TRIBUNAL DE CRISTO

Un día todo daremos cuentas a Dios

Romanos 14:10,12

Cuando escuchamos la palabra "tribunal" de inmediato viene a la mente el lugar de juicio

y castigo por haber cometido un ilícito y casi siempre pensamos en forma negativa
(condena) y no de beneficio (perdón o dación de algo). bemá "lugar elevado a donde se
sube con escalones; una plataforma; una tribuna usada como asiento oficial de un juez".

A. ¿QUE ES EL TRIBUNAL DE CRISTO?

1. Lo que NO es el Tribunal de Cristo.

No es el juicio ante el Gran Trono Blanco (Apocalipsis 20:11-15) en este juicio

estarán únicamente los no-creyentes, los incrédulos, los impíos; este es un juicio
que determinara la razón por la cual se condenan. Sucederá después del milenio.

2. Lo que SÍ es el Tribunal de Cristo.

Sera un juicio que sucederá en el cielo después del arrebatamiento de la iglesia

(Mateo 16:27, Apocalipsis 22:12), en este juicio solo estarán los creyentes,
muertos en Cristo o arrebatados al cielo en el rapto.

B. ¿QUE OCURRIRÁ EN EL TRIBUNAL DE CRISTO?

Daremos cuentas a Dios. Romanos 14:10-12. De lo que lo que hemos hecho

mientras estábamos en la tierra (2 Corintios 5:10). Algunos recibirán recompensas,
alabanzas, otros perdida y vergüenza (1 Corintios 3:12-15; 4:10; 1 Juan 2:28). En
este juicio se tendrá en cuenta lo siguiente:

1. Las Obras. 1 Corintios 3:10-15. Será juzgado el servicio al Señor mientras

estuvimos en la tierra. El fundamento es Cristo (v.11). El material puede ser divino
o humano (v.12).

2. Las Intenciones del Corazón. 1 Corintios 4:5. El oro, la plata y las piedras
preciosas hacen referencia o indican los motivos puros que nos llevaron a hacer
cosas para Dios. La madera, el heno y la hojarasca representan las acciones en
nombre de Dios pero hechas con motivos personales, egoístas y por
competencia. Eclesiastés 12:14.
 3. Las Palabras. Mateo 12:36-37. Serán juzgadas el tipo de relaciones que
mantuvimos con nuestro prójimo y hermano (hablamos de amor y perdón).
Romanos 14:10-13. Con frecuencia prestamos nuestra boca para murmurar y
hablar mal de otros hermanos y siervos de Dios sin tener pruebas, simplemente
porque otro lo dijo. Es necesario discernir lo que hablamos y declaramos para que
como dijo Gamaliel “no seamos hallados luchando contra Dios” Hechos 5:39.

¿Qué tan bien obedece la gran comisión? ¿Qué tanto controlas tu lengua? ¿Qué
tan indiferente eres respecto a la obra de Dios?

C. ¿CÓMO DEBO PREPARARME PARA EL JUICIO?

1. Edificando con Oro, Plata y Piedras preciosas. 1 Corintios 3:10-15.

¿Cómo edificas la casa de tu vida? Con actividades que tienen valor eterno O
desperdicias el tiempo en actividades sin valor eterno. Si nuestra obra se
quema, ¿Qué nos pasará en el día del juicio? Sufrirá perdida. De lo contrario, si
nuestra obra resiste la prueba, ¿Qué ocurrirá? Recibirá recompensas.

¿Qué actividades son de valor eterno? Lee Colosenses 3:17. ¡Depende de la

voluntad de Dios para ti en ese tiempo!

2. Amando la Venida del Señor. 2 Timoteo 4:6-8.

Si amamos la venida del señor, vivimos en expectativa, pensando en la evaluación

de nuestras acciones.

3. Teniendo cuidado de las distracciones. Lucas 21:34-36.

Jesús dijo a sus discípulos que debían estar alertas hasta su regreso. Debemos
cuidarnos de la mundanalidad y de los cuidados de esta vida. En tanto que no
debemos ignorar nuestros deberes diarios, debemos tener cuidado de vivir a la
luz de la eternidad.

D. ¿CUÁL SERÁ EL RESULTADO DEL JUICIO?

Lee 1 Juan 2:28.

1. Confianza (gozo) por las recompensas.
2. Vergüenza (tristeza) por las pérdidas.
 La recompensa tiene relación con privilegios en el cielo y niveles de responsabilidad
en el Reino venidero (2 Timoteo 2:12; Apocalipsis 20:6.). Las recompensas son
eternas (2ª Corintios 4:17).

E. AUTOEXAMEN PERSONAL.

1. Si Jesús fuera llegar esta noche, ¿Qué hubieras hecho exactamente lo mismo?
Menciona dos acciones, palabras, actitudes que no cambiarias, aun sabiendo que
Jesús venia en la noche.

2. Si Jesús fuera llegar esta noche, ¿Qué hubieras hecho diferente hoy? Menciona
dos cambios que hubieras hecho en tus acciones, palabras o actitudes.

3. Revisa el trono de tu vida, en los momentos cotidianos de la vida. ¿Estás viviendo,

en este momento, bajo el control y Señorío de Jesús?
a. ¿Cómo es mi actitud y comportamiento en este momento?
b. En este momento, ¿verdaderamente estoy sirviendo a Cristo con mis
pensamientos y palabras?
c. En este momento, ¿Estoy siguiendo mi propia voluntad o la voluntad de otros?
d. ¿Estas actuando, sintiendo o hablando según lo que Dios quiere, lo que tú
quieres, o lo que otra persona quiere?

Conclusión:

En el tribunal de Cristo lo que va a determinar, si UD. va a recibir perdida o recompensa,

será la prueba de fuego. En esta declaración es evidente que lo que está pasando por el
fuego es la obra del creyente, para determinar la aceptación o el rechazo de su obra.