de muchas interacciones que son muy necesarias y a su vez son inevitables, que
ellas producen afectos de todo tipo y que puedo canalizar y coordinar estos
fenómenos dinámicos a favor de un mejor resultado educativo, tanto en lo
cognitivo, como en lo actitudinal y seguramente en lo procedimental, en cuanto
los cambios de conducta esperados sólo ocurren y son duraderos si son asumidos
por el colectivo del aula, por el grupo social.