Aristóteles
Las Categorías
Traducción y notas
Cristóbal Videla-Hintze
Las Categorías
Presentación
Presentamos una nueva traducción de Las Categorías de Aristóteles en español,
principalmente el utilizado en Chile. Si bien nuestra guía del idioma será la
establecida por la Unión de las Academias de la Lengua Española, hemos
preferido usar un lenguaje lo más cercano posible al cotidiano, de modo que el
lector enfrente los problemas tal como Aristóteles realmente los presentó. Se trata
de que se perciba la actualidad del pensamiento aristotélico en todo su vigor y la
lectura de esta traducción sea una provocación para pensar por cuenta propia.
Aquí se genera una tensión inevitable entre la literalidad y lo cotidiano en la
traducción.
Tradicionalmente esta obra se considera parte del Órganon, los tratados de lógica
de Aristóteles, cuyas partes son Las Categorías, Sobre la Interpretación,
Analíticos Primeros, Analíticos Segundos, Tópicos y Sobre las Refutaciones
Sofísticas. Para esta traducción hemos tomado como texto original la versión
clásica de L. Minio-Paluello de la colección de la Universidad de Oxford
(Classical Texts), edición de 1961.
Tradicionalmente, Las Categorías se dividen en tres partes: la previa, la
presentación de las categorías mismas y los postpraedicamenta. En la previa, los
primeros tres capítulos, se trata de cuestiones preliminares en relación a los
conceptos fundamentales de la visión del mundo de Aristóteles: la οὐσία; luego,
en la presentación, que abarca los capítulos cuatro al nueve, si bien menciona
diez categorías sólo presenta cuatro: la οὐσία, la cantidad, la relación y la
cualidad; finalmente, los postpraedicamenta, los capítulos diez hasta el quince,
claramente deben haber sido escritos por otra u otras personas, pues presentan
claras diferencias estilísticas.
De esta traducción podemos destacar dos aspectos principales, por una parte en
relación a la traducción de ciertas palabras y por otro lado en relación a las notas.
En relación a las palabras que merecen atención especial en la traducción,
podemos distinguir la categoría y οὐσία. La categoría, tal como la entiende
Aristóteles, se refiere tanto a substantivos (οὐσία) como a adjetivos (la cantidad,
la cualidad) y a relaciones (la relación, lo contrario, lo opuesto). Lo crucial de
esta traducción se da en torno a la palabra οὐσία, que nosotros traducimos por lo
que-está-siendo, que es una forma verbal incógnita hasta ahora, que intenta
fusionar en el tiempo el gerundio, entre el pasado y el futuro, pues queremos
romper la trampa eternizadora del lenguaje. Nuestro intento es impedir el
eternizar algo, por ejemplo, la mesa, puesto que no hay una mesa eterna, más aún,
ni hay una mesa eterna ni nada es eterno, pues como dice la canción,
Cambia, todo cambia
Y así como todo cambia
Que yo cambie no es extraño.
Pero el poeta, que nunca renuncia a su libertad, termina diciendo,
Cambia, todo cambia
Pero no cambia mi amor.
Pensamos, por otra parte, que en la interpretación que hacen las notas a la
traducción, hay un aspecto principal: la aplicación de la teoría de conjuntos a los
conceptos de Las Categorías. Parece que ésta ilumina de modo notable las ideas
de Aristóteles, aclara ciertas clasificaciones y las simplifica. Creemos que es un
interesante aporte al estudio de las obras del Filósofo.
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Aristóteles Las Categorías
Por último, quisiéramos señalar que no hemos considerado las contribuciones del
mundo árabe a la comprensión de Aristóteles, especialmente las de Avicena y
Averroes. Sólo sugerimos que se investigue el origen fenicio del alfabeto griego.
Este estudio de las contribuciones árabes es una tarea que, por ahora, dejamos
pendiente.
Santiago, junio de 2017.
Cristóbal Videla-Hintze
Índice
Página
Presentación 2
Índice 4
Las Categorías
1. Homónimos, sinónimos y parónimos 5
2. Las expresiones y los que-están-siendo 5
3. La categorización 6
4. Las categorías 6
5. Lo que-está-siendo 6
6. La cantidad 11
7. La relación 14
8. La cualidad 18
9. El hacer y el padecer 22
10. Los opuestos 23
11. Los contrarios 27
12. Lo anterior 27
13. Lo simultáneo 28
14. El movimiento 29
15. El tener 29
Notas 31
Referencias 49
Las Categorías
1. Homónimos, sinónimos y parónimos. 1a
De las expresiones, hay tanto las que se dicen en combinación como las 16
que se dicen sin combinación. Ejemplos de las que van en combinación,
el humano corre, el humano triunfa; de las que se dicen sin combinación,
el humano, el buey, él corre, él triunfa. [1]
De los que-están-siendo, por una parte, hay (a) aquellos que se dicen de 20
lo subyacente de un cierto algo, pero que no están en ninguno, por
ejemplo, el humano se dice de un subyacente, a saber, de un cierto
humano, pero no está en ninguno; por otra parte, hay (b) otros que están
en un subyacente, pero no se dicen de ninguno (digo en un subyacente, 25
algo que está en algo, pero no como una parte, sino que es imposible
separar de aquello en que está); por ejemplo, una cierta gramática está en
un subyacente, en la mente, pero no se dice de ninguno, así también, un
cierto blanco está en un subyacente, en un cuerpo (en efecto, todo color
está en un cuerpo), pero no se dice de ninguno; luego, hay (c) aquellos
que se dicen de un subyacente y están en uno, por ejemplo, un 1b
conocimiento está en un subyacente, en la mente y se dice de un
subyacente, el conocimiento de una gramática; y por último, hay (d)
otros que ni están en un subyacente ni se dicen de ninguno, por ejemplo,
este determinado humano o este determinado caballo – en efecto, 5
ninguno de éstos ni está en un subyacente ni se dice de ninguno; puesto
que, de modo absoluto, aquellos que son individuos y singulares, sin
excepción, no se dicen de ningún subyacente, pero nada les impide a
algunos estar en uno – en efecto, una cierta gramática es un caso de
aquellos que están en un subyacente. [2]
3. La categorización. 1b
4. Las categorías.
5. Los que-están-siendo.
5. Los que-están-siendo. 2a
Es manifiesto a partir de lo expresado que lo que se dice de un 19
subyacente por necesidad tanto la palabra como el concepto categorizan
al subyacente, por ejemplo, humano se dice de un subyacente, de este
determinado humano y la palabra precisamente lo categoriza – en efecto, 25
humano categoriza a este determinado humano – y también el concepto
de humano categorizará a este determinado humano, en efecto, este
determinado humano es un humano; de este modo, la palabra y el
concepto categorizarán al subyacente. Los que-están-siendo en un
subyacente, en la mayoría de los casos no tienen palabra ni concepto 30
para categorizar al subyacente; en algunos casos nada impide que la
palabra categorice al subyacente, pero es imposible que el concepto lo
categorice; por ejemplo, blanco, que está en un subyacente, en un
cuerpo, categoriza al subyacente, en efecto, se dice el cuerpo blanco;
pero el concepto de blanco nunca categorizará al cuerpo. [2]
5. Los que-están-siendo. 2b
Pero de las especies mismas, aquellas que no son géneros, una no es más 22
que-está-siendo que otra; ni tampoco es más apropiado explicar este
determinado humano con humano que explicar este determinado caballo 25
con caballo. Del mismo modo, tampoco uno de los que-están-siendo
primarios es más que-está-siendo que otro; ni tampoco este determinado
humano es más que-está-siendo que este determinado buey. [5]
5. Los que-están-siendo. 3a
Pero no nos confundamos cuando las partes de los que están-siendo 29
como un todo están en los subyacentes, pues no necesariamente se
manifiestan como un que-está-siendo. Pues cuando hablamos de aquello
que está en un subyacente no dijimos que aquello pertenece a algo como
parte. [9]
5. Los que-están-siendo. 3b
Por otra parte, parece que lo que-está-siendo no admite ni lo más ni lo 33
menos; pues digo que este que-está-siendo no es más que-está-siendo
que este otro – éste se dice que es un que-está-siendo – pero de cada uno
de los que-están-siendo no se dice que son más o menos; por ejemplo, si
este que-está-siendo es humano, no es más ni menos humano, ni
tampoco es distinto a otros humanos. En efecto, este no es más humano
que otro, tal como blanco no es más blanco que otro blanco, ni lo bueno 4a
es más bueno que otro bueno; pero se dice que algo es más o menos que
eso mismo, por ejemplo, el cuerpo blanco se dice más blanco ahora que
antes y lo caliente se dice que es más o menos caliente; pero,
precisamente, esto no se dice de lo que-está-siendo, en efecto, de ningún 5
humano se dice que es más humano ahora o antes, ni en ninguno de los
otros casos similares, en cuanto es un que-está-siendo; así, lo que-está-
siendo no admite ni lo más ni lo menos. [13]
