PRODUCCIÓN DE BIOSURFACTANTES A PARTIR DE DESECHOS INDUSTRIALES CON POSIBLE

ELIMINACIÓN DE PINTURA INSOLUBLE

ABSTRACTO

Los biosurfactantes son compuestos anfipáticos formados por un componente hidrofílico e

hidrofóbico, esta característica confiere a estos compuestos la posibilidad de varias aplicaciones.
El objetivo de este estudio fue producir biosurfactantes de diferentes desechos industriales
utilizando Corynebacterium aquaticum y Corynebacterium spp. CCT

1968 y estudia la aplicación en la eliminación de pintura.

La producción de biosurfactantes se evaluó mediante tensión superficial, actividad

emulsionante y carácter iónico. Los análisis se llevaron a cabo a las 0, 24 y 48 h. los
biosurfactantes que presentaron una menor tensión superficial y una mayor actividad
emulsionante se aplicaron en la pintura insoluble. El microorganismo Corynebacterium
aquaticum mostró una producción eficiente de biosurfactantes cuando se usaba pescado y
residuos de bagazo como fuente de carbono. La tensión superficial obtenida para estos
tratamientos fue de 27.8 y 33.9 mN / my la capacidad emulsionante fue de 87.6 y 61.6%,
respectivamente. El Corynebacterium spp. CCT 1968 produjo biosurfactantes solo en el medio
que contiene desechos de peces (28.5mN / m). Los biosurfactantes producidos por ambos

microorganismos mostraron carácter aniónico. Los biosurfactantes aplicados mostraron un uso

potencial en la solubilización y eliminación de pintura. Por lo tanto, los residuos de bagazo de
pescado y caña de azúcar mostraron ser fuentes de carbono eficientes para obtener
biotensioactivos. Además, la aplicación preliminar de eliminación de pintura presentó
excelentes resultados que pueden explorarse en el futuro.

1. Introducción

Los biosurfactantes son compuestos de superficie activa sintetizada por microorganismos, que
tienen la capacidad de reducir las tensiones superficiales e interfaciales de las soluciones
(Franzetti et al., 2011). Son una alternativa para el reemplazo de surfactantes químicos
producidos a partir del petróleo (Nitschke et al., 2004; Luna et al., 2012; Ismail et al., 2013). Estos
compuestos son producidos por una amplia variedad de bacterias y hongos. Por lo tanto, varios
tipos de estructuras se forman como fosfolípidos, glicolípidos, lipopéptidos, surfactantes
poliméricos y otros. Dependiendo de la estructura del biosurfactante, la interacción con los
contaminantes podría ser diferente (Sriram et al., 2011).
Los biosurfactantes tienen varias ventajas sobre los surfactantes producidos químicamente,
como menor toxicidad, mayor biodegradabilidad, compatibilidad ambiental mejorada, mayor
selectividad y actividad específica en condiciones de temperaturas adversas, pH, salinidad y,
finalmente, capacidad de síntesis a partir de materias primas renovables (Luna et al., 2012; Nalini
y Parthasarathi, 2013; Souza et al., 2014b).

Un problema importante en la producción de biosurfactantes son los costos involucrados en el

proceso. La fuente de carbono es responsable por una parte considerada de los costos de
producción de biosurfactantes (Li et al., 2016). Sin embargo, esto se puede reducir
significativamente mediante el uso de fuentes alternativas de nutrientes, que son fácilmente
disponibles y de bajo costo. El uso de desechos industriales como fuente de energía para la
producción de biosurfactantes es una alternativa atractiva a disminuir los costos de producción,
haciendo que el proceso sea viable (Al-Bahry et al., 2013). Los desechos agroindustriales con alto
contenido de carbohidratos, lípidos y proteínas son atractivos para ser utilizados como sustrato,
por lo general tienen los nutrientes necesarios (Nitschke y Pastore, 2002).

