Desde luego, hay expositores que discurren sin hacer distinción alguna
entre policía y poder de policía. Hablan simplemente de "poder
de policía", lo que, al menos didacticamente, no es plausible. Otros
escritores critican y objetan esa distinción. Pero adviértase términos,
como expresión de los respectivos conceptos, temporal y
especialmente es distinta, según explicamos más adelante dado el
contenido que se le asigna tanto a la policía como al poder de policía,
se ha considerado que tales conceptos o nociones deben
ser eliminados del campo del derecho, porque nada hay que
Según lo advierte Garrido falla, había ahí " una serie de asuntos civiles
cuya decisión estaba en manos de los tribunales de justicia; para otros
asuntos, en cambio, estos tribunales no tenían competencia".
"Así como los asuntos civiles judiciales están dominados por el principio
de legalidad y por la posibilidad de recurrir siempre a
una instancia judicial independiente, hay otros asuntos que resuelve
inapelablemente el príncipe en virtud del viejo principio im polizeisachen
gilt keine appellation (en los asuntos de policía no ha apelación).
Poder de policía:
El poder de policía es una de las manifestaciones asociadas al vocablo policía,
que se caracteriza por su naturaleza puramente normativa, y por la facultad
legítima de regulación de la libertad con actos de carácter general e impersonal,
y con fines de convivencia social, en ámbitos ordinarios y dentro de los términos
de la salubridad, moralidad, seguridad y tranquilidad públicas que lo componen.
En el ejercicio del poder de policía y a través de la ley y del reglamento superior
se delimitan derechos constitucionales de manera general y abstracta y se
establecen las reglas legales que permiten su específica y concreta limitación
para garantizar los elementos que componen la noción de orden público policivo,
mientras que a través de la función de policía se hacen cumplir jurídicamente y
a través de actos administrativos concretos, las disposiciones establecidas en
las hipótesis legales, en virtud del ejercicio del poder de policía.
DE LOS PERMISOS
ARTICULO 14. Cuando la ley o el reglamento de policía estatuya una
prohibición de carácter general, y no obstante admita expresamente
excepciones, la actividad exceptuada sólo podrá ejercerse mediante
permiso de policía.
Se otorgará el permiso cuando se acredite que el ejercicio por parte del
solicitante de la actividad exceptuada no acarrea peligro alguno para el
orden público.
ARTICULO 15. Cuando la ley o el reglamento de policía subordine el
ejercicio de una actividad a ciertas condiciones o al cumplimiento de
determinados requisitos, dicha actividad no podrá ejercerse sino mediante
permiso otorgado previa la comprobación de aquellas o el cumplimiento de
éstos.
ARTICULO 16. El permiso debe ser estricto y motivado y expresar con
claridad las condiciones de su caducidad .
Es además, personal e intransferible cuando se otorga en atención a las
calidades individuales de su titular.
ARTICULO 17. La ley o reglamento señalarán al funcionario que deba
conceder un permiso , el término de éste y las causas de su revocación.
ARTICULO 18. La revocación del permiso compete ordinariamente a quien
lo concedió, salvo las excepciones establecidas por la ley o reglamento, y
debe ser escrita y motivada.
DE LAS ORDENES
ARTICULO 19. Para asegurar el cumplimiento de las disposiciones de
policía, las autoridades del ramo pueden dictar órdenes según la
competencia que se les atribuya.
ARTICULO 20. La ley debe fundarse en ley o reglamento.
ARTICULO 21. La orden debe ser clara y precisa y además, de posible
cumplimiento.
ARTICULO 22. La orden debe impartirse a persona o a grupo
individualizado o individualizable de personas.
ARTICULO 23. La orden debe ser motivada y escrita pero en caso de
urgencia puede ser verbal.
ARTICULO 24. El que incumpla una orden podrá ser obligado por la fuerza
a cumplirla. La orden puede ser impugnada por la vía jerárquica, sin
perjuicio de su cumplimiento.
ARTICULO 25. El funcionario de policía que diere orden ilegal incurrirá en
sanción disciplinaria que impondrá, el superior jerárquico, sin perjuicio de
la responsabilidad penal, si la hubiere.
ARTICULO 26. Si la orden no fuere de inmediato cumplimiento, el Jefe de
policía conminará a la persona que la observe en el plazo que señale, y de
no ser atendido podrá imponer las sanciones que correspondan hasta
vencer la resistencia, sin perjuicio de realizar el hecho por cuenta del
obligado cuando fuere posible la sustitución.
ARTICULO 27. La orden de policía puede ser revocada por quien la
omitió.
ARTICULO 28. La orden debe comunicarse por cualquier medio idóneo
como la prensa, la radio, la televisión, las señales, los avisos, los
altavoces.
DERECHO DE POLICÍA.