Pero tal vez alguien puede objetar y decir que los razonamientos y las 22
opiniones son así; en efecto, el mismo razonamiento puede parecer
verdadero y falso, por ejemplo, si el razonamiento que afirma que
alguien está sentado, al levantarse éste, aquel mismo razonamiento será 25
falso; del mismo modo sucede en el caso de las opiniones; en efecto, si
una opinión que afirma que alguien está sentado es verdadera, al
levantarse éste, opinará falsamente si sostiene la misma opinión sobre
aquello. Pero si bien esto se reconoce como correcto, difiere en el modo
que se reciben los contrarios; en efecto, en el caso de los que-están- 30
siendo son capaces de admitir que lo mismo se transforma en lo
contrario – pues lo frío se transforma en lo caliente, lo oscuro en lo
pálido, lo bueno en lo malo, lo negro a partir de lo blanco, lo honorable a
partir de lo perverso, del mismo modo en cada uno de los otros casos que
son capaces de admitir que lo mismo se transforme en lo contrario – pero
el razonamiento y la opinión permanece inmóvil en todos los casos; la 35
acción cambia generando ella misma lo contrario; en efecto, el
razonamiento permanece el mismo al afirmar algo, la acción cambia, o 4b
bien siendo verdadera, o bien siendo falsa; del mismo modo en el caso
de la opinión. De este modo, precisamente el lugar apropiado sería lo
que-está-siendo, transformándose el mismo, para ser capaz de admitir los
contrarios, pero si algo se reconoce como correcto, la opinión y el
razonamiento son capaces de admitir los contrarios. Pero esto no es 5
verdad, en efecto, se dice que el razonamiento y la opinión no son
5. Los que-están-siendo. 4b
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Aristóteles Las Categorías
6. La cantidad.
6. La cantidad. 5a
Además, por una parte, hay cantidades que están compuestas por partes 15
que tienen una posición, unas en relación a otras, y por otra parte, hay
otras que no están compuestas de partes que tengan una posición; por
ejemplo, las partes de una línea tienen una posición, unas en relación a
otras; en efecto, cada una está ubicada en un lugar y se pueden distinguir 20
y explicar donde se sitúa cada una en el plano y cuál parte se conecta con
otra. Del mismo modo las partes del plano tienen una posición
determinada, y nuevamente se puede explicar donde se ubica cada una, y
cuál se conecta con cuál. Lo mismo sucede con las partes los cuerpos
sólidos y las partes del espacio. Pero en el caso del número, no se puede 25
observar que las partes tengan una posición, unas en relación a otras o
donde están situadas o como se conectan unas con otras. Tampoco las
partes del tiempo, pues no duran, y ¿cómo lo que no dura podría tener
una posición determinada? Más bien se podría decir que tienen un orden
determinado, en el cual una parte del tiempo es primero y otra parte 30
posterior. Algo similar sucede con el número, en donde uno se cuenta
antes que dos y dos antes que tres; así tienen un determinado orden, pero
no se encontrará una posición. También es similar lo que acontece con el
lenguaje. Pues ninguna de sus partes permanece, pues una vez 35
pronunciada no se puede capturar, de modo que sus partes no pueden
tener una posición, visto que ninguna permanece. Por consiguiente,
algunas cantidades están compuestas por partes que tienen una posición,
otras que no están compuestas por partes que tengan posición. [3]
6. La cantidad. 6a
que allá. Además, dos codos o tres codos señalan una cantidad, pero lo
grande o lo pequeño no señalan una cantidad sino que es más bien una
relación; en efecto, lo grande o lo pequeño observan algo en relación a
algo otro; de este modo es claro que éstas son relaciones. [5]
7. La relación. 6a
7. La relación. 7a
Incluso en algunos casos será necesario inventar palabras si en relación a 5
aquello que hay que definir no hubiera una apropiada; por ejemplo, si se
define el timón como de una nave no es una definición apropiada, en
efecto, no es la nave misma que se dice del timón; pues no es siendo una
nave como se dice que un timón es de aquello, pues hay naves que no 10
tienen timón, por esto no reciproca; en efecto, la nave no se dice la nave
de un timón. Pero, tal vez, si la definición fuese más apropiada, así de
otro modo se definiría el timón del timoneado, pues no hay palabra, y
entonces reciproca definiéndolo apropiadamente, el timoneado es 15
timoneado por el timón. De modo similar en los otros casos, por
ejemplo, la cabeza se definiría más apropiadamente como de un
cabezado que de un animal; en efecto, no se es un animal por tener
cabeza; en efecto, hay muchos animales no tienen cabeza. Pero, este 20
modo es tal vez el modo más fácil considerar a aquellos que no tienen
nombre, esto es, si las palabras derivadas de la relación original se
asignan a sus recíprocos, del mismo modo que lo dicho sobre el ala del
alado y el timón del timoneado. [6]
7. La relación. 7b
Parece que los que están siendo en una relación estarían siendo 15
simultáneos por naturaleza; y en la mayoría de los casos esto es verdad;
en efecto, el doble es simultáneo con la mitad, pues si está siendo la
mitad, estará siendo el doble, si está siendo el esclavo está siendo el amo;
de modo similar en los otros casos. También se destruyen mutuamente;
en efecto, si no estuviera siendo el doble, no estaría siendo la mitad, si no 20
estuviera siendo la mitad, no estaría siendo el doble; del mismo modo,
también en los otros casos de este tipo. Pero parece que no es verdad que
todos los que están siendo en una relación estén siendo simultáneos por
naturaleza; en efecto, parece que lo conocible está siendo primero que el
conocimiento, pues en la mayoría de los casos adquirimos nuestro
conocimiento sobre hechos que se han dado; en efecto, en pocos casos o 25
en ninguno se vería al conocimiento generándose simultáneamente con
lo conocible. Además, la destrucción de lo conocible destruye en
conjunto y simultáneamente el conocimiento, pero la destrucción del
conocimiento no destruye lo conocible; en cambio, no estando siendo lo
conocible, no estará siendo el conocimiento, pues no hay nada que pueda
ser conocido, en cambio, no estando siendo el conocimiento, nada 30
impide que esté siendo conocible; por ejemplo, en la cuadratura del
círculo, suponiendo que fuese conocible, su conocimiento no está siendo
en ninguna parte, pero lo conocible mismo sí está siendo. Más aún,
eliminado al ser vivo, no hay conocimiento, sin embargo, cabe que estén
siendo muchos de los conocibles. Del mismo modo se tiene con la 35
percepción sensorial; en efecto, lo perceptible parece ser primero que la
percepción sensorial; pues si se destruye lo perceptible se destruye en
conjunto con la percepción sensorial, pero la percepción sensorial no
destruye en conjunto con ella a lo perceptible. Las percepciones
sensoriales están siendo en torno al cuerpo y están en el cuerpo, y
destruido lo perceptible se destruye también el cuerpo, en efecto, el 8a
cuerpo es perceptible sensorialmente y si no está siendo el cuerpo se
destruye la percepción sensorial, de este modo se destruye lo perceptible
y la percepción sensorial. Pero la percepción sensorial no destruye con
ella lo perceptible. En efecto, la destrucción del ser vivo destruye la
percepción sensorial, pero sigue siendo lo perceptible, por ejemplo, el
cuerpo, lo caliente, lo dulce, lo amargo y todos los otros perceptibles. 5
Además, la percepción sensorial se genera simultáneamente con el
sintiente, en efecto, el ser vivo y la percepción sensorial se originan
simultáneamente; pero lo perceptible sensorialmente está siendo primero
que la percepción sensorial – en efecto, el fuego y el agua y lo demás de
este tipo, a partir de estar siendo el ser vivo, están siendo antes de que
estén siendo holísticamente el ser vivo o la percepción sensorial – de este 10
modo, parece que lo sensible es primero que la percepción sensorial. [10]
7. La relación. 8a
Ahora bien, se tiene una aporía en caso que ningún que-está-siendo se 13
diga un elemento de una relación, como podría pensarse, o esto sea
posible para determinados que-están-siendo secundarios. En el caso de
los que-están-siendo primarios es verdadero; pues ni los todos ni las 15
partes se dicen elementos de una relación. En efecto, de este determinado
humano no se dice este determinado humano en tanto elemento de
alguna relación, tampoco de este determinado buey se dice este
determinado buey en tanto elemento de alguna relación; y del mismo
modo tampoco con las partes; ésta determinada mano no se dice esta
determinada mano en tanto elemento de alguna relación, sino ésta
determinada mano, y ésta determinada cabeza no se dice ésta 20
determinada cabeza en tanto elemento de alguna relación, sino ésta
determinada cabeza. Del mismo modo en el caso de los que-están-siendo
secundarios, al menos en la mayoría de los casos; por ejemplo, el
humano no se dice alguno de los que están siendo humanos ni el buey se
dice de alguno de los que están siendo buey, ni el madero se dice de
alguno de los que están siendo madero, sino que se dice que es posesión
de alguien. Por consiguiente, es manifiesto que no son relaciones, pero si 25
en el caso de algunos de los que-están-siendo secundarios que tienen
recíproco; por ejemplo, una cabeza de alguien se dice una cabeza y una
mano de alguien se dice una mano y así en cada caso, de modo que
parece que en estos casos son relaciones. [11]
7. La relación. 8b
haya nada inferior); de este modo es manifiesto que si alguien conoce 15
algún elemento de una relación de modo definido, también conoce de
modo definido aquel elemento con que está en relación. Pero en el caso
de la cabeza o de la mano o de cualquiera otro caso de este tipo de que-
está-siendo es posible conocerlo –qué es en sí mismo– de modo
determinado, sin que necesariamente se conozca de modo definido de
qué elemento de qué relación se está hablando. Pues no se sabe 20
necesariamente de modo definido de quién es la cabeza o de quién es la
mano; de modo que ningún que-está-siendo sería elemento de una
relación. Y si no son elementos de una relación, sería verdad decir que
ningún que-está-siendo es un elemento de una relación. Tal vez es difícil
hacer afirmaciones firmes sobre estas cuestiones sin haberlas examinado
muchas veces. A pesar de eso, recorrer varias de estas dificultades no se
hace sin ganancias. [12]
8. La cualidad.
8. La cualidad. 9a
Otro género de cualidad es aquella en virtud de la cual hablamos de 14
boxeadores o corredores o sanos o enfermos; simplemente lo que se dice
en virtud de una capacidad o incapacidad natural. En efecto, no se dice
de cada uno de éstos que tienen una cierta disposición, sino que tiene una 20
capacidad natural para hacer fácilmente algo o no ser afectado; por
ejemplo, de los boxeadores y de los corredores no se dice que tengan una
disposición sino que tienen una capacidad natural para hacer fácilmente
algo, se dicen sanos los que tienen una capacidad natural para no ser
afectados fácilmente cuando les sucede algo, enfermos los que no tienen
una capacidad para evitar el ser afectado. Del mismo modo en el caso de 25
lo duro y lo blando; en efecto, se dice duro lo que tiene capacidad de no
romperse fácilmente, blando lo que no tiene dicha capacidad. [4]
8. La cualidad. 9b
Pero cuantas resultan de algo que fácilmente se disipa y rápidamente se
origina se dicen afecciones; pues las personas no se califican en virtud de
ello. Así, tampoco cuando una persona enrojece por vergüenza ni cuando
palidece por miedo, más bien se dice haber sido afectada de algún modo.
