Anda di halaman 1dari 3

EL FENÓMENO SENDERISTA Y LA VIOLENCIA DEL

NARCOTRÁFICO: PROPUESTAS PARA LA ELABORACIÓN DE UNA


LEGISLACIÓN DE DESPENALIZACIÓN Y LEGALIZACIÓN DE LAS
DROGAS

Por : Martín E. Coronel Habrahamshon

En el Perú se cultivan todavía aproximadamente 51.800 hectáreas de hoja de


coca, lo que representa cerca del 32% de la producción mundial. Por una
hectárea de coca, señalan datos estadísticos, un campesino llega a obtener diez
veces más de lo que obtendría si el cultivo fuera de café o de plátano, el afán de
lograr ingresos a partir del cultivo de la hoja de coca ha motivado al
campesinado a buscar en la selva zonas cada vez más lejanas e inhóspitas para
resguardarlas del acceso y detección por parte de las autoridades, afectando con
ello el ecosistema por la deforestación de grandes áreas de bosques, ubicados en
las frágiles tierras de la selva peruana, alterando su protección natural y
ocasionando daños por erosión de los suelos, la destrucción de la fauna y la
contaminación por agroquímicos, tales como: ácido sulfúrico, carbonato de
sodio, querosene y permanganato de potasio, altamente contaminantes de la
flora y la fauna regional.

Las fuerzas subversivas en el Perú nacieron de las cenizas de los intentos


revolucionarios de los años sesenta y sesenta, con una visión maoísta de lucha
de clases, el lugar elegido para el origen y desarrollo de este mesianismo radical
fue la sierra central y sur del Perú, donde la ausencia del estado aunado a las
condiciones generalizadas de pobreza de la población urbana y rural,facilitaba la
estrategia subversiva de aquella época, (PCP-SL) fue la organización terrorista
más sanguinaria de la historia de Latinoamérica solo comparable en su
fanatismo y accionar con los Jemeres Rojos de Camboya, quien primero logro
persuadir y ganar adeptos entre los estudiantes y profesores de la Facultad de
Educación de la Universidad Nacional de Huamanga y luego se diseminó entre
otros sectores de la población peruana que no tenían una formada identidad
nacional y adecuada cultura política ,muchos de ellos jóvenes estudiantes de
Lima y Provincias, que fueron convencidos a formas parte de sus filas ya sea
por EXTORSIÓN o CONVENIENCIA,al declararse como zonas liberadas,cientos
de pueblos y decenas ciudades,mediante paros armados y atentados,poblaciones
sitiadas y encerradas entre dos fuegos : de la demencia terrorista y del accionar
errático de las Fuerzas del Estado.

En la actualidad, los remanentes de Sendero Luminoso protegen el comercio de


drogas ilícitas y utilizan las ganancias para fortalecer y reestructurar su
organización. Los narcotraficantes y milicias de Sendero Luminoso han
perjudicado a las economías locales, y ha generado un aumento en la
inseguridad nacional,asimismo frenado el desarrollo institucional post-
conflicto en muchas regiones que cultivan coca ilegal,como el
VRAEM,expandiéndose al resto del país. La Policía Nacional del Perú (PNP) y
las Fuerzas Armadas combaten de una insuficiente las dos principales fuentes
de inseguridad nacional: Las organizaciones del Narcotráfico y remanentes del
Sendero Luminoso,con políticas públicas carentes de idoneidad, al mismo
tiempo que los Ministerios del Interior y de Defensa buscan infructuosamente
implementar equivocadas estrategias antinarcóticos en zonas de conflicto.

La población civil de Perú,especialmente en el VRAEM, siente que está una vez


más atrapada “entre dos fuegos” temerosa de las represalias violentas de
Sendero Luminoso y el Narcotráfico como por parte de las fuerzas de seguridad
del Estado. En ocasiones los civiles se encuentran en una situación límite, con
pocas opciones para garantizar la seguridad de sus familias y mejorar sus vidas.
Las comunidades del VRAEM deben evitar las acusaciones y los ataques físicos
por dos frentes: el de las fuerzas de seguridad del Estado y el de los militantes
del Sendero Luminoso.

Son evidentes,al igual que la minería ilegal en Madre de Dios,los efectos


ambientales del cultivo ilegal de coca. Han experimentado la degradación
ambiental con la desaparición del dosel selvático, el fin de la fauna nativa, y la
erosión generalizada del suelo. Cosechas más frecuentes drenan los nutrientes
vitales de la tierra, y los pesticidas que se utilizan para proteger a las vulnerables
hojas de coca han envenenado el suelo. Los efectos de los cultivos de coca han
interrumpido la producción de otros importantes productos agrícolas básicos
como la yuca. La colaboración con Sendero Luminoso y narcotraficantes de la
zona, no ha logrado mejorar las condiciones de vida de los agricultores, y ha
interrumpido las tradiciones culturales de algunos grupos indígenas. Sin
embargo, la erradicación forzada por parte de las fuerzas de
seguridad del Estado probablemente perjudicará a las comunidades
que participan en la economía de la coca. La erradicación no
funciona sin programas complementarios que generen un desarrollo
amplio y equitativo, y encontrar los recursos necesarios para poner
en práctica estos programas es un reto1.

Esta peligrosa escalada de violencia terrorista ligada al narcotráfico,permite


esbozar en este humilde ensayo,algunas recomendaciones para implentar una
adecuada política pública en materia de seguridad y lucha
antidrogas.Actualmente el Estado Peruano actúa en diversos frentes,el militar,el
jurídico y el de área de la producción,siendo importante describir para ello una
serie de acciones en ese orden,como son : - El desarrollo alternativo. - La
participación de la empresa privada. - La investigación para el uso benéfico de la
coca. - La producción para usos tradicionales e industriales. - La conservación

1
En Narcotráfico,Terrorismo y la Autodefensa Civil en el Perú de Steven T. Zech,docente del
Departamento de Ciencia Política en la Universidad de Washington, Seattle. Experto en temas
de violencia política, terrorismo, y contraterrorismo
del medio ambiente. - El monitoreo de las superficies cultivadas con hoja de
coca. El Gobierno continúa desarrollando una estrategia equivocada en materia
antidrogas,con un programa dictado por los Estados Unidos y la DEA que ha
fracasado estrepitosamente durante las últimas décadas.

La despenalización y legalización de las drogas,es una estrategia eficaz y


primordial para ralentizar y erradicar al narcotráfico y la violencia,así como a la
delincuencia y corrupción asociada a sus cárteles e instituciones vulnerables a
su impacto,como son la Policía Nacional,Fuerzas Armadas y Operadores de
Justicia ,dentro de ello es posible aplicarla actualmente al Perú.Sin embargo
dicha despenalización y legalización deberá implementarse dentro de una serie
de normas conducentes a la legalización regulada del cultivo, procesamiento,
comercialización y consumo de las drogas(con limitaciones tipo Ley
Antitabaco), como solución de fondo a los elevados costos humanos,
sociales, ambientales y financieros que implica la lucha antidrogas. La
legalización acabaría con el Mercado negro y el consecuente Dinero negro que
genera el Narcotráfico.

El Perú debería adoptar una soberana y singular estrategia


antidrogas,salvaguardando y protegiendo sus intereses nacionales como son :
la seguridad nacional, instituciones,ciudadanía y Democracia.Por lo tanto
desmarcarse de la desfasada Política Antidrogas Estadounidense,y de la
DEA,que vienen librando una guerra equivocada contra el narcotráfico,es de
trascendental necesidad e importancia.

Anda mungkin juga menyukai