Tecnología de la Construcción
Estructuras Resistentes
Investigación Bibliográfica
Protección
El recubrimiento metálico consiste en aplicar mediante electro deposición galvánica o
baño en caliente, una delgada capa de un metal no ferroso, que puede ser zinc, cromo,
cadmio, cobre o estaño, cuyos óxidos son estables y evitan la corrosión del acero. Este
tratamiento, conocido como galvanizado, debe practicarse en talleres sobre las piezas
terminadas, ya que el mismo se destruye con el corte, la práctica de agujeros y otras
acciones de maquinado. Las resinas aplicadas son del tipo epoxy, de buena adherencia
a la base y gran estabilidad ante los agentes químicos agresivos. Las pinturas son
esmaltes sintéticos de base alkydica. Se aplican sobre una base de antióxido al
cromato de zinc que favorece la adherncia. Estas pinturas no detienen el proceso de
corrosión, sólo recubren la superficie del material, evitando el contacto con el aire y la
humedad. En cambio los denominados convertidores de óxido si lo hacen, ya que se
combinan químicamente con el oxido de hierro y lo estabilizan.
Con respecto a la acción del fuego, se dan dos circunstancias. La primera se produce a
partir de los 4000C, una temperatura que, en caso de incendio, se alcanza en pocos
minutos y en la que comienza a disminuir la resistencia mecánica del acero, hasta
llegar a sólo al 5% a 7000C
El otro problema se relaciona con el elevado coeficiente de dilatación térmica lineal del
material, lo que provoca una gran deformación de los elementos estructurales y la
consiguiente rotura de los medios de unión: pernos, remaches, etc.
Protección
Los medios de protección contra la acción del fuego en los elementos estructurales de
acero se basan en la ejecución de revestimientos con materiales que retrasan el efecto
del calor, como las albañilerías, morteros y hormigones.
ELEMENTOS CARACTERÍSTICOS DE LAS ESTRUCTURAS DE ACERO
PERFILES LAMINADOS: Obtenidos por laminación en caliente estos perfiles adquieren
secciones variadas para adaptarse a distintas exigencias estructurales. Constituyen la
mayor parte de las estructuras de barras y su longitud estándar es de 6.00 metros, si
bien se pueden producir, a pedido, largos especiales mayores.
Sus características mecánicas y dimensionales están establecidas en normas
internacionales, por lo que en la práctica se conocen como perfiles normalizados.
PERFIL DOBLE T (DIN 1025): Fue desarrollado en Inglaterra en 1826. Por su elevado
momento de inercia, la forma de su sección transversal lo hace especialmente indicado
para trabajar a flexión. Se lo emplea como viga simple o como vigueta de entrepisos y
bovedillas. Se los designa por su altura en centímetros. Al fijar la altura quedan
definidas todas las demás características geométricas: ancho de ala, espesor del alma,
espesor del ala, etc. En el perfil normal, el ancho del ala equivale a la mitad de la
altura, pero también se fabrica el tipo de ala ancha, donde el ancho de ala es igual a la
altura del alma, en las variantes Peiner de alas paralelas y el Grey de alas inclinadas.
PERFIL U (DIN 1026): Se utiliza para formar secciones compuestas de columnas
cuadradas. También como correas para techos inclinados. Sus características
dimensionales y estáticas son similares a las del perfil doble TE
PERFILES ANGULO (DIN 1028 Y 1029): Estos perfiles se emplean, junto al perfil TE, en
la construcción de barras de reticulado. Los cordones inferior y superior se forman
como perfiles simétricos, como el TE, y las diagonales y puntales, con dos perfiles L
unidos al alma del anterior, facilitando las uniones en los nudos. Hay una gran
variedad de medidas en ángulos de alas iguales y desiguales en relación 1:2 y 2:3. A
cada medida le corresponden 2 o 3 espesores distintos, designándoselos por las
medidas de sus alas y el espesor en milímetros:
P. ej.: 20 x 20 x 3; 45 x 45 x 8; 60 x 30 x 6; 60 x 40 x 6, etc.
PERFILES T (DIN 1024): Sus aplicaciones son las mismas que las del ángulo Se
diferencian los de ala corta, en los que el ancho del ala es igual que la altura, y los de
ala ancha, en los que ésta es igual al doble de la altura del perfil. Se los designa por el
ancho del ala, la altura y el espesor en milímetros:
P. ej.: 30 x 30 x 4; 60 x 60 x 7; 60 x 30 x 6; 80 x 40 x 8, etc.
CAÑOS ESTRUCTURALES
En los últimos años ha cobrado gran difusión el uso de barras de chapas delgadas
plegadas en forma de perfiles U y C y caño estructural de sección rectangular.
