La Reingeniería de Procesos tiene como objetivo reducir los costes empresariales y las
redundancias de procesos, pero a diferencia de otras técnicas de gestión de procesos,
lo hace en una escala mucho más amplia.
La Reingeniería de Procesos (BPR, por sus siglas en inglés) -también conocida como
innovación de procesos y rediseño de procesos centrales- intenta reestructurar capas
de gestión improductivas, eliminar redundancias y remodelar procesos de manera
diferente.
Los equipos de cambio deben comprender las expectativas básicas del cliente potencial,
luego crear estrategias aceptables y, posteriormente, vender el resultado, ésta no es
una venta única, todo debe venderse sobre una base de continuidad porque dada la
magnitud de los esfuerzos de reingeniería, con facilidad la gente pierde de vista los
objetivos.