Nuevos retos para exportadores

colombianos
Garantizar la calidad de los productos debe ser una prioridad para su empresa, sin
embargo, en cuanto más se expanden las ventas y los acuerdos comerciales de Colombia
con otros países se fortalecen, nuevos factores empiezan a cobrar especial relevancia para
que su compañía pueda asegurar que el producto llegará en óptimas condiciones a su
destino final.

Aspectos como el empaque y el embalaje no deben ser minimizados, sino que deben ser
los más eficaces para proteger su producción. En este sentido, cumplir con todas las
regulaciones le evitará pérdidas y dificultades innecesarias.

Según los expertos, el desafío no es solo el producto en sí, sino cómo este producto es
enviado. De este modo, es importante que su empresa esté a la vanguardia, pase del uso
de estibas de madera a estibas plásticas e invierta en nuevas tecnologías.

Normas relacionadas con la seguridad, las dimensiones de las estibas, el transporte de

mercancías peligrosas y la legislación fitosanitaria, son algunas de las regulaciones a tener
en cuenta para cualquier decisión que tome en su empresa.

Además de proteger el producto, el sistema de estibas para el almacenamiento y transporte

de mercancía debe tener un valor agregado. Es así como las estibas deben cumplir con
los estándares establecidos por los mercados y compradores internacionales, esto le
ayudará a garantizar que sus productos aterricen en otros países sin dificultad.

Un caso de éxito en esta materia es el de Soliplast S.A., únicos fabricantes de estibas

plásticas monolíticas HDPE en Colombia, una empresa que se ha convertido en la aliada
de los exportadores en el país por haber logrado desarrollar estibas acordes a las
tendencias mundiales de consumo, atendiendo aspectos de sostenibilidad y con especial
conocimiento de las normas y las regulaciones internacionales.

La responsabilidad medioambiental es una de las características más atractivas para los

compradores internacionales, es por esto que las empresas que acuden a Soliplast
encuentran alto valor agregado para llegar a mercados fuera de Colombia, gracias a su
compromiso con los recursos naturales y a la utilización de productos no maderables.

Es clave tener en cuenta que cada vez son más las empresas que prefieren empaques y
embalajes de carga que sean sustituidos por plástico, por ejemplo, reemplazando las
estibas de madera por estibas plásticas; recordemos los daños irreparables que produce la
sobreexplotación maderera y sus efectos en el cambio climático.

Es claro que mientras más haya oportunidades para que nuestros empresarios lleven sus
productos al exterior, habrá más beneficios y un nuevo aire para la economía colombiana,
no obstante, además de preparar productos que puedan competir en grandes mercados,
hay que estar atentos a los altos estándares de calidad, las normas internacionales y las
exigencias del mercado.
En resumen, es importante que su empresa gane oportunidades para exportar productos
de calidad, pero también es clave que los productos lleguen como debe ser, protéjalos y
mejore sus procesos logísticos con estibas que además de evitarle dolores de cabeza,
hagan un aporte a la conservación del medio Ambiente.

Aproveche que la globalización ha impulsado el comercio exterior como base

fundamental para el sostenimiento de la economía mundial, sin embargo, sea consciente
del uso desmedido de elementos como las tarimas o estibas de madera que,
desafortunadamente, no llegan a tener un segundo o tercer uso, en su mayoría.

De acuerdo con Luis Ricardo Ortiz, Gerente de Soliplast S.A. “si fomentamos el uso de
tarimas plásticas, ya sean con mayor resistencia que una One-Way o 100% reciclable,
garantizaríamos varios usos antes de darla de baja y proceder a recuperar y reprocesar el
polímero, ya sea para fabricar nuevas tarimas u otra aplicación plástica”, para el experto
“esta es una de las mejores formas reducir el impacto ambiental desde el sector logístico,
evitando la tala de árboles, de manera que nos ayude para el cumplimiento de los
compromisos adquiridos en COP21”, concluye.