Residuos como glicerol (Souza et al., 2014a), lodo de petróleo (Pirôllo, 2006; Cameotra y Singh,
2008; Ibrahim et al., 2013), bagazo de caña de azúcar (Rakeshkumar et al., 2013) y desechos de
pescado (Aguiar et al. al., 2014) se puede utilizar como fuente de carbono en el proceso de
fermentación. En general, estas materias primas pueden usarse como fuentes de energía
distintas para diferentes microorganismos con la capacidad de producir biosurfactantes. Varios
microorganismos son capaces de producir biosurfactantes, entre los géneros bacterias tales
como Bacillus, Corynebacterium, Pseudomonas, Rhodococcus (Souza et al., 2014b). Bacterias
como Corynebacterium spp. (Pinto et al., 2009; Deon et al., 2012; Decesaro et al., 2013). y
Corynebacterium aquaticum (Pinto et al., 2009; Aguiar et al., 2014) son reportados en la
literatura como productores de biosurfactantes con baja tensión superficial y con capacidad
emulsionante.

Los compuestos a base de petróleo son altamente contaminantes cuando se liberan al medio
ambiente y se consideran en gran parte responsables de las principales causas de la
contaminación global. Una gran cantidad de estos compuestos son tóxicos y cancerígenos y
pueden causar daños a la salud humana y animal (Nalini y Parthasarathi, 2013). Entre estos
compuestos, los disolventes utilizados para la eliminación de pintura generalmente se adherían
a las superficies que mostraban impactos adversos ambientales. Para la reducción de estos
impactos es extremadamente importante para las técnicas de búsqueda con menos agresivo
hacia los contaminantes (Young et al., 2015). Según Mulligan (2005) los biosurfactantes son
compuestos que tienen varias ventajas en comparación con los surfactantes convencionales que
pueden usarse en procesos de biorremediación (agua y suelo), recuperación mejorada de
petróleo, solubilización de material insoluble, secuestro de metales y eliminación y
solubilización de pinturas. Por lo tanto, el objetivo de este estudio fue producir biosurfactantes
de Corynebacterium aquaticum y Corynebacterium spp. CCT 1968 utilizando diferentes fuentes
de carbono (desechos de pescado, bagazo de caña de azúcar, lodo de petróleo y glicerol) y
promueve la aplicación de biosurfactantes en la eliminación de pinturas de la superficie
metálica.
2. Materiales y métodos

2.1. Material

Las materias primas utilizadas como fuente de carbono para el cultivo fueron bagazo de caña de
azúcar (SCB), desechos de pescado (FW), glicerol crudo (GL) y lodo de petróleo de tanques de
almacenamiento (PS). El bagazo se obtuvo de los agricultores de Santo Antônio da Patrulha / RS,
Brasil. Los desechos pesqueros fueron proporcionados por Pescal Company en la ciudad de Rio
Grande / RS, Brasil, el residuo obtenido estaba compuesto por cabezas, huesos, piel, escamas,
músculos y vísceras. El glicerol en bruto fue proporcionado por la empresa BS BIOS, ubicada en
la ciudad de Passo Fundo / RS, Brasil. El lodo de petróleo restante de los tanques de
almacenamiento fue donado por la refinería de petróleo Riograndense, ubicada en Rio Grande
/ RS, Brasil.

2.2. Preparación de materia prima

El desperdicio de pescado se redujo usando un dispositivo de extracción mecánica (HIGH TECH,

HT / 2500, Brasil). Las fibras de bagazo se secaron en un horno (Modelo Q-314 D 242 - Quimis)
a 40 ° C durante 24 horas y se pusieron a tierra (Mill Type Willye TE-650 - Tecnal) para reducir el
tamaño de partícula (malla 100). El glicerol y el lodo se homogeneizaron manualmente.

