PROYECTO: ORQUESTAS JUVENILES
REGIÓN DE AYSÉN
Marzo, 2012
1.‐ FICHA DESCRIPTIVA DE LA INTERVENCIÓN:
o Nombre: Orquestas Juveniles
o Región y comuna: Región de Aysén, comuna de Puerto Aysén
o Año de inicio y término:
Inicio: 2010 (piloto 2009)
Término: Marzo 2014
o Ámbito: Cultura
o Institución Aliada: Escuela Ribera Sur de Aysén
Beneficiarios directos: 30 niño/as y jóvenes entre 11 y 17 años de edad,
residentes en el sector Ribera Sur de Puerto Aysén y alumnos de la Escuela
“Ribera Sur”. Pertenecen en su gran mayoría a familias con altos niveles de
vulnerabilidad; gran parte de éstas están insertas en el Programa Puente y
son beneficiarias de Chile Solidario.
De los 30 alumnos de la Orquesta, 9 son considerados prioritarios por la Escuela
Esta ha sido evaluada el 2010 por el MINEDUC, clasificándola con un 90% de
vulnerabilidad por lo que es beneficiaria de diversos programas como el PAE de
la JUNAEB; el 95% de sus alumnos cuenta con alimentación escolar. Funciona
con jornada escolar completa lo que permite a los alumnos permanecer cerca
de 38 horas semanales en el establecimiento, otorgando protección a los
niños/as y jóvenes, dadas las situaciones de riesgo a las que se ven expuestas
por vivir en un sector que presenta graves problemas sociales.
Beneficiarios indirectos: corresponden a las familias de los alumnos y a
docentes de la Escuela que participan en el desarrollo de la intervención,
además de la población que asiste a las actividades y presentaciones artístico‐
culturales realizadas por la Orquesta, los que tienen la oportunidad de acceder a
eventos musicales realizadas por ésta.
Un rasgo que caracteriza a la región de Aysén es su importante nivel de aislamiento geográfico producto de
las dificultades de conectividad que tiene con el resto del país, además de sus problemas de conexión
interna. La situación de aislamiento ha condicionado de manera importante las posibilidades de desarrollo
económico y social de la región por lo que el Estado ha debido generar, políticas y planes especiales para
promover el desarrollo regional1 y así mejorar la calidad de vida de la población.
Es una de las regiones más extensas en territorio y la menos poblada
2
del país; con una superficie de 108.494 km es la tercera región en
tamaño, representando el 14,3% de la superficie del país. Cuenta con
una población estimada para el año 2010 (INE) de 104.843
habitantes, de los cuales el 71,9% se concentra en las comunas de
Coyhaique y Aysén y su densidad es de 0,96 hab/km².
Presenta dos modos de ocupación del territorio: el continental –
“tierradentro” y el litoral – insular. La población urbana es de 88.376
y la rural de 16.417, representando el 84,29% y 15,65 %,
respectivamente del total de la población regional2. Existe gran
presencia de población de la etnia mapuche, concentrada en las
localidades urbanas de Aysén y Coyhaique.
Por ser un territorio extremo, las condiciones de vida de las personas
enfrentan condiciones más adversas que para el promedio de la
población chilena, especialmente en términos climáticos y de
atención de servicios básicos. La principal dificultad está dada por el
elevado costo de vida de la zona y las limitaciones de conectividad
para el desarrollo de nuevas actividades económicas y de servicios y
la existencia de recursos humanos avanzados que presten servicios
básicos en salud, educación y otros.
La economía se basa en actividades primarias más bien de bajo desarrollo y escasa diversificación, que se
ven afectadas en su proyección por el aislamiento geográfico y los altos costos en el transporte de carga y de
pasajeros que esto implica. Presenta una economía con especialización en torno a actividades como la pesca,
la industria y en parte la minería, representando un tercio del PIB regional. Según al Informe Regional de
Actividad Económica correspondiente al periodo Julio – Septiembre del 2010, la región experimenta un
decrecimiento de 7,0% respecto a igual periodo del 2009, específicamente debido a las bajas en los sectores
de Pesca y Construcción, en tanto el rubro de la Industria Manufactura aportó de forma positiva a la
economía regional, especialmente por el aporte subsector de la Industria Pesquera3. (actualizar)
1
Las iniciativas más recientes corresponden al Plan Aysén generado por el actual Gobierno y las Políticas Especiales para
Territorios Aislados a cargo de la SUBDERE durante los Gobiernos de la Concertación.
