MONOGRAFÍA:
AUTORES:
ESCUELA PROFESIONAL
MEDICINA HUMANA
CICLO I
1
TRUJILLO, JUNIO 2015
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN…………………………………………………………………..…3
CONCLUSIONES…………………………………………………………..……….22
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS…………………...……….……………..…..24
ANEXOS.………………………………….……………………….………………...26
INTRODUCCIÓN
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La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA por sus siglas en español y ALS por
sus siglas en inglés) es una enfermedad poco conocida por la población, sin
embargo, el año pasado, en las redes sociales, observamos a varias personas
arrojándose un balde con agua helada para luego donar 10 dólares a una
asociación de personas con ELA.
Este reto, que tuvo tanta acogida, se denominó “Ice Bucket Challenge”.
Tuvo como finalidad apoyar a todas las personas que padezcan Esclerosis Lateral
Amiotrófica y a la vez informar a todos aquellos que desconocían de su
existencia.1
Por lo tanto, nuestro objetivo con esta monografía es dar a conocer las
causas y consecuencias de la Esclerosis, y a la vez profundizar más en el tema
para aumentar nuestros conocimientos médicos, puesto que sabes que esto nos
servirá en un futuro.
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La Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) de origen desconocido es una
enfermedad neurodegenerativa que se caracteriza por un deterioro clínico rápido
y muerte de las neuronas motoras, centrales y periféricas en la corteza cerebral,
tallo cerebral y médula espinal produciendo debilidad y atrofia muscular que
desemboca en parálisis.2
1.2. ETIMOLOGÍA
1.3. ETIOLOGÍA
5
pero esta observación no ha sido confirmada, y el papel de los enterovirus
incluyendo el poliovirus no ha sido establecido con claridad.
1.4. EPIDEMIOLOGÍA
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1.5. NEUROPATOLOGÍA
La hipótesis más reciente es que la muerte celular podría ser causada por
sustancias endógenas que se comportan como endotoxinas. Se ha implicado
específicamente al glutamato endógeno en el medio extracelular de la médula
espinal y otras regiones cerebrales, basado en el hecho de que el glutamato y el
aspartato se encuentran elevados en el líquido cefalorraquídeo. Se propone que
existe una alteración en el transporte del glutamato, lo que lleva a que éste tienda
a acumularse, y esto facilitaría la hiperactivación de los receptores de glutamato,
lo que llevaría a la muerte neuronal.
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Se reportó degeneración mitocondrial, manifestada por vacuolización de las
mitocondrias, lo que lleva al déficit de energía celular, que ha sido reportada
esporádicamente en las neuronas motoras de los pacientes con ELA.
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La pérdida de neuronas motoras corticales provoca adelgazamiento de las
vías corticoespinales que descienden por la cápsula interna y tronco encefálico
hasta los cordones laterales de la sustancia blanca de la médula espinal; la
pérdida de éstos proporciona a la médula espinal una mayor consistencia. (4)
2. ELA Y SU DESARROLLO
Algunos estudios dicen que un hombre por cada dos mujeres tiene la
enfermedad. Los factores genéticos forman parte del cuadro de la enfermedad
que puede presentarse en familias. Hasta ahora la evidencia de encontrar
factores comunes a las personas que desarrollan esta enfermedad han sido
frustrantemente poco claros, aunque en un descubrimiento reciente de un una
asociación indica que las causas probables son que la persona puede adquirir los
radicales libres que son moléculas que portan cargas eléctricas que los hacen
inestables.
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Bulbar: evolución más rápida y prácticamente desde el principio hay
disfasia (dificultades en el habla), disfagia (dificultades para tragar),
salivación excesiva y aumento de las mucosidades.
2.1. SINTOMAS
El inicio de la ELA puede ser tan sutil que a menudo se pasan por alto los
síntomas. Los síntomas tempranos de la ELA pueden incluir: tirar cosas,
tropezarse, articular mal, calambres musculares, contracciones, o rigidez de los
músculos, debilidad muscular que afecta un brazo o una pierna, el habla
deteriorada o nasal; o dificultad para masticar o tragar y movimientos repentinos.
Estas quejas generalizadas después se convierten en una debilidad más obvia o
atrofia, que puede llevar a que el médico sospeche de ELA. Otras personas con
estos síntomas tienden a asumir que son signos normales de la vejez.