Estos, al igual que los perfiles U, se caracterizan por el ancho, la altura y el espesor de
la chapa. Los perfiles C además por la medida de la pestaña. Los fabricantes
proporcionan tablas en las que se indican las dimensiones de los distintos tipos, las
características estáticas (momento estático, momento de inercia, módulo resistente y
radio de giro) con respecto a los ejes x e y, y el peso del perfil por metro lineal. La
principal aplicación de estos elementos es su utilización como viguetas de entrepisos y
correas en estructuras de cubierta. Los caños estructurales también se utilizan para
construir armaduras de cubiertas (cabriadas) o vigas reticuladas.
MEDIOS DE UNIÓN
La producción de acero para uso estructural se da en forma de barras lisas, caño
estructural de sección circular o rectangular y perfiles laminados.
En algunos casos, la forma del perfil está desarrollada para que el mismo se pueda
utilizar directamente. Tal el caso del perfil doble te, especialmente diseñado para ser
utilizado en vigas y viguetas sometidas a esfuerzos de flexión. Pero la mayoría de las
veces los elementos de estructuras de acero ofrecen secciones compuestas o
constituyen estructuras reticuladas, debiendo aplicarse distintos procedimientos para
unir los elementos simples. Los medios de unión utilizados son los pernos, la
roblonadura y la soldadura.
Al igual que en el caso de las maderas, las uniones con pernos son desarmables y se
prestan mejor para los trabajos de armado y montaje en obra. Requieren la
preparación de las piezas mediante el perforado. Las uniones mediante roblones y la
soldadura no son desarmables, y son más apropiadas para el trabajo en taller, donde
las condiciones de trabajo y el equipamiento de herramientas proporcionan mejores
resultados y condiciones laborales. Los roblones son vástagos cilíndricos de acero,
provistos de una cabeza semiesférica que se calienta a una temperatura de 1200° C y
se introduce en agujeros practicados en las piezas a unir. Mientras se presiona la
cabeza con una herramientas especial, se golpea el otro extremo en caliente hasta
formar una contra cabeza (remache). El material se expande y llena totalmente el
agujero. Al enfriarse, el vástago se contrae, presionando el paquete de chapas a unir,
quedando fuertemente traccionado. Las Normas establecen, al igual que para los
pernos, disposiciones relativas a las tensiones, diámetro y longitud de los elementos,
separación entre agujeros, distancia a los bordes de las piezas, etc.
La soldadura es la propiedad tecnológica que tienen en general los metales, de unirse
por presión cuando son calentados a temperatura de fusión. La soldadura puede ser
autógena o con material de aporte. En la primera la unión se produce por simple
presión entre las partes a unir, debidamente calentadas. La fuente de calor puede ser
la llama de un soplete oxiacetilénico o una corriente eléctrica de gran intensidad y baja
tensión (soldadura eléctrica por puntos). Más utilizada es la soldadura de arco, donde
el material de aporte lo constituye el mismo electrodo. Se provoca un arco voltaico
entre el electrodo y la pieza y el calor que se genera funde al primero, cayendo en
forma de cordón de soldadura. Este puede adoptar distintas formas respecto a la
dirección de los esfuerzos: a tope, superpuestas y en ángulo. Las uniones a tope
generalmente corresponden a piezas coplanares de espesores iguales, mientras que en
las soldaduras superpuestas y en ángulo la soldadura se realiza en forma de cordones
frontales o paralelos con relación a la dirección de los esfuerzos a transmitir.
MADERA
LA MADERA COMO MATERIAL DE USO ESTRUCTURAL
La madera es un material esencialmente orgánico, por lo que tiene características
particulares propias de su origen natural que deben conocerse para su empleo como
material de construcción y en particular en función estructural.
