La división de poderes es una forma de organizar el Estado separando sus
funciones en 3 poderes.
La división de poderes es una forma del estado de derecho moderno y que
tiene un ordenamiento de las funciones del estado por medio de un organismo especializado.
Los 3 poderes en el que se divide son: Poder ejecutivo: se encarga de
administrar directamente el estado por medio de funcionarios como el Presidente, secretarios y ministros.
Poder Legislativo: Es el encargado del debate y de la redacción,
formulación y aprobación de leyes.
Poder judicial: tiene a su cargo el ejercicio de la justicia en todos los
niveles del Estado, siendo impartido por el tribunal mayor de justicia o corte suprema y los tribunales inferiores.
El motivo de esta división de poderes es concentrar el poder en un solo
organismo estatal y que por supuesto llevaría directo al nepotismo. Dividir la autoridad pública es anticiparse al riesgo de un escenario político despótico. Dividiendo el poder en varios organismos se evita ese panorama y ninguno de los 3 poderes tendrá la capacidad de instalar un régimen autoritario.