Expone que el bien y el mal no tienen ningún sustento, como defiende la moral
tradicional, en una realidad trascendente (p.e. el mundo de las ideas platónico o
Dios). Nietzsche propone el método genealógico que permite estudiar cómo
surgieron los conceptos morales y como se impusieron como valores aceptados por
todos a partir de la fuerza del grupo social que los propone. Entiende que la
voluntad de poder está detrás de la imposición de unos valores morales sobre otros.
La crítica a este modelo moral y su demolición son por lo tanto fundamentales para
el desarrollo de la vida entendida como voluntad de poder.