EEUU
I
Historia, génesis y desarrollo del método de indagación y terapia
Ana O.: 1880-1882, primer caso de histeria no abordado por Freud, sino por su colega,
25 años mayor, J. Breuer
Los síntomas histéricos desafían el saber médico: por eso las trataban como personas
que infringen las leyes de su ciencia, la acusan de deliberado engaño, simulación, y
las castiga quitándoles su interés.
Los síntomas eran determinados por las escenas cuyos restos mnémicos ellos
figuraban, y ya no se debía describirlos como operaciones arbitrarias o enigmáticas de
las neurosis.
Por medio de éstos símbolos mnémicos los neuróticos permanecen fijados al trauma,
a la vivencia que dio ocasión al síntoma.
“Excitaciones que caen dentro de tales estados hipnoides devienen con facilidad
patógenas porque ellos no ofrecen las condiciones para un decurso normal de los
procesos excitatorios”.
Freud aprendió de Bernheim que los hipnotizados podían recordar en estado normal
las instrucciones que se le dieron durante la hipnosis.
Freud descubre que en el estado normal existía en el enfermo una fuerza que ofrecía
resistencia a recordar, viendo que esa fuerza era la misma que había colaborado en
mantener el recuerdo olvidado, fuera de la conciencia.
Capítulo I, y Epílogo.
I
El saber del médico es desafiado por la histérica.
A su vez a la histérica el método analítico la constriñe a decir más de los sabe: por
eso, dice Freud, el análisis es distinto de la confesión, ésta última es decir lo que ya se
sabe, la histérica debe decir más, debe decir lo que no sabe.
El psicoanálisis no nace de un día para el otro, tampoco alcanzará su fin porque trata
sobre el ser humano, más precisamente sobre los múltiples padecimientos humano
que nosotros veremos bajo la forma de las neurosis.
Epilogo, opúsculo
La palabra, medio universal con que los hombres se influyen unos a otros.
Por esto mismo es que decimos que el psicoanálisis inaugura un nuevo modo de VER
a través de la escucha.