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Gestión Integrada de Cuencas Hidrográficas,

desde la aproximación de los servicios de los


ecosistemas: el caso de la cuenca del río Frío-
Costa Rica.

Heiner Máster en Ciencias de la Sostenibilidad para


Acevedo M. Gestionar el Cambio Global
GESTIÓN INTEGRADA DE CUENCAS HIDROGRÁFICAS,
DESDE LA APROXIMACIÓN DE SERVICIOS DE LOS ECOSISTEMAS:
EL CASO DE LA CUENCA DEL RÍO FRÍO-COSTA RICA.

por
Heiner Acevedo-Mairena

Tesis sometida como requisito para optar por el grado de


Máster en Ciencias de la Sostenibilidad para Gestionar el Cambio Global.

Universidad Internacional de Andalucía - España

Tutor: Dr. Carlos Montes


Co-tutor: Ignacio Palomo

14 de setiembre, 2012
Universidad Internacional de Andalucía

Gestión Integrada de Cuencas Hidrográficas, desde la aproximación de los


servicios de los ecosistemas: el caso de la cuenca del río Frío-Costa Rica.

Resumen

El análisis de cuencas hidrográficas bajo la aproximación de servicios de los ecosistemas


es una herramienta que intenta evidenciar el territorio desde una visión global y que
mediante su estudio se pueda diagnosticar el estado de conservación de la misma. La
aplicación de la metodología propuesta evidenció que el 39% del territorio se destina a la
actividad de la ganadería bovina para la producción de carne y en menor escala para leche,
para el período 1987-2001. El análisis de compromisos (Trade-off) temporal para este
período mostró el dominio que ha mantenido la producción de carne bovina durante
varias décadas. Por su parte, el análisis de compromisos (Trade-off) espacial demostró que
el modelo de producción de ganado bovino (servicio de abastecimiento) desarrollado en el
socioecosistema de montaña está generando una perturbación en los ecosistemas
acuáticos (servicios de regulación) que se localizan en el socioecosistema de llanura,
ejemplo el humedal Caño Negro.

Palabras claves: Servicios de los ecosistemas, cartografía socioecológica, gestión integrada


de cuencas hidrográficas, bienestar humano, cuenca del río Frío, Cambio Global.
Índice General

1 Introducción 1
2 Un marco conceptual de partida 6
2.1 Gestión integrada de cuencas hidrográficas 6
2.1.1 Definiciones 6
2.1.2 Importancia 7
2.1.3 Gestión integrada de cuencas hidrográficas en Costa Rica 10
2.2 Servicios de los ecosistemas 14
2.3 Análisis de compromisos (Trade-off) 19
2.4 Sistemas socioeológicos o socioecosistemas 20
3 Área de estudio 22
4 Diseño de la aproximación metodológica 25
4.1 Delimitación del socioecosistema 25
4.2 Impulsores de cambio 26
4.3 Conocimiento local de los servicios de los ecosistemas 30
4.4 Definir los compromisos (Trade-off) temporales y espaciales 32
5 Resultados 33
5.2.1 Impulsor directo de cambio: uso del suelo 37
5.2.2 Impulsor indirecto de cambio: crecimiento poblacional 41
5.3 Conocimiento local de los servicios de los ecosistemas 43
5.3.1 Identificación y priorización de los servicios de los ecosistemas. 43
5.3.2 Definición de los servicios de los ecosistemas. 47
5.4 Definir los compromisos (Trade-off) temporales y espaciales 52
5.4.1 Análisis de compromisos (Trade-off) temporal 52
5.4.2 Análisis de compromisos (Trade-off) espacial 55
6 Discusión 57
7 Conclusiones 62
8 Bibliografía 65
Índice de figuras

Figura 1. Diagrama que ejemplifica los flujos de agua verde y agua azul en un territorio. .. 9
Figura 2. Marco conceptual de referencia de la Evaluación de Ecosistemas del Milenio.. .. 15
Figura 3. Ciclo de sostenibilidad. Los ecosistemas tienen la capacidad de generar servicios
a partir de las funciones, con el fin de mantener el bienestar humano.. ............................ 17
Figura 4. Diagrama conceptual de los elementos que componen un sistema socioecológico
o socioecosistema................................................................................................................. 21
Figura 5. Ubicación geográfica de la cuenca hidrográfica del río Frío. ................................. 23
Figura 6. Aproximación metodológica para la gestión integrada de cuencas hidrográficas
basada en los servicios de los ecosistemas .......................................................................... 27
Figura 7. Combinación de imágenes de satélite para 1987 y 2001, en la cuenca hidrográfica
del río Frío-Costa Rica. .......................................................................................................... 28
Figura 8. Socioecosistemas en la cuenca hidrográfica del Río Frío-Costa Rica. .................... 35
Figura 9. Uso del suelo en la cuenca hidrográfica del río Frío para 1987. ........................... 38
Figura 10. Uso del suelo en la cuenca hidrográfica del río Frío para el 2001. ..................... 39
Figura 11. Cambio de uso de la tierra en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica para
el período 1987 - 2001. ........................................................................................................ 40
Figura 12. Población total por socioecosistema para el período 1973-2011, cuenca
hidrográfica del río Frío ........................................................................................................ 42
Figura 13. Número de entrevistas aplicadas en la cuenca hidrográfica del río Frío para
identificar los servicios de los ecosistemas .......................................................................... 43
Figura 14. Distribución de los servicios de los ecosistemas por socioecosistema en la
cuenca hidrográfica del río Frío. ........................................................................................... 45
Figura 15. Priorización de los servicios de los ecosistemas por socioecosistema en la
cuenca hidrográfica del río Frío ............................................................................................ 46
Figura 16. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) temporal en el
socioecosistema de montaña en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica para el
período 1987-2001 ............................................................................................................... 53
Figura 17. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) temporal en el
socioecosistema de llanura en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica para el período
1987-2001 ............................................................................................................................. 54
Figura 18. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) espacial para el
año 1987 en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica.................................................. 55
Figura 19. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) espacial para el
año 2001 en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica.................................................. 56
Figura 17. Matriz de contingencia empleada para evaluar la clasificación de uso del suelo
en la Cuenca del Río Frío, Alajuela-Costa Rica, a partir de imágenes satelitales de 1987 ... 70
Figura 18. Matriz de contingencia empleada para evaluar la clasificación de uso del suelo
en la Cuenca del Río Frío, Alajuela, Costa Rica, a partir de imágenes satelitales del período
2001-2003. ............................................................................................................................ 71

Índice de cuadros

Tabla 1. Experiencias en gestión de cuencas hidrográficas en Costa Rica ............................ 12


Tabla 2. Unificando conceptos clave para la gestión de los socioecosistemas. ................... 16
Tabla 3. Características principales utilizadas para definir los socioecosistemas en la Cuenca
Hidrográfica del Río Frío. ...................................................................................................... 33
Tabla 4. Servicios de los ecosistémicos priorizados en la cuenca hidrográfica del río Frío, así
como sus definiciones y algunos ejemplos representados gráficamente. ........................... 49
Tabla 5. Comparación entre el enfoque tradicional de GICH y la propuesta desde la
aproximación de servicios de los ecosistemas. .................................................................... 61
Agradecimientos

A Dios, por regalarme una segunda oportunidad de vida.

A mi esposa Yesenia, por impulsarme y motivarme para


lograr un sueño académico. Por su confianza, apoyo y
sacrificio durante este tiempo. A mis preciosos hijos, Camila y
Sebastián, por el apoyo desde lejos y el sacrificio de su
tiempo.

A mi madre, Elena, porque siempre me motivo a estudiar. Por


enseñarme que existe algo más.

A Carlos Montes, Berta López y José González, por esta gran


oportunidad, su enseñanza y paciencia.

A Michael Arroyo y Mauricio Zamora, por escucharme hablar


de este tema, por sus aportes y recomendaciones al
documento.

A mis queridos y queridas compañeras del Máster, por su


apoyo, entusiasmo, dedicación -de día y de noche- y
sacrificio.

Al Ministerio de Ciencia y Tecnología (Costa Rica) y a la Junta


de Andalucía (España) por el aporte económico que cumplir
este sueño.
1 Introducción

Los seres humanos siempre han dependido de los servicios que ofrecen los ecosistemas
del planeta para subsistir. De ellos se obtiene el agua que se usa diariamente, la
electricidad y la materia prima para fabricar la ropa, casas, medicamentos, alimentos,
combustibles y papel, entre otros (MA, 2005).

Pero muchas veces, la sociedad no es consciente ni percibe esos beneficios, como la


capacidad de los ríos de autolimpiarse y la regulación de la erosión, de pestes, de
enfermedades y de perturbaciones naturales. Sin duda, existe una clara dependencia entre
el bienestar humano y el manejo adecuado de los ecosistemas (OSE, 2010).

Los ecosistemas son entendidos como un capital natural, con integridad ecológica y
resiliencia, capaces de generar un flujo de servicios al ser humano, mediante el
mantenimiento de sus funciones (Montes, 2007; Martín-López et al. 2009). Mientras que
los servicios de los ecosistemas son entendidos como las contribuciones directas o
indirectas de los ecosistemas al bienestar humano (De Groot et al. 2010; EME, 2011). Este
concepto de servicio de los ecosistemas tiene el objetivo de hacer explícitos los beneficios
que la sociedad obtiene de los ecosistemas (Balvanera, 2012).

Pero, durante los últimos 40 años el ser humano ha elevado el consumo de los servicios de
los ecosistemas a un ritmo acelerado, generando una disminución del capital natural. La
población ha aumentado a más de 7 mil millones y se espera que alcance 10 mil millones
en este siglo. El consumo de energía ha crecido 16 veces durante el siglo XX, causando 160
millones de toneladas de emisiones atmosféricas de dióxido de azufre por año. Más del
doble de la suma de las emisiones naturales. Los bosques tropicales desaparecen a un
ritmo rápido, liberando dióxido de carbono y la extinción de gran aumento de las especies
(Crutzen, 2002).

[1]
Toda esta transformación de la biosfera del planeta por abastecer y resolver las demandas
crecientes de alimentos, agua dulce, madera, fibra y combustible ha generado una
alteración de los ecosistemas en los últimos 50 años. La Evaluación de Ecosistemas del
Milenio (MA, 2003) realizó una valoración global de los ecosistemas y sus servicios,
destacando tres aspectos importantes:

1. Aproximadamente el 60% de los servicios de los ecosistemas evaluados (15 de 24)


se están degradando o se usan de manera no sostenible.

2. Los cambios realizados a los ecosistemas están aumentando la probabilidad de


cambios no lineales (cambios acelerados, abruptos y potencialmente irreversibles).

3. La degradación de los servicios de los ecosistemas está contribuyendo al aumento


de las desigualdades y disparidades entre los grupos de personas, principal factor
causante de la pobreza y del conflicto social.

Actualmente la sociedad se encuentra inmersa en un proceso emergente y complejo


denominado Cambio Global en el que la especie humana se convierte en la mayor
generadora de los cambios ambientales. Los impulsores directos de este Cambio Global
son: a) el cambio de uso del suelo, b) el cambio climático, c) la alteración de los ciclos
biogeoquímicos, d) la contaminación, e) la introducción de especies exóticas, y f) la
explotación intensiva de determinados servicios (Duarte et al, 2009).

Centroamérica no se escapa de esta realidad y esta transformando sus ecosistemas


naturales de forma acelerada, la deforestación neta para el período 1990-2008 alcanzó un
total de 28.223 Km2. Una superficie que excede en tamaño a los dos países más pequeños
de la región, El Salvador -20.000 Km2- y Belice -23.000 Km2-(Cherrigton et al, 2011).