De acuerdo a la clasificación de Tortorelli, las maderas se clasifican por su peso
específico establecido para un contenido de humedad del 15%, desde muy livianas,
con peso específico menor a 320 kg/m3, a muy pesadas con peso específico mayor a
1000 kg/m3 Las maderas utilizadas en construcción son, en general, semiduras (500 a
700 kg/m3), si bien la mayoría de las coníferas explotadas comercialmente, tienen un
peso específico algo inferior a los 450 kg/m3
La madera está formada por fibras que cumplen función de sostén y por vasos. Las
paredes celulares están compuestas en un 60% por celulosa y un 35% por lignina, un
ligante de las fibras.
La madera suele presentar diversos defectos que alteran sus propiedades y su
comportamiento, los que son producidos por acciones físicas o por agentes biológicos,
como los nudos, el hilo torcido, las grietas radiales y la acebolladura. Los nudos se
originan en la inserción de ramas en el tronco. Si son sanos y firmes no afectan a la
madera, pero en las especies resinosas se desprenden con facilidad por desecación de
la madera. La poda del árbol suele generar nudos recubiertos encerrando restos de
corteza que por su posterior putrefacción, modifican la calidad de la madera. El hilo
torcido es un defecto de crecimiento y produce disminución de la resistencia
mecánica. Las grietas radiales, llamadas rajas, se deben al frío intenso o a la desecación
del corazón y también afectan la resistencia. La acebolladura, otro defecto de
crecimiento, consiste en la separación de capas interiores de células, que favorece su
desprendimiento y eventual putrefacción. El envejecimiento de la madera ya aserrada,
es un proceso de oxidación lenta acompañada de ennegrecimiento que no afecta las
condiciones mecánicas, pero se deteriora el aspecto.
Degradación biológica
Hongos
Los hongos son organismos vegetales que no tienen clorofila, por lo tanto como no
pueden producir sus propios alimentos, viven de los carbohidratos contenidos en la
madera. Una vez que la madera ha sido infectada, esta se va pudriendo poco a poco y
se van produciendo cambios en la coloración de la madera y en su textura que
dependen del tipo de hongo que la haya atacado. Así la madera se puede volver seca,
blanda y esponjosa o débil.
Para que el crecimiento del hongo se produzca la madera tiene que reunir una serie de
condiciones que detallamos a continuación:
a) Que los hongos tengan alimento: Los tejidos leñosos de la madera y el contenido de
las células de la albura de la madera son el alimento de los hongos. Como se alimentan
de la celulosa y de la lignina hacen que la resistencia de la madera se reduzca. Hay
hongos que producen pudrición de la madera y otros que no. Estos últimos se
alimentan de almidones, azucares y grasas almacenadas por lo que no influye en la
resistencia de la madera. Lo único que producirán será una decoloración de la misma
. b) Humedad adecuada: Si no hay humedad no se puede dar la pudrición. La cantidad
de humedad necesaria depende del tipo de hongo pero se puede decir que es
necesario un 20 % de humedad para que la pudrición progrese. Una vez que la
pudrición avanza, se puede interrumpir si se reduce el contenido de agua, pero el
hongo no muere. Permanece inactivo hasta que las condiciones de humedad que
permiten su desarrollo se vuelvan a reestablecer.
c) Temperatura adecuada: Por regla general, por debajo de 2ºC no existe pudrición, y
muy pocos hongos aguantan temperaturas superiores a 40ºC. Las temperaturas entre
45º a 75º son mortales para los hongos. Entre 21 y 29 º son las condiciones óptimas de
crecimiento.
d) Aire/oxígeno: Los hongos que producen pudrición solo requieren un contenido de 5
% de oxígeno en el aire. Así que este factor no suele ser limitante. Pero hay que tener
en cuenta que el crecimiento del hongo se detiene por inmersión en el agua o si son
enterrados en profundidad debido a la falta de oxígeno. El mecanismo del ataque de
un hongo consiste en una descomposición química de la celulosa y la lignina. La
velocidad y la magnitud del ataque a uno u otro componente dependen del tipo de
hongo. Los hongos se pueden clasificar en 4 grupos: hongos que producen coloración
en la madera, hongos que atacan a los árboles en pie, hongos que atacan a los árboles
recién cortados o muy húmedos y hongos que atacan a la madera en servicio.
