ARQUITECTURA CONTEMPORÁNEA
(PARTE II)
23 AGOSTO, 2017CENTROALUM
Al este del país, en las ciudades de Harbin, Huzhou y Pekin destacan tres edificios por sus curvaturas. Una ópera, un hotel de
lujo y un conjunto de oficinas, centros comerciales y espacios de entretenimiento constituyen estas construcciones. En ellas, el
aluminio forma parte de los materiales de construcción para los revestimientos de sus fachadas.
Cada día se busca más el desarrollo sostenible de las edificaciones. Construcciones que se fusionen mejor con la naturaleza y
que tengan un menor impacto en el medioambiente. Para ello, el aluminio es uno de los materiales de construcción más
adecuados gracias a que es 100% reciclable.
Sin perder ninguna de sus propiedades, el aluminio respeta el medioambiente y aporta unas altas prestaciones en aislamiento y
corrosión, ideales para el desarrollo de edificios y la arquitectura sostenible. Estos tres ejemplos se fusionan con el paisaje
natural desde múltiples perspectivas.
Ser humano, arte, naturaleza e identidad en la Harbin Opera House
En la ciudad china de Harbin se alzan 79.000 m2 de una nueva ópera diseñada por el estudio de arquitectura MAD Architects.
Con cinco volúmenes de formas orgánicas unidos por pasarelas y puentes peatonales, este proyecto se define como
‘cuvilinealidad continua’. Su diseño se inspiró en las curvas de elementos del paisaje natural y su interior está lleno de espacios
abiertos.
Los anillos concéntricos que rodean las estructuras metálicas del complejo están
revestidos con aluminio para un mayor aislamiento. Gracias a este material, entran la sombra y la iluminación adecuadas a
través de las ventanas del Galaxy Soho. Unas propiedades que le han hecho conseguir la calificación LEED Silver de
arquitectura sostenible.
¿Sabías que hubo una época en la que el aluminio era tan preciado como el oro y la plata?
En el siglo XIX, el aluminio era un símbolo de poder y riqueza de difícil extracción. Los nobles lo
utilizaban en su día a día hasta que se descubrieron nuevas técnicas de purificación y accedió al
mercado de múltiples industrias.
En las últimas décadas el aluminio ha entrado a formar parte de la creación de edificios de la arquitectura contemporánea. Aquí
te dejamos su aportación en tres construcciones en Reino Unido, Japón y Estados Unidos que puede que conozcas.
Con un distintivo diseño que lo diferencia del resto del proyecto del Centro Comercial Bullring, del que forma parte, el Edificio
Selfridges se construyó sobre una gran estructura de acero. Su fachada curva de hormigón pulverizado está compuesta de 1500
discos de aluminio anodizado sobre fondo azul.
La originalidad de su diseño y su simbología para la ciudad lo han dotado de numerosos premios de arquitectura, construcción e
innovación comercial.
Construida con tecnología de prefabricados de aluminio, el espacio de esta casa tiene tres niveles de planta con dos dormitorios,
un baño, un almacén, una cocina y una sala de trabajo.
Su gran estructura de hormigón y los 38.000 pies cuadrados de cristal que se posan encima juegan con la sensación de peso y
ligereza, provocando la ilusión de que el edificio se levanta sin necesidad de apoyo.
Además, al tratarse de una biblioteca era fundamental la entrada de luz natural que favoreciese la lectura de sus visitantes. Las
gigantes placas de cristal cumplen este objetivo llenando de luminosidad los espacios de lectura y las estanterías.
Vista desde el exterior, los ventanales de la Biblioteca Geisel se fusionan totalmente con el cielo. Una combinación posible
gracias a que sus cristales adquieren colores diferentes según el clima y la hora del día. Con los revestimientos en aluminio
anodizado, el edificio queda protegido contra la abrasión y la corrosión del material.