Mientras que el cambio climático en la región de Mesoamérica tiene grandes


repercusiones para la sociedad y los sistemas naturales. Ya que hay una combinación de

[2]
razones geográficas, económicas y sociales que aumentan su vulnerabilidad. En esta región
se esperan efectos directos e indirectos en la disponibilidad de agua, que llevaría
consecuencias sobre la biodiversidad, el consumo humano, la salud de la población, la
capacidad de producción agrícola y la capacidad de generar energía hidroeléctrica, entre
otros (Cifuentes, 2010). Es decir, efectos sobre la generación de los servicios de los
ecosistemas.

De hecho las metas para detener la perdida de biodiversidad al 2010 han fracasado
(Gordon et al, 2010). Por tanto es importante reflexionar sobre la implementación de
nuevas políticas de conservación de los ecosistemas y su biodiversidad, y no mantener las
políticas actuales de conservación a nivel de especies por interés científico, político o
social (Martín-López et al, 2011).

Esto es una gran oportunidad en la planificación del territorio basado en servicios de los
ecosistemas a nivel de paisaje, en este caso particular trabajando desde la Gestión
Integrada de Cuencas Hidrográficas (GICH). Ya que la gestión del territorio influye en la
estructura y funcionamiento de los ecosistemas y por tanto en la biodiversidad. Este
último como elemento clave del suministro de servicios a la sociedad (OSE, 2010).

Los países de la región de Centroamérica tienen desafíos comunes en términos


ambientales y territoriales, puesto que comparten cuencas transfronterizas, protegen un
patrimonio natural de importancia mundial, exhiben tendencias similares en varios
patrones de uso del capital natural (en especial energético) y viven amenazas compartidas
que deben enfrentar (PEN, 2011).

Una de esas cuencas transfronterizas es la cuenca hidrográfica del río Frío (Costa Rica-
Nicaragua), que a su vez es una subcuenca del río San Juan (CCAD, 2003). En esta cuenca
hay diferentes ecosistemas que generan diversos servicios (abastecimiento, regulación y
culturales) que son utilizados por la sociedad para su bienestar humano. Estos ecosistemas

[3]
son producto de la combinación de una alta precipitación y temperatura, el
comportamiento hidrológico de los cursos fluviales, la presencia de la cordillera y la
existencia de una extensa llanura aluvial de suave pendiente.

Sin embargo, estos ecosistemas, sus funciones, los servicios de los ecosistemas y las
interrelaciones con la sociedad no son tomados en cuenta para la planificación del
territorio. Hay factores invisibles para los tomadores de decisión, por ejemplo un mal uso
del recurso agua en la cabecera de la cuenca puede afectar a otros servicios del
ecosistema que se brinda aguas abajo, ya sea en la calidad del agua para consumo
humano o como una posible perturbación a los ecosistemas ligados a los ambientes
acuáticos.

La presente investigación busca analizar la relación entre ecosistemas y sociedad (sistema


socio-ecológico o socioecosistema), algunas de sus interrelaciones y el efecto de las
decisiones tomadas en el pasado y sus efectos en la actualidad, esto en el marco de la
Gestión Integrada de Cuencas Hidrográficas (GICH).

En este sentido la planificación estratégica mediante la GICH ofrece una posibilidad de


intervención en áreas que transcienden las fronteras político-administrativas y que se
comportan de manera muy particular como un conjunto natural, biológico y/o físico-
geográfico, que no puede ser analizado de manera aislada.

[4]
Objetivo General

Proponer unos lineamientos generales de gestión integrada de cuencas hidrográficas,


basada en el marco de los servicios de los ecosistemas, que permita analizar la
interrelación entre estos y sus beneficiarios.

Objetivos específicos

1. Diseñar una aproximación metodológica con énfasis en sistemas de información


geográfica para el análisis de los servicios de los ecosistemas en la gestión
integrada de cuencas hidrográficas.

2. Aplicar la aproximación metodológica tomando como estudio de caso la cuenca


hidrográfica del río Frío, con el fin de validar su aplicabilidad.

[5]
2 Un marco conceptual de partida

2.1 Gestión integrada de cuencas hidrográficas

2.1.1 Definiciones

Existe la gestión integrada de recursos hídricos (GIRH) y la gestión integrada de cuencas


hidrográficas (GICH). En el primer caso hace énfasis en el recurso hídrico como tal, pero en
el segundo caso el énfasis es sobre el espacio donde se gestiona el recurso hídrico.

La GIRH (recurso hídrico) se basa en la definición realizada por la Asociación Mundial por
el Agua (WGP, siglas en inglés). Esta asociación lo define como: “un proceso que promueve
el desarrollo coordinado, la gestión del agua, del suelo y de otros recursos relacionados
con el fin de maximizar el resultado económico y el bienestar social de una manera
equitativa, sin comprometer las sostenibilidad de los ecosistemas” (Montes, 2007).

La GICH (cuenca hidrográfica) se refiere a una herramienta utilizada para la planificación y


gestión del recurso hídrico en un contexto biofísico, delimitado por la cuenca hidrográfica.
El manejo integrado comprende el manejo de las aguas superficiales y subterráneas en un
sentido cualitativo, cuantitativo y ecológico, desde una perspectiva multidisciplinaria y
centrada en las necesidades de la sociedad y la naturaleza, en materia de agua (Garcés,
2011).

Pero Dourojeanni (2009) realiza la siguiente definición sobre la gestión de recursos


hídricos por cuencas “la gestión de las intervenciones, que los seres humanos realizan en
una cuenca y sobre el agua captada por la misma, con el fin de conciliar metas
económicas, sociales y ambientales que permitan mejorar la calidad de vida de todos los
seres humanos que dependen del uso de su territorio y sus recursos así como minimizar
los conflictos entre los interventores y con el ambiente”.

[6]
Esta última definición es mucho más compatible con el objetivo general de esta
investigación y por tanto será la que se adopte para el siguiente trabajo. Además, articula
tanto al recurso hídrico, el espacio, los ecosistemas, los seres humanos, las interrelaciones
y las políticas. A partir de este momento utilizaremos la gestión integrada de cuencas
hidrográficas (GICH) como sinónimo de la gestión de recursos hídricos por cuencas, lo
anterior para facilitar la comunicación y transferencia de datos.

2.1.2 Importancia

El ciclo del agua integra a los ecosistemas y a la sociedad humana en un mismo sistema
planetario. El agua es un elemento clave que constituye el componente básico de todos los
seres vivos y también posee funciones básicas que determinan la integridad ecológica y la
capacidad adaptativa del planeta (Montes, 2007). El ciclo del agua se debe abordar en el
contexto de la cuenca hidrográfica, definida como un territorio que es delimitado por la
propia naturaleza, esencialmente por los límites de las zonas de escurrimiento de las aguas
superficiales que convergen hacia un mismo cauce (Garcés, 2011, Montes, 2007 y Veas,
2011).

Montes (2007) indica que la cuenca constituye la unidad mínima de interacción del ciclo
del agua con los continentes y es en donde se integran los usos del suelo con los
ecosistemas terrestres y acuáticos. El desafío de la gestión se concentra en organizar las
necesidades de agua para los humanos y para los ecosistemas, de tal manera que se
puedan mantener buenos niveles de bienestar humano e integridad ecológica al mismo
tiempo y por largo plazo. En conclusión, la gestión del agua hay que hacerla de una forma
global en el contexto de las cuencas hidrográficas conceptuadas como un mosaico de
ecosistemas acuáticos, terrestres y de usos humanos integrados y dinamizados por el ciclo
hidrológico.

[7]
Se debe abandonar el enfoque reduccionista que se caracteriza por tener una visión
fragmentada, economicista y que no reconoce la existencia de otros servicios del
ecosistema. El agua es aislada de su entorno y se analiza de forma independiente. El
proceso de dividir el todo en cada una de sus partes conduce a la fragmentación del
concepto de ciclo hidrológico. Posteriormente, el agua es materia prima que es convertida
en un bien económico, olvidando el funcionamiento de los ecosistemas para la producción
de ese bien (Garcés, 2011).

Ahora se debe aplicar un enfoque desde la perspectiva sistémica para cambiar la


aproximación convencional de las políticas hidrológicas actuales (Montes, 2007). Esta
perspectiva se caracteriza por tener una visión holística, el agua es un componente de los
ecosistemas y reconoce la existencia de las interrelaciones hombre-naturaleza. El enfoque
sistémico aplicado a la GICH se desarrollo a partir de la teoría general de sistemas y del
concepto de ecosistemas. La teoría de los sistemas abiertos, permite la definición de los
ecosistemas como sistemas que experimentan la entrada y salida constante de materia y
energía, aun cuando sus aspectos generales y funciones, permanezcan constantes por
períodos prolongados (Pirot et al, 2000; Odum, 1995; citado por Garcés, 2011).

Por parte de los gestores y usuarios, estos consideran la gestión del agua como la
administración de la cantidad y calidad de la misma (enfoque reduccionista).
Generalmente se basa en la gestión del agua que se encuentra almacenada en ríos, lagos y
acuíferos. Pero a nivel científico, los hidroecólogos plantean un modelo sistémico
alternativo (enfoque sistémico). Estos introducen los conceptos de los flujos de agua verde
y agua azul -figura 1- (Montes, 2007).

En el ciclo del agua, el agua producto de la precipitación que llega a un territorio (cuenca
hidrográfica) se reparte en dos flujos. El primer flujo corresponde al agua azul que
corresponde al componente visible del ciclo del agua. Por su parte, el segundo flujo
corresponde al componente invisible de este ciclo (Montes, 2007).

[8]
Montes (2007) indica que el agua azul constituye el flujo de agua líquida que se desplaza
por gravedad desde la parte alta de las cuencas hacia la desembocadura de los ríos y al
mar. Es el agua superficial que se desplaza por escorrentía hacía los ríos o el agua
subterránea que se desplaza hacia los acuíferos. Como ejemplo de este tipo de agua azul
están: a) volumen de agua de los ecosistemas acuáticos de las cuencas -ríos, lagos,
humedales, acuíferos-; b) el volumen de agua que usa directamente el ser humano que
trata de maximizarlo mediante infraestructuras hidráulicas como embalses o canales.

Figura 1. Diagrama que ejemplifica los flujos de agua verde y agua azul en un territorio
(tomado de Montes, 2007).

En el caso del agua verde se refiere al flujo de vapor de agua a la atmósfera, desde el agua
almacenada en el suelo (evaporación) o desde la transpiración de la vegetación natural
(bosques, matorrales, praderas) o desde los cultivos. El agua verde (evaporación +
transpiración) mantiene las funciones ecológicas de los ecosistemas terrestres donde la
producción de biomasa es la más importante, incluyendo la producción de las cosechas
que suponen alrededor del 60% de la producción mundial de alimentos (Montes, 2007).

[9]
Al considerar los flujos de agua verde y agua azul significa un cambio conceptual para la
gestión integrada del ciclo del agua. Por eso desde el concepto de servicios de los
ecosistemas se pretende mostrar a la sociedad que su bienestar depende del buen
funcionamiento de los sistemas naturales y que este funcionamiento depende del ciclo del
agua ya sea de su flujo verde -ecosistemas terrestres- o de su flujo azul -(ecosistemas
acuáticos- (Montes, 2007).

2.1.3 Gestión integrada de cuencas hidrográficas en Costa Rica

Desde los años 60 del siglo pasado se desarrollaron estudios hidrológicos muy puntuales y
específicos a cargo de las instituciones responsable del recurso hídrico en ese momento,
como el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), el Servicio Nacional de Aguas
Subterráneas, Riego y Avenamiento (SENARA) y el Instituto Costarricense de Acueductos y
Alcantarillados (AyA). Estos estudios tenían la finalidad de bridar soluciones a las
demandas sectoriales de agua y el establecimiento de proyectos de diferente índole, con
una visión muy restringida en fines energéticos y de riego.

