Conceptos Generales Apuestas Deportivas

Las Cuotas
Cuando se hace una apuesta entre dos partes sobre un determinado partido la cantidad total apostada
por ambos normalmente se acuerda de antemano. Imaginemos la apuesta más básica entre dos amigos,
Daniel y Joseph, que hacen una apuesta sobre el resultado de un partido de fútbol en el que juega
España. Daniel podría ofrecer a Joseph 10€ si gana España, mientras que Joseph le pagará a Daniel otros
10€ si España no gana. Si España tiene aproximadamente un 50% de probabilidades de ganar, esta sería
una apuesta justa. Sin embargo, si España jugara con San Marino, una probabilidad más realista podría
ser un 95%. En este caso Joseph tendría una gran ventaja sobre Daniel, ya que sus probabilidades de
perder los 10€ son muy inferiores a las de ganarlos. Por lo tanto, Daniel y Joseph podrían acordar
cambiar los términos de su apuesta. Daniel le pagaría a Joseph 10€ si gana España, pero Joseph le daría
a Daniel 200€ si esto no ocurre. Como las probabilidades de que San Marino empate o gane a España
son muy pequeñas, Joseph debe arriesgar mucho más dinero para ganar lo mismo que Daniel. Para
asegurarse de que cualquier apuesta entre Daniel y Joseph es justa y aceptable para ambos, las
proporciones relativas arriesgadas por ambos dependerán de la probabilidad esperada de que España
gane el encuentro. La cantidad apostada por cada uno es conocida como el “stake”.

El ratio entre el stake de Daniel y el de Joseph es realmente la cuota. Supongamos que Inglaterra juega
con Brasil en unos cuartos de final del Mundial de fútbol y que por cada euro que Joseph apuesta al
triunfo de Inglaterra Daniel acuerda pagarle 2€ (beneficio) si Inglaterra gana (prórroga y penalties
incluídos). Daniel está satisfecho con esta cifra porque ha estimado que Brasil tiene el doble de
probabilidades de ganar que Inglaterra. Si inglaterra y Brasil jugaran muchos partidos como este, Daniel
ha estimado que por cada partido que Inglaterra gana, Brasil ganará dos; es decir, 1 de cada 3 (33.33%),
mientras que Brasil ganará los otros dos (66.67%) Es la estimación de probabilidades de los posibles
resultados la que determina la naturaleza de las cuotas.

En países con gran tradición en apuestas como el Reino Unido, las cuotas se mostraban con el formato
2/1, porque por cada euro que Joseph apostaba, Daniel le pagaría 2 si Inglaterra gana. La cuota de Brasil
sería por contra, 1/2. Más recientemente y por toda Europa la cuota que más se utiliza es la notación
decimal. Como las cuotas reflejan la probabilidad esperada de un resultado, la notación decimal
representa el inverso de esa probabilidad. Un 33.33% de probabilidad de que Inglaterra gane se
representará con cuotas decimales de 3.00 (1 entre 0.3333). Brasil, por otro lado, con un 66.67% de
probabilidad de ganar tendrá una cuota de 1.50 (1 entre 0.6667)

Las cuotas decimales también nos dicen cuánto dinero esperamos recibir si ganamos la apuesta,
incluyendo tanto el beneficio como el importe de nuestra apuesta. En el ejemplo, si Inglaterra gana
recibiremos un total de 3 eur (2 eur de beneficio + 1 eur de la apuesta). De aquí sale la cuota de 3.0. De
la misma forma, por una victoria de Brasil recibiremos 1.50 eur. A diferencia de las cuotas fraccionarias,
en donde podemos ver muchos tipos diferentes de cuotas como por ejemplo 8/11, 6/4, 15/8, 10/3 y
muchas más, las cuotas decimales son mucho más simples si asumimos que nuestro stake es siempre
1. La cuota decimal nos cuenta siempre cuanto recibimos por una apuesta de 1€. Para calcular el
retorno total no tenemos más que multiplicar la cuota por nuestro stake. Y como las cuotas decimales
son la inversa de la probabilidad estimada del resultado, son mucho más útiles en general que las cuotas
fraccionarias.

En resumen, la cuota es un término usado estrechamente ligado con la probabilidad. Algunas veces
puedes ver que se habla de precios. El precio y la cuota son esencialmente lo mismo.

Las casas de apuestas y su “Overround”

Hablando a la ligera, cualquiera que ofrece unas cuotas en un evento deportivo puede ser considerado
una casa de apuestas, o bookmaker en terminología anglosajona. Daniel y Joseph, en el ejemplo (lección
1. Cuotas), pueden ser considerados bookmakers, estableciendo precios entre sí de manera amistosa. El
término “bookmaker” se aplica a personas o empresas que proporcionan cuotas para uno o más eventos
y para todos los resultados posibles, ajustadas en función de la demanda de los clientes de la casa.
Técnicamente hablando “Bookmaking” se refiere a la gestión de las probabilidades con el objetivo de
ganar dinero en un número de apuestas alto, para el que se ofrecen cuotas. Un libro o “book” es
simplemente el registro completo de transacciones (apuestas) realizadas por los apostadores a unas
cuotas determinadas y en ciertos eventos.

A diferencia de la apuesta “justa” de Inglaterra entre Daniel y Joseph, una casa de apuestas nunca
ofrecerá un libro donde la probabilidad esperada de todos los posibles resultados de un solo evento
sume el 100% o más. Usamos la palabra “justa” porque, a diferencia de los juegos puros de azar como
la ruleta o los dados donde las probabilidades se conocen exactamente de antemano, la probabilidad
de los resultados de los eventos deportivos sólo puede ser estimada. Daniel y Joseph nunca pueden
saber las posibilidades de que Inglaterra o Brasil ganen. En este sentido, cuando en el mundo de las
apuestas hablamos del término “justo” o “verdadero” estamos haciendo referencia a simples
estimaciones sobre una probabilidad esperada. La clave para ganar en las apuestas es la calidad de esas
estimaciones. Si son muy ajustadas (o por lo menos más ajustadas que las de los bookmakers)
podemos ganar dinero. Si no lo son, lo perderemos.

Sin embargo, podemos decir que las cuotas de las casas de apuestas no son “justas”. Esto no es porque
los bookies son mejores que los apostadores estimando probabilidades (que normalmente sí lo son) sino
porque necesitan rebajar la cuota para llevarse una comisión de las apuestas que aceptan. Las casas
de apuestas no son hermanitas de la caridad. Su objetivo es generar beneficios y la única forma de la en
la que lo pueden hacer es, una vez que recuperan sus costes operativos, reducir las cuotas. Reduciendo
las cuotas de cada resultado posible, la casa de apuestas pagará a los apostantes menos que lo que
sugiere la probabilidad esperada, en caso de ganar la apuesta. Si el bookmaker gestiona sus libros de
manera adecuada, ganará dinero sin importar cuál es el resultado de cada evento. Gestionar las cuotas
de esta forma supone que la suma de las probabilidades esperadas implícitas en las cuotas se sitúa por
encima del 10% (una menor cuota supone una mayor probabilidad esperada). El exceso sobre el 100%
nos proporciona una medida del margen teórico de la casa de apuestas y se denomina “overround”.

Volvamos al ejemplo de Inglaterra contra Brasil. Supongamos que esta vez Daniel y Joseph decidieran
cruzar sus apuestas, no el uno con el otro, sino con su bookmaker habitual. ¿Qué cuotas podrían ofrecer?
Como antes, asumamos que Brasil es el doble de favorito que Inglaterra. Si la casa ofreciera una cuota
3.0 y 1.50 para Inglaterra y Brasil respectivamente y Daniel apuesta 1€ a Inglaterra y David 2€ a Brasil,
la casa de apuestas no ganaría dinero, gane quien gane el partido. Si Inglaterra gana, el bookie pagará
2€a Joseph y recuperaría los 2 € que Daniel ha perdido. Si tiene que pagar a su personal sus salarios,
está perdiendo dinero. Tiene que bajar las cuotas.

Pensando en su margen de beneficio, la casa de apuestas decide que va a ofrecer cuotas de 2.50 (o 6/4)
para la victoria de Inglaterra, en lugar de 3.00, pagando un beneficio de 1.50€ por cada stake de 1€. De
igual forma, reduce el precio de Brasil de 1.50 (1/2) a 1.25 (o 1/4), pagando 1€ por cada 4€ de stake. La
probabilidad implícita de una victoria de Inglaterra es ahora un 40% (o 1/2.50), mientras que para una
victoria de Brasil es de un 80% (o 1/1.25). Recordemos que las cuotas decimales y las probabilidades son
intercambiables: una es la inversa de la otra. Para ambos resultados la casa de apuestas ha
incrementado la probabilidad estimada, multiplicándola por 1.2, y en conjunto suman un total del 120%.
Por supuesto esto no significa que hay un 120% de probabilidades de que ganen Inglaterra y Brasil. Esta
información es simplemente para informarnos de que la casa de apuestas está manipulando las cuotas
(para construir su margen de beneficio) sugiriendo que los equipos tienen más probabilidad de ganar de
la real. Esta vez si Inglaterra gana, la casa de apuestas solo pagará a Joseph 1.50€ de beneficio, mientras
que recibirá 4€ de Daniel, para un beneficio total de 2.50€. Por otra parte si Brasil gana, la casa de
apuestas pagará a Daniel 1€ y recibirá otro euro de Joseph, para quedarse en tablas. Realmente, 2 veces
de cada 3, la casa de apuestas no ganará dinero en este escenario, pero en una de cada 3 ocasiones,
cuando Inglaterra venza, sí ganará 2.50€. Consecuentemente, en media, después de 3 partidos la casa
de apuestas habrá “facturado” 15€ (3 partidos multiplicado por 5€ de facturación cada uno) para
conseguir un beneficio de 2.50€. Visto de otra forma, por cada 15€ en juego, la casa de apuestas solo
tendrá que pagar 12.50€ (quedándose 2.50€ de beneficio), lo que expresado en porcentaje es el
overround, en este caso un 120% (15€/12.50€).

Por supuesto, los apostadores normalmente apostarán una cantidad en proporción a las
probabilidades estimadas de todos los resultados posibles. Si Brasil tiene el doble de probabilidades
de ganar a Inglaterra, normalmente los apostadores apostarán el doble de dinero a Brasil. Si no lo
hicieran, esto supondría que o ellos o la casa de apuestas habrían calculado mal la probabilidad justa de
la victoria de los 2 equipos. En este caso, si Joseph apuesta 1€ a Inglaterra, lo lógico es esperar que
Daniel apueste 2€ a Brasil. En este caso, cualquiera que sea el resultado la casa de apuestas conseguirá
un beneficio de 0.50€ para un total de 3€ apostados, otra vez un margen de beneficio del 120%
(3€/2.50€). Este escenario en el que la casa de apuestas controla el balance de su libro de apuestas y
se asegura el mismo resultado independientemente de quién gane el partido es su gran objetivo. Las
casas intentan balancear bien su libro para evitar pérdidas potenciales en todos los resultados posibles
del partido. Las casas que mejor gestionan sus riesgos se ven a sí mismas como intermediarios,
equilibrando la acción entre sus apostadores. Generalmente no quieren ser parte ni incurrir en riesgos
en cada apuesta. Sin embargo, en posteriores lecciones veremos por qué algunas casas sí optan por
hacerlo.

Las diferentes casas de apuestas tienen diferentes overrounds. Para apuestas de fútbol 1X2, Pinnacle
Sports por ejemplo, tiene un overround tan bajo como el 102%, mientras que Interapuestas podría tener
un 110%. Existen diferentes overrounds para los diferentes deportes y diferentes mercados. En general,
cuantos más resultados posibles tiene un evento más alto es el overround. Esto es así porque la
probabilidad de ocurrencia de un solo resultado es más pequeña (ya que hay más opciones para elegir),
y para protegerse de posibles errores (un apostador podría tener información privilegiada), la casa de
apuestas construirá un mayor margen de beneficio en su libro. El overround medio para un partido de
tenis, con sólo dos jugadores, es alrededor del 106%. Para apuestas 1ª parte/final del partido, con 9
resultados posibles, este se situará alrededor del 120%. Para el mercado del ganador de un torneo de
golf con 100 participantes será mucho más elevado. El tamaño del overround es algo que el apostante
debería siempre tener en cuenta. Cuanto mayor sea el overround, más “injustas” serán las cuotas y
mayor la desventaja para el apostante, a menos que suceda algo que la casa de apuestas no sepa sobre
uno de los participantes o sobre un posible resultado. Innegablemente, sin embargo, los apostadores
que no tienen habilidad para apostar siempre perderán más dinero a largo plazo apostando en mercados
de apuestas con mayores overrounds.

Los mercados de apuestas

Se puede apostar a casi cualquier cosa en los deportes, desde a un simple resultado hasta el número de
goles o puntos anotados, los jugadores que los marcan o el momento en que lo hacen. Si hay al menos
2 posibles resultados, la gente siempre especulará con el resultado final, y siempre que haya una casa
de apuestas disponible que ofrezca cuotas, esta especulación atraerá el flujo de dinero.

La mayoría de apostantes están familiarizados con las cuotas fijas o el mercado de 1X2. El término
“cuotas fijas” data del siglo XIX y de los orígenes de las apuestas en el fútbol. Durante 1880, los
periódicos empezaron a ofrecer precios fijos por predecir correctamente el resultado de los partidos.
Esos precios fueron conocidos como “cuotas fijas”. Más recientemente, las casas de apuestas físicas del
Reino Unido empezaron a publicar, con varios días de antelación, una larga lista de partidos de fútbol
para el fin de semana, con sus correspondientes cuotas. Este era un proceso caro que no se podía repetir
si se cometían errores o si las casas de apuestas necesitaban variar una cuota en respuesta a la demanda
de los clientes. Por ello, una vez que se imprimía la lista, las cuotas de las apuestas se convirtieron en
fijas, no se podían cambiar. En la era de Internet, una casa de apuestas tiene mucha más flexibilidad en
este aspecto y puede cambiar las cuotas para gestionar su libro de riesgos y el margen de beneficio. Sin
embargo, el término “cuotas fijas” sigue vigente (sobre todo en el Reino Unido) aunque quizás ahora es
más un término utilizado para cualquier mercado en el que las apuestas posibles son la victoria, el
empate o la derrota de los equipos o jugadores implicados.

Las cuotas fijas en fútbol están presentadas normalmente como 1X2, con 1 indica el equipo local, 2 el
visitante y X el empate. De nuevo, esta representación deriva de los cupones impresos de las casas de
apuestas físicas. Otros deportes con características de apuestas 1X2 incluyen partidos de de cricket y
hockey sobre hielo europeo. Competiciones en las que no es posible empatar como el tenis, snooker o
dardos (excepto las Premier League de snooker y dardos) tienen solo apuestas 12 (sin la X). Las cuotas
fijas en 12 son muy populares para eventos donde la probabilidad del empate es muy baja, por ejemplo
en rugby o balonmano, aunque algunas casas de apuestas siguen prefiriendo ofrecer el empate.

En América las cosas son algo diferentes. Las cuotas a ganador de partido se llaman “money line”. En
realidad, las cuotas “money line” representan lo mismo que las cuotas fraccionarias o decimales ya que
nos dicen cuánto dinero se apuesta y cuanto se puede ganar. Las money lines americanas pueden ser
positivas o negativas. Una money line positiva representa cuantos dólares ganarías si apostaras 100$.
Por ejemplo, si la cuota money line es +200, ganarías 200$ por una apuesta de 100$. O lo que es lo
mismo, una cuota 3.0. Un money line negativo representa cuantos dólares tienes que apostar para
ganar 100$. Así que una cuota money line de -300 significa que necesitas apostar 300$ para ganar 100$,
o lo que es lo mismo, una cuota 1.33.

Las cuotas money line son comunes cuando hay poca posibilidad de empate. A los americanos no les
gustan los empates. Y juegan prórrogas en la mayoría de los deportes hasta que hay un ganador. Las
cuotas money line son comunes para la mayor parte de deportes americanos, aunque para la NBA y la
NFL, donde se pueden marcar muchos puntos, los apostantes suelen preferir apostar a hándicaps. El
hándicap permite apostar a favor de equipos con pocas opciones de ganar. El objetivo del hándicap es
crear un mercado más equilibrado donde la probabilidad de que cualquier resultado concreto sea
ganador se aproxime a la par. Si por ejemplo el Barca juega contra el Leganés, para que la apuesta sea
atractiva para muchos apostantes, las líneas pueden ser por ejemplo Barca-5 goles, Leganés+5 goles.
Las cuotas pueden estar cercanas a 2. Si apuestas al Leganés, hay que sumarle 5 goles al resultado final
para determinar si ganas o pierdes la apuesta.