De este modo en estos casos se dice afecciones, no cualidades. [7] 30
Tal vez aparezca otro modo de cualidad, pero hemos hecho una buena y 25
completa lista de aquellas más mencionadas. [11]
Entonces, las que hemos mencionado son las cualidades, en cambio otras 27
se dicen cualidades en tanto parónimas de éstas o las llamadas de algún
otro modo se dan como cualidades. En la mayoría o más bien en casi
todos los casos se dicen como parónimos, por ejemplo, a partir de la 30
blancura, la persona blanca; a partir de la gramática, la persona experta
en gramática; a partir de la justicia, la persona justa; y así en los otros
casos. Pero en algunos casos, por no haber nombres para las cualidades, 35
es imposible que se digan parónimos; por ejemplo, el corredor y el 10b
boxeador se dicen así por la capacidad natural, no se dicen como
parónimos de ninguna cualidad; pues no hay nombres para las
capacidades en virtud de los cuales estas personas se puedan decir
8. La cualidad. 10b
cualificadas – tal como para las ramas de los conocimientos en virtud de
los cuales las personas se dicen boxeadores o luchadores en relación a su
condición (pues hablamos del boxeo y de la lucha como ramas del 5
conocimiento, y es a partir de ello que se dicen los parónimos, a partir de
aquello que ellos están en condiciones de ser cualificados). Algunas
veces, sin embargo, incluso cuando hay un nombre para una cualidad, el
que se dice para ser cualificado en virtud de él, no se dice
parónimamente, por ejemplo, a partir de la virtud se da la persona
honesta, pues porque tiene la virtud que se dice honesto, pero no se dice
parónimamente a partir de la virtud; no hay muchos casos de este tipo.
Por tanto, hay algunos casos que se dicen parónimamente a partir de las 10
cualidades mencionadas, o son llamadas así a partir de ellas en otros
casos, que se dicen estar cualificados. [12]
En la cualificación se dan también los contrarios, por ejemplo, son 12
contrarios justicia e injusticia, blancura y negritud y otros similares,
además aquellos que se cualifican por sí mismos, por ejemplo, lo injusto
de lo justo, lo blanco de los negro. Pero esto no se da en todos los casos, 15
en efecto, no hay contrario a rojo ni a amarillo ni a otros colores, aunque
sean cualificaciones. [13]
Además, si de un par de contrarios uno es una cualidad, el otro también 17
lo será. Pero esto es claro para quien examine las otras categorías, por
ejemplo, si la justicia y la injusticia son contrarios, entonces si la justicia 20
es una cualidad, también lo será la injusticia; en efecto, ninguna otra
categoría se adapta a la injusticia, tampoco la cantidad, ni la relación ni
el lugar, ni tampoco holísticamente otras de este tipo, excepto la 25
cualidad; de modo similar, también, en todos los otros contrarios según
la cualidad. [14]
Además, las cualidades admiten el más y el menos; pues uno se dice más 26
pálido o menos pálido que otro y más justo uno que otro. Además, lo
mismo sostiene el incremento; pues lo blanco admite generar lo más
blanco; aunque no en todos los casos, si en la mayoría; en efecto, se 30
puede cuestionar que una justicia sea más justicia que otra, de modo
similar, en otras disposiciones. Algunos discrepan absolutamente en
torno a esto, que una justicia se diga más o menos justicia que otra, 35
tampoco que uno sea más sano que otro, tampoco lo justo menos que 11a
otro, de modo similar en el caso de la gramática y de otras disposiciones.
Pero, sin embargo, lo que se dice según la cualidad acepta sin duda lo
más y lo menos; en efecto, una persona se dice más gramatical que otra,
más justa, más sana y así en casos similares. [15]
Pero, ni lo triangular ni lo cuadrangular parecen admitir el “más”, 5
tampoco ninguna de las otras figuras; en efecto, las que admiten la
definición de triangular o la de circular son totalmente iguales a los
triángulos y a los círculos, no admiten que se diga que unos son más que
otros; en efecto, ningún tetrágono es más circular que otro, pues ninguno 10
admite la definición de círculo. Simplemente a menos que ambas figuras
admitan la definición de marras, ninguna figura se dirá que es más que la
otra. Por consiguiente, no todas las cualidades admiten el más y el
menos. [16]
8. La cualidad. 11a
Nada de lo mencionado hasta ahora es una cualidad propiamente tal, 15
pero es en virtud de las cualidades que algo se dice similar o no similar a
algo otro; algo no es similar a algo otro sino en virtud de la cualidad. De
este modo, se dice propio de la cualidad lo similar y lo disímil en virtud
de sí mismo. [17]
9. El hacer y el padecer.
[2]
En cuanto los contrarios son tales que es necesario que uno u otro 38
pertenezca a lo que se origina por naturaleza o categoriza a aquello, no 12a
hay nada intermedio entre ellos; por ejemplo, la enfermedad y la salud se
genera en el cuerpo del animal por naturaleza y necesariamente se da o 5
bien la enfermedad o bien la salud en el cuerpo del animal; también, lo
impar y lo par categorizan al número y necesariamente un número es
impar o par, y ninguno es el término medio, ni el enfermo ni el sano ni el
par ni el impar. En cambio, los que precisamente no son necesarios ni
uno ni otro, estos son algún término medio; por ejemplo, negro y blanco 10
se originan por naturaleza en un cuerpo, y no es necesario que ni uno ni
otro se dé en un cuerpo, en efecto, no todo es blanco o negro; por otra
parte, lo deshonesto y lo honesto categorizan no sólo al ser humano sino
a muchos más, y no necesariamente lo uno o lo otro se da en aquellos 15
que categoriza; en efecto, no todos son deshonestos u honestos.
12. Lo anterior.
13. Lo simultáneo.
15. El tener.
Cabe decir que el título, Las Categorías, de esta obra esotérica, en el sentido de se usaba
internamente en la escuela de filosofía de Aristóteles, el Liceo, es convencional, pues el original
no tiene título. Lo mismo se aplica a los títulos de los capítulos, que nosotros hemos colocado
para facilitar su lectura. En el Órganon, primero vienen Las Categorías, que trata de los
conceptos fundamentales, que combinándose constituyen las proposiciones, que se tratan en
Sobre la Interpretación. El enlazamiento de las proposiciones constituyen los silogismos es el
tema de los Analíticos.
Notas al capítulo 1
1.1 En este primer capítulo parece que Aristóteles trata de definiciones básicas del lenguaje.
Cabe hacer la reflexión si efectivamente trata del lenguaje o de lo que hay en el mundo. En
una primera lectura debemos mantener permanentemente el contexto en que nos movemos,
aunque haya una estrecha relación entre ambas visiones, la del lenguaje y la del mundo.
Usaremos como hipótesis de trabajo que Aristóteles trata de investigar más bien lo que hay
en el mundo que el lenguaje. Para un pensador es fundamental tener claro el foco de su
atención; si bien reconocemos que hay una estrecha relación entre el lenguaje y el mundo,
hay una diferencia si tratamos de entender el uno o el otro. Ackrill (1963, pág. 71) afirma
que “los términos ‘homónimo’ y ‘sinónimo’, definidos por Aristóteles en este capítulo, no
se aplica a las palabras sino a las cosas’. Por tanto, la palabra ‘partido’ es un homónimo
cuando nos referimos a un ‘partido político’ o a un ‘partido de fútbol’.
1.2 Otro modo de expresar los homónimos lo pinta Margritte:
Cuadro de la colección conocida como ‘la traición de las imágenes’ de René Magritte
pintado en 1928- 1929. Óleo sobre lienzo. 63 x 93 cm. Los Angeles County Museum of Art
1.3 En nuestra traducción evitamos el uso de la palabra ‘cosa’, pues Aristóteles no la usaba y
su introducción fue más tardía. Nótese que Ackrill (pág. 71) muestra su incomodidad por el
uso de la palabra ‘cosa’, argumentando que la usa como un comodín en varios casos. A
modo de anécdota que en la televisión chilena había una figura de la farándula cuyo
perrito se llamaba “Cosita”, siendo un ser vivo. Giannini & Flisfisch (1988, pág. 31)
utilizan la palabra ‘cosa’.
1.4 El verbo español ‘ser’ lo usaremos, por una parte, en su función copulativa para los casos
que en griego sea ese su uso o cuando no lo necesita y simplemente se colocan dos
substantivos o un substantivo y un adjetivo juntos; y por otra parte, para formar los
tiempos pasivos de los verbos cuando sea necesario.
1.5 El concepto de ‘οὐσία’ lo traducimos por lo ‘que-está-siendo’. Nos parece que el gerundio
en español expresa mejor la precariedad del mundo y nos sugiere otra perspectiva para el
tiempo. Giannini & Flisfisch (1988, pág. 31) utilizan el término ‘entidad’. Ver más sobre
esto en el capítulo 4.
En este caso, Aristóteles menciona dos que-están-siendo: humano y dibujo. Es notable que
nombre a algo no vivo, un dibujo, pues casi todos los ejemplos de los que-están-siendo son
seres vivos, lo cual como veremos más adelante que no deja de tener ciertas
consecuencias.
1.6 Se ha escrito bastante sobre la expresión ‘ὁ λόγος τῆς οὐσίας’ (ver Anton, 1968); nosotros
nos decidimos a traducirla como ‘el concepto de lo que-está-siendo’.
1.7 Parce que hay que fijar la atención tanto en los objetos externos del mundo como en los de
la mente; hay dos realidades que se entretejen, los objetos y las palabras, en este caso, por
una parte tenemos, el animal, el humano, el dibujo, lo-que-está-siendo y por otro lado,
palabras, homónimos, sinónimos, parónimos, conceptos. Podríamos representar el
entretejido como relaciones de conjuntos; por ejemplo, cada ser humano determinado es
un elemento del conjunto llamado ‘humano’, cada dibujo determinado es un elemento del
conjunto ´dibujo’; luego veremos más de esto.
