anim ado
J(ennesse, reprc•senta un dia de feria, en <>1 cual un
y ma-
grup o de estud iante s, soldados, ancianos, doncellas
se desa rroll a un duelo entre
trona s se cliviert<:>n . E n ese acto to,
ga¡·ita, enam orad a de Faus
Valen tín, el herm ano de Ñfa¡·
un elega nte joven , que
que hoy apar ece• bajo la form a de
les, el de-
todos conocen como el Rey de Tula , y :Mefistófe
en donde
monio prote ctor de Fausto. Pero es 01 terce r acto,
musical
se encu entra la más prod igios a creación del genio
del Joven
de Gou nod. All í se deja oír la preci osa canción
.... Siebcl Le tJm·l(tle d'am or o el aria de las flore
s, en la
novia de la infan cia, Marg a-
cual él confiesa su amor a la
ánim o de quien
rita: canción que al enton arla, deja en <>1
ele roma nzas para
la escucha un exquisito de leite. Una serie
un cuart €to,
tenor y dueto s de tE-nor y sopra no se suceden,
ros de
la céleb 1·e Invocación de lVlefistófeles y otros núme
acto, tam-
un efecto y de atrac tivo sin igual, son del t<:>rcer
califi ca do por Jos gran des
biéu r¡ ue .i ustame nte ha sido
r de toda la óper a
críticos del arte musical, como el mejo
por dos escen as
de Gounod. El cuart o acto se caracter iza
C01·o ele lo.s
preci osas: la de la Iglesia y la del duelo. El
Solclaclos y la Sm·em~tc~ de M efistó feles son
tamb ién ca-
o acto
racte rístic os núme ros de este acto. El qui nto acto
se pued e calif icar como una de
final, au n cuan do es corto,
cales de Goun od. E ste
lal" más g•·andiosas creaciones musi
Faus to y
term ina con la salvación de Marg arita y la de
o profu ndo y te-
<·on la fuga d<' :?liefistófelc.s hacia el abism
nebJ·oso del infie rno.
pin-
Como el <'bjeto princ ipal que nos proponemos es
ión de SiebP l, que
tPr el cuad ro en que se desar rolla la canc
-ntan do, de nin-
es la que de man era especial estam os comE
t rascr i-
g una otra manera mejo r lo pode-mos hacer , que
donde con
biendo textu alme nte los sigui entes párr afos, en
Faus to :
maes tría se pinta este momento del TE-rcer Acto del
"La escena reprE-senta el jardí n del Marg arita , en el
de f lores
cual vése al joven Siebel, prep arando .un rami llete
El enam o-
para aquella, por la que sient e profu ndo amor .
Señores:
Rl hecho de haberme confErido nuestra Sociedad el
cargo de Pre:;idenle, me proporciona el honor de venir a
e.;ta t ribuna a desarrollar el primE·r punto del programa
elaborado para esta velada que es presentar a la Sociedad
Mine rva, que va adelante con g ran firmeza y humildad
lrjos de las presunciones absurdas de los que pretenden de
Quijotes cuan solo ;;on Sanchos. ·
No cr E·itis, ¡1ues, que si aparecemos ahor.a. en plena a ula
máx ima, lo hacemos con la intención de arrancaros aplau-
sos y alabanzas por medio de una exhibición de arte Y ~
cultura avanzada y admirable ... No. Ni menos penséis 1
que venimos hasta aquí y que .os hemos llamado en esta
noche, para que nos miréis pr esidiendo una sociedad y lue-
go prodiguéis :frases de encomio para unos cuatro. Tam-
poco. No tememos s uf rir (·1 r igor ele los que tergiversen el
~enti clo de nuestra intención y nos conformamos con decir
muy alto, que solo un deber nos mueve; un deber muy im-
per ioso cuyo cu mplimi€'nto es ineludib le, pues consider a-
mos de necesida d urgente dar a conocer algo de la verdad
que hay en la vida de nuestro colegio. Creemo s preciso, pa ra
bien ele todos, se sepa que por este Templo tan admirad o
y repudiad o al mismo tiEmpo, pasa un aire de rejuvene ci-
m iento, de verdade r a resu rrección que nos lleva a un es-
tado muy diferent e al qu€ se nos ha atribuid o. Ansiam os
ya, con vPhemen cia, con desesper ación de ofendido s por las
pasiones hum anas ver la verdad. en s u Trono; y nos creé-
mos, más qu e nadi e, legítima mente autoriza dos para acla-
mar la justicia esquiva y tardía; para lamenta r la crueldad
ignom iniosa de nuestros j ueces, ya que somos los más cono-
cedorr.s de la realidad , puesto que a toda hom bebemos en
esos mananti ales de ideas la savia vig01·osa de la ciencia y
las orientac iones de una cultura sana y limpia. Estamos ,
pues, aqu í, con el prese·11t imiento de que no en todo hab1·á de
;' g radaros nuestro program a, pe ro nos an ima la satisfac -
ción de que sabréis ver en sus deficien cias sólo (>) esfuerzo
ck una juventu d que lucha, así nos .iu?:garé is con mayor
benevole ncia.
'l't-néis presente a la Socieda d 1\•I inetTa, firme y con-
\'Cncida de la razón ele su existenc ia y ele la segu ridad de
su d()stino, desconso lada y quej osa del ayer , pero llena
de f~ en el mmiana . No lo dud"i s. ·Miner\'a reapare ce, no a l
influjo de una jtn·entu d atolondt ·ada que siente la necesi-
dad dP sati ~ütt<:er un <tfún de· exhibici ón, sino, por el con-
tr<nio, al influjo de cierla comunid ad ele sentimi en tos qu e
abrigan los espí ritus ele éstos futuros educado res, que han
visto el fu ndamen to d ~' s u r eal eficienc ia en la constanc ia,
en la práct ica de principi os y virt udes nobles indispen sa-
bles al maestro , e inhoarcnte a qu ien llC\'ۥ con propied ad
moral el dictado de ciudada no.
Reaparc cr, pues, no como un entreten imiento, s ino
como el fruto de una campañ a muy edifican te y plausible,
emprend ida por la Rectoría de este plantel mediant e la in-