En este post tienes más información sobre cómo funcionan las apuestas con hándicap.

Riesgo y beneficios: Simples vs Combinadas

La más simple de todas las apuestas, ya se trate de cuotas fijas, money line o handicap, es la apuesta
simple. Con una apuesta simple en un evento deportivo, solo un resultado está cubierto y la apuesta se
puede ganar o perder, aunque como vimos en la anterior lección existen otras posibilidades como
los handicaps asiáticos. Con una apuesta simple a ganador/perdedor, tienes que acertar para tener una
rentabilidad positiva. Y a menos que la cuota para esa selección sea muy elevada, la recompensa puede
no ser suficiente para algunos apostantes. Veamos como un apostante puede incrementar su beneficio
potencial, y las consecuencias que ello tiene en el riesgo que asume, apostando a combinadas.

Imagina que las apuestas Liverpool gana al Manchester United y Arsenal gana al Tottenham tienen
(ambas por separado) una cuota de 2.50. Podríamos hacer 2 apuestas simples de 1€ en cada una. Si
fallamos las dos, perdemos 2€, si acertamos una de las dos ganamos 0.5€. Si ganamos las dos el beneficio
total será de 3€. Pero ¿qué ocurre si hacemos la apuesta a que ambos ganan? Si esto ocurre nuestro
beneficio será de 5.25€. ¿Por qué es así? Esta es una apuesta combinada. La cuota de esta apuesta
combinada se obtiene multiplicando las dos cuotas simples (2.5 x 2.5 = 6.25). Como la probabilidad de
que el Liverpool gane es del 40% (1/2.50), así como la del Tottenham, la probabilidad de que ambos
ganen es de 0.40 x 0.40 = 0.16 (16%). La inversa de 0.16 es 6.25, precisamente la cuota de esta
combinada.

En principio puede parecer que esta combinada es mejor opción para ganar dinero que hacer las 2
apuestas individualmente. El yield (beneficio/total apostado) de la acumulada es del 525% (5.25€
dividido entre 1€), mientras que para las 2 apuestas hechas por separado es del 150% (3€ entre 2€). Sin
embargo, para la apuesta doble sólo hay una manera de salir con beneficios (hay que ganar los 2
partidos) y la probabilidad de que eso ocurra ya hemos visto que es del 16%. Para las apuestas simples
podemos salir con beneficios aunque sólo ganemos una de las dos y la probabilidad de que eso pase es
del 48%. [Esto se calcula multiplicando la probabilidad de que el Liverpool gane, 0.40, por la probabilidad
de que el Arsenal no gane, 0.60; es decir, un 24% (0.24) y sumándole la probabilidad de que el Arsenal
gane y el Liverpool no gane]. En realidad si además le añadimos la probabilidad de que ambos equipos
ganen (16%), tenemos que hay un 64% de probabilidades de salir con beneficios. Lo que estamos
haciendo con la combinada doble es incurrir en más riesgo para ganar más, comparado con las apuestas
simples. Riesgo vs Beneficio es una espada con 2 filos. Si asumes más riesgo puedes ganar más, pero
también puedes perder más.

Asumiendo que las cuotas a ganador del Liverpool y Arsenal son cuotas justas, en el largo plazo
esperaríamos que si hacemos miles de apuestas, no saldríamos con beneficios ni con pérdidas. Para
entender esto debemos introducir la idea de “esperanza de beneficios”. La “esperanza de los
beneficios” es simplemente una expresión matemática que especifica cuanto podemos esperar ganar,
en media, con el resultado de una apuesta. Es la probabilidad de que ocurra ese resultado,
multiplicada por el beneficio potencial de ese resultado. Para la apuesta doble Liverpool/Arsenal, por
ejemplo,el beneficio potencial de 1€ apostado es de 5.25€. Si esperamos ganar el 16% de las veces la
esperanza de beneficios es de 0.84€. Esto significa que en media esperamos ganar 0.84€ con esta
apuesta. Sin embargo también esperamos perder 1€ el 84% de las veces, por lo que nuestra esperanza
de beneficios para este resultado es de -0.84€. Combinando ambas esperanzas de beneficios, la
esperanza total es de 0€. Podemos calcular esperanzas de beneficios para cualquier apuesta. Es lo que
hemos realizado en la tabla de abajo:

Cuota = 2.50 Esperanza de beneficios

Resultado Probabilidad Simple Doble
Liverpool y Arsenal ganan 16% 0.24€ 0.84€
Liverpool gana, Arsenal no gana 24% 0.06€ 0.24€
Liverpool no gana, Arsenal gana 24% 0.06€ 0.24€
Liverpool y Arsenal no ganan 36% 0.36€ 0.36€
Todos los resultados posibles 100% 0.00€ 0.00€
-

Tabular las esperanzas de beneficios de esta forma nos permite identificar fácilmente donde están los
riesgos y beneficios. En el largo plazo no importa si apostamos a simples o dobles Con cuotas justas
terminaremos en tablas. La diferencia reside en el tamaño y número de payouts. Apostando a simples
habrá un mayor número de payouts positivos. Apostando a dobles habrá menos payouts positivos pero
de mayor tamaño.

¿Qué ocurre, sin embargo, si las cuotas no son justas? Imaginemos que nuestra casa de apuestas ha
decidido aplicar un overround del 125% a sus cuotas. Las cuotas del Liverpool y Arsenal pasan a ser de
2.0, en vez de 2.50:

Resultado Probabilidad Simple Doble

Liverpool y Arsenal ganan 16% 0.16€ 0.48€
Liverpool gana, Arsenal no gana 24% 0.00€ -0.24€
Liverpool no gana, Arsenal gana 24% 0.00€ -0.24€
Liverpool y Arsenal no ganan 36% -0.36€ -0.36€
Todos los resultados posibles 100% -0.20€ -0.36€
-

Apostar a simples con un overround del 125% significa que podemos esperar perder 0.20€ por cada euro
apostado, o un yield del -20%. Si apostamos dobles la cifra sería de un -36%. Lo que estamos haciendo
es capitalizar la desventaja de las cuotas. En apuestas simples el overround es de 1.25. En dobles es de
1.5625 (1.25 x 1.25). La relación entre el overround y la esperanza de beneficios del apostador está dada
por la siguiente expresión:

Esperanza de beneficios = (1/overround) – 1, en la que el overround está expresado en notación

decimal.

En este ejemplo, apostar a simples significa un overround de 1.25, y por ello la esperanza de beneficios
es de -0.2, ya que 1/1.25 – 1 = -0.2. Por cada euro apostado debemos esperar perder 0.20 unidades. Si
apostamos a dobles, sin embargo, el overround sube a 1.5625 y por ello nuestra esperanza de beneficios
sube a -0.36 (1/1.5625 – 1), casi el doble.

Introduzcamos ahora otra apuesta, por ejemplo, que el Newcastle le gana al Sunderland, a cuota de 2.00
con un overround del 125%. El overround compuesto para esta apuesta triple (Liverpool, Arsenal y
Newcastle ganan) será de 1.25 x 1.25 x 1.25 = 1.953125, y nuestra esperanza de beneficios de -0.488.
Según vayamos introduciendo más y más partidos en nuestra combianda, el beneficio potencial se
incrementa exponencialmente, pero las probabilidades de que ganemos disminuyen al mismo ritmo. Y
si como ocurre en este caso, las cuotas no son justas, nuestra esperanza de beneficio es cada vez peor.
Imagina una múltiple de 10 apuestas a cuota 2.00, con un overround en cada apuesta de 1.25. La
esperanza de beneficios para esta múltiple es de -0.89€. En otras palabras, por cada euro que apostamos
podríamos esperar ganar sólo 0.11€. Esta claro que si no hay valor en las cuotas, apostar a combinadas
es una manera fácil de perder tu dinero rápido. Por supuesto,, la clave para hacer dinero apostando,
ya se en apuestas simples o combinadas, es encontrar valor en las cuotas. La próxima lección habla de
ello.

El Valor en las apuestas

El valor en las apuestas se encuentra cuando la probabilidad de ganar es mayor que la estimada por la
casa de apuestas, expresada por sus cuotas. En otras palabras, si la cuota de una casa de apuestas es
mayor que la que un apostante considera justa, podemos decir que hay valor. Los deportes no son como
los juegos de azar (por ejemplo el casino), en los que existe una probabilidad exacta y conocida de
antemano. La probabilidad de que salga el 0 en la ruleta es del 2.7% (1/37). Sin embargo, las casas de
apuestas, tipsters y apostadores como mucho pueden estimar cuales son las probabilidades justas de
los diferentes resultados de un evento deportivo. Hay muchas maneras de hacer esto, pero en la
mayoría de ellas supone analizar la “forma” de los equipos o jugadores que se enfrentan. Esto se puede
expresar cuantitativamente, analizando los datos históricos que determinan la forma, como por ejemplo
el número de goles, disparos a puerta o número de puntos en baloncesto, así como estudiando las
lesiones, la motivación o cualquier otro tipo de noticias que pueden afectar al resultado del encuentro.

El concepto de “valor” no tiene sentido analizando apuestas individualmente porque las cosas pueden
pasar o no pasar. Pero en el largo plazo las cosas cambian. Para cada partido siempre existe una
incertidumbre, unos factores aleatorios que tienen una gran influencia en el resultado y en el largo
plazo el factor suerte tiende a cero. Si podemos estimar a largo plazo la “superioridad” de un
equipo/jugador sobre otro mejor que la casa de apuestas es que somos capaces de encontrar valor y
ganaremos dinero en el largo plazo.
Realmente lo que importa no es si pensamos que un equipo o un jugador ganará, sino si pensamos que
tienen una mayor o menor probabilidad de ganar que lo que la casa de apuestas refleja en su cuota, y si
por tanto nuestra probabilidad estimada es mejor que la suya. Muchos apostantes se suelen centrar en
buscar picks ganadores -sin importarles la cuota- y suelen perder de vista que el objetivo es
encontrar valor en una apuesta. Cualquiera puede acertar el ganador de un partido y tener una buena
racha de aciertos pero pocos son lo suficientemente buenos como para encontrar valor y ganar dinero
a las casas en el largo plazo. La razón es doble. En primer lugar, porque las casas tienen mucha
experiencia estimando probabilidades; al fin y al cabo, viven de ello. En segundo lugar, porque porque
sus márgenes u “overrounds” les protegen contra cualquier error en las estimaciones que cometan.

En la anterior lección hablábamos del concepto de la “esperanza de beneficios” o qué beneficio

podemos esperar obtener de media en cada apuesta. Recordemos que la esperanza de beneficios no es
más que la suma de las probabilidades de los diferentes resultados posibles de un evento, multiplicadas
por el beneficio potencial de cada resultado. Cuando nuestra esperanza de beneficios para una apuesta
es negativa, es que no hemos sido capaces de encontrar valor en las cuotas. Cuando es positivo, sí
creemos que hemos encontrado el valor. Obviamente, no podemos conocer la verdadera probabilidad
de un resultado deportivo antes de que el partido se juegue por lo que no podemos saber realmente si
estamos haciendo una apuesta con valor o no. Solo con un análisis a posteriori de todo nuestro
historial de apuestas podemos ver si hemos sido capaces de encontrar valor en nuestras apuestas.
Esto lo veremos en una lección posterior, analizando un registro histórico de apuestas.

Retomemos nuestras apuestas simples y combinadas de la anterior lección. Supongamos esta vez que
nuestra casa de apuestas ha cometido un error y que la verdadera probabilidad de que el Liverpool gane
al Manchester United y de que el Arsenal gane al Tottenham, son en ambos casos del 50%. Con cuotas
a 2.50, creemos por lo tanto que ambos equipos tienen un 10% más de probabilidades de ganar sus
partidos de lo que la casa de apuestas piensa. Nuestra esperanza de beneficios por cada apuesta simple
sería de 0.50 (la probabilidad de ganar) multiplicado por 1.50€ (el beneficio potencial por 1€ de stake)
= 0.75€, menos la probabilidad de perder (50%) por nuestro euro de stake, -0.50€. En total la
esperanza de beneficios total para esta apuesta simple es por lo tanto 0.25€ por cada euro apostado
(0.75€ – 0.50€), ó 0.25 expresado en forma decimal. Podríamos ahorrarnos todos estos cálculos
simplemente dividiendo las cuotas de la casa de apuestas (2.50) por la cuota de nuestra probabilidad
justa (2.00) y restándole 1. Estas son las fórmulas:

Esperanza de beneficios = (Cuotas reales/Cuotas justas)-1

con las cuotas expresadas en formato decimal (europeo)

Edge ó Esperanza de beneficios (en %) = Cuotas actuales / Cuotas justas

Edge ó Esperanza de beneficios (en %) = Esperanza de beneficios +1

Recordemos que nuestro retorno es el beneficio más el stake apostado. La esperanza de beneficios (en
%) es la expresión matemática del “edge”, que no es más que cuanto valor hemos encontrado en las
cuotas.

En el caso de nuestras 2 apuestas simples, ambas tienen un edge de 1.25, que quiere decir, que de media
deberíamos esperar obtener un retorno de 1.25€ (beneficio de 0.25€) por cada euro apostado, o 2.50€
en total. En el mundo real veremos un retorno de 5€ (por las 2 apuestas simples), ó 1.50€ de retorno
por una ganada y una perdida, ó 0€ de retorno si perdemos las dos. Pero en nuestro mundo matemático,
nuestra esperanza de beneficios será de 1.25€ por cada 1€ de stake.

¿Y qué ocurre en nuestra apuesta doble Liverpool/Arsenal? Del mismo modo que el overround se
incrementa según vamos añadiendo apuestas, también lo hará nuestro “edge”. Si nuestro edge para
cada apuesta simple es de 1.25, para la apuesta doble será de 1.5625 (1.25 x 1.25). La cuota para la
apuesta doble es de 6.25 (2.5 x 2.5), mientras que nuestra cuota justas para sería de 4.00 (2.00 x 2.00).
6.25 dividido entre 4.00 es 1.5625. Podemos ver por tanto que nuestro edge es considerablemente
mayor con la apuesta doble en comparación con las simples. Obviamente es menos probable que
ganemos la apuesta doble (un 25% de probabilidades comparado con el 50% de las simples y un 75% de
probabilidades de obtener algo de beneficio con las simples). Sin embargo hemos ganado un edge al
asumir ese riesgo adicional porque nuestra expectativa de beneficio es superior. Ganaremos menos
veces, pero en neto ganaremos más. Sin embargo, esto no nos hace ser mejores pronosticadores;
simplemente significa que esperamos ganar más por unidad de stake asumiendo un mayor riesgo..

Si ahora añadimos al Newcastle para hacer una apuesta triple, nuestro betting edge aumentará a
1.953125 (1.25 x 1.25 x 1.25), lo que significa que por cada 1€ de stake que apostemos, debemos esperar
obtener casi el doble de nuestra apuesta. Para una combinada de 10 con cuotas individuales de 2.50 y
cuotas justas de 2.00, nuestro edge es de un astronómico 9.31. La probabilidad de ganar esta apuesta
múltiple de 10 selecciones es de 1 entre 1,024 veces, por lo que claramente estamos asumiendo un
mayor riesgo para tener una mayor ventaja o edge.

Sería fácil asumir que todo lo que tenemos que hacer es apostar a grandes múltiples para hacer una
fortuna. Pero este pensamiento es erróneo por dos razones. Primero, cuanto mayor es el margen de
beneficio que queremos obtener mayor es el riesgo que tenemos que asumir y más veces tendremos
que apostar para conseguir esa apuesta ganadora que buscamos. El riesgo no es solo una cuestión
teórica; tiene implicaciones de la vida real. Imagina que apuestas a combinadas de 10 selecciones cuya
cuota es de 9536, con un edge de 9.31. Si tenemos que hacer cientos de apuestas antes de ganar una
nos podemos quedar sin dinero antes de econtrarla. Además, la confianza que tenemos en hacerlo
probablemente hará que lo dejemos antes de encontrarla. En segundo lugar, cuantos más partidos
incluyamos en la combinada mayor es la probabilidad de que uno o más de ellos no tengan el edge
que nosotros creemos somos capaces de vislumbrar. Hasta ahora hemos asumido que somos capaces
de saber cuáles son las cuotas justas de cada partido. Pero obviamente esto no es posible conocerlo de
antemano. Y cuantos más partidos incluyamos más probable es que las cosas empiecen a salir mal.
Imaginemos, por ejemplo, que nuestra probabilidad justa de que Liverpool gane al Arsenal es de 2.50 y
no de 2.0, mientras que nuestra cuota justa del Newcastle es de 3.0. El edge para la apuesta triple es de
sólo 1.042 (2.50/2.50 x 2.50/2 x 2.50/3). En este ejemplo es todavía superior que el edge agregado de
las 3 apuestas simples (1.028) pero la ventaja es más reducida y realmente no merece la pena el riesgo
adicional en el que incurrimos en la triple con respecto a las apuestas simples.