2.1 Los ejemplos usados aquí si corresponden a seres vivos. Un ejemplo de sinónimo sería ‘mi
perro es un animal inteligente’ y ‘aquel gato es un animal muy rápido’. En ambos casos
con la palabra ‘animal’ (sinónimo) nos referimos a un ser vivo con el mismo sentido o
significado.
3.1 Candel (1988, p. 30) observa que la forma de derivación de Aristóteles es confusa, pues
tanto γραμματικός como γραμματική derivan de γράμμα; lo mismo sucede en el otro caso.
Sucede esto en Aristóteles pues, repetimos, él está interesado en comprender el mundo, lo
ontológico, no lo lingüístico; el problema de Aristóteles es comprender la realidad, lo que
existe y no en establecer simplemente una teoría del lenguaje; aunque al final es necesaria,
pero primero está el mundo.
3.2 De acuerdo a la definición de la RAE, parónimo es “Dicho de una palabra: Que tiene con
otra una relación o semejanza, sea por su etimología o solamente por su forma o sonido,
como vendado y vendido”, resulta que la definición de Aristóteles es más general que lo
asumido por Candel en la nota anterior.
3.3 Coincido con Ackrill que si bien Aristóteles hace sutiles observaciones lingüísticas, su foco
está en el mundo. Candel (pág.30) afirma que Aristóteles ‘tiende a tomar como punto de
partida los substantivos, haciendo derivar de ellos los adjetivos’ y por tanto sigue un
criterio ‘ontológico’ en el caso de las derivaciones de los parónimos, es decir, que está
poniendo la atención en el mundo y no en el lenguaje.
Notas al capítulo 2
1.1 En este capítulo Aristóteles se refiere a dos temas: las expresiones y los que-están-siendo.
Primero trata brevemente las expresiones, que clasifica en dos grupos: en combinación y
sin combinar. La palabra utilizada para combinación, συμπλοκή, también se puede
traducir como ‘entretejida’, es decir, estamos hablando del tejer o entablar una
conversación. La misma palabra, nos recuerda Ackrill (pág. 73) que usó Platón en El
Sofista 262, cuando aclara que una proposición no es simplemente una lista de
substantivos y verbos, sino que resulta de ´entretejer´ un substantivo con un verbo.
1.2 ‘ἄνθρωπος’, en general, lo traducimos como humano; y no como ‘hombre’ por su sesgo
machista. Nótese que el contexto de Aristóteles es una sociedad esclavista, y ἄνθρωπος se
refiere en general al hombre esclavista, creo que nunca al esclavo. De aquí derivan
ciertas características de humano como esclavista, lo cual implica que nunca podrá
coincidir con el concepto de hombre libre al que aspira el socialismo y el comunismo.
1.3 Desde el punto de vista de la teoría de conjuntos hay una definición de dos conjuntos: el
conjunto de las expresiones sin combinación y el conjunto de las expresiones en
combinación. En caso de que ambos conjuntos sean consistentes, el segundo siempre será
siempre mayor en número de elementos. Estos conjuntos se determinan en relación al
mundo de las expresiones, del lenguaje, esto es, objetos de la producción de la mente.
1.4 Se debe hacer una precisión a este párrafo en el sentido de que hay expresiones que se
dicen ‘en combinación’, por ejemplo, la pata de la mesa, que corresponden al conjunto de
las expresiones ‘sin combinación’, pues simplemente señalan un objeto y se deben tratar
en ese sentido. Lo decisivo es si hay o no un verbo que de alguna manera tenga el sentido
de una afirmación o negación, a lo menos; entonces podríamos hablar de expresiones ‘en
combinación’. Recordar que hay idiomas que con bastante frecuencia usan
combinaciones de palabras, el alemán, por ejemplo, ¿Leitmotiv es una expresión con o
sin combinación? Y sin ir más lejos, nuestro que-está-siendo, ¿es con o sin combinación?
Notas al capítulo 3
1.0 Respecto a la palabra categorizar, prefiero esta traducción a la usual, predicar. Si bien
predicar tiene cierto sentido pues normalmente en las clases iniciales de lenguaje se usa el
término predicado, la traducción habitual se ha ido transformando en un cliché. Prefiero
categorizar especialmente por su etimología, a saber, el término κατηγορέω viene de κατά
(según, en relación a, contra) y ἀγορεύω (hablar en el ágora, en la plaza pública, en la
asamblea, en el mercado), que en el fondo es lo que hacemos cuando hablamos, en el
origen nos comunicamos unos con los otros en las reuniones sociales. Por otra parte,
según el diccionario de la RAE categorizar es “organizar o clasificar por categorías” y
categoría a su vez es “cada una de las clases o divisiones establecidas al clasificar algo”;
entonces, recordemos que en el capítulo 2 Aristóteles establece una clasificación en cuatro
clases y en el capítulo 4 establece la famosa clasificación en diez categorías; finalmente,
citando a la RAE de nuevo “en la lógica aristotélica, cada una de las diez nociones
abstractas y generales establecidas, a saber, la sustancia, la cantidad, la cualidad, la
relación, la acción, la pasión, el lugar, el tiempo, la situación y el hábito”. Obviamente
esta clasificación no concuerda con la nuestra, a su debido tiempo veremos las razones de
la nuestra.
1.1 Se debe tener en mente al hablar de las categorías que hay un tema interesante en la
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Aristóteles Las Categorías
B
xA
‘en’ - pertenecer
2.1 Leemos la línea 16 ‘των ετερων γενων’ según la interpretación de Ackrill (1963, pág. 4).
2.2 La figura siguiente ilustra ‘mientras más alta sea la categorización’, en un sentido
conjuntista, esto es, un conjunto es subconjunto de otro que es subconjunto de otro y así
sucesivamente. Hay una herencia de características; lo que caracteriza a los elementos de
C, necesariamente caracterizará a los elementos a B y a fortiori los elementos de A.
B C
A B B
Notas al capítulo 4
1.1 Puesto que hemos eliminado lo eterno de nuestro vocabulario al introducir lo que-está-
siendo (ver notas al capítulo 1), todas las palabras son contingentes a cierto período de
tiempo, entonces no tenemos problema de utilizar substantivos abstractos para nombrar
las categorías.
1.2 La expresión ‘σημειόω’ se puede traducir como significar, señalar o incluso interpretar.
Corresponde a la señal que daba el comandante para ordenar a su tropa los movimientos
en una batalla, ya sea para avanzar, retroceder, atacar, etc. Esta idea es del profesor
Héctor Carvallo Castro, expresada en sus clases de filosofía en la Universidad de Chile
en 1994, especialmente cuando leíamos la Metafísica de Aristóteles.
1.3 Para la primera categoría, οὐσία, hemos optado por lo que-está-siendo; ver notas al
capítulo 1. Agregamos un interesante giro en Giannini & Flisfisch (1988, pág. 117)
cuando se refieren a la οὐσία dicen ‘lo que es’; lo cual es bastante cercano a la
traducción que usamos nosotros.
1.4 Hemos preferido traducir πόσος por cantidad, que en español aparece, por ejemplo, en
la palabra posología.
1.5 La tercera categoría, ποιός, la traducimos por cualidad; luego Aristóteles utiliza su
transformada, ποιότης, lo cual fundamenta aún más el uso del substantivo abstracto
mencionado.
1.6 La cuarta categoría, πρός τι, la hemos traducido como relación. Si bien Aristóteles no
tenía el substantivo relación en el vocabulario griego de la época, pensamos que la
preposición compuesta en algunos pasajes se puede traducir como en relación a, o
también como relativo a.
1.7 Las categorías που y πότε, si bien en el lenguaje aristotélico representan las
preposiciones interrogativas ¿dónde? y ¿cuándo?, hemos utilizado los substantivos
abstractos espacio y tiempo, pues creemos que es eso apunta mejor a los conceptos
utilizados por el Filósofo.
1.8 La categoría séptima corresponde a un verbo en modo pasivo, lo cual hace más factible
sugerir para κεῖσθαι, la traducción de posición. Esto trae a la memoria el caso que me
contaron en clases de francés en el colegio secundario, de aquel rey francés que se enojó
con el fabricante de jaulas para sus pájaros y le pidió que fabricara una para encerrar un
enemigo de modo que estuviera muy incómodo, sin poder a fortiori sentarse, ni estar en
otra posición de descanso. Un tiempo después el jaulero llegó muy orgulloso con su
invento, realmente demoníaco y el rey le pide que entre a la jaula para probarla.
Entonces el rey le dice que se ha portado mal y se va con la llave. Cabe pensar en los
soberbios, que caen presos en su propia soberbia.
1.9 Las categorías octava a décima están expresadas en una forma verbal en modo infinitivo,
con varios significados. Eso facilita la verosimilitud de la traducción a un substantivo de
tipo verbal sin grandes dificultades conceptuales. En el caso de la octava, ἔχειν, se
propone la posesión, que en algunas ocasiones es mejor traducir por tener e incluso
como hábito; la novena, ποιεῖν, hacer, y la décima, πᾰ́σχειν, padecer.
2.1 Los ejemplos que da Aristóteles nos servirán para examinar la precisión de nuestras
traducciones de las categorías: desde la primera a la sexta (lo-que-está-siendo, la
cantidad, la cualidad, la relación, el espacio y el tiempo) parece evidente su pertenencia.
La séptima también es obvio lo correcto de la traducción, pues estar sentado es sin duda
una posición.
2.2 Con respecto a la octava categoría, la posesión, tal vez complica un poco la
inteligibilidad lingüística, pues poseer calzado no es lo mismo que andar calzado, pero
creo que se trata de giros lingüísticos y no de conceptos distintos; bien se podría decir
que uno anda calzado o que va calzado. En todo caso, para andar calzado, se debe poseer
el calzado. Las dos últimas funcionan sin problema con los substantivos verbales
elegidos.
