C. Ocupación
El primer asentamiento permanente de personas fue Port Saint Louis, fundado
por el francés Bougainville en 1764 en la isla que hoy lleva el nombre de Soledad.
España sintiéndose agraviada por este hecho reclama ante Francia. Se realizan
negociaciones entre ambos Estados y estas culminan con el reconocimiento expreso por
parte de Francia de la legitimidad del reclamo español. A través de este reconocimiento
la fundación de Port Saint Louis tuvo el efecto de gestión de negocios ajenos de parte de
Francia a favor de España. Entregadas las instalaciones a sus dueños se establecen a
partir del año 1767 autoridades y población españolas dependientes de la Capitanía
General de Buenos Aires, ya que habían sido puestas bajo esa administración por Real
Cédula de 1766.
De parte inglesa el comodoro John Byron funda sobre el islote Saunders,
perteneciente al grupo occidental de islas adyacentes a Isla Gran Malvina, Port Egmont
en el año 1765. Un año más tarde se establece un asentamiento inglés en ese lugar.
Como bien lo remarcan Podestá Costa y Ruda1, el asentamiento inglés de Port
Egmont tiene sólo caracteres negativos:
. Fue ilícita: pues era violatoria de varios tratados vigentes entre España e Inglaterra por
los cuales esta última se obligaba a no navegar ni a fundar colonias en los mares del sur
de continente americano.
. Fue clandestina: pues fue tenida oculta hasta que los españoles llegaron a
comprobarla.
. Fue tardía: pues cuando los ingleses se establecieron en Port Egmont, Malvinas ya
había sido ocupada efectivamente por Francia, quien se la transfirió a España.
. Fue contestada: ya que España apenas tuvo conocimiento de este asentamiento elevó
protesta ante el gobierno de Gran Bretaña, procediendo seguidamente a su
levantamiento por la fuerza.
. Fue parcial: porque se redujo a la uocupación de Port Egmont, mientras que España
poseía Puerto Soledad.
. Fue brevísima: ya que duró sólo ocho años.
Conocido por España el asentamiento inglés ésta realiza protestas frente al
gobierno británico y desaloja por la fuerza Port Egmont, con una flotilla enviada desde
Bs. As. en 1770. Gran Bretaña reclamó por este hecho ante España. Luego de
negociaciones entre los dos países España permite a Inglaterra retornar a Port Egmont
con la declaración formal de reserva por parte de España de su derecho de soberanía
sobre todo el archipiélago lo que es aceptado por Gran Bretaña. Durante todo estas
negociaciones Españas seguía ocupando el resto de las islas sin la menor protesta
británica. Es más, los ingleses reciben formalmente Port Egmont de manos del
“Comisario General de Su Majestad Católica en puerto Soledad”, en 1771.
Luego de la toma de posesión de la base, los ingleses se retiran en el año 1774
para no volver sino en el año 1833. Se habla del cumplimiento de un pacto secreto
acordado entre los dos gobiernos, cuyo tratamiento excede el marco de este trabajo. Lo
cierto es que los españoles realizan en el tiempo subsiguiente sobre las islas todo tipo de
actos de administración. En 1776 España crea el Virreinato del Río de la Plata
atribuyéndole todo el archipiélago, sin que el gobierno británico elevara protesta alguna.
En 1777 las autoridades del Río de la Plata destruyen las instalaciones abandonadas de
Port Egmont, para que no sean ocupadas por navegantes de otras naciones o piratas,
hecho frente al cual Gran Bretaña tampoco protestó. Entre 1774 y 1811 España nombró
1
PODESTÁ COSTA, L. A./RUDA, J. M. Derecho Internacional Público, Buenos Aires, 1988, p. 237.
sucesivos gobernadores en las islas e Inglaterra mantuvo su actitud de aquiescencia sin
realizar protesta.
La ocupación española de las islas se extendió ininterrumpidamente hasta un año
después de la Revolución de Mayo.
Tanto el derecho de descubridor como el de primer ocupante efectivo que poseía
España y los derechos que ejercitó a través de actos administrativos, pasaron a las
Provincias Unidas del Río de la Plata en virtud del uti possidetis iuris de 1810 por el
cual las antiguas colonias españolas, en calidad de sucesoras, adquirieron los derechos
pertenecientes a la metrópolis.
A partir de 1823 Bs. As. nombra un gobernador en las islas y retoma una política
de poblamiento y explotación económica del archipiélago.
En el año 1823 Inglaterra reconoce la independencia de estas provincias sin
realizar reserva alguna sobre la soberanía de las islas Malvinas, actitud que se repetiría
cuando en 1825 firma el Tratado de Amistad, Comercio y Navegación, hechos ambos
que vendrían a fundamentar un estoppel.
En 1829 Argentina crea la Comandancia Político-Militar de Malvinas e Islas
Adyacentes al Cabo de Hornos2, con Base en Puerto Soledad. Gran Bretaña presenta por
primera vez protesta que es rechazada por Argentina.
