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INFORME DE LECTURA

La Persona que Soy:


El hombre desde la perspectiva Bíblica
De Les Thompson

Por:
Luis González Bravo

Informe de lectura presentado para cumplir los requisitos parciales de la disciplina de


Teología Sistemática II, enseñada por el profesor Pr. Sebastián Menay

Seminario Teológico Presbiteriano


Sede Concepción

Concepción-Chile
2016
RESEÑA CRÍTICA
El texto es un amplio estudio de antropología Bíblica, en el que el autor desarrolla
una panorámica desde Adán hasta el Reino Venidero. Tres aspectos se desarrollarán a partir
de las propuestas del autor del texto.
El hombre como creación de Dios, tiene inserta en él la imagen de Dios. El origen
del hombre ha de hallarse en el relato histórico y verídico de la creación. Ese es el
comienzo del hombre en la historia. Las Escrituras lo señalan claramente y bajo ningún
punto de vista puede considerarse el relato de génesis como una ilustración, sino como una
fuente absoluta y verdadera de la revelación de Dios.
Por tanto el hombre fue dotado de plenas capacidades, hecho en absoluta perfección
y con capacidad aun de elegir contra su propia naturaleza. El hombre es un ser natural,
espiritual, material, práctico, con racionalidad, es un ser moral y un ser social.
Dios creó al hombre e insertó su imagen en él. Lo dota con capacidades plenas y
dominio sobre los animales y el resto de la creación. No obstante lo anterior el hombre
pecó, cayó del estado original de absoluta perfección. ¿De dónde pudo provenir la maldad?
En Génesis 3 se relata la tentación y caída del hombre, por la desobediencia a un mandato
expresamente señalado en el capítulo anterior, no comer del árbol de la ciencia del bien y
del mal inserto en medio del huerto. Sin embargo otra figura asoma, conocida como el
Tentador, la serpiente astuta, también creada por Dios y expulsada de su reino por su
rebelión, insta a la mujer y por vía de la consecuencia, al hombre para comer del fruto del
árbol. Según el autor la semilla del mal crece en el corazón de Eva cuando cuestiona el
carácter y derecho de Dios de poner el árbol en el Huerto.
Las consecuencias del pecado, provienen primero de sus causas, comer del fruto del
árbol, ¿Por qué lo hicieron? Por infidelidad, por rebeldía y por orgullo. Las consecuencias
son anunciadas en las Escrituras: la muerte, la separación de Dios y la expulsión del Edén.
Ahora toda descendencia de Adán está contaminada por el pecado y separada de Dios. El
mal reside en el hombre y por este debe pagar. Sin embargo en Génesis 3:15 se encuentra la
gloriosa promesa del Mesías, quién finalmente vino a traer redención, y fue puesto en lugar
de propiciación por nuestros pecados. A fin de que el hombre sea regenerado y el diseño
original del hombre sea restaurado de manera progresiva, toda vez que sea moldeado a
imagen y semejanza del Unigénito Hijo de Dios, Cristo el Señor.

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