2
Cartillas de Información Territorial, Región de Aysén. FSP, Propuestas País 2010.
3
Idem anterior.
Respecto a su nivel de desarrollo humano, la comuna de Aysén presenta un promedio más bajo (0,674) que
la comuna de Coyhaique, donde se aprecia en promedio el índice más alto de desarrollo humano (0,751).
Sin embargo, en el periodo 1994‐2003 muestra un cambio positivo en cuanto posición en el ranking
comparativo de DH a nivel nacional (‐56 lugares entre 1994-2003).
Del total de población, un 17,6 % se encuentra en situación de pobreza. Por otra parte, desde la perspectiva
de las Necesidades Básicas, Aysén al igual que el resto de las comunas de la región y sólo con la excepción de
la localidad de Coyhaique en donde no existe carencia, presenta niveles de carencia4 en diversas
condiciones: condiciones de la vivienda, acceso a servicios básicos y educación y otros, definiendo una
situación de pobreza y vulnerabilidad, en términos de los medios y recursos que disponen los sujetos para
enfrentar sus requerimientos básicos y posibilitar el despliegue de sus capacidades.
4
Cartillas de Información Territorial, Región de Aysén. FSP, Propuestas País 2010.
5
Planes Urbanos Estratégicos Región de Aysén, Diciembre 2011.
Un tercer elemento destacable es el aporte de la intervención a generación de espacios de encuentro y
sociabilidad, que están a la base del fortalecimiento del capital social. El desarrollo de prácticas artístico‐
culturales como es la música docta, no sólo incide en los mecanismos de integración e identidad, sino que
representa también un recurso para la acción6, que favorece el desarrollo de capital social, impactando
positivamente en el bienestar de las personas a través de la movilización de sus lazos de cooperación,
confianza y reciprocidad con otros, a través de una serie de prácticas comunitarias que permiten hacer
frente a la adversidad7.
Finalmente, la intervención constituye una experiencia que da cuenta de un trabajo colaborativo y articulado
entre diversos organismos del sector público y privado, a nivel local, regional y extra‐local, que aporta al
incremento en el stock de relaciones sociales de la Escuela y la Orquesta, sí como a la generación y
reforzamiento de confianzas; factores básicos para lograr mayores niveles de desarrollo y consolidación de la
Orquesta. El trabajo colaborativo con otros actores releva el papel del conjunto de la comunidad local en el
mejoramiento de las condiciones de vida de los sectores más desfavorecidos socialmente.
4.‐ EL PROBLEMA DE INTERVENCIÓN
Al año 2010 existen en el país más de 300 Orquestas Infantiles y Juveniles conformadas por niños y jóvenes
de sectores vulnerables. Los antecedentes de estas orquestas pueden encontrarse en los primeros conjuntos
6 Desarrollo Humano en Chile 2002. Nosotros los chilenos: un desafío cultural, Informe del Programa de las Naciones Unidas para el
Desarrollo, PNUD, Santiago, 2002.
7
A nivel local, se pueden encontrar algunas experiencias de la sociedad civil, que además de la línea terapéutica y la salud mental,
han apostado por hacer del arte una estrategia de acercamiento y recomposición del tejido social. En esa línea se enmarcan los
trabajos desarrollados por las escuelas de rock, que promueven la asociatividad, desde un interés común como es la música, y otras
experiencias que intentan generar espacios de acceso al consumo cultural, que han sido asumidas como preocupación de los propios
productores culturales, acercando su trabajo a quienes tienen menores posibilidades de adquirir bienes culturales. Es el caso de los
espectáculos populares gratuitos de bandas de música o conciertos de concertistas clásicos. (Agenda Municipal para la Superación de
la Pobreza. FPS, Capítulo Cultura, 2005.)