3.1 Lo esencial en esta teoría es sin duda que Aristóteles busca una manera de interpretar el
mundo; se nota, con los esfuerzos que hace, que está buscando un lenguaje que sea
propicio para interpretar su mundo, esto es, se deben pulir los modos de hablar para
interpretar el mundo, es decir, se requiere de una adecuación entre el lenguaje y la
interpretación que se hará del mundo, pues lo que busca Aristóteles son sentencias
verdaderas, esto es, que su interpretación sea correcta; esto es, que haya
correspondencia entre el mundo y el lenguaje, siendo el mundo lo primigenio.
3.2 Hay dos preguntas que sugieren las notas de Ackrill (1963, págs. 78-79) que no pueden
obviarse al leer este capítulo: a) ¿cómo llega Aristóteles a las diez categorías? y b)
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Aristóteles Las Categorías
Notas al capítulo 5
1.1 Aristóteles ve el mundo poblado por los que-están-siendo, esto es, individuos concretos, y
considera que es la categoría suprema. Tenemos una duda en relación a los intangibles,
que en ocasiones pueden ser tan contundentes como los tangibles, pero esto se discute
más adelante.
. En cuanto a la división de lo que-está-siendo en primario y secundario, en principio no
ponemos mayor reparo en una primera lectura, y aceptamos para ésta el ordenamiento
individuo, especie y género, en orden creciente de abstracción. Es interesante que para
Aristóteles la diferencia entre lo que-está-siendo primario y secundario no es de la misma
naturaleza que la diferencia entre dos categorías.
Aristóteles, en principio, trata con dos clases de que-están-siendo: los primarios y los
secundarios. Claramente, por los ejemplos dados, considera individuos concretos, físicos
en el caso de los primarios, e individuos abstractos (agrupaciones o conjuntos) en el caso
de los secundarios. Por tanto, en el mundo Aristóteles ve los que-están-siendo concretos
(elementos) y abstractos (conjuntos). Es decir, el fundamento es lo concreto y lo unitario.
Desde el punto de vista de la teoría de conjuntos lo que-está-siendo concreto son los
elementos y lo que-está-siendo abstracto son los conjuntos. Los individuos son los
elementos y las especies o géneros son los conjuntos. Este será nuestro punto de vista
para analizar esta primera categoría, la de los que-están-siendo.
Queremos reiterar nuestra opinión de que Aristóteles ve que-están-siendo individuales y
agrupaciones de que-están-siendo, pero parece que no visualiza ‘relaciones’, por
ejemplo, los ángulos interiores de un triángulo “siempre” deben sumar 180 grados, está
relación ¿será un que-está-siendo para Aristóteles? Pues, para nosotros nos parece
natural que lo sea.
Lamentablemente Giannini y Flisfisch (1988, pág. 35) que habían hablado de ‘lo que es’,
vuelven sobre los pasos dados, y a partir de ahora insisten en traducir οὐσία por
‘entidad’. Revisar nota 1.3 del capítulo anterior.
1.2 Cuando Aristóteles dice “lo que-está-siendo expresa lo principal, lo primigenio y lo más
importante que ni se dice de un subyacente determinado ni se da en ninguno” está
definiendo su visión del mundo, pues dice que cuando yo veo un hombre, no hay ninguna
idea o concepto de hombre, sino que estoy viendo directamente la realidad. El hombre no
está ni provisto ni protegido ni sumergido ni de una coraza ni de una aureola ni de un
concepto ni de una idea. Con esto espanta definitivamente cualquier fantasma, mito o
prejuicio respecto a que nosotros tenemos acceso directo al mundo y no necesitamos
ningún intermediario, ni de tipo religioso, mágico no intelectual. Me parece que ésta es
una contribución fundamental de Aristóteles para la interpretación racional del mundo.
Tengo delante de mí directamente a alguien que está siendo, un que-está-siendo.
1.3 ‘ὁ τὶς’ lo traducimos en ciertos casos como ‘este determinado’, siguiendo las sugerencias
de diccionario de Lyddell, Scott and Jones (Online).
Reiteramos que en nuestra opinión la mejor traducción de ‘οὐσία’ es lo ‘que-está-siendo’,
aunque sea una expresión incómoda. Por tanto, tendremos lo que-está-siendo primario y
lo que-está siendo secundario, la primera noción indica un individuo y la segunda una
especie o género, y por tanto, un conjunto.
. En relación a lo que-está-siendo considérese, por ejemplo, el siguiente caso de triángulo:
tenemos el triángulo rectángulo original de la división de los predios agrícolas, el
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Aristóteles Las Categorías
Triángulo rectángulo
1.4 Es interesante que nombre dos que-están-siendo primarios, este determinado humano y
este determinado caballo. Si agregamos otro que-está-siendo, ésta determinada planta,
tenemos que Aristóteles ve el mundo poblado de que-están-siendo que tienen algo en
común, son seres vivos. Tal vez, sin querer, Aristóteles ve el mundo con ojos muy
similares a los nuestros: que hay una categoría especial, “la más importante, preferente y
suprema”, que corresponde al ser vivo. Más adelante veremos las consecuencias de esta
mirada.
1.5 Concordamos con Ackrill (1963, pág. 81) en que el tratamiento de lo que-está-siendo es
más profundo en la Metafísica, libros y .
2.1 Aquí Aristóteles describe el modo de un lenguaje para referirse a los que-están-siendo.
Para ello utiliza el concepto de subyacente (intuitivo) y el de nombre y definición,
moviéndose en el espacio de subyacente (individuo) y especie (agrupación); es decir,
estamos trabajando en un espacio de elementos y conjuntos. ¿Qué pasa si en vez de
especie utilizamos el concepto de género? Siendo género más amplio que especie.
3.1 Llama la atención que todos los ejemplos de los que-están-siendo sean que-están-siendo
vivos, animados, y no utilice ningún ejemplo de cuerpos inanimados. Una primera
aproximación es que el-que-está-siendo vivo es necesariamente una unidad, en cambio un
cuerpo inanimado, una piedra, uno la parte en dos y tenemos dos piedras. Y si seguimos
partiendo los pedazos, llegamos a un proceso al infinito: algo absolutamente fuera de la
mente de Aristóteles. ¿Será esta una explicación válida? Nótese que ‘σῶμα’ se refiere
específicamente al cuerpo de seres vivos, no a un cuerpo inanimado.
3.2 Nótese una segunda característica de los que-están-siendo primarios: son condición sine
qua non de existencia de todo lo demás.
4.1 Aquí hay una caracterización entre los que-están-siendo en sentido creciente: el
elemento, un conjunto que sólo los abarque a ellos y un conjunto que abarque tanto a
ellos como a otros que-están-siendo. Nótese que los ejemplos siguen con que-están-siendo
animados, vivos. No da ejemplos de que-están-siendo inanimados.
4.2 Es interesante decir que unos son más que-están-siendo que otros, pues Aristóteles parte
del principio, en el próximo párrafo, que todos los diferentes que-están-siendo tienen un
mismo valor, a pesar de cierta nebulosa, que podría investigarse, se entiende,
5.1 Una tercera característica principal de los-que-están-siendo es que todos “valen” lo
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Aristóteles Las Categorías
significar esto? Yo visualizo una tendencia a ver seres vivos, que mientras están vivos no
se pueden dividir, en general. En cambio, los objetos inanimados, una mesa, siempre se
pueden dividir, sin quitarles la vida, tal vez transformándolos: si a una silla le quito el
respaldo, la transformo en un piso. Entonces, los que-están-siendo, ¿son solamente los
seres vivos?
10.2 Distinguiendo entre ‘légesthai katà tinós’ (decir algo según algo - en tanto subyacente) y
‘légesthai apò tinós’ (decir a partir de algo - en tanto categoría), tal como lo propone
Candel (pág. 38), aquí Aristóteles habla de categorías, que serían ciertos conjuntos, y en
el fondo categorizar sería construir determinados conjuntos, ya sea de las cualidades ya
sea de que-están-siendo.
11.1 Aristóteles en este pasaje reitera que lo que-está-siendo primario es indivisible y único,
¿corresponde, por tanto, exclusivamente a los seres vivos? Parece que la respuesta es
cada vez más afirmativa.
11.2 Es interesante que la agrupación por especies y géneros finalmente llega a una discusión
cualitativa, en cambio lo que-está-siendo primario siempre indica algo indivisible y
único, el ser vivo.
12.1 Volveremos sobre este caso de los contrarios en el capítulo correspondiente al tema de la
relación en las notas al capítulo 7.
13.1 Nuevamente Aristóteles parece sugerir que los que-están-siendo son seres vivos.
13.2 En este pasaje hay un pequeño problema, pues por una parte, dice que este blanco no es
más blanco que este otro, pero luego admite que un cuerpo puede ser más blanco que
otro.
13.3 Y nuevamente llegamos a los amos y los esclavos ¿Ambos son o no son humanos?
14.1 Nuevamente en este párrafo [14] y en el próximo [15] remitimos al capítulo 7.
Notas al capítulo 6
1.1 Este capítulo nos da la oportunidad de mejorar la representación conjuntista de las
categorías cantidad y cualidad. En efecto, El conjunto fundamental es el conjunto de los
que-están-siendo. Este conjunto define los individuos que existen en el mundo. Ahora
bien, si definimos conjuntos ordenados de dos elementos, los pares ordenados, en los
cuales el primer elemento sea un que-está-siendo, el segundo elemento del par ordenado
podrá ser una cantidad o una cualidad, por ejemplo, el par ordenado {perro; tres}
señala a tres perros; en el caso de cualidad, que veremos en el próximo capítulo, el par
ordenado {perro; negro} señala al que-está-siendo perro que es negro; se puede usar
conjuntos ordenados de tres elementos en los cuales el primer elemento es un que-está-
siendo, el segundo elemento es una cantidad y el tercer elemento es una cualidad; por
ejemplo el triple ordenado {perro; cuatro; café} representa a cuatro perros cafés; y así
sucesivamente.
