EXPEDIENTE 330-92.
EXPEDIENTE 330-92.
INCONSTITUCIONALIDAD PARCIAL
ANTECEDENTES
I. LA INCONSTITUCIONALIDAD
CONSIDERANDO:
-I-
-II-
- III -
Impugna, también, el artículo 18o. del indicado Reglamento, argumentando que en el
mismo se delega en el Alcalde Municipal, para que mediante Acuerdo defina las
diversas clases y categorías en las que se clasificarán los vehículos que prestarán el
servicio de transporte colectivo urbano; y que ni la Constitución ni el Código Municipal
permiten la delegación de funciones, que en todo caso son propiamente reglamentarias
de la Corporación Municipal, a tenor del artículo 253 de la Constitución. Con respecto a
la inconstitucionalidad de este artículo, se establece que de conformidad con el artículo
254, el Gobierno Municipal será ejercido por una Corporación, la cual se integra por el
Alcalde y por Síndicos y Concejales, y con base en el artículo 60 del Código Municipal,
el Alcalde es quien preside y representa a la Municipalidad, es el órgano ejecutivo del
gobierno y administración municipal y jefe de los mismos, tiene, entre otras
atribuciones y obligaciones, hacer cumplir las ordenanzas, reglamentos, acuerdos,
resoluciones y demás disposiciones de la Corporación Municipal, y al efecto expedir las
órdenes e instrucciones necesarias, y en general, resolver asuntos del municipio que
no estén atribuidos a otra autoridad. Estos artículos permiten establecer que el
Alcalde, como el órgano ejecutivo del gobierno y administración municipal, está
facultado para poder tomar todas las medidas a su alcance para cumplir y hacer que se
cumplan las decisiones acordadas por la Corporación. En esa virtud, no se da la
inconstitucionalidad que se denuncia.
- IV -
La inconstitucionalidad que se denuncia de los artículos 21o., 22o., 23o., 24o., y 25o,
la fundamenta en que por regular las obligaciones de los conductores, los requisitos
para la obtención de la Licencia Municipal del conductor y sus características así como
las prohibiciones para los conductores de los vehículos de transporte colectivo urbano,
están en contradicción con lo establecido en los artículos 1o. y 2o. del mismo
Reglamento, violando de ese modo los artículos 5o., 102 inciso ñ) y 171 inciso a) de la
Constitución Política de la República; que, igualmente violan los artículos 11, 12, 13,
15, 16 y 26 del Decreto 66-72 del Congreso de la República, Ley de Tránsito y 63, 64 y
67 del Código de Trabajo, toda vez que regulan asuntos como autorización, concesión,
operación, uso y funcionamiento del servicio de transporte urbano, obligación de los
conductores a vestir uniforme, observar buena conducta, urbanidad e higiene,
etcétera, que, según estima, son propios de la legislación laboral y materia de los
contratos de trabajo y, que su inserción en el Reglamento vulnera derechos
individuales como el de libertad de acción contenido en el artículo 5o. de la
Constitución y, por otra parte, pretende disponer sobre materia que ya está prevista
en la Ley de Tránsito, invadiendo esferas que la Constitución asigna al Congreso de la
República, en el artículo 171 inciso a). Sobre el particular cabe indicar que del análisis
de las disposiciones no se desprende que exista contradicción entre ellas y la Ley de
Tránsito y el Código de Trabajo. Por otra parte, en el supuesto de que a través de la
aplicación de las normas del reglamento, que se cuestionan, se violara derechos
constitucionales a la postulante, la acción de inconstitucionalidad no es la vía para
restablecer la situación jurídica que se considerara afectada o para reparar el supuesto
agravio, porque para eso la Constitución Política de la República establece otros
medios para obtener la protección que se pretende. Estas razones conducen a la
conclusión de que la impugnación carece de fundamento y debe ser declarada sin
lugar.
-V-
Asimismo, se cuestiona los párrafos segundo y tercero del artículo 34o. del
Reglamento porque dispone sanciones a los infractores sin perjuicio de las que
impongan otras leyes, por estimar que viola los derechos de defensa, los inherentes a
la persona humana y el principio jurídico "non bis in idem", consagrados en los
artículos 12 y 44 de la Constitución. El principio enunciado por el postulante no tiene
rango constitucional, sino procesal, a la luz de lo que establece el artículo 50 del
Código Procesal Penal, y como tal, es un derecho protegido por medio del amparo, por
lo que la vía utilizada a través de la presente ación, para la protección de este principio
jurídico, no es la idónea para ello y por eso debe desestimarse. Denuncia también que
se viola el derecho de defensa, lo que es muy prematuro afirmarlo, toda vez que, de
conformidad con la norma bajo estudio, el asunto se remite al tribunal
correspondiente, que en este caso es el Juzgado de Asuntos Municipales y es ahí donde
la postulante, al conferirle la audiencia de ley, de conformidad con el principio jurídico
del debido proceso, tendrá la oportunidad de manifestar lo que estime conveniente a
su derecho. Por estas razones la inconstitucionalidad denunciada no puede prosperar,
por lo que, debe ser declarada sin lugar también por este aspecto.
- VI -
LEYES APLICABLES:
POR TANTO:
III) Se impone a los Abogados Miguel Angel Andrino Diéguez, Héctor Francisco
Hernández Bran y César Israel Castro la multa de quinientos quetzales a cada uno, que
deberán pagar en la Tesorería de esta Corte dentro de los cinco días siguientes de la
fecha en que quede firme el presente fallo; en caso de incumplimiento, se cobrará por
la vía legal que corresponda. IV) Notifíquese. EPAMINONDAS GONZÁLEZ DUBÓN,
PRESIDENTE. ADOLFO GONZÁLEZ RODAS, MAGISTRADO. EDMUNDO VÁSQUEZ
MARTÍNEZ, MAGISTRADO. RODOLFO ROHRMOSER VALDEAVELLANO, MAGISTRADO.
CARLOS ENRIQUE REYNOSO GIL, MAGISTRADO. JOSÉ ANTONIO MONZÓN JUÁREZ,
MAGISTRADO. RAMIRO LÓPEZ NIMATUJ, MAGISTRADO. MANUEL ARTURO GARCÍA
GÓMEZ, SECRETARIO GENERAL.