La leyenda cuenta que en 1983 el destacamento militar que El Salvador mantenía en Isla
Conejo decidió volver al continente para colaborar en una batalla de la guerra civil que se
libraba en ese país, pero ya no regresó.
Así empezó una larga controversia diplomática entre ambos países, que no ha encontrado
solución ni en tribunales como la Corte de Justicia Internacional (CIJ) que en 1992 resolvió
una disputa de límites en la zona.
El tema formó parte de la campaña electoral hondureño, el año pasado, y ha sido parte de la
campa electoral salvadoreña, este año, de cara a los comicios presidenciales de este
domingo.
Honduras dice que el conflicto insular fue superado con el fallo de la Corte; El Salvador
responde que Isla Conejo nunca formó parte de la resolución. Al final no parece que el
problema se resuelva en el corto plazo, le dice a BBC Mundo el analista Lafitte Fernández.
"No veo una solución pero sí caminos claros para El Salvador de recuperar el terreno,
porque no ha pasado ni siquiera una generación", explica.
"Nadie en esa isla tan pequeña puede decir: mira hay tres generaciones de hondureños
viviendo allí, es más bien una ocupación militar".
BBC Mundo solicitó a las cancillerías de El Salvador y Honduras una posición sobre la
controversia, pero en ambos casos declinaron la entrevista.
Océano Pacífico
No veo una solución pero sí caminos claros para El Salvador de recuperar el terrenoLafitte
Fernández, analista
¿Por qué es importante una isla de medio kilómetro cuadrado, sin agua potable y con escasa
vegetación?
Según especialistas la clave del problema es el acceso al Océano Pacífico que Honduras no
tiene en forma directa: el país se encuentra en medio de El Salvador y Nicaragua y su única
comunicación marítima es el Golfo de Fonseca.
De hecho la ubicación geográfica de sus vecinos forma una especie de pinza en la entrada
de la bahía, lo cual cierra aún más el libre acceso pues ambos cuentan con una soberanía de
doce millas náuticas según la Convención de Naciones Unidas sobre Derecho del Mar.
El gobierno de Honduras ha solicitado que sobre el Golfo se ejerza una co-soberanía que
permita a los tres países contar con acceso al Océano, pero el acuerdo no se ha concretado.
Así, quien tiene más territorio garantiza una comunicación más amplia hacia el Pacífico y
en esas condiciones las islas en la bahía Fonseca tienen un valor fundamental, incluso un
islote como Conejo.
Elecciones
Imagen capitón La isla es importante para el acceso de Honduras al Océano Pacífico.
Es un tema que históricamente revive durante estos procesos políticos y esta vez no fue la
excepción, recuerda Lafitte Fernández.
En las recientes elecciones en Honduras la propiedad de la isla fue parte de los discursos de
los candidatos presidenciales Juan Orlando Hernández (quien resultó electo) y Xiomara
Castro, quienes advirtieron que mantendrían al grupo de soldados que actualmente
custodian a Isla Conejo.
Sin embargo lo cierto es que a los ciudadanos, especialmente los salvadoreños, el tema no
es tan importante como a los políticos, añade el especialista Fernández.
"La verdad siento que les importa muy poco", indica, y una muestra es que "sobre esa isla
nunca ha habido un reclamo internacional".