En 1996, Costa Rica se incorporó a la Red Latinoamericana de Cooperación Técnica en


Manejo de Cuencas Hidrográficas. Esta Red es auspiciada por la Oficina Regional de la FAO
en América Latina. Producto de formar parte de esta Red, a nivel nacional se estableció
una Red Nacional de Cooperación Técnica en Manejo de Cuencas Hidrográficas.
Establecida por el Ministerio de Ambiente y Energía (actualmente MINAET) mediante la
publicación del Decreto Ejecutivo No 29238-MINAE, como la instancia técnica que actúa
de foro permanente propiciando un ambiente adecuado para el intercambio, análisis,
discusión y deliberación en asuntos de interés nacional relacionados con las cuencas
hidrográficas nacionales y binacionales (Espinoza, 2003).

[10]
Esta red nacional está integrada por representantes del sector público, privado, académico
y sociedad civil.

 Las instituciones públicas son: Ministerio del Ambiente, Energía y


Telecomunicaciones (MINAET), Ministerio de Salud, Ministerio de Agricultura y
Ganadería (MAG), Ministerio de Planificación Nacional y Política Económica
(MIDEPLAN).

 Las organizaciones autónomas: el Instituto Costarricense de Acueductos y


Alcantarillados (AyA), Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), Instituto
Fomento y Asesoría Municipal (IFAM) y Servicio Nacional de Aguas Subterráneas,
Riego y Avenamiento (SENARA).

 El sector académico: Instituto Tecnológico de Costa Rica (ICTR), Universidad


Nacional (UNA), Universidad de Costa Rica (UCR) y Centro Agronómico Tropical de
Investigación y Enseñanza (CATIE).

 El sector privado: el Centro de Derecho Ambiental y Recursos Naturales


(CEDARENA) y la sociedad civil es representa por la Federación de Conservación de
la Naturaleza (FECON).

El objetivo de la Red Nacional es mejorar la capacidad de gestión en el manejo de Cuencas


Hidrográficas mediante el intercambio de experiencias y conocimientos de los
profesionales de las organizaciones, la presentación de propuestas de lineamientos de
política en la materia y utilizando los recursos técnicos existentes.

[11]
Tabla 1. Experiencias en gestión de cuencas hidrográficas en Costa Rica (Espinoza, 2003).

Proyecto Institución Ejecutora

Plan de manejo integrado Cuenca del río Reventazón ICE


Proyecto de Desarrollo Sostenible de Cuenca Hidrográfica del Río MINAET
Savegre
Plan de Desarrollo Integral de la Cuenca del Río Síxaola, sección Costa SINAC
Rica
Plan de Desarrollo Sostenible de la cuenca del Río Frío INBIO
Ordenamiento y Manejo de la Cuenca Alta del Río Reventazón. Ley No 8023, ICE y MINAET
Plan de manejo y desarrollo de la cuenca del Embalse Arenal FUNDACA/A.C. Arenal-
Tilarán
Recuperación de la parte alta de la cuenca del Río Segundo, Heredia UNA y municipalidades de
la zona
Plan de manejo integral de la cuenca del río Térraba MINAET
Recuperación de la cuenca del río Segundo UNA
Estudio de la microcuenca de la Quebrada Salitral UNA
Diagnóstico sobre estado de las cuencas de los ríos San Pedro, UNA
Soñador, Volcán y Convento (Zona Sur)
Manejo y ordenamiento territorial de la cuenca del río Poás UNA
Mejoramiento ambiental de la parte alta de la cuenca del río Virilla CNFL
Proyecto Instrumentos Económicos Efectivos de Gestión Ambiental MINAET
Diagnósticos ambientales por cuenca, para evaluación de proyectos ICE
eléctricos
Planes de manejo integral en cuencas ICE
Asesorías en manejo de recursos hídricos FECON
Inventario de recursos hídricos superficiales y subterráneos ICAA
Diagnóstico de áreas de drenaje prioritarias ICAA
Capacitación, divulgación y extensión ICAA
Manejo de desechos orgánicos e inorgánicos en cuencas CNFL
Reforestación y conservación de bosques CNFL
Programa de agricultura conservacionista en microcuencas MAG
Fortalecimiento de capacidad local en manejo de cuencas y CATIE
prevención de desastres naturales
Proyecto Arenal-Tempisque SENARA
Programa Nacional de Cuencas Hidrográficas Decreto Ejecutivo No
30.077 MINAET
Programa Nacional de Humedales MINAET

[12]
Espinoza (2003) concluye que la gestión de cuencas en Costa Rica ha sido una actividad
dispersa, fraccionada y localizada, que ha impedido establecer la cuenca como unidad de
planificación y manejo integral del agua y de los recursos naturales.

Señala que existen limitaciones que han favorecido el proceso de degradación de los
recursos naturales y han obstaculizado la marcha de programas de ordenamiento y
manejo de cuencas. Menciona los siguientes:

 La carencia de una institución rectora, así como de los mecanismos organizativos


que permitan una coordinación integrada y unitaria que defina las funciones y
responsabilidades institucionales.

 La ausencia de una legislación coherente y moderna que permita armonizar y


actualizar los diferentes instrumentos y normativas vigentes.

 La falta de un diagnóstico sobre la situación de las cuencas hidrográficas.

 Carencia de fondos suficientes para desarrollar los programas y proyectos.

 Poca conciencia colectiva que genere la voluntad política para proteger y recuperar
las cuencas.

[13]
2.2 Servicios de los ecosistemas

La Evaluación de Ecosistemas del Milenio (MA) inició en el 2001, con la finalidad de


mostrar a la sociedad los estrechos vínculos que existe entre la biodiversidad que albergan
los ecosistemas y el bienestar humano. De acuerdo con el EME (2010), el gran desafío fue
dar significado a la información disponible, más o menos heterogénea y dispersa, sobre los
sistemas ecológicos, los sistemas sociales y su interacción. La MA también consideró
necesario presentar los resultados de una forma sencilla y pedagógica para que pudiesen
ser comprendidos y utilizados por un número amplio de colectivos y personas, tanto de la
administración como ajenos a ella.

Esta evaluación mundial utilizó un nuevo marco conceptual para analizar y comprender los
efectos del cambio global sobre los ecosistemas y el bienestar humano (figura 2), usando
los servicios de los ecosistemas como concepto núcleo y central (OSE, 2010). No fue una
metodología formalmente elaborada a modo de manual científico técnico, pero si
contiene los pasos a seguir según los objetivos y características socioecológicas propias de
la región donde se desarrolle (EME, 2010).

[14]
Figura 2. Marco conceptual de referencia de la Evaluación de Ecosistemas del Milenio.
Ubica al ser humano en el foco central de la evaluación y todos sus componentes se
dirigen a ese punto. Pone de manifiesto como factores que indirectamente afectan a los
ecosistemas como el incremento de la población humana y el consumo per cápita (cuadro
superior derecha) puede generar cambios directos en los ecosistemas por ejemplo a través
de la intensificación de las pesquerías (cuadro inferior derecha). Los cambios generados en
el funcionamiento de los ecosistemas pueden incidir en su capacidad de generar servicios
(cuadro inferior izquierda) y por tanto afectara a varios de los componentes del bienestar
humano (cuadro superior izquierda). Estas interacciones pueden tener lugar a diferentes
escalas espaciales y temporales. Pueden desencadenarse políticas con estrategias y
acciones que incrementen los efectos negativos o que generen cambios positivos en
diferentes puntos del cuadro de interacciones (tomado de Montes y Lomas, 2010).

[15]
Tabla 2. Unificando conceptos clave para la gestión de los socioecosistemas.

Concepto Definición

Capital natural Aquellos ecosistemas con capacidad de ejercer funciones y por


tanto de suministrar servicios a la sociedad (Martín-López et al.,
2009).
Ecosistema Unidad funcional constituida por componentes vivos y no vivos,
ligados por una trama de relaciones biofísicas que intercambian
materia y energía y se autoorganizan en el tiempo (EME-España,
2011).
Funciones de los Capacidad de las estructuras y procesos ecológicos para proveer
ecosistemas servicios que generen bienestar humano (De Groot et al, 2002).
Servicios de los Contribuciones directas o indirectas de los ecosistemas al
ecosistemas bienestar humano (De Groot et al, 2010).
Bienestar humano Vida buena dentro de los límites biofísicos de los ecosistemas
(EME, 2011)
Impulsores directos de Factor que altera directamente los ecosistemas. Son factores
cambio naturales o inducidos por los seres humanos que actúan de
manera inequívoca sobre los procesos biofísicos de los
ecosistemas y por tanto afectan al flujo de servicios -ver figura 1-
(EME, 2011).
Los impulsores Son factores y procesos sociopolíticos que actúan de un modo
indirectos de cambio más difuso alterando los ecosistemas a través de su acción sobre
uno o más impulsores directos de cambio -ver figura 1- (EME,
2011).
Cambio global Define el impacto de la actividad humana sobre el
funcionamiento de la biosfera. Se incluyen en este término
aquellas actividades que, aunque ejercidas localmente, tienen
efectos que trascienden el ámbito local o regional para afectar el
funcionamiento global del sistema Tierra (Duarte et al, 2009).

[16]
Los servicios de los ecosistemas tienen un origen desde la perspectiva antropocéntrica, los
ecosistemas son entendidos como un capital natural con integridad ecológica y resilientes
(figura 3), capaces de generar un flujo de servicios al ser humano, mediante el
mantenimiento de sus funciones (Montes, 2007; Martín-López et al, 2009).

Figura 3. Ciclo de sostenibilidad. Los ecosistemas tienen la capacidad de generar servicios


a partir de las funciones, con el fin de mantener el bienestar humano. Es en este instante,
cuando los ecosistemas son entendidos no sólo por sus valores intrínsecos, sino también
por sus valores instrumentales. Para que el sistema socio-ecológico sea sostenible, y se
siga generando dicho flujo de servicios, las instituciones deben mantener este capital
natural (ecosistemas resilientes) a través de los planes de gestión y el ordenamiento
territorial (adaptado de Martín-López et al, 2009).

[17]
Los servicios de los ecosistemas son los beneficios que las personas reciben y obtienen de
los ecosistemas (Daily, 1997). Este concepto de servicio de los ecosistemas tiene más de 30
años, su principal virtud es que permite el análisis integrado de los aspectos ecológicos,
sociales y ambientales en la gestión de los ecosistemas (Maass et al, 2005). Además, tiene
el objetivo de hacer explícitos los beneficios que los humanos obtienen de los ecosistemas
(Balvanera, 2012).

La Evaluación de Ecosistemas del Milenio clasifica los servicios de los ecosistemas en


cuatro tipos: soporte, abastecimiento, regulación y culturales (MA, 2003).

1. Servicios de abastecimiento: son los productos obtenidos directamente de la


estructura biótica o geótica de los ecosistemas, como el alimento, la madera, el
agua potable, etc.

2. Servicios de regulación: son los beneficios obtenidos de manera indirecta de los


ecosistemas como resultado de su funcionamiento, como la purificación del agua,
el control de erosión del suelo, control climático, etc.

3. Servicios culturales: son los beneficios no materiales que la gente obtiene a través
de las experiencias estéticas, el turismo o el enriquecimiento espiritual.

4. Servicios de soporte: son los procesos ecológicos que subyacen al mantenimiento


del resto de servicios.

