Rosas conservadas en cimai
con solucién nutritive
HF
aaa
Conservacion frigorifica
de flor cortada
L conservacion frigorifica es el
sistema mas utilizado para prolongar
la vida comercial de la mayoria de los
productos agricolas.
En el caso de la flor cortada, y debi-
doa su caricter extremadamente pere-
cedero, la utilizacién de una red de frio
efectiva es absolutamente necesario.
El frio consigue ralentizar los proce-
$05 vitales de las flores: respiracién,
procesos enzimaticos, etc., permitien-
do una mayor duracién de las reservas
almacenadas durante el cultivo 0, lo
que viene a ser lo mismo, alargando la
vida util total de las flores conserva-
das.
Se ha demostrado que los claveles
cortados almacenados en agua en cé-
mara frigorifica, disminuyen su_consu:
mo de aziicares reductores (Escriva,
1987).
Como puede verse en la fig. 1, el
WORTOFRUTICULTURA 11-1991
José Abril Requena. Perito Quimico
consumo de glicidos de los claveles-
conservados en cimara frigorifica du-
rante 8 dias es similar al que tiene lu-
gar en 2 dias cuando los claveles se
‘mantienen a temperatura ambiente.
Se puede observar que el mayor
consumo de aziicares se produce en
los primeros momentos de la conser-
vacién, hasta que el frio consigue reali-
zar su cometido,
De esta grifica puede también ex-
traerse otra consecuencia: ser necesa-
rio que el frio actiie sobre la flor lo
mas pronto posible para evitar que el
tramo de maxima pendiente se alargue
de forma innecesaria, reduciendo dris~
ticamente las reservas nutritivas de las
flores.
Por lo tanto, es indispensable plan-
tear un rapido preenfriamiento del ma-
terial vegetal antes de proceder a su
confeccién, y, a la vez, es conveniente
realizar esta confeccion a temperaturas
proximas a las de conservacién, ya que
debido a que la relacién peso/superfi-
cie de las flores es muy favorable a es-
ta tiltima, la velocidad de calentamien-
to de las flores durante su. permanen-
cia fuera de la cémara es muy alta,
CONDICIONES
DE LA CONSERVACION
FRIGORIFICA
Temperatura
La temperatura de almacenamiento
de las flores cortadas deberia ser lo
més proxima posible al punto de con-
gelacion de los tejidos, que segtin Whi-
teman (1957), para la mayoria de las
flores esta alrededor de ~0,5 °C.
1HF
Habitualmente, las cima-
ras se regulan a +2 °C, tem-
peratura que permite un
margen de error humano y
de los automatismos, antes
de que se produzcan daiios
por frio (Moncousin, 1976).
Dias en cémara
Ce) TTT
aportando los hidratos de
carbono que, aunque a baja
velocidad, siguen consu-
miendo.
Comparense los resulta-
dos representados en la fig.
2-con los de la fig. 1, que ya
habiamos comentado ante:
Humedad relativa
Para evitar la deshidrata-
cidn, la humedad relativa
9
12
15
riormente,
Como puede verse, el ni-
vel de azticares reductores
presentes en los pétalos de
debe regularse lo mas proxi
ma posible al 100% (Paulin,
1975), teniendo buen cuida-
do de evitar la presencia de agua fisica
sobre los tejidos, que aumentaria de
forma considerable el riesgo de ata-
ques de hongos, que ya es elevado a
humedades tan altas.
Vida Giles
Para reducir este riesgo, es indispen-
sable mantener la instalacién con unos
niveles de higiene muy exigentes, pro-
cediendo a su desinfeccidn a intervalos
cortos, y evitando el almacenamiento
de partidas que leguen infectadas de
campo,
Sera también indispensable realizar
los tratamientos necesarios durante el
cultivo, para asegurarse el control efec~
tivo de las infecciones por Botrytis ci-
nerea, hongo responsable de mas del
90% de las pudriciones durante la con-
servacion de la flor cortada,
Renovacion de aire
Las renovaciones de aire son impor-
tantes, sobre todo cuando se conser-
van especies climatéricas muy sensi-
bles a la presencia de pequeiias canti-
dades de etileno en la atmésfera de la
camara.
No es aconsejable cargar las céma-
ras en demasia, sobre todo con flores
cuya produccién de etileno sea elevada
(p. ej. Lilium), ni desde luego, la pre-
sencia en la cdmara de frutas u hortali-
zas que produzcan etileno, aunque sea
en muy pequefias cantidades.
En cualquier caso, es interesante co-
locar en las cémaras productos que ab-
sorban el etileno producido (perlita +
Permanganato potasico) o instalar
equipos que sean capaces de controlar
en continuo la concentracién de gases
2
jon agua: 8 dias
Vida il testigo en solucion: 16 das
nocivos para las flores (etileno, CO,,
etc,), si se pretenden reducir los riesgos
durante la conservacién,
METODOS
DE CONSERVACION
Para flor cortada se han desarrolla-
do tres métodos de conservacién frigo-
rifica: en agua (Paulin, 1975), en solu-
cién nutritiva (Escrivé, 1987) y en se-
0 (Nichols, 1971).