Argentina continuó ejerciendo la soberanía de las islas hasta el año 1833 cuando
el asentamiento argentino en la isla Soledad es desalojado por la fuerza y su gobernador
Vernet es destituido. Hasta ese momento el gobierno británico nunca había reclamado
como suya la Isla Soledad. Es lo que el representante de Bs. As. en Londres en ese
momento, Manuel Moreno, remarca ante el gobierno británico.
Es de destacar que desde comienzos del Siglo XIX, el Almirantazgo británico
comenzó una política de expansión en todo el planeta buscando de fundar bases
militares en aquellos lugares que posean importancia estratégica para la navegación
mundial. Los intentos de invasión de Bs. As. a comienzos de S. XIX son una muestra de
ello. La importancia estratégica de Malvinas, no pudiendo ocupar Bs. As., era de
mantener una base en las cercanías del Cabo de Hornos, paso natural entre el Atlántico
y el Pacífico y con ello importante para la ruta marítima hacia Australia y todo el
Pacífico. A la vez, su situación insular le otorgaba a Gran Bretaña facilidades para la
defensa de esa posición, atento su poderío naval.0
D. Usurpación británica
En 1833 el Almirantazgo británico envía la Corbeta Clio a cargo del Capitán
Onslow hacia Puerto Soledad procediendo a ocupar por la fuerza el establecimiento y
expulsando la población argentina que se encontraba.
Inmediatamente el representante argentino en Londres, Manuel Moreno,
presenta protestas formales por el hecho. El Ministro de RR.EE. Parmelston responde
que los derechos británicos sobre Malvinas “estaban fundados sobre el descubrimiento
2
El decreto con sus fundamentos puede consultarse en:
http://web.archive.org/web/20090919235739/http://www.mininterior.gov.ar/agn/escuela_malvinas_doc11
.asp Fecha de consulta 26/07/2016.
original y la subsiguiente ocupación de aquellas islas”. Manuel Moreno contesta
categóricamente esa afirmación.
En el periodo que va desde la ocupación violenta de Malvinas por parte de los
ingleses y la creación de las Naciones Unidas, los sucesivos gobiernos argentinos
elevaron protestas ante el gobierno inglés por la ocupación ilegítima de territorios que la
República Argentina siempre tuvo como propios.
E. Etapas posteriores
Durante la primera etapa de la democracia argentina se mantuvo la Cuestión
Malvinas en el seno de la Asamblea General de Naciones Unidas recibiendo la posición
de nuestro país abrumadora mayoría a través de las distintas resoluciones de este
órgano. Esto se logra por un cambio de términos como en el de la Res. 40/21 de 1985 en
la cual desaparece el concepto de “disputa de soberanía”, cambiado por el de
“problemas pendientes”. También desaparecen los conceptos de “población” y de
“intereses”. Otro detalle es que no se mencionan resoluciones anteriores como la 1514
(XV) y la 2065 (XX), siendo ésta última la que marca el camino a seguir para la
solución del conflicto, tal como lo expresaba la resolución 3160 (XXVIII).
Por otro lado, este apoyo abrumador que la posición argentina obtenía a través
de las resoluciones de la Asamblea General contrasta con las decisiones unilaterales
tomadas por Gran Bretaña con respecto a las islas. En el año 1986, por ejemplo, Gran
Bretaña establece unilateralmente una jurisdicción de 150 millas en torno a las islas y
una de 200 millas en cuanto a los derechos de pesca y plataforma continental.
3
Accesible en: http://www.un.org/es/comun/docs/?symbol=A/RES/37/9
A partir de mediados de 1989 el gobierno de Menem cambia la estrategia
argentina. En ese año dicho gobierno resuelve retirar la Cuestión Malvinas del seno de
la Asamblea General y dejarlo sólo en el Comité de Descolonización. Eso constituyó un
error si se tiene en cuenta el apoyo universal que en la Asamblea General recibía la
posición argentina.
En los últimos años, a causa de un cambio de la política exterior argentina con
respecto a Malvinas, se repiten resoluciones del Comité de Descolonización que
objetivamente son totalmente favorables a su posición, ya que siguen la estructura de las
resoluciones de Asamblea General. Así el artículo 1 de la resolución de junio de 2012
reconoce la existencia de una “controversia de soberanía”, menciona sólo dos partes en
esta controversia, Argentina y Gran Bretaña, haciendo alusión en la parte preambular
los “intereses” de la “población” de las islas, y reconoce que “la manera de poner fin a
la especial y particular situación colonial en la cuestión de las Islas Malvinas” es la
solución pacífica y negociada de esta controversia de soberanía. El artículo 4 establece
que la solución pacífica de esta controversia debe realizarse aplicando las diversas
resoluciones de Asamblea General sobre la cuestión.
B. Disputa de soberanía
La misma Res. 2065 (XX) reconoce en la parte preambular una disputa de
soberanía por el archipiélago. Allí la Asamblea General “toma nota de la existencia de
una disputa entre los Gobiernos de la Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e
Irlanda del Norte acerca de la soberanía sobre dichas islas”. Esto es importante
remarcarlo ya que el Estado británico, si bien en el inicio reconoció expresa y
repetidamente esta disputa de soberanía, desde hace aproximadamente 30 años se niega
a reconocerla, como una forma de cerrarse a cualquier tipo de negociación sobre el
diferendo con Argentina.