Sin embargo, otros proyectos de evaluación de ecosistemas no utilizan los servicios de


soporte. Esto se debe a que cuando se realiza una valoración monetaria surge el problema
de doble conteo. El ejemplo más clásico se da con la producción primaria o mantenimiento
del ciclo de nutrientes (servicios de soporte), ya que estos son la base del suministro de la
mayoría de los servicios de regulación (p.ej. regulación climática, control de la erosión,
fertilidad del suelo, o depuración del agua). Al valorar económicamente ambos servicios se

[18]
generaría una doble contabilidad. Por lo tanto, actualmente, se consideran tres categorías
de servicios: abastecimiento, regulación y culturales. (OSE, 2010).

2.3 Análisis de compromisos (Trade-off)

Un cambio en el uso del suelo o en la gestión del territorio presume un cambio en el


suministro de servicios (OSE, 2010). El análisis de compromisos o Trade-off se produce
cuando la prestación de un servicio de los ecosistemas se reduce como consecuencia de
un mayor uso de otro servicio. Estos desequilibrios derivan de las decisiones de gestión
realizadas por la sociedad, los cuales en su gestión pueden cambiar el tipo, la magnitud y
la combinación relativa de los servicios prestados por los ecosistemas. El análisis de
compromisos entre servicios de los ecosistemas se pueden clasificar en tres ejes: la escala
espacial, la escala temporal y la reversibilidad (Rodríguez et al, 2006).

 Escala espacial: se refiere a si los efectos de la compensación se dejan sentir a nivel


local o en un lugar distante. Supone un beneficio local, pero costes en otro lugar ya
sean locales, regionales o globales (Rodríguez et al, 2006; OSE, 2010). Entendiendo
el “coste” como un gasto realizado para la obtención o adquisición de un servicio.

 Escala temporal: se refiere a si los efectos se producen con relativa rapidez o


lentitud. En este caso implican beneficios ahora y costes a largo plazo (Rodríguez et
al, 2006; OSE, 2010).

 Reversibilidad: expresa la probabilidad de que el servicio de los ecosistemas


perturbado puede volver a su estado original, si la perturbación acaba.

También es posible hablar de Trade-off interpersonales, esto supone un escenario donde


unos ganan y otros pierden (OSE, 2010).

[19]
El análisis de compromiso sentre servicios de los ecosistemas pueden generase de dos
maneras: a) decisión explícita mediante una política local, regional o global; y b) surgen sin
premeditación, ni siquiera conciencia de que están teniendo lugar (Rodríguez et al, 2006).
El análisis de los Trade-off permite la generación de políticas que se pueden desarrollar en
múltiples escalas espaciales y temporales con el fin de gestionar un territorio para que
mantenga la estructura y funcionamiento de los ecosistemas (OSE, 2010).

2.4 Sistemas socioeológicos o socioecosistemas

La cuenca hidrográfica es un territorio donde conviven las actividades humanas y los


procesos naturales de los ecosistemas que sustentan la vida. Desde la evaluación de los
ecosistemas del milenio se ha reconocido la estrecha relación entre los ecosistemas y el
bienestar humano (MA, 2003). Esta evaluación puso en evidencia las relaciones entre
naturaleza y sociedad, cómo el ser humano afecta a la integridad de los ecosistemas y
cómo estos repercuten en el bienestar humano. Esta interrelación entre sistemas
ecológicos y sistemas sociales también es conocida como sistema socioecológico o
socioecosistema -figura 4- (Martín-López et al, 2009).

En la cuenca hidrográfica se puede visualizar ese conjunto de relaciones y procesos. No


visto desde las actividades productivas o desde la conservación de la biodiversidad de
manera independiente, sino una visión holística donde todos los espacios en el territorio
son importantes y tienen su función. La salud y mantenimiento de los ecosistemas a largo
plazo es una acción fundamental más que se requiere para la producción, y más aún, para
el bienestar humano.

[20]
Figura 4. Diagrama conceptual de los elementos que componen un sistema
socioecológico o socioecosistema (tomado de Martín-López et al, 2009).

Sin embargo, el sistema social toma decisiones sobre el territorio que puede afectar a los
ecosistemas, estructura, funcionamiento y por tanto a los servicios de los ecosistemas que
pueda ofrecer a la sociedad. Probablemente generando conflictos y desigualdades sociales
(Martín-López et al, 2009). De ahí la necesidad de crear aproximaciones metodológicas
para la GICH basado en los servicios de los ecosistemas.

[21]
3 Área de estudio

La cuenca hidrográfica del río Frío (CHRF) esta localizada en la zona norte de Costa Rica. Se
localiza entre las coordenadas geográficas 10°29´ - 11°07´ latitud Norte y 84°35´ - 85°01´
longitud Oeste (figura 5). Tiene una superficie de 1.743 Km2, tiene una longitud de 74 Km
desde la cima de la cordillera de Tilarán hasta la desembocadura en el lago de Nicaragua,
con un ancho máximo de 50 Km. Drena sus aguas al lago de Nicaragua, que
posteriormente confluye en el mar Caribe por medio del río San Juan (IGN, 1966, 1987,
1988, 1993).

El río San Juan es el límite natural fronterizo entre Costa Rica y Nicaragua en
aproximadamente 125 kilómetros. La cuenca hidrográfica del río San Juan es la más grande
de Centroamérica y se considera una cuenca binacional ya que esta localizada en ambos
territorios. El mayor porcentaje del territorio pertenece a Nicaragua e incluye el Lago
Cocibolca o Lago de Nicaragua. El río Frío es una subcuenca de la cuenca hidrográfica del
río San Juan. (CCAD, 2003).

La administración política en la cuenca hidrográfica corresponde a un municipio en


Nicaragua y tres municipios de Costa Rica. El municipio de San Carlos que pertenece al
Departamento del Río San Juan en Nicaragua. En Costa Rica, los municipios de Guatuso,
Los Chiles y San Carlos en la provincia de Alajuela. Tiene una población aproximada de
38.808 habitantes para el año 2000, con una distribución de un 47% de mujeres y un 53%
de hombres. La densidad es 23 habitantes por kilómetro cuadrado (ITCR, 2008).

[22]
Figura 5. Ubicación geográfica de la cuenca hidrográfica del río Frío. Esta localizada en la
zona norte de Costa Rica (Centroamérica) y drena sus aguas en el lago de Nicaragua.
Posteriormente confluye en el mar Caribe por medio del río San Juan. En esta cuenca hay
tres áreas protegidas, el Refugio de Vida Silvestre Caño Negro –Humedal RAMSAR-, la Zona
Protectora Tenorio y el Parque Nacional Volcán Tenorio (IGN 1966, 1987, 1988, 1993 y
SINAC (2006).

[23]
Esta cuenca tiene una orientación Sur-Norte, su máxima altitud es de 1900 m.s.n.m. en el
volcán Tenorio en la cordillera de Tilarán. Mientras que la altitud inferior es cercana a los
20 m.s.n.m. en la zona de confluencia con el lago de Nicaragua y el río San Juan.

Tiene pendientes planas en la mayor parte de la cuenca y las pendientes altas se


encuentran conforme asciende hacia la cordillera de Tilarán (CICG, 2011).Esta cuenca tiene
una precipitación promedio anual de 2.127 mm/año, con un período de menor
precipitación entre los meses de enero-abril y el período lluvioso entre mayo-diciembre. La
máxima precipitación se presenta en el mes de julio. La temperatura media mensual de la
zona oscila entre los 25,3 y 27,6oC, con un mínimo cercano a los 20°C y un máximo de
34°C. Los meses más calientes se dan entre abril-mayo, mientras que la época fresca es
diciembre-enero (CICG, 2011).

La selección de la CHRF como estudio de caso se fundamenta en diversos factores, entre


ellos se pueden mencionar los siguientes: a) es una cuenca transfronteriza (Costa Rica-
Nicaragua); b) tiene un acuífero regional y confinado; c) tiene un humedal RAMSAR; d)
esta ubicada en dos de los cantones más rezagados en términos sociales y económicos; e)
hay una diversidad de estudios técnicos desarrollados por el Proyecto Desarrollo
Sostenible de la Cuenca del río Frío; f) se elaboró el instrumento de planificación (planes
de manejo) para dos áreas protegidas (Refugio de Vida Silvestre Caño Negro y Parque
Nacional Volcán Arenal); g) se está elaborando el ordenamiento territorial para los
municipios de Guatuso (parte alta de la cuenca) y Los Chiles (parte baja de la cuenca); y, h)
hay una propuesta para iniciar con un instrumento de plan regional.

Todos estos factores permiten poner en práctica la propuesta de aproximación


metodológica, con el fin de generar nueva información para que los gestores, políticos y el
público en general puedan dictar políticas acorde con los cambios en los ecosistemas y la
biodiversidad, y su impacto sobre el bienestar humano.

[24]
4 Diseño de la aproximación metodológica

La aproximación metodológica busca utilizar los servicios de los ecosistemas como una
herramienta integradora y holística, que permita identificar los ecosistemas, los
beneficiarios y los compromisos (Trade-off) entre los servicios de los ecosistemas en el
contexto de la cuenca hidrográfica como base para una gestión del territorio que influya
en la estructura y funcionamiento de los ecosistemas. Esta aproximación metodológica
(figura 6) esta compuesta de cinco pasos:

 Delimitación del socioecosistema

 Impulsores de cambio

 Conocimiento local de los servicios de los ecosistemas

 Definir los compromisos (Trade-off) temporales y espaciales

 Identificar unidades suministradoras de los servicios de los ecosistemas

4.1 Delimitación del socioecosistema

1) Límites biofísicos de la cuenca hidrográfica

El primer paso correspondió al análisis previo de las escalas espaciales de trabajo tanto
ecológico como socioeconómico. En el caso del sistema ecológico, el objetivo fue definir
los límites físicos de la cuenca hidrográfica. La delimitación se realizó mediante
digitalización de los límites de la cuenca hidrográfica basado en la cartografía oficial para
Costa Rica y con escala 1:50.000 (IGN, 1966, 1987, 1988, 1993).

[25]
Para la delimitación de ambos socioecosistemas se utilizó la combinación del mapa
socioeconómico (SINAC e IPS, 2009), el mapa geomorfológico escala 1:200.000 (ITCR,
2008), el mapa de uso del suelo (2001-2003) y el mapa de curvas de nivel escala 1:50.000
(IGN, 1966, 1987, 1988, 1993), siendo este último mapa el que permitiera dibujar su límite
con mayor precisión. La altitud de 200 m.s.n.m es la cota seleccionada para dividir ambos
socioecosistemas.

2) Límites administrativos

Mientras que el análisis socio-económico estuvo definido por los distritos administrativos
de los municipios que tienen injerencia sobre la cuenca hidrográfica (IGN, 2009). Estos son
los distritos de Caño Negro, Los Chiles, El Amparo y San Jorge que pertenecen al municipio
de Los Chiles. Los distritos de Cote, San Rafael y Buenavista que corresponden al municipio
de Guatuso. Los distritos de Venado y Monterrey que pertenecen al municipio de San
Carlos.

4.2 Impulsores de cambio

El segundo paso comprendió la recopilación de datos para la caracterización ecológica y


socio-económica de la cuenca. Para ello se eligió un impulsor directo de cambio, en este
caso el cambio uso del suelo en dos períodos distintos. Un impulsor directo de cambio
altera directamente los ecosistemas y por tanto afectan al flujo de servicios.

El impulsor indirecto de cambio seleccionado es el crecimiento poblacional (demográfico).


Este tipo de impulsor indirecto es un factor sociopolítico que actúa de forma difusa
alterando los ecosistemas a través de la gestión que se realiza sobre el territorio.

[26]
1) Análisis multitemporal del uso del suelo

En el caso de la caracterización ecológica se realizó un análisis multitemporal del cambio


de uso del suelo para dos tiempos distintos; año 1987 y 2001. En ambos períodos se
utilizaron imágenes satelitales Thematic Mapper Lansat. La escogencia del sensor se debe
a que las imágenes son gratuitas y con una resolución espacial media. Los criterios para
seleccionar los años de las imágenes de satélite obedecen más a la disponibilidad de estas,
con la menor cobertura de nubes y con más de 10 años de diferencia en la toma de las
imágenes.

