CARACTERÍSTICAS DEL
PERÍODO NEOCLÁSICO
La principal
característica de esta
época es la imitación de
las antiguas obras griegas y romanas. La arquitectura y escultura neoclásica recogen esta tradición
plasmándola en obras muy similares a las de aquella época.
Por el contrario, en la pintura, al no existir modelos clásicos que imitar, se toma como única referencia los
antiguos relieves que en aquellos momentos ya habían perdido la práctica totalidad de su cromatismo,
haciendo que su mayor influencia fuese en la línea temática a representar, sin aportar ninguna novedad en los
referente a técnica o sistemas de representación.
En el campo de la literatura la belleza se representa de una forma fría, sin alma, dando mayor protagonismo a
la razón frente a los sentimientos. El reflejo más claro de todo
Desde un punto de vista amplio, el siglo XVII es crucial sobre todo por el nacimiento del
pensamiento científico. Aunque la ciencia parece tan connatural al hombre como el arte,
nunca antes, salvo más parcialmente en la Grecia antigua, se había establecido con la
sistematicidad de este siglo, imprimiendo a la historia humana una extraordinaria aceleración en
conocimientos y poder. El pensamiento científico amplió enormemente el dominio del hombre
sobre el medio, facilitó invenciones y sería una de las bases de la siguiente etapa de la expansión
europea, llegada a su cumbre en el siglo XIX.
Fue en Grecia donde de forma explícita se planteó el problema de cómo alcanzar verdades firmes, no dudosas ni
opinables. Platón concluyó, por analogía con la geometría y las matemáticas, que existe otra realidad más allá
de la confusa e insegura que nos ofrecen los sentidos: un mundo de entes ideales o “ideas”, de los que el mundo
habitual sería una copia grosera. Así, la observación perdía valor, ya que la lógica interna de las “ideas”, a
semejanza de las matemáticas, produciría un grado de certeza muy superior al de cualquier dato directamente
observable. El valor de las matemáticas para alcanzar un conocimiento no opinable es una de las grandes
concepciones de la ciencia, pero la teoría de las Ideas funcionaría peor, pues, como señaló Aristóteles, no
explicaba cómo del mundo eterno e impalpable de los entes ideales podía salir el mundo sensible y mutable, por
lo que el primero es innecesario para explicar el segundo. Con lo cual la observación empírica del mundo
sensible volvía al primer plano. Al final, los dos enfoques, formalmente opuestos, resultarían complementarios.
I. LA ILUSTRACIÓN:
La ilustración fue un movimiento de carácter cultural que se origino durante el siglo XVIII; en donde filósofos,
moralistas, historiadores, economistas y pensadores políticos de Francia, Inglaterra y Alemania entre los
principales; adquirieron una fe optimista en la capacidad de la razón humana buscando la valoración fundamental
del hombre y la naturaleza a través del cambio de la mentalidad del hombre.
Los ilustrados buscaron profundizar y divulgar los hallazgos científicos e ideológicos así como disipar las tinieblas
de los siglos anteriores dominados por la fe y la tradición; fueron severos críticos de su sociedad:
En lo político; negaron el derecho divino de los reyes
En lo social; atacaron los privilegios señoriales
En lo religioso; criticaron la religiosidad popular pues se basaban en la superstición y en el dogmatismo
En lo económico; promovieron el liberalismo
El movimiento se propago a partir de Inglaterra, donde se pudo encontrar la oposición de John Locke contra el
absolutismo debido a que era para el peligroso, antinatural y amenazante contra la propiedad, respaldo el respeto
a los derechos humanos. Pero la ilustración floreció en todo su apogeo y esplendor en Francia.
Es importante resaltar que la propagación del pensamiento ilustrado se debió en gran parte a la labor de la prensa.
La edición de libros, folletos y revistas progreso extraordinariamente, aunque muchos de ellos eran censurados por
las autoridades reales o eclesiásticas, las impresiones de folletos y libros prohibidos eran introducidos
clandestinamente en Francia y luego distribuidos a otros países.
A. Montesquieu (1689-1755): Luis Carlos de Secondat, Barón de la Brede y Montesquieu; filosofo Francés era de
una culta familia noble. Viajo mucho por Europa en base a la cual le permitió conocer las formas de gobierno de
distintos países. Es su obra “El espíritu de las leyes” (1784) crítico la monarquía absoluta porque concentraba
todos los poderes en el rey.
Estableció la presencia de los tres poderes a través de los cuales el estado debe gobernar: Poder legislativo,
ejecutivo y judicial. Otra de sus obras conocidas es “Cartas persas”.
B. Voltaire (1694-1778): Llamado Francois Marie Arouet, nació en 1694, considerado el máximo exponente de la
ilustración.
Tuvo afición a la literatura sarcástica, su afán fue de ridiculizar sagazmente a los nobles y gobernantes de su época
a través de sus críticas de estilo burlón, humorístico e irónico. Sus críticas hechas al rey y su corte le valieron para
ser encarcelado dos veces en la bastilla y desterrado durante cuatro años a Inglaterra.
Entre sus obras notables se encuentra:
El siglo de Luís XIV
Cartas sobre los Ingleses o cartas filosóficas
La Doncella, ridiculiza la santidad de Juana de Arco
C. Rousseau (1712-1778)
Pensador suizo natural de Ginebra, hombre de ideas profundas, espíritu crítico y de gran sentido reflexivo. Se
opuso al sistema absolutista francés como al modelo parlamentario inglés, postulando el principio moderno de la
soberanía popular, donde el poder reside y emana del pueblo.
En su obra el “contrato social”; considero que a través del tiempo el hombre no había mejorado sino empeorado,
alejándose del estado natural al inventar la propiedad privada. Esto es el origen de las desigualdades y la injusticia
social, en donde para superar esto los hombres debían establecer un nuevo contrato social, basado en la voluntad
general y dirigida hacia el bien común.
II. EL ENCICLOPEDISMO
Se denomina así a la actitud de los intelectuales de la época de plasmar las ideas y conocimiento en una obra
monumental denominada. “Enciclopedia”. Y difundirla a las sociedades europeas.
La enciclopedia fue una obra colectiva de 28 volúmenes que empezó a publicarse en 1751, conteniendo
conocimientos concernientes a ciencias, artes y oficios además de soluciones a los problemas que aquejaban a la
sociedad noble y burguesa.
Su objeto concreto era ilustrar a las generaciones futuras, haciéndolas más dichosas y para ello se recopilo cuantos
datos le proporcionaba la filosofía y la investigación científica de la ilustración.
La enciclopedia vino a ser la representación cabal del espíritu ilustrado, donde su elaboración fue suspendida y
retrasada debido a la guerra encarnizada que les presentaron los medios oficiales y eclesiásticos. Diderot y
D`Alembert fueron los directores de la enciclopedia y se recibió la colaboración de la mayoría de los filósofos
francesas de la época como el polígrafo Jaucourt y el jurisconsulto Borchert D Argis encargado de redactar la
enciclopedia.