los mayores de 65 años y la mitad
de los mayores de 80 años que viven en comunidad se cae al menos una vez al año, y la mitad tiene caídas
recurrentes, es decir, se vuelve a caer en el mismo año.

Las caídas afectan a un 30% de los mayores de 65 años y a un 50% de los mayores de 80 años

La caída es, por tanto, un factor de riesgo para sufrir nuevas caídas, e incluso “puede provocar el denominado
síndrome del temor a caerse que supone el inicio de la discapacidad en el anciano”, advierte el doctor David Curto,
jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial.
Tal y como apunta este especialista, las causas son múltiples, y muchas veces no existe una causa evidente, por lo
que “hay que intentar minimizar las causas detectables externas como calzado inadecuado, muebles, alfombras o
suelos resbaladizos y las causas intrínsecas de la persona como medicaciones o patologías crónicas”.

Además de la alta prevalencia, hay que tener en cuenta las consecuencias de este problema. Según datos del SNS,
más de un 70% de las caídas tiene consecuencias clínicas como fracturas, heridas o esguinces y más de la mitad
presenta secuelas posteriormente. De hecho, el 50% de las personas que sufren una fractura por una caída no recupera
el nivel funcional previo, y una de cada diez caídas genera lesiones graves que incluyen la fractura de cadera.

Mantener una actividad física habitual y una alimentación equilibrada son dos hábitos que protegen de sufrir
caídas a las personas mayores de 65 años con un estado saludable. Pero a la hora de prevenir las caídas en el caso de
mayores con un estado de salud frágil se requiere un abordaje personalizado con acciones concretas para cada caso.

“No existe un método único para prevenir las caídas. Es muy importante un enfoque centrado en la persona porque
cada persona tiene sus propias causas y/o factores de riesgo. Además de un enfoque interdisciplinar, en el que
diferentes profesionales deben decidir lo mejor para la persona”, afirma el doctor David Curto.

Así, a la hora de evaluar los riesgos de caída se deben tener en cuenta factores como haber sufrido caídas previas,
los trastornos de la marcha o el equilibrio, el estado de nutrición e hidratación, la medicación, así como el estado del
hogar.

Es importante también abordar cuadros clínicos específicos y enfermedades crónicas frecuentes en edad avanzada,
como depresión, diabetes, osteoporosis o artrosis. En base a la valoración de riesgos, tres son las principales líneas
de prevención:

 Un programa de actividad física que trabaje la resistencia aeróbica; la flexibilidad; el equilibrio, la fuerza o
la potencia muscular. “Caminar, pedalear o incluso ejercicios de la vida diaria como levantarse, agacharse o
subir y bajar escaleras mejoran la resistencia aeróbica. Los estiramientos, el yoga y el pilates son buenos para
trabajar la flexibilidad y el equilibrio”, recomienda el doctor Curto.
 Ajustar de la medicación, tanto para revisar la polimedicación o consumo de cinco o más fármacos al día así
como para corregir posibles prescripciones inadecuadas. “La polifarmacia y el nivel de prescripción
inadecauda, que también es elevado a esta edad, son dos factores de riesgo. Por ejemplo, pasar de cinco a
cuatro medicamentos, siempre que se pueda, o ajustar determinados tipos, como los antihistamínicos,
contribuye a disminuir el riesgo”, recomienda el jefe de Gestión Asistencial de Sanitas Residencial.
 Revisar del hogar para modificar cualquier riesgo ya que más del 50% y hasta el 70% de las caídas se
produce en casa. Factor de especialmente a tener en cuenta en el caso de en personas con alto riesgo de caída
o deterioro visual.

También le puede interesar:

 Caídas en personas mayores: riesgos, causas y prevención


 Ejercicios físicos para prevenir el riesgo de caídas en…
 Matia Fundazioa pone en marcha un programa para el…
 El ejercicio físico y una buena alimentación son clave…
 Casi la mitad de los mayores de 65 años sufre al menos una…

Anda mungkin juga menyukai