Cristianismo y biopolítica
LA SOCIEDAD CRISTIANA
¿Un problema?
2017
La sociedad cristiana
2017
para trabajar, llegando algunos a la vejez sin saber leer o escribir, por lo tanto, es totalmente
comprensible que esperen una mejoría en las generaciones futuras.
Pero la expectativa y su definición de felicidad llegó a tal punto que se introdujo en nuestra
sociedad de modo que la enfrascó en esa visión de vida y ese es un ritual más de los
muchos que llevamos marcados desde nuestro nacimiento.
Estos ejemplos con la finalidad de representar a grandes rasgos por que se considera una
sociedad ritualista. Es verdad y está bien desde mi punto de vista que se espere algo mejor
para nosotros, pero el manual de vida es tan definido que cuando uno quiere salir de la
marcha o tomar otros caminos todo se vuelve en tu contra en forma de críticas y
desaprobaciones por todo. Para quienes sigan este tipo de manual de vida, está perfecto
para mi mientras se sientan llenos, pero llega a otro extremo erróneo cuando se vuelven
parte de la problemática de cerrar las puertas del cambio.
Estamos en tiempos en que los avances tecnológicos nos muestran nuevas realidades a
diario, nuevas formas de vida, incluso vidas que hace mucho parecían sin sentido, ahora
tienen sentido. Pero seguimos tan acostumbrados a nuestro plan de vida que ya ni por si
acaso intentamos encontrar otro. Esto para mí se ha vuelto un problema de gran escala,
mientras países desarrollados llaman a los cambios y los avances, al experimentar y al
descubrimiento, en américa se sigue teniendo la fe en lo seguro como base de todo, se tiene
un pensamiento tal como algunas de estas frases: “si funciona ¿para que lo voy a mover?”
por mencionar alguno. Esto lleva de la mano la falta de importancia que se le da a la
investigación y el estancamiento de producciones en diversos países.
Justamente por lo anterior le veo un problema a que sigamos siendo una sociedad cristiana,
dejando de lado las religiones, se deja ver una sociedad estancada cada vez más en sus
principios, que, aunque no son malintencionados no nos dejan avanzar a un futuro más
abierto a nuevas vidas, a descubrimientos que no lleven 100 años o un mejoramiento del
estilo de vida.
Para ver esta problemática también hay que revisar un punto de vista “ateo”. Como lo llego
a entender, aunque se autodenominan ateos estos individuos son muy religiosos por la
misma razón que los otros, llevan un ritual a diario a cualquier imagen o poder, ya sea sus
hobbies, sus trabajos, sus estudios, sus estrellas favoritas o lo que sea. Forman su día a día
bajo el lema de que tienen su propio y distintivo modo de vivir su día, estén equivocados o
no. En algún momento de la historia cada país o región peleo por su libertad y llegamos a
un punto en el que la mayoría puede decir que la alcanzo, ya sea que sigan o no en
discusiones. Todo esto nos da el derecho o incluso el deber de progresar para seguir
aumentando el nivel de libertad de cada uno, ya sea que queramos seguir distintas filosofías
o religiones, una sola, o incluso formar una nueva a partir de nuestra experiencia. Por esta
parte apoyo los que se llaman ateos porque pienso que son los más capaces que crear
cambio no solo para su vida sino también para otros. Por otra parte, hay algunos que
implemente se llaman ateos por el simple hecho de no creer en Dios y siguen enclaustrados
en la misma sociedad que todos los demás sin hacer mucho más.
2017
Claro que generalizar todo esto también es erróneo, todos pueden ser un cambio cuando
quieran. Después de ver los puntos anteriores quiero llegar a mi problema inicial:
¿Es acaso un problema que vivamos en una sociedad profundamente cristiana?
No debería serlo, se ha visto un cambio desde años anteriores en temas de política o trabajo,
Pero seguimos enfrascados en una sociedad que le da prioridad a cosas pasajeras, a la
seriedad en la forma de hacer un trabajo más que el resultado en sí y en que se tienen todas
las actividades con un manual implícito para poder llevarlas a cabo.
A mi forma de verlo eso nos llevara a una sociedad que limita todo y todos son sumisos
desde los grados más pequeños, más que avanzar estaremos retrocediendo a épocas oscuras
para el progreso cultural.
Por otra parte, se puede dar que este tipo de sociedad vaya avanzando de a poco a un futuro
mejor, que en vez de “sociedad cristiana” se llegue a reconocer como una sociedad
diferente y probablemente mejor. Todo esto viendo las formalidades a las que se dedica la
sociedad cristiana, tales como un trabajo estable, una familia, estabilidad al fin y al cabo.
Desde ese punto de vista se puede ver una mejoría progresiva que finalmente cambiará lo
que conocemos como sociedad, habrá un punto histórico que nos hará cambiar ya sea para
bien o mal.
Pensándolo de esta forma puedo llegar a la conclusión de que no puedo considerar una
sociedad cristiana como un problema, pero tampoco dejar de pensar que lo podría llegar a
ser, al menos para una alguien que busca la eficiencia de las cosas, pienso que debería
formar un cambio por mí mismo y no culpar a la sociedad por tener sus rituales.
Regresando a mi pregunta inicial: No, no es un problema. Sera un problema si te molesta
seguir los rituales y seguir el rumbo que esta sociedad predice y te inculca, pero hay que
tener presente que no solo son rituales de trabajo o estudio, todo el día uno cumple sus
rituales personales, así que llega otra problemática:
Si la sociedad cristiana es perpetua debido a que todos llevamos una forma de vida con
rituales y costumbres ¿hay otra forma de llevar a cabo la vida?
Para responder esto pensare en la forma de vivir de un país como chile. Si vives en chile y
quieres salir de su camino predeterminado primero debes desalinearte con los rituales de tus
conciudadanos, empezar a llevar actividades nuevas y sin repetirse cada jornada, esto al fin
y al cabo parece imposible ya que hasta el momento no tengo punto de referencia de otras
sociedades para establecer un contraste. Por lo tanto, concluyo que no se puede vivir fuera
de una sociedad cristiana porque la llevamos impregnada, instalada en nuestro ser para
llevarla a cabo ya sea que queramos salir o no.
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