Semiosfera
Frontera
Texto
El poliglotismo de la cultura
Memoria de la cultura
Los elementos simbólicos que dan sentido a la existencia no siempre son los
mismos, a lo largo de la historia de una cultura, muchos de estos van
desapareciendo, otros van renovándose y otros desapareciendo, la cultura tiene
un mecanismo específico el cual se encarga de seleccionar los textos que van a
prevalecer, los que se tienen que modificar y aquellos que hay que
eliminar. Lotman nombra a este mecanismo: memoria de la cultura. Una de las
críticas más constantes de la doctora Julieta Haidar es la poca claridad que
tiene Lotman al especificar los medios mediante los cuales la cultura selecciona
los textos: el poder, así, para Haidar, la relaciones de poder y las luchas entre la
hegemonía y la periferia son el media del cual se vale la cultura para ejercer su
memoria. Veamos cómo define Lotman esta categoría: los textos constituyen
programas mnemotécnicos reducidos. La capacidad que tienen distintos textos
que llegan hasta nosotros de la profundidad del oscuro pasado cultural, de
reconstruir capas enteras de cultura, de restaurar el recuerdo, es demostrada
patentemente por toda la historia de la cultura de la humanidad. No sólo
metafóricamente podríamos comparar los textos con las semillas de las plantas,
capaces de conservar y reproducir el recuerdo de estructuras precedentes. En
este sentido, los textos tienden a la simbolización y se convierten en símbolos
integrales. Los símbolos adquieren una gran autonomía de su contexto cultural
y funcionan no sólo en el corte sincrónico de la cultura, sino también en las
verticales diacrónicas de ésta (cfr. la importancia de la simbología antigua y
cristiana para todos los cortes de la cultura europea). En este caso, el símbolo
separado actúa como un texto aislado que se traslada libremente en el campo
cronológico de la cultura y que cada vez se correlaciona de una manera compleja
con los cortes sincrónicos de ésta… Es evidente que el texto por sí solo no puede
generar nada: debe entrar en relaciones con un auditorio para que se realicen
sus posibilidades generativas. Esto por sí solo no debe asombrar: no todo
sistema generador dinámico puede trabajar en condiciones de aislamiento de los
torrentes de información externos. Pero ¿qué significa esto en lo que respecta al
texto (= la cultura)? Para realizar una actividad generadora de sentido, el texto
debe estar sumergido en la semiosfera. Y esto significa una situación paradójica:
debe obtener «a la entrada» un contacto con otro(s) texto(s). De manera análoga
podríamos decir que el contacto con otra cultura desempeña el papel de un
«mecanismo de arranque» que pone en marcha procesos generativos. La
memoria del hombre que entra en contacto con el texto, puede ser considerada
como un texto complejo, el contacto con el cual conduce a cambios creadores
en la cadena informacional.