1.2 Si agregamos el espacio, el tiempo y la relación ya tenemos cinco categorías de
Aristóteles, que sumadas a la primera, estamos dando cuenta de seis categorías. Las otras
cuatro también son muy importantes, pues agregan el concepto dinámico, al ser verbos.
De esta manera se digitaliza la visión de Aristóteles. Se sugiere como tema de
investigación, entonces, el hacer una digitalización completa de Las Categorías, y luego,
las del Órganon completo.
1.3 Nótese la división de la cantidad en dos clases. Eso está bien para la época de Aristóteles,
pero hoy se sabe que la cantidad se puede separar en más de dos clases; en efecto, en el
caso continuo las hay unas más continuas que otras, por ejemplo, los números racionales
son continuos, pero los números reales son más continuos que los racionales; y si
profundizamos más, seguramente encontraremos más clases de la cantidad continua.
1.4 Nótese también que Aristóteles da como ejemplo de una cantidad continua los cuerpos,
por tanto, necesariamente se está refiriendo a los seres vivos.
1.5 Por otra parte, aquí Aristóteles da un salto enorme, pues gramaticalmente va desde un
substantivo (lo-que-está-siendo) a un adjetivo de cantidad o de cualidad (¿cuánto?,
¿cómo?).
2.1 Las partes y los límites de un número. En este contexto Aristóteles se refiere a los
números enteros, siendo las partes cantidades que componen dicho número y límite sería
un número en común de dos partes contiguas. Obviamente si descomponemos un número
entero en partes tales que sumen dicho número ningún número se puede repetir, de modo
que nunca habrá un número que sea límite común de dos partes contiguas.
3.1 Respecto a las partes del tiempo es interesante analizar el tema. Según Aristóteles en el
caso del tiempo, no hay partes que tengan una posición respecto a otras, pero uno podría
pensar que un período de tiempo, digamos una hora, es anterior a otra hora más tardía;
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Aristóteles Las Categorías
por ejemplo la hora entre las 8:00 y las 9:00 es anterior a la hora entre las 13:00 y las
14:00 de un mismo día. La pregunta que surge es ¿por qué Aristóteles no considera este
ejemplo? Lo mismo con los números, habla de un antes y un después, entonces ¿un antes
y un después no es una posición?
4.1 Es interesante la mirada de Aristóteles; debemos prestar atención a su mirada, ¿qué está
mirando? Cuando observa una gran superficie blanca, hay dos objetivos en su mirada;
por un lado la superficie y por otro lado el color; en efecto, la superficie es grande y el
color es el blanco; entonces, concluye que lo grande no es el blanco, sino que la
superficie.
5.1 En este párrafo Aristóteles avanza a las relaciones. Veamos este avance. Nosotros
representamos la relación como un conjunto de pares ordenados; por ejemplo, la relación
“número natural mayor que”, por ejemplo, el 2 es mayor que 1, el 3 es mayor que 1, etc.
Entonces, dicha relación es el conjunto A = ({p; q): p > q, con p y q en N, esto es, el
conjunto de los números naturales). Estos pares ordenados {p; q} son todas las parejas
de pares ordenados en las cuales el primer número es mayor que el segundo. Aquí
Aristóteles busca mostrar que la cantidad no tiene contrario, como sí lo tiene la relación.
Con la definición dada es fácil definir un contrario, por ejemplo, si tenemos el par
ordenado {p; q} un contrario natural será {q; p}. En el caso de la cantidad, por ejemplo,
¿cuál sería lo contrario de {perro; 3}? Rápidamente llegaremos a la conclusión que no se
puede definir de modo natural un contrario a aquello.
6.1 En este párrafo Aristóteles trae a colación un principio fundamental para su modo de
razonar: el principio de no contradicción; en efecto, lo materializa cuando dice “se
piensa que nada admite los contrarios simultáneamente”.
6.2 Entonces, Aristóteles en esta obra está utilizando toda su lógica, desde las definiciones
hasta los principios lógicos fundamentales. Creo que en esto radica la importancia de
esta obra. Pues si la estudiamos bien, habremos comprendido la visión del mundo que
tenía Aristóteles y que dominó el pensamiento occidental por más de 2.000 años.
7.1 En este párrafo Aristóteles avanza a la categoría espacio. Veremos los comentarios en el
capítulo respectivo.
7.2 Aquí Aristóteles habla de ‘lo más contrario a cantidad’, por tanto contrario admitiría lo
más y lo menos. ¡Interesante!
8.1 Aquí Aristóteles habla de nuevo de la cantidad. Nosotros hemos definido la cantidad
como un par ordenado; tomemos las siguientes cantidades: {humano; 4} y {perro; 4},
dicho en lenguaje coloquial, tres humanos y tres perros. Entonces podemos establecer
una relación bi-unívoca entre los dos conjuntos: a cada humano le asignamos un perro
(lo mismo sucede si a cada perro le asignamos un humano); entonces no sobre ningún
humano ni ningún perro; Aristóteles dice que cuatro humanos no son ni más ni menos que
cuatro perros. ¡Interesante! Pero no es este el lugar para seguir desarrollando este tema.
9.1 La conclusión de este párrafo, que es propio de la cantidad ser igual o desigual a otra
cantidad, es algo subjetiva, pues con cuidado podemos hablar de cantidades mayores i
menores, aunque requiere mayor desarrollo. Esto lo podríamos tratar con las relaciones
bi-unívocas.
Notas al capítulo 7
1.1 En este capítulo haremos el siguiente examen a la definición de Aristóteles: vamos a
comparar los resultados de la definición de relación de Aristóteles con los que entrega la
definición correspondiente de la teoría de conjuntos.
Definición conjuntista: una relación es un conjunto de pares ordenados. En el par
ordenado está definida la relación; por ejemplo, si la relación es “número natural mayor
que” los pares ordenados serán {2,1}, {25,12}, {120,99}, etc. En este caso concreto, el
primer número natural es “mayor que” el segundo. De este modo, la relación está
representada por el conjunto de todos los pares ordenados de números naturales, cuyo
primer número es mayor que el segundo. Esta definición implica que la relación es
simplemente un determinado conjunto.
1.2 La relación “más grande que” (determinado el sentido de “grande”) es el conjunto de
todos los pares ordenados que cumplen dicha definición. La definición conjuntista
permite un manejo de la relación más eficiente, pues tenemos un conjunto, sobre el cual
podemos realizar las operaciones que ya conocemos.
1.3 Nótese que habla de categorías como la posición y el tener que son categorías
posteriores.
1.4 Se sugiere como tema de investigación hacer una revisión exhaustiva del concepto de
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Aristóteles Las Categorías
relación desde el punto de vista conjuntista en la obra completa de Las Categorías; más
adelante se puede revisar las otras obras del Filósofo desde dicho punto de vista.
2.1 Para leer los párrafos 2, 3 y 4 es útil aclarar que hay varios tipos de relaciones; a saber;
de uno-a-uno, esto es unívoca, se da cuando hay algo que está relacionado con otro algo
único, por ejemplo, “el doble de un número natural”, si tenemos 35 el doble es 70 y
ningún otro número, representado por el par ordenado {35; 70}; de uno-a-muchos, por
ejemplo, “los números naturales múltiplos de 3”, son múltiplos de 3 el 3, el 6, el 9,
etcétera, los representamos por los pares ordenados {3; 3}, {3; 6}, {3; 9}, etcétera; de
muchos-a-uno, “edad de una persona”, si Pedro, José, María, tienen 25 años los
podemos representar por los pares ordenados {Pedro; 25}, {José; 25} y {María; 25}.
Con esto en mente, ahora podemos leer los próximos párrafos con mayor claridad.
2.2 En este párrafo Aristóteles trata un tipo especial de relación: la relación ‘contrario a’,
ἐναντίος. Lamentablemente la traducción de ἐναντίος es múltiple; en efecto, Liddell, Scott
y Jones (Online) la traducen como lugar opuesto, opuesto; enfrentando, cara-a-cara;
delante de él; (con verbos de movimiento) en dirección opuesta; (en astrología) en
dirección diametral; (en sentido de hostilidad) oponiéndose, enfrentando; un adversario;
(cualidades) opuesto, contrario, inverso; (con énfasis) justo lo contrario; (en la filosofía
de Aristóteles) contrarios son atributos dentro del mismo género que más difieren entre
sí, por ejemplo, caliente y frío; proposiciones contrarias; proposiciones contradictorias.
Por su parte, Bailly la traduce por 1. Que está enfrente, vis-à-vis, dos carros que se
enfrentan uno al otro; 2. (Con la idea de hostilidad) dos rivales que combaten
directamente uno contra otro (a nivel intelectual o bélico); adversarios; enemigos; y 3.
Opuesto, contrario. Esto significa, que entramos en un terreno pedregoso y hay que
avanzar con sumo cuidado.
2.3 Parece que aquí tenemos una diferencia con Aristóteles: dice que “no hay contrario a
doble o triple”… Creemos que podemos definir la relación inversa como un medio o un
tercio… como lo contrario de lo anterior. ¿Cómo son los conjuntos? En caso de tomar la
relación sólo respecto a los números naturales, la relación “es el doble de” sería el
conjunto de pares ordenados {2; 1}, {4; 2}, {6, 3}, etcétera; la relación contraria “es la
mitad de” sería el conjunto de pares ordenados {1; 2}, {2; 4}, {3; 6}, etcétera. Parece que
esto vale para toda relación. Lo dejamos como tema de investigación.
3.1 También aquí hay espacio para la discusión. Por ejemplo podríamos decir que el 15 es
“más doble que” el 14 de 8. Nuevo tema de investigación.
4.1 El sentido de recíproco de Aristóteles es evidente expresado desde el punto de vista de los
conjuntos; por ejemplo, el esclavista Augusto es dueño de los esclavos Pedro, María y
José; expresado en conjuntos {Augusto; Pedro}, {Augusto; María}, {Augusto; José}. Al
invertir los pares ordenados, tenemos la relación {Pedro, Augusto} que significa “Pedro
es esclavo de Augusto”. Nuevamente, los recíprocos serían determinados conjuntos de
pares ordenados. Además, podríamos establecer como recíproco algo contrario, y de ese
modo todas las relaciones tendrían contrarios. Es un gran tema de investigación, que
dejamos planteado aquí.
