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Pilar Gonzalbo Aizpuru

LA HISTORIA DE LA FAMILIA EN IBEROAMÉRICA

Difícilmente pueda enfrentarse el estudio de la historia de la familia con total objetividad. Muchos problemas
que hoy abruman a nuestras sociedades y muchas injusticias y desigualdades se relacionan con las relaciones
familiares en el pasado y el presente. Ejemplo: familia y migraciones, familia y caciquismos locales, familia y
procesos de modernización, etc.
Complejidad de problemas que no sólo son históricos, sino también sociales y sobre todo actuales.
El estudio de la familia es mucho más que un ejercicio erudito o una curiosidad marginal: el hombre en
sociedad es el hombre miembro de una familia y de una comunidad, es quien hace la historia, pero nunca
solo, nunca indiferente a los problemas de su tiempo, y el hogar es su referente inmediato de cualquier
situación.
Bibliografías regionales: existencia de situaciones comunes y de problemas particularmente inquietantes. El
tema que subyace en gran parte de los textos sobre familia en América Latina, que es también uno de los
primeros que se abordaron en la historiografía, la familia y la pobreza. El segundo tema es el de la diferencia
entre el medio urbano y el rural, lo que también implica la contraposición criollo-mestizo, frente a indio-
mestizo o indio-mulato.
La familia no sólo es el refugio de la tradición y símbolo de inestabilidad, sino también impulso de movilidad
y recurso de adaptación. Por eso los estudios de migraciones, el análisis de los cambios demográficos y el
conocimiento de los momentos de estabilidad y de crisis son inseparables de los anteriores.
Pregunta acerca de las enormes diferencias socioeconómicas y culturales. Orígenes y evolución de ese
desnivel, la justificación remota de esa segregación es otra permanente pregunta que nos lleva a las más
obvias: ¿Cuándo, cómo y porqué se consolidaron los grupos oligárquicos? ¿Qué estrategia permitió el
establecimiento de estrategias perdurables? ¿Cómo reflejan las peculiaridades regionales estas formas
solapadas de poder hegemónico?
Núcleo del tema: complejo de relaciones entre la estructura y el funcionamiento de la familia, su composición
y arraigo en la sociedad, la jerarquización dentro del grupo doméstico, la correspondencia de las respectivas
obligaciones y derechos, y la responsabilidad compartida en el desarrollo de estrategias de supervivencia o de
consolidación del poder económico y del prestigio social.
Otros temas: mujeres y su desempeño en el hogar, en la sociedad y en el mundo laboral, a través de los niños,
a través de la sexualidad, y a través de las transformaciones de la modernidad, hacia un mundo
progresivamente más urbano, más industrializado y más individualizado.

Errázuriz y Eyzaguirre (1903): Con un enfoque antropológico, detectaron aspectos fundamentales de la


familia como objeto de estudio y la analizaron como institución y organismo vivo, como complejo de afectos
e intereses y como espacio para el desarrollo individual de sus miembros.
Gilberto Freyre: relación entre la economía y las formas de convivencia. Casa grande: es un símbolo de
dominio y esa amplia parentela está integrada por las huestes que obedecen al padre y señor.
Salvo éstas y algunas otras excepciones la historia de la familia no interesó a los investigadores
latinoamericanos hasta hace poco más de treinta años. No es casualidad que todos los países coincidan en esta
carencia hasta la década de 1970; por esta época, como un eco de las innovaciones de la historia europea, la
demografía histórica ofreció valiosas aportaciones a la vez que se generalizaban los estudios sobre familias de
grupos hegemónicos: la nobleza, los comerciantes, los hacendados, etc. Por diversas razones el interés por
estas familias se mantiene a lo largo de los años.
Puesto que los nobles solían ser simultáneamente hacendados y negociantes, entre unos y otros se tejieron las
redes que aseguraron su poder y les permitieron mantener su posición aún después de la independencia y a lo
largo del siglo XIX:
Hacia 1980, la historia de las mentalidades inició estudios sobre la familia que se desarrollarían más
ampliamente en la última década. Al mismo tiempo la demografía histórica se aproximó a los intereses de la
historia social logrando una combinación exitosa. Inicio también, de los trabajos de recapitulación y reflexión,
de obras colectivas.

