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ACCESO ABIERTO
sostenibilidad
ISSN 2071-1050
www.mdpi.com/journal/sustainability
Artículo
Facultad de Ciencias de productos básicos, Poznan University of Economics, al. Niepodległości 10, 61875 Poznan,
† Los resultados preliminares fueron presentados en la Tercera Conferencia Internacional “industriales y peligrosos
Abstracto: Este artículo es una visión general de la situación actual, así como las posibilidades de producción de biogás en las plantas
rurales en Polonia. Nuestra investigación se ha centrado en la gestión de los residuos agrícolas. Mientras que la agricultura de Polonia y
su industria local de alimentos tienen un potencial considerable, muchas barreras persistir en el desarrollo no sólo de las plantas de
biogás, sino también en todas las otras fuentes de energía renovable. Los principales obstáculos que tienen que ver con factores
económicos por motivos políticos. Nuestro interés ha estado en las plantas más grandes que tienen capacidades suficientes para
producir más de 500 kW de electricidad. El documento también presenta un estudio de caso de un suministro de planta de biogás por
1. Introducción
La producción de energía en Polonia se basa principalmente en las fuentes de energía convencionales, en particular el carbón. De hecho, la
minería es una de las principales industrias de Polonia. Después de la adhesión de Polonia a la Unión Europea en 2004, tuvo que cumplir con las
regulaciones que prevalecían en toda la UE. Uno de estos instrumentos es la Directiva 2009/28 / CE, que prevé que la UE aumente su cuota de
energías renovables en el consumo de energía final en los estados miembros individuales al 20% para el año 2020 [1]. Para cumplir con estos
requisitos,
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Polonia necesita reducir su combustión de carbón en centrales térmicas de carbón de modo que el 15% de su consumo de energía final proviene
de fuentes renovables para el año 2020. Un acuerdo considerado y promovido para reducir al mínimo las emisiones de carbono procedentes de la
combustión de carbón en centrales térmicas de carbón, y una que Polonia se ha comprometido a al firmar el Protocolo de Kyoto, es la construcción
de una central nuclear. Esto va en contra de la tendencia mundial de abandonar la energía nuclear, que ha adquirido especial impulso desde el
desastre de Fukushima en Japón de 2011. En sus secuelas, Alemania se ha comprometido a la eliminación de su propia energía nuclear. Todo
esto pone un signo de interrogación sobre el crecimiento del sector nuclear en Polonia. La idea también se enfrenta a una fuerte resistencia pública
las reservas de crudo se prevé que agotado el 2050, mientras que se espera que los depósitos mundiales de gas y carbón a agotar
rápidamente. No sólo la UE, sino también el resto del mundo está convencido de que es el momento de invertir en energía verde. Los inversores
extranjeros han llegado a Polonia para poner en marcha proyectos de ingeniería en el que las energías renovables como la eólica, la energía
hidroeléctrica, biomasa, energía geotérmica y la energía solar se utiliza para producir energía. Polonia está despertando lentamente hasta el hecho
de que la inversión en energía renovable tiene sentido y trae beneficios tangibles. Lamentablemente, sin embargo, el gobierno polaco parece
permanecer ajeno a esta evolución. La legislación pertinente sobre las formas y niveles de apoyo a la energía renovable aún no se ha adoptado.
Polonia fue obligado a cumplir con la Directiva [1] para el año 2010. Al no haber podido hacerlo, ahora se enfrenta a sanciones por una suma de €
133, 000 para cada día de retraso. El caso ha sido llevado ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en Estrasburgo.