2.3. Microorganismos
El microorganismo Corynebacterium aquaticum fue donado por el Laboratorio de Ingeniería
Bioquímica (LEB) ubicado en la Universidad Federal de Río Grande (FURG) Brasil. Este
microorganismo fue aislado de camiones de lavado que transportaban productos de
hidrocarburos. Corynebacterium spp. CCT 1968 fue obtenida por Tropical Culture Collection
(CCT) donada por la Fundación André Tosello, ubicada en São
Paulo / RS, Brasil. Los microorganismos se almacenaron a 4 ° C y se propagaron en
Matraces Erlenmeyer que contienen Agar Brain Heart Infusion (BHI) para el cultivo de
Corynebacterium spp. CCT 1968 y Agar Plate Count (PCA) para Corynebacterium
aquaticum. Ambos se incubaron a 37 ° C durante 48 h.

2.4. Medio de cultivo

El cultivo aeróbico se realizó en matraces erlenmeyer (500 mL) a 30 ° C y con agitación orbital
(Incubadora Modelo TE-420-Tecnal) a 200 rpm durante 48 h. El medio mineral se preparó
como se describe por Yeh et al. (2005), que consta de NH4NO3 (50 mM), Na2HPO4 (3 mM),
KH2PO4 (3 mM), CaCl2 (7 μM), MgSO4.7H2O (0.8 mM), EDTA de sodio (4 μM) y FeSO4.7H2O
( 2 mM). Se usaron fuentes de carbono en
concentraciones de 3, 5 y 7%. Después de la preparación del medio de cultivo, se esterilizó (AV
Vertical Autoclave Model 30 - Phoenix) para eliminar alguna contaminación preexistente. El
medio mineral se controló de la tensión superficial por medio de un tensiómetro (Kuss
Processor Tensiometer K-9, Alemania).
La adición de microorganismos se realizó según lo descrito por Makkar y Cameotra (1998). Los
microorganismos presentados en la superficie del agar en el erlenmeyer se eliminaron y se
diluyeron en medio mineral hasta una densidad óptica entre 0,8 y 0,9 (600 nm). La suspensión
se añadió en proporción del 2% (v / v). Los microorganismos se agregaron por separado.

2.5. Evaluación de producción de biosurfactantes

La producción de biosurfactantes se evaluó a las 0, 24 y 48 h de cultivo. Las muestras se

tomaron del reactor y se centrifugaron (Centrífuga Modelo MDW - 350 - Biosysten) durante 30
minutos a 8667 g para eliminar las células y los residuos sólidos. Luego, el análisis se realizó
como se describe a continuación.

2.5.1. Determinación de la tensión superficial

La tensión superficial (ST) del extracto que contiene los biotensioactivos se evaluó usando un
tensiómetro (Kuss Processor Tensiometer K-9, Alemania). Este equipo usa el método del anillo
de Du Nouy. Este anillo entra en contacto con el líquido formando una película líquido /
superficie que se alarga hasta la rotura, midiendo la fuerza máxima utilizada.

2.5.2. Actividad emulsionante

La determinación de la actividad emulsionante de aceite (EAo / w) se analizó de acuerdo con el

método descrito por Broderick y Cooney (1982). El extracto que contenía los biosurfactantes
se homogeneizó con aceite de soja usando vortex y luego, las muestras descansaron durante
24 h. La actividad emulsionante se calculó dividiendo la altura de la capa de emulsión por la
altura total de la mezcla y multiplicando por 100.

2.5.3. Carácter iónico del extracto biosurfactante

El carácter iónico se determinó como se describe por Meylheuc et al. (2001), utilizando la
técnica de doble difusión en agar. Esta técnica consiste en la evaluación de dos pozos de la
misma distancia creados en agar de baja dureza (1% de agar), a uno de ellos se le agregó una
solución de carga iónica conocida y en el otro, el biosurfactante.El compuesto aniónico
utilizado fue dodecilsulfato sódico 20 mM y solución catiónica
se usó cloruro de bario 50 mM. La aparición de las líneas entre los pocillos que contienen los
biosurfactantes y el compuesto iónico es capaz de sugerir el carácter iónico de los
biotensioactivos. La lectura se hizo después de 24 h de descanso.