No obstante estos esfuerzos, y en un contexto de rápido surgimiento de nuevas orquestas, el diagnóstico
existente al año 2008 es que la mayoría de las Orquestas Infantiles y Juveniles del país presentan
importantes debilidades en el plano organizacional, de recursos profesionales especializados para la
formación musical de los niños/as y jóvenes, de recursos materiales e implementación instrumental, así
como en cuanto manejo de herramientas de gestión en los responsables de su conducción, todo lo cual
afecta su adecuado funcionamiento y limita su consolidación y desarrollo como espacios de formación
musical y de desarrollo social de los niños/as y jóvenes participantes.
Estas se sostienen y sustentan en el tiempo, gracias a esfuerzos individuales; acciones que responden a
voluntades personales y no a un trabajo planificado, y redes de colaboración o acciones conjuntas de
diversos actores sociales carentes de herramientas y apoyo técnico que facilite y/o promueva las
posibilidades de desarrollar un proceso tendiente a su sostenibilidad. Especial preocupación tiene para la
FOJI la situación de las Orquestas de comunas que por factores socio‐económicos, características geográfico‐
territoriales y factores institucionales ven agravadas propias debilidades, poniendo en riesgo su permanencia
y sostenibilidad, todo ello, con efectos negativos en los niños/as y jóvenes y en la comunidad local desde el
punto de vista de los objetivos de desarrollo social y de promoción artístico‐musical que se busca con éstas.
En este contexto es que el año 2009, la FOJI y la Fundación Superación de la Pobreza establecen un trabajo
colaborativo para llevar a cabo una experiencia piloto orientada a fortalecer el trabajo que desarrollan
algunas de las Orquestas Infantiles y Juveniles que funcionan en zonas más aisladas y vulnerables del país,
atendiendo las principales debilidades que éstas presentan en el plano de la formación musical,
fortalecimiento organizacional y autogestión, entre las que se encuentra orquestas de la región de Aysén9.
Así, el problema central que aborda la intervención con la Orquesta de la Escuela Ribera Sur dice relación
con la precariedad en que funciona en cuanto a recursos para la formación musical, situaciones psicosociales
que afectan la participación de los destinatarios y su permanencia en la Orquesta y, a la debilidad en la
organización y capacidades de autogestión, lo que configura una situación de alta vulnerabilidad y riesgos de
no sostenibilidad. Dicho problema se expresa en lo siguiente:
8
Informe de Gestión Fundación Orquestas Juveniles e Infantiles, 2011.
9
En este contexto es que durante el ciclo de intervención 2009 ‐2010 del Programa Servicio País se ejecutaron en Aysén, tres
experiencias piloto con Orquestas asociadas a tres escuelas básicas: Escuela Ribera Sur (30 niños/niñas) en la comuna de Aysén,
Orquesta Sinfónica Víctor Domingo Silva (50 niños/niñas) y la Orquesta Escuela de Música (15 niños/niñas) en la comuna de
Coyhaique. A partir de los aprendizajes de esta primera experiencia, durante el ciclo siguiente (2010‐2011), se definió continuar y
focalizar la intervención en la Orquesta de la Escuela Ribera Sur de la comuna de Aysén, con 30 niños/niñas como beneficiarios
directos.
10
A nivel familiar, el tipo de empleo que desempeña la mayoría de los padres y apoderados; en su gran mayoría trabajadores/as de
empresas pesqueras y trabajadores independientes, implica dejar a sus familias durante la mayor parte del día y/o la noche, lo cual
trae consigo el descuido involuntario de sus hijos y riesgos sociales de diverso tipo.
11
En términos de los ámbitos del bienestar, ésta se focaliza en los ámbitos de cultura y educación y tiene como foco la ampliación de
oportunidades educativas de niños/as y jóvenes en situación de vulnerabilidad social.
12
Esta técnica, que registra el discurso del individuo a lo largo de su proceso, puede ser efectiva en tanto permite visualizar los
cambios y avances que el mismo va reportando.