La ubicación geográfica de Polonia le impide explorar algunas formas de energía a gran escala. El más prometedor de ellos parece ser la
biomasa. A diferencia de otras tecnologías que utilizan la biomasa para producir energía, plantas de biogás van más allá de la mera producción
de energía. Son ideales para la utilización de los residuos dañinos para el ambiente de transformación agroalimentaria y sus productos después
de la fermentación, que forman valioso fertilizante natural. Según la ley polaca, plantas de biogás rurales pueden producir biogás agrícolas de
materias primas tales como productos orgánicos agrícolas, líquido o estiércol animal sólido, la industria agroalimentaria subproductos o residuos
y biomasa forestal con la excepción de biogás a partir de plantas de tratamiento de aguas residuales y vertederos [2]. No hay plantas de biogás
en Polonia producen biogás a partir de residuos municipales biodegradables compostados o desechados en vertederos municipales
actualmente. La razón de esto es que la legislación polaca no considere biogás producido a partir de residuos orgánicos municipales como el
biogás agrícolas. De hecho, esto crea una serie de problemas administrativos y económicos. Aunque las plantas disparados por los residuos
orgánicos generados en la elaboración de alimentos producen biogás que no gozan de este estatus, no están lo suficientemente promovidos.
Otra seria dificultad que enfrentan las plantas de biogás que dependen de los residuos orgánicos es fuerte oposición pública, que
se debe principalmente a la falta de información fiable sobre el biogás. Aunque el método utiliza un proceso biológico conocido desde
la prehistoria, la tecnología en sí sigue siendo relativamente nuevo. Las objeciones más comunes tienen que ver con olores onerosas,
El potencial del gas agrícola en Polonia supera a la de cualquier otra energía renovable disponible en el país. Sin embargo,
su desarrollo se ve obstaculizada por la falta de legislación pertinente. potencial de Polonia a utilizar la biomasa para producir
biogás es comparable a la de otro miembro de la UE
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estados en los que la adopción de leyes de apoyo contribuyó a la rápida renovable saturación del mercado. Mientras que Polonia es
actualmente el hogar de unas 200 plantas de biogás que operan, sólo 33 de ellos producir biogás. La mayoría producir energía a partir de
cultivos energéticos, principalmente ensilado de maíz y residuos animales, es decir, estiércol. Hay, sin embargo, una notable tendencia a
alejarse de este tipo de prácticas en favor de residuos agroalimentarios tales como lavado gastada o pulpa de patata cuya disposición es
problemática (ver Tabla 1). Las instalaciones de biogás restantes se encuentran en las plantas de tratamiento de aguas residuales o
vertederos. Estos producen biogás. En 2011, las plantas de biogás rurales han producido 73,43 GWh de electricidad y 88,8 GWh de energía
térmica (véase la Tabla 2). En 2012, la salida de energía eléctrica y térmica se duplicó en términos de valor. A pesar de un clima político
desfavorable que contribuye a una disminución constante en el valor de los certificados, el año pasado tuvo lugar la apertura de 11 nuevas
plantas de biogás, cada uno con una capacidad de 0,5 MW. En vista de los desarrollos más recientes en la producción de biogás, como la
Tabla 1. Cantidad de materia prima utilizada para producir biogás agrícola en 2011-2012 sobre la base de los informes de la
Tabla 2. La producción de biogás, energía eléctrica y térmica en 2011 y 2012 en las plantas de biogás rurales sobre la base de los
Polonia aún no ha transpuesto la Directiva 2009/28 / CE relativa a la promoción de las fuentes renovables de energía. La fecha límite para todos los
estados miembros para cumplir con la Directiva, que tiene por objeto lograr una participación del 20% de la energía procedente de fuentes renovables en la
mezcla global de energía en 2020, para todos los Estados miembros fue de 5 de diciembre de 2010. Hasta el momento, Polonia no ha aprobado una
derecho a por lo menos a regular la cantidad de la ayuda para instalaciones de energía renovable. Mientras tanto, todos los certificados de energía
Dado el enorme potencial de la biomasa disponible para su uso en sus plantas de biogás, Polonia podría también unirse a los estados miembros
que conducen a la producción de biogás a partir de materia prima rural. Polonia tiene la agricultura y la comida muy robusta industria [5]. Cuenta con
carne de cerdo muy avanzada y la producción de aves de corral, así como tierras arables expansivas con suelos de buena calidad y un clima muy
adecuado para el cultivo de una amplia variedad de cultivos energéticos. El clima es moderado polaca con la cantidad total media de precipitaciones
500 a 700 mm anuales. tierras bajas predominantes del país facilitan la producción agrícola. Es difícil, sin embargo, para medir el verdadero
potencial de la biomasa y el biogás en Polonia como no hay fuentes fiables de datos relevantes están disponibles. De acuerdo con los datos
de 2010 proporcionados por el Ministerio de Economía, el potencial de producción de biogás se sitúa en 1,7 millones de metros cúbicos por
año [6].
