Aunque no estemos alertas, cada segundo estamos liberando una batalla
interna en nuestros organismos. Es la batalla de los antioxidantes y los radicales libres.
Los radicales libres son moléculas inestables (perdieron un electrón) y
altamente reactivas. Su misión es la de remover el electrón que les hace falta, de las moléculas que están a su alrededor para obtener su estabilidad. La molécula atacada (que ahora no tiene un electrón) se convierte entonces en un radical libre y de esta manera se inicia una reacción en cadena que dañará muchas células, la acumulación en exceso de radicales libres en el organismo afecta directamente nuestro estado de salud. En una de las partes donde más se manifiestan los radicales libres es en la piel, provocando un envejecimiento prematuro. Ello es debido a que los radicales libres tienen efectos nefastos sobre el colágeno, la proteína que ayuda a mantener la firmeza y la elasticidad de la piel. El resultado es resequedad, falta de elasticidad y aparición temprana de arrugas y líneas de expresión.
¿Cual es el papel de los antioxidantes? Los antioxidantes son sustancias que
tienen la capacidad de contrarrestar los daños causados por los radicales libres; la vitamina C es uno de muchos antioxidantes cuyo uso ha resultado ser de gran ayuda para proteger la piel del envejecimiento y mantenerla sana y bella.
Objetivo general:
Explorar los diferentes tratamientos anti-radicales libres utilizando vitamina C
con el fin de obtener un mejoramiento general de la piel. Objetivos específicos:
1- Determinar la necesidad de utilizar vitamina C en los tratamientos de
la piel. 2- Precisar los diferentes tratamientos existentes por medio de la descripción de los mismos. 3- Mencionar los principales beneficios de estos tratamientos.