Distribuir por todo el organismo los alimentos y hormonas, así como recoger los productos de
desecho del metabolismo celular y llevarlos hasta los órganos que intervienen en su eliminación.
Distribuir el oxígeno por todo el organismo, mediante la circulación de la sangre rica en oxígeno,
desde los pulmones hasta los espacios intercelulares y conducir el anhídrido carbónico, resultante
del metabolismo celular, desde los espacios intercelulares hasta los pulmones mediante la
circulación de la sangre pobre en oxígeno.
En el cuerpo humano, el transporte se realiza mediante el aparato circulatorio sanguíneo, por el que
circula la sangre, y el sistema linfático, por el que circula la linfa.
Las arterías son los vasos que conducen la sangre desde el corazón hasta los distintos órganos.
Las venas conducen la sangre de vuelta al corazón desde los distintos órganos.
Los capilares son pequeños vasos a través de los cuales se filtran el plasma sanguíneo y los nutrientes
hacia las células, y los productos de desecho de los tejidos hacia la sangre.
Tomando como referencia el corazón, la circulación sanguínea se puede dividir en dos circuitos:
Así pues, por la parte derecha del corazón circula la sangre desoxigenada, también llamada sangre venosa, y
por la izquierda, lo hace la sangre oxigenada, que recibe el nombre de arterial. En estado de reposo, la
sangre realiza la totalidad del recorrido en un minuto y, en situación de extraordinaria actividad, puede
hacerlo hasta seis veces por minuto.
Es conveniente destacar que las arterias parten siempre de los ventrículos, mientras que las venas
siempre entran en las aurículas independientemente de que lleven sangre arterial o venosa. Así, la
arteria pulmonar, que sale del ventrículo derecho, contiene sangre venosa, mientras que las venas
pulmonares, que llevan la sangre de los pulmones a la aurícula izquierda, contienen sangre arterial.
EL CORAZÓN MORFOLOGÍA Y ESTRUCTURA
Desde su invento a principios del siglo XX, el ECG ha sido el útil más
importante del cardiólogo. Resulta imprescindible en el diagnóstico de
las arritmias cardíacas, y puede dar información sobre la presencia de
enfermedad coronaria antigua o reciente, y de otros problemas del
corazón.
Las ARTERIAS son los vasos sanguíneos por los que circula la sangre
proveniente del corazón hacia los distintos órganos.
Las arterias de gran calibre que salen del corazón se ramifican dando
arterias de mediano y de pequeño calibre, que se vuelven a ramificar en
pequeñas arterias o arteriolas. Estas, al ramificarse, dan origen a los
vasos capilares.
Las paredes finas del endotelio capilar permiten la salida del oxígeno y
sustancias nutritivas desde el capilar hacia los tejidos y el paso a su
interior del dióxido de carbono y de los productos de desecho
procedentes del metabolismo celular.
Las VENAS son los vasos sanguíneos por los que circula la sangre que
se dirige al corazón desde los distintos órganos. Su estructura es similar
a la de las arterias, pero con la túnica media más delgada, mientras que
la adventicia es más gruesa, lo que las hace menos elásticas. Para evitar
el retroceso de la sangre, las venas poseen, a lo largo de todo su
trayecto, válvulas que evitan el retorno y ayudan a dirigir la sangre
hacia el corazón.
LA PRESIÓN ARTERIAL
Las paredes arteriales están sometidas a una presión que ejerce la
sangre en ellas contenida. Debido al bombeo de sangre procedente del
corazón, las paredes arteriales soportan una presión máxima que
coincide con la sístole ventricular, que es del orden de 140 mm de Hg, y
una presión mínima de unos 70 mm de Hg, coincidente con la diástole
del corazón (persona adulta sana).
HIPERTENSIÓN ARTERIAL
Las consecuencias
No hay síntomas
Tratamiento
EL SISTEMA LINFÁTICO
Recoger el plasma
intersticial extravasado de
los capilares sanguíneos y
devolverlo a la circulación
sanguínea.
CIRCULACIÓN LINFÁTICA