Glenn Harwood fue diagnosticado con ELA en 1994, tenía 50 años, decidió que
la mejor arma a esta lucha sería la actitud, continuó trabajando, viajando y
aprendiendo. Los aliados más importantes en esta lucha fueron su familia que
incluyó a su esposa, sus dos hijos y dos nietos que le prestaron toda la ayuda,
alegría y ánimos necesarios.5
Las partes del cuerpo afectadas por los primeros síntomas de ELA
dependen de qué músculos del cuerpo se dañan primero. En algunos casos, los
síntomas iniciales afectan una de las piernas y los pacientes experimentan
dificultad al caminar o correr o se dan cuenta de que tropiezan o tambalean más a
menudo. Al principio algunos pacientes ven los efectos de la enfermedad en una
mano o brazo cuando se les dificulta hacer tareas sencillas que requieren
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dexteridad manual como abotonarse una camisa, escribir o girar la llave en una
cerradura. Otros pacientes notan problemas al hablar.
Para que los pacientes sean diagnosticados con ELA, deben tener señales
y síntomas de daño de las neuronas motoras superiores e inferiores que no
puedan ser atribuidos a otras causas. Aunque la secuencia de los síntomas
emergentes y la tasa de progresión de la enfermedad varían de persona a
persona, eventualmente los pacientes no podrán pararse o caminar, acostarse o
levantarse de la cama solos, o usar sus manos y brazos. La dificultad para tragar
y masticar lesiona la habilidad del paciente para comer normalmente y aumenta el
riesgo de que se atore. Mantener el peso se convertirá en un problema. Debido a
que la enfermedad generalmente no afecta su capacidad cognoscitiva, los
pacientes se dan cuenta de su pérdida progresiva de funciones, y se pueden
angustiar o deprimirse. Los profesionales de la salud deben explicar el curso de la
enfermedad y describir los tratamientos disponibles de manera que los pacientes
puedan tomar decisiones informadas con anticipación.
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pueden enfrentar un riesgo mayor de neumonía durante las etapas posteriores de
la ELA.
2.2. DIAGNÓSTICO
Ya que los síntomas de la ELA pueden ser similares a aquellos de una gran
variedad de otras enfermedades o trastornos más fáciles de tratar, hay que
realizar los exámenes apropiados para descartar la posibilidad de otras
enfermedades. Una de estas pruebas es la electromiografía (EMG), una técnica
especial de registro que detecta la actividad eléctrica en los músculos. Algunos de
los hallazgos de la EMG pueden apoyar el diagnóstico de ELA. Otra prueba
común mide la velocidad de conducción de los nervios (NCV, por sus siglas en
inglés). Anormalidades específicas en los resultados de la NCV pueden sugerir,
por ejemplo, que el paciente tiene un tipo de neuropatía periférica (daño a los
nervios periféricos) o miopatía (enfermedad muscular) en vez de ELA. El médico
puede ordenar una resonancia magnética (MRI, por sus siglas en inglés), un
procedimiento no invasivo que utiliza un campo magnético y ondas de radio para
hacer imágenes detalladas del cerebro y de la médula espinal. Aunque a menudo
los exámenes de resonancia magnética son normales en pacientes con ELA, es
posible que revelen problemas que puedan estar causando los síntomas, como un
tumor en la médula espinal, un disco herniado en el cuello, una siringomielia, o
espondilosis cervical.
De acuerdo con los síntomas del paciente y los resultados del examen
médico y de estas pruebas, el médico puede ordenar exámenes de sangre y orina
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para eliminar la posibilidad de otras enfermedades así como exámenes de
laboratorio de rutina. En algunos casos, por ejemplo, si el médico sospecha que el
paciente tiene una miopatía en vez de ELA, es posible que realice una biopsia
muscular.
2.3. PRONÓSTICO
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El único factor relacionado con la supervivencia es la edad de inicio: cuanta
más edad, menor tiempo de supervivencia.
En la mayoría de los casos los pacientes mueren sin dolor y casi siempre
dormidos. La muerte suele producirse, como hemos comentado, por un fallo
respiratorio, en la que hay una acumulación de dióxido de carbono en la sangre,
que tiene un efecto narcótico en el paciente, que provoca que se encuentre
somnoliento.
