capítulo 1
Introducción a la
psicología social
"Nuestras vidas
están conectadas
por miles de h ilos
h abía una vez un hombre cuya segunda esposa era vanid osa y egoísta. Esta mu-
jer tenía dos hijas que eran igualmente vanidosas y egoístas. Sin embargo, la del
hombre era dulce y amable. Esta muchacha dulce y amable, a quien tod os conocemos
invisibles." como Cenicienta, aprendió pronto que lo mejor era hacer lo que le decían, aceptar los
insultos y no molestar a sus engreídas hermanastras.
Herman Melville. Un día, gracias a su hada madrina, Cenicienta pudo escapar a su situación y acudir
a un gran baile, en el que atrajo a un apuesto príncipe. Cuando el joven enamorado
encontró después a una poco atractiva Cenicienta en su ruinoso hogar, en un princi-
pio no lograba reconocerla.
¿Inverosímil? La leyenda demanda que aceptemos el poder de la situación. En una
situación determinada, cuando representaba un papel en la presencia de su dominante
madrastra, la obediente y poco atractiva Cenicienta era una persona distinta de la
dulce y hermosa muchacha que conoció el príncipe. En su casa, ella se encogía d e
miedo; en el baile se sintió más hermosa, y caminó, habló y sonrió como si lo fuera .
psicología social psicología social es una ciencia que estudia la influencia de nuestras situaciones, con
Estudio científico de la especial atención en la manera en que nos percibimos y afectamos unos a otros. Dicho
forma en que las personas de forma más precisa, es el estudio cien tífico de la forma en que las personas piensan, influ-
piensan, infl uyen y se yen y se relacionan con los demás, y lo hace planteando preguntas que nos intrigan a to-
relacionan con los demás. d os (figura 1-1).
figura 1-1
La psicología social
es ...
In troducción a la psicología social capítulo 1 5
Estas preguntas tienen algo en común: se refieren a la forma en que las personas se
perciben y afectan entre sí, y de eso se trata la psicología social. Los psicólogos socia-
les estudian las actitudes y las creencias, la conformidad y la independencia, el amor
y el odio.
La psicología social aún es una ciencia joven. Constantemente le recordamos esto a
la gente, en parte como excusa por nuestras respuestas incompletas a algunas de sus
preguntas; pero es verdad. Los primeros experimentos de la psicología social se re-
portaron apenas hace poco más de un siglo
(1898), y el primer libro de texto de esta mate-
ria se publicó hace unos 75 años (1924). No
fue sino hasta la década de los treinta que esta
disciplina tomó su forma actual. Y no fue sino
hasta la Segunda Guerra Mundial cuando los
psicólogos contribuyeron con estudios creati-
vos acerca de la persuasión y del ánimo de
los soldados, que empezó a surgir como el
campo vibrante que es ahora.
figura 1-2
Algunas grandes ofrece principios tales como la selección natural y la adaptación. La sociología se fun-
ideas en la damenta en conceptos como la estructura y la organización social. La música une
psicología social nuestras ideas del ritmo, la melodía y la armonía.
¿Cuáles conceptos se encuentran en la lista breve de las grandes ideas en la psico-
logía social? ¿Cuáles temas, o principios fundamentales, vale la pena recordar des-
pués de olvidar la mayoría de los detalles? Mi lista breve de "grandes ideas que nunca
debemos olvidar" incluye las siguientes, cada una de las cuales revisaremos en los si-
guientes capítulos (figura 1-2).
vitarlos a utilizar grabadoras y micrófonos. Una vez cada doce minutos, durante sus
horas de vigilia, una grabadora operada por una computadora hacía un registro im-
perceptible durante 30 segundos. A pesar de que el periodo de observación ú nica-
mente cubría los días hábiles (incluidas las horas de clase), los estudiantes dedicaban
casi 30 por ciento del tiempo a hablar. Las relaciones son una parte importante de los
seres humanos.
Como criaturas sociales, respondemos a nuestros contextos inmediatos. En ocasio-
nes, el poder de una situación social nos conduce a actuar en formas que difieren de
nuestras actitudes adoptadas. De hecho, a veces situaciones malignas poderosas so-
brepasan a las buenas intenciones, haciendo que las personas accedan a falsedades o
a obedecer con crueldad. Bajo la influencia nazi, muchos individuos aparentemente
decentes se convirtieron en instrumentos del Holocausto. Otras situaciones pueden
provocar una enorme generosidad y conmiseración. Después de la catástrofe del 11 de
septiembre, la ciudad de Nueva York se vio llena de donaciones de alimentos, ropa y
ayuda por parte de voluntarios entusiastas.
El poder de la situación también se hizo evidente, de manera impresionante, en
diversas actitudes hacia la guerra contra Irak, en 2003. Algunos sondeos de opinión
revelaron que estadounidenses e israelíes favorecían abrumadoramente el inicio del
conflicto. Sus primos lejanos, en alguna otra parte del mundo, se oponían de mane-
ra tajante. Dígame dónde vive y adivinaré de manera razonable cuáles eran sus acti-
tudes cuando empezó la guerra (indíqueme su nivel de escolaridad y los medios
masivos que ve y lee, y le diré con mayor confianza su opinión al respecto). Indepen-
dientemente de cómo la historia juzgue este acontecimienta, algo es muy evidente:
nuestras situaciones son importantes.