13
Según las características de la problemática, su complejidad y los niveles de vulneración que podamos encontrar determinaran el
curso a seguir, pero se contempla el trabajo coordinado con instituciones especializadas en caso de que fuera necesario, esto es:
Instituciones de salud mental, judiciales, etc.
14
Cuando una Orquesta mejora su nivel musical se le abren espacios y oportunidades, así también esto se constituye en un
aprendizaje grupal significativo.
Inserción en el Motivación de la
territorio y la Vinculación con actores participación padres;
Escuela y primer locales y gestión de Talleres y charlas sobre
vínculo con la recursos para la programas y subsidios
Orquesta implementación a públicos.
Asesoría en
Escuela y primer vínculo
con la Orquesta postulación a
fondos
Apoyo y concursables
acompañami‐
ento directo
de casos
15
Matriz de Diseño Ámbito de Cultura Servicio País 2011
En la línea de acercamiento a las políticas por las familias y la comunidad:
Realizar talleres informativos a alumnos, profesores y apoderados para la mejora del entorno
familiar.
Realización de actividades recreativas para la integración de los niños y apoderados de la orquesta.
Postulación a becas y beneficios disponibles.
Realizar talleres motivacionales, de habilidades sociales y autoestima a los alumnos.
Identificación y/o derivación de casos de alumnos con situación de vulnerabilidad social.
d) Aliados estratégicos y proyección de las alianzas (a refrasear y vincular con “nodos”
identificados)
(2010 – 2011)
‐ Departamento de Educación de Aysén: Encuentro de Orquestas y gestión de recursos para participación de
alumnos en capacitaciones de la FOJI.
‐ Consejo de la Cultura: Información y difusión del trabajo de las orquestas.
‐ Medios de comunicación: difusión de las distintas actividades de las Orquestas.
‐ JUNAEB: coordinación para la realización de Charlas sobre becas.
‐ DIBAM: Gestión de capacitación digital para alumnos de la Orquesta Ribera Sur.
‐ Municipalidad de Coyhaique y Aysén: Gestión de recursos para distintas iniciativas de las orquesta
(beneficios, capacitación, encuentros)
16 Existen estudios que muestran que la exposición temprana y constante a ciertos estímulos musicales favorece el desarrollo de la
estructura de interconexión cerebral y del desarrollo lógico. Esto es lo que se conoce como efecto Mozart.
17 Son muchas las experiencias que a nivel mundial y nacional que utilizan el arte como parte de las terapias para subsanar traumas y
experiencias de violencia o adicciones.
18
Circo del Mundo, Crearte, Patios Culturales, Servicio País Cultural
19
Para ello se realizan talleres y charlas de difusión e información sobre beneficios sociales del Estado y acciones de facilitación para
la vinculación con el Municipio, además de la elaboración de entrevista a apoderados para preparación de informes sociales de los
alumnos y otros documentos, para postular a beneficios, junto con acompañamiento y apoyo psicosocial directo a niños.
En síntesis, existe una significativa correspondencia entre los resultados y logros obtenidos a la fecha
y los objetivos que estaban propuestos, pese a la existencia de obstaculizadores importantes.
Queda, por tanto, seguir reforzando las capacidades de autogestión de la Orquesta, a través de
estrategas de mayor empoderamiento de la Agrupación Cultural y de una mayor participación de los
destinatarios.
7.‐ EL ROL DEL PROGRAMA SP
En el marco de un trabajo interventivo que implica una vinculación e interacción cotidiana entre los
profesionales SP y los destinatarios finales e intermedios, los profesionales cumplen roles de capacitación y
formación, de apoyo psicosocial y de asesoría e intermediación para el acceso a nuevas oportunidades.
