En muchos procesos de transducción de señales; se implican cada vez más en el evento un número
creciente de enzimas, proteínas y substancias desde el inicio del estímulo, el cual parte desde la
adhesión de un ligando al receptor de membrana, hasta la activación en el receptor, que convierte
el estímulo en respuesta, la cual, dentro de la célula, provoca una cadena de pasos (cascada de
señalización o ruta del segundo mensajero) cuyo resultado es la amplificación de la señal, es decir;
que un pequeño estímulo provoca una gran respuesta celular.
Pero más importante que la amplificación de señales, las vías de señalización regulan múltiples
funciones celulares: en especial la expresión de genes, o por el contrario la inhibición de estos. Así
las células modulan todas sus funciones, desde las más generales: replicación, crecimiento,
diferenciación o maduración, apoptosis, etc.; hasta otras funciones más finas: contracción,
secreción, meiosis, etc.
La gran variedad de señales fisicoquímicas a las que las células pueden responder, haría pensar en
una amplia diversidad de mecanismos de transducción de señal. Sin embargo, la evolución ha
seleccionado y perfeccionado sólo una serie limitada de cadenas de eventos que son capaces de
generar la respuesta apropiada a cada estímulo en diferentes tipos celulares. Esta convergencia en
unas pocas cadenas de transducción comunes en plantas y animales ocurre en primer lugar en los
receptores celulares.
Los receptores celulares presentan en su estructura dos regiones o dominios funcionales bien
diferenciados. Uno de reconocimiento o detección de los estímulos, que presenta una diversidad
paralela a la de los estímulos, y otro dominio efector que pertenece a unos pocos tipos
fundamentales, por lo que la secuencia de eventos que son capaces de iniciar son limitados.
Las señales externas a la célula de diferente naturaleza físico-química producen una regulación de
determinados genes en su núcleo celular, por medio de un conjunto de mecanismos que
comprenden:
La captación de las señales externas en la superficie celular mediante los receptores celulares.
Estímulos celulares
Las células pueden estirarse, acortarse o cargarse eléctricamente como las células musculares y las
neuronas.
La activación de genes provoca muchos efectos, desde la expresión de genes en proteínas, muchas
de las cuales son enzimas, factores de transcripción u otras proteínas reguladoras de la actividad
metabólica. Debido a que los factores de transcripción pueden activar aún más genes, un estímulo
inicial puede activar a través de la transducción de señales la expresión de una gama entera de
genes y una gran diversidad de eventos fisiológicos. Tal conjunto de activación a menudo se llama
programa genético. Un ejemplo de programa genético es la secuencia de eventos que tiene lugar
cuando el óvulo es fecundado por un espermatozoide.
Señales extracelulares
Existen muchas moléculas que pueden funcionar como portadoras extracelulares de información.
Entre ellas se incluyen:
Los esteroides, que se derivan de colesterol. Las hormonas esteroideas regulan la diferenciación
sexual, el embarazo, el metabolismo de los carbohidratos y la excreción de iones sodio y potasio.
Eicosanoides, son moléculas no polares que contienen 20 carbonos derivados de un ácido graso
llamado ácido araquidónico. Los eicosanoides regulan diversos procesos, como el dolor, la
inflamación, la presión sanguínea y la coagulación de la sangre. Existen varios fármacos que están
disponibles sin prescripción y son empleados para tratar cefaleas e inflamación, éstos inhiben la
síntesis de eicosanoides.
Una gran variedad de polipéptidos y proteínas. Algunos de éstos se encuentran como proteínas
transmembranales en la superficie de una célula que interactúa. Otros son parte de la matriz
extracelular o se relacionan con ella. Por último, una gran cantidad de proteínas se excreta hacia el
ambiente extracelular, donde participan en la regulación de procesos como la división celular, la
diferenciación, la reacción inmunitaria o la muerte y supervivencia de las células.
Receptor acoplado a proteínas G (GPCR) son una enorme familia de receptores que contienen
siete hélices alfa transmembranales. Estos traducen la unión de moléculas extracelulares de
señalización en la activación de proteínas G (proteínas de unión con guanosín trifosfato).
Las tirosina quinasas receptoras (RTK) representan una segunda clase de receptores que
evolucionaron para traducir la presencia de moléculas mensajeras extracelulares en cambios
dentro de la célula. La mayoría de las quinasas de proteína transfieren grupos fosfato a residuos
de serina o treonina de sus sustratos proteicos, pero como su nombre lo sugiere, las RTK fosforilan
residuos de tirosina.
Los cambios activados por un ligando representan la tercera clase de receptores en la superficie
celular que se unen con ligandos extracelulares. La unión con el ligando regula de manera directa
la capacidad de estas proteínas de membrana, lo cual afecta la actividad de otras proteínas de
membrana, por ejemplo, los canales activados por voltaje. Esta secuencia de fenómenos es la base
para la formación de un impulso nervioso. Además, la entrada de ciertos iones, como Ca2++,
puede cambiar la actividad de enzimas citoplásmicas particulares.
Los receptores para hormonas esteroideas funcionan como factores de transcripción regulados
por un ligando. Las hormonas esteroideas se difunden a través de la membrana plasmática y se
unen con receptores, los cuales están en el citoplasma. La unión con la hormona induce un cambio
en la conformación, esto provoca que el complejo hormona-receptor se mueva hacia el núcleo y
se una con elementos presentes en los promotores o intensificadores de los genes de respuesta
hormonal. Esta interacción da origen a un aumento o descenso del ritmo de transcripción
genética.
Por último, hay varios tipos de receptores que actúan por mecanismos únicos. Algunos de estos
receptores, como los receptores de las células B y células T que participan en la reacción a los
antígenos extraños, se relacionan con moléculas de señalización conocidas como quinasas
citoplásmicas de proteína-tirosina. Para otros aún se desconoce el mecanismo de transducción de
señal.
Señales intracelulares
A menudo, pero no siempre, los eventos intracelulares activados por las señales externas son
considerados desde el punto de vista de transducción en sí mismo, el cual en sentido estricto se
refiere sólo al paso que convierte la señal extracelular en señal intracelular.
Señales intercelulares
Señales endocrinas: Las hormonas son producidas por células del sistema endocrino y circulan por
el torrente sanguíneo hasta alcanzar todos los lugares del cuerpo. Es de respuesta lenta, larga
duración y actúa a distancia.
Señales paracrinas: Sólo actúan sobre células diana que se encuentran en la vecindad de las
células emisoras, como por ejemplo los neurotransmisores. respuesta local
Señales autocrinas: Afectan sólo a las células que son del mismo tipo celular como las células
emisoras. Un ejemplo de señales autocrinas se encuentra en las células del sistema inmune.