Nuestra cultura ayuda a definir las situaciones. Nuestros patrones respecto de la
prontitud, la franqueza y la forma de vestir varían de acuerdo con la situación cultu-
ral. Si usted considera que la belleza femenina se relaciona con la delgadez o las cur-
vas, esto dependerá de la época y de la parte del mundo en que vive. Si define a la
justicia social como igualdad (todos reciben lo mismo) o equidad (quienes ganan más
reciben más), ello estará en función de si su ideología ha sido moldeada más por el so-
cialismo o el capitalismo. Si tiende a ser expresivo o reservado, de vestir cómodo o
formal, esto se derivará, en parte, de su cultura y procedencia étnica. Si usted se cen-
tra principalmente en sí mismo -sus necesidades, deseos y moral personales- o en
su familia, clan y grupos comunitarios, dependerá de qué tanto su persona es pro-
ducto del individualismo occidental moderno. Nuestras actitudes y comportamientos
están moldeados por fuerzas sociales externas.
Cuando nos sentimos forzados por presiones sociales evidentes, también podemos
reaccionar de formas que restauren nuestro sentido de libertad. Además, la gente que
pertenece a una minoría numerosa en ocasiones se opondrá y dominará a la mayoría.
Como individuos, no sólo somos criaturas de nuestros mundos sociales, sino también
autores de ellos. Trate usted a los demás de forma cálida y se volverán más agrada-
bles. Lo fundamental es: nuestros universos surgen de la interacción entre situaciones
y personas.
Homey, Abraham Maslow y Carl Rogers- vivieron y trabajaron durante las primeras
dos terceras partes del siglo pasado. La mayoría de los psicólogos sociales que cono-
cerá en este libro continúan vivos. La psicología social también tiene un menor número
de teóricos famosos y muchos desconocidos, investigadores creativos que contribuyen
con concep tos a menor escala. Conoceremos a un puñado de estas personas en los re-
cuadros autobiográficos "La historia detrás de una teoría clásica", a lo largo del libro.
NIVELES DE EXPLICACiÓN
Estudiamos al ser humano desde las distintas perspectivas de las disciplinas acadé-
micas. Éstas van desde las ciencias básicas, como la física y la química, hasta discipli-
nas integradoras, como la filosofía y la teología. La relevancia de las perspectivas
depende de lo que usted quiera abordar, por ejemplo, el amor. Un fisiólogo describi-
ría la química cerebral asociada con el amor apasionado. Un psicólogo social exami-
naría la forma en que diversas características y condiciones - tales como una buena
apariencia, la similitud entre los miembros de la pareja, la exposición repetida- re-
saltan el sentimiento que llamamos amor. Un poeta podría exaltar la experiencia su-
blime que en ocasiones es el amor. No necesitamos suponer que alguno de estos
niveles constituya la explicación real. Por ejemplo, las perspectivas fisiológica y emo-
cional de este sentimiento son tan sólo dos formas de observar el mismo evento. De la
misma manera, una explicación evolutiva del tabú universal del incesto (en términos
del costo genético que paga la descendencia) no reemplaza una explicación socioló-
gica (que podría considerar esta prohibición como una forma de preservar la unidad
familiar) o una teológica (que podría enfocarse en los aspectos morales). Las diversas
explicaciones pueden complementarse entre sí (figura 1-3).
Si toda la verdad forma parte de un tejido, entonces distintos niveles de explicación "Existe un solo
deben ajustarse para formar una imagen completa. Steven Pinker (2002) lo ilustra: conocimiento. Su
"un geógrafo puede explicar por qué la costa de África embona con la de América di- división en materias es
ciendo que las masas terrestres alguna vez fueron adyacentes, pero que estaban asen- una concesión a la
tadas en placas distintas que después se alejaron. La pregunta de por qué las placas se debilidad humana."
- Sir Halford John
movieron es para los geólogos, quienes consideran que un flujo de magma las separó. MacKinder, 1887.
Respecto de las razones por las que el magma se calentó tanto, esos especialistas de-
jarán que los físicos expliquen las reacciones en el centro y manto de la Tierra" (p. 70).
Explicación elemental
12 Introducción a la psicología social
ca de la conformidad; que los sesenta vieran aumentar el interés sobre la agresión con
los disturbios y las crecientes tasas de crímenes; que el movimiento feminista de los
setenta ayud ara a estimular una ola de investigación sobre el género y el sexismo;
que los años ochenta vieran el resurgimiento de la atención a los aspectos psicológi-
cos de la carrera armamentista, y que los noventa estuviesen marcados por el gran in-
terés en que la gente respondía a la diversidad en la cultura, la raza y la orientación
sexual. La psicología social refleja la historia social.
