En endodoncia empleamos la mayor parte del instrumental utilizado en la preparación de cavidades, y también algo del instrumental de periodoncia, cirugía
bucal, prótesis, y demás especialidades odontológicas, pero existe otro tipo de instrumental y materiales diseñados única y exclusivamente para la preparación
y obturación de la cavidad pulpar.
La realización racional del tratamiento del conducto radicular, presupone el empleo del material apropiado.
En endodontología, el instrumental se conserva con ventaja en charolas estériles, distinguiendo entre el instrumental quirúrgico y no quirúrgico. El instrumental
básico no quirúrgico se compone, de una parte, del necesario para la preparación de la cavidad y del conducto y, de otra, de los instrumentos y materiales
empleados para el sellado u obturación del conducto radicular.
Lugar de trabajo
En cualquier caso, el sillón dental, la unidad dental completa, rayos X y elementos para su proceso de revelado, equipo de esterilización y demás equipo
odontológico general, son factores previos y necesarios para un tratamiento de conductos.
El puesto de trabajo para endodoncia debe estar organizado de tal modo que el instrumental frecuentemente empleado se encuentre en la proximidad inmediata
del operador. Los instrumentos estériles se mantendrán separados de los demás, y los materiales que se emplean más raramente durante la intervención pueden
estar algo más alejados, pero aún así, al alcance de la mano. El instrumental básico estéril debe encontrarse también en la proximidad del operador, ya sea en
un módulo desplazable para endodoncia, o bien sobre la superficie de trabajo de los módulos accesorios del puesto de trabajo o, si se dispone de sitio, sobre la
mesilla colgante.
Un asistente bien entrenado puede ayudar considerablemente al trabajo del odontólogo en endodontología, y contribuir significativamente a racionalizar las
distintas etapas del mismo. Debe ser compentente, entre otros, en los siguientes campos:
Para concluir esta introducción, es preciso insistir en que el instrumental adecuado facilita considerablemente el tratamiento endodócico.
CLASIFICACIÓN DEL INSTRUMENTAL PARA LA ENDODONCIA SEGÚN SU UTILIZACIÓN POR LA
INTERNATIONAL STANDARDS ORGANIZATION (Organización Internacional de Estándares) (I.S.O.)
Y POR LA FEDERATION DENTAIRE INTERNATIONALE (Federación Dental Internacional)
(F.D.I.) (Cohen 9, 244, Canalda 2, 159)
Existen dos normas ISO aplicables a los instrumentos endodónticos. La norma ISO 3630-1 se aplica a las limas tipo K, las limas Hedström y los raspadores y
escariadores barbados o tiranervios. La norma 3630-3 se aplica a condensadores, compactadores y espaciadores.
Ensanchadores tipo K
Limas tipo K (Kerr)
Tipo H (Hedström)
Raspas tipo R (llamadas también "limas cola de ratón")
Tiranervios
Sondas y aplicadores
Condensadores y espaciadores
GRUPO II: INSTRUMENTOS RADICULARES, ACCIONADOS CON MOTOR: VÁSTAGO EN DOS PARTES Y UNA PORCIÓN ACTIVA
Se incluyen instrumentos que tienen tallos o vástagos diseñados para su uso solamente en una pieza de mano recta, un contrángulo o contrángulos diseñados
especialmente para endodoncia. Las cabezas operativas son idénticas a las de los instrumentos del grupo 1 o son instrumentos para conductos diseñados
como los ensanchadores o léntulos.
Fresas B-1
Ensanchador Tipo G (Gates Glidden)
Tipo P (Peeso reamer)
Tipo A
Tipo D
Tipo O
Tipo Ko
Tipo T
Tipo M
Alisador radicular
En la utilización del instrumental, el éxito depende de la forma en que se relacionan el material, su diseño, y la técnica emplada con la fuerza ejercida sobre el
instrumento. El conocimiento de los conceptos básicos, de la conducta y de las propiedades de los materiales puede ayudar en la labor del profesional
optimizando la utilización de los instrumentos y minimizando la incidencia de accidentes durante el tratamiento endodóntico.