La recompensa que alguien quiere obtener y cuánto riesgo está dispuesto a asumir es algo muy
subjetivo. Cada persona es diferente. Algunos prefieren apostar solo a apuestas simples de bajo riesgo,
aceptando una menor recompensa y betting edges a cambio de un “menor estrés” y una probabilidad
inferior de que las cosas vayan realmente mal. A otros les gusta vivir más el riesgo y están dispuestos a
pagar ese precio a cambio de conseguir unos mayores beneficios potenciales.
En resumen, cuando nuestra esperanza de beneficios es positiva hemos encontrado un edge; cuando es
negativa, no. Sin un edge sólo podemos esperar obtener beneficios a corto plazo con un poco de suerte.
A largo plazo la buena y la mala suerte se igualará y nuestro bankroll terminará a cero. Encontrar valor
en las apuestas es la clave para “vencer” las cuotas de las casas de apuestas y asegurarse un beneficio a
largo plazo y supone que un apostante informado debe ver todas las cuotas como probabilidades y
buscar oportunidades donde la casa de apuestas puede haber estimado mal las probabilidades de los
diferentes resultados se un evento deportivo.

Sistema de clasificación y previsión de

coincidencias
Como sabemos, los eventos deportivos son más complejos que los dados o la ruleta, y la verdadera
posibilidad de que un resultado u otro ocurran nunca puede ser determinada matemáticamente a
partir de los primeros principios. Esto no quiere decir, sin embargo, que las matemáticas no pueden
desempeñar un papel en el pronóstico o pronóstico deportivo. Por supuesto, muchos apostadores
o disgustan o desconfían de los números, y prefieren trabajar con información cualitativa en su
lugar, como la última lista de lesiones, el clima previsto y otros factores que influyen en un próximo
evento. Esto es digno de elogio, porque sin un conocimiento profundo de cada evento en cuestión,
un apostador no es probable que tenga éxito a largo plazo. Sin embargo, lo que las matemáticas
ofrecen al apostador es un medio simple y eficaz de analizar un evento deportivo
cuantitativamente, proporcionando una estimación de las verdaderas posibilidades de los posibles
resultados y la identificación de un borde de apuestas.

Definir una función de probabilidad para el resultado de un evento deportivo no es una tarea fácil
dado los muchos factores influyentes (o variables) que determinan el resultado final, ninguno de
los cuales puede determinarse exactamente. Esto no quiere decir que no exista una función de
probabilidad, simplemente que el número de variables que habría que describir por ella hace que
su cálculo sea imposible a partir de los primeros principios. Al igual que el clima, la evolución de los
concursos deportivos es demasiado complejo para predecir exactamente. En cambio, el apostador
debe recurrir a la estimación de la distribución de probabilidad de los posibles resultados de cada
concurso deportivo. Para los dados, esto significaría contar el número de veces que cada número
es lanzado (aunque no hay mucho punto de eso, ya que la función de probabilidad se puede calcular
fácilmente a partir de los primeros principios - es sólo 1 / n donde n es el número de lados). Para
los deportes, significa analizar los datos históricos. Por supuesto, uno no necesita un título en
estadística para apreciar la importancia de estudiar el desempeño pasado en la predicción
deportiva. Cada apostador intuitivamente sabe que para predecir el resultado del próximo evento
entre dos jugadores o equipos, es necesario estudiar sus registros pasados y de alguna manera
proporcionar una medida o calificación de la superioridad de un competidor sobre otro. El producto
final de tal enfoque es a menudo llamado un sistema de calificación.

Por supuesto, no hay garantía de que el rendimiento pasado de una forma u otra proporcione una
estimación confiable de las probabilidades futuras. Sin embargo, existe una amplia evidencia del
mundo de los deportes para sugerir que un récord de desempeño pasado con frecuencia
proporciona un excelente indicador de eventos futuros, tanto que el uso de estos datos constituye
la base de la mayoría de las probabilidades de compilación por los corredores de apuestas. La clave
para ganar una ventaja sobre la casa de apuestas se convierte entonces en una cuestión de
encontrar mejores y más relevantes datos con los que construir un sistema de calificación más
preciso para la predicción deportiva.

Un sistema de clasificación simplemente proporciona una medida cuantitativa de la superioridad

de un jugador o equipo sobre su oposición en un concurso deportivo. Tal superioridad se determina
analizando y comparando uno o más aspectos de la actuación pasada para cada uno de los lados.
Para Liverpool vs Manchester United, esto podría incluir resultados en sus últimos partidos (contra
otros equipos), goles marcados en esos partidos, rendimiento relativo en casa y lejos, puntos y
posiciones de liga, y tal vez el rendimiento uno contra el otro para sus enfrentamientos más
recientes. Para los partidos de tenis, también podría ser relevante para estudiar el rendimiento
pasado en diferentes superficies, ya que algunos jugadores se desempeñan mejor que otros
dependiendo de lo que están jugando. Algunos jugadores también parecen estar mejor preparados
para jugar con otros jugadores que su ranking mundial podría sugerir, debido a la forma en que sus
estilos de juego coinciden.

Los sistemas de clasificación más sofisticados pueden intentar acomodar la calidad de la oposición
jugada. Un sistema de clasificación bien conocido que hace esto se llama Rateform, el más famoso
de los cuales es el Elo Rating System, llamado así por el profesor Arpad Elo, quien primero diseñó
su sistema para las competiciones de ajedrez, pero que ha sido adaptado para su uso en muchos
diferentes Deportes. Después de cada juego, el competidor ganador toma puntos del perdedor. El
número total de puntos ganados o perdidos después de un partido es determinado por la diferencia
entre las calificaciones del ganador y del perdedor. En una serie de juegos entre competidores de
alta y baja calificación, se espera que el mejor puntuable gane más victorias. Si el competidor de
alta calificación gana, sólo unos pocos puntos de calificación se tomarán del competidor de baja
calificación. Sin embargo, si el competidor clasificado bajo gana, muchos puntos de la calificación
serán transferidos. Para los deportes donde los sorteos son posibles, el competidor clasificado bajo
también ganará algunos puntos del más alto clasificado, que por el contrario perderá algunos en el
caso de empate. Esto hace que el sistema de clasificación se auto-corrija.

Un competidor cuya calificación es demasiado baja debe, a largo plazo, hacer mejor de lo que el
sistema de calificación predice, y así ganar puntos de calificación hasta que El puntaje refleja la
verdadera fuerza de juego. Para cualquier sistema de calificación, debe hacerse un juicio sobre
cuánto tiempo atrás el rendimiento pasado podría ser considerado relevante. Para los registros de
cabeza a cabeza, esto puede implicar varios años, aunque al analizar los deportes de equipo uno
tiene que considerar el cambio en personal. Parece poco punto en la inclusión de un partido jugado
15 años antes, cuando cada jugador en ambos lados era diferente a los escuadrones de hoy. Para
un partido como Liverpool vs Manchester el único caso por incluir datos históricamente tan
antiguos en el análisis sería motivado: cualquiera que sea la alineación del equipo, estas dos partes
tienen una historia de querer vencerse mutuamente más mal que para la mayoría Otros juegos. Los
precios calculados para cada competidor en un concurso deportivo se utilizan para producir una
clasificación de partido.

El enfoque más obvio y típicamente utilizado es simplemente calcular la diferencia entre las dos
calificaciones. Por ejemplo, si Andy Murray tiene una calificación de 129 y Roger Federer una
calificación de 142, entonces la clasificación del partido será de 13 a favor de Roger Federer. Una
vez que tengamos una calificación de coincidencia, el siguiente paso es estimar a partir de ella las
posibilidades de que se produzca cada posible resultado, a partir de lo cual se pueden hacer
predicciones de apuestas. Para lograr esto, una calificación de coincidencia debe de alguna manera
ser traducida en una distribución de probabilidad para los posibles resultados en un concurso
deportivo. El enfoque más básico es analizar los resultados de todos los partidos anteriores en
nuestro conjunto de datos, donde la clasificación del partido fue de 13 a favor de un competidor
sobre otro. Supongamos que habiendo calculado las puntuaciones de coincidencia para todos los
partidos históricos encontramos 100 de ellos donde la clasificación de partido Fue de 13, y de estos
58 resultó en una victoria para el competidor de mayor calificación y 42 para el competidor de
menor calificación. Nuestra distribución de probabilidad para las puntuaciones de coincidencia de
13 es el 0.58 / 0.42 (o 58% / 42%), y de esto podemos calcular lo que, en promedio, las
probabilidades de apuestas justo debe ser para esos partidos. Una probabilidad de 0.58 se traduce
en un precio de apuesta de aproximadamente 1.72; Para una probabilidad de 0.42 es 2.38. Armado
con esta información, ahora podemos comprobar las casas de apuestas para ver qué probabilidades
están ofreciendo para Murray y Federer.

Encontramos, por ejemplo, que Federer está disponible al mejor precio de 1,66 mientras que para
Murray es de 2,50. Dado que hemos estimado de fuera del sistema de clasificación que el precio
justo de Federer debe ser de 1,72, apostando menos que esto significa que no tenemos ventaja, y
desde 1,66 es el mejor precio disponible para él, por lo tanto, no hay valor para ser encontrado para
él. Por el contrario, el precio de Andy Murray de 2.50 es mejor que nuestras probabilidades justas
estimadas de 2.38, dándonos un borde teórico de 1.064 (o 2.50 / 2.38). Es decir, si nuestras
estimaciones de probabilidad basadas en nuestro sistema de calificación son correctas, debemos
esperar un promedio de poco más de 6 peniques por cada 1 apuesta en un partido como éste. Por
supuesto, sabemos que Murray, y nuestra apuesta, ganará o perderá, pero esto no cambia la
relevancia de las calificaciones y análisis de valor que hemos realizado. Recuerde, es todo sobre el
largo plazo. Si Murray pierde, esto no invalida necesariamente la metodología de pronóstico que
hemos utilizado; Puede que simplemente haya tenido mala suerte, tal vez perdiendo un par de
puntos clave en el desempate final, que hizo que el resultado se volcara contra él.

No sabremos si nuestro método de pronóstico es exacto y potencialmente mejor que el que el

corredor de apuestas está usando hasta que muchos de estos partidos hayan sido jugados y
podamos analizar nuestras apuestas. Naturalmente, esto es algo que todos los apostadores que
utilizan un sistema de calificación deben hacer. No hay ningún punto en continuar con algo en
apuestas si no funciona. El ejemplo anterior describe una calificación de coincidencia para una
propuesta de apuesta simple de dos vías, típica en deportes como el tenis. Las cosas se vuelven un
poco más complicadas para los deportes donde el sorteo es también una opción (aunque esto sólo
significa el cálculo de otra cifra porcentual), y particularmente donde hay una clara ventaja para un
competidor en casa con respecto al competidor visitante, como es frecuente en fútbol. Se puede
argumentar que una calificación de partido de 13 en favor de un equipo de fútbol local no va a
mostrar la misma distribución de probabilidad de los resultados como una calificación de partido
en favor del equipo visitante. Para la mayoría de las competiciones del balompié, los lados caseros
ganan generalmente dos veces tantos juegos como los lados ausentes. En consecuencia, este sesgo
debe tenerse en cuenta. La forma más conveniente es tal vez definir la calificación de partido como
la superioridad del equipo local sobre el equipo visitante, en lugar de que el equipo más fuerte
sobre el equipo más débil. De esta manera, podemos tener calificaciones de emparejamiento tanto
negativas como positivas, cuando el equipo visitante es calificado más alto que el equipo local.
Liverpool en casa podría estar clasificado 117, mientras que el Manchester United - lejos - podría
ser 137. La clasificación del partido sería entonces -20.

Las posibilidades para diseñar, probar, implementar y verificar sistemas de clasificación de partidos
son infinitas y podríamos producir volúmenes y volúmenes de material sobre el tema. Un resumen
de un Al enfoque para el desarrollo de un simple sistema de clasificación de partidos de fútbol es
descrito por Football-Data en http://www.football-data.co.uk/ratings.pdf. Pero por ahora,
mientras entendamos que las habilidades relativas de los competidores deportivos se pueden
traducir en probabilidades de diferentes resultados posibles y sus probabilidades de apuestas
asociadas, estamos en el camino de encontrar una ventaja sobre el corredor de apuestas.

Estacas y gestión del dinero

El objetivo de cualquier apostador es ganar dinero con las apuestas. Si él es serio sobre hacer esto
metódicamente, él comenzará poniendo a un lado un bankroll del dinero - un banco que apuesta -
que él sabe que puede permitirse para perder si todo va mal. Para decidir lo que es razonable dejar
de lado con fines de apuestas, deberíamos plantear una simple pregunta: ¿Si perdemos todo esto,
afectará negativamente nuestro modo de vida y otros que nos rodean? Si la respuesta es sí,
entonces debemos reducir el tamaño del bankroll, o en el extremo, no apostar en absoluto.

El siguiente paso es decidir cuánto de nuestro banco de apuestas vamos a apostar cada vez que
hacemos una apuesta. Naturalmente, esto puede variar de apuesta a apuesta de acuerdo a nuestras
preferencias de estaca y los tipos de probabilidades que nos gusta apostar. Por ejemplo, es bastante
razonable apostar más en las cosas que tienen una mejor oportunidad de ganar según lo definido
por las probabilidades. Sin embargo, estamos pensando aquí en términos de promedios. Podríamos
optar por apostar todo nuestro banco de apuestas en una apuesta. En caso de que ganar, trabajo
hecho, y podemos retirarnos del juego por un mes, un año o más. En caso de que pierda, bueno,
oh querida, que fue bastante estúpido no fue así, vamos a tener que dejar de fumar hasta que
hemos tenido el tiempo suficiente para recaudar otro bankroll. Por supuesto, un enfoque más
sensato, menos riesgoso y probablemente más gratificante sería colocar apuestas mucho más
pequeñas, con nuestro tamaño de apuesta medio tal vez 1%, 2% o como máximo 5% de nuestro
bankroll. De esta manera, no podemos aumentar el tamaño de nuestro bankroll tan rápido cuando
ganamos, pero tampoco corremos el riesgo de perder tanto de él de una sola vez en tan corto
espacio de tiempo. Cuán grandes o pequeñas serán nuestras apuestas dependerá enteramente de
nuestras actitudes ante el riesgo. Y cuánto tiempo podemos cuidar de nuestro bankroll dependerá
de si o no podemos encontrar una ventaja sobre la casa de apuestas. Este es el negocio de la gestión
del dinero.

El plan de estaquia más común en uso se conoce como el plan de estacado fijo o de nivel. Aquí,
cada apuesta colocada tiene una apuesta del mismo tamaño. Por ejemplo, si el bankroll con el que
empezamos es de 100 unidades podríamos apostar 1 unidad en todo lo que apuesta, es decir, 1%
del bankroll inicial. Hay quizás 3 ventajas a este acercamiento: 1) es simple; 2) los corredores de
apuestas pueden ser menos inclinados a pensar que eres un profesional (y un montón de casas de
apuestas están muy contentos de quitar su costumbre si creen que son); Y 3) es el mejor plan de
replanteo para averiguar qué ventaja tiene sobre la casa de apuestas.

Los detractores de nivel de estaca señalan, en primer lugar, que no es un enfoque tan razonable
para apostar lo mismo en un 10/1 underdog como en un favorito de 1/10 caliente. En términos de
gestión de riesgos, hay algún mérito en eso, y de hecho apostar a ganar beneficios similares no
importa cuáles sean las probabilidades, en lugar de colocar tamaños de apuestas similares es en
realidad una estrategia más eficaz en función del riesgo. Sin embargo, siempre que apostemos en
cosas donde las probabilidades no varían demasiado, las apuestas de apuestas de nivel es una
estrategia de gestión de dinero perfectamente razonable para adoptar.

