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Fracturas diafisarias de los dos huesos del antebrazo del adulto

Weppe F, Guignand D. Fracturas diafisarias de los dos huesos del antebrazo del adulto.
Aparato Locomotor [serial on the Internet]. (2015, June 1), [cited January 4, 2017]; 48(2): 1.
Available from: Supplemental Index.

Buscado: sciencedirect fracturas antebrazo

Las fracturas diafisarias de los huesos del antebrazo incluyen las fracturas simultaneas del
radio y del cubito, además de las aisladas de uno de los dos huesos.

El pronostico funcional depende de las lesiones asociadas en los traumatismos y de las

consecuencias sobre la pronosupinación, y si la fractura esta desplazada, siendo el tratamiento
quirúrgico en la mayoría de ocasiones, mediante osteosíntesis interna con placa atornillada.

Las complicaciones inmediatas son las lesiones de los tejidos blandos y el síndrome
compartimental. (aumento de presión en un compartimento muscular, y puede dañar nervios
y musculos), en el que el antebrazo esta tenso y edematoso, siendo difícil distinguir entre el
dolor y los trastornos sensitivos relacionados con la fractura y los relacionados con un
síndrome compartimental debutante. Su tratamiento es una urgencia quirúrgica
(aponeurotomía)

En la pronosupinación de antebrazo, aunque existe una cierta rotación inversa al radio, la

estabilidad y fijeza del cúbito son esenciales para esta.

Hay que tener en cuenta las estructuras neurovasculares para evitar su lesión iatrogénica
(causada en la cirugía).

Las fracturas diafisarias de los huesos del antebrazo son mucho menos frecuentes en el adulto
que en el niño. Cuando es en los dos huesos del antebrazo, se deben en su mayoría a
traumatismos de alta energía, ya sea por mecanismo directo o indirecto.

Estudio inicial:

Exploración fisica

Buscar posibles lesioens asociadas, prestando especial atención al codo y a la muñeca, ademas
de un examen neurológico sobre los tres nervios principales (radial, cubital y mediano)

El tratamiento debe ser lo mas precoz posible.

Tratamiento postoperatorio
Las fracturas simples y estables tras la osteosíntesis permiten una rehabilitación precoz por
movilización activa-pasiva sin limitación. Se coloca una férula amovible antiálgica y se libera
rápidamente el codo y la muñeca. En los casos complejos o asociados a una inestabilidad
radiocubital distal, se coloca una inmovilización braquioantebraquiopalmar durante 4-6
semanas. Se autoriza la vuelta a las actividades de la vida diaria entre la sexta y la octava
semana postoperatoria, y la vuelta a las actividades de resistencia y/o deportivas para las
fracturas aisladas de un hueso, entre la semana 12 y la 16. Se considera entre la tercera y la
sexta semana postoperatoria para las fracturas de los dos huesos del antebrazo. Estos
períodos se deben adaptar según el dolor y la estabilidad clínica y radiológica
del montaje.

suplementos con vitaminas y calcio forman parte integral de la prevención secundaria de las
fracturas osteoporóticas, aunque diferentes estudios en modelos animales o humano tienden
a encontrar un efecto favorable sobre la consolidación ósea primaria

La tasa de consolidación tras una fractura de uno o de ambos huesos del antebrazo es próxima
al 95%. La pronosupinación es funcional en la mayor parte de las veces, con un arco de al
menos 100◦ (mejor arco de rotación tras las fracturas del cúbito que tras las del radio). La
disminución de fuerza es significativa desde un punto de vista analítico tras las fractura de los
dos huesos, pero con poca repercusión funcional