 ¿Puede un Dios Santo, que aborrece el pecado que no da por inocente al culpable recibirnos

y cambiar nuestra vida?

 ¿Es posible que Dios se fije en nosotros sabiendo todo lo que hemos hecho y lo que somos
hoy?

 Muchos creyentes y los que no lo son, piensan que los buenos pueden alcanzar
misericordia del Señor y ser recibidos por Él cómo sus hijos.

 Declaraciones como: La religión no es para mí, es para los buenos, para las personas de
bien.

 Concluyen: la Iglesia no es para mí.

 Pero por otro lado están religiosos o legalista, Que suelen decir: Que va cambiar este, es el
mismo diablo etc… Y se creen a si mismo superiores moralmente que los demás.

En cualquiera de los casos descritos hay una esperanza que puede alegrar y cambiar tu vida
cambiando tu manera de Pensar. Por esta razón quiero compartir con ustedes el siguiente tema:
Jesus y el poder de su Palabra.

El Evangelio de Lucas tiene por propósito presentarnos de manera ordenada lo que Jesus
comenzó hacer y a enseñar Hechos 1:1, pero también para declarar la veracidad de todos los
hechos realizados por Jesus. Lucas 1:4

Lucas fue un discípulo de Pablo, quien le llamaba el Medico amado, un hombre instruido y
preparado. Col 4:14

Lucas escribe su evangelio a Teófilo cuyo nombre significa el amado de Dios. La Biblia no dice
nada acerca de este hombre, solo sabemos que fue un gentil, (No Judío) quizás alguien
Respetable u Honorable, ya que Lucas se dirige a él de la siguiente manera “Oh Excelentísimo
Teófilo”. Lc 1:3

Lucas compuso una obra de 2 tomos El evangelio que lleva su nombre y el libro de Hechos de los
Apóstoles

Contexto

El evangelio de Luca narra la historia de los hechos y de las enseñanzas de Jesus y cómo
Cristo mediante el poder de su Palabra trasformo la vida de muchos que sufrieron diversas
enfermedades y aflicciones espirituales

Usted puede ver en Lucas 4 y 5 una serie de milagros que significo la liberación de las aflicciones y
tormentos de muchas personas que fueron sanadas por Jesus mediante el poder de su Palabra.
Pero mayor impacto fue cuando Jesus manifiesto su Poder mediante autoridad y el poder de su
Palabra para perdonar pecados. Según Lucas 5:17-26 y así también se manifiesta en el texto que
acabamos de leer.
 1. Jesus nos llama mediante el poder de su Palabra
27Después de estas cosas salió, y vio a un publicano llamado Leví, sentado al banco de los tributos
públicos, y le dijo: Sígueme.

Es el efecto sobrenatural de su palabra por sobre nuestra voluntad.

Todo el pueblo sabía quién era Levi, muchas personas le habían visto como un recaudador
de impuesto, como un usurero, como un traidor a la patria porque cobraba los impuestos a sus
hermanos para las arcas imperiales de Roma. Jesus sabía quién era Levi, pero Jesus no le pregunto
a Levi quien era, simplemente se acercó a él y le dijo: “Sígueme”. Mateo o Levi no estaba preparado
para recibir a Jesus, pero si Jesus tenía un plan para Levi y estaba preparado para recibirle. Porque
el ministerio de Jesus nunca fue circunstancial, Jesus vino a este mundo de manera intencional,
sabiendo todo lo que debía hacer y con quienes se debía juntar y a quienes debía salvar.

Jesus tuvo todo el derecho de preguntar a Levi quien era. El Santo de los santos podría
haberle increpado por su vida pecaminosa y malvada. Pero no lo hizo, simplemente le dijo: Sígueme

Es interesante que Jesus viene a nuestra vida, no esperando que nosotros estemos
preparados para recibirle, el simplemente llega en la condición que estamos. No te pregunta quién
eres, porque sabe quién eres, ni lo que hiciste, porque saber lo que has hecho, o lo que estás
haciendo, porque él lo sabe, él te llama y te dice: Sígueme. Jesus sabe quiénes somos, lo que
hicimos y lo que estamos haciendo. Nada escapa a su conocimiento, tu vida ni mi vida no es una
sorpresa para él. Aun con todo Jesus te está haciendo una invitación categórica: Sígueme

2. El poder de su Palabra es Irresistible, eficaz y transformadora.

28Y dejándolo todo, se levantó y le siguió. 29 Y Leví le hizo gran banquete en su casa; y había mucha
compañía de publicanos y de otros que estaban a la mesa con ellos.

