INTRODUCCIÓN
El presente informe tiene la finalidad de dar a conocer al lector los que son los
costos indirectos de fábrica, clasificación y todo lo que conlleva la distribución de
estos costos.
Podemos definir los costos indirectos de fábrica como todos los elementos
necesarios para la elaboración de un producto con la excepción de la mano de
obra directa y la materia prima directa. Pero que son indispensables para la
elaboración del producto final.
Los CIF se pueden clasificar en tres grandes grupos, materiales indirectos, mano
de obra indirecta y otros costos indirectos de fábrica, también lo podemos
clasificar como costos indirectos variables, costos indirectos fijos, costos indirectos
mixtos de acuerdo a su comportamiento.
5.1. DEFINICIÓN DE LOS COSTOS INDIRECTOS DE FABRICACIÓN
Los costos indirectos de fabricación (CIF) son aquellos que no son plenamente
identificables con el producto terminado y que, además, son difíciles de rastrear y tienen
que ser prorrateados a varios productos o servicios.
5.2. CLASIFICACIÓN DE LOS COSTOS INDIRECTOS DE FABRICACIÓN
Como vimos en el capítulo 2, conceptos de costos, los CIF se clasifican en tres
subelementos:
a. Material indirecto:
Son los insumos que representan un costo pequeño respecto al total de materiales.
Además, son difíciles de distribuir al producto. Por ejemplo, en el caso de la fabricación de
un juguete la compra de la pintura se realiza en galones. Es difícil en este caso saber cuánto
exactamente se consumirá en cada juguete.
Si quiero contar con los presupuestos de costos y gastos de 2013, su preparación sucederá
durante julio, agosto o setiembre de 2012. Algunas empresas pueden elaborarlos antes y
otras después, pero como implica reuniones de coordinación entre todas las áreas de la
empresa, pues es importante que estas se realicen con la debida anticipación.
CIF aplicados
Como los CIF son difíciles de identificar y en las empresas contar con información oportuna
es fundamental, para mantenerse competitivos en el mercado se aplican los CIF. Como los
CIF no se incurren de manera uniforme a lo largo del periodo, se utiliza el costeo normal
para obtenerlos. El procedimiento para la aplicación de los CIF consta de cuatro pasos y
son los siguientes:
1. Presupuestar
Lo primero que hay que presupuestar son los CIF y la base de asignación presupuestada.
Ya vimos lo que significan los CIF presupuestados. Las bases de asignación de los CIF,
es decir, sobre lo que pueden distribuirse o prorratearse estos costos, puede ser por
ejemplo:
a. Unidades producidas.
b. Horas de mano de obra directa.
c. Horas-máquina.
d. Consumo de material directo en unidades.
e. Costo de material directo.
f. Costo de mano de obra directa.
La base escogida depende de cada empresa y mientras que para algunas empresas una
base puede ser más precisa, para otras en cambio no.
2. Calcular la tasa CIF (también llamada tasa de aplicación, asignación o de
distribución)
En este segundo paso se calculará la tasa CIF presupuestada así:
Tasa CIF = (CIF presupuestado / Base de asignación presupuestada).
Si tomamos en cuenta el CIF presupuestado del gráfico 5.2 y que la base de asignación
presupuestada escogida por la empresa es de 10 000 horas-máquina, tenemos:
Tasa CIF = (S/. 42 000 / 10 000) = S/. 4,20 por hora-máquina.
3. Calcular el CIF aplicado
Los presupuestos como vimos se calculan en el año corriente para el siguiente año. Las
empresas hacen este ejercicio cada agosto o setiembre de cada año. En estas fechas ya
se han preparado los presupuestos para el siguiente año.
Por ejemplo, a fines de enero de 2013 la empresa ya tendrá necesidad de preparar,
aunque sea una aproximación de su Estado de Costo de Productos Terminados. Es más
fácil obtener la información de los materiales directos y la mano de obra directa, pues,
como vimos en el capítulo 2, estos son rápidamente identificables y, por ende, su
obtención es sencilla. En cambio, los costos indirectos de fabricación pueden tardar varios
días o incluso semanas, dependiendo de los sistemas de información que se tengan. Sin
embargo, ante un entorno competitivo los negocios tienen que obtener la información a
tiempo. Como bien dice el lema de Interbank que vimos en televisión hace varios meses:
«El tiempo vale más que el dinero».
Por ello, se aplican los CIF para obtener una aproximación casi exacta de la realidad. Los
CIF aplicados son aproximados y también me atrevería a llamarlos un híbrido, pues no
son ni totalmente presupuestados ni reales.
Los CIF aplicados los obtenemos así:
CIF aplicado = Tasa CIF presupuestada × Base de asignación real
Algo muy importante que se debe considerar al realizar este cálculo es el hecho de que la
base de asignación tiene que ser la misma tanto cuando es presupuestada como cuando
es real. Es decir, si elegimos como base las horas-máquina, debemos multiplicar nuestra
tasa CIF por las horas-máquina reales.
Si las horas-máquina reales de enero de 2013 fueran de 10 500, entonces tenemos:
CIF aplicado enero de 2013 = S/. 4,20 × 10 500 = S/. 44 100.
Este importe provisional, obtenido debido a la necesidad de información que tienen las
empresas para la toma de decisiones, es registrado en la contabilidad los primeros días
de febrero. En este momento se puede obtener el Estado de Costo de Productos
Terminados bajo el costeo normal.
Supongamos que contamos con los siguientes datos referentes a dicho estado antes del
ajuste:
En el supuesto de que la empresa no mantuviera inventarios iniciales ni finales de
productos terminados, el costo de productos terminados sería igual al costo de ventas.
Supongamos que se cuenta con el siguiente Estado de Resultados antes del ajuste o bajo
el costeo normal:
CIF reales
Una vez que el departamento de contabilidad nos proporciona los datos de los CIF
realmente incurridos durante enero de 2013, tenemos que analizar las diferencias. Es en
este momento que recién contamos con la información real sobre los CIF y estos son en
primera instancia registrados. Supongamos que nos proporcionan la información recién en
la tercera semana de febrero. Cuando se registran los CIF reales incurridos, recién se
pueden comparar con los CIF aplicados registrados los primeros días de febrero. Pueden
existir dos tipos de variaciones o diferencias:
CIF aplicado > CIF real = Sobreaplicación o sobreestimación de los CIF.