5.1 En este pasaje Aristóteles entra en una discusión lingüística, pero si somos rigurosos la
cuestión queda clara: las relaciones son siempre conjuntos de pares ordenados.
5.2 Podemos representar el tema de este pasaje, por ejemplo, por los pares ordenados,
{gorrión; ala}, {picaflor; ala}, {golondrina; ala}, {alondra; ala}, etcétera; es un tipo de
relación de muchos a uno; la recíproca sería de uno a muchos, pero aquí entramos de
lleno a una discusión lingüística.
6.1 Continúa el tema lingüístico.
6.2 Es interesante que Aristóteles diga se debe inventar la palabra si es necesario, pues esto
nos lleva a que el mundo es el que manda. Las palabras vienen después. Nuevamente, el
Maestro espantando fantasmas, mitos.
6.3 Como ejemplo de ave sin alas, tenemos el pingüino, que en vez de alas tiene aletas; otro
ejemplo son los kiwis (Apteryx, del gr. «sin alas») constituyen un pequeño género de aves
paleognatas, el único de su familia (Apterygidae) que a su vez es el único de su orden
(Apterygiformes). Este género está compuesto por cinco especies endémicas de Nueva
Zelanda. Son aves no voladoras pequeñas, aproximadamente del tamaño de una gallina, y
como constancia de nuevos conceptos téngase presente que la escarapela de la Real
Fuerza Aérea de Nueva Zelanda es precisamente el kiwi (Wikipedia).
exclusivamente, puesto que mano y cabeza no son seres vivos, sino partes de un ser vivo.
12.5 Aquí Aristóteles es clarísimo y con la teoría de conjuntos lo entendemos de inmediato.
Los-que-están-siendo son los elementos primigenios que hay en el mundo; pues, ellos
pueden estar o no en una determinada relación, pero no es dicha relación la que los
define, sino que su definición es previa, al ser considerados elementos primigenios del
mundo.
Notas al capítulo 8
1.1 Según Ackrill (1963, pág. 163) posiblemente la palabra ποιότης, cualidad, Aristóteles la
tomó del Teeteto 182a de Platón.
1.2 Por una parte, Candel plantea, a mi parecer correctamente, que Aristóteles utiliza un
sustantivo, por sufijación del pronombre ποιόν: ποιότης (Ibíd., p. 55). Por otra parte, la
RAE define cualidad (Del lat. qualĭtas, -ātis, y éste del gr. ποιότης - poiótēs.) con tres
acepciones:
1. f. Elemento o carácter distintivo de la naturaleza de alguien o algo.
2. f. cualidad positiva, especialmente de una persona. Una mujer con muchas
cualidades.
3. f. Calidad, condición o naturaleza de algo o de alguien.
Nosotros usaremos la palabra cualidad.
1.3 La cualidad se puede definir como un par ordenado del siguiente modo: {a, b}, donde a es
el primer elemento y b el segundo; por ejemplo, a es esta silla y b es blanco, se tiene
entonces “ésta silla es blanca”, en donde blanco es un color que está codificado en algún
tipo de código. Esto nos dice que la cualidad es una relación, un determinado conjunto de
conjuntos.
1.4 Cuando Aristóteles afirma que cualidad se dice de múltiples modos, lo hace de modo
inductivo, es decir, describe simplemente varios modos del uso de cualidad, sin un afán
exhaustivo (Ackrill, 1963, pág. 164).
1.5 En este párrafo Giannini y Flisfisch (1963, pág. 125) observan que ‘es curioso que los
ejemplos que toma en cada especie de cualidad se refieran al hombre’; esto venía hace ya
tiempo sucediendo pero referido a los seres vivos. Sería interesante hacer un estudio
similar para el caso de los que-están-siendo inanimados, especialmente con vistas a la
era robótica que se acerca con pasos agigantados.
2.1 Se ha traducido ἕξις como estado o hábito, para comunicar una situación de cierta
estabilidad. La palabra διάθεσις la hemos traducido como disposición o condición para
comunicar algo menos estable, más volátil.
2.2 En caso de agregar la variable tiempo para distinguir estado de disposición se puede
recurrir a los tríos ordenados, [a, b, c] en donde a es un determinado humano, b es una
determinada característica (color, conocimiento, prudencia, temperatura, etc.) y c un
determinado período de tiempo, entonces según la característica, de acuerdo a la
duración del período se distingue estado de disposición. Este trío ordenado lo podemos
reducir a un par ordenado; primero construimos el par ordenado {b, c} que describe la
duración de la característica, llamémosle d, donde d = {b, c}, de modo que el trío
ordenado se transforma en un par ordenado {a, d}. De acuerdo al valor de c estaríamos
frente a un estado o a una disposición. Esto nos permite mostrar que estamos frente a una
cualidad, y por tanto, a una relación. En todos los casos estamos siempre frente a una
relación, esto es, un conjunto de conjuntos.
3.1 Aquí lo valórico le juega una mala pasada a Aristóteles: él supone que algo duradero es
más valioso que lo variable, lo que cambia rápidamente. Entonces dice que los estados
son disposiciones, lo cual no es cierto, pues dichos estados, por definición, no varían
rápidamente. Desde el punto de vista de la teoría de conjuntos Aristóteles supone que uno
es sub-conjunto del otro, cuando es realidad se trata de dos conjuntos disjuntos.
4.1 Aristóteles como segundo tipo de cualidad define la capacidad de un que-está-siendo
para una determinada función: boxear, correr, etc. Nuevamente asocia a un que-está-
siendo a un conjunto de capacidades; es decir, define una relación que representa una
cualidad.
5.1 Aristóteles sigue describiendo cualidades de los que-están-siendo, ahora nombra lo
sensible y lo afectivo, que evidentemente le corresponde a los seres vivos. ¿En el futuro
los robots? Cabe esperar que el enfoque conjuntista permite extrapolar estos
pensamientos al mundo automatizado.
5.2 Queda por discutir los afectos, πα ́θη.
6.1 En este párrafo vuelve a los colores, detallando el caso de los que-están-siendo vivos y
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Notas al capítulo 9
1.1 “También, aquí supone, con razón, Minio-Paluello la existencia de una laguna, mal
suplida, además, por una mano posterior (la traiciona, sobre todo, el poco aristotélico
uso de Andrónico de hypèr, “sobre (esto)”) con las siete líneas 11b10-16, que quieren ser
una transición-recapitulación para dar paso a los seis últimos capítulos, posiblemente
añadidos aquí, tras sacarlos de otro lugar, por el editor correspondiente (quizá el propio
Andrónico). El contenido de estos capítulos, poco acorde con el del texto precedente, ha
dado pie a algunos comentadores para asignarles el título específico de
Postpraedicamenta.” (Candel, pág. 63).
1.2 Por otra parte, Ackrill (1963, págs. 69-70) plantea que aquí se desdibuja el texto y el
pasaje no es genuino de Aristóteles. Con respecto al resto de los seis capítulos (del 10 al
15), conocidos como Postpraedicamenta, si bien no duda de su autenticidad, postula que
no corresponde al texto original de Las Categorías.
Notas al capítulo 10
1.1 Ver notas al capítulo anterior.
2.1 Esta discusión se refiere principalmente a dos conceptos en el lenguaje griego clásico;
por una parte con el verbo ‘ἀντίκειμαι’ que hemos decidido traducir por oponer; y por
otra parte con el substantivo ‘ἐναντίος’ que se ha traducido por contrario. En realidad los
opuestos y los contrarios son prácticamente sinónimos; en efecto, el diccionario de la
RAE da como primera acepción de opuesto a contrario; y contrario lo define en términos
de opuesto. Además en la discusión también aparece el término ‘ἀντιστρέφω’, que se ha
traducido por reciprocar, y allí si se visualiza ya un matiz.
Por otra parte, de inmediato se ve que los opuestos constituyen una relación, pues para
que algo sea opuesto se requiere de otro algo; en general, algo no se opone ni es
contrario a sí mismo. Si este es el caso, los opuestos son conjuntos de pares ordenados.
Es decir, estamos hablando de conjuntos. Ver notas al capítulo 7.
2.2 A un nivel más general de análisis, los cuatro modos que se plantea de lo opuesto o lo
contrario se reducen a uno sólo: ser elementos de un par ordenado; esto es, constituyen
una relación.
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Notas al capítulo 11
1.1 Este capítulo se puede considerar como una continuación o complementación del
anterior, pues el autor usa los sinónimos opuesto y contrario. Sería interesante
transcribir ambos capítulos a una representación conjuntista, para determinar lo
propuesto, sistematizar las repeticiones y obtener una síntesis del contenido.
1.2 Los contrarios, como ya se vio en el capítulo 7, son un subconjunto de las relaciones. Esto
es, un determinado conjunto de pares ordenados. Además siendo lo contrario un sinónimo
de los opuestos, estamos en el mismo caso del capítulo anterior.
1.3 Se tiene que bueno y malo, salud y enfermedad, justicia e injusticia ya fueron tratados en
el capítulo anterior. Lo nuevo de este párrafo es valentía y cobardía.
2.1 Interesante observación del autor en el sentido de si un aspecto de los contrarios se da,
no necesariamente se da el otro; en sus palabras, si todos los humanos son sanos, no se
daría la enfermedad. Utiliza los conceptos ya discutidos en el capítulo anterior.
3.1 Sobre los conceptos ya mencionados y su génesis.
4.1 Aquí el autor entra en la discusión de lo que-está-siendo, la especie y el género. Esto es
una interesante materia para un ejercicio conjuntista.
4.2 En esta nota final de este capítulo hemos querido hacer un recuento de algunos conceptos
que Aristóteles ha utilizado a lo largo de la obra.
En primer lugar se trata del concepto ἐναντίον, 13b36, que en una primera traducción
sería ‘contrario’.