Amancebamiento y concubinato no eran en absoluto excepcionales durante el período colonial, mucho menos
frecuentes y representativos eran los casos de bigamia, homosexualidad, solicitación, e incluso prostitución.

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Ilegitimidad como fenómenos constante, extendido en todos los niveles socioeconómicos, y perdurable a
través de los años. Ejemplo: Ann Twinam, expedientes de solicitudes de legitimación mediante el régimen de
“Gracias al sacar”, entre la segunda mitad del siglo XVIII y las dos primeras décadas del siglo XIX. Relación
con el reconocimiento social. Concepto de “calidad”. Cifras que reflejan las diferentes experiencias de
convivencia social y los diferentes grados de discriminación derivados de un creciente afán de distinción
motivado por prejuicios crecientes, siempre en contra de los negros y sus castas, cuando los grupos
hegemónicos creían amenazados sus privilegios.
Ensayos sobre la familia en Brasil destacan la importancia de los negros. Componente social y cultural que
determinó al mismo tiempo la forzosa proximidad y los intentos de evitar una estrecha convivencia mediante
la práctica de un rechazo que la costumbre alentaba y la ley legitimaba.
Aunque en toda la América española se produjeron intentos de segregación, la práctica fue muy diferente
según las regiones y las épocas.
Mujer: Protagonista indiscutible de la vida familiar. La madre de familia fue también la proveedora de
recursos para el sustento familiar, la jefa del grupo doméstico y la responsable de la continuidad de valores y
costumbres entre los que se contaba el arraigado patriarcalismo y el respeto a la autoridad masculina.
Patriarcado: tal como se interpretó y se puso en práctica se convirtió en el machismo que tantas sociedades
padecieron y que en tantas otras prevalece.
Muy poco podemos conocer de los niños; los documentos son escuetos cuando deben informar acerca de
ellos. Alta mortalidad infantil hasta finales del siglo XIX. Protocolos notariales que hablan del trabajo como
aprendices y de los contratos como sirvientes.

Cambios de la modernidad afectaron las relaciones familiares al menos desde que los monarcas y sus
ministros ilustrados en España y Portugal introdujeron reformas destinadas a disminuir la influencia de la
Iglesia, sustituida por el control del estado. Mantuvieron la misma tendencia los gobiernos liberales del siglo
XIX.
La familia nuclear fue la más común en todos los países y regiones, pero hubo otras formas de convivencia,
dependientes de la situación económica más que del origen étnico y de la ubicación geográfica tanto como de
las tradiciones culturales.

Migración: se aprecia desde el origen la influencia de grupos de parentesco más que la improvisación de
aventureros libres de todo lazo. La migración fue el origen de las formas familiares americanas. En los dos
virreinatos del siglo XVI es evidente la presencia de parientes en las empresas de conquista y repoblación.
Relaciones estratégicas. Pocos trabajos se refieren a migraciones modernas en relación con la familia.
El gran auge de algunas familias como dueñas del poder político y económico se produjo en la crisis colonial
y no como supervivencia de los viejos linajes, sino como consecuencia del debilitamiento del poder de la
metrópoli frente a la prosperidad de empresarios particulares. Una sabia distribución de los recursos
familiares entre los negocios, la política, la Iglesia y la vida social, permitió a unas cuantas de estas familias
conservar y acrecentar su poder a lo largo del siglo XIX.
En Brasil, como en Hispanoamérica, el esplendor y la ruina de las familias dependió de la prudente
administración del patrimonio mediante estrategias matrimoniales, profesionales y de inserción en los medios
influyentes.
Actitud de discriminación: durante la segunda mitad del siglo XVIII la discriminación existió entre los
blancos acaudalados y tuvo un componente racial. Hablar en general de segregación es por lo menos una
ligereza. Diferencias de grado y cualitativas.

[Pilar Gonzalbo Aizpuru, “La historia de la familia en Iberamérica” en Sin distancias. Familia y
tendencias historiográficas en el siglo XX, pp. 47-60.]

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