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picuro nació en la isla de Samos en el 341. Comenzó a estudiar filosofía a los 14 años

E haciéndose discípulo de Pánfilo, un platónico de la localidad. Del 321 al 311 estudió bajo la
dirección de Nausífanes, un filósofo atomista discípulo de Demócrito y del escéptico Pirrón.
En el año 306 vuelve a Atenas definitivamente para fundar su escuela. En Atenas vivirá
rodeado de un círculo de amigos íntimos y discípulos hasta su muerte, treinta y cinco años después.

iagnóstico cultural. Causas y signos del sufrimiento y de la infelicidad.

D La sociedad establecida nos compensa con vanas opiniones y quiméricos anhelos

que a su vez nos hacen convivir en un agitado marco de esperanzas y angustias y entre
rivalidades constantes y superfluas.
 Las causas de la infelicidad cotidiana no radican ni en la constitución ni en
la naturaleza humana. Son las falsas valoraciones, los deseos superfluos e ilimitados y en fin,
la desviación de nuestro fin natural (que es la obtención del placer que la naturaleza ha dejado
a nuestro alcance), lo que nos arrastra a una existencia desasosegada y atormentada por mil
fantasmas.
 Tras esos deseos, opiniones y palabras no hay nada real. La sociedad mistifica lo
auténticamente natural y dificulta así el acceso del individuo a la felicidad.
 El epicureísta se enfrenta a la paideia como repertorio de ideales y de
normas de conducta, no tanto a la cultura como progreso material y como logro
civilizador. La virtud que se premia con la aprobación social y la admiración popular no
consiste sólo en ser bueno, sino en ser mejor.

F
ilosofía como terapia. Filosofar es una urgencia vital en un mundo caótico y alienante.

La filosofía es un saber para la vida, un cuidado del alma (therapeia tes psychés). Es una
actitud ante el mundo que proporciona a la persona una disposición anímica
fundamental para el vivir cotidiano. Como señala uno de sus discípulos: “Lo fundamental
de la felicidad es la disposición del ánimo de la que somos dueños.”
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 Resulta de lo más valioso para la verdadera felicidad el conocer las causas reales de las cosas,
que libera al estudioso de los fantasmas irracionales de las creencias angustiosas y de las
esperanzas sin fundamento. Aletheia. [lethé es uno de los ríos del Hades. Beber de sus aguas
provocaba el olvido completo]

É tica Epicúrea. Subordinación de su sistema filosófico al plano de lo ético. La base de la

filosofía es el placer. El placer es el principio (arché) y el fin (telos) de una vida feliz.
Aspirar al único placer verdadero: el placer por existir.

Placer y dolor: dos hilos que dirigen nuestra conducta. «Éste es el grito de la carne:
no tener hambre, no tener sed, no tener frío; el que dispone de eso, y tiene la esperanza de
disponer de ello en el porvenir, puede luchar hasta con Zeus por la felicidad.», dice la
Sentencia Vaticana 33. El equilibrio corporal es el fundamento de la hedoné y esa estabilidad
y recuperación (katástasis) es la raíz de todo goce posterior.
 Los placeres catastemáticos y los cinéticos corresponden a los placeres estables y
en movimiento. Se suele gozar por las cosas del mundo y no por la existencia en si misma.
 Placeres del alma y de la carne. Los sufrimientos del alma son más graves que los
del cuerpo. Los placeres básicos son los de nuestros sentidos corporales.
Placer es ausencia de dolor. El placer no incrementa o disminuye, sólo cambia de matiz.
 ¿Por qué el placer? El origen de toda reflexión, de todo contacto con la realidad, es
la ineludible certeza de la sensación. […] Esa vuelta al cuerpo nos enseña, entre otras cosas,
que él es el sustento de toda cultura, de toda historia, de toda sociedad.
 La phrónesis, la inteligencia práctica, el cálculo de las tensiones y posibilidades de la
existencia, […] aparece en Epicuro como importante contrapeso y continuidad a la fugacidad
de la sensación y del placer.
 «De todas estas cosas el principio y el mayor bien es la prudencia. Por ello es incluso más
preciada que la filosofía. Todas las otras excelencias humanas, o virtudes, provienen de
ella, porque enseña que no se puede vivir bien, sin vivir sensata, bella y justamente;
ni vivir sensata, bella y justamente, sin vivir bien y placenteramente. Las virtudes
son, pues, algo connatural a bien vivir, y el vivir bien es inseparable de ellas.»
 Su placer no es el placer innecesario, que pervierte y deteriora el equilibrio y la armonía, que
sustenta, también fundamentalmente, toda la realidad, sino que es condición para seguir
manteniendo esa fluencia del ser, que es la vida, y esa confirmación de su verdad, que es el
gozo del cuerpo y sus sentidos.
 Felicidad epicúrea: Aponía y Ataraxia.
El cálculo de los deseos:
Ante cualquier deseo debemos formulamos la siguiente cuestión: ¿qué me sucederá si se
cumple el objeto de mi deseo, y qué si no se cumple?
-Epicuro, Sentencias Vaticanas.
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“La ascesis de los deseos se fundamentará en la distinción entre los deseos naturales y
necesarios, los deseos naturales y no necesarios y por último los deseos vacíos, los que no
son ni naturales ni necesarios […]