En segundo lugar, se argumenta que deberíamos estar cambiando el tamaño de nuestra

participación ya que el tamaño de nuestros cambios de bankroll, es decir, apuestas como un
porcentaje de nuestro bankroll actual en lugar de la que comenzamos con. Así que si nuestra
primera apuesta de £ 1 en 2.00 es un ganador, el siguiente tendrá una apuesta de £ 1.01, ya que
nuestro nuevo bankroll es £ 101. Alternativamente, si se pierde, nuestra segunda participación sería
de £ 0,99. Una vez más, es cierto que dicho porcentaje de participación en los bancos es más eficaz
en función del riesgo, ya que tiene el beneficio compuesto de aumentar el bankroll más rápido
cuando estamos ganando, pero reduciendo la tasa de pérdidas cuando estamos perdiendo. Sin
embargo, los defensores de la jerarquización de nivel podrían argumentar razonablemente que se
necesitará un porcentaje de apuestas de apuestas más largas para recuperarse de las pérdidas
anteriores, y eso es ciertamente cierto. Además, no siempre es posible calcular tamaños exactos
de apuestas, porque generalmente estaremos colocando más de una apuesta a la vez.

Algunos apostadores abogan por una casa a mitad de camino: use un tamaño de apuesta fijo hasta
que su bankroll haya cambiado por una cantidad pre-especificada, típicamente un 25%. Cuando su
bankroll ha crecido un 25%, aumente su tamaño de apuesta fija en un 25%. Por otro lado, si ha
sufrido una pérdida del 25% en sus fondos de apuestas disponibles, reduzca las apuestas en un 25%.
Tal estrategia es, sin sorpresa, llamada el sistema Plateau. En última instancia, se reducirá a las
preferencias de riesgo del apostador individual qué plan de estaca que prefieren elegir.

Tal vez la estrategia de gestión de dinero más teóricamente eficiente en cuanto a los riesgos sea lo
que se conoce como el plan de estacas de Kelly. Desarrollado por John Kelly mientras trabajaba en
los Bell Labs de AT & T en 1956, las matemáticas del Criterio de Kelly son bastante complejas,
involucrando lo que se conoce como funciones de utilidad. Utilidad es realmente sólo otra palabra
para el beneficio, y en el contexto de las apuestas deportivas, el beneficio para el apostador de
ganar algo relativo al riesgo que tiene que tomar para ganar. Tomando en cuenta la tasa esperada
de retorno y el riesgo, la función de utilidad de Kelly Ofrece una forma económicamente justificada
y matemáticamente precisa para calcular tamaños óptimos de las apuestas que maximizan el
crecimiento general de un bankroll, en lugar de una ganancia sobre la facturación. En las apuestas
deportivas, el tamaño de la apuesta de Kelly viene dado por la siguiente relación: Porcentaje de
apuesta de Kelly = (puntaje de apuesta - 1) / (Apuestas probabilidades - 1), Las 3 variables se
expresan como decimales.

Por ejemplo, si se nos ofrece 2,50 para que el Liverpool venciera al Manchester United, y nuestro
sistema de clasificación ha calculado que las probabilidades de la feria deberían ser de 2,00,
entonces nuestro límite de apuestas es 1,25 (es decir, 2,50 dividido por 2,00) Porcentaje es 0.1667
(es decir, 0.25 dividido por 1.50). Si nuestro bankroll actual era 100, entonces el Criterio de Kelly
sugeriría que estacaramos 16.67 unidades en esta apuesta, si 200 entonces 33.33 unidades. El
porcentaje de estaca depende tanto de las probabilidades y crucialmente también el borde de un
apostador cree que ha encontrado. Aunque la estrategia de gestión de dinero de Kelly parece
ofrecer una mayor tasa de retorno que cualquier otro plan de estaca, algunos economistas han
argumentado en contra, principalmente porque Las restricciones de apuestas específicas de un
individuo y las preferencias de riesgo pueden anular el deseo de una tasa de crecimiento óptima.
En otras palabras, la función de utilidad prescrita por el Criterio de Kelly (un logarítmico) puede no
ser necesariamente algo como la función de utilidad preferida del apostador.

Por ejemplo, imagine una apuesta con probabilidades de 1.50 y con un borde de 1.20. La apuesta
prescrita de Kelly sería un enorme 40%. ¿Serían felices los apostadores de apostar casi la mitad de
su bankroll sólo porque la teoría sugiere que éste era el tamaño óptimo de la estaca para maximizar
la tarifa que su bankroll podría crecer? Incluso los partidarios de Kelly reconocen las limitaciones
con esta estrategia del estacado, y abogan por el uso de fraccionario Kelly apuesta por reducir la
volatilidad, el riesgo y la influencia de errores aleatorios en sus cálculos de borde. El último de estos
presenta posiblemente el mayor dolor de cabeza para los que utilizan Kelly. Si está evaluando con
precisión su ventaja sobre la casa de apuestas, Kelly ofrece un medio útil para acelerar el
crecimiento del bankroll más allá de lo que es posible con otras estrategias de administración de
dinero. Sin embargo, si no lo haces, las consecuencias de apostar demasiado en cosas que en
realidad tienen poca o ninguna ventaja en absoluto serán totalmente predecibles.

Al igual que con cualquier plan de gestión del dinero, si usted no tiene lo que se necesita para vencer
a la casa de apuestas, la quiebra será inevitable en el largo plazo. Además de tamaño fijo y
porcentajes estacando, hay un puñado de jugadores que juran por un Sistema conocido como el
estacado progresivo. La palabra "progresista" es en realidad un eufemismo para la persecución de
las pérdidas. La idea detrás de la persecución de la pérdida es apostar apuestas progresivamente
más grandes después de cada pérdida hasta que se consiga un ganador, recuperando así todas las
pérdidas anteriores y ganando el beneficio apuntado de la apuesta original. Los defensores de este
tipo de estrategia de gestión de dinero le hará creer que es a prueba de fallos, porque siempre
aterrizará a ese ganador en algún momento que usted necesita para hacer que este sistema de
trabajo. Este pensamiento es completamente defectuoso. Si usted sabe que va a la tierra un
ganador, no hay punto mucho persiguiendo las pérdidas. Apuesta cuando sabes que ganarás. Por
supuesto, en verdad no podemos saber con certeza cuándo vamos a ganar, si lo hicimos, las
apuestas sería fácil y las casas de apuestas estarían fuera del negocio. La dura realidad es que no
sabes cuándo o si vas a tener ese ganador, y más específicamente si lo lograrás antes de que te
quedes sin dinero o la casa de apuestas te dice que has alcanzado su límite de juego.

El problema con el estacado progresivo es que el tamaño de las apuestas después de las pérdidas
aumenta a una tasa exponencial, lo que significa que incluso después de algunas pérdidas pueden
ser mucho, mucho más grandes que la primera apuesta inicial de la serie. Por supuesto, si
tuviéramos recursos financieros infinitos, un corredor de apuestas infinitamente generoso y una
cantidad infinita de tiempo, la apuesta progresiva podría tener algún mérito. Naturalmente, el
infinito no tiene nada que ver con el mundo real de las apuestas deportivas. También es posible
ilustrar el defecto en la lógica del estacionamiento progresivo (y cualquier otro plan de replanteo
para esa materia donde el apostador no tiene ventaja) a través de un Prueba matemática muy
simple que analiza la expectativa teórica de ganancia. Aquí, hemos hecho esto para una estrategia
de estaca progresiva bien conocida, la Martingala. El plan de estaca Martingale proviene del mundo
de los juegos de azar de casino, y en particular el juego de la ruleta.

Un juego popular en la rueda de la ruleta es rojo-negro, donde el jugador debe decidir si la bola
aterrizará en un rojo o un número negro después de cada giro. Con vistas a la influencia del borde
de la casa, las probabilidades de cualquiera de los resultados son 2,00. La idea detrás de Martingale
es duplicar el tamaño de la apuesta después de cada apuesta perdedora, y volver a la apuesta inicial
después de cada victoria. De esta manera, las pérdidas anteriores se recuperan después de cada
suceso. La tabla siguiente considera los 8 resultados posibles de 3 vueltas de la rueda donde para
cada giro hemos apostado rojo (R) que comienza con una estaca de 1 unidad y lo dobló después de
la pérdida. Por ejemplo, la primera fila muestra 1 de las 8 posibilidades, 3 negros (B) con pérdidas
de apuestas de 1, 2 y finalmente 4 para una pérdida total de 7, una probabilidad de 12,5% (0,125)
y por lo tanto una expectativa de ganancia de - 0,875 (es decir, -7 x 0,125).

Martingale
Profit
Permutation Bet Outcome Stakes Profit Total Probability
expectancy
1 R, R, R B, B, B 1, 2, 4 -1, -2, -4 -7 0.125 -0.875
2 R, R, R B, B, R 1, 2, 4 -1, -2, +4 +1 0.125 +0.125
3 R, R, R B, R, B 1, 2, 1 -1, +2, -1 0 0.125 0
4 R, R, R B, R, R 1, 2, 1 -1, +2, +1 +2 0.125 +0.25
5 R, R, R R, B, B 1, 1, 2 +1, -1, -2 -2 0.125 -0.25
6 R, R, R R, B, R 1, 1, 2 +1, -1, +2 +2 0.125 +0.25
7 R, R, R R, R, B 1, 1, 1 +1, +1, -1 +1 0.125 +0.125
8 R, R, R R, R, R 1, 1, 1 +1, +1, +1 +3 0.125 +0.375
Total 36 0 1.000 0
The total profit expectancy for all 8 possible outcomes is 0. In another words, with no edge over the
roulette wheel, all we can hope to achieve over the long term is to break even. A similar analysis for
level staking returns exactly the same result.

Profit
Permutation Bet Outcome Level stakes Profit Total Chance
expectancy
1 R, R, R B, B, B 1, 1, 1 -1, -1, -1 -3 0.125 -0.375
2 R, R, R B, B, R 1, 1, 1 -1, -1, +1 -1 0.125 -0.125
3 R, R, R B, R, B 1, 1, 1 -1, +1, -1 -1 0.125 -0.125
4 R, R, R B, R, R 1, 1, 1 -1, +1, +1 +1 0.125 +0.125
5 R, R, R R, B, B 1, 1, 1 +1, -1, -1 -1 0.125 -0.125
6 R, R, R R, B, R 1, 1, 1 +1, -1, +1 +1 0.125 +0.125
7 R, R, R R, R, B 1, 1, 1 +1, +1, -1 +1 0.125 +0.125
8 R, R, R R, R, R 1, 1, 1 +1, +1, +1 +3 0.125 +0.375
Total 24 0 1.000 0

Todo lo que Martingale ha logrado es un aumento en el número de veces que podemos esperar
obtener un beneficio, en este ejemplo de 4 con el nivel de estacar a 5. Desafortunadamente, esto
es a expensas de una gran pérdida, que es esencialmente la fuente de la Riesgo inherente asociado
con el estacionamiento de Martingale. Cuantas más permutaciones incluyamos en el análisis, mayor
será la pérdida potencial en el peor de los casos.

A pesar de la presentación anterior, todavía habrá quienes insisten en que es sólo cuestión de
tiempo antes de sacar un ganador, ya sea porque creen que tienen una ventaja sobre la casa de
apuestas, o mucho peor han cometido la falacia del jugador de asumir que un Ganador se vuelve
más probable después de una serie de pérdidas de acuerdo a la ley de promedios. Si entiendes que
cada apuesta es completamente independiente de los procedimientos, entenderás por qué ese
pensamiento es falaz. Si no lo hace, por desgracia, es sólo una cuestión de tiempo antes de ir a la
quiebra. Y si realmente tiene una ventaja sobre la casa de apuestas, ni siquiera tiene que ir a
perseguir las pérdidas en el primer lugar. El apostar progresivo se aprovecha de la avaricia y la
estupidez y no tiene absolutamente ningún lugar en el mundo de las apuestas deportivas
inteligentes y responsables. Los apostadores inteligentes no persiguen pérdidas; ¡nunca!

Analizar un registro de apuestas

Tradicionalmente, el tamaño y el crecimiento del bankroll se ha considerado como la medida
primaria del éxito apostando. Con frecuencia, las reclamaciones son hechas por tipsters sobre la
cantidad de beneficios que pueden generar para sus miembros. "Una ganancia garantizada del 90%
a lo largo de una temporada", "288% durante la temporada", "500% en las últimas 3 temporadas"
son sólo algunas de las afirmaciones que se han hecho. Algunas reclamaciones pueden ser
fraudulentas. Para aquellos que son genuinos, todavía proporcionan poca o ninguna información
significativa sobre cómo se logró ese beneficio, cuan grandes eran las apuestas y, en consecuencia,
cuán grandes eran los riesgos que se tomaron. Para comenzar a responder a estas preguntas,
necesitamos una información clave: el rendimiento, a veces llamado el retorno de la inversión o el
beneficio sobre el volumen de negocios.

En finanzas, el rendimiento se define como el beneficio obtenido de una inversión, y más

específicamente la tasa de rendimiento anual expresada como un porcentaje. En las apuestas, de
manera similar, el término puede usarse para describir la relación entre la ganancia y la cantidad
total apostada, más comúnmente conocida como la ganancia sobre la facturación (POT) o, a veces,
sobre la inversión (ROI), si también se incluyen las apuestas devueltas. Los rendimientos de
apuestas, por supuesto, no se pueden fijar por adelantado como pueden para los pagos de
dividendos, que se pagan con la inversión de una suma global inicial, y fluctúan continuamente
mientras el apostador experimenta períodos intermitentes de éxito y fracaso. Además, un sistema
de apuestas rentable debería permitir a un apostador reciclar el dinero ya ganado en futuras
apuestas, asegurando que gran parte del capital inicial de apuestas no se utilice realmente. Para el
apostador de valor, sin embargo, el rendimiento de apuestas proporciona un indicador mucho más
significativo de éxito, ya que puede estar directamente relacionado con su expectativa de ganancias
y el tamaño de su ventaja sobre las probabilidades del corredor de apuestas.

Si un apostador tiene o no un borde para una apuesta, y si es así cómo grande puede ser, sólo se
puede estimar mediante la aplicación de los principios de apuestas de valor y pronóstico. Sin
embargo, el rendimiento de una sucesión de apuestas ya establecidas proporciona una buena idea
de la ventaja media que un apostador ha asegurado. Si devuelve £ 1.100 a partir de ciento diez
sencillos, parece que, en promedio, ha ganado un 10% de ventaja sobre el corredor de apuestas
para cada una de estas apuestas (suponiendo que no fue sólo suerte). Nunca sabremos cuál era el
borde exacto para cada una de esas 100 apuestas, sólo el promedio, basado en el tamaño del
rendimiento total. Una vuelta de £ 900, por otra parte, es evidencia que él está luchando para batir
las probabilidades (otra vez asumiendo esta vez que él no acaba de ser mala suerte). Para muchos
apostadores una pérdida del 5 al 10% en la rotación no es rara. No es una coincidencia que esto es
muy similar en magnitud al margen de beneficio típico del corredor de apuestas expresado a través
de su overround.

En el ejemplo anterior, un rendimiento de £ 1.100 de las apuestas de £ 1.000 define un rendimiento

del 10% o un 10% de beneficio sobre el volumen de negocios (POT). Alternativamente, podemos
describir esto como un 110% de retorno de la inversión (ROI). La relación entre POT y ROI es
esencialmente la misma que para la expectativa de ganancia y retorno. Las estacas se incluyen en
estas últimas, omitidas en la primera. Un POT negativo o ROI inferior al 100% es evidencia de un
apostador sin un borde.