Los valores también influyen en el tipo de personas que se ven atraídas hacia diver-
sas disciplinas (Campbell, 1975; Moynihan, 1979). En su escuela, ¿los estudiantes que
se interesan por las humanidades, ciencias naturales y las ciencias sociales difieren de
manera notable? ¿La psicología social y la sociología atraen a individuos que están re-
lativamente dispuestos a retar la tradición, a personas que se inclinan más a moldear
el futuro que a preservar el pasado?
Finalmente, es obvio que los valores entran en escena como objeto de análisis de la
psicología social. Los especialistas de esta disciplina investigan cómo se forman los
valores, por qué cambian y cómo afectan las actitudes y los actos. Sin embargo, nada
de esto nos indica cuáles son" correctos" .
figura 1-4
¿Qué es 10 que ve?
14 Introducción a la psicología social
también vemos el mundo a través de los lentes de nuestras percepciones. Haga una
pausa: ¿qué puede ver en la figWa 1-4?
¿Puede ver un dálmata olfateando el suelo en el centro de la imagen? Sin esta pre-
concepción, la mayoría de la gente no puede ver al perro. Una vez que su mente tiene
el concepto, éste controla su interpretación de la imagen, tanto que se vuelve difícil no
ver al animal.
Ésta es la forma en que funciona nuestra mente. Mientras usted lee estas palabras,
no se ha dado cuenta de que también está viendo su nariz. Su mente bloquea de la
conciencia algo que está ahí, si estuviera predispuesto a percibirlo. Esta tendencia a
prejuzgar la realidad con base en nuestras expectativas es un hecho básico acerca de
la mente humana. Un juego de futbol americano entre Princeton y Dartmouth, en
1951, ofreció una demostración clásica de la manera en que las opiniones controlan las
interpretaciones (Hastorf y Cantril, 1954; véase también Loy y Andrews, 1981). El
juego se hizo popular como un encuentro con mucho resentimiento; resultó ser uno
de los más rudos y sucios en la historia de ambas escuelas. Un jugador estrella de
Princeton fue derribado por muchos jugadores, aplastado y, finalmente, obligado a
salir del campo con la nariz rota. Surgieron los golpes y lesiones mayores en ambas
partes. El desempeño general difícilmente coincide con la imagen de gentileza de la
clase alta de la Ivy League.
Poco tiempo después, dos psicólogos, uno de cada escuela, mostraron filmaciones
del partido a estudiantes en cada una de las universidades. Los alumnos jugaron el
papel de científicos observadores, señalando cada infracción conforme la veían, y .de-
terminando quién era el responsable. ¿Podrían dejar de lado su lealtad? Los de Prince-
ton, por ejemplo, observaron el doble de violaciones por parte de Dartmouth, que las
que vieron los alumnos de esa escuela. La moraleja es: existe una realidad objetiva allá
afuera, pero siempre la vemos a través de los lentes de nuestras creencias y valores.
Puesto que el trabajo de los especialistas en cualquier área a menudo comparte un
cultura punto de vista en común o proviene de la misma cultura, es probable que sus su-
Comportamiento, ideas, puestos nunca sean cuestionados. Lo que damos por hecho -las creencias comparti-
actitudes y tradiciones das que los psicólogos sociales europeos llaman nuestras representaciones sociales
perdurables compartidas (Augoustinos e Innes, 1990; Moscovici, 1988)- frecuentemente son nuestras convic-
por un grupo grande de ciones más importantes y, no obstante, las menos examinadas. Sin embargo, en oca-
personas, y que se siones alguien ajeno al campo llama la atención hacia estos supuestos. Durante los
transmiten de una
años ochenta, críticos feministas y marxistas expusieron algunos de los supuestos no
generación a otra.
examinados en la psicología social. Los primeros resaltaron sesgos sutiles, por ejem-
representaciones plo, el conservadurismo político de algunos científicos, lo que favoreció una interpre-
sociales tación biológica de las diferencias por género en el comportamiento social (Unger,
Creencias socialmente 1985). Los segundos se enfocaron en los sesgos competitivos individualistas, por
compartidas -como las ejemplo, en el supuesto de que la conformidad es mala y que las recompensas indivi-
ideas y valores duales son buenas. Desde luego, ambas perspectivas tienen sus propios supuestos, y
ampliamente como críticos de la "corrección política" académica, son afectos a hacer señalamientos.
difundidos -, incluidos En el capítulo 3 veremos más formas en las que las preconcepciones guían nuestras
los supuestos e ideologías interpretaciones. Nuestro comportamiento está menos dirigido por la situación tal
culturales. Nuestras cual es que por como la construimos.
representaciones sociales
nos ayudan a comprender Los conceptos psicológicos contienen valores ocultos
el mundo.
Los valores también influyen en los conceptos. Considere los intentos por definir una
buena vida. Los psicólogos pueden calificar a la gente como madura o inmadura, así
como adaptada o desadaptada, como mentalmente saludable o enferma. Pueden ha-
blar como si establecieran hechos, cuando en realidad están haciendo juicios de valor.