En el curso de las consultas públicas sobre la Directiva 2009/28 / CE, la Comisión Europea insistió firmemente que la producción de biogás se
basa principalmente en el procesamiento de los residuos agrícolas y de la industria agroalimentaria [3]. El hecho de que Polonia aumentó
significativamente su uso de sustratos de residuos agrícolas entre 2011 y 2012 (ver Tabla 2) demuestra que las plantas de biogás se están
aventurando gradualmente más allá de la mera producción de energía. Su ventaja adicional es que se utilizan residuos agroalimentarios dañinos al
medio ambiente que, por cierto, aumenta su rentabilidad mediante el uso de cargas de bajo costo. Además, el uso de residuos animales no ha
aumentado en proporción a la de otros sustratos. Lo que ha cambiado, sin embargo, es la ubicación de las plantas de biogás que se están
construyendo cada vez más a los operadores de procesamiento de alimentos en lugar de granjas. Como ejemplo, un aumento de casi cinco veces
ha sido reportado en el uso de granos de destilería para la producción de biogás. Su volumen aumentó de ca. 30.000 toneladas en 2011 a ca.
130.000 toneladas en 2012 [4]. Esto es principalmente el resultado de las dificultades con la gestión de este tipo de residuos y las restricciones
La parte más difícil de diseñar una planta de biogás es estimar la disponibilidad de cantidades adecuadas de sustratos necesarios para
ejecutar la planta a plena capacidad. Un sitio de la planta adecuado debe ofrecer el potencial de asegurar cantidades suficientes de sustrato en su
proximidad. Esto no sólo reducirá los costos, sino también a su vez la planta de biogás en una fuente local diversificada de energía. Uno puede
seguir el ejemplo alemán y construir plantas de biogás que se basan únicamente en el ensilaje de maíz y estiércol. Otra idea para Polonia podría
ser colocar las plantas de biogás cerca de las empresas agroalimentarias con el fin de reducir el costo de adquisición de las materias primas. Esto
podría lograrse en gran medida mediante la utilización de las grandes cantidades de residuos de matadero que está disponible para la producción
de biogás, especialmente en la Región Wielkopolska [3]. Los estudios sobre las plantas de biogás muestran que la co-digestión de los cultivos
energéticos y residuos industriales mejora el rendimiento y estabilidad del proceso. También elimina la necesidad de micronutrientes necesarios
El hecho de que el sector de la energía renovable para lograr el crecimiento esperado se puede atribuir a una variedad de factores
económicos, políticos y sociales. El mayor desafío parece radicar en la falta de regulaciones legales relativas a las fuentes de energía
renovables. El sistema de apoyo actual no garantiza la estabilidad del mercado, desalentando así los inversores e impidiendo el desarrollo.
