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7-3-2018

La facultad propia del


hombre como camino al
conocimiento de Dios.
Mi camino personal de encuentro con Dios

Jorge Ulises Zaragoza Melendez


SEMINARIO DIOCESANO DE TEPIC
Zaragoza Melendez Jorge Ulises
Seminario Diocesano de Tepic
J.uliseszaragoza@gmail.com

LA FACULTAD PROPIA DEL HOMBRE COMO CAMINO AL


CONOCIMIENTO DE DIOS

Resumen:
Dentro del hombre yace la facultad de la inteligencia que Dios ha depositado en él
al momento de su creación, para que esta se desarrolle y lo lleve a interrogarse
sobre su existencia y su procedencia, llegando con ello a conocer a ese Dios que
en un momento fue el gran desconocido.
Abstract:
Within man lies the faculty of intelligence that God has deposited in him at the
moment of his creation, so that it develops and leads him to question himself about
his existence and his origin, thus coming to know that God who in a moment It was
the great unknown.

INTRODUCCIÓN:
En la actualidad se vive en una sociedad a la que algunos antropólogos y
sociólogos han llamado, una sociedad liquida o modernidad liquida1 donde intentar
dar respuesta a las interrogantes ¿Dios existe? Y si existe ¿Cómo es posible llegar
a conocerlo? Han perdido relevancia, no se encuentran dentro del foco de atención
de esta nueva sociedad, cuyo pensamiento es regido de manera subjetiva e
individualista, donde el hedonismo, el aquí y el ahora son el único interés verdadero
que se les presenta, y se deja de lado las interrogantes existencialistas que fueron
el centro de atención del hombre durante muchos siglos.
Es por esta misma sociedad liquida cuyo crecimiento ha sido exponencial en
los últimos años gracias al sistema capitalista y utilitarista que prepondera en casi
todo el mundo, que aunque uno quisiera dar respuesta a las interrogantes del cómo
llegar a Dios, dicha manera de hacerlo tendría que ser de una forma racional, pues
algo característico de esta nueva sociedad es precisamente que busca fundamentar
todo en la ciencia, pero de una manera radical, donde se pretende que solo la
ciencia puede dar respuesta a todas las incógnitas del mundo, pareciera que con
esto me refiero al positivismo pero como mencione se ha rayado en los extremos,
en buscar la demostración de todas las cosas solo por este medio, convirtiendo este
proceso en un cientificismo2.
Esto viene a complicar el proceso de intentar dar respuesta a una cuestión
que ya es de por si de poca relevancia para muchos y para quienes aún se la

1
Esta es una figura de cambio y transitoriedad, caracterizada por la precariedad de los vínculos humanos en una sociedad individualista y privatizada,
marcada por el carácter volátil y transitorio de sus relaciones.
2
Postura ideológica que pretende hacer pasar como conclusiones de la ciencia lo que serían en realidad nociones intelectuales propias de una determinada
filosofía materialista. El cientificismo sería pues una manipulación ideológica de la ciencia por parte de un tipo de materialismo, el cual es siempre una
doctrina filosófica y no una conclusión extraíble de los métodos o los resultados de la investigación científica

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interrogan esperan una respuesta que no se sustente solamente en argumentos de


fe. Por ello al reflexionar sobre esta realidad y dar una hojeada al acontecer de mi
vida y mi proceso de fe, me descubro que fui participe de esta nueva cultura y aun
inmerso en ella pude descubrir un camino a Dios. Por esto me dispongo a exponer
este mi vía hacia Dios la cual espero sea de ayuda y pueda esclarecer para aquellos
que como yo son hijos de esta nueva época de cambio que aun en lo lógico y
cotidiano es posible llegar al conocimiento de Dios.

PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE TODO SER HUMANO


El hecho de ser hombre de manera inmediata liga a mi existencia humana a
ciertas cualidades y propiedades propias de esta especie, a lo cual ningún hombre
por el hecho de serlo puede renunciar a ellas o mencionar que no existen. Esto que
menciono podría abordarlo desde el punto de la metafísica que cataloga al hombre
como una forma de existencia de la tercera forma del ser en el mundo, o bien, dicho
de otra manera como un ente compuesto (materia y forma) 3y que este ser a
diferencia de los demás entes materiales posee un alma racional (forma) que no ha
brotado de la nada si no que su existencia es en sí misma acto pero con cualidades
o facultades en potencia, y dichas facultades son la inteligencia y la voluntad, de la
primera se desprende esa capacidad que tiene el hombre para abstraer información
del mundo físico que lo rodea, posteriormente hacer juicios del mismo y por ultimo
racionalizar toda la información obtenida. Por su parte la voluntad es un querer, un
deseo que impulsa al hombre que le da la movilidad y lo lleva a descubrir lo que lo
rodea. A través de este pensamiento metafísico podría ya mencionar que estas
facultades son comunes a todo hombre por poseer cada hombre un alma racional,
pero mi intensión en este camino hacia Dios es partir de lo que se ve, no partir de
presupuestos que están mas allá de lo físico4, pues si volvemos a reducir todo a la
demostración científica que el mundo actual solicita para considerar algo como
verdadero inmediatamente lo que acabo de enunciar quedaría desechado.
Por ello partiré del mundo mismo, de la creación, de la naturaleza que
interroga al hombre, que lo llama a un encuentro y un constante dialogo con su
universo. Y este hecho es y ha sido siempre una constante, desde la antigüedad el
hombre se preguntaba sobre la naturaleza y sus fenómenos, aún más importante
se reconocía como parte de los mismos e intentaba comprenderlos, porque el
hombre posee una curiosidad que lo lleva a indagar en primera instancia de manera
empírica5 esto ocurre cuando se tiene el encuentro del hombre con el objeto de
interés, este lo asimila, lo categoriza según su percepción y le adjunta ciertas
cualidades según su interpretación, de una manera muy personal y subjetiva, pero
al hombre esto no le basta, su inteligencia buscara conocer más a profundidad
dichos fenómenos, es esta la misma inteligencia que hoy en día nos pide que todo
sea demostrable por medio de la ciencia, porque a la razón no le basta verdades a

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Tesis Tomista número VIII
4
Significado de metafísica más allá de lo físico
5
Que está basado en la experiencia y en la observación de los hechos.

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media, es como un monstruo que desea devorar todo conocimiento pero solo le
apetecen aquellos que contienen verdad y estos solo se alcanzan por medio de la
razón. Para poder lograr esto es necesario que la inteligencia se perfeccione y la
verdad es lo único que puede hacer que esto ocurra y en el proceso de obtener
dicha verdad siempre jugara un papel importante la razón.
Dicho esto, el hombre descubre su existencia en el mundo y se interroga
sobre ella, aquí la percepción juega un papel muy importante, pues el hombre no
conoce toda la verdad con el hecho de tener un encuentro con el objeto de interés
como si fuese esto un innatismo como hacía mención Platón y solamente se está
recordando aquello que ya se sabía, o que todo el conocimiento se da de manera
infusa al tener ese primer encuentro. Es necesario profundizar más en el fenómeno
mismo, racionalizarlo, buscar sus posibles causas y efectos. Entonces a través de
la percepción y la razón de lo que se visualiza, se comienza a vislumbrar un patrón,
este es uno que tiende a la perfección, a un orden, todo lo que existe en la
naturaleza no es movido por coincidencia o de manera aleatoria, existe un principio
de causalidad en todo, hay patrones que se repiten y se perciben a simple vista.

EL ENCUENTRO DEL HOMBRE CON LA NATURALEZA Y EL RECONOCIMIENTO DE LA


EXISTENCIA DE UN MUNDO POR INTERROGAR
Planteando esto se puede ver que a diferencia de Kant que apuesta por
pensamientos a priori6 la manera en que yo planeo llegar a Dios es de una forma a
posteriori7 y con esto me atrevo a decir que no soy el único que ha intentado llegar
a Dios a través de esta manera si no que ya grandes pensadores antiguos lo hacían
con esto quiero remontarme incluso más atrás de Santo Tomas quien utiliza
precisamente este método en sus cinco vías para demostrar la existencia de Dios.
Quiero ir a los orígenes mismos de las primeras civilizaciones, quienes vieron en los
astros, la naturaleza y el cosmos una maravilla de creación y los consideraron como
dioses por su grandeza, y perfección, en ellas descubrieron un orden especial y al
sentirse rebasados por ellas los adoraron, cayeron en un error al descubrir la
grandeza de la creación, pero no al hacedor de la misma por ello incluso el libro de
la sabiduría nos diría al respecto:
“Todo lo que admiran por su valor no los llevo a conocer al Que es ¡se quedaron con las
obras y no reconocieron al Artesano! Fascinados por tanta belleza, los consideraron como
dioses, pero entonces, ¿no debieron haber sabido que su soberano es todavía más grande?
Porque solo son criaturas del que hace que aparezca toda esa belleza” (Sabiduría 13,1-3)

El punto en resaltar en esta cita dejando de lado, que es parte de un libro


inspirado por Dios, es que en común a todos los hombres por su capacidad de
asombro y percepción se ven interesados por la creación, su inmensidad y su orden.
Muestra de ello son las múltiples similitudes que varias culturas tienen en relación
con los astros llegando incluso algunos a considerar a estos como a dioses, cada

6
Pensamientos que no dependen de la experiencia, aún más están completamente ajenos a ella.
7
Pensamiento que parte o surge después de la experiencia o como estímulo de la misma