Los mis utilizados son los dos pri-
meros, en los que, durante el almace-
namiento frigorifico, las flores perma-
necen con la base de sus tallos sumer-
ida en agua o en solucién nutritiva,
Con estos sistemas se alcanza una
buena velocidad de enfriamiento de las
flores, y un buen mantenimiento de la
temperatura de régimen, aunque difie-
en entre ellos de forma considerable
en cuanto a la calidad de la conserva-
cién,
Como es fiicil suponer, se obtienen
mejores resultados cuando las flores se
conservan en solucién nutritiva, ya que
durante el almacenamiento se les esti
erinn
Gonservacion frigorificade =
CRG ETC o |
Vida itil ala salida
de cémara en solucién|
(ais)
7 10
9 n
12 8
clavel después de 15 dias de
conservacion en camara fri-
gorifica, con solucién nutri
tiva, es superior al encontrado en los
claveles conservados en frio y en agua
al segundo dia de almacenamiento.
Con el tercer sistema (conservacion
en seco) se obtienen resultados inter
medios.
En este caso, el consumo de hidra-
tos de carbono se reduce por dos vias:
el descenso de la temperatura y el
«stress» hidrico provocado al mantener
la flor en seco,
Hay que tener mucho cuidado en
que esta deshidratacion no legue a ni-
veles peligrosos, por lo que es necesa
rio asegurarse de que las flores perma-
necen en una atmésfera con un 100%
de humedad relativa.
Para ello el sistema mas sencillo ey
recubrir las flores con un film de polie-
tileno (impermeable al vapor de agua),
después de haber procedido a su
preentriamiento.
Para prevenir los depdsitos de agua
isica que se producirian en este caso,
es conveniente disponer un material
absorbente (p: ¢j. papel grueso) entre
el film de polietileno y las flores, evi-
tando asi los riesgos de pudricidn con-
siguientes.
VIDA UTIL DESPUES
DE LA CONSERVACION
Cuando se aborda la conservacién
frigorifica de flores cortadas hay que
tener en cuenta que el proceso no ter
mina en el momento de la salida de
mara del material vegetal.
Es necesario asegurarse de que la vi
HORTOFRUTICULTURA 11-1991HF
da util de las flores en el
momento de terminar la
conservacién, no se ha visto
dafiada por ésta.
24
Normaimente, a las tem-
peraturas y humedades rela-
tivas recomendadas no se
producen daiios por frio en
la conservacion de flor cor-
tada, aunque ésta se prolon-
gue mas allé de los limites “+
de tiempo razonables.
2
20
ig de gucosaTTO§ ms
La tinica diferencia entre |”
una conservacion bien he-
cha y otra incorrecta es la
capacidad de la flor de man-
tenerse mis o menos tiem-
po viva a la salida de la ca-
5 __ Emtrigo conservacién
128 4 8 Oe eee
A temperatura ambiente
las precauciones al envasar
las flores y siendo impres-
cindible, al concluir la con-
servacién, colocar estas flo-
res en soluci6n nutritiva.
Los resultados obtenidos
para la conservacién en se-
co de clavel pueden verse
en el Cuadro IT. Desde Iue-
20 no son tan buenos como
los obtenidos cuando se
conserva en solucién nutri-
tiva, pero son mejores que
los conseguidos con una
conservacién frigorifica en
agua.
Sin embargo, la conser-
vacién en seco tiene una
ventaja clara: la facilidad de
10 11 al
mara, Y ésto es dificil de
distinguir a simple vista en
el momento de terminar la conserva-
cién para el que no conozea en qué
condiciones se ha realizado ésta.
Fig. 1.
En el Cuadro I se exponen las vidas
medias, a la salida de la camara, de
claveles cortados conservados en frigo-
rifico a2 °C, en agua y en solucién nu-
tritiva, durante distintos periodos de
tiempo.
La vida media de los testigos con-
servados a temperatura ambiente fue
de 8 dias cuando se conservaron en
agua y de 16 dias para los conservados
en solucién nutritiva,
Como puede verse, después de 15
dias de conservacién frigorifica, en so-
lucién nutritiva, la vida media a la sal
da de la cdmara es superior a la del
Evolucion del contenido de glicidos en claveles cortados.
clavel recién cortado y puesto en agua
(10 dias frente a 8 dias).
Esta es la demostracion del buen
funcionamiento del sistema, que no tie-
ne comparacion con Ia conservacién
frigorifica en agua, en la que la vida
itil de los claveles se ve muy mermada
después de conservaciones de solo una
semana (5 dias de vida util).
La conservacién frigorifica en agua
no consigue ni la comparacién con la
conservacion a temperatura ambiente
con solucién nutritiva.
En la conservacién en seco, la vida
litil a la salida de cémara es algo infe-
ior a la conseguida con la conserva-
cidn en solucién nutritiva, dependien-
do mucho de que se hayan extremado-
26
gm
Fz
e
2
1 2 3 4 6 6 7 8 9 1 1 12 19 14 15 des
Fig. 2. Evolucién del contenido de glicidos en claveles cortados conservados en frigo
solucién nutritiva,
HORTOFRUTICULTURA 11-1991
apilar los embalajes y con-
seguir asi una mejor utiliza-
cidn del volumen de camara disponi
ble.
Como resumen, diremos que para
conservaciones muy cortas, es suficien-
te colocar las flores en la cémara en
agua, pero en el momento que sea ne~
cesario alargar esta conservacion, se
impone el utilizar soluciones nutriti-
vas, ya sea durante la permanencia en
frigo, 0 a la salida de cémara después
de una conservacién en seco.
Elegiremos uno de estos dos iilti-
mos sistemas dependiendo de la capa-
cidad de la camara y de las disponibili-
dades de mano de obra para la sobre-
manipulacion que supone la conserva-
cin en seco.
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