2.6. Aplicación Biosurfactante

Los biosurfactantes producidos por Corynebacterium aquaticum con 3% de desechos de

pescado y 3% de bagazo de caña de azúcar se utilizaron para estudiar la eliminación de pintura
de la superficie del metal. La pintura de esmalte sintético se usó en el proceso de solicitud. La
pintura estaba compuesta de resina alquídica, pigmentos orgánicos e inorgánicos, aditivos y
solventes. La pintura era insoluble en agua y adecuada para revestir partes metálicas. El objeto
utilizado para sostener la pintura era una placa de metal (hierro) de 3 × 3 cm y 3 mm de espesor.
Las placas de metal se sumergieron en un recipiente con pintura, después de que se retiraron
del recipiente y se suspendieron para eliminar el exceso de pintura. Por lo tanto, la placa que
contiene la capa de pintura aún húmeda se colocó en una placa de Petri y se cubrió con la
solución respectiva para cada tratamiento. Las soluciones utilizadas para cubrir las placas fueron
seleccionadas previamente. Se utilizaron cuatro tratamientos, agua destilada, solvente
(trementina solvente que consiste en una mezcla de hidrocarburos), biosurfactante producido
con desechos de pescado y biofluvidante producido con bagazo de caña de azúcar. Las placas de
metal permanecieron P.C. Martins, V.G. Martins International Biodeteriorration &
Biodegradation 127 (2018) 10-1611 durante 15 días bajo sacudida orbital (incubadora Modelo
TE-420 - Tecnal) con una rotación de 50 rpm a temperatura ambiente. A los 0, 1, 3, 5, 7, 10 y 15
días, se realizó un análisis macroscópico del aspecto de los metales sometidos a cada
tratamiento.

3. Resultados y discusión

3.1. Tensión superficial y actividad emulsionante de extractos biosurfactantes

Cuando se usan fuentes de carbono alternativas, los microorganismos normalmente usan

moléculas de carbohidratos y grasas primero (Nitschke y Costa, 2007). El FW ha compuesto
13.8% de grasas y 0.5% de carbohidratos (datos no mostrados). Se cree que los microorganismos
podrían usar grasas para la producción de biosurfactantes. En el caso de SBC como fuente de
carbono, el compuesto principal son los carbohidratos con 79% (datos no mostrados). Por lo
tanto, es posible que los microorganismos usen carbohidratos para el crecimiento de
microorganismos y la producción de biosurfactantes. Conforme a los resultados obtenidos, el
Corynebacterium aquaticum presentó una buena capacidad de uso en ambos tipos de sustratos.
La producción de biosurfactantes usando Corynebacterium aquaticum y FW como fuente de
carbono en 48 h de cultivo disminuyó la tensión superficial en aproximadamente un 25% (Fig.
1A). Las concentraciones de 3 y 5% de desechos de pescado mostraron reducciones en la tensión
superficial de 37.4 y 36.9 mN / m a 27.8 y 28.1 mN / m, respectivamente, en 48 h de
fermentación. La reducción en la tensión superficial es una indicación de que los
biotensioactivos se produjeron en el medio de cultivo. La baja tensión superficial inicial se puede
asignar a la composición de FW. Los residuos están compuestos de diferentes estructuras y esto
puede interferir con la tensión superficial. Los valores de actividad emulsionante estuvieron
entre 65 y 95%. Al comienzo de la fermentación (tiempo 0), la actividad emulsionante del cultivo
que contenía residuos de pescado fue alta (Figura 1A).
De acuerdo con He et al. (2013), las proteínas y los péptidos tienen propiedades funcionales,
tales como solubilidad, capacidad de retención de agua, viscosidad, capacidad de gelificación,
propiedades emulsionantes, capacidad de espuma y elasticidad. El desecho de pescado tiene
una gran cantidad de proteínas (14.4 ± 0.30 fechas no se muestran). Por lo tanto, la alta actividad
emulsionante al comienzo del cultivo es asignada por las proteínas del pescado dispersado en el
medio. El experimento que contenía SCB al 3% (Fig. 1B) mostró una reducción en la tensión
superficial de aproximadamente 21% con respecto a la tensión superficial inicial. Rakeshkumar
et al. (2013) utilizó el microorganismo Klebsiella sp. La cepa RJ-03 y varios sustratos, incluido el
bagazo de caña de azúcar para la producción de biosurfactantes. Estos autores obtuvieron una
tensión superficial de 47.1 mN / m en 72 h de cultivo, lo que demuestra que es posible obtener
biosurfactante usando SCB. Sin embargo, en nuestros estudios, el