Levi respondió de manera instantánea, ni siquiera se detuvo a pensar acerca de este asunto.
Basto una sola Palabra de Jesus para cambiar la vida de un hombre que estaba inmerso en la
corrupción y en el pecado. Y notemos los efectos de la Palabra de Jesus:

Primero Levi dejó todo se levantó y le siguió, Levi fue transformado por Jesus para ser su
discípulo, posteriormente Escribió su evangelio que lleva su nombre. Los efectos de la palabra de
Dios sobre la vida de un pecador son impresionantes, algo que no es posible medir y calcular. Jesus
dijo una sola Palabra y trastorno completamente la vida de un Hombre.

Después vemos que esta Palabra Irresistible trajo alegría a su corazón: Levi hizo una gran
fiesta en su casa para Jesus, Levi hizo una gran celebración por su salvación un hombre que quizás
lleno de problemas y prejuicios sociales y con muchos pecados sobre sus hombres, viene Jesus a
su encuentro y basto una sola Palabra para cambiar su vida completamente.

A continuación como la Palabra de Dios tuvo sus efectos irresistibles en otros publicanos
pecadores igual que Levi que vinieron a la mesa para estar con Jesus.

Jesus te está llamando, él te dice: Sígueme. El efecto de este poderoso mensaje puede traer
una gran bendición en tu vida y en tu entorno, no tenemos ni idea de lo que puede el Señor hacer
con nuestra vida. Su Palabra nunca vuelve vacía, siempre produce un efecto poderoso en nuestras
vidas, si creemos en ella.
 3. El poder de su Palabra nos libera de los prejuicios sociales y religiosos
30Y los escribas y los fariseos murmuraban contra los discípulos, diciendo: ¿Por qué coméis y bebéis
con publicanos y pecadores?

En realidad los Escribas y los Fariseos estaban indignados porque Jesus junto con sus
discípulos estaban en un festín con los Publicanos y pecadores. Acá el texto no da otra información
Jesus junto con sus discípulos no solo estaba con los publicanos que ya eran considerados malos y
perversos, sino que también habían otros pecadores, quizás prostitutas, adúlteros, ladrones etc…
Lo que podamos imaginar. Jesus estaba de fiesta con todos ellos y ellos con Jesus.

Pero esta situación provocó la indignación de aquellos líderes religiosos convencidos de su

propia justicia y bondad.

Los Escribas y Fariseos fueron los principales líderes religiosos del pueblo de Israel. Los
Escribas se dedicaban hacer copias de la Ley de Moisés y del resto de las Escrituras, fueron
conocedores de la ley, La secta de lo fariseo fue el grupo más influyente de la sociedad judía y ellos
hacían valer la tradición. Y la tradición de los Judíos les enseñaba que no debían juntarse con los
publicanos y con los pecadores, como también con los leprosos etc… Ellos pensaba que haciendo
cumplir aquello gozaban del favor de Dios y de su aprobación, ellos se tuvieron a si mismo por puros
e incontaminados. El resto, los pecadores eran dignos de la condenación y de la ira de Dios.

Lamentablemente así pensamos o tendemos a pensar cuando nos comparamos con otros.
Aun cuando somos cristianos con el tiempo a veces olvidamos quienes fuimos y de donde nos sacó
el Señor, y comenzamos a creer que nuestra justicia es superior a la de los demás, a veces
pensamos que somos mejores que los demás. Y comenzamos a juzgar basado en nuestras
categorías morales.

4. El poder de su Palabra cambia nuestra perspectiva del mundo hacia una cosmovisión
compasiva.
31Respondiendo Jesús, les dijo: Los que están sanos no tienen necesidad de médico, sino los
enfermos. 32 No he venido a llamar a justos, sino a pecadores al arrepentimiento.

Es interesante que Jesus acá se compara con un médico, y ve a los pecadores y perdidos
como pacientes que necesitan ser sanados, más que condenados. No ve a los pecadores como sus
enemigos sino como sus amigos y siente compasión y dolor por su condición espiritual. Jesus sabe
perfectamente cuál es nuestra enfermedad y el no vino para dejarnos morir en esta condición.

Ahora esta manera de responder puede ser entendida de la siguiente manera: Jesus no vino
para los que se creen buenos o Justo, sino para los que son pecadores y miserables y que
irremediablemente su destino será el infierno. Pero como dice Pablo en Romanos 5:9 que cristo
vino para liberarnos de la ira de Dios, del infierno mismo.

De esta manera Jesus cambia nuestra perspectiva. Porque nos enseña a mirar a nuestros
semejantes con compasión y misericordia. El propósito de su venida es que mediante el poder de su
Palabra busca transformar la vida de un pecador, cambiar su mentalidad para hacerlo su discípulo y
seguidor.