Insectos xilófagos
Son insectos que se alimentan exclusivamente de la madera. El más conocido entre
ellos son las Termias. Causan importantes daños en la madera almacenada como en la
utilizada en construcciones, viviendas, estructuras, muebles, etc. El insecto causa el
mayor daño en su fase de crecimiento. El ataque consiste en la perforación de galerías
en la madera que pueden conducir a la destrucción de la misma. Al igual que pasaba
con los hongos, los insectos requieren de unas condiciones concretas para su
desarrollo. En torno a los 45-50ºC los insectos entran en una fase de aletargamiento en
el que se interrumpe su actividad. El insecto muere cuando se alcanzan unas
temperaturas de entre 50-55ºC. Las temperaturas bajas también pueden causar la
muerte del insecto pero son necesario temperaturas por debajo de 0ºC.
Médula: Parte central del árbol. Constituida por tejido flojo y poroso. Tiene un
diámetro muy pequeño. Madera vieja y normalmente agrietada. Se suele
desechar en los procesos de elaboración de la madera.
Duramen: Madera de la parte interior del tronco. Constituido por tejidos que
han llegado a su máximo desarrollo y resistencia (debido al proceso de
lignificación.) De coloración, a veces, más oscura que la exterior. Madera adulta
y compacta. Es aprovechable.
Albura: Se encuentra en la parte externa del tronco, bajo la corteza.
Constituida por tejidos jóvenes en período de crecimiento (zona viva). Contiene
mucha savia y materias orgánicas. De coloración más clara que el duramen,
más porosa y más ligera, con mayor riesgo frente a los ataques bióticos.
Cambium: Capa existente entre la albura y la corteza, constituye la base del
crecimiento en especial del tronco, generando dos tipos de células: hacia el
interior: albura; hacia el exterior: líber.
Líber: Parte interna de la corteza. Es filamentosa y poco resistente. Madera
embrionaria viva.
Corteza: Capa exterior del tronco. Tejido impermeable que recubre el líber y
protege al árbol.
FACTORES NEGATIVOS
PROTECCION DE LA MADERA
Existen distintos métodos para preservar la madera del ataque de parásitos e insectos
xilófagos mediante recubrimiento o impregnación. El primero consiste en el recubrir la
madera con aceites y otras sustancias: aceite de lino, alquitrán de hulla, asfalto,
pinturas sintéticas y barnices. La impregnación se puede realizar por inmersión o por
inyección. La inmersión es un procedimiento económico que demora entre 1 y 10 días
y alcanza una penetración de entre 5 y 15 mm, empleándose insecticidas o fungicidas:
aceite de creosota, sulfato de cobre, cloruro de zinc, y fluoruro de sodio y de potasio.
La inyección consiste en reemplazar en la madera verde la savia orgánica por una
solución de DDT o de otros insecticidas. Es un proceso lento que puede demandar
entre 6 días, proceso Boucherie de inyección longitudinal, hasta 3 meses (método
osmótico de inyección radial).
TRATAMIENTOS SUPERFICIALES
Carbonización
Se emplea en maderas que van a estar en contacto con el suelo o enterradas. Consiste
en carbonizar la zona superficial en una profundidad de unos pocos milímetros. Sus
efectos no son muy durables por lo que no es el mejor de los tratamientos.
Pintado
Mediante este método conseguimos una madera menos impermeable al agua y que
resiste mucho mejor a los agentes destructores. Es un método barato y tenemos que
aplicarlo periódicamente para que su efecto no desaparezca. Podemos emplear
resinas, lacas, alquitranes o el carbolíneo (mezcla de alquitrán y petróleo). Estos dos
últimos se emplean sobre todo en exteriores.
UNIONES DE MADERAS
Un empalme es la unión que se realiza para aumentar la longitud de una pieza. El
ensamble permite obtener elementos de mayor sección y también la vinculación entre
distintas piezas, como sucede en los nudos de reticulados. La junta es la unión que se
realiza a lo largo del canto de una pieza, como el machihembrado que se practica en
las tablas. Las uniones se realizan practicando cortes y entalladuras llamadas uniones
de carpintero, cuya finalidad es facilitar la transmisión de los esfuerzos en forma
eficaz, complementados con medios auxiliares de unión, para asegurar la inmovilidad
de las distintas partes y colaborar en la transferencia de los esfuerzos. Los medios
auxiliares mas utilizados son los clavos, pernos, chapas, grapas y colas, entre otros.