tensión superficial obtenida utilizando el mismo sustrato, pero en otras condiciones fue 41.8 mN
/ m. El uso de SCB como fuente de carbono para el desarrollo de biosurfactantes mostró altos
valores de actividad emulsionante (80.1%) para el experimento compuesto de 7% SCB en 48 h
(Fig. 1B). Los valores crecientes de la actividad emulsionante a las 24 y 48 h son indicativos de la
producción de bioproductos. Slivinski et al. (2012) produjeron biosurfactantes de Bacillus
pumilus UFPEDA448 usando bagazo de caña de azúcar y glicerol como sustrato a
concentraciones de 5 g / l. Los autores obtuvieron el 52.5% de la actividad

En comparación con sus resultados, en el presente estudio, la mayor actividad emulsionante es

indicativa de una mayor capacidad de Corynebacterium aquaticum para utilizar los nutrientes
contenidos en SCB.

Con respecto al uso de lodo de petróleo, hubo una baja reducción (6%) de la tensión superficial
inicial relacionada con la tensión superficial final en 48 h (Figura 2A). Este comportamiento
mostró que este microorganismo probablemente no asimiló los compuestos del lodo de
petróleo a la producción de biosurfactantes. Pirôllo (2006) utilizó residuos de petróleo para la
producción de biosurfactantes y observó que la producción de biosurfactantes altos se producía
cuando usaba una concentración de petróleo más alta. El aumento de sustrato
la concentración genera estrés en los microorganismos cambiando la ruta metabólica para la
producción de biosurfactantes. El autor también comenta que la producción de biosurfactante
que utiliza este sustrato, en general, se atribuye a microorganismos aislados de sitios de
hidrocarburos contaminados. El uso de glicerol como fuente de carbono para obtener
biotensioactivos (figura 2B) demuestra que este sustrato puede no ser utilizado como fuente de
carbono para la producción de biosurfactantes por este microorganismo. La producción de
biosurfactante, en general, ocurre cuando la tensión superficial se reduce de acuerdo con el
proceso de fermentación en curso, pero, en este caso, no sucedió. Zouari et al. (2015) cree que
la tensión superficial inicial muy baja en el comienzo del cultivo con glicerol se debe a las
características de la estructura de glicerol, que se considera un surfactante. Silva et al. (2010)
utilizaron el glicerol residual para la producción de biosurfactantes con Pseudomonas
aeruginosa UCP0992. Los resultados mostrados por estos autores son indicativos de que es
posible la producción de biosurfactantes usando glicerol. Por lo tanto, la producción de
biosurfactantes por Corynebacterium aquaticum utilizando glicerol como fuente de carbono no
fue eficiente, en nuestro estudio.

Desechos de pescado utilizados como fuente de carbono para obtener biotensioactivos con
Corynebacterium spp. CCT 1968 (Tabla 1) mostró una disminución máxima en la tensión
superficial a las 48 h de cultivo. El uso del 3% del residuo permitió obtener el extracto con la
tensión superficial más baja (28.5 mN / m). La alta actividad emulsionante mostró el mismo
comportamiento presentado en la Fig. 1A que puede explicarse por la concentración de
proteína. La disminución de la actividad emulsionante a lo largo del proceso sugiere que las
proteínas promovieron la actividad emulsionante inicial y luego sufrieron la acción de
microorganismos que reducen sus propiedades emulsionantes. El uso del bagazo de caña de
azúcar como fuente de carbono por el microorganismo Corynebacterium spp. CCT 1968 mostró
una pequeña disminución en la tensión superficial inicial durante el cultivo. El uso de bagazo de
caña de azúcar fue mencionado en la literatura por varios estudios (Slivinski et al., 2012;
Rakeshkumar et al., 2013; Sarubbo et al., 2015). El cultivo realizado utilizando SCB como fuente
de carbono obtuvo una actividad de exterminación de 88.3% a las 48 h (Tabla 1). Aunque la
superficie

