Integrantes
Dicha dificultad para identificar el significado del término estrés se evidencia desde
tiempo atrás, pues en el siglo XIX Claude Bernard pensaba que lo propio del estrés
eran los “estímulos estresores” o “situaciones estresantes”, y durante el siglo XX
Walter Cannon planteaba que lo importante eran las respuestas fisiológicas y
conductuales características (Moscoso, 1998 citado en Martín, 2007). De allí la
importancia de retomar la génesis del concepto.
Así pues, el término estrés se remonta a la dé- cada de 1930, cuando Hans Selye,
un estudiante de segundo año de medicina en la Universidad de Praga, se percató
de que todos los enfermos a quienes observaba, indiferentemente de la enfermedad
que sufrían, tenían síntomas comunes y generales como agotamiento, pérdida del
apetito, baja de peso, astenia, entre otros síntomas inespecíficos. Selye denominó
este fenómeno como “Síndrome General de Adaptación”. Posteriormente, cuando
realizó su posdoctorado, Selye desarrolló experimentos sobre ejercicio físico
extenuante con ratas, comprobando elevación de las hormonas suprarrenales,
atrofia del sistema linfático y aparición de úlceras gástricas. A este conjunto de
factores Selye lo designó inicialmente como “estrés biológico” y después
simplemente “estrés”. De esta manera, Selye consideró que varias enfermedades
(cardíacas, hipertensión arterial y trastornos emocionales o mentales) se generaban
por los cambios fisiológicos producidos por un prolongado estrés en los órganos, y
que dichas alteraciones podrían estar predeterminadas genética o
constitucionalmente. Luego amplió su teoría, ya que pensó que no solamente los
agentes físicos nocivos son productores de estrés, sino que, además, en el caso de
los seres humanos, las demandas sociales y las amenazas del entorno del individuo
que requieren de capacidad de adaptación, pueden provocar el trastorno del estrés.
(Berrío García & Mazo Zea, 2011)
Si bien se trata de una enfermedad que puede requerir tratamiento médico, conocer
las causas que la generan es el primer paso para aprender a lidiar con ella o
encontrarle una solución. Según los especialistas estas son las principales causas
que nos llevan a sentirnos estresados.
1 Exigencias académicas
La vida universitaria es sinónimo de un sinfín de obligaciones, por lo que, ante la
necesidad de cumplir con las fechas de entrega, la cercanía de los exámenes, la
importancia de obtener buenas calificaciones, así como otra serie de exigencias
propias de esta etapa académica, muchos jóvenes son víctimas de altos niveles de
estrés.
2. Personas tóxicas
El ambiente en que nos movemos también puede ser causa de estrés. ¿Por qué?
Si a diario convives en un entorno lleno de personas tóxicas, no tardarás mucho
tiempo en “contagiarte” perdiendo así tu energía positiva. Cuando empieces a sentir
rabia, estrés o poca energía, piensa seriamente en cambiar tu círculo de conocidos.
3. Pensamientos negativos
La pérdida de un ser querido también es causa de mucho estrés, dado que se trata
de una de las situaciones más difíciles con las que debemos aprender a convivir.
En esta misma línea, las relaciones de pareja conflictivas también dan como
resultado altos niveles de estrés especialmente en personas con problemas de
autoestima.
Comprobado está también que en esta nueva era dominada por las nuevas
tecnologías, el contacto real es cada vez menos frecuente, por lo que miles de
personas sufren de soledad; un sentimiento que puede llegar a provocar más estrés
del que se imagina. ¿La receta? Generar espacios de interacción cara a cara.
(Universia.net, 2015)
El estrés es peligroso cuando interfiere con la habilidad de vivir una vida normal por
un período extenso de tiempo. Uno puede sentirse "fuera de control" y no tener idea
de lo que debe hacer, aún si la causa es relativamente insignificante. Esto a su vez
puede causar que esté continuamente fatigado, no se pueda concentrar o esté
irritable en situaciones normalmente tranquilas. El estrés prolongado puede
aumentar cualquier problema emocional que haya surgido de eventos traumáticos
en su pasado, e incrementar pensamientos suicidas.