El apoyo social y psicosocial involucra la entrega de servicios de orientación social e información a las
familias de los alumnos y la facilitación de información para el acceso a beneficios sociales. Para ello se
realizaron entrevistas con cada uno de los apoderados para identificar situación social familiar y casos
específicos de vulnerabilidad social. Para identificar requerimientos de apoyo social, se realizaron visitas
domiciliarias a las familias de los integrantes de las orquestas, lo que permitió conocer y visualizar la
realidad e identificar necesidades de cada uno en su propio contexto. Se elaboró, además, una ficha con
antecedentes de alumnos y apoderados y se gestiona y coordina por los PSP la ejecución de charlas sobre
becas y beneficios para los integrantes de la orquesta (beneficios JUNAEB, Becas entregadas por FOJI). Se
realiza, además, acompañamiento de casos sociales.
La asesoría e intermediación para el acceso a oportunidades de desarrollo incluyó la coordinación y
colaboración para la realización y participación de los destinatarios en eventos artísticos. Se entregó apoyo
para el Encuentro Binacional de Orquestas‐Octubre 2009; encuentro organizado por la Orquesta Sinfónica
Víctor Domingo Silva donde participaron la Orquesta Ribera Sur de Puerto Aysén, la Orquesta de Cámara de
Punta Arenas, Orquesta Juvenil Trelew y Orquesta Juvenil Río Gallegos, Además, el equipo de profesionales
presta apoyo en la coordinación de eventos musicales y coordina con medios de comunicación comunales
para la difusión a la comunidad.
Se realiza también la Intermediación de recursos para la formación instrumental, que incluyó un programa
de videoconferencias para instrumentos de madera y bronce, Encuentros de Instrumento; seminarios de
instrumento en Santiago. La gestión de los Profesionales de Orquestas Juveniles permite, por primera vez, la
En el estudio del PNUD del 2002, se señala incluso que la distribución del consumo cultural es aún más
desigual que el del nivel de ingresos, que ya es en sí mismo uno de los peores indicadores en términos de
desarrollo social que presenta el país. “El quinto quintil es el que lleva el mayor consumo de cultura, mayor
al que le correspondería por su peso en cuanto a ingresos. En cambio, los cuatro primeros quintiles gastan
en cultura menos que lo que les correspondería por su peso en recursos” (Desarrollo Humano en Chile 2002,
p. 177). Esto también responde tanto a una priorización económica particular de cada quintil, como también
a los sistemas de oferta con que opera la “industria cultural”, en donde la actividad cultural se concentra en
ciertos puntos centrales de la urbe o comuna, dificultando el acceso de los sectores pobres y vulnerables21.
Políticas públicas locales y el desafío de la sostenibilidad y autogestión
La sostenibilidad de iniciativas innovadoras como la impulsada por la intervención y su ampliación a otros
sectores vulnerables del país, lleva a reflexionar respecto de las políticas públicas de cultura a nivel nacional
y local, y de cómo éstas pueden contribuir a potenciar las políticas y acciones orientadas a superar de
manera sostenida situaciones de pobreza de carácter diverso que afectan a sectores importantes de la
población.
En este sentido, entre otros temas de reflexión que se plantean a partir de la intervención Orquestas
Juveniles”, es el relacionado con el rol y aporte que los distintos actores presentes en el territorio tienen en
el desarrollo local, donde un elemento central es el cómo se integra la dimensión cultural en las políticas
públicas, nacionales, regionales y locales22; es decir, las formas de integración de los valores, prácticas,
significados, disfrute, historia e identidades particulares de cada territorio, en las acciones públicas para
promover el desarrollo social. En este sentido, el desarrollo de iniciativas como la de Orquestas Juveniles en
donde confluyen esfuerzos y objetivos comunes de interés público, requiere de un marco de
implementación más robusto que debe estar dado por una política pública a nivel nacional, regional y local
que reconozca en la dimensión cultural un campo de variados aportes al desarrollo más integral de las
20
El consumo de los bienes y servicios culturales está segmentado socialmente, situación que se ve reforzada por la fuerte tendencia
a la atomización del consumo cultural, aumentando el peso del factor ingreso en el acceso a este tipo de bienes
21
Las posibilidades para acceder a eventos y bienes culturales (espectáculos de arte –música, danza, teatro, cine, exposiciones
plásticas – o acceso a libros, discos, videos o lugares patrimoniales, por mencionar algunos), así como a servicios de producción
artística o deportiva (talleres y cursos), dependen en gran medida del nivel de ingresos de las personas y su capacidad para destinar
parte de los mismos a cubrir otras necesidades que vayan más allá de la subsistencia, o dedicar parte de su tiempo productivo al
desarrollo de estas actividades21. De hecho, la Encuesta de Consumo Cultural (INE‐ Consejo Nacional de la Cultura, 2005) constata
una gran desigualdad entre los diferentes grupos socioeconómicos, con la única excepción de la música y la televisión, en que el
acceso está más democratizado. (Definiciones de política cultural 2005‐2010, Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, mayo 2005).