la tensión medida para el biosurfactante producido a partir de este sustrato no mostró una gran
disminución, ambos análisis no están necesariamente relacionados. Un biosurfactante puede
tener una mejor capacidad emulsionante que un buen agente reductor de la tensión superficial.
Este comportamiento está relacionado con el tipo de biosurfactante que se produce en el medio.
Según Christofi e Ivshina (2002), el biosurfactante se puede segregar de acuerdo con su peso
molecular. Los biosurfactantes de bajo peso molecular tienen un mejor rendimiento en la
reducción de las tensiones superficiales e interfaciales, mientras que los biosurfactantes de alto
peso molecular actúan más eficazmente en los procesos de emulsificación.

La tensión superficial obtenida en cultivo utilizando lodo de petróleo (Tabla 1) tuvo un ligero
cambio durante el cultivo, por lo que no es posible evaluar la presencia de biotensioactivos. El
mismo comportamiento se encontró para el cultivo llevado a cabo con glicerol. A través de la
tensión superficial no fue posible verificar la producción de biosurfactantes, debido a la baja
variación de la tensión superficial. El uso de glicerol como fuente de carbono para el cultivo que
contiene Corynebacterium spp. CCT 1968 mostró alta

actividad emulsionante en el tiempo cero y luego ha estado disminuyendo durante el cultivo. La

alta actividad emulsionante inicial se atribuye a los componentes generalmente presentes en la
glicerina cruda, por ejemplo, los jabones obtenidos del proceso de biodiesel. Además, el glicerol
también se puede considerar surfactante.

Aunque los cultivos estaban compuestos de un medio mineral, mostró inerte al parámetro de
tensión superficial, ya que la medición de la tensión superficial del valor del medio mineral
obtenido 69 mN / m, valor cerca de la tensión superficial del agua que está alrededor de 72 mN
/ m. Por lo tanto, las variaciones en las tensiones superficiales en el tiempo cero se pueden
atribuir solo a las fuentes de carbono presentes en el medio ambiente.

De acuerdo con Batista et al. (2006) un biosurfactante se considera efectivo cuando tiene la
capacidad de disminuir la tensión superficial a los valores por debajo de 40 mN / my para
estabilizar las emulsiones al menos el 50% del total volumen por 24 h. La producción de
biosurfactantes por Corynebacterium Aquaticum utiliza desechos de pescado y bagazo de la
caña de azúcar como fuente de carbono mostró buenos resultados tensiones superficiales
obtenidas utilizando desechos de pescado como la fuente de carbono mostró valores por debajo
de 30 mN / m en los mejores casos. Para la producción de biosurfactantes usando el mismo
microorganismo y reemplazando la fuente de carbono con bagazo de caña de azúcar, tensión
superficial mostró valores alrededor de 33 mN / my los valores más altos de emulsificación
actividad mayor que 80%. La producción de biosurfactantes está directamente relacionada al
productor de microorganismos, sustrato utilizado y condiciones del proceso. Surfactin es un
biosurfactante comercial. Este bioproducto tiene capacidad de reducir la tensión superficial del
agua de 72 a 28 mN / m (Barros et al., 2007). La reducción en los resultados de tensión superficial
obtenidos por los biosurfactantes producidos a partir de desechos de peces por ambos
microorganismos Indican una capacidad similar a esos biosurfactantes. Los biosurfactantes se
pueden aplicar en varias industrias. La aplicación está directamente relacionado con las
propiedades de los biosurfactantes. Biosurfactantes con alta capacidad emulsionante, como
emulsionantes y agente solubilizante para productos alimenticios. Por el contrario, los
biotensioactivos con alto capacidad para reducir las tensiones superficiales se puede utilizar en
la solubilización proceso (reduciendo el área de contacto) y proceso de biorremediación. Por lo
tanto, ambos biosurfactantes mostraron mejores resultados (biosurfactantes) producido por
Corynebacterium aquaticum con 3% de FW y 3% de SCB) ser utilizado en diversos procesos
industriales.