Aunque se ha hablado mucho en los últimos años sobre los cambios que impulsarán el aumento de las energías renovables, ningún
progreso tangible parece haber seguido. En 2007, en su Comunicación al Consejo y el Parlamento Europeo, la Comisión Europea señaló que
teniendo en cuenta el bajo precio de los certificados verdes en Polonia, el país se espera que aumente rápidamente su parte de la electricidad
generada a partir de fuentes de energía renovables, especialmente en vista de sus altos obligaciones con que el respeto [8]. Poco ha
cambiado realmente desde ese momento. El sistema de apoyo es aún débil y la incertidumbre asociada a la falta de regulaciones legales
ralentiza la actividad del inversor. A medida que el mercado de certificados verdes se derrumbó en 2012 debido a un exceso de oferta en la
Además, el plan anterior para apoyar la producción de energía eléctrica y térmica con eficiencia de cogeneración se abandonó en
marzo de 2013. Esto puso fin al desarrollo de biogás en Polonia poniendo en serio peligro la consecución de los objetivos de
energías renovables para 2020 (un 15% de energías renovables en el consumo de energía final en todos los sectores, incluyendo el
19% para el sector de la energía eléctrica) [9]. Para asegurarse de que las plantas de biogás operan en un beneficio, su construcción
debe ser subvencionada. Por razones tecnológicas, las plantas de biogás menos rentables sólo se ejecutan en ensilaje de maíz y
están mal adaptados para tomar ventaja de otras materias primas. El coste aproximado de 1 tonelada de ensilaje en la puerta es
PLN 130. En Alemania, donde las plantas de biogás han crecido rápidamente, los inversores se centran principalmente en ensilaje
de maíz en lugar de limitarse a estiércol. Mientras tanto,
Los inversores también están desanimados por la carga administrativa de los procedimientos obligatorios que intervienen en la obtención
de los permisos necesarios. El primer requisito que se enfrentan es la obtención de un permiso ambiental sobre la base de evaluaciones de
impacto ambiental. Tales evaluaciones son un instrumento clave de la política de protección del medio ambiente de la UE, su intención es
proteger los sitios naturales potencialmente en peligro de extinción por el nuevo desarrollo. Las evaluaciones de impacto son un prerrequisito
para la obtención de fondos de la UE para la construcción de la infraestructura de carreteras [11]. Se requieren largas consultas públicas.
Esto en sí mismo no sería difícil si no fuera por la resistencia pública masiva a los proyectos que se derivan de una serie de preocupaciones
arraigadas principalmente en la ignorancia del público. De cerca de 350 plantas de biogás que buscan permisos, 130 han encontrado abierta
• el miedo al cambio;
El apoyo político a las instalaciones de biogás es otro problema. Mientras que muchos políticos apoyan
firmemente el desarrollo a gran escala de fuentes de energía renovables, que también están a favor de la
construcción de plantas de energía nuclear. Un documento estratégico publicado por el Ministerio de Economía
presenta un ambicioso plan para construir dos mil plantas de biogás en el año 2020 para colocar “una planta de
biogás en cada municipio” [6]. Esto daría lugar a la construcción de un estimado de 3.000 instalaciones, cada una
con una capacidad media de 1 MW. Su producción total combinada sería comparable a la de una sola planta de
energía nuclear. Tal un gran número de plantas de biogás requeriría no sólo la participación de capital privado, sino
también el apoyo del gobierno polaco [8]. Además,
Alrededor del 90 por ciento de la electricidad producida en Polonia se genera a partir del carbón. Esto hace que el sector de la energía de un gran
contaminador. Como la mayor parte de la industria minera es el estado en lugar de propiedad privada, el Estado, que apoya el desarrollo de las energías
renovables en vista de sus compromisos con la UE, es también muy reacios a permitir que la energía renovable para dominar el sector energético polaco,
El sector energético polaco está desgarrado por enormes disparidades técnicas como su infraestructura técnica está mal adaptado para satisfacer las
necesidades y requerimientos de sus clientes funcionales. Esto es cierto para las capacidades, sus redes de distribución y potencia. Por ejemplo, el 39% de
para el año 2010 [13]. Un problema importante que enfrentan los inversores es que no se les permite conectar sus plantas a la red. Obviamente, los
operadores de energía no pueden mantener la energía a partir de fuentes renovables de ser conectado y alimentada a la red. Sin embargo, pueden
declarar dichas conexiones imposible debido a la falta de capacidades de reserva o inadecuada infraestructura de la red en la fuente de energía. Los
proveedores preferidos de las empresas de energía son las plantas de biogás como la electricidad producida a partir de biogás es más estable y
proyectos de instalación también se ven obstaculizados por la falta de leyes adecuadas para regir los residuos. Los residuos en Polonia siguen siendo
tratadas como residuos y se espera que sean utilizados en la agricultura como fertilizante. Sin embargo, para cumplir con el requisito, los propietarios de
plantas de biogás necesitarían tener suficiente tierra de su propia sobre la que extender sus residuos. Antes de residuos de matadero o otros residuos
animales pueden ser aplicados en el proceso de fermentación, deben llevarse a cabo pruebas regulares de suelo para la presencia de metales pesados.