Como hemos visto a partir de los cálculos de la expectativa de ganancias de los diferentes planes
de estaca en la última lección, a largo plazo sea cual sea el método de gestión de dinero que utilice,
su rendimiento o ROI será en última instancia un reflejo de su promedio de apuestas sobre la casa
de apuestas 'T ponderado demasiado en favor de algunas apuestas en comparación con otros). En
el corto plazo, habrá diferencias dependiendo de qué estrategia de estaca usted está utilizando y
de cuánto buena o mala suerte usted está experimentando, y un rendimiento a corto plazo no
refleja necesariamente la verdadera habilidad que el apostador tiene en la predicción del fósforo.
Por ejemplo, ahora sabemos que un cazador de pérdidas no sofisticado puede posponer
temporalmente el inevitable desastre que le espera, durante el cual puede creer erróneamente que
sus beneficios positivos son de alguna manera evidencia de que ha ganado una ventaja sobre las
probabilidades. Del mismo modo, una estrategia diseñada para obtener ganancias similares
cualquiera que sea la apuesta probabilidades puede devolver un rendimiento más alto en el corto
plazo de lo que cabría esperar de la punters borde (si eso se podría saber) porque
desproporcionadamente más dinero está apostando a proposiciones de alta probabilidad, que Es
menor probabilidades con una mayor probabilidad de ganar. La mejor estrategia de estaca para
aplicar a un cálculo de rendimiento, y la que proporciona el indicador más fiable de la verdadera
ventaja que el apostador ha ganado, es la estrategia de nivel de apuestas porque el mismo peso se
aplica a cada apuesta. Eso no quiere decir que usted debe apostar a las apuestas de nivel, pero
simplemente que cualquier plan de estaca que usted hace uso, no es menos vale la pena analizar
lo que habría ganado de sus apuestas si hubiera utilizado apuestas de nivel.

También es posible representar gráficamente un historial de apuestas por medio de una serie de
tiempo o gráfico de ganancias, nombrados como tales porque traza la evolución A través del tiempo
de una serie consecutiva de apuestas, y específicamente la evolución del tamaño del bankroll. Tales
series de tiempo son a veces más útiles para ilustrar la aleatoriedad inherente que impregna toda
la evolución de las ganancias de apuestas. A menos que podamos arreglar partidos, no ganaremos
todo el tiempo, y si ganamos o perdemos en una apuesta por apuesta será dominado por influencias
aleatorias que afectan a todos los concursos deportivos. La evolución del tamaño del bankroll va a
serpentear de una manera aparentemente aleatoria en escalas de tiempo más cortas, la cantidad
de la cual dependerá tanto del tipo de apuestas que nos gusta apuesta y el tamaño de la ventaja
que tenemos. Apostar a probabilidades más cortas mostrará menos aleatoriedad que apostar a
mayores probabilidades, porque estamos ganando más a menudo. Los apostadores con mayor
ventaja son más propensos a mostrar tendencias de crecimiento de los beneficios a largo plazo más
dominantes subyacentes a las subidas y bajadas de apuesta a apuesta. Una típica tabla de
beneficios se muestra a continuación. Una pregunta clave a hacer ahora es: ¿cómo sabemos cuándo
nuestro rendimiento es un indicador fiable de nuestro borde de apuestas? En otras palabras, ¿en
qué punto comenzamos a creer que realmente tenemos una ventaja sobre el corredor de apuestas
que podemos mantener a largo plazo? O, al mirar nuestro gráfico de ganancias, ¿cuándo podemos
decir que cualquier tendencia es más importante que la variabilidad aleatoria a corto plazo? Si
hemos estado perdiendo durante un tiempo considerable, la respuesta debería ser bastante obvia.
Sin embargo, ser rentable de las apuestas deportivas no es necesariamente un signo de habilidad.
En el corto plazo podría ser el resultado de la suerte. Tener suerte en los juegos de azar sólo puede
ser rentable durante tanto tiempo, a menos que tenga un corredor de apuestas feliz de ofrecer
mejores odds. A la larga, la buena y la mala suerte se anularán mutuamente dejando sólo evidencia
de la habilidad del apostador, o más usualmente la ausencia de ella. Hay medios de prueba cuando
podemos empezar a creer que nuestro rendimiento es el resultado de la habilidad y no de la suerte,
y esto será tratado en la próxima lección.

Suerte o habilidad
Para ser un jugador exitoso de deportes a largo plazo requiere habilidad suficiente para encontrar
una ventaja sobre las probabilidades de la casa de apuestas. La suerte puede ser rentable en el
corto plazo, pero a menos que tengamos esa ventaja, la suerte se agotará; No se trata de si sino
cuando. Una vez que tenemos una historia de apuestas rentable, el siguiente paso es determinar si
ha sucedido por buena fortuna o capacidad de pronóstico genuina; O más específicamente cuál es
la probabilidad de que haya surgido por casualidad. Por supuesto hay los apostadores que todavía
creen que un ganador por definición es evidencia de habilidad. Estos apostadores serán uno o más
de los siguientes: ignorantes; en negación; arruinado. Por el contrario, quienes tienen incluso una
comprensión básica de la probabilidad sabrán que con tantas influencias al azar operando en una
competición deportiva, es simplemente imposible descartar la posibilidad de buena fortuna cuando
una apuesta solitaria gana o, por el contrario, mala suerte si debería perder. Para comenzar a
separar las influencias de la suerte y habilidad, necesitamos analizar una serie mucho más larga de
apuestas; Sólo cuánto tiempo formará gran parte del alcance de esta lección. A falta de aprender
cómo encontrar una ventaja, esta es quizás la lección más importante que hay que aprender en las
apuestas deportivas.

Considere invertir una moneda 20 veces. Las posibilidades de regresar x número de cabezas se rigen
por una discreta distribución de probabilidad conocida como la distribución binomial (véase más
adelante). Si sabemos que hay un 50% de posibilidades de voltear las cabezas y un 50% de
posibilidades de lanzar colas en cada tirada de la moneda es un ejercicio bastante simple para hacer
las matemáticas y encontrar las probabilidades de cada resultado posible. [Un paquete de software
como Excel ofrece cálculo fácil de probabilidades binomiales utilizando la función DISTR.INIM.]

Previsiblemente, ya que cabezas y colas son igualmente probables que ocurran en cada
lanzamiento, el número más probable de cabeza y cola después de 20 lanzamientos de monedas
será 10 y 10, respectivamente. Pero esto no significa que veremos 10 y 10 todo el tiempo. De hecho,
en este ejemplo, devolver exactamente 10 cabezas y 10 colas tiene sólo un 18% de probabilidad de
ocurrir. A veces podemos ver exactamente 9 cabezas y 11 colas (16% de probabilidad), o 12 cabezas
y 8 colas (12% de probabilidad), o muy ocasionalmente 5 cabezas y 15 colas (1% de probabilidad).
Sin embargo, lo que tal distribución probablemente demuestra es que para la mayoría de las
ocasiones el número de cabezas caerá dentro de una banda bastante estrecha concentrada
alrededor de la media. Por ejemplo, en casi tres cuartas partes de ocasiones, el número de cabezas
caerá dentro de dos tiros de un promedio de 10, es decir 8, 9, 10, 11 o 12. Esta distribución también
nos permite calcular la probabilidad Ciertos resultados están ocurriendo. Por ejemplo, a partir de
esta distribución de probabilidad, sabemos que la probabilidad de lanzar al menos 14 cabezas de
20 lanzamientos de monedas es de aproximadamente 6% (las probabilidades acumuladas de lanzar
14, 15, 16, 17, 18, 19 o 20 cabezas).

Mientras que los resultados deportivos no son eventos completamente arbitrarios como el
lanzamiento de monedas, que muestran un grado significativo de aleatoriedad inherente. Y al igual
que el lanzamiento de monedas, la frecuencia de las victorias y las pérdidas se distribuirá de manera
similar. Si las probabilidades son justas, un período prolongado de apuestas ciegas (no calificadas)
esperaría, en promedio, el equilibrio. Las posibilidades de romper exactamente iguales serían
bastante pequeñas (como es la probabilidad de desembarcar exactamente 10 cabezas en 20
lanzamientos de monedas), pero la probabilidad de estar en un rango estrecho de pequeña pérdida
o beneficio sobre el promedio de cero sería alta. Por otra parte, cuando las probabilidades son
injustas, esperamos que haya una alta probabilidad de perder una cantidad en el volumen de
negocios que refleja de cerca el overround bookmaker.

Entonces, ¿qué tiene todo esto que ver con la separación de la suerte de la habilidad? Bueno,
supongamos que de 20 lanzamientos de monedas aterrizamos 16 cabezas. De acuerdo con la teoría
binomial, debemos esperar ver 16 o más cabezas de 20 lanzamientos de monedas sólo 6 veces en
un 1.000, suponiendo que la moneda es imparcial. Si bien es posible que esto pudiera suceder por
casualidad, podríamos empezar a preguntarnos si la moneda quizás estaba sesgada. Supongamos
que lanzamos la moneda 20 veces más, y esta vez vemos 17 cabezas. Eso es un total de 33 cabezas
en 40 lanzamientos de monedas. La teoría de la probabilidad nos dice que la probabilidad de ver al
menos 33 cabezas es sólo 1 en 47.307. Ahora estaríamos bastante seguros de que algo estaba mal
con la moneda. Y si lo lanzamos 20 veces más y vimos otros 18 cabezas para un total de 51 en 60,
las probabilidades de que sean un mero 64.829.077 / 1. Es cierto que siempre habrá una
probabilidad finita (no nula) de que esto pudiera suceder por casualidad (recuerde que la gente
gana loterías nacionales en desventaja de millones a 1 por pura casualidad), pero la explicación más
probable es que la moneda está ponderada Favor de los jefes.

Podemos realizar exactamente el mismo análisis estadístico para los resultados de apuestas
deportivas. Siempre y cuando todas las apuestas que hicimos fueran para la expectativa de
ganancia fija como para el lanzamiento de monedas (donde es el 50% para las cabezas o colas)
podríamos realizar exactamente el mismo análisis binomial. Por ejemplo Supongamos que tuvimos
un gusto particular por 3/1 tiros (4.00 en formato decimal europeo), donde la probabilidad de un
triunfo es del 25%. Supongamos que colocamos 100 apuestas y teníamos 50 ganadores. La teoría
binomial nos permite calcular que la probabilidad de ver al menos este número de ganadores (es
decir, 50 o más) por pura casualidad es aproximadamente 1 en 15 millones. Estaríamos casi tan
seguros como posiblemente podríamos ser que otra cosa aparte del azar era dar cuenta de esto; La
explicación más obvia, por supuesto, sería la habilidad.

Los apostadores de los deportes, sin embargo, rara vez optan por apostar las mismas
probabilidades, y para aquellos que favorecen las desventajas asiáticas y las apuestas americanas,
los lazos de apuestas también se convierten en una posibilidad. Binomial entonces no es realmente
una opción para probar estadísticamente un historial de apuestas. Por el contrario, es más fácil
analizar los retornos reales de apuestas en lugar del número de victorias y pérdidas, y compararlos
con lo que de otro modo podríamos esperar, en promedio, lograr. La mejor prueba estadística de
este propósito es lo que se llama la prueba t. Mientras que las matemáticas que se encuentran
detrás de la prueba t son un poco diferentes al binomio, el punto importante a comprender es que
esencialmente realiza exactamente la misma tarea; Que es la identificación de la probabilidad de
que una serie de devoluciones de apuestas podría surgir por pura casualidad. Para lograr esto, la
prueba t compara esencialmente un promedio con otro, y mira para ver si hay una diferencia
significativa entre los dos. Para las historias de apuestas deportivas, esto significa comparar nuestro
beneficio promedio real por apuesta con un beneficio teórico por apuesta que se esperaría, en
promedio, que ocurriera si sólo el azar estuviera en el trabajo. El primero es sencillo de calcular: es
simplemente nuestro rendimiento decimal o el beneficio sobre el volumen de negocios.

Por ejemplo, un rendimiento del 10% (decimal 0.1) es equivalente a hacer una ganancia media de
0.1 unidades por cada unidad que participamos. Este último es esencialmente la expectativa de
ganancias basada en las probabilidades del corredor de apuestas. Recuerde de la lección de singles
y acumuladores que la expectativa de ganancia = (1 / decimal overround) - 1. Así que si el overround
típico para las cosas que estábamos apostando era 108% (1.08) entonces nuestra expectativa de
ganancia promedio sería -0.074. Nuestra t-test entonces compararía nuestro promedio de 0.1 a la
media esperada (eso es lo que nuestra casa de apuestas predijo que lograríamos) de -0.074 para
nuestra muestra de apuestas. Por supuesto, los apostadores rara vez apuestan con sólo un corredor
de apuestas, pero en su lugar utilizan Una serie de ellos con la idea de obtener el mejor precio
disponible para cada apuesta particular. Veremos esto con más detalle en la lección sobre
comparaciones de probabilidades. Por ahora basta con decir que para la mayoría de las apuestas,
al tomar el mejor precio disponible en un mercado de casas de apuestas, podemos reducir la
desventaja efectiva de overround o natural que enfrentamos virtualmente a cero. Es decir, siempre
que estemos diligentes en la búsqueda de los mejores precios de mercado, no deberíamos hacer
algo peor que romper bruscamente incluso a largo plazo. En consecuencia, nuestra expectativa de
ganancia promedio es ahora alrededor de 0,00 y es a esta cifra que compararíamos nuestro
rendimiento decimal real. En Tipster Bay, hemos proporcionado una calculadora de probabilidad
útil, basada en las matemáticas de la prueba t, que para La mayoría de las historias de apuestas
estimarán la probabilidad de que haya surgido por casualidad. Para aquellas historias en las que los
tamaños de apuestas no varían demasiado desde el nivel de apuestas, esta probabilidad es una
función del número de apuestas en la historia, el rendimiento de apuestas y las probabilidades de
apuestas promedio. Si su historial de apuestas no es para nivelar las apuestas, haga una nueva
basada en sus apuestas reales y las probabilidades y asuma que fue. Averigüe cuál es su rendimiento
a las apuestas de nivel - recuerde que su rendimiento de nivel de apuestas es probablemente el
indicador más fiable de su borde de apuesta - y luego conectar los números. Pruebe otras historias
de apuestas con diferentes probabilidades y diferentes números de apuestas.

Los registros más rentables (es decir, historias con más apuestas, no más tiempo, ya que el tiempo
en este contexto es irrelevante) son menos probables de haber surgido por casualidad, todas las
demás cosas (rendimiento y promedio de apuestas impares) Vio para nuestro experimento de
lanzamiento de monedas. Los registros rentables con un promedio más corto de apuestas son
menos probables de haber ocurrido por casualidad, de nuevo todas las demás cosas (rendimiento
y número de apuestas) que son iguales, simplemente porque hay menos aleatoriedad inherente en
el trabajo con las apuestas individuales de mayor expectativa de ganancia. Por ejemplo, un
rendimiento del 10% de 250 apuestas con probabilidades promedio de 3.00 tiene
aproximadamente un 14% de probabilidad de surgir por azar (suponiendo que el promedio
esperado que lo estamos comparando es el punto de equilibrio). Por el contrario, esa cifra es
inferior al 1% para un registro similar, pero con probabilidades promedio de 1,50. Por supuesto, los
registros más rentables (para las probabilidades de apuestas equivalentes y el tamaño de la historia)
serán menos probables de haber surgido por casualidad. Por lo general, para las pruebas
estadísticas en las ciencias, asumimos que si la probabilidad de que algo suceda por casualidad es
menos de 1 %, Comenzamos a atribuir cierto significado real A este resultado. Cualquier cosa más
y es simplemente demasiado grande para descartar la posibilidad como un factor que influye.
Cualquier cosa más pequeña y empezamos a tomar nota.

Por supuesto, esta elección del 1% es puramente arbitraria, no se basa en las pruebas estadísticas
en sí, sino en el punto de vista de la mayoría de la comunidad de matemáticas. Estimando la
probabilidad de que una historia de apuestas ha surgido por casualidad está muy bien y Bueno,
pero todavía no nos dice si se basa en la habilidad. Bueno, por desgracia, ninguna prueba estadística
puede hacer eso, ya que siempre hay esa probabilidad finita y cero que el azar ha sido un factor.
Cuando usamos cosas como la distribución binomial y la prueba t, siempre debemos tener en
cuenta lo que sus resultados nos dicen. Cuando hemos encontrado que una historia de apuestas en
particular tiene menos del 1% de probabilidad de haber surgido por casualidad, eso no es lo mismo
que decir que hay más del 99% de probabilidad de que haya surgido por habilidad. Dichas pruebas
estadísticas no pueden decir nada sobre lo que está haciendo que las ganancias de las apuestas se
acumulen, ya que no está diseñado para hacer comentarios sobre la causalidad. Corresponde al
usuario de tales técnicas hacer juicios racionales pero subjetivos sobre lo que podría suceder si los
efectos del azar son probablemente muy pequeños.