- UNIONES DE CARPINTERO
La forma de vincular las piezas se relaciona con el tipo de esfuerzo que deben
transmitir las partes a unir. Los empalmes en piezas comprimidas pueden hacerse a
tope, aunque es mas frecuente hacerlas mediante cortes a media madera, rectos u
oblicuos, pero siempre se debe complementar la unión con medios auxiliares para
inmovilizar la unión. En cambio en uniones de piezas traccionadas se usa el corte a
media madera oblicuo en zig zag:
La madera se presta para la construcción de estructuras formadas por barras, como las
vigas y cabriadas reticuladas, por lo que son variados los casos que se presentan para
vincular las barras en los nudos. Algunos tipos de uniones son a caja y espiga, a cepos,
embarbillado y a espera.
En todos los casos la unión debe consolidarse con medios auxiliares.
- UNIONES ENCOLADAS: Son uniones muy eficaces para unir piezas paralelas,
formando secciones compuestas de gran longitud, como las vigas y otros elementos de
madera laminada. Las colas que se usan como adhesivo son de origen inorgánico,
como las fenólicas y las ureicas, más estables bajo la acción del calor y la humedad que
las vinílicas y las colas de origen orgánico. Las tablas que se utilizan tienen espesores
comprendidos entre ¾” y 2”, aprovechándose tramos cortos. La posibilidad de curvar
las tablas antes del encolado, permite obtener elementos curvos, sin limitaciones de
forma ni de longitud.
NUDO ARTICULADO
HORMIGÓN ARMADO
ESTRUCTURAS DE HORMIGON ARMADO
El hormigón de cemento es un material que resiste solicitaciones de compresión de
100 a 350 kg/cm2, pero estos valores se reducen al 10% cuando los esfuerzos son de
tracción. La incorporación de armaduras de acero en forma de barras ubicadas
convenientemente, permiten absorber satisfactoriamente las tensiones de tracción
originadas en la flexión de las piezas.
La asociación de estos dos materiales que permite absorber la mayor parte de los
esfuerzos a los que están sometidas las estructuras, es posible merced a dos factores:
a) las fuerzas de adherencia que se desarrollan entre los dos materiales son
importantes y b) los mismos tienen coeficientes de dilatación térmica comparables.
La forma, posición y diámetro de las armaduras dentro de la masa del hormigón
responden a las exigencias del cálculo. Puede haber barras extendidas, dobladas,
marcos cerrados, estribos, etc. Además de la armadura principal, se colocan
armaduras secundarias cuyos fines pueden ser constructivos o bien favorecer la
distribución uniforme de las cargas. Las armaduras principal y secundaria cumplen la
función de control de fisuras. En efecto, durante el proceso de fraguado se produce
una retracción volumétrica debido a la evaporación del agua de amasado incorporada
en exceso a la mezcla para facilitar su colocación, lo que produce la formación de
fisuras superficiales microscópicas, que las armaduras perimetrales evitan se
profundicen.
La ejecución de las estructuras de hormigón armado comprende los siguientes pasos:
Preparación y montaje del encofrado
Preparación y colocación de las armaduras
Elaboración y colado del hormigón
Curado del hormigón
Desencofrado
EL ENCOFRADO
Constituye el molde donde habrá de volcarse el hormigón en estado pastoso para su
posterior endurecimiento. Su forma y dimensiones deben responder a las indicaciones
de las Planillas de Cálculo y a los Planos de Encofrado.
El encofrado convencional se realiza con tablas de madera de 1" de espesor, tirantes
de 3" x 3" y listones de distinta escuadría como complemento, clavados con clavos tipo
punta París de 2½” a 4”. Los lados de las columnas, el fondo y los laterales de las vigas,
se arman en forma de tableros, uniendo varias tablas mediante listoncitos de armado,
de 1" x 2". Luego se arman los cajones cerrados para las columnas y abiertos
superiormente para las vigas. En el caso de las columnas, se aseguran con anillos
formados por dos tirantes de 3" x 3" enfrentados y dos tablas de 1" x 3", separados
entre 40 y 60 cm. Los cajones de las vigas se apoyan sobre puntales en forma de T,
separados entre 1 m. y 1.50 m y se fijan a lo largo de los mismos mediante sendos
listones de 1" x 2”, colocando separadores en la parte superior para evitar que se
abran durante el llenado.
Una vez colocados y aplomados los moldes de las columnas, se inmovilizan mediante
flechas a 45º en las dos direcciones para mantenerlos en posición.