Son naturales y necesarios los deseos cuya satisfacción libera de un dolor y que corresponden
a las necesidades fundamentales, a las exigencias vitales. Son naturales mas no necesarios el
deseo de manjares suntuosos o también el deseo sexual. No son ni naturales ni necesarios,
sino producidos por opiniones vacías, los deseos sin límite de la riqueza, de la gloria o de la
inmortalidad.”
-Pierre Hadot, What is ancient philosophy?

l Jardín. Era un lugar silencioso lejos del bullicio de la ciudad. Allí sus miembros

E cultivaban la generosidad y la amistad recíprocas. En esta escuela se admitían personas de

todas las clases sociales, incluso mujeres (cosa insólita en una escuela filosófica) y esclavos.

Prácticas espirituales:

 No basta con haber tomado conocimiento del discurso filosófico epicúreo. Ante todo hay
que meditar (meleté), es decir, asimilarse íntimamente, tomar conciencia con intensidad de
los dogmas fundamentales. La lectura de los tratados de Epicuro puede alimentar la
meditación e impregnar el alma de la intuición fundamental.
 Sobre todo es necesario practicar la disciplina de los deseos; saber contentarse con lo que es
fácil de alcanzar, con lo que satisface las necesidades fundamentales del ser, y renunciar a lo
superfluo.
 La amistad es en la escuela epicúrea, el camino privilegiado para lograr la transformación
de si mismo. El examen de conciencia, la confesión, la corrección fraternal, son ejercicios
indispensables para lograr la curación del alma.
o Philía. Éste vínculo afectivo estuvo motivado por un objetivo utilitario. Los jóvenes
guerreros que compartían la tienda, experimentaron el sentimiento de ayuda mutua,
de la colaboración, la concordia. La cerrada órbita de la intimidad se abría y
consolidaba en el recuerdo. La configuración de esa memoria en el otro acaba
configurando una trama afectiva que tensa y da interés al opaco monólogo de la
intimidad.
o «Toda amistad es deseable por si misma, pero tiene su origen en los beneficios» Un
amigo es un refugio contra la soledad en medio de esa jungla, dominada por la lucha
competitiva de todos contra todos que es la sociedad. El amigo es también el espejo
en el que deben reflejarse nuestras acciones, aquél cuya aprobación resulta grata y
confortadora.
«La amistad recorre en danza el mundo habitado y, como un heraldo, nos da a todos
la proclama de que despertemos a la celebración de la felicidad». SV. 53

«De los bienes que la sabiduría procura para la felicidad de una vida entera, el mayor
con mucho es la adquisición de la amistad». Máxima Capital 27
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 El ejercicio fundamental epicúreo consistía en el esparcimiento, la serenidad, el arte de

gozar de los placeres del alma y de los placeres estables del cuerpo:
 Placer por el conocimiento.
 Placer por la vida en común.
 Placer de tomar conciencia de la maravilla que supone existir. Rememorar cuanto
es beneficioso; resucitar el recuerdo de los placeres del pasado y gozar de los del
presente. Elegir deliberadamente el descanso y la serenidad; vivir con una profunda
gratitud hacia la naturaleza.