Figura 6. Aproximación metodológica para la gestión integrada de cuencas hidrográficas


basada en los servicios de los ecosistemas (elaboración propia).

[27]
Debido a que esta zona es de muy alta nubosidad, hubo que emplear una combinación de
imágenes de satélite para poder obtener los resultados más confiables, tanto para 1987
como el 2001 (figura 7). Para 1987 se utilizaron dos imágenes del mes de diciembre pero
entre ambas imágenes tenían un 33 % de nubosidad. Se removió las nubes con apoyo de
tres imágenes adicionales. Una diciembre de 1987, otra de febrero 1986 y la última de
mayo 1988. Todas estas imágenes también del mismo sensor Thematic Mapper Lansat.

Para el año 2001 se combinaron tres imágenes. Las imágenes del 2001 y 2003
corresponden a los meses de enero y para el año 2002 la imagen es de septiembre. La
mayor parte del uso del suelo se obtuvo de la imagen de enero del 2001
(aproximadamente el 75%).

(a) (b)

Figura 7. Combinación de imágenes de satélite para 1987 y 2001, en la cuenca


hidrográfica del río Frío-Costa Rica. Para elaborar los mapas de uso del suelo para la
cuenca se utilizaron dos imágenes de satélite en el año 1987 (a) y en el 2001 se utilizaron
tres imágenes de satélite (b).

[28]
Estas imágenes tienen ocho bandas espectrales, una resolución espacial de 30 metros y
están disponibles en http://glovis.usgs.gov/. Particularmente se utilizó estas imágenes que
son gratuitas como parte del objetivo de que esta aproximación metodológica pueda
replicarse en otros estudios.

La clasificación de la uso del suelo se realizó de forma supervisada en el programa de


cómputo ERDAS IMAGINE 9.0. El resultado de dicha categorización se evaluó mediante una
matriz de contingencia, en la cual el programa indica qué porcentaje de cada tipo de uso
del suelo identificado por el usuario fue finalmente clasificado como tal (Anexos 1 y 2).

Para la clasificación supervisada del uso del suelo en la cuenca, se utilizaron observaciones
hechas en campo durante el año 2009. Previo a la clasificación se realizó la corrección
radiométrica de las imágenes satelitales con el programa de cómputo ERDAS IMAGINE 9.0.

Para definir la unidad menor de mapeo, se siguió el argumento de que se necesitaría un


área mínima de 3 * 3 píxeles para tener certeza de que al menos uno de ellos es clasificado
de forma correcta como perteneciente a un tipo de uso del suelo particular. Con las
imágenes que se emplearon, un área de 3 * 3 píxeles equivale a 8.100 m2.

2) Análisis multitemporal del crecimiento poblacional

La población es uno de los indicadores más importantes para cualquier país desde el punto
de vista socioeconómico. A partir de la cantidad de población, así serán sus necesidades.
Entre ellas la cantidad de servicios, la cantidad de caminos, la inversión necesaria para la
generación de empleo, etc. Conocer lo anterior es trascendental al momento de plantear
estrategias para gestionar o administrar el territorio donde desarrollan sus actividades
(SINAC e IPS, 2009a).

La población puede definirse como la cantidad de personas que habitan una región o zona
geográfica en un momento dado. Los cambios en el volumen y estructura de la población

[29]
se dan principalmente por tres factores: los nacimientos, las defunciones y los
movimientos migratorios.

El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) es la responsable de


coordinar la producción estadística del país con el objetivo de responder a las necesidades
de información nacional. Para ello el INEC realiza censos nacionales en donde se encuesta
una serie de variables económicas y sociales. Los años seleccionados para este análisis
fueron el censo de 1973, 1984, 2000 y 2011. Los datos de este indicador se encuentran a
nivel de distritos, mínima división territorial administrativa de Costa Rica.

4.3 Conocimiento local de los servicios de los ecosistemas

El tercer paso correspondió a identificar el conocimiento local sobre los servicios de los
ecosistemas que se generan en la cuenca, tanto desde el punto de vista social como
ecológico.

1) Identificar los servicios de los ecosistemas

Desde el punto de vista social se realizó una entrevista a diferentes grupos de actores en la
cuenca. Las entrevistas se realizaron tanto en la cuenca alta como baja. En la cuenca alta
se realizaron entrevistas en San Rafael de Guatuso. Mientras que en la cuenca baja, las
entrevistas se realizaron en Los Chiles.

La entrevista consistió de tres preguntas y se demoró en promedio 10 minutos para su


aplicación. Primeramente se anota los datos básicos personales (nombre,
institución/empresa y comunidad). Posteriormente se pregunta a cada participante lo
siguiente:

 ¿Qué identifique los beneficios (servicios de los ecosistemas) de los ecosistemas


que percibe en su cantón o localidad?

[30]
 ¿Qué realice una priorización de los tres beneficios (servicios de los ecosistemas)
más importantes que identificó previamente?

 ¿Cuáles amenazas ponen en riesgo la obtención de esos beneficios (servicios de los


ecosistemas)?

Durante la entrevista, tanto en las preguntas como en el diálogo se utilizó con más
frecuencia la palabra beneficio, en vez de servicio de los ecosistemas, ya que resulta ser un
sustantivo más cotidiano y de mayor comprensión para los entrevistados, ayudando así a
mejorar la información que se obtuvo.

Estas entrevistas se realizaron durante el año 2010 aprovechando la elaboración de los


planes reguladores municipales con fines de ordenamiento y gestión del territorio. Se
entrevistron entre el 20-30% del total de asistentes, buscando y procurando mantener
siempre que sea posible la proporcionalidad sectorial. La selección del número de
personas y el grupo social se realizó a partir de las listas de inscripción al taller del plan
regulador municipal. Esta lista fue la base para seleccionar por grupo de actores el número
de personas a entrevistar.

2) Definición de los servicios de los ecosistemas

Con la primera pregunta de la entrevista acerca de identificar los servicios de los


ecosistemas se esperaba una lista extensa de estos servicios para cada sector de la cuenca.
Esta información generó la base del conocimiento local sobre los servicios de los
ecosistemas que se generan en la cuenca desde el punto de vista social.

Pero con la segunda pregunta (servicios de los ecosistemas prioritarios) se procedió a


definir los servicios de los ecosistemas de la CHRF. Para cada servicio se realizó una
descripción basado en la literatura disponible y su importancia para el bienestar humano
local.

[31]
4.4 Definir los compromisos (Trade-off) temporales y espaciales

El cuarto paso fue el análisis temporal y espacial de compromisos entre los servicios de los
ecosistemas (Trade-off). Trade-off consiste en una situación en la cual se debe perder
cierta cualidad a cambio de otra cualidad. En los servicios de los ecosistemas es la
reducción o perdida de un servicio de los ecosistemas a causa del incentivo o aumento de
otro servicio, esto genera un desequilibrio entre los servicios de los ecosistemas en un
mismo socioecosistema (Martín-López y Montes, 2010).

Este análisis de compromisos (Trade-off) temporal y espacial entre los servicios de los
ecosistemas se realizó con base en los cambios de uso del suelo para 1987 y 2001. El
primer análisis contempló evaluar un Trade-off temporal entre los servicios del
ecosistema basado un período de 14 años (1987 y 2001). El otro análisis correspondió al
Trade-off espacial, es decir cuales servicios de los ecosistemas de la cuenca baja están
siendo alterados por los servicios de los ecosistemas de la cuenca alta.

Este análisis permitió identificar conflictos socio-ecológicos ya que estos surgen por
prácticas orientadas a promover el suministro de un determinado servicio de los
ecosistemas. Por supuesto que el favorecimiento de un servicio de los ecosistemas trae
como consecuencia aspectos negativos sobre actores sociales. Aquí es donde surge la
necesidad de desarrollar estrategias de gestión del territorio en la cuenca hidrográfica para
equilibrar la producción y el mantenimiento de las funciones de los ecosistemas.

[32]
5 Resultados

5.1 Socioecosistemas

En la CHRF se definieron dos socioecosistemas con base en la geomorfología, la altitud, las


ecorregiones, las condiciones climáticas, la hidrología, la población y el uso del suelo. Estos
indicadores permitieron definir ambos socioecosistemas (Tabla 3 y Figura 8): el
socioecosistema de montaña (cuenca alta) y el socioecosistema de llanura (cuenca baja).

Tabla 3. Características principales utilizadas para definir los socioecosistemas en la


Cuenca Hidrográfica del Río Frío.

Característica Socioecosistema de Montaña Socioecosistema de Llanura

Ecorregión Cordillera de Guanacaste-Lomas Llanura de Santa Clara


Buenavista
Geomorfología Formación de origen volcánico Llanura aluvial
Altitud 200-1900 m.s.n.m 20-200 m.s.n.m.
Precipitación 3.149 mm/año 2.863 mm/año
Uso del suelo Pastos (ganado bovino), bosque Bosques dominados por
tropical lluvioso y bosque tropical yolillo (Raphia taedigera),
nuboso bosque tropical lluvioso,
lagunas palustrinas, cultivos
intensivos (cítricos y piña)
Población 7.469 habitantes 38.814 habitantes
Tipo de Acuífero Dos acuíferos libres, el Sahíno y el Un acuífero libre y
Cote. superficial (Caño Negro) y
un acuífero confinado
(regional)
Superficie 40% 60%

[33]
a) Socioecosistema de montaña

Está ubicada en la parte alta de la cuenca y abarca el 40% del territorio de esta última. El
rango de altitud es de 200-1900 m.s.n.m. Es una formación de origen volcánico (CICG,
2011).

Se trata de un agropaisaje rural dedicado principalmente a la ganadería (carne y leche) y la


agricultura de pequeña escala. Los bosques cubren las zonas altas y representan el 37% del
paisaje (figura 10). Se caracteriza por tener bosque tropical lluvioso y tropical nuboso. Los
centros urbanos son pequeños, siendo San Rafael de Guatuso el más relevante en
términos de población. En este socioecosistema se encuentra un sector el Parque Nacional
Volcán Tenorio y la Zona Protectora Tenorio que abarcan el 16.8% de este socioecosistema.

El sistema acuífero río Frío esta integrado por tres unidades hidrogeológicas. En el
socioecosistema de montaña se encuentra la Unidad Volcánica, en donde se identificaron
dos acuíferos, el Sahíno y el Cote. Ambos acuíferos son clasificados como libres y en ellos
el agua aflora en manantiales. El acuífero Sahíno es el más superficial y se encuentra
relacionado con una recarga directa del agua meteórica. Por su parte, el acuífero Cote
drena hacia el norte y recarga los ríos que fluyen hacia la Laguna Cote. La recarga de esta
unidad hidrogeológica se considera directa por precipitación (CICG, 2011).

El socioecosistema de montaña está conformado por los distritos de Venado y Monterrey -


municipio de San Carlos-, Cote y Buenavista -municipio de Guatuso-(figura 8). La
población para el censo del 2011 era de 7.469 habitantes (INEC, 2012a).

[34]
Figura 8. Socioecosistemas en la cuenca hidrográfica del Río Frío-Costa Rica. La
geomorfología, la altitud, las ecorregiones, las condiciones climáticas, la hidrología, la
población y el uso del suelo permitieron definir dos socioecosistemas en la cuenca:
socioecosistema de montaña –cuenca alta- y socioecosistema de llanura –cuenca baja-.