Esta palabra aparece primero en el capítulo 5 sobre los que-están-siendo en la pregunta
¿qué sería contrario a lo que-está-siendo primario? (3b25). La respuesta de Aristóteles es
que no existe un contrario a un que-está-siendo. Es evidente que estaríamos en presencia
de dos que-están-siendo, el siendo primario y su potencial contrario, por tanto, estamos
en presencia de una relación, esto es un conjunto de pares ordenados, aunque en este
caso no existe el par ordenado buscado.
En el mismo capítulo 5 aparece otra caracterización de lo contrario cuando se lee:
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“parece muy propio de los que-están-siendo, unitarios y singulares, que son capaces de
recibir los contrarios” (4a10), nuevamente tenemos que los contrarios aparecen unidos,
lo que corresponde en cuanto pares ordenados.
Y por último en el capítulo 5 de nuevo tenemos que “en el caso de los que-están-siendo
son capaces de admitir que lo mismo se transforma en lo contrario – pues lo frío se
transforma en lo caliente” (4a30). En este caso lo contrario está representado por el par
ordenado es {frío; caliente}.
En el capítulo 6 sobre la cantidad los contrarios también aparecen en tres ocasiones; en
primer lugar, “no hay un contrario en la cantidad (de lo expuesto es manifiesto que no
hay contrarios, por ejemplo, a dos codos o a tres codos o a una superficie o a los demás
de este tipo, en efecto, no hay nada contrario)” (5b11). En este caso, algo de dos codos
sería un que-está-siendo, determinado por un cierto tamaño, pero aunque ande o más
pequeño, en ningún caso tendría un contrario. Este caso corresponde a un que-está-
siendo del capítulo 5. En segundo lugar, tenemos que “se piensa que nada admite los
contrarios simultáneamente” (6a1). Aquí hay un gran tema, que desarrollaremos en otra
parte, a saber, el principio de no-contradicción, un fundamento principal del trabajo de
Aristóteles. En tercer lugar, en este capítulo 6 Aristóteles afirma “parece que lo más
contrario a la cantidad se da en el espacio” (6a11). Aquí el Maestro habla de “lo más
contrario”, lo cual sugiere un estudio acabado de lo contrario, para determinar “lo
más”, y en consecuencia, “lo menos” contrario.
En el capítulo 7 tenemos que “en las relaciones se dan los contrarios, por ejemplo, la
virtud es contraria al vicio” (6b15). Este puede ser el caso más común de contrario,
relaciones.
Luego, en el capítulo 8 sobre la cualidad, se tiene que “en la cualificación se da también
la contrariedad, por ejemplo, son contrarios justicia e injusticia” (10b12). Queda
clarísimo que la cualidad admite los contrarios.
En los restos del capítulo 9 también aparece el concepto de contrario cuando dice: “el
hacer y el padecer admiten tanto los contrarios como lo más y lo menos; en efecto, el
calentar y el enfriar son contrarios, también calentarse y enfriarse” (11b1).
El segundo concepto que queremos tratar es ἀντικείμενος (11b16) opuesto, que es el
contenido de este capítulo 11. Por una parte, no hay una distinción clara entre contrario
y opuesto, en todos los casos se puede reemplazar opuesto por contrario, o viceversa,
manteniendo el sentido de la oración. Hemos determinado traducir un término como
contrario y el otro como opuesto, solamente para mantener una cohesión en la
traducción.
Un tercer momento lo constituye el conjunto de verbos que articulan las apariciones de
los conceptos precedentes de lo contrario y lo opuesto.
Estos verbos son: ἀντίκειμαι ( 11b17, 19, 24, 25, 28, 30, 32, 32, 12b1, 4, 5, 10, 15, 16, 17,
26, 13a16, 17, 37, 13b1, 8, 22, 35, 15b12), oponer, oponerse, ser opuesto a; ἀντιτίθημι
(11b16, 38, 12b3, 12, 15b9), ser contrario, contrariar a; y ἀντιστρέφω (2b21, 6b28, 37,
39, 7a4, 10, 13, 20, 23, 25, 26, 27, 30, 7b13, 12b22, 23, 24, 14a30, 33, 34, 14b11, 14, 17,
27, 29, 15a5, 9), reciprocar, ser contrario a, oponerse a. Respecto a los dos primeros
hemos traducido en concordancia con los substantivos oponer y ser contrario a,
respectivamente. Hemos incorporado a los anteriores el verbo reciprocar, que si bien en
español tiene un significado diferente, en griego clásico a veces se interpreta como ser
contrario a o ser opuesto u oponerse. Los tres verbos tienen en común el prefijo ἀντι, que
significa lo contrario, lo opuesto, lo inverso, lo recíproco.
De este modo, podemos sugerir la tesis que la dialéctica aristotélica gira en torno a estos
conceptos y estos verbos, tema que queda por investigar.
Notas al capítulo 12
1.1 La primera acepción de lo anterior está en relación al tiempo, que corresponde a la sexta
categoría enunciada en el capítulo 4.
1.2 Para tener una representación temporal desde la visión conjuntista podemos utilizar para
un fenómeno temporal un par ordenado, en el cual el primer término corresponde a algún
que-está-siendo y el segundo término es una determinación temporal, por ejemplo, una
fecha, una duración o algo similar. Por ejemplo, el conjunto de las fechas de nacimiento
de los perros estaría representado por el conjunto de pares ordenados del tipo {Pythias,
13.10.2013}, en donde el primer término representa una perra, Pythias, que tuvo una
fecha de nacimiento, el 13 de octubre de 2013. Entonces, lo anterior es una relación entre
dos elementos del conjunto de fechas de nacimiento de los perros, donde el par ordenado
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Aristóteles Las Categorías
{{, f},{, f}} A, si el perro tiene una fecha de nacimiento f y el perro tiene una
fecha de nacimiento f tal que
f – f > 0
Entonces el perro es anterior al perro .
1.3 Una pequeña digresión respecto al tiempo. Aristóteles utiliza respecto al tiempo la
partícula interrogativa ‘πότε’, cuyo sentido original es ¿cuándo? El significado de dicha
partícula la transforma Aristóteles de varios modos; en Las Categorías podemos
observar, por ejemplo, con el significado de tiempo (1b26, 2a2, 11b14); nunca; en ningún
tiempo (5b21, 13a8, 15a9); cuando; en el tiempo que (7b1); siempre; en todo tiempo
(7b10, ); lo temporal (11a36, ); como si nunca; sin embargo (11b12, 11b33); cuando
(12b12, 15b7); nunca (12b32, 13a14, 15a19). Es claro que este es un tema de
investigación.
1.4 Si bien lo anterior en el tiempo es intuitivo, también lo anterior en el espacio; pero el
autor no menciona el carácter espacial de lo anterior.
1.5 La relación con los números si bien interesante, desde un punto de vista conjuntista
merece un análisis más profundo, considerando como se definen los números y se
establece una teoría conjuntista de ellos. Tema de investigación.
1.6 Si bien los elementos de lingüística son interesantes (letras, sílabas, palabras, discursos)
no profundizaremos en ello.
2.1 Es interesante la relación que el autor establece entre lo real y el lenguaje. Así algo es
verdadero no por lo que se dice, sino porque en realidad lo es; y el decir viene después.
Lo real es anterior al lenguaje.
Notas al capítulo 13
1.1 Nuevamente es de inmediato intuitivo que lo simultáneo es una relación en el tiempo; en
efecto, para que algo sea simultáneo se necesita algo otro y un momento temporal. Aquí
parece ser necesario que sean pares ordenados aumentados en una variable, el tiempo,
pues si son simultáneos, deben generarse en un mismo instante. Nuevo tema de
investigación. También se puede investigar la generalización, esto es cuando tres, cuatro
o más eventos puedan ser simultáneos.
1.2 En el caso del capítulo anterior de los perros y , para que sean simultáneos se
requiere que
f – f = 0
1.3 Por ejemplo, en el caso de una elección, si está bien definida, habrá un ganador y un
perdedor (aunque el método diga que si empatan, se tira una moneda al aire) serán
simultáneos, pues al ganar uno, en ese mismo instante pierde el otro.
1.4 Es interesante la observación de Aristóteles sobre los simultáneos al comparar lo
simultáneo con la causa. Esto se da en estadística en la actualidad en el caso de los
coeficientes de correlación, que indica una correlación, como lo dice la palabra, pero no
una causa.
1.5 Es evidente que la intuición del autor falla, pues hoy a la luz de la teoría de la evolución,
los distintos animales no aparecen simultáneamente.
Notas al capítulo 14
1.1 El movimiento no aparece en la lista de categorías del capítulo 4. Luego, se podría
pensar que éste es una sección añadida o de de otra obra.
Además, pueden darse otros fenómenos que no están en la lista, y que posiblemente sean
muchos, por ejemplo, la atracción y la repulsión, entendiendo que pueden ser
movimientos y no movimientos, dos cuerpos se pueden atraer o repeler sin estar en
movimiento; aunque es difícil imaginarse algo en reposo absoluto, en general, cuando se
habla de no estar en movimiento, es un no estar en movimiento relativo, pero no absoluto.
Otros ejemplos no descritos podrían ser muchos fenómenos psicológicos (adicción,
fobias, etc.). Esto sugiere más bien el concepto de ser un capítulo extraño al cuerpo de la
obra.
Otro problema que surge de una primera lectura es la ausencia de definición; esto
implica tomar el significado del concepto movimiento de la vida cotidiana. Recomiendo
leer algo de la teoría de la relatividad de Einstein para compenetrarse del concepto de
movimiento.
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Aristóteles Las Categorías
Notas al capítulo 15
1.1 Aquí se da nuevamente un ejercicio de tipo lingüístico, en efecto, sobre los sentidos del
verbo tener; no se está hablando de una categoría.
2.1 Nótese que el verbo ‘ἔχειν’ significa tanto tener como tener un hábito.
Referencias
Damos las referencias que trabajamos directamente, en ellas se
encuentran las referencias canónicas a la obre de Aristóteles, que no
encontramos necesario repetir aquí.