22
Aún cuando la Ley Orgánica Constitucional de Municipalidades indica en su Artículo 1° que éstas poseen entre su cometido el
desarrollo cultural de la población, en el resto de la normativa la cultura no constituye un ámbito con tratamiento exclusivo. De este
modo, se le concibe asociado al ámbito de la educación, como una de las funciones compartidas municipales o al Departamento de
Desarrollo Comunitario22.
Políticas públicas locales e integración de la dimensión sociocultural
En materia de políticas socio‐culturales, en el universo de actores de las políticas públicas locales destaca el
Municipio como el principal espacio desde donde la sociedad civil puede participar en la construcción de la
trayectoria cultural y social de su localidad25.
Como agente y principal responsable en la generación de dinámicas de desarrollo local.26, la forma en que el
Municipio integre la dimensión cultural en las políticas locales constituye un factor relevante en el logro de
objetivos de desarrollo social. Este potencial de la acción municipal radica, en definitiva, en la capacidad de
coordinar y liderar el proceso de desarrollo local, integrando la dimensión cultural como un eje central de su
quehacer. Para hacer posible esto se requiere de acciones de política pública nacional que fortalezcan la
descentralización de la gestión pública y el trabajo cultural y promuevan a la vez la comprensión del ámbito
cultural como un espacio donde se hace posible la promoción del desarrollo social.
Para lo anterior, resulta imperativo que las municipalidades conciban las políticas culturales como un
aspecto clave del desarrollo local, y que las actividades en este ámbito —lejos de constituir sólo la gestión
eficiente de eventos particulares— constituyan instancias de desarrollo local, participación ciudadana e
integración comunal. Por otra parte, es fundamental se continúen apoyando y ampliando iniciativas como de
23
En coherencia con lo anterior, se plantea que el Estado debe formular políticas culturales, pero que su acción debe procurar ser
más bien subsidiaria, no interviniendo en forma directa en materia de cultura a excepción de los ámbitos en que sea necesario para
garantizar los derechos culturales de los ciudadanos.
24
Alfons Martinell, La Gestión Cultural: singularidad profesional y perspectivas de futuro. UNESCO. 2001
25
La ley de orgánica municipal establece como finalidad propia de la naturaleza de los municipios la promoción cultural, en un rango
equivalente a los otros ámbitos centrales de su gestión: el progreso económico y social de las respectivas comunas (art. 1, inciso 2º,
Ley orgánica de Municipalidades, Nº 19.806). Para esos objetivos, la misma ley le otorga a los municipios una serie de atribuciones,
que debieran verse reflejadas en el plan comunal de desarrollo (art. 7). Sin embargo, según un estudio del Consejo Nacional de la
Cultura y las Artes, la mayoría de los municipios no cuenta con una orgánica especializada para gestionar la cultura ni se la considera
como un componente clave de la estrategia de desarrollo local, por lo que en un marco de función compartida junto a educación,
deporte o dentro de las otras funciones del Departamento de Desarrollo Comunitario, pierde prioridad, visibilidad y capacidad de
impacto.
26
el Artículo N° 1 de la Ley Orgánica de Municipalidades plantea que “son corporaciones autónomas de derecho público, con
personalidad jurídica y patrimonio propio, cuya finalidad es satisfacer las necesidades de la comunidad local y asegurar su
participación en el progreso económico, social y cultural de las respectivas comunas”.19
27
Agenda Municipal para la Superación de la Pobreza, Capítulo Cultura. FSP, 2005