DEBERÍAMOS SER COMO LOS ELEFANTES?

Que nuestra fe, esperanza y sabiduría tengan buenos cimientos…

Seamos como lo elefantes...Con pies grandes y pesados…

Para tenerlos bien fijos en la tierra y no elevarnos.

Con orejas grandes… Para aprender a oír y no actuar a ciegas. Con gente que nos ama nos
aconseja, pero a veces no oímos lo que nos dicen, ni tampoco queremos que nos digan que
estamos mal

Seamos como los elefantes... Con boca chica… Para no andar parafraseando, ni hablando de más.

Porque Suele pasar que hablamos cosas que no quisiéramos que otras personas se enteraran pero
resulta que somos nosotros mismos los que damos la información y todavía preguntamos ?

cómo es que lo saben?

Con colmillo largo… Para saber actuar en momentos difíciles.

Debemos aprender a Buscar soluciones a cada problema y aprender que cada problema tiene
solución.

Aprovechar la experiencia que vamos adquiriendo con el tiempo. Y aprender de nuestros errores.
Y no volverlos a cometer.

Seamos como el Elefante...a Tener piel áspera y dura… Para aguantar las pruebas que nos pone
nuestro enemigo.

Que Tienen cola corta. Y no como nosotros que casi siempre tenemos cola que nos pisen.

Aprendamos a No dar de qué hablar…. y si damos de que hablar que sean cosas positivas.

Porque si aprendemos a ser cautelosos… cuando alguien hablara mal de nosotros tendrán poco
negativo que decir.

Aprendamos del Elefante… a Tener su memoria… Para que nunca olvidemos quiénes realmente
somos.

Y como el elefante, que cuando sabe que va a morir regresa a su lugar de origen,

(Conscientes o no, sabemos que nosotros en el mundo estamos muertos espiritualmente)

igualmente tú, cuando sientas que haz caído en lo más profundo, que no puedes salir y no
encuentras ni un rayo de luz dentro del laberinto en que estás inmerso, que lo has perdido todo y
no te queda nada, regresa a tu lugar de origen, regresa a tu refugio seguro, regresa a ser tú
nuevamente, porque tal vez, ¡por la falta de memoria olvidaste quién realmente eres!

Ten en mente que debes recorrer, un camino muy hermoso no te rindas, no no te des por
vencido, si tropezaste continúa adelante, todos podemos caer, pero también todos podemos
levantarnos o pedir a Jehová que nos levante será lo mejor. Dale tu mano a Nuestro Creador, (haz
oración)si se nos hace difícil vivamos un día a la vez.

Preguntarnos todos los días a quien voy a complacer este día a quien me da la vida(Jehová) o
a(Satanás) a quien solo me mete en problemas quien nunca ha hecho nada bueno por mi.

Tenemos dos opciones no hay punto medio. Una puerta angosta y otra ancha

Felicidad o desdicha

Nuestra vida sufre cambios, como un río, que siendo siempre un río nunca lleva la misma agua,
pero de nosotros depende estar en agua limpia o sucia.

Nos acomodamos a nuestra realidad como única posible,

la vida cambia, ningún día es exactamente igual al anterior, y en ocasiones, nuestra vida da un giro
inesperado, y debemos readaptar nuestro guión de vida,

nunca al revés, sino lo que conseguiremos es frustración, angustia, tristeza y, parálisis, lo que
condicionará no sólo nuestro presente sino también nuestro futuro.

El elefante, una vez liberado del algún circo se verá obligado a olvidar muchos de los números
acrobáticos que le enseñaron porque ya no le serán de utilidad en su nueva vida. deberá buscar
dentro de sí los recursos de los que dispone, aprender nuevos y, muy probablemente, buscar la
colaboración de otros iguales que le muestren la “otra” vida y, construir la suya propia.

Una vida íntimamente suya.

Debemos tener en cuenta que todos poseemos una capacidad de libre albedrío.

Tú decides si la vida que realmente lo es, o una vida sin sentido ni propósito.

otro mundo es posible y lo sabemos, luchemos siempre por estar con quien nunca nos ha dejado
siempre ha estado cuidando de nosotros dándonos su amor Nuestro Dios, nuestro Amigo, Nuestro
Padre Jehová Dios.