3.2. Carácter iónico de extractos de biosurfactante

El carácter iónico de los bioproductos es una indicación para el futuro Aplicaciones. La

determinación del carácter iónico de los biosurfactantes es considerado un parámetro
importante porque dirige el uso de estos compuestos Independientemente de la carga
biotensiva activa, estos pueden ser utilizados como emulsionantes, surfactantes o agentes en
procesos de biorremediación en ambientes contaminados con contaminantes Sin embargo, solo
biotensioactivos que tienen cargas negativas se pueden utilizar como carroñeros en el suelo
procesos de remediación y agua contaminada con metales. El aniónico carga biosurfactante
atrae el ion de metal catiónico y reduce la disponibilidad de metales en el medio ambiente.
Cuando el biosurfactante está relacionado con surfactantes convencionales, que pueden o no
tener la capacidad de eliminar metales, biotensoactivos es ventajosa porque, tienen baja
toxicidad, son biodegradables y se derivan de fuentes renovables fuentes. Para extractos
biosurfactantes producidos por Corynebacterium aquaticum las culturas que usan residuos de
pescado y glicerol mostraron un carácter aniónico. En cultivos que utilizan lodo de petróleo y
bagazo de caña de azúcar no fue posible observar el carácter iónico. Usando Corynebacterium
spp. CCT 1968 para producir biosurfactantes a partir de residuos de pescado y bagazo de caña
de azúcar Los caracteres aniónicos se verificaron para ambos. Los otros extractos (barro y
glicerol) no mostró halos haciendo imposible verificar el carácter biosurfactante Silva et al.
(2010) realizaron el mismo experimento para determinar el carácter iónico del biosurfactante
producido por Pseudomonas aeruginosa utilizando glicerol como sustrato y se obtuvo
confirmación de aniónico carácter de los biosurfactantes. Meylheuc y col. (2001) determinaron
la iónica carácter de los biosurfactantes producidos por Pseudomonas fluorescens 495 y
encontró la difusión de biosurfactante y formación de halo cerca las soluciones de cloruro de
bario y bromuro de cetiltrimetilamonio (CTAB), ambas soluciones con un carácter positivo
destacando el aniónico carácter del bioproducto.

3.3. Aplicación de biosurfactantes

La figura 3 muestra el momento en que las placas cubiertas por pintura se sumergieron en las
soluciones respectivas. Los metales con pintura fresca se sumergieron en los solventes antes de
que estuvieran completamente secos. El análisis se llevó a cabo con pintura fresca tratando de
simular problemas fundados con los contenedores que se utilizan para transportar pintura
fresca en barcos, esos contenedores necesitan ser limpiados para volver a las industrias y luego
son necesarios el uso de solventes tóxicos, como xileno y tolueno, para lavarlos.

Usar biosurfactantes para lavar esos contenedores podría ser una buena solución para tratar
compuestos menos agresivos, y también es más seguro para los manipuladores y el medio
ambiente. La estructura del biosurfactante es extremadamente importante en la eliminación
proceso de pintura La molécula anfipática de biosurfactantes puede conectarse al material
insoluble en agua y al mismo tiempo aumentar la dispersión del agua y la solubilización de
diferentes compuestos (Silva et al., 2014). En el momento de la aplicación, se observó que el
biosurfactante eliminaba la pintura de la superficie metálica y solubilizaba la pintura en el
extracto acuoso. El principal disolvente de biosurfactantes en la fermentación fue el medio
mineral. Este medio es compuesto con sales y agua, por lo que el medio mineral no tuvo
influencia en la solubilización y eliminación de pintura. La acción de eliminación de pintura, en
este caso, se asigna a los biosurfactantes. Observando las Figs. 3 y 4 las placas metálicas tienen
varias diferencias. Se puede ver, en el tiempo cero, que las placas sumergidas en agua mostraron
que la pintura permaneció en la superficie del agua en forma no diluida.