Por ejemplo, el psicólogo de la personalidad Abraham Maslow fue conocido por sus
sensibles descripciones de las personas "autorrealizadas" (gente que, con sus necesi-
Introducción a la psicología social capítulo 1 15
Resumen Los valores de los psicólogos sociales pe- cripción científica de lo que es y la pres-
netran en su trabajo de formas eviden- cripción ética de lo que debe ser. Esta pe-
tes, corno en los ternas que eligen para netración de los valores en la ciencia no
investigar, y de formas sutiles, corno sus es exclusiva de la psicología social. El
supuestos ocultos cuando forman con- hecho de que el pensamiento humano
ceptos, eligen etiquetas y ofrecen conse- tienda a ser apasionado es precisamente
jos. Existe una conciencia cada vez mayor la razón por la que necesitarnos de la ob-
de la subjetividad de la interpretación servación y experimentación sistemáticas
científica, de los valores ocultos en los si querernos contrastar las ideas que tanto
conceptos y etiquetas de la psicología so- apreciarnos contra la realidad.
cial, así corno en la brecha entre la des-
provocaron el suceso y no nos sentimos sorprendidos. Una vez que cambian las elec-
ciones o la Bolsa de Valores, la mayoría de las personas considera que los hechos no
www.mhhe.com/myers8 son sorprendentes: "el mercado necesitaba un ajuste". Después de la guerra de Irak
Visite el Cen tro de en 2003, el resultado parecía evidente; la victoria de las fuerzas de la Coalición llegó
Aprendizaje en Línea y rápido, pero no así la civilidad y la democracia. Algunos argumentaron que con la
encontrará una actividad ventaja del gasto anual militar de Estados Unidos de entre 330 millones y mil 600 mi-
de interacción sobre el llones de dólares sobre Irak, cualquiera podría haber adivinado la derrota iraquí, pero
sesgo retrospectivo. que las fuerzas estadounidenses debieron haber previsto la necesidad de proteger de
los saqueadores los museos, las bibliotecas y las escuelas de Bagdad. Como dijo el fi-
lósofo-teólogo danés Soren KierJ..<egaard: "la vida se vive hacia' delante, pero se com-
prende hacia atrás".
sesgo retrospectivo Si este sesgo retrospectivo (también llamado fenómeno de siempre lo supe) es do-
Tendencia a exagerar, minante, usted debe sentir ahora que sabía esto de antemano. De hecho, casi cual-
después de conocer un quier resultado posible de un experimento psicológico puede asemejar al sentido
resultado, las propias común después de conocer los resultados.
capacidades para anticipar Usted puede demostrar este fenómeno. Hable a la mitad de un grupo acerca de un
el resultado de algo. hallazgo psicológico, y a la otra dígale el resultado opuesto. Por ejemplo, mencione a
También se le conoce como
una parte lo siguiente:
fenómeno de siempre lo
supe. Los psicólogos sociales han encontrado que, al elegir amigos o al enamoramos nos senti-
mos más atraídos hacia aquellos que tienen rasgos distintos a los nuestros. El viejo dicho
de que "los opuestos se atraen" parece atinado.
Los psicólogos sociales han encontrado que, al elegir amigos o al enamoramos, nos sen-
timos más atraídos hacia las personas de rasgos similares a los nuestros. El viejo refrán de
que "Dios los hace y ellos se juntan" parece ser verdadero.
Primero, pida a las personas que expliquen los resultados. Después, que digan si son
"sorpresivos" o "no sorpresivos". Virtualmente, todos considerarán cualquiera de
ellos como "no sorpresivos".
En realidad, podemos formar una lista de proverbios para hacer que prácticamente
cualquier resultado tenga sentido. Si un psicólogo social reporta que la separación in-
tensifica la atracción romántica, una persona cualquiera respondería: "¿y le pagan por
esto? Cualquiera sabe que 'el amor crece con la distancia"'. Si resulta que la separa-
En retrospectiva, los hechos ción debilita la atracción, afirmaría: "mi abuela podría haberle dicho que' amor de le-
parecen evidentes y
predecibles. jos es de tontos'''.
© 2004 Sidney Harris. Karl Teigen (1986) se habrá reído entre dientes cuando pidió a estudiantes de la
Reproducido con autorización. Universidad de Leicester (Inglaterra) que evaluaran proverbios reales y sus opuestos.
Cuando se mencionó "el miedo es más fuerte que el amor",
la mayoría lo consideró verdadero. Pero lo mismo sucedió
con otros estudiantes cuando se citó la forma opuesta "el
amor es más fuerte que el miedo". Igualmente, el proverbio
"el que está en el suelo no puede levantar al que ha caído"
tuvo una puntuación alta, y lo mismo ocurrió con "el que
está en el suelo puede levantar al que ha caído".