El encofrado de las losas se construye directamente en el lugar, con tablas de 1" x 6"
apoyadas en los cantos del cajón de las vigas y en soleras de 3" x 3", separadas entre
0.60m. y 0.80m., apuntaladas cada 1.50 m. También se puede disponer soleras dobles:
Las primeras, separadas 0.60m. reciben el entablonado y descansan sobre las
segundas, separadas cada 1.50 m. debidamente apuntaladas.
Los puntales de vigas y losas se vinculan por medio de cruces de San Andrés en
ambas direcciones con tablas de 1" x 6", para darle rigidez al conjunto y se acuñan
para evitar hundimientos durante las tareas de hormigonado, dándole a los
encofrados respectivos una contra flecha de 1 cm. por metro de luz libre.
En los tabiques y vigas de gran altura, para mantener el paralelismo entre las caras
laterales y el espesor constante, se emplean separadores de cemento.
LAS ARMADURAS
El acero empleado en estructuras de hormigón armado corresponde a los tipos BST
42/50 y BST 50/55 de dureza natural. Al primero le corresponde una tensión de
fluencia 4200 kg/cm2 y al segundo 5000 kg/cm2. En ambos casos la rotura se alcanza
con alargamientos comprendidos entre el 8% y el 12%.
La longitud normal de las barras es de 12m. y los diámetros usuales 6mm, 20mm y
25mm. Las planillas de cálculo solamente indican el diámetro y la cantidad o
separación entre las barras de armadura principal y los estribos, pero no la forma de
doblado ni las medidas parciales correspondientes, las que son detalladas en las
Planillas de Detalle de Armaduras
LA DOSIFICACION
Los agregados inertes constituyen la estructura del hormigón, ligados por la pasta de
cemento endurecida que los rodea. El hormigón tendrá mayor resistencia y
durabilidad cuanto mas compacta sea su masa. La compacidad se logra cuando los
vacíos que deja el agregado grueso son llenados por el fino y, a su vez, los que deja
éste son llenados por la pasta de cemento. Para lograr este resultado es necesario
hacer un análisis granulométrico a fin de determinar cual es la proporción óptima de
acuerdo al tamaño y forma de los materiales disponibles. Esa proporción se puede
expresar en peso o en volúmenes aparentes y constituye la dosificación.
EL CURADO
Dentro del primer período de endurecimiento, aproximadamente 7 días, se deben
mantener la humedad y la temperatura del hormigón para que el proceso de fragüe se
realice en condiciones óptimas. La humedad se conserva regando la superficie del
hormigón y los encofrados o bien cubriendo la estructura con folios plásticos para
evitar la evaporación. Con relación a la temperatura, si la misma se eleva sobre los 35°
C debe intensificarse el riego, pues hay riesgo de que se produzca retracción de la
masa. En cambio, si la temperatura desciende de los 4° C el fraguado se detiene. Por
eso no deben realizarse tareas de hormigonado cuando se esperan temperaturas de 5
°C o inferiores, y si las mismas se producen con posterioridad, no se deben computar
los días a los efectos del desencofrado y puesta en servicio de la estructura.
DESENCOFRADO
La resistencia del hormigón se relaciona con la edad. El aumento de resistencia
continúa durante mucho tiempo, si bien se puede considerar que prácticamente en un
año alcanza su valor máximo. A los fines estructurales, la resistencia del hormigón se
toma a los 28 días de su elaboración y las distintas partes de la estructura pueden
desencofrarse sucesivamente dentro de ese período. A continuación se indican los
tiempos en días que deben transcurrir para el desencofrado de las distintas partes de
la estructura, para hormigones elaborados con cemento Pórtland Normal y con
Cemento de Alta Resistencia Inicial.
LOSAS: Las losas pueden trabajar a flexión en una sola dirección o en ambas (losas
cruzadas). Además pueden ser simplemente apoyadas o continuas. Las armaduras son
barras longitudinales rectas o dobladas, como en el caso de las vigas, cuando se
invierte el signo del momento flector. En las losas armadas en una dirección se coloca
una armadura secundaria, llamada de repartición de cargas, en forma transversal a la
armadura principal, con un diámetro mínimo de 6 y 25 cm. de separación mínima.
Bibliografía:
http://www.arqhys.com/construccion/acero-caracteristicas.html
http://estructurasacero.blogspot.com.ar/2007/06/ventajas-y-desventajas-del-
uso-de-acero.html
http://www.seindor.com/publicacionesdidacticas.com/hemeroteca/articulo/05
6019/articulo-pdf