[35]
b) Socioecosistema de llanura

Es la zona baja de la cuenca y comprende el 60% del área de esta última. Tiene un rango
altitudinal de 20-200 m.s.n.m. Es una llanura aluvial caracterizada por un sistema de
humedales que cumple con funciones reguladoras del flujo y la calidad de agua, y que
constituye un refugio para la vida silvestre. Existe dentro de este socioecosistema un área
protegida, el Refugio de Vida Silvestre Caño Negro (101,7 km2 de superficie) que abarca el
9.7% y es un humedal internacional Ramsar.

El patrón de uso del suelo cambia en este socioecosistema de llanura. Existen bosques
dominados por yolillo (Raphia taedigera), bosque tropical lluvioso, lagunas palustrinas,
cultivos intensivos (cítricos y piña) y áreas de pastos para ganado bovino.

En este socioecosistema existen dos unidades hidrogeológicas: palustre y aluvial. La


unidad palustre es la más superficial, un acuífero libre y se ha denominado Caño Negro. La
unidad aluvial es un acuífero confinado y su extensión excede el área de la CHRF; se
considera un acuífero regional y transfronterizo ya que se extiende hacia el norte, en
territorio Nicaragüense, y hacia los sectores este y oeste del territorio Costarricense (CICG,
2011).

Los distritos Los Chiles, El Amparo, Caño Negro, San Jorge (municipio Los Chiles); así como
San Rafael y Katira (municipio Guatuso) conforman el socioecosistema de llanura. La
población para el año 2011 es de 38.814 habitantes (INEC, 2012a).

[36]
5.2 Impulsores de cambio

5.2.1 Impulsor directo de cambio: uso del suelo

En la CHRF hay ocho tipos de coberturas terrestres (figura 9, 10 y 11): pastos (para ganado
bovino), bosque, bosque de yolillo (Raphia taedigera), cuerpos de agua (lagunas), cultivos
agrícolas, terrenos descubiertos de vegetación (en preparación para cultivos), herbazales
inundados (tipo de humedal) y matorrales (sucesión secundaria en regeneración natural).

En ambas fechas de evaluación los pastos, el bosque y el bosque de yolillo cubren


prácticamente el 80% de la cuenca hidrográfica. Debido a la nubosidad que impera en la
zona alta y montañosa de la cuenca, para el año 1987 esta categoría cubrió el 15% de la
cuenca y en el año 2001 se redujo a 9.1%. Los matorrales, cuerpos de agua, cultivos y otras
coberturas cubren el 5.6% y 11.6% para 1987 y 2001-2003, respectivamente (figura 11).

Los pastos para uso pecuario es la cobertura que dominó durante los dos períodos, con un
38.8% de cobertura de la cuenca para el año 1987 y un 39.5% para el año 2001. Hubo un
ligero aumento de 0.7%, que representa una superficie de más de 1.160 hectáreas. La
segunda cobertura en importancia es el bosque con 29.6% en 1987 y 27.8% en el año
2001, esto equivale a una pérdida de 3.278 hectáreas de bosque.

[37]
Figura 9. Uso del suelo en la cuenca hidrográfica del río Frío para 1987. La cuenca alta
tuvo un proceso de deforestación fuerte antes de 1970 debido a políticas agrarias del
gobierno.

[38]
Figura 10. Uso del suelo en la cuenca hidrográfica del río Frío para el 2001. En la cuenca
baja existe un incremento en la superficie agrícola, principalmente por la producción de
piña, donde Costa Rica es el primer exportador mundial.

[39]
La cobertura del bosque de Yolillo (Raphia taedigera) tuvo un aumento de 1.951
hectáreas, pasando de un 10.9% en 1987 a 12.1% en el período 2001-2003. Las otras
coberturas también aumentaron de forma leve. La causa de este aparente aumento no es
por crecimiento natural, se debe simplemente a que para el segundo año de evaluación la
nubosidad disminuyó y esto permitió la clasificación de estas coberturas.

45,0%
40,0%
35,0%
30,0%
25,0%
20,0%
15,0%
10,0%
5,0%
0,0%

1987 2001-2003

Figura 11. Cambio de uso de la tierra en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica
para el período 1987 - 2001. El crecimiento de las áreas de pastos para la producción de
ganado bovino continúa en aumento, una tasa mucho menor a la de la década de 1960-
1970. Este uso del suelo representa más del 38% de la superficie de esta cuenca para
ambos períodos.

[40]
5.2.2 Impulsor indirecto de cambio: crecimiento poblacional

Uno de los impulsores indirectos del cambio es el aspecto demográfico. Costa Rica duplicó
la población total en un período de 38 años. Paso de 1.871.780 habitantes en 1973 a
4.301.712 habitantes en el 2011 (figura 12a). Además, la esperanza de vida al nacimiento
es de 81,7 años para las mujeres y de 76,8 años para los varones. Comparado con 1950,
esto indica una ganancia de 23 años para las mujeres y 20 años para los varones. En el caso
de la tasa global de fecundidad hay una excepcional disminución de este indicador,
pasando de alrededor de 7 hijos por mujer en 1961 a 1,96 hijos en 2007 (INEC 2008).

La población en la CHRF prácticamente se triplico en el período 1973-2011. Paso de 15.994


a 46.463 habitantes en 38 años (figura 12b). El socioecosistema de llanura sigue la misma
tendencia poblacional de la cuenca hidrográfica. Mientras que el socioecosistema de
montaña tiene un crecimiento de 1.4 veces en el mismo período; incluso tiene un leve
descenso de población para el período 2000-2011, pero esto se debe a que se creo un
nuevo distrito (Katira) a partir del distrito Buenavista (INEC, 2012a). Es decir, disminuyó la
población en el socioecosistema de montaña (distrito Buenavista) y aumento en el
socioecosistema de llanura (distrito Katira).

El sector económico se caracteriza por la producción de cultivos, principalmente


producción de caña, piña, arroz y cítricos, así como frijol y tubérculos en pequeña escala.
Hay pastoreo de ganado bovino para carne y leche.

[41]
Población Total en Costa Rica
5.000.000
4.500.000

Millones de habitantes
4.000.000
3.500.000
3.000.000 (a)
2.500.000
2.000.000
1.500.000
1.000.000
500.000
-
1973 1984 2000 2011
Año Población Total

Población total en la cuenca hidrográfica


50.000
45.000 (b)
Miles de habitantes

40.000
35.000
30.000
25.000
20.000
15.000
10.000
5.000
-
1973 1984 2000 2011
Cuenca 15.994 24.785 39.606 46.463
Sociecosistema de
10.379 17.257 28.343 38.814
llanura
Socioecosistema de
5.615 7.528 11.263 7.649
montaña

Figura 12. Población total por socioecosistema para el período 1973-2011, cuenca
hidrográfica del río Frío (INEC 2012a).

El turismo es una actividad creciente en la zona, ya que se encuentran tres áreas


protegidas –AP- (el Parque Nacional Volcán Tenorio, la Zona Protectora Tenorio y el
Refugio de Vida Silvestre Caño Negro). El establecimiento de AP es una de las principales
inversiones que Costa Rica ha realizado en conservación en las últimas cuatro décadas, a
tal punto que las APs representan el 26.2% del territorio nacional terrestre. También
existen otros atractivos como la laguna Cote, la catarata del río Celeste y la navegación por
el río Frío.

[42]
5.3 Conocimiento local de los servicios de los ecosistemas

5.3.1 Identificación y priorización de los servicios de los ecosistemas.

En total se realizaron 45 entrevistas en la CHRF. En el socioecosistema de montaña (cuenca


alta) se aplicaron 25 entrevistas y en el socioecosistema de llanura (cuenca baja) un total
de 20 (figura 13). Este número de entrevistas se puede agrupar actores sociales:
comunidad (22), institución (17) y empresa privada (6).

30

25

20
Entrevistas

Empresa privada
15
Comunidades/organizaciones

10 Instituciones

0
Socioecosistema de llanura Socioecosistema de montaña

Figura 13. Número de entrevistas aplicadas en la cuenca hidrográfica del río Frío para
identificar los servicios de los ecosistemas. Las entrevistas se realizaron en el 2010 para
ambos socioecosistemas. La empresa privada fue el grupo menos entrevistado debido a
que fue el grupo social que en menor cantidad estuvo presente durante la recopilación de
datos (talleres participativos para elaborar el plan regulador municipal, se aprovechó esta
actividad para realizar las entrevistas de este estudio).

[43]
En total se identificaron 19 servicios de los ecosistemas para la CHRF (figura 14), de los
cuales nueve son servicios de abastecimiento, seis de regulación y cuatro culturales. Los
cuales se describen a continuación:

Servicios de Abastecimiento: alimento (agricultura), alimento (ganadería de carne),


alimento (pesca), agua para consumo, acervo genético, madera, recolección
plantas medicinales, energía (hidroeléctrica) y leña.

Servicios de Regulación: regulación del clima, purificación del aire, fertilidad del
suelo, regulación hídrica, control de la erosión y control biológico.

Servicios Culturales: belleza escénica, recreación, sentimiento espiritual y


ecoturismo.

La agricultura y el agua para consumo fueron los servicios de los ecosistemas (32) más
reconocidos entre los entrevistados (figura 14). Seguido de la purificación del aire (26), el
ecoturismo (21) y la ganadería (12). Dos entrevistados identificaron la navegación como un
servicio de los ecosistemas, pero estaban haciendo mención a que el río Frío es utilizado
como estrategia de ecoturismo por su fauna silvestre y su belleza.

En ambos socioecosistemas se identificaron 17 servicios de los ecosistemas (figura 14). En


el socioecosistema de llanura no se identifico el control de la erosión y energía (a partir de
fuentes de agua), mientras que en el socioecosistema de montaña no se identifico el
control biológico y la leña.

La agricultura (13), agua para consumo (12), ecoturismo (10), purificación del aire (8),
pesca (7) y acervo genético (7) fueron los servicios de los ecosistemas mayormente
identificados por los entrevistados en el socioecosistema de llanura -línea color marrón-
(figura 14).

[44]
Control biológico
Agua para consumo 20 Control de la erosión
Alimentación… Energía
15
Purificación del aire Leña
10

Ecoturismo 5 Recolección plantas…

0
Alimentación (Ganadería) Fertilidad del suelo

Alimentación (Pesca) Madera

Regulación del clima Regulación hídrica

Acervo genético Belleza escénica


Sentimiento espiritual Recreación

Socioecosistema de montaña Socioecosistema de llanura

Figura 14. Distribución de los servicios de los ecosistemas por socioecosistema en la


cuenca hidrográfica del río Frío. La escala numérica indica el número de entrevistados que
identificaron el servicio de los ecosistemas (elaboración propia según la aplicación de
entrevistas, 2010).

En el socioecosistema de montaña agua para consumo (20), agricultura (19), purificación


del aire (18), ecoturismo (11), ganadería (7), belleza escénica (6), regulación del clima (5) y
madera (5) fueron los servicios de los ecosistemas más identificados -línea color azul-
(figura 14).

De los 19 servicios de los ecosistemas identificados en la CHRF en su globalidad, se


priorizaron siete de ellos (Figura 15). En general, el agua para consumo humano (28),
purificación del aire (17), agricultura (16) y ecoturismo (15) fueron los servicios de los
ecosistemas más priorizados.

[45]
En la prioridad 1, aparece el agua para consumo humano como máxima prioridad tanto
en el socioecosistema de montaña (11) como de llanura (7). Aunque también en la
prioridad 2 el agua para consumo humano aparece como segunda opción (7 y 3
respectivamente). En el caso de la purificación del aire aparece como la segunda opción
(9). Este servicio de los ecosistemas fue seleccionado solo en el socioecosistema de
montaña, tanto en prioridad 1 como en prioridad 2. El ecoturismo (5) es la tercera opción
dentro de la prioridad 1, aunque también es seleccionada en la prioridad 2 y 3. Por último
pero no menos importante, en el socioecosistema de llanura se priorizó la regulación
hídrica y esto se debe a la función que tiene el humedal RAMSAR de Caño Negro.