Sin embargo, mis favoritos son dos refranes que ob-
tuvieron calificaciones altas: "los hombres sabios crean los
INVESTIGACIÓN DELO proverbios y los tontos los repiten" (auténtico), y su con- .
QUE DEBERÍA HABER SIDO traparte: "los tontos crean los proverbios y los hombres sa-
bios los repiten". (Para más duelos de refranes véase el
enfoque "Siempre lo supe").
Introducción a la psicología social capítulo 1 19
Resumen Como muchos de los acontecimientos de de que se conocen los hechos. Este sesgo
la vida, los hallazgos de la psicología so- retrospectivo con frecuencia provoca
cial a veces parecen obvios. Sin em- que la gente confíe en exceso en la vali-
bargo, los experimentos revelan que los dez de sus juicios y predicciones.
resultados son más "evidentes" después
ralmente no se debe a que hayan probado ser falsas. Más bien, como sucede con los
automóviles viejos, son reemplazadas por modelos más nuevos y mejores.
figura 1-5
Correlación
del nivel
socioeconómico
y la longevidad.
Grandes columnas en las
tumbas conmemoran a
individuos que también
tienden a vivir más
tiempo.
Introducción a la psicología social capítulo 1 23
figura 1-6
Correlación y
causalidad.
Cuando dos variables se
correlacionan, cualquier
combinación de tres
explicaciones es posible.
tonto. Un estudio realizado entre 685 niños noruegos en edad escolar sugiere que su
nombre en el cuadro de honor, con una tira de estrellas doradas, así como los elogios de
un profesor al que admiran, pueden aumentar su propia valoración personal (Skaalvik
y Hagtvet, 1990). También es posible que la autoestima y el logro estén vinculados por-
que están relacionados con la inteligencia subyacente y el nivel social de la familia. -
Esa posibilidad surgió de dos estudios: uno en una muestra de 1 600 jóvenes de
todo Estados Unidos, y otra en 715 muchachos de Minnesota (Bachman y O'Malley,
1977; Maruyama y cols., 1981). Cuando los investigadores eliminaron estadística-
mente los efectos de la inteligencia y del nivel social familiar, la correlación entre la
autoestima y el logro se esfumó .
. Técnicas correlacionales avanzadas pueden sugerir relaciones de causa-efecto. Las
correlaciones atrasadas revelan la secuencia de hechos (por ejemplo, al indicar si el cam-
bio en el aprovechamiento precede o sigue con mayor frecuencia a la modificación de
la autoestima). Los investigadores también pueden usar técnicas estadísticas que re-
velan la influencia de variables" confusas", como sucedió cuando la correlación entre
la autoestima y el logro desapareció, después de eliminar la inteligencia y el nivel so-
cial de la familia (entre las personas con inteligencia y nivel social similares, la relación
entre estos elementos fue mínima). El equipo de investigación escocés se preguntó si
el nexo entre la posición socioeconómica y la longevidad podría sobrevivir ante la re-
moción del efecto del tabaquismo, el cual es ahora mucho menos común entre los in-
dividuos con un estatus social alto. Y lo hizo, lo que sugirió que algunos otros
factores, como un alto nivel de estrés y una baja sensación de control, también expli-
can la mayor mortalidad de los pobres.
Entonces la gran fuerza de la investigación correlacional reside en que tiende a
ocurrir en ambientes reales, en los que podemos examinar factores como raza, géne-
ro y estatus social, los cuales no pueden ser manipulados en el laboratorio. Su gran
desventaja radica en la ambigüedad de los resultados. Este punto es tan importante
que, incluso, si no logra impresionar a las personas las primeras 25 veces que lo es-
cuchan, vale la pena hacerlo por vigesimasexta vez: saber que dos variables cambian
en conjunto nos permite predecir una si conocemos la otra, pero su correlación no es-
pecifica la causa y el efecto.
Investigación de encuestas
¿Cómo medimos variables como posición social y salud? Una forma consiste en en-
cuestar muestras representativas de individuos. Los investigadores que utilizan este
Introducción a la psicología social capítulo 1 25
recurso obtienen un grupo representativo al tomar una muestra aleatoria; es decir, una muestra aleatoria
en la que cada persona de la población estudiada tiene la misma probabilidad de ser incluida. Procedimiento de encuesta
Con este procedimiento, cualquier sub grupo de individuos (rubios, corredores, libera- en el que cada persona de
les) propenderá a estar representado en la encuesta en la medida en que se encuentren la población tiene la
representados en la población total. misma oportunidad de ser
Es sorprendente que, sin importar si encuestamos personas en una ciudad o en incluida.
todo un país, 1 200 participantes seleccionados de manera aleatoria nos permitan des-
cribir a la población completa con un margen de error de tres puntos porcentuales, o
menos, y con una confiabilidad de 95 por ciento. Imagine un enorme frasco lleno de
frijoles, en el que 50 por ciento son rojos y 50 por ciento blancos. Tome una muestra
aleatoria de 1 200 Y tendrá una certeza de 95 por ciento de obtener entre 47 y 53 por
ciento de frijoles rojos, sin importar si el frasco contiene diez milo cien millones de fri-
joles. Si pensamos que los granos rojos son los partidarios de un candidato presiden-
cial y que los blancos son los seguidores de otro aspirante, podemos entender por qué
desde 1950 las encuestas de Gallup -que se llevan a cabo precisamente antes de las
elecciones nacionales de Estados Unidos- han diferido de los resultados de las elec-
ciones en menos de 2 por ciento en promedio. Así como unas cuantas gotas de sangre
pueden proporcionar información de todo el cuerpo, de la misma manera una mues-
tra aleatoria puede hacerlo en nombre de toda una población.