Estresores individuales. Se deben a las dificultades que pueda tener cada persona.
Las personas obstinadas y malhumoradas también son fuentes de estresores
debido al conflicto que le causan a los que los rodean.
Estresores organizacionales y grupales. Se refiere a la organización que está
influida por la naturaleza de las relaciones entre los miembros de un grupo pues la
influencia de este, interviene en el cumplimiento de sus miembros, en la
responsabilidad psicológica y el conocimiento del trabajo, da forma a las creencias,
altera las percepciones, preferencias, actitudes y valores, de las personas inmersas
en el ambiente escolar.
Para poder conocer las consecuencias, primero tenemos que saber cómo
detectarlo, a fin de intentar erradicar el problema antes de llegar al punto en el que
se ha vuelto un problema menos manejable para el estudiante.
Lo más grave del estrés, es que a veces lo hemos padecido durante tanto tiempo
que ya no somos capaces de notar cuando se ha hecho parte de nuestro día a día.
Este problema se puede presentar en diferentes niveles (físico, psicológico y
conductual) dentro de una misma persona, como síntomas varios, combinables
entre sí con intensidades diferentes.
Nivel físico
¿Siente uno o varios, con frecuencia o con mucha intensidad?
Opresión en el pecho.
Hormigueo o mariposas en el estómago.
Sudor en las palmas de las manos.
Palpitaciones.
Dificultad para tragar o para respirar.
Sequedad en la boca.
Temblor corporal.
Manos y pies fríos.
Tensión muscular.
Falta o aumento de apetito,
Diarrea o estreñimiento.
Fatiga.
Nivel conductual.
¿Has notado o te han comentado que presentas alguna (s) de estas conductas?
Moverse constantemente.
Risa nerviosa.
Rechinar los dientes.
Tics nerviosos.
Comer en exceso o dejar de hacerlo.
Beber o fumar con mayor frecuencia.
Dormir en exceso o sufrir de insomnio.
Ya que hemos visto los síntomas que el estrés trae a los estudiantes, podemos
pasar a analizar las consecuencias de la presencia de este dentro de sus vidas.
Llegando a este punto los graves problemas en la salud mental que causa la
ansiedad explican de alguna manera, las terribles consecuencias del estrés
académico, que aborda a los estudiantes, los pensamientos negativos y
obsesivos, llegan a producir nerviosismo y miedo, pero no solo produce esto,
ya que al tener dichos pensamientos es factible que se generen síntomas
fisiológicos, como el insomnio, el cual lleva al cansancio mental y físico, pero
este a su vez, dispara problemas mentales como, el trastorno obsesivo-
compulsivo, el aumento del apetito, el cual tiene la intensión de calmar la
ansiedad, aun así esto puede llevar a serios problemas alimenticios. Pero no
solo se produce esto, también se manifiestan, los tics, la falta de memoria, la
irritabilidad y muchos más.
Esto llega a ser un gran problema para los estudiantes, ya que además de
impedir un buen aprendizaje en su vida, pueden llegar a sentir pensamientos
depresivos y la ansiedad puede llegar a generar un alto consumo de
sustancias psicoactivas, con el objetivo de calmarla.
Ya que las consecuencias anteriores no son las únicas que trae consigo el estrés a
continuación pondré un listado dividido en los tres niveles de afección que ya hemos
estado manejando, para que el lector tenga un conocimiento completo de cuan
amplio es este padecimiento.
Migraña
Cansancio crónico
Bruxismo (rechinar los dientes mientras se duerme)
Disfunciones gástricas
Impotencia
Dolor muscular intenso
Sueño irregular
Aumento o pérdida de peso
Reacciones conductuales:
Fumar excesivamente
Olvidos frecuentes
Aislamiento
Ausentismo académico
Aumento o disminución del consumo de alimentos
Escaso interés de la persona
Indiferencia hacia los demás. (Rosado Queb, 2013)
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