12
10
No. entrevistas

8
6
4
2
0
Agricultura

Agricultura
Purificación del aire

Regulación hídrica

Purificación del aire

Acervo genético
Ecoturismo

Ecoturismo

Ecoturismo

Disfrute estético de los


Agua para consumo

Agua para consumo

paisajes

Prioridad 1 Prioridad 2 Prioridad 3

Socioecosistema de montaña Socioecosistema de llanura

Figura 15. Priorización de los servicios de los ecosistemas por socioecosistema en la


cuenca hidrográfica del río Frío (elaboración propia según la aplicación de entrevistas,
2010).

[46]
La agricultura no fue seleccionada como prioridad 1, pero si es importante mencionar que
se identificó como prioridad 2 en ambos socioecosistemas y prioridad 3 para el
socioecosistema de montaña. El acervo genético y el disfrute estético de los paisajes
fueron los otros dos servicios de los ecosistemas priorizados, en este caso como tercera
prioridad.

5.3.2 Definición de los servicios de los ecosistemas.

A continuación se describe los siete servicios de los ecosistemas priorizados para la CHRF,
estos son: acervo genético, agricultura, agua para consumo, disfrute estético de los
paisajes, ecoturismo, purificación del aire y regulación hídrica. A continuación se describe
cada uno de ellos.

Regulación hídrica

La CHRF tiene una precipitación promedio anual de 3.384 mm, no presenta una época
seca claramente definida, ya que prácticamente a lo largo de todo el año se presentan
volúmenes importantes de precipitación. La época lluviosa va desde junio hasta diciembre
(SETECOOP, 2010).

Los bosques de Yolillo (Raphia taedigera), bosques tropicales, bosque nuboso, laguna Cote
y los humedales de Caño Negro son algunos de los tipos de ecosistemas presentes en la
CHRF capaces de influir sobre las lluvias en el ciclo hidrológico, atenuando los eventos
máximos de caudal, propiciando la infiltración y depuración hacia los acuíferos libres y
confinado.

En el caso del Humedal Ramsar Caño Negro se caracteriza por ser un controlador de
inundaciones, ya que consiste en un sitio de rebalse del Río Frío y del Río Mónico
(SETECOOP, 2010).

[47]
Agua para consumo

En la CHRF hay tres unidades hidrogeológicas: Unidad Palustre (acuífero superficial


localizado en Caño Negro), Unidad Aluvial (acuífero confinado y es transfronterizo) y
Unidad Volcánica (acuíferos libres, Sahíno y Cote) -CICG, 2011-.

En esta cuenca existen 28 acueductos comunales que distribuyen el agua potable a los
habitantes. Doce acueductos comunales se encuentran en el socioecosistema de montaña
y 16 en el socioecosistema de llanura. La mayoría de ellos extrae el agua de acuíferos libres
(Arroyo-Zeledón, 2010).

La distribución del agua potable en esta región del país lo desarrollan las ASADAS o
Asociaciones Operadoras de Sistemas de Acueductos y Alcantarillado Sanitario. Son
organizaciones rurales conformadas por diversos miembros de la comunidad.

Acervo genético

Recientemente han sido descritas dos especies nuevas de arroz silvestre (Oryza
gluaepatula y O. grandiglumis) que se encuentran localizadas en un área restringida del
territorio nacional, que comprende los humedales de Caño Negro y las zonas inundadas
del río Medio Queso. Oryza grandiglumis es una especie de arroz silvestre endémica de
América Tropical y también es posible encontrarla en los alrededores del refugio;
actividades como la ganadería y la agricultura en la zona afectan el crecimiento de la
especie que ha sido considerada sin valor excepto para la cría de ganado (Zamora et al.
2003).

En los humedales de la zona norte y principalmente en Caño Negro es el hábitat


privilegiado y casi exclusivo del “Pez Gaspar” (Atractosteus tropicus), considerado un fósil
viviente.

[48]
Tabla 4. Servicios de los ecosistémicos priorizados en la cuenca hidrográfica del río Frío,
así como sus definiciones y algunos ejemplos representados gráficamente.

Servicio de los Definición Ejemplo


ecosistemas
Regulación Capacidad de ralentización hídrica, Bosque nuboso
hídrica mejora de calidad del agua
Agua para Agua dulce subterránea y superficial Acueducto
consumo para consumo humano de calidad comunal
Acervo genético Mantenimiento de la diversidad Gaspar
genética de especies, razas y variedades (Atractosteus
para suministro de determinados tropicus) y arroz
productos silvestre (Oryza
gluaepatula y O.
grandiglumis)
Agricultura Productos derivados de la biodiversidad Frijol, cítricos y
de interés alimentario. piña
Ecoturismo Lugares o sitios que son escenario de Caminatas, pesca
actividades lúdicas y deportes al aire artesanal,observaci
libre que proporcionan salud y ón de aves y fauna
relajación. silvestre, etc.
Disfrute estético Apreciación de lugares ó sitios que Laguna Cote,
de los paisajes generan satisfacción y placidez por su Lagunas de Caño
estética o inspiración creativa o Negro y Catarata
espiritual. Río Celeste.
Regulación Capacidad vegetal para absorber CO2, Bosque de Yolillo,
climática efectos mesoclimáticos de intercepción, Bosque tropical
ralentización hídrica, amortiguación lluvioso
térmica, etc.
Fuente: Elaboración propia. Definiciones tomadas y modificadas de la Evaluación de Ecosistemas del Milenio de España
(2011).

[49]
Agricultura

La producción se concentra en raíces y tubérculos, granos básicos (frijol-arroz), cítricos,


caña y piña. Desde el 2005 hay un comportamiento acelerado en el caso de la piña, se
observa un crecimiento de un 16% en el año 2005 a un 28% de las hectáreas cultivadas
para a producción de piña en la región Huetar Norte (UNA, 2011a).

Ecoturismo

En el cantón de Los Chiles hay 26 empresas de las cuales 3 son hoteles y 23 son cabinas,
según el promedio aproximadamente alcanzan un total de 286 habitaciones disponibles en
el cantón (UNA, 2011a). Las actividades principales son la observación de aves, caminatas,
navegación y pesca en los humedales de Caño Negro, río Frío y laguna Cote. El turismo
que llega a esta zona es consecuencia de la visitación de otros polos turísticos externos
(principalmente La Fortuna) y solo permanecen en la zona durante el día, retornando a los
hoteles turísticos fuera de la cuenca.

En el período 2000-2009 se reporta la visitación promedio anual de 758 turistas al Refugio


de Vida Silvestre Caño Negro, en el socioecosistema de llanura. En el Parque Nacional
Volcán Tenorio se reporta un ingreso promedio anual de 4.798 turistas en el período 2003-
2009 (SINAC, 2011), lo anterior en el socioecosistema de montaña.

Disfrute estético de los paisajes

Es la apreciación de lugares ó sitios que generan satisfacción al visitante ya que por sus
condiciones estéticas genera una inspiración creativa o espiritual. En la cuenca existen tres
áreas protegidas que contienen ecosistemas y paisajes que cumplen con esta condición.
Por ejemplo, navegar por las diversas lagunas del Humedal Ramsar Caño Negro con una
exuberante vegetación y presencia de vida silvestre, con más de 300 aves migratorias y

[50]
residentes. También es posible navegar por el río Frío hasta la propia desembocadura del
lago de Nicaragua o quizás por la laguna Cote en la parte alta de la cuenca.

Otro sitio de interés por su belleza es la catarata del río Celeste, ubicado dentro del Parque
Nacional Volcán Tenorio. El nombre de esta catarata se debe al color de sus aguas,
turquesa, que resulta de una reacción química, en donde convergen los ríos Buena Vista y
Roble que cuentan con características químicas diferentes, por lo que crean el color. La
zona donde ocurre este fenómeno es conocida como “teñídero” y se encuentra escondido
en medio del bosque lluvioso.

Regulación climática

La regulación climática se puede dar en la escala local, regional y global (Maass et al,
2005). En la escala local, por ejemplo el bosque proporciona sombra y humedad para los
campesinos y sus animales. A escala regional, el bosque puede ser fundamental para la
regulación del clima, cambios en el albedo como consecuencia de la transformación de
grandes extensiones de bosques pueden modificar significativamente la importancia
relativa de los flujos de calor, el cambio de energía regional y los caudales de agua. A
escala mundial, los incendios durante la conversión de bosques a pastos en las zonas
tropicales son una fuente importante de emisiones de CO2 a la atmósfera, contribuyendo
al calentamiento global (Martínez 2003, Barradas 1991, Jaramillo et al. 2003, citados por
Maass et al, 2005).

[51]
5.4 Definir los compromisos (Trade-off) temporales y espaciales

En este análisis de compromisos (Trade-off) se excluye el disfrute estético de los paisajes


por ser un servicio de los ecosistemas que se dan en sitios muy puntuales y que en
términos de porcentaje es poco representativo. Pero se incluye en este análisis un servicio
de abastecimiento, particularmente uno de alimentación (pesca) ya que se pudo asociar a
las lagunas presentes tanto en el socioecosistema de montaña (laguna Cote) como en el
socioecosistema de llanura (lagunas de Caño Negro).

5.4.1 Análisis de compromisos (Trade-off) temporal

En el socioecosistema de montaña hay un servicio de los ecosistemas dominante en ambas


años de evaluación, el manejo de ganado bovino para la producción carne (figura 16). Este
es un servicio de abastecimiento que se impulso desde el siglo pasado en toda Costa Rica.
Este servicio tuvo una leve disminución para el segundo año de evaluación (2001),
posiblemente por la baja de los precios internacionales de la carne y por el incentivo del
pago de servicios ambientales (PSA) en las zonas de amortiguamiento de las áreas
protegidas. Este servicio de abastecimiento supera y por mucho a los otros servicios de la
misma categoría: agua, agricultura y pesca. La agricultura también tiene un leve
incremento para el año 2001.

Los servicios de regulación, hídrica y climática, se mantienen en ambos años de evaluación


(figura 16), esta estabilidad se debe a la presencia de dos áreas protegidas en este
socioecosistema: Parque Nacional Volcán Tenorio y Zona Protectora Tenorio. El ecoturismo
es un servicio cultural que aumentó y se debe a los atractivos presentes en las áreas
protegidas, la laguna Cote, la catarata del río Celeste y otros. Se espera que este servicio
de los ecosistemas siga en aumento ya que en el registro de visitación para el Parque
Nacional Volcán Tenorio paso de 1.389 en el 2003, a 12.706 en el 2011 (SINAC, 2010).

[52]
Figura 16. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) temporal en el
socioecosistema de montaña en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica para el
período 1987-2001 (elaboración propia a partir de los datos de uso del suelo).

En el socioecosistema de llanura dominan dos servicios de regulación, hídrico y climático


(figura 17). Esto se debe a la presencia de varios ecosistemas como el bosque, bosque de
yolillo (Raphia taedigera) y las áreas de recuperación (matorrales), los cuales se localizan
en la parte baja de la cuenca (figura 9 y 10). La mayoría de estos ecosistemas se
encuentran dentro y en alrededores del Refugio Caño Negro.

Para el segundo año de evaluación (2001), ambos servicios sufren una leve disminución
debido al aumento de dos servicios de abastecimiento: producción de carne y agricultura.
Estos servicios de abastecimiento se localizan en la cuenca media, que es el sector más
alto del socioecosistema de llanura.