En tales circunstancias, es considerablemente más conveniente para construir una planta de biogás en la granja en la que la materia prima de abono y
maíz de maíz está disponible para el uso de optar por las plantas de biogás que funcionan con residuos orgánicos de la industria agroalimentaria. El hecho
de que los residuos se clasifican como residuos crea problemas legales adicionales relacionados con la gestión de residuos. Lo que disuade a los
inversores es que se mantienen por la venta de los residuos como fertilizante para obtener ingresos adicionales. Por lo tanto, existe una necesidad
apremiante de adoptar leyes apropiadas en las energías renovables, particularmente en el contexto del tratamiento de los residuos de fermentación.
2. Sección Experimental
A continuación se presenta un estudio de caso de la primera planta de biogás polaco para procesar residuos orgánicos procedente de la industria
alimentaria. La instalación, que ha estado en funcionamiento durante más de dos años, fue construido por primera empresa de Polonia para adentrarse en
La planta de biogás fue construido en la región de Gran Polonia, en un municipio donde la agricultura es la forma predominante de
uso de la tierra. Fue colocado junto a una destilería agrícola con la que mantiene una relación de negocios.
La destilería suministra la planta con ensilaje a cambio de calor proporcionado en forma de vapor de agua generado por los gases de escape
calientes que pasan a través de un generador de vapor después de la combustión del biogás en un co-generador. La instalación de biogás se basa en
la digestión mesófila húmeda a 37 ° C. Los fermentadores se pagan con cerca de 80 toneladas de materia prima por día. La cantidad de carga varía de
una estación a otra (véase la Tabla 3). A medida que la pulpa de patata almacena en el silo se congela en el invierno, lo que reduce la cantidad de
sustrato disponible, fermentadores de biogás se cargan con ensilado de maíz para mantener la capacidad de producción de potencia máxima. La
planta fue construida por “aprender sobre la marcha”. Como primera instalación de este tipo de Polonia, la instalación se convirtió en una planta de
biogás de referencia. Como consecuencia, Se añadió una gran cantidad de equipo adicional para preparar la instalación para el uso de diversos
materiales de alimentación. La planta es adecuado para el procesamiento de los residuos de matadero que, bajo la Directiva 2001/77 / CE, tiene que
ser purificado antes de ser colocado en un fermentador. Sin embargo, debido a la evolución del sector de los residuos de matadero, ya no es rentable
utilizar este tipo de residuos en las plantas de biogás. El proyecto ha sido financiado por dos fuentes principales de financiación (véase la Tabla 4).
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Tabla 3. El uso diario de materia prima (basado en los datos recogidos en la Q3 2012).
Tabla 4. Las fuentes de financiación (estudios del autor basados en datos de los inversores).
Mientras que la planta de biogás se lanzó en marzo de 2011, que no logró su máxima capacidad hasta octubre de 2011. La planta
genera 0.526 MW de energía eléctrica y ofrece 0.558 MW de calor. 0,2 MW de calor en forma de vapor de agua caliente va a la
destilería mientras que el resto se presenta en forma de agua caliente. Según los datos obtenidos en el tercer trimestre de 2012, la
planta produce 9.854 MWh de electricidad y 10.466 MWh de calor por día apagando un promedio 7.417 MWh de energía total anual. En
los preceptos teóricos adoptados en el cálculo de las ganancias de la venta de la energía, el tiempo promedio anual de funcionamiento
del motor de gas se estimó en 8000 h (inclusive el tiempo de mantenimiento). Esto hizo que fuera posible encontrar que la planta de
3. Resultados y discusión
La siguiente tabla muestra los resultados de estudios económicos realizados para la planta de biogás basado en los residuos orgánicos de la
industria agroalimentaria discutido en el estudio de caso (véase la Tabla 5). La planta de biogás producido amplia ganancia hasta que el mercado de
certificados verdes se derrumbó a finales del 2012. El valor actual neto de la tasa de descuento del proyecto (del 7,5%) para el año 2012 se supone
que es una función de los intereses de los préstamos pendientes (véase el cuadro 5). La vida de la planta de biogás se estima en 15 años. El proyecto
fue demostrado ser financieramente sólida: el VAN asciende a 1.221.213 €, mientras que su TIR se sitúa en el 28%. El plazo de amortización se fija a
Tabla 5. Los resultados del estudio económico (estudios del autor basados en datos de los inversores).
