Anda di halaman 1dari 6

TALLER TÉCNICAS DE ESTUDIO

1. TOMAR APUNTES

Instrucciones: A partir del video “La ruta de la caca” del programa 31 Minutos, toma apuntes en torno
a la problemática que se describe en él.

2. RECURSOS MNEMOTÉCNICOS
Imagina que tienes que aprender los siguientes datos: Carabelas, galeones, Asia, Colón, nuevos,
supervivientes, campeones, carpintero, comida, sueño, fotos, leche. Inventa una historia y memorízala.

2.- Construye un Acróstico para memorizar los nombres de las mnemotécnicas.


3. LECTURA DE TEXTOS.

1. SUBRAYADO

SUBRAYA PÁRRAFOS Y ESCRIBE LA IDEA PRINCIPAL

Para realizar este ejercicio, vas a utilizar tres párrafos, extraídos de obras literarias conocidas, para que
tú subrayes la idea principal y expreses luego debajo esa misma idea con tus propias palabras.

1. Eran las diez de la noche y ya se disponía el hermano del zar a retirarse a sus habitaciones, cuando se
abrió la puerta de la estancia y entró nerviosamente un ayudante de campo que, con emocionado
semblante, anuncia: ¡Alteza, un correo del zar!

Julio Verne: «Miguel Strogoff»

2. Ahora, Platero, en este sol suave de otoño, que hace de los vallados de arena roja un incendio más
colorado que caliente, la voz de ese chiquillo me hace, de pronto, ver venir a nosotros, subiendo la cuesta
con una carga de sarmientos recogidos, al pobre Pinto.

Juan Ramón Jiménez: «Platero y yo»


2. LECTURA COMPRENSIVA:

No Tengo Ganas De Estudiar: 10 Razones Para Motivarte Sin Apenas Enterarte

¿Ya estás preparando la lápida para enterrar tu motivación? No te desesperes, el desánimo se puede ir tan
rápido como llegó. Estudiar puede ser una de tus aficiones “namber guan”. ¡Vamos allá!

1. Asocia el acto de estudiar con algo positivo. Pavlov tenía un perro al cual le hizo asociar el alimento al
sonido de una campana. El animal relacionaba el “ting” de la campana al filete y de la misma manera que
el cuerpo reacciona ante un alimento, el can segregaba saliva. Nosotros no somos mucho más diferentes,
nuestra especie animal se puede mover también por motivaciones. Estudia y después… una recompensa.
Puede ser comida, o puede ser una llamada de teléfono al novio/a, puede ser un capítulo de tu serie
preferida, o un paseo por la playa. Cuando se estudia a gusto se es más productivo. Ya verás.

2. Crea una rutina en tu vida. Aunque pueda sonarte a “rollo”, piensa que si no tienes unos hábitos casi
cronométricos tendrás unos resultados irregulares. Tu cuerpo se vuelve más productivo cuando asume que
hay unas horas destinadas al sueño, otras a las comidas, otras al ocio y otras al negocio (en este caso, el
tuyo, son los estudios). Con esto, la pereza que te da sentarte en la silla desparece.

3. Silencio, se piensa. Cuando hinques los codos en la mesa no se tiene que oír ni el pensamiento de una
mosca. Trabajamos con los sentidos, y aunque puedas llegar a desarrollar inmunidad al jaleo, lo mejor es
que en ese momento disfrutes de escucharte. Debes ver el “estudiar” como algo que te está elevando
intelectualmente. Si te distraes con música, por ejemplo, es posible que tengas que leer dos veces lo que
hubieras comprendido en una. Evita que te suceda o vendrá el desánimo a visitarte y se llevará las ganas
de estudiar.