Naturalmente, la alternativa más obvia es la habilidad predictiva del apostador, pero un resultado
de la prueba t nunca puede decirnos esto por sí mismo. Una pregunta clave que nos propusimos
responder fue cuantas apuestas se necesitan para averiguar si tenemos una Verdadera ventaja
sobre la casa de apuestas, que se basa en la habilidad y no la suerte. Esta lección debería haber
proporcionado algunas ideas acerca de cómo hacerlo y cómo interpretar, y no malinterpretar,
cualquier análisis estadístico que podamos realizar con este fin. Aquellos de ustedes, que han
tenido una oportunidad de analizar su propia historia de apuestas, o de un tipster, podrían
sorprenderse de cuánto tiempo puede tomar antes de que podamos empezar a creer en cualquier
habilidad real. La tabla a continuación proporciona un resumen del número de apuestas que
deberíamos colocar para algunas combinaciones de probabilidades / rendimiento antes de que la
probabilidad de que la rentabilidad haya surgido por casualidad caiga por debajo del 1%. Para
algunos de los rendimientos más débiles, o historias con mayores probabilidades de apuestas, que
sin duda debe proporcionar algún alimento valioso para el pensamiento.

Average Betting Odds

Yield
1.5 2 3 5 10
1% 26,787 54,117 108,777 218,097 491,398
2% 6,627 13,528 27,328 54,929 123,930
5% 1,026 2,163 4,436 8,982 20,347
10% 241 539 1,134 2,325 5,301
20% 52 133 295 620 1,432
La próxima vez que alguien le diga que sus consejos son la mejor cosa desde el pan rebanado sabrá cómo
desafiarlo para demostrarlo.

Comparar las cuotas

Un servicio de comparación de probabilidades permite al apostador de forma rápida y fácil
comparar precios en una amplia gama de casas de apuestas sin tener que visitar cada corredor
individualmente hasta que esté listo para hacer su apuesta, ayudándole a encontrar el mejor precio
disponible. Un servicio de comparación de probabilidades es probablemente la herramienta más
importante que un apostador puede utilizar para maximizar las posibilidades de rentabilidad de sus
apuestas deportivas. Sin ella, usted está potencialmente perjudicando a usted con tanto como un
10% de desventaja adicional. Dado que es tan difícil sacar dinero de las casas de apuestas a largo
plazo, una desventaja adicional puede significar la diferencia entre ganancias y pérdidas, incluso
para un hábil predictor. Los apostantes regulares, y de hecho todo los tipsters, son muy conscientes
de los beneficios de usar comparaciones de probabilidades. Desde la perspectiva del apostador, a
veces puede haber una o dos explicaciones para tomar algo más corto que el mejor precio de
apuesta. Posiblemente uno podría elegir un precio inferior con un corredor de apuestas que tendrá
una participación mayor. A veces podríamos incluso ser forzados a tomarlo si nuestras apuestas ya
han sido limitadas con la casa de apuestas de precio superior. Estas dificultades prácticas
afortunadamente sólo surgen debido a los éxitos anteriores que hemos tenido y los beneficios que
hemos hecho. En general, sin embargo, es el mejor precio que queremos.

Las mejores comparaciones de probabilidades en línea hoy incluyen Oddsportal.com,

Oddschecker.com, Bestbetting.com y Betbrain.com. Oddsportal es sin duda la elección preferida de
un tipster. Tiene la cobertura más amplia de casas de apuestas, mercados de apuestas y deportes
(sólo falta golf actualmente), publica sus comparaciones de una manera fácil de usar, permite al
usuario ver inmediatamente qué valor teórico está obteniendo en su precio de apuesta , Y es gratis.
Los punteros pueden ver un resumen de probabilidades de un gran número de partidos en una
página, que muestra el precio de apuesta medio o el precio de apuesta superior, dependiendo de
las preferencias del usuario y el número de casas de apuestas utilizadas para calcular esas cifras.
Para un mercado de apuestas individuales, las líneas para cada corredor de apuestas van
acompañadas de una medida de su overround, denominado "Pago". Éste es efectivamente el
inverso del overround y describe el máximo retorno posible que un apostador podría lograr si
apostase a todos los resultados posibles en las apuestas correctas. Oddsportal luego pasa a calcular
el pago promedio, y el pago máximo si apuesta los mejores precios disponibles. La tabla a
continuación muestra un ejemplo, tomado de Francia vs Inglaterra en la Eurocopa 2012 el 11 de
junio de 2012.

Bookmakers 1 X 2 Payout
10Bet 2.41 3.1 3.14 94.70%
12BET 2.42 3 3.1 93.53%
188bet 2.38 3.15 3.2 95.23%
5Dimes 2.5 3.18 3.29 98.19%
Bet Victor 2.45 3.13 3.3 97.02%
bet365 2.5 3.1 3 94.70%
Betfred 2.5 3.2 3 95.62%
Bodog 2.4 3.1 3.2 95.08%
bwin 2.35 3.1 3.1 93.40%
Canbet 2.45 3.18 2.91 93.78%
Expekt 2.45 3.15 3.05 94.92%
Interwetten 2.5 3.2 2.85 94.04%
Ladbrokes 2.4 3.1 3.2 95.08%
Paddy Power 2.5 3.1 3.1 95.68%
Pinnacle Sports 2.49 3.19 3.29 98.13%
Sportingbet 2.4 3.1 3 93.23%
Stan James 2.5 3 3.25 96.06%
totesport 2.5 3.2 3 95.62%
Unibet 2.35 3.2 3.2 95.19%
WilliamHill 2.5 2.9 3.2 94.58%
Average 2.45 3.12 3.12 95.28%
Highest 2.5 3.2 3.3 98.47%

Tal característica es increíblemente útil, puesto que podemos ver inmediatamente cuánto valor
teórico estamos consiguiendo en nuestro precio apostando. Por supuesto, el valor del pago, como
el overround, sólo proporciona una medida hipotética de nuestro rendimiento esperado,
claramente no si la apuesta ganará o perderá, ni siquiera una expectativa de rentabilidad a largo
plazo. Eso sólo sería posible si pudiéramos estar seguros de que el mercado de apuestas era
totalmente eficiente, es decir, reflejaba adecuadamente las "verdaderas" posibilidades de cada
posible resultado estimado por toda la información disponible sobre esas posibilidades.
[Aprenderemos más sobre la eficiencia del mercado en la lección sobre el sesgo favorito-longshot.]

Para este ejemplo en particular, si apostamos 30,30 € en Bettvictor 3,30 para Inglaterra, £ 31,25 en
Betfred 3,20 para el sorteo y £ 40,00 en William Hill 2,50 para Francia - un total de £ 101,55 - vamos
a volver £ 100.00 no importa el resultado , Lo que equivale a una pérdida en la facturación del 1,53%
(es decir, 1,55 dividido por 101,55 o el 100% restando 98,47%). A veces el porcentaje de pago más
alto en realidad se eleva por encima del 100%, y donde esto sucede esto crea naturalmente la
oportunidad de apostar todos los resultados posibles y hacer un pequeño beneficio no importa el
resultado. Tal oportunidad se llama un arbitraje y veremos esto en profundidad en la próxima
lección.

Por supuesto, ser capaz de apostar por el mejor precio disponible requiere que el apostador tenga
un gran número de cuentas de apuestas en línea activas. Hay más de 100 casas de apuestas
deportivas en línea que operan hoy en día; Tener una cuenta con cada uno sería potencialmente
una pesadilla logística, por no hablar de una cara, aunque no es necesario tener cada cuenta
financiada todo el tiempo. Más prácticamente, tal vez 20 o 30 cuentas con las mejores y más
confiables marcas sería apropiado, elegir aquellos que tienen reputación de los mejores precios, el
mejor servicio al cliente, los métodos más baratos para la financiación y retiro de dinero y el trato
más favorable de los clientes ganadores.

Arbitraje
Para la gran mayoría de los mercados de apuestas, la mayoría de las casas de apuestas ofrecen
precios de apuestas similares, con una distribución bastante limitada de las probabilidades sobre
un promedio. Para el ejemplo Francia-Inglaterra de la última lección, el mejor precio para Francia
(2,50) fue sólo marginalmente mejor que el promedio (2,45). En consecuencia, no importa cómo
tratamos de respaldar los tres resultados posibles (asumiendo, por supuesto, que queríamos) que
nunca podría volver un beneficio al hacerlo. A veces, sin embargo, es posible y tal oportunidad se
conoce como un arbitraje o "arb" para abreviar, en algún momento llamado un "surebet".
Considere el siguiente ejemplo para el mercado 1X2 de Liverpool vs Chelsea.

Liverpool Draw Chelsea Overround Payout

Average Prices 2.61 3.3 2.66 106.21% 94.15%
Best Prices 3.2 3.4 2.8 96.38% 103.76%

El valor para el pago es simplemente el inverso del overround. Una cifra de pago del 103,76%
significa que, cualquiera que sea el resultado entre Liverpool y Chelsea, podemos garantizar un
beneficio del 3,76% sobre la facturación. Las apuestas para cada resultado se calculan simplemente
invirtiendo las probabilidades de apuestas y multiplicadas por alguna constante para asegurar que
estamos apostando los tamaños apropiados a nuestras preferencias de riesgo. En el ejemplo
siguiente, esto es £ 100.

Liverpool Draw Chelsea Total

1/odds 0.3125 0.2941 0.3571 0.9638
Stakes £31.25 £29.41 £35.71 £96.38

La mesa final muestra los retornos calculados para cada posible resultado: Liverpool gana, empate
y el Chelsea gana. Sea cual sea el resultado, haremos £ 3,62, lo que equivale al 3,76% de la
facturación total de £ 96,38.

Home Draw Away Total Profit over turnover

Liverpool wins £68.75 -£29.41 -£35.71 £3.62 3.76%
Draw -£31.25 £70.59 -£35.71 £3.62 3.76%
Chelsea wins -£31.25 -£29.41 £64.29 £3.62 3.76%

Debido a la gran cantidad de mercados de apuestas disponibles, numerosas oportunidades de

arbitraje existen en las casas de apuestas todos los días, y se pueden encontrar simplemente por
medio de una comparación de probabilidades. Por una tarifa algunos servicios de arbitraje también
encontrarán estos para usted. A menudo, uno los encuentra describiendo tales oportunidades
como libre de riesgo. Por supuesto, no hay tal cosa, ya que incluso las apuestas de arbitraje pueden,
y lo hacen, ir mal. En primer lugar, el apostador debe asegurarse de que puede obtener todas las
probabilidades necesarias para que funcione el arbitraje. En el ejemplo anterior, en el tiempo que
se tarda en hacer apuestas en Liverpool y Chelsea para empatar y Chelsea para ganar, el 3,20 para
el Liverpool puede haber caído por debajo del valor necesario para hacer este trabajo de arbitraje.
Dado que las apuestas normalmente se pueden colocar en segundos, esto normalmente no debería
presentar un problema, pero sucede ocasionalmente. Posiblemente más preocupante sería el
impacto de la limitación de estaca. ¿Qué sucede si el apostador tiene su £ 31.25 para Liverpool y su
£ 35.71 para el Chelsea aceptado sólo para encontrar que la casa de apuestas ofreciendo 3.40 para
el sorteo no aceptará una participación de £ 29.41? Por supuesto, eso es poco probable en estos
tamaños de apuesta (a menos que el bookmarker sospecha que de arbing, y la mayoría de las casas
de apuestas no les gusta este tipo de cosas en absoluto), pero para las estacas de 3 o 4 cifras
requerido para devolver algún tipo de beneficio significativo, Tales limitaciones se convierten en un
dolor de cabeza regular.

Otras cuestiones prácticas, además de las caídas de precios y aceptación de participación también
existen. Para algunos deportes, diferentes casas de apuestas pueden utilizar diferentes reglas con
respecto a la liquidación de apuestas para eventos que no se completan. Esto es particularmente
común en el tenis donde los retiros del jugador ocurren con frecuencia. Cuando esto sucede,
algunas casas de apuestas pagarán siempre que al menos una bola haya sido golpeada en el partido,
mientras que otras simplemente anularán apuestas, requiriendo que todo el partido se complete
para liquidar las apuestas. Todavía otros se resolverán las apuestas sólo si uno o de vez en cuando
dos juegos de tenis se han completado. Si el cazador de arbitraje ha puesto sus apuestas con las
casas de apuestas utilizando reglas diferentes, un retiro puede dejarlo con una apuesta perdida en
un jugador y una apuesta de vacío en el otro. Además, para aprovechar el mayor número posible
de oportunidades de arbitraje, se requerirá que el apostador tenga un gran número de cuentas de
apuestas, muchas de ellas con reputación menos establecida para el servicio al cliente y gestión de
cuentas de apuestas, y una cantidad considerable de fondos potencialmente residente con Estas
casas de apuestas en cualquier momento. Incluso los mejores arbitrajes ascienden a sólo un
pequeño porcentaje. Para ganar £ 50 de un 5% arb requiere £ 1.000 para ser entregado de una sola
vez.

Tal vez el mayor inconveniente con las apuestas de arbitraje, sin embargo, es el hecho de que la
mayoría de los corredores de apuestas, con la excepción de los setters de probabilidades más
dinámicos como Pinnacle Sports, no les gusta. Te atrapará y probablemente limitarán tus apuestas
o simplemente cerrarás tu cuenta. El problema es que, dado el precableado necesario para que el
arbitraje funcione correctamente, es bastante obvio cuando lo está haciendo. Para superar esta
dificultad podríamos redondear las apuestas para que parezcan menos obvias, por ejemplo en el
arbitraje Liverpool / Chelsea arriba, a £ 30, £ 30 y £ 35. Aún así se nos garantizará un pago, pero
esta vez sólo 1 libra si Liverpool gana, mientras que tanto como £ 7 si el partido se dibuja (y £ 3 si
Chelsea gana). Las casas de apuestas, sin embargo, tienen muy sofisticados medios de seguimiento
de todas sus actividades de apuestas con ellos y, a pesar de estos intentos de ser más discreto, no
hay garantía de que todavía no será visto.

Para reducir el riesgo de que las casas de apuestas retomen nuestra actividad de arbitraje, en vez
de eso, podemos devolver sólo uno de los posibles resultados de un libro subyacente, en lugar de
todos ellos. Por supuesto, esta vez no cubrir los otros resultados significará que no hay ganancias
garantizadas en una apuesta por apuesta. Sin embargo, si la pequeña ventaja se distribuye
proporcionalmente entre todos los resultados posibles, las probabilidades de apuestas para cada
uno de ellos deben, por sí solas, ofrecer valor teórico y expectativa de beneficio positivo. A largo
plazo, si las evaluaciones de las expectativas de resultados de los corredores de apuestas son en
general correctas, deberíamos obtener un beneficio. Este enfoque podría describirse como
apuestas de valor aritmético.

La ventaja sobre el arbitraje de las apuestas de valor aritmético es que no necesitamos ir a todas
las longitudes de calcular con precisión el tamaño de las apuestas. En su lugar, sólo podemos
apostar las apuestas que queremos; Cualquiera que sea el tamaño, las expectativas de ganancias
como un porcentaje seguirá siendo el mismo, y no se destacan tanto con las casas de apuestas.
Además, no necesitamos tener un número tan grande de cuentas de apuestas y fondos depositados
en ellos, sino limitándonos a nuestras marcas preferidas. Por desgracia, las casas de apuestas
también son muy buenos para detectar patrones de apuestas particulares. Si ven a un apostador
en repetidas ocasiones apuntando a los mejores precios, no pasará mucho tiempo antes de que la
mayoría de ellos le den una especie de limitación. Una manera de reducir ese riesgo sería lanzar
algunas apuestas "duff" ahora y De nuevo (por ejemplo, algunas apuestas de carreras seleccionadas
al azar), donde las probabilidades del corredor de apuestas que estamos apoyando son más cortos
que el mejor precio del mercado. Tal vez la mayor dificultad que enfrenta el valor aritmético vale,
que no tienen que preocuparse, es la ubicación exacta de las apuestas valor. Para el partido de
Liverpool contra el Chelsea, el valor de mercado total sigue siendo relativamente pequeño en
3.76%. No hay nada que diga que cada resultado posible - un triunfo en Liverpool, un empate o un
triunfo en el Chelsea - tendrá un valor exactamente del 3,76% dentro de las probabilidades. Sólo se
necesitaría un cambio relativamente menor en el valor de uno o más resultados para eliminar el
valor de los otros.

