En base a la necesidad de aprendizaje analizaremos
desde el miocito, el cual funciona con potenciales de acción, es decir, permanece en reposo -90mV, luego del estímulo nervioso se despolariza alcanzando hasta +20 mV, forma la característica meseta para posteriormente repolarizarse, y volver a iniciar el ciclo.
Estos impulsos nerviosos, que
desencadenan la despolarización son generados principalmente en el nodo sinusal, viajan por los haces auriculo-ventriculares llegan al nodo auriculo-ventricular para posteriormente recorrer el Haz de His que discurre por el tabique interventricular y finalmente terminan en las paredes ventriculares. Esta direccional es, entonces, de arriba hacia abajo, y de endocardio hacia epicardio (de dentro hacia afuera), sin embargo la repolarización tiene una dirección inversa. Estos fenómenos son registrados por el electrocardiógrafo, mediante derivaciones horizontales y precordiales, además la magnitud y el voltaje de las ondas del ecg dependerán del resultado de la suma de los vectores en cada una de las derivaciones y de la posición de los electrodos. Entonces a) si el impulso se acerca al electrodo (o el resultado de la suma vectorial apunta hacia la ubicación del electrodo) , se marca onda positiva, es decir, por encima de la línea isoeléctrica b) si el impulso se aleja (o el resultado de la suma vectorial apunta en dirección contraria a la ubicación del electrodo), registra una onda negativa, por debajo de la línea isoeléctrica c) y si no hay actividad, se mantiene la línea isoeléctrica. Cabe destacar que el vectocardiograma y por ende el ecg difieren con la edad, así, en el adulto el resultado de la suma vectorial para la onda T está ubicado en el cuadrante anterior-izquierdo como en la figura, entonces la onda T será positiva en todas las derivaciones
En el niño, a partir de las 72 h de vida, la suma vectorial de la onda T sufre un
desplazamiento significativo hacia atrás y a la izquierda, hacia el cuadrante posterior izquierdo a aproximadamente -45°, resultando en onda T de polaridad negativa en las derivaciones precordiales V1-3, el llamado Patrón de onda T juvenil, caracterizado por ondas T invertidas, con o sin supradesnivel del punto J-segmento ST en las derivaciones V1-3.
Esto es característico y normal en niños y adolescentes, e incluso en algunos adultos,
especialmente de raza negra y adolescentes atletas menores de 16 años. En atletas de > 16 años y adultos con ondas T invertidas y profundas (>2mm) en las derivaciones inferiores o laterales, se precisan más estudios para descartar miocardiopatías hipertróficas o de otro tipo.