(Fig. 3A), mientras que las placas sumergidas en disolvente (Fig. 3B) mostraron una pequeña
cantidad de pintura diluida en el disolvente. Las placas sumergidas en el medio que contiene los
biosurfactantes producidos a partir de desechos de peces (Fig. 3C), inicialmente, no
interactuaron con el bioproducto, y las placas que contienen los biotensioactivos producidos a
partir de bagazo de caña de azúcar (Fig. 3D) mostraron una porción solubilizada en el medio.

En el ensayo que utiliza los biosurfactantes producidos a partir de FW (15 d) es posible observar
pintura diluida en el medio (Fig. 4C). Este comportamiento nos mostró que el bioproducto fue
capaz de eliminar la pintura de la superficie metálica. El ensayo que utiliza los biosurfactantes
producidos a partir del bagazo, en comparación con el tiempo cero, es más oscuro, aunque no
eliminó totalmente la pintura. Parte de la pintura eliminada se solubilizó en el medio

(Fig. 4D). La placa que estaba sumergida en agua, después de 15 días, no mostró ninguna la
eliminación de la pintura, la mancha presentada en la Fig. 4A está en el fondo de la placa de Petri
y no en la pintura solubilizada. La placa que contenía el disolvente apropiado alcanzó la
solubilización de la pintura en el medio y, después de este proceso, la pintura se adhirió
nuevamente a la superficie metálica, pero se eliminó fácilmente. El uso de biosurfactantes
producidos por los desechos de pescado no promovió la solubilización de la pintura, sin
embargo, la capa de pintura se mostró más delgada que la superficie de metal tratada con agua.
Los biosurfactantes producidos a partir de bagazo de caña de azúcar fueron los más
prometedores en el uso como agente de eliminación de pintura y en el proceso de solubilización.
Una vez, esto podría eliminar la mayor parte de la pintura adherida a la superficie metálica y
solubilizarse en un medio que contenga extracto de biosurfactante. Este comportamiento se
puede atribuir a la alta actividad emulsionante mostrada para este compuesto biológico (80.1%).

Según Mulligan (2005), los biosurfactantes tienen varios usos potenciales en la industria. Entre
estas posibilidades de aplicación podemos encontrar pinturas solubilizadas. Sin embargo, en la
literatura no hay información sobre el uso de biosurfactantes como agente de eliminación de
pintura de superficie. Se sabe que los biosurfactantes son moléculas capaces de solubilizar una
variedad de componentes hidrofóbicos de diferentes materiales, como vegetales

aceites o productos derivados del petróleo.

4. Conclusión

Los microorganismos Corynebacterium aquaticum y Corynebacterium spp. CTT 1968 mostró una
producción eficiente de biosurfactantes. Entre los desechos industriales utilizados, el
desperdicio de pescado y el bagazo de caña de azúcar fueron más eficientes como fuente de
carbono para los biosurfactantes producidos. Los biosurfactantes producidos con estas fuentes
de carbono mostraron una reducción de la tensión superficial a valores por debajo de 40 mN /
m. Ellos eran
también es capaz de mantener la actividad emulsionante por encima del 50%. El lodo de
petróleo y el glicerol no fueron efectivos en la producción de biosurfactantes. Los extractos
biosurfactantes estudiados se consideraron con carácter aniónico. Los biosurfactantes
producidos a partir de bagazo de caña de azúcar mostraron ser prometedores en la
solubilización y eliminación de pintura.