Tenga presente que las encuestas no predicen las votaciones de manera literal; úni-
camente describen la opinión pública en el momento en que se realizan, y ésta puede
cambiar. Para evaluar encuestas también debemos tener presentes cuatro influencias
que pueden provocar sesgos: las muestras no representativas, el orden de las pregun-
tas, las opciones de respuesta y la redacción de las preguntas.
Muestras no representativas El tamaño de la muestra no es lo único importante en
una encuesta, sino también qué tanto representa ella a la población que se estudia. En
1984, la columnista Ann Landers aceptó el reto que le propuso el redactor de una carta
~e sondear a sus lectoras respecto de si las mujeres consideran que el afecto es más
unportante que el sexo. Ella preguntó: ¿Se sentiría contenta si la abrazaran y trataran
11
con ternura, y se olvidaran' del acto'?" De más de cien mil mujeres que respondieron,
7~ por ciento dijo que sí. A continuación surgió una avalancha de publicidad interna-
Clonal. En respuesta a las críticas, Landers (1985, p. 45) aseguró que "probablemente
26 Introducción a la psicología social
El Laboratorio de
Servicios de Encuestas de
SRC, en el Instituto de
Investigaciones Sociales
de la Universidad de
Michigan, posee cubículos
de entrevistas con
estaciones de monitoreo.
El personal y los
visitantes deben firmar un
compromiso para
conservar la estricta
confidencialidad de todas
las entrevistas.
vocado a darle un significado al sueño, el primer intérprete dijo: "¡Caramba! Los dien-
tes perdidos significan que usted verá morir a los miembros de su familia". Enfure-
cido, el rey ordenó 50 azotes para este portador de malas noticias.
Cuando un segundo intérprete escuchó el sueño, explicó la buena fortuna del sul-
tán: "¡Usted sobrevivirá a toda su familia!" Reconfortado, el rey ordenó a su tesorero
que trajera 50 piezas de oro para el portador de buenas noticias.
En el camino, el desconcertado tesorero le dijo al segundo adivinador: "su interpre-
En una ocasión, un joven tación no difirió de la que hizo el primer convocado" . "Ah, sí -replicó sabiamente-,
monje fue reprendido pero recuerde: lo que importa no es solamente lo que usted dice, sino cómo lo dice" .
cuando preguntó si podía
fumar mientras oraba. INVESTIGACiÓN EXPERIMENTAL: BÚSQUEDA
"Plantea una pregunta DE CAUSA Y EFECTO
diferen te -le aconsejó un
Es casi imposible discernir causa y efecto entre hechos correlacionados de manera na-
amigo- : pregunta si
puedes orar mientras tural, lo que impulsa a la mayoría de los psicólogos sociales a crear simulaciones de
fuma s". (Crossen, 1993) laboratorio de los procesos cotidianos, siempre que esto sea posible y ético. Estas re-
presentaciones son bastante parecidas a los túneles aeronáuticos de viento. Los inge-
nieros aeronáuticos no comienzan observando la forma como los objetos voladores
funcionan en una amplia variedad de ambientes naturales. Las variaciones de las con-
diciones atmosféricas y de los objetos voladores son tan complejas que con seguridad
les sería difícil organizar y utilizar este tipo de datos para diseñar mejores aeronaves.
En cambio, construyen una realidad simulada que está bajo su control. Entonces, pue~
den manipular las condiciones del viento y observar el efecto exacto sobre estructuras
específicas de las alas.
Como un segundo ejemplo de cómo los experimentos aclaran las causas, considere
la correlación entre ver la televisión y el comportamiento de los niños. Los que ven
muchos programas violentos tienden a ser más agresivos que aquellos que ven me-
nos. Esto sugiere que los infantes podrían aprender de lo que observan en la pantalla.
Espero que reconozca que se trata de un hallazgo correlacional. La figura 1-6 nos re-
cuerda que existen otras dos interpretaciones de causa y efecto que no implican a la
televisión como la causa de la agresión de los niños. (¿Cuáles son?)
