Curso: Lectura 1° a 3° Básico para educar en la diversidad

Titulo: Lección 1: Lenguaje Oral y Lectura Comprensiva

Unidad: Nº 2

Lenguaje Oral y Lectura Comprensiva

Revise el siguiente video:

Hora del cuento

En el video observamos a una profesora contando un cuento. Se trata de la estrategia

“La Hora del Cuento”.

Esta actividad nos demuestra que el lenguaje es fundamental, los niños están usando el
lenguaje para comprenderlo mejor, no sólo para socializar, sino también para aprender.
Como Vigotsky decía, las interacciones sociales son una de las maneras a través de los
cuales los alumnos aprenden a usar el lenguaje y al mismo tiempo aprenden sobre el
lenguaje.

Junto con propiciar instancias de socialización y de uso del lenguaje, el profesor o

profesora tiene que enseñar y desarrollar el lenguaje oral de manera explícita y directa
todos los días. Sólo así los niños aprenderán los aspectos más formales del lenguaje y
aplicarán sus principios en el aprendizaje de la lectura y la escritura. La relación del
desarrollo oral y la lectura comprensiva es significativa, así que para potenciar una,
trabajamos la otra.

La lectura comprensiva es uno de los principales objetivos de todo sistema educativo, y

en nuestro país queremos que todos los estudiantes accedan a la lectura, lean de
manera comprensiva, disfruten y valoren mediante la interacción con textos escritos de
diversa índole, género, temática y formato. Queremos además, que sean capaces de
emitir opiniones sobre lo que leen, que puedan utilizar la información que leen para

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Prohibida su reproduc ón
aprender más, y que vivencien la lectura como un hábito de vida. En las Orientaciones
para implementar el programa de lenguaje 2012 leemos que “Los alumnos deben
comprender que la lectura es una fuente de información a la que siempre hay que
recurrir” (Programa de Estudio de Lenguaje y Comunicación, Marzo, 2012, p. 8). Esto
cobra relevancia si pensamos en la importancia que un buen dominio lector tiene sobre
el aprendizaje en general, y cómo una lectura comprensiva, reflexiva y fluida favorece el
aprendizaje.

Dentro de los Objetivos de Aprendizaje estipulados para la lectura en primer año básico
se establece que los alumnos deben ser capaces de reconocer que las palabras son
unidades de significado separadas por espacio en el texto escrito. ¿Cómo abordará este
objetivo usted? ¿Cómo podrá saber si cada alumno ha alcanzado este objetivo?
Evidentemente, el punto de partida será poder determinar si los alumnos conocen y
distinguen las unidades básicas: palabra, frase, oración. ¿Qué actividades podría realizar
para observar esta habilidad en sus alumnos? A continuación le sugerimos algunos
ejemplos:

1. Utilizando un libro de cuentos, el profesor puede pedir a los alumnos que

identifiquen el título en la portada y que cuenten el número de palabras en el título.
La actividad se puede repetir a medida que avanzan en la lectura del cuento
(contar palabras por oración, luego oraciones por párrafo, etc.). El profesor puede
aprovechar de repasar conceptos tales como portada, título, autor, ilustrador,
contraportada, direccionalidad en la lectura (de izquierda a derecha), etc.

2. Utilizando tarjetas con palabras, el profesor puede pedir a los alumnos que
cuenten las letras dentro de una palabra, aislando sonidos iniciales y finales
(“¿Cuál es el sonido inicial de esta palabra?” “¿Cuál es el sonido final?”). Del
mismo modo, esta actividad puede servir para repasar conceptos fonológicos
tales como la rima, pidiendo a los alumnos que identifiquen sonidos iniciales o
finales similares en dos o más palabras, o formando categorías de palabras según
sonido inicial o final.

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 Leer es comprender textos, extraer significado a partir de un conjunto de signos
escritos. Es un proceso complejo en el cual intervienen elementos de percepción y de
cognición.
Es decir, leer tiene que ver con poder procesar el texto percibido a través de nuestros
sentidos (principalmente la vista) usando nuestras habilidades de pensamiento
(otorgando significado a las palabras, almacenándolas en nuestra memoria,
asociándolas a otras palabras y/o conceptos). Para poder asignar significado a los
signos primero debemos identificarlos, es decir decodificar y luego comprender lo que
significan. El reconocimiento de las palabras tiene que ver con cómo percibimos la
correspondencia entre los símbolos escritos y el lenguaje hablado. Comprender tiene
que ver con dar sentido a las palabras, a las oraciones y a múltiples textos.

Todos sabemos la importancia que tiene la lectura como objetivo educacional. La

lectura abre las puertas al aprendizaje y al progreso escolar. De ahí lo necesario que es
formarse bien en lo que respecta a la enseñanza de la lectura para guiar
adecuadamente a nuestros alumnos en este proceso.

El aprendizaje inicial de la lectura está íntimamente relacionado con el desarrollo del

lenguaje oral. El primer acercamiento al aprendizaje de la lectura se da en contextos
no formales tiene que ver con el aprendizaje progresivo del lenguaje, especialmente
la oralidad. Esto se da en procesos de interacción con otros, por lo general en la
familia. El cerebro humano está preparado para adquirir, producir y procesar el
lenguaje, pero requiere de la interacción para que cada persona vaya
incorporando palabras, expresiones, convenciones, etc., en su repertorio y
enriqueciendo su lenguaje oral. Las investigaciones han mostrado claramente que los
niños que ingresan al colegio con un gran repertorio de palabras aprendidas por la
vía oral tienen mayor facilidad para aprender a leer de manera exitosa. Sin
embargo, también se ha demostrado que una buena enseñanza de la lectura en los

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 primeros años de escolaridad puede revertir la carencia lingüística de niños
provenientes de hogares en los que el lenguaje oral es muy precario.

Algunas formas de potenciar el lenguaje oral en la sala de clases son:

 Pedir a los niños que hablen o cuenten historias al resto de sus compañeros
(exposiciones orales).

 Motivar a los niños a usar el lenguaje oral para expresarse al mismo tiempo
que se familiarizan con la palabra impresa y los libros.

 Fomentar la conversación sobre libros: leer cuentos a los niños y luego generar
conversaciones acerca de los mismo en torno a preguntas abiertas que
estimulen a los niños a hacer predicciones, inferir, asociar, evaluar, etc.

 Desarrollar la lectura compartida en la que, usando libros gigantes, se inicia a
los niños en la lectura.

 Pedir a los niños que dicten sus historias al profesor, quien las escribe en el
pizarrón o en un papelógrafo para leerla después en voz alta. Los niños
después pueden ir paulatinamente aprendiendo a leerla en voz alta.

Puede encontrar algunos de estos y otros ejemplos en los siguientes enlaces:

 http://www.escueladechile.cl/contenido/9/1/1/
 http://www.escueladechile.cl/contenido/9/20/2/
 http://www.escueladechile.cl/contenido/9/21/2/
 http://www.escueladechile.cl/contenido/9/1/6/
 http://www.escueladechile.cl/contenido/9/23/6/

Recuerde que en estas actividades, el objetivo central es desarrollar la comprensión.

Piense siempre en formas de hacer avanzar a los alumnos en la comprensión de ideas en
un texto, ya sea mediante la conversación sobre libros y por sobre todo, usando
preguntas que apunten a afinar la comprensión: identificando detalles, comparando,
analizando, y resumiendo.

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