2013 [14].
El proyecto fue demostrado ser financieramente sólida: el VAN asciende a 1.221.213 €, mientras que su TIR se
sitúa en el 28%. El plazo de amortización se fijó en 8,4 años. Sin subvenciones de la UE que cubren el 40% del
préstamo pendiente y un préstamo blando que asciende a 75% del coste del proyecto, el proyecto estaría generando
pérdidas. Sin la financiación externa, VAN sería negativo en -977.762 euros. Las circunstancias actuales son poco
más propicio para la operación rentable de la planta. En lugar de la inicialmente proyectada PLN 300 por 1 MWh, los
inversores sólo pueden contar con ganar ca. PLN 130. Una dificultad añadida es que los certificados de
co-generación de color amarillo, se retiraron de uso en el inicio de 2013. Los únicos certificados quedan son los
certificados violeta valor de la mitad del valor de los amarillos. Después de haber contabilizado datos recientes de la
Bolsa de Energía de Polonia,
4. Conclusiones
Como lo ilustra el caso de las plantas de biogás, queda mucho trabajo por hacer en Polonia en el campo de las energías renovables.
Mientras que sólo 33 tales plantas están actualmente en funcionamiento, otro 200 o así son en la tubería. El crecimiento de las plantas de
biogás, así como otras energías renovables se ha atrofiado por la incertidumbre sobre el futuro y la falta de normas claras que regulen la
cantidad de apoyo para el sector. La Ley de las fuentes de energía renovables, que estaba previsto para su aprobación hace dos años, no se ha
movido más allá de la preparación de su proyecto final. Como los cambios legislativos no pueden ser adoptados antes se han desarrollado
tecnologías de entrada correspondientes, siempre habrá un retraso antes de que los nuevos reglamentos se adaptan a las nuevas tecnologías.
Todavía, el ejemplo de otros países europeos muestra que las fuentes de energía renovables ya no se clasifican como tecnologías innovadoras
y que se han graduado a verse las instalaciones de generación de energía, así probadas. Para remediar la situación en la que no se construyen
nuevas instalaciones, mientras que los existentes no generan ganancias, el gobierno polaco debe actuar con prontitud y proponer una
legislación para asegurar un futuro predecible fiable para el sector en el largo plazo. Esto se puede lograr por
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proporcionando un entorno legislativo fundamental tanto para la existente, así como las instalaciones de energías renovables previstos.
Las plantas de biogás suministran con los residuos de la industria alimentaria presente la mayor oportunidad de crecimiento a disposición del sector
de la energía renovable polaca. Tales plantas no sólo están diseñados para producir energía a partir de fuentes naturales renovables, sino también, y
sobre todo por lo que, para resolver el problema de cómo deshacerse de los residuos orgánicos. Además, las plantas de biogás construidas en el sector
agroalimentario hacen que la industria de los alimentos más rentables. Y, sin embargo, este tipo de instalaciones nunca será rentable sin apoyo
gubernamental, la legislación confiable de las fuentes renovables de energía y la cofinanciación de la UE. Ellos no están preparados para fines
económicos, sino más bien para mejorar la gestión de los residuos dañinos al medio ambiente y proteger el medio ambiente natural mediante la reducción
Contribuciones de autor
Conflictos de interés
referencias
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