Los psicólogos sociales han llevado el comportamiento derivado de ver la televi-
sión al laboratorio, donde controlan la cantidad de violencia que ven los niños. Al ex-
ponerlos a programas violentos y pacíficos, los investigadores pueden observar la
manera en que la cantidad de agresividad afecta el comportamiento. Chris Boyatzis y
sus colegas (1995) mostraron a algunos niños de escuela primaria, pero no a otros, un
variable
episodio de "Power Rangers", el programa infantil de televisión más popular -y vio-
dependiente
lento- de la década de los noventa. Inmediatamente después de verlo, los infantes Variable que se mide. Se
cometieron siete veces más actos agresivos en intervalos de dos minutos que aquellos llama así porque puede
a los que no se los hicieron ver. Los actos agresivos observados se denominan varia- depender de la
ble dependiente. Este tipo de experimentos implica que la televisión puede ser una manipulación de la
causa del comportamiento agresivo de los niños . . variable independiente.
¿Observar violencia en la
televisión o en otros medios
conduce a la imitación,
especialmente entre los
niños? Los experimentos
sugieren que sí.
30 Introducción a la psicología social
figura 1-7
Asignación
aleatoria.
Los experimentos asignan
aleatoriamente a las
personas, ya sea a una
condición que recibe el
tratamiento experimental
o a una condición de
control que no lo recibe.
Esto da al investigador la
confianza de que cualquier
diferencia posterior es
causada de alguna manera
por el tratamiento.
La ética de la experimentación
Nuestro ejemplo de la televisión ilustra por qué existen aspectos éticos en algunas prue-
bas. Los psicólogos sociales no expondrían, durante largos periodos, a un grupo de ni-
ños a una violencia brutal. En su lugar, alteran brevemente la experiencia social de las
personas y observan sus efectos. En ocasiones el tratamiento experimental es una expe-
riencia inocua, incluso agradable, para la cual las personas dan su consentimiento. No
obstante, algunas veces los investigadores llegan a operar en un área no muy clara en-
tre lo inocuo y lo riesgoso.
. A menudo los p'sicólogos sociales se aventuran en esa área ética no muy clara,
cuando diseñan experimentos que implican pensamientos y emociones intensos. Las
pruebas no necesitan tener lo que Elliot Aronson, Marilynn Brewer y Merrill Carls-
mith (1985) llaman realismo mundano; es decir, el comportamiento en el laboratorio realismo mundano
(por ejemplo, aplicar choques eléctricos como parte de un experimento sobre agre- Grado en que el
sión) no tiene que ser literalmente igual al cotidiano. Para muchos investigadores este experimento se asemeja de
tipo de realismo es, de hecho, mundano, sin importancia. Pero el experimento debe te- manera superficial a las
ner realismo experimental, es decir, debe absorber e involucrar a los participantes. situaciones de la vida
Los investigadores no desean que la gente actúe conscientemente o que finja; quieren cotidiana.
provocar procesos psicológicos reales. Obligar a las personas a elegir si aplican un
realismo
choque eléctrico intenso o leve, por ejemplo, puede ser una medida realista de la agre- experimental
sión. Funcionalmente, simula la agresión real. Grado en que un
El logro de un realismo experimental a veces requiere que se engañe a los partici- experimento absorbe e
pantes con una historia verosímil. Si la persona en la habitación contigua en realidad involucra a sus
no está recibiendo los choques, el experimentador no desea que ellos lo sepan; esto aca-
baría con el realismo necesario para la prueba. Por lo tanto, aproximadamente una ter- engaño
cera parte de los estudios sociopsicológicos (aunque el número tienda a disminuir) ha Situación que ocurre en la
empleado el engaño en su búsqueda de la verdad (Korn y Nicks, 1993; Vitelli, 1988). investigación al darse
Los investigadores también ocultan sus predicciones para que los participantes, en información errónea o
su empeño por ser "buenas personas", no hagan lo que se espera de ellos, o actuando confusa a los participardes
de manera irascible realicen lo opuesto. Nos asombra poco, según el profesor ucra- sobre los métodos y
niano Anatoly Koladny, que 15 por ciento de un grupo de ucranianos encuestados se propósitos del estudio.
haya declarado "religioso" durante el comunismo soviético en 1990, cuando la reli-
características
gión era reprimida por el gobierno, y que 70 por ciento se declarara "religioso" en la
de la demanda
época posterior al comunismo, en 1997 (Nielsen, 1998). De forma sutil, también las pa- Indicios en un
labras, el tono de voz y los gestos del experimentador pueden producir respuestas de- experimento que le
seadas. Para disminuir este tipo de características de la demanda -indicios que señalan al participante
parecen "pedir" ciertos comportamientos-, los investigadores suelen estandarizar qué comportamiento se
sus instrucciones y hasta llegan a utilizar una computadora para presentarlas. espera de el
32 Introducción a la psicología social
Con frecuencia, los experimentadores caminan por la cuerda floja al diseñar prue-
bas que implicarán aspectos de tipo ético. Creer que se lastima a alguien o estar sujeto
a una fuerte presión social para comprobar si cambia la opinión de usted o su com-
portamiento puede resultar incómodo de manera temporal. Este tipo de pruebas hace
surgir la vieja cuestión de si el fin justifica los medios. Los engaños de los psicólogos
sociales suelen ser de corta duración y benignos, comparados con muchas falsedades
de la vida real, y hasta con algunos programas de televisión como Candid Camera y
"reality shows". Aun con esto, ¿los conocimientos que se obtienen justifican engañar
y, en ocasiones, angustiar a la gente?