Supongamos que la probabilidad "verdadera" tanto de un triunfo en Liverpool como del sorteo fue
del 35% (cuotas justas de 2.86). Esto significaría que las probabilidades reales de apuestas para el
Chelsea, 2,80, no ofrecen ningún valor en absoluto. De hecho, con un precio justo de 3,33,
estaríamos frente a una expectativa de ganancia negativa de -0,16. A menos que las probabilidades
reales de apuestas reflejen de cerca las probabilidades "verdaderas" de cada resultado, es muy
probable que al menos uno de los resultados posibles carezca de valor para todos, excepto para el
mayor de los libros subyacentes. Afortunadamente, es bastante conocido que los favoritos en un
mercado de apuestas son más propensos a mantener el valor, mientras que los largos no lo son.
¿Por qué esto debería ser así será el foco de la próxima lección sobre el favorito Sesgo de largo
disparo.

Probabilidades Eficiencia y el favorito-Longshot Bias

Ha sido tradición entre los apostadores menos sofisticados creer que respaldar favoritos es un juego
de la taza y el valor real se puede encontrar con los largos. Parte de esto probablemente se deriva
del hecho de que muchas personas ven más beneficios, o la utilidad como diría un economista, con
el objetivo de mayores recompensas, y parte probablemente de la creencia de que todos los demás
están respaldando favoritos por lo que no puede haber ningún valor allí . Sí, es cierto decir que más
gente vuelve favoritos, y con más dinero; Eso es lo que cabría esperar. Si ese no fuera el caso,
entonces los favoritos no permanecerían favoritos por mucho tiempo. Pero la pregunta clave es si
hay más (o menos) apostadores respaldando favoritos con más (o menos) dinero que se predecirían
a partir de las "verdaderas" probabilidades de posibles resultados.

Por supuesto, no podemos saber cuáles son las "verdaderas" probabilidades de resultados
deportivos, pero podemos comparar retrospectivamente las probabilidades de apuestas reales con
las apuestas teóricas, lo que nos permite ver si esas apuestas eran exactas o inexactas o como un
economista Decir: eficiente o ineficiente. Echemos un vistazo a esto para el mercado de apuestas
de fútbol 1X2. La tabla a continuación muestra los rendimientos de las apuestas a nivel teórico a
los precios medios de mercado de los partidos de la liga europea de fútbol de la temporada 2005/06
a 2011/12.

Average Betting price Number of bets Return

Odds ≤ 1.5 6,235 97.74%
1.5 < odds ≤ 2 19,243 93.90%
2 < odds ≤ 2.5 22,164 94.21%
2.5 < odds ≤ 3.25 44,470 90.03%
3.25 < odds ≤ 5 45,153 87.50%
Odds > 5 12,753 79.55%
All odds 150,018 89.81%

Es obvio, obviamente, que las pérdidas que respaldan favoritos son significativamente más
pequeñas en comparación con las pérdidas que respaldan largas tomas. Parecería, entonces, que
el corredor de apuestas construye la mayor parte de su ventaja superpuesta en los precios más
largos, contrariamente a la intuición de la mayoría de los apostadores. Por qué; En primer lugar
porque el corredor de apuestas se enfrenta a una mayor (porcentaje) de responsabilidad si comete
un error en una larga; Y en segundo lugar porque los apostadores en el lugar principal demasiado
dinero en esos longshots.

Supongamos que la casa de apuestas ha estimado las probabilidades de que Phil Taylor venciera a
Michael Van Gerwen al 75%. En consecuencia, las probabilidades justas serían de 1,33 y 4,00 para
el Sr. Taylor y el Sr. Van Gerwen, respectivamente. ¿Qué pasa si la casa de apuestas se equivoca?
Supongamos que la verdadera probabilidad de que Taylor gane sea del 74% y la de Van Gerwen el
26%. Cualquiera que apoye a Taylor ahora enfrenta una desventaja de 1.33% (dado por 1 - 0.74 /
0.75), mientras que cualquier persona que apoya a Van Gerwen ha ganado una ventaja de 4.00%
(dado por 0.26 / 0.25). Por supuesto, la facturación que el corredor de apuestas ve para Taylor
seguirá siendo mucho mayor que la de Van Gerwen, pero en términos de porcentaje se enfrenta a
3 veces la responsabilidad potencial que habría enfrentado si el error hubiera sido Taylor y las
"verdaderas" probabilidades de ganar Había sido 76% y 24% en su lugar.
Cometer errores en largas tomas aumenta la responsabilidad porcentual del corredor de apuestas
mucho más de lo que hace para los favoritos. Es por eso que un corredor de apuestas buscará
acortar sus precios de larga duración en relación con lo que las probabilidades de resultados
"verdaderos" predecirían que deberían ser. Cuando el overround del bookmaker es factorizado
adentro, encontramos que hay generalmente menos de una desventaja del porcentaje hecha frente
por los favoritos del apoyo del punter, como se atestigua para las apuestas 1X2 del partido de
fútbol. En términos absolutos de ganancias y pérdidas, un error de porcentaje mayor en
proposiciones que toman menos dinero no es necesario un problema en sí mismo. El peligro viene
cuando alguien tiene alguna información privilegiada que el corredor de apuestas no es parte de.
Es por eso que las casas de apuestas se preocupan por el porcentaje de responsabilidad. Y, por
supuesto, información privilegiada en un largo puede hacer mucho más daño que en un favorito.
En el extremo, el error más grande que el corredor puede hacer con la esperanza de la ganancia de
Taylor es el 25%. Para Van Gerwen es del 75%.

El comportamiento de los apostadores también obliga a las casas de apuestas a acortar sus precios
en largas tomas. Ya sea que simplemente busquen riesgos o simplemente juzguen mal las
expectativas de ganancias de las propuestas de apuestas con menor probabilidad, la realidad es
que los apostadores de una población apuestan demasiado dinero que un análisis retrospectivo de
las probabilidades de apuestas y los resultados sugieren que deberían serlo. Al igual que con
cualquier mercado de apuestas, la acción más el corredor ve, más que tiene que acortar su precio.
Este sesgo de precios, donde los favoritos tienden a estar bajo la apuesta y las apuestas largas sobre
la apuesta se refiere comúnmente como el favorito-longshot sesgo. Los economistas lo describen
como un ejemplo de ineficiencia del mercado, porque las opiniones de los jugadores (los
apostadores), como se describe por el dinero que apuestan, no reflejan con exactitud las
probabilidades "verdaderas" de los resultados que están apostando.

Este tipo de odds ineficiencia existe bastante para cualquier deporte: fútbol, tenis, baloncesto,
dardos, billar y así sucesivamente. Probablemente el único deporte en el que no esté presente es
el béisbol de la Liga Mayor, y esto se debe esencialmente a que no hay mucha probabilidad de
disputarse para la mayoría de los partidos, sin un favorito abrumador y hasta el 75% de los equipos
que muestran una victoria La expectativa dentro del rango estrecho de 0.40 a 0.60 (o
probabilidades de 2.50 y 1.67). En conclusión, donde encontramos un mercado con un favorito
caliente la probabilidad es que sin ninguna información adicional para evaluar si un corredor de
apuestas ha cometido un error, se enfrentará a una mayor desventaja apostando a la larga.

Por supuesto, esto no quiere decir que usted puede ganar más apoyando favoritos. Por el contrario:
cuanto más cortas son las probabilidades, menor es el beneficio potencial. Si sólo respaldamos
proposiciones con probabilidades de 1.05, por ejemplo, la ganancia máxima sobre el volumen de
negocios que podríamos hacer es de 5%. Naturalmente, cuando las probabilidades son más largas,
hay más posibilidades de ganar una ventaja sobre el corredor de apuestas que ha cometido un
error, como vimos en el ejemplo de Taylor vs. Van Gerwen. Pero es precisamente este mayor
potencial de ganancias que las casas de apuestas se oponen, al acortar las probabilidades de largas
tomas y limitar sus pasivos si se equivocan.

Naturalmente, cuando buscamos una apuesta vamos a tratar de tomar las mejores cuotas
disponibles. Se podría razonablemente esperar que si los mejores precios generalmente reflejan
probabilidades "verdaderas", el sesgo desaparecería por completo. La siguiente tabla compara la
misma muestra de partidos de la liga de fútbol de Europa, pero esta vez a mejores precios.

Average Betting price Number of bets Return

Odds ≤ 1.5 4,962 101.25%
1.5 < odds ≤ 2 16,341 99.13%
2 < odds ≤ 2.5 20,552 100.25%
2.5 < odds ≤ 3.25 29,886 97.73%
3.25 < odds ≤ 5 60,796 95.84%
Odds > 5 17,481 95.70%
All odds 150,018 97.34%

Es evidente que incluso a los mejores precios, todavía existe un sesgo residual pero mucho más
débil. Así que incluso para los corredores de apuestas que ofrecen los mercados de apuestas más
eficientes - y son estas casas de apuestas que contribuyen casi todos los mejores precios para las
proposiciones de probabilidades más bajas - todavía necesitan protegerse contra el
comportamiento del apostador no sofisticado. De hecho, probablemente el único mercado que es
más o menos totalmente eficiente es el que usted encontrará en un intercambio de apuestas.
Betfair no necesita preocuparse alguna vez por equilibrar la acción para obtener ganancias sin
importar el resultado; Sólo permite a los apostadores luchar entre sí, de acuerdo a lo mucho que
están dispuestos a arriesgarse entre sí, skimming una comisión de jugadas rentables. No importa
cuán eficientemente un corredor de apuestas trata de manejar sus probabilidades, la naturaleza
misma de querer ofrecer un mercado con disponibilidad para todos los posibles resultados lo hace
vulnerable a Las diferentes (y algo poco sofisticadas) preferencias de utilidad de sus clientes.

Intercambios y operaciones de apuestas

Mientras que la apuesta tradicional se remonta a finales del siglo XVIII, los intercambios de apuestas
pertenecen al siglo XXI. El líder dominante en el mercado es Betfair, y es conocido por casi todos
con incluso un interés moderado en las apuestas deportivas. Hay una serie de diferencias
fundamentales entre los intercambios de apuestas y la mayoría de las casas de apuestas. Estos son:

En un intercambio usted está apostando contra otros apostadores, mientras que con un bookmaker
usted es, en teoría por lo menos, apostando contra el bookmaker sí mismo. (Veremos por qué esto
no es necesariamente el caso en la práctica para algunas casas de apuestas en la última lección
sobre cómo vivir y entender a su corredor de apuestas).

Mientras que las casas de apuestas ganan su ventaja a través del overround, los intercambios
toman una comisión de apuestas ganadoras (o operaciones rentables). En Betfair esto será de 2 a
5%.

Los precios de las apuestas (antes de tener en cuenta la comisión ganadora) son generalmente
mejores en los intercambios, y para los mercados fuertemente negociados será muy eficiente y se
aproximará mucho a las probabilidades justas. Por supuesto, no se olvide de la comisión.
En una casa de apuestas sólo puede devolver un precio. En otras palabras, sólo se puede apostar
por lo que hace disponible. En un intercambio de apuestas puedes hacer apuestas disponibles para
otros apostadores. Esto se llama puesta.

A pesar de las obvias ventajas de los precios para los intercambios, tienen algunas limitaciones. Los
intercambios tienden a ofrecer menos mercados que las casas de apuestas, para ayudar a mantener
las probabilidades tan competitivas y tan eficientes como sea posible. En particular, es mucho más
difícil hacer apuestas múltiples o de acumulador. Además, las probabilidades tienden a limitarse a
un rango de 1,01 hasta 1,000.

Quizás la ventaja más grande que el intercambio tiene sobre la casa de apuestas es permitir al
apostador la capacidad de apuestas. Vuelve a nuestro ejemplo en la primera lección sobre las
probabilidades de apuestas. Aquí, José y Daniel habían entrado en un acuerdo de apuestas sobre el
partido de fútbol entre Inglaterra y Brasil. Joseph estaba apoyando a Inglaterra para ganar en las
probabilidades de 3.00, mientras que Daniel estaba poniendo esa apuesta por José para tomar.
Esencialmente, un patrocinador está apostando a que algo suceda. Una capa está apostando por
algo que no suceda. En este caso, poniendo a Inglaterra en desventaja de 3.00, Daniel estaba en
efecto apostando a Inglaterra para no ganar a un precio de 1.50 (ya que si Inglaterra tiene 33.33%
de posibilidades de ganar, tienen 66.67% de posibilidades de no ganar). En este caso ser sólo una
propuesta de apuestas de dos vías sin empate en un cup tie, Inglaterra no ganar es lo mismo que
ganar en Brasil.

Al permitir que los intercambios como Betfair efectivamente permiten a los apostadores operar
como corredores de apuestas. De hecho, cuando los corredores de apuestas tradicionales del Reino
Unido vieron su cuota de mercado devorada por Betfair, argumentaron que, dado que la compañía
estaba permitiendo que los clientes se comportaran como casas de apuestas, deberían enfrentar
un régimen impositivo más duro sufrido por las propias casas de apuestas.

Ser capaz de espalda, así como poner un precio también abre un mundo totalmente nuevo de
comercio deportivo. Un comerciante busca retroceder un precio y luego dejarlo a un precio más
corto algún tiempo después, o por el contrario establecer un precio y, a continuación,
posteriormente, volver a un precio más largo. En ambos casos, el apostador se garantizará un
beneficio sin importar el resultado del mercado de apuestas. El comercio es mucho como el
arbitraje en las casas de apuestas. La principal diferencia es que mientras un arbitraje busca
asegurar un beneficio inmediato a tiempo, todas las apuestas necesarias se colocan (esperemos
que en cuestión de segundos unos de otros), un comerciante es Dispuestos a asumir algún riesgo
adicional al permitir que transcurra algún tiempo antes de que elija cerrar el comercio con
probabilidades más favorables.

Naturalmente, con este riesgo, los oficios pueden fallar. Por ejemplo, supongamos que decidimos
poner a Liverpool para vencer al Manchester United en 2.50, habiendo recibido una buena punta
de información privilegiada que Luis Suárez probablemente no comenzará el juego. Cuando esa
noticia se convierte en conocimiento común, Liverpool deriva a 2,70. A continuación, volver a ellos
para ganar y bloquear un beneficio, no importa el resultado, siempre que hemos calculado
correctamente nuestras apuestas para cada parte del comercio. Pero supongamos que nuestra
fuente de información estaba equivocada, Suárez estaba en la lista de salida para el juego, y de
hecho Wayne Rooney se meneó la cabeza de nuevo en el entrenamiento. Habiendo puesto
Liverpool en 2.50 ahora vemos como su precio se acorta a 2.30. Ahora nos enfrentamos a dos
opciones: o dejar que el conjunto de la posición por su cuenta y correr el riesgo de ganar o ganar el
Liverpool el comercio de una pérdida garantizada, aunque mucho menor que si Liverpool gana el
partido. En cuanto a las apuestas regulares, el comercio exitoso volverá a ser una cuestión de tener
acceso a una mejor información que la mayoría de los demás apostantes y los posibles
comerciantes.

Una forma muy popular de comercio es en juego o en vivo de comercio, donde los apostadores
están siguiendo el juego, ya que colocan su espalda y pone. Muchos de los mercados en juego ven
una dirección natural de movimiento en el precio. Por ejemplo, suponga que al comienzo de la
segunda mitad la puntuación entre Liverpool y Manchester United es de 0-0 . El precio para menos
de 1,5 goles podría ser 1,50. A medida que los minutos pasan sin otra meta, ese precio se acortará
gradualmente. Siempre que esté seguro de que no se marcará ningún gol durante un par de
minutos de juego, puede ser capaz de volver a 1,50 y luego ponerlo para 1,49 o 1,48. Por supuesto,
si Suárez o Rooney van a cobrar el terreno de juego que sería mejor estar listo para cerrar su
comercio en caso de que uno de ellos hace la puntuación y las probabilidades saltar a 2,25. Dado
que Betfair impone un retraso en los intercambios en vivo, siempre existe la posibilidad de que sea
demasiado tarde, y luego o bien tiene que sentarse con su apuesta original hasta que el precio se
ha reducido lo suficiente de nuevo o cerrar el comercio de una pérdida general si usted está No
confía en que no se anoten más goles. Cualquier persona que dijo que negociar era fácil, miente o
es un tonto.