4. La motivación es un porcentaje alto. ¿Por qué lo haces? Lo haces porque para ti es importante ¿O lo
haces porque alguien te obligó a hacerlo? Si alguien te dijo que tenías que hacerlo y no te motiva seguir,
piensa que a lo mejor estás optando por una profesión que no se ajusta a ti. Si tu “mamá” quiere que seas
médico, pero tú quieres ser peluquera, entonces piensa en estudiar peluquería. De cualquier modo, piensa
que para ejercer necesitas tener un título que avale para qué sirves.

5. Aprovecha bien el tiempo y deja que te sobre tiempo para otras cosas. Cuando haces las cosas bien
no tendrás que hacerlas dos veces. Trata de organizarte tu tiempo de estudio. Si no te funciona bien la
agenda porque trabajas y tienes turnos rotativos, plantéate hacerlo con cursos on line o a distancia. Es tan
importante que te concentres como que abandones la luz del flexo y salgas a divertirte.

6. No dudes y pregunta. Cuando tienes una duda debes preguntar cuanto antes. Ponte en contacto con el
tutor, con el profesor o algún compañero que te dé las claves de aquello que no has conseguido descifrar.
Pasa a otro tema mientras lo resuelves, pero no lo pierdas en el tiempo: pregunta, avanza, resuelve, sigue…

7. Estudia en el momento de día adecuado. No es bueno estudiar en la última hora del día, pues tu cuerpo
está exhausto del ritmo diario. Tampoco es bueno levantarse y sentarse en la silla mientras te quitas las
legañas. No es bueno estudiar después de comer, pues te da sueño y la sangre se va toda al estómago para
hacer la digestión. ¿Entonces cuándo? Puedes estudiar en la mañana, pero si has madrugado y has hecho
algo de ejercicio, tu cuerpo se encontrará activo. Dar el salto de la cama al libro no es bueno, pues tu cerebro
necesita ponerse en marcha. Lo mismo si después de comer tienes sueño, una breve siesta de veinte
minutos y ¡a estudiar! Hacerlo por la noche es un tema más complicado, pero en ese caso te recomendamos
que te acuestes temprano y lo hagas el día siguiente.

8. Duerme lo suficiente. En relación con lo que te decíamos en el punto 7 y en el punto 2, tanto por
encontrar el momento adecuado, como por establecer una rutina, es IN-DIS-PEN-SA-BLE que tu cuerpo se
encuentre en forma. Mens Sana In Corpore Sano, que quiere decir que para que tu mente esté sana tienes
que haber dormido lo suficiente. Lo habitual son 8 horas de un tirón.

9. Lee mucho. No es nada nuevo aquello de “leer te hará más sabio”. Pero además, con el hábito de leer
aumentarás tu capacidad de entender las ideas, estimularás tu imaginación y eso acelerará tu capacidad de
comprender conceptos. No te apures, no tienes por qué leer a Proust o Kierkegaard.

10. Vía de escape creativa: dibuja, escribe, modela, baila. Estudiar algo mecánicamente tiene un precio
intelectual bastante elevado. Si quieres que tu mente se libere, puedes realizar una pausa cada 45-50
minutos y desconectar. Las actividades creativas le dejarán a tu mente soltar un poco del cansancio de
ordenar ideas. Hacer dibujos en un papel o pintar en un lienzo, bailotear un par de canciones, jugar con
plastilina, modelar con arcilla… cosas que dejen que tu mente diga: “ufffff” Cada uno necesitamos una
motivación para estudiar, los asesores de estudios o los tutores nos pueden orientar. Sin duda alguna, no
hay mejor motivación que obtener buenos resultados, pero si los buenos no llegan, al menos ten las
técnicas para lograrlos. ¡Ánimo!

Bibliografía: www.yahoo.es, (España) 23 Abril, 2010.

1. Sintetiza, en tus términos, la idea central del texto.

2. Copia la cita textual más relevante y justifica tu elección.


3. Plantea un nuevo título al texto y fundamenta tu opción

4. ¿Cuál es el consejo más relevante de los 10 propuestos? Explica.

5. ¿Cuál es el consejo de menor importancia de los propuestos? Fundamenta.

Anda mungkin juga menyukai