3. TRATAMIENTO
3.1. Farmacología
3.2 Rehabilitación
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deseados: mayor equilibrio de pie, movimientos activos e individuales de brazos y
piernas, etc.
Masoterapia (Masajes):
Hidroterapia y Natación:
Mantener la movilidad.
Pese a que la ELA afecta a la movilidad de casi todos los músculos, las
ayudas técnicas existentes pueden compensar las discapacidades que afectan las
posibilidades de caminar. En las primeras fases de la enfermedad, puede ser
suficiente ayudarse de un bastón o de una muleta.
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Para evitar caídas por inestabilidad, será conveniente utilizar una prótesis
tobillo-pie o andadores, según las necesidades de cada persona. Posteriormente,
para cuando se ha perdido la capacidad de caminar incluso con ayuda, se pueden
utilizar sillas de ruedas. Generalmente, al principio, la silla de ruedas se utiliza
para trayectos largos fuera del domicilio. Las sillas de ruedas pueden ser
manuales o eléctricas. Las primeras se clasifican en tres categorías según el
tamaño de las ruedas traseras. Las de ruedas grandes son adecuadas para
largos trayectos, las pequeñas para utilizarla dentro de casa y las de ruedas de
tamaño medio, para ambos entornos. Con independencia del modelo elegido, es
recomendable que la silla disponga de un respaldo alto y de un reposacabezas.
En este sentido, se dispone de modelos reclinables, adecuados para disminuir la
presión y evitar irritaciones o daños en la piel. Por su parte, las sillas de ruedas
eléctricas son las que permiten un mayor grado de autonomía dentro y fuera del
hogar.
Mantener la comunicación.
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dispositivo es una decisión personal, aunque existen una serie de factores que
pueden influir en la opción final:
Foniatra:
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Psicólogo del lenguaje:
Logopeda:
4. ELA PERÚ
Es una asociación peruana, que brinda apoyo a las personas que padecen de
Esclerosis Lateral Amiotrófica. Este grupo nació de la unión de familiares y
afectados con este mal, en septiembre del 2007; pero finalmente fue inscrita en
los registros públicos del estado peruano en octubre del 2009.
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CONCLUSIONES
21
Como la ELA comparte con otras enfermedades degenerativas y
neurológicas muchos síntomas, se suele llegar a un diagnóstico definitivo
descartando otras posibilidades.
22
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
23
Lewis P. Merrit Neurología. Décima edición; Madrid; Mc GRAW-HILL-
INTERAMERICANA DE ESPAÑA, S.A.U. 2002
http://espanol.ninds.nih.gov/trastornos/esclerosis_lateral_amiotrofica.htm
http://www.alsa.org/en-espanol/qu-es-la-ela.html?
referrer=https://www.google.com.pe/
24
ANEXOS
ENCUESTA
Esclerosis Lateral Amiotrófica
I. Datos:
1.2 Sexo: M M F
25
Sí No
26
CUADROS ESTADÍSTICOS
Sí No
27
¿Sabe en que consiste la esclerosis lateral amiotrófica?
Sí; 34.62%
No; 65.38%
Sí No
Sí; 9.62%
No; 90.38%
28
¿Conoce las causas de la Esclerosis Lateral Amiotrófica?
Si ; 28.85%
No; 71.15%
Si ; 40.38%
No; 59.62%
29
¿Cree que es necesario informar a la población sobre esta enfermedad?
No; 9.62%
Si ; 90.38%
FICHAS
Ficha Hemerográfica
Ficha de Paráfrasis
Ficha de Resumen
“El diagnóstico se basa en reconocer el cuadro clínico característico. La prueba
más útil es lade
Epidemiología electromiografía
la ELA que muestra la degeneración progresiva. La
biopsia muscular revela atrofia neurógena”.
“La enfermedad aparece en las épocas intermedias y finales de la vida. Tan solo el
30
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10% de L.
losSecretos de la neurología.
casos empiezan antes de Primera edición.
los 40 años México.
y el 5% antesMc
deGraw-Hill
los 30. Los
Interamericana
varones sufren el editores.
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dos veces más que las mujeres. Cerca del 5% de los