La belleza de terminar oficios en un solo intercambio como Betfair es que no le cargarán la comisión
en su juego que gana, sino solamente en el beneficio total para el comercio. Supongamos, por
ejemplo, que usted retroceda Liverpool en 3.00 por £ 10 y luego despedir por £ 20 una vez que el
precio ha caído a 1.50. Si el Liverpool gana, obtiene un beneficio de 20 libras esterlinas, al tiempo
que renuncia a 10 libras esterlinas para el apostador que aceptó su situación al respaldar a
Liverpool. 1,50, para un beneficio neto total de £ 10. Por otro lado, si el Liverpool pierde, pierde su
apuesta de £ 10 de 3.00, pero gana un beneficio de 20 libras por parte del backer que aceptó su
apuesta a 1.50, de nuevo por un beneficio total de £ 10. La comisión que usted paga entonces es
entonces apenas el 5% (o lo que su tarifa de comisión es) de £ 10, no 5% de £ 20. Si usted termina
para arriba con una pérdida de un comercio que ha ido mal usted no pagaría comisión en todos. La
tarifa de comisión que usted pagará dependerá de cuánto volumen de ventas usted tiene en el
intercambio. Para Betfair, el tipo de comisión estándar es del 5%. Esto se puede reducir a sólo 2%
para los jugadores más pesados de Betfair. Sin embargo, muchos de estos apostadores
"profesionales" se enfrentarán a un cargo de prima adicional a sus ganancias.

Cuando se toman en cuenta estos factores, algunas de las casas de apuestas más eficientes con los
márgenes más bajos, como Pinnacle Sports, pueden ser más competitivas que Betfair, dado que su
superposición para mercados fuertemente jugados puede ser tan baja como 102%. Además,
aunque Betfair no restringirá nunca la cantidad que puede apostar, sólo podrá igualar lo que otros
jugadores de Betfair han puesto a disposición. A menudo esto será menor que los límites del
mercado ofrecidos por los corredores de apuestas, y para las casas de apuestas que toleran a los
jugadores ganadores, la ventaja que el modelo de apuestas de intercambio tenía sobre el corredor
de apuestas comienza a derretirse. Sin embargo, cualquier persona serio acerca de las apuestas
deportivas y el comercio, y en particular los que han sido limitados o prohibidos por muchos de los
corredores de apuestas tradicionales, debe esperar a utilizar los intercambios sobre una base
regular. Por qué algunas casas de apuestas deben prohibir a un cliente en absoluto se cubrirá en la
lección final.

Vivir con y comprender su Bookmaker

Nuestra Academia de Apuestas ha recorrido un largo camino para describir la teoría de apuestas
deportivas: ajuste de probabilidades, ineficiencia del mercado, apuestas de valor, análisis de
historias, suerte versus habilidad, sistemas de pronóstico, administración de dinero y más. En algún
momento, sin embargo, tenemos que tomar la zambullida y comenzar realmente a apostar. ¿Qué
tipo de cosas puede el apostador esperar tener que tratar en el mundo cotidiano de las apuestas
deportivas? Este es el foco de la lección final.

Primero debemos decidir con qué apuestas apostaremos. Una serie de consideraciones son
relevantes aquí. ¿Aceptan los apostadores de mi país? ¿Aceptan mi moneda? ¿Qué tipo de métodos
de depósito y retiro ponen a disposición y qué cobran por ellos? ¿Qué tipo de mercados de apuestas
ofrecen? ¿Tienen un servicio de atención al cliente fiable? ¿Tienen buena reputación? ¿Cuán
competitivas son sus probabilidades? ¿Son conocidos por limitar los ganadores? Por último, pero
no menos importante, sobre todo para el punter recién comenzando, es si ofrecen algún bono de
bienvenida?

Un bono de bienvenida por lo general viene en una de dos formas: una apuesta gratis o un bono de
porcentaje. La apuesta gratuita se ofrece a los nuevos clientes de una marca que depositan y
realizan su primera apuesta. El tamaño de la apuesta libre por lo general coincide con el de la
primera apuesta del cliente, hasta un valor máximo, por lo general alrededor de £ 25 a £ 50. La
apuesta se devuelve generalmente a la casa de apuestas cuando se juega la apuesta gratuita y el
apostador mantiene cualquier ganancia de ella. A veces se adjuntan otras cuerdas como las
probabilidades mínimas de que la apuesta gratuita puede ser colocada, asegurando así que hay una
justa oportunidad de que el corredor de apuestas no tendrá que regalar ningún dinero gratis. El
porcentaje de bonificación se calcula de acuerdo con el tamaño del primer depósito del cliente y
suele ser un 100%, hasta un máximo, normalmente no más de 200 libras esterlinas o equivalente
en moneda. El porcentaje de bonificación parece ser más generoso que la apuesta gratuita, pero
tenga cuidado con los términos y condiciones más estrictos que se aplican. Con el fin de liberar el
bono, el cliente normalmente tiene que entregar una suma de dinero mucho mayor que el tamaño
de la bonificación de su propio dinero de depósito.

Un apostador de mala suerte puede encontrar que tiene que hacer varios depósitos simplemente
para apostar a través de suficiente dinero con el fin de liberar el bono. Cualquiera que sea la oferta
de bienvenida está disponible, siempre asegúrese de leer la letra pequeña en los términos y
condiciones, y entender lo que es lo que tienes que hacer para ser recompensado. Si no lees los
términos y condiciones de la casa de apuestas, entonces no tienes ningún derecho a quejarse de
algo que pensaste que debería ser el caso resulta que no es el caso. Si se toma la molestia de leer
antes de registrarse y ver algo que no te gusta siempre puedes encontrar otro corredor de apuestas.

Cuando se trata de términos y condiciones hay uno que casi todas las casas de apuestas se utilizan,
y no hay nada que el apostador puede hacer al respecto. Esencialmente toma la forma siguiente:
los corredores se reservan el derecho de cerrar la cuenta del cliente sin el aviso o la explicación.
Para "cerrar", también puede leer "límite". Los apostadores lloran todo el tiempo acerca de las
casas de apuestas que han reducido sus apuestas. Están desperdiciando sus lágrimas. Una apuesta
es esencialmente un contrato entre dos partes que consienten. Si una parte decide por cualquier
razón que no quieren ser parte de ese contrato más, están perfectamente autorizados a hacerlo.
Puede parecer injusto, pero está dentro de la ley. Siempre que el corredor de apuestas haya
identificado esta posibilidad en voz alta y clara en sus términos y condiciones, cada parte sabe (o
debería saber si las lee) donde se encuentran.

Con la excepción del lavado de dinero o el intento de usar fraudulentamente varias cuentas con un
corredor de apuestas, sólo hay una razón importante por la cual un apostador debe ser limitado o
prohibido: si está ganando. De hecho eso no es siempre el caso, pero si no está ganando, es
probable que el corredor de apuestas ha identificado al apostador como alguien que será después
de algún tiempo, basado en sus patrones de apuestas. Las casas de apuestas utilizan sofisticados
software de seguimiento para ayudar a identificar los hábitos y preferencias de sus clientes. Los
arbitradores son despreciados por la mayoría de las casas de apuestas, y los cazadores de
probabilidades competitivas (que apuntan a los mejores precios de mercado) no están muy atrás.
Como se ha mencionado, si usted va a complacer en este tipo de apuestas, tendrá que usar un
disfraz bastante bueno para evitar ser atrapado. Además de colocar algunas apuestas aleatorias
adicionales para deshacerse del olor, no retire demasiado de cualquier ganancia de una sola vez.

Las casas de apuestas se atreven a señalar que no están operando una instalación bancaria y sufren
costos cada vez que un apostador deposita o retira (a menos que pasen el costo total a sus clientes).
También ven repetidos grandes depósitos y retiros como evidencia de actividad profesional, y las
restricciones de cuenta seguramente seguirán tarde o temprano. Naturalmente esto tendrá
implicaciones para cómo manejar su bankroll. Manteniendo mucho dinero atado con Bookmakers
no es claramente ideal, ya que no le pagan interés. Siempre que tenga una ventaja rentable, sin
embargo, sus ganancias más que compensar cualquier interés bancario que de otro modo podría
haber recibido. Uno podría preguntarse por qué un corredor de apuestas cuyo trabajo es equilibrar
la acción y tomar una porción de ella como beneficio debe realmente cuidar Sobre los apostadores
ganadores. Los apostadores ganadores, después de todo, son pagados por los apostadores
perdedores, ¿no? Las razones de esto son probablemente múltiples, complejas y difíciles de
desentrañar. Parte de ella se derivará de una actitud de la vieja escuela de "ellos contra nosotros".

La mayoría de las casas de apuestas tradicionalmente comenzaron como jugadores y dejarán que
su ego se interponga en el camino. Tal vez es más divertido ser parte de la acción que simplemente
sentarse en la valla y tomar una comisión. Parte de ello será una consecuencia de una decisión
empresarial de ofrecer precios líderes del mercado de forma regular en un intento de atraer nuevas
costumbres, o ganar una reputación de ofrecer posibilidades competitivas. A menudo, estos
mejores precios serán "líderes de pérdida", es decir, ofreciendo intencionalmente una ventaja para
el apostador, como los supermercados que venden alcohol barato por una pérdida en un intento
de atraer a más clientes a comprar sus alimentos también. Por supuesto, la mayoría de los
apostadores no se dará cuenta de que este comportamiento es intencional, pero los que lo hacen
y elijan tomar ventaja repetida de que será estratégicamente filtrado por el corredor de apuestas.

Si la responsabilidad se incrementa ofreciendo el valor de pérdida líder, tiene que ser manejada por
otros medios: las limitaciones y las prohibiciones son la opción obvia. Por último, parte de ella
podría ser simplemente a la preferencia por un gran número de pequeños clientes de estaca en
contraposición a un pequeño número de rodillos de alta. Es más fácil equilibrar la acción y, en
consecuencia, mucho menos riesgoso para el corredor de apuestas si toma muchas apuestas
pequeñas en un mercado en lugar de un pequeño puñado de grandes. Sin embargo, si puede
obtener beneficios más absolutos con este modelo de negocio, seguramente estará abierto al
debate. Si corta a sus ganadores, está restringiendo su volumen de negocios; Y menor volumen de
ventas por lo general significa menos ganancias. Desafortunadamente casi todas las casas de
apuestas, incluyendo todas las marcas del Reino Unido, Irlanda y Europa, en algún momento límite
de ganar clientes. ¿Cuánto tiempo se las arreglan para permanecer activos con ellos si está ganando
se reducirá a lo inteligente que eres en hacer cada uno cree que usted es simplemente estúpido y
afortunado. Sin embargo, un pequeño número de nuevos corredores de apuestas han optado por
romper el molde y adoptar un modelo de negocio diferente que funciona más como un intercambio
de apuestas o un fondo de cobertura financiero. El más conocido de estos es Pinnacle Sports.

Pinnacle Sports es famoso por los márgenes más ajustados (los más bajos overrounds), la mayor
proporción de los mejores precios (aunque tenga en cuenta no intencionalmente la pérdida líder),
algunos de los mayores límites de apuestas y lo más importante de todo Una completa aceptación
de los ganadores. De hecho, es política de marketing oficial de afirmar que nunca han prohibido a
un cliente para ganar demasiado dinero. Gestionan todo esto mediante la adopción de un sistema
de gestión de probabilidades mucho más dinámico (de hecho se ha dicho que sus probabilidades
de ajuste de los algoritmos son Tan complejos como los equivalentes de los motores de búsqueda
de Google), equilibrando el flujo de dinero de los clientes y sus propias responsabilidades para
asegurarse de que toman su porcentaje independientemente del resultado de los eventos que se
apuesten. Por supuesto, todas las casas de apuestas hacen esto hasta cierto punto, pero otras
decisiones de negocios como la insistencia de ofrecer pérdida de valor, o mantener ese valor mucho
después de que otras marcas se han acortado, hace más probable que la acción siga siendo
desequilibrada. Cuanto más vea un corredor de apuestas mover sus probabilidades de apuestas,
más probable es que cualquier comportamiento ganador que puede exhibir será tolerado. El
principal inconveniente para el apostador de tal sistema de gestión de las probabilidades es la
frecuencia con la que los precios cambian. Para los mercados menos populares, además, con
volúmenes mucho más pequeños de comercio, incluso un número relativamente modesto de
apuestas o un tamaño de apuesta modesto puede mover un precio de apuesta, a veces muy
significativamente. Por supuesto, las caídas de precios se producen para todas las grandes casas de
apuestas online, pero para Pinnacle Sports, son los más frecuentes precisamente porque han
optado por ofrecer los márgenes más ajustados, las mejores probabilidades y aceptar cualquier
apuesta hasta sus límites de mercado publicados. Puesto que no prohibirán a ganadores
simplemente no pueden dejar un precio "incorrecto" hacia fuera allí para la publicidad.
Naturalmente, esto hace que sea más difícil encontrar un precio de valor. Mejores precios no
necesariamente significan precios incorrectos que ofrecen al apostador una ventaja. Con Pinnacle
Sports aceptando más dinero de los apostadores ganadores, es posible que cuando llegue a hacer
una apuesta con ellos, el valor haya desaparecido, aunque por supuesto no sabrá que hasta mucho
después de la apuesta y muchos otros también Se ha resuelto, cuando llegas a analizar
retrospectivamente cómo has hecho. A pesar de esto, Pinnacle Sports es sin duda la casa de
apuestas líder de elección para el apostador serio o profesional. Entonces, ¿por qué Pinnacle Sports
no prohíbe a los ganadores? Es simplemente una cuestión de gestión del dinero No importa lo
bueno que Pinnacle Sports esté en establecer las líneas de apuestas, siempre habrá unos cuantos
que son mejores en eso. Las apuestas de los clientes ganadores marcados, en particular las primeras
operaciones en los precios de apertura, permiten a Pinnacle Sports identificar más fácilmente
dónde han cometido errores, lo que les permite mover las apuestas hacia los valores que
estimularán el equilibrio de la acción total cuando el mercado esté cerrado. Siempre y cuando
logren este objetivo, garantizando sus márgenes de ganancia, independientemente de los
resultados y sin embargo muchos apostadores están beneficiando a largo plazo, Pinnacle Sports no
son en realidad la financiación de sus clientes ganadores en absoluto, es la población mucho mayor
de los perdedores que son.

Como tal, Pinnacle Sports es realmente entonces sólo tomar una comisión, como el Betfair Betfair,
de la totalidad de los oficios colocados con ellos. Sus clientes no están realmente apostando contra
ellos en absoluto, pero uno contra el otro. La única diferencia significativa es la forma en que se
genera esa comisión. Betfair necesita ganadores para monetizar su modelo de negocio, que toma
una comisión del 2 al 5% de todos los beneficios. Pinnacle Sports necesita ganadores para identificar
la mejor estrategia de administración de dinero. Ambos están muy contentos de dejar que sigan
ganando porque saben que son los perdedores los que los financian. Hay una conclusión obvia que
sacar de este análisis. Si apostamos (o comerciamos) en marcas como Betfair y Pinnacle Sports,
para que tengamos éxito tendremos que ser mejores en la estimación de probabilidades de
resultados deportivos que nuestros compañeros apostadores. En la práctica, esto detectará errores
antes que la mayoría del resto.

La gran mayoría de los apostadores pierden a largo plazo. Son sus pérdidas las que apoyan las
ganancias de la proporción mucho menor de ganadores. Muchas pequeñas pérdidas esencialmente
pagan por mucho menos, grandes ganancias. Debemos ver a la población de apostadores
deportivos como un iceberg, con el 95% o más escondido debajo de la línea de beneficio, apoyando
sólo el 5% o menos que consiguen conseguir sus cabezas por encima de ella. Y sólo unos pocos de
ellos realmente pueden reclamar para hacer una vida decente de las apuestas deportivas. Cuando
hacemos una apuesta, en realidad estamos apostando contra las opiniones de otros apostadores,
no el corredor de apuestas, que si tiene éxito se sentará felizmente y tomará su corte de la acción.
La casa de apuestas simplemente facilita que la acción ocurra en primer lugar. Puesto que Joseph y
Daniel no pueden estar siempre en el mismo lugar al mismo tiempo, el corredor de apuestas, al
igual que el intercambio de apuestas, reúne prácticamente a la gente para tener una apuesta. Y si
no apostáramos más inteligente que la mayoría de los demás, al final no tendremos ningún
beneficio que demostrar por nuestros esfuerzos.