Actualmente, los comités de ética de las universidades revisan la investigación so-
ciopsicológica para asegurar que se trate humanamente a las personas. Los principios
éticos desarrollados por la American Psychological Association (2002), la Canadian
Psychological Association (2000) y la British Psychological Society (2000) incitan a los
investigadores a:
presenta en la investigación de muchas otras áreas, entre las que se incluyen los estu-
dios sobre el comportamiento de ayuda, el estilo de liderazgo, la depresión y la auto-
eficacia. Los efectos que se observan en el laboratorio son reflejos de los efectos en el
campo. "El laboratorio de psicología generalmente ha producido verdades psicológi-
cas más que trivialidades", señalaron Craig Anderson y sus colegas (1999).
Sin embargo, necesitamos ser precavidos al universalizar lo que pasa ahí hacia la
vida real. Aunque el laboratorio revela dinámicas básicas de la existencia humana, no
deja de ser una realidad simplificada y controlada. Nos indica qué efectos esperar de
la variable X, si lo demás permanece igual, lo que nunca sucede en la realidad. Ade-
más, como verá, los participantes de muchos experimentos son estudiantes universi-
tarios. Aunque esto puede ayudar a que usted se sienta identificado con ellos, los
alumnos difícilmente constituyen una muestra aleatoria de toda la humanidad.¿Ob-
tendríamos resultados similares con personas de diferentes edades, niveles de escola-
ridad y culturas? Ésta es siempre una pregunta abierta.
Sin embargo, podemos hacer una distinción entre el contenido del pensamiento y
los actos de las personas (por ejemplo, sus actitudes) y el proceso por medio del cual
piensan y actúan (por ejemplo, cómo las actitudes afectan los actos y a la inversa). El
. contenido varía más de una cultura a otra en relación a cómo lo hace el proceso. La
gente de diversas culturas puede tener distintas opiniones, aunque éstas se formen de
manera similar. Por ejemplo:
Nuestro comportamiento puede ser diferente, pero estamos influidos por las mismas
fuerzas sociales.
Los psicólogos sociales organizan sus es una información valiosa, pero prácti- Resumen
ideas y hallazgos en teorías. Una buena camente no indica lo que causa.
teoría reúne un conjunto de hechos en Cuando es posible, los psicólogos so-
una lista más breve de principios predic- ciales prefieren realizar experimentos
tivos. Podemos utilizar esas prediccio- que exploren causa y efecto. Al construir
nes para confirmar o modificar la teoría una realidad a escala -la cual está bajo
para generar nuevas investigaciones y su control-, pueden variar una cosa y
sugerir aplicaciones prácticas. después otra, y descubrir la manera en
La mayor parte de la investigación en que, separadas o en combinación, afectan
l?sicología social es de tipo correlacional el comportamiento. Asignamos aleatoria-
o experimental. Los estudios correlacio- mente a los participantes a una condición
nales, que en ocasiones se realizan con experimental, la que recibe el tratamiento
xpétodos sistemáticos de encuestas, reve- experimental, o a una condición control,
lan la relación entre variables, por ejem- que no lo recibe. Entonces podemos atri-
plo, entre la cantidad de educación y la buir cualquier diferencia resultante entre
cantidad de ingresos. Saber que dos co- las dos condiciones a la variable inde-
~ están relacionadas de manera natural pendiente (figura 1- 8).
34 Introducción a la psicología social
figura 1-8
Dos métodos para Para crear experimentos, en ocasiones los psicólogos sociales establecen situacio-
hacer investigación: nes que involucran las emociones de las personas. Al hacerlo están obligados a seguir
correlacional y lineamientos éticos profesionales, como la obtención del consentimiento informado
experimental. del individuo, protegerlo de daños e informarle después, de manera completa, sobre
cualquier engaño temporal. A través de los experimentos de laboratorio, los psicólo-
gos sociales pueden poner a prueba ideas surgidas de la experiencia de la vida, y des-
pués aplicar los principios y hallazgos al mundo real.
La conexión social
Conforme lea este libro encontrará muchos vínculos interesantes: víncu-
los entre el trabajo de un investigador y otros temas de psicología social;
vínculos entre un concepto analizado en un capítulo y en otros capítulos.
Además, observará que muchos conceptos que se introdujeron en capítulos ante-
riores se vinculan con nuestra vida cotidiana. Algunos de estos conceptos de psicolo-
gía social también pueden aplicarse en la psicología clínica, el tribunal y el cuidado de
nuestro ambiente. Estas aplicaciones aparecen a lo largo del libro, y particularmente
en la parte 4: Aplicaciones de la psicología social.
Por lo tanto, observe cada uno de estos vínculos, con el trabajo de los investigado-
res, con otros temas de la psicología social y con sus aplicaciones a la vida cotidiana.