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uno con su cosmovisión, pero siempre usando de referente a los mismos astros.
Muestra de ello es la cultura egipcia, romana y griega cada una politeísta y cada
una con sus distintos dioses, donde la variante más grande era en realidad los
nombres con que los bautizaban y la teogonía que narraba del origen de cada uno
de ellos.
Siguiendo adelante con la idea en mente de que es común a todo hombre
interrogarse por su mundo, y que la manera en que lo hace puede ser de forma
empírica o también llamada vulgar, científica con el uso de un método o incluso de
forma filosófica todas partirán de una problemática que se les presenta a todo
hombre cuando ve la creación, la naturaleza y esta lo confronta y reta a descubrir
sus misterios. Este reto me hace recordar otro pasaje de la biblia en el cual el apóstol
Pablo pasa por el Areópago donde todo hombre era libre de expresar su
pensamiento y en donde se encontraban las esculturas y bustos de muchos a los
que los romanos habían denominado dioses, pero en un espacio de este lugar se
encontraba un lugar reservado con el lema “para el dios desconocido” eso mismo
hace ver el continuo descubrimiento y profundización que intentaban hacer los
hombres para develar los misterios que el mundo le presenta, reconociendo que
aun ay más de lo que se cree saber, que existe ese algo que aún no se descubre,
pero que llama al hombre a su encuentro. (hechos 17,23).
Recuerdo con gusto al Jesuita Anthony de Mello quien mencionaba en su
obra rompe el ídolo: “porque a Dios no se le ama ni se le ofende directamente, sino
a través del trato al prójimo y a lo creado” (Mello, 1994) y esto es por el motivo de
que se puede llegar a Dios a través de sus creaturas, pues de Dios se puede decir
lo que no es, esto en analogía de lo que a nuestros sentidos pueden ver, para
intentar esclarecer un poco este punto podría mencionar un ejemplo, todas las
creaturas son finitas y contingentes entonces de Dios se supone lo contrario Dios
es infinito y necesario. Hago mención de esto ya de una manera directa, incluyendo
la idea de Dios por el motivo de que si el proceso de ir descubriendo la maravilla de
la creación se ha hecho de manera apropiada y ordenada, se llega a un punto donde
se comienza a pensar en este Ser que da respuesta a un punto donde nuestro
razonamiento parece llegar a lo indeterminado, ya que al seguir una cadena de
causalidades pareciera que estas se extienden hasta el infinito, por ello por la
incapacidad real del hombre de seguir esa sucesión casi infinita de causas llega a
una primera que no es causa de ninguna anterior que es Dios, pero reitero esto solo
es posible si se ha intentado desentrañar el orden, las causas, la perfección de la
creación, que cada vez nos lleva a conocer a ese Dios que era el desconocido que
los romanos esperaban y buscaban pero no supieron reconocer.

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CONCLUSIÓN:
Por ultimo y quizás de una manera personal en base a mi experiencia,
influenciada en gran parte por esta ola de nuevas ideologías y de una sociedad
liquida, aseguro la posibilidad de conocer a Dios de una manera real a través de la
creación, pues las manifestaciones más vivas que he experimentado de Dios es
precisamente a través del prójimo y de la grandeza de todo lo que creo para que en
el orden y perfección de la misma lo descubriera a Él, por algo el salmista dirá “quien
es el hombre para que te acuerdes de él, el hijo del hombre para que lo cuides” (Sal
8,4) y esto no es otra cosa que los gestos y caricias de amor con las cuales Dios
quiere hacer manifiesto el gran interés que tiene por sostener una relación de amor
con cada uno de nosotros, sabiendo que siempre es Él, quien sale al encuentro
tomando la iniciativa y fraguando todo de tal manera que en el transcurso de nuestra
vida en este mundo sepamos descubrir su amor en todo lo que providencialmente
nos da, esos son su lazos de amor que mencionaría el profeta “Con cuerdas
humanas los traje, con cuerdas de amor; y fui para ellos como los que alzan el yugo
de sobre sus mejillas, y allegué hacia él la comida.” (oseas 11,4). Quizás mi
argumentación carece de un carácter rigurosamente científico por el hecho de partir
gran parte del método empírico, pero al igual que Kant no desecho ni el uno ni el
otro, sino que me valgo de ambos para poder con ello de una manera sistemática a
partir de lo que percibo llegar a Dios.

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Bibliografía
Bauman, Z. (2008). Modernidad líquida y fragilidad humana. Madrid: Electrónica de la Universidad
Complutense .

Hugon, E. (1940). Principios de Filosofía las veinticuatro tesis tomistas. Buenos Aires: POBLET.

Kant, I. (1928). Crítica a la razón pura. Madrid: LUARNA.

LUCAS, R. L. (2008). El hombre, espíritu encarnado. Salamanca: SIGUEME.

MARCOS, A. (2010). Filosofía de la naturaleza humana. Valladolid España: CFN.

Mello, A. d. (1994). Rompe el idolo. México, D.F.: DABAR.

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