La disponibilidad de agua para consumo humano en este socioecosistema esta restringido


ya que aquí se localiza la unidad palustre (acuífero libre). Este acuífero esta cubierto por
diversas lagunas que se interconectan por el río Frío, caño Blanco y otros. En esta

[53]
evaluación temporal, hay una disminución bastante evidente de la perdida de este servicio
de los ecosistemas (agua). Esta pérdida esta relacionada al aumento de áreas para cultivos
y a la producción de carne, aunque este ultimo servicio de abastecimiento se mantiene
estable.

Figura 17. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) temporal en el


socioecosistema de llanura en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica para el
período 1987-2001 (elaboración propia a partir de los datos de uso del suelo).

La pesca se mantiene estable y el acervo genético tiene un leve aumento (ambos son
servicios de abastecimiento). En el segundo caso debido al incremento de las
investigaciones en los humedales ha permitido el conocimiento de nuevas especies, como
en el caso particular del arroz silvestre (Oryza gluaepatula y O. grandiglumis) -Zamora et
al. 2003-.

[54]
5.4.2 Análisis de compromisos (Trade-off) espacial

Para el año 1987 la producción de carne y las actividades agrícolas del socioecosistema de
montaña (figura 18a) no tenían aún un impacto fuerte sobre los servicios de los
ecosistemas del socioecosistema de llanura (figura 18b). La actividad ganadera en la parte
alta de la cuenca ya tenía varios años de haber aumentado la superficie para la producción
de carne. Las comunidades locales en la parte alta de la cuenca se beneficiaron a nivel
local de las condiciones climáticas y topográficas que les permitió mantener su sistema de
producción (figura 18a).

Figura 18. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) espacial para
el año 1987 en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica (elaboración propia a partir
de los datos de uso del suelo).

Para ese mismo año, en el socioecosistema de llanura los servicios de los ecosistemas de
agua, regulación hídrica y climática aún mantenían una buena oferta del servicio (figura
18b). Sin embargo, para el año 2001 estos tres servicios vieron disminuida su oferta (figura
19b). El sistema de lagunas del Refugio de Vida Silvestre Caño Negro, que se ubican en la

[55]
parte baja de la cuenca (en el socioecosistema de llanura), han estado recibiendo los
sedimentos producidos por la erosión hídrica de la parte alta de la CHRF, los cuales son
transportados por el agua hasta la parte baja de la cuenca. Al desbordarse el río Frío por
efecto de la época lluviosa y llenar las lagunas del refugio, el material erosionado se
deposita en el fondo de las lagunas debido a que la velocidad de flujo en las lagunas es
prácticamente nula (SETECOOP, 2010).

Durante el 2010 se realizó un estudio para estimar la tasa de sedimentación en el sistema


lagunar y en promedio los volúmenes de sedimento anual que ingresan al sistema de
lagunas de Caño Negro es de 80.000 toneladas (SETECOOP, 2010). Esta sedimentación ha
provocado la disminución de los espejos de agua y por tanto afectando a otros servicios de
los ecosistemas como el disfrute estético de los paisajes, la regulación hídrica, el agua para
consumo y la pesca.

Figura 19. Representación gráfica del análisis de compromisos (Trade-off) espacial para
el año 2001 en la cuenca hidrográfica del río Frío-Costa Rica (elaboración propia a partir
de los datos de uso del suelo).

[56]
6 Discusión

El análisis de cuencas hidrográficas bajo la aproximación de servicios de los ecosistemas


es una herramienta que intenta evidenciar el territorio desde una visión global y que
mediante su estudio se pueda diagnosticar el estado de conservación de la misma. Por
poner un ejemplo de este enfoque global y para el caso de estudio: la intensificación de la
producción de ganado bovino en la parte alta de la cuenca del Río Frío afecta los servicios
de los ecosistemas en la cuenca baja (trade-off espacial), casos concretos como la calidad
del agua para consumo humano ó la perturbación a los ecosistemas acuáticos, ejemplo el
humedal Caño Negro.

Por supuesto este cambio ocurre en una ventana de tiempo prolongada. La deforestación
en la CHRF se dio previo a la década de 1970 cuando el gobierno impulsó la Ley de
Información Posesoria de 1941. Esta ley promovió la ocupación de tierras y llevar
“mejoras” a las zonas rurales por medio del cambio de uso de la tierra para fines agrícolas
(Obando, 2002). En este caso un impulsor indirecto de cambio (sociopolítico) a través de
una ley genera un efecto del cambio de uso del suelo (impulsor directo de cambio),
afectando a los ecosistemas naturales y la provisión de servicios.

Obando (2002) indica que la tasa de deforestación en todo el país para 1960-1970 era de
60.000 ha/año. Ya para el año 1983 la deforestación había bajado a 13.000 ha/año y en el
año 2000 estaba por debajo de las 5.000 ha/año. En este estudio se demuestra que a nivel
de la CHRF se deforestaron 3.278 hectáreas de bosque tropical lluvioso en un período de
14 años. La tasa anual de deforestación se estima en 218 hectáreas. Este proceso de
pérdida del ecosistema se puede clasificar como micro-deforestación. Este tipo de
deforestación se da en la ribera de ríos (aunque la ley forestal 7575/1996 no lo permite) y
en los bordes del bosque tropical lluvioso y nuboso.

[57]
Producto de esta deforestación, en la CHRF el 39% del territorio se destina a la actividad
de la ganadería bovina para la producción de carne y en menor escala para leche. La
extensión de esta actividad no aumento significativamente en el período 1987-2001
debido también a factores políticos, ya que la ley forestal prohibió el cambio de uso del
suelo a partir del año 1996, se impulso la creación de un sistema nacional de áreas
protegidas y se estableció el pago por servicios ambientales (PSA).

El análisis de compromiso (Trade-off) espacial demostró que el modelo de producción de


ganado bovino y algunos cultivos agrícolas de pequeña escala (ambos son servicios de
abastecimiento que se encuentran en el socioecosistema de montaña) están generando un
impacto sobre los humedales que se localizan en el socioecosistema de llanura. Este
impacto se observa décadas después en el volumen de sedimentos anuales que ingresan
al sistema de lagunas de Caño Negro, calculado en 80.000 toneladas por año (SETECOOP,
2010). Esta sedimentación ha provocado la disminución de los espejos de agua y por tanto
afectando a otros servicios de los ecosistemas como el disfrute estético de los paisajes, la
regulación hídrica, el agua para consumo humano, la pesca, entre otros.

En cuanto al análisis de compromisos (Trade-off) temporal para el período 1987-2001,


mostró el dominio que ha mantenido la producción de carne bovina durante varias
décadas. Este servicio de abastecimiento en el socioecosistema de montaña estableció
beneficios de corto plazo, pero a largo plazo provocó la pérdida de otros servicios.

Otro ejemplo es el crecimiento de cultivos agrícolas por políticas internacionales que tiene
impacto a nivel local. La agricultura como servicio de abastecimiento se mantuvo estable
durante los dos períodos de evaluación (1987-2001). Sin embargo, en un estudio realizado
por la Universidad Nacional (2011) sobre el uso del suelo para el municipio de Los Chiles
(cuenca baja/socioecosistema de llanura), los resultados indican un aumento del 42% de
superficie en cultivos agrícolas. Pasando de 3.831 hectáreas en el año 2001, a 5.447

[58]
hectáreas en el año 2011, este aumento se debe al incremento de la superficie sembrada
del cultivo de piña.

Este aumento de la superficie de cultivo de piña tiene impactos sobre los bosques
lluviosos, bosque de yolillo (Raphia taedigera), las áreas de recuperación (matorrales) y
lagunas, que se localizan en el socioecosistema de llanura. El efecto se da en la
disminución de los servicios de los ecosistemas como la pesca, acervo genético y el
ecoturismo.

Un ejemplo más de esta visión global sobre el territorio de cuenca ocurrió en el 2008,
cuando hubo una sequía en la zona norte de Costa Rica. Hubo escasez de agua y muerte
de ganado bovino en la cuenca baja (socioecosistema de llanura). Los habitantes de este
socioecosistema extraen agua de pozos, los cuales están ligados al acuífero abierto de la
unidad palustre que al no recibir agua por la falta de lluvias generó el desabastecimiento
de este líquido. Este impacto causó un efecto sobre la actividad ganadera y agrícola, así
como el bienestar humano local.

La CHRF tiene dos socioecosistemas claramente definidos. El socioecosistema de montaña


(cuenca alta) y el socioecosistema de llanura (cuenca baja), qué están vinculados por el
ciclo hidrológico que ocurre en este espacio.

En el socioecosistema de montaña ocurre las descargas de agua producto de la alta


precipitación, que alimenta a los acuíferos abiertos Sahíno y Cote. Pero también mediante
la infiltración alimenta al acuífero confinado que es regional y transfronterizo. Al ser un
socioecosistema con poca cobertura esta generando efectos sobre el socioecosistema de
llanura. En el socioecosistema de llanura dominan dos servicios de regulación, hídrico y
climático.

La composición y estructura del paisaje en ambos socioecosistemas está influyendo sobre


el funcionamiento de los ecosistemas y por tanto en la prestación de servicios. En

[59]
cualquiera de los dos socioecosistemas el sobreuso del territorio con estas actividades
están haciendo caso omiso de sus potenciales y limitaciones para este tipo de suelos.

Sin embargo y a pesar de la fuerte deforestación que recibió esta cuenca, aún mantiene un
capital natural con capacidad para mantener diferentes funciones como sustrato,
regulación, producción e información (De Groot et al, 2002). El bosque tropical lluvioso, el
bosque nuboso, el bosque de yolillo (Raphia taedigera) y el sistema de humedales de Caño
Negro son ecosistemas que aun mantienen esa capacidad de proporcionar bienes y
servicios de los ecosistemas, principalmente servicios de regulación.

Pero la gestión del río Frío no puede continuar bajo el esquema tradicional de la gestión
integrada de cuencas hidrográficas (tabla 5), cuyo enfoque es reduccionista, con una visión
fragmentada y economicista. La intensificación de un solo servicio, sea este agrícola,
ganadero, energético o abastecimiento de agua potable, tiene repercusiones sobre otros
servicios.

Este enfoque se manifestó durante la fase de entrevistas a los habitantes de la cuenca, en


donde los servicios de abastecimiento fueron los más identificados y eso se relaciona
porque los servicios de regulación y culturales no tienen un reflejo en el mercado, por lo
tanto no son considerados en la toma de decisiones (OSE, 2010).

Pero se debe cambiar esa visión hacia un enfoque sistémico, que se caracteriza por tener
una visión holística, cuyo territorio es multifuncional y el agua es el eje articulador entre
los ecosistemas y el bienestar humano dentro del ciclo hidrológico.

[60]
Tabla 5. Comparación entre el enfoque tradicional de GICH y la propuesta desde la
aproximación de servicios de los ecosistemas.

Gestión Integrada de Cuencas Gestión Integrada de Cuencas


Hidrográficas tradicional Hidrográficas desde la aproximación de
servicios de los ecosistemas

Visión fragmentada Visión holística


Economicista Bienestar humano
El agua es aislada de su entorno y se analiza El agua se analiza dentro del ciclo
de forma independiente hidrológico
El agua es materia prima que se convierte El agua mantiene las funciones ecológicas
en un bien económico de los ecosistemas terrestres y acuáticos.
Se impulsa el aprovechamiento de pocos Se impulsa la generación y
servicios (entre ellos el agua) aprovechamiento de múltiples servicios de
los ecosistemas

Limitaciones

Dentro de cualquier estudio se debe tener claro cuales son las limitaciones que surgieron
durante la investigación. En este caso concreto, cuando se realizó el análisis multitemporal
de la cobertura terrestre se pensó en tres períodos distintos para obtener información de
las tendencias en el cambio de uso. El tercer análisis correspondía a imágenes de satélite
Thematic Mapper Lansat para el año 2009, 2010 ó 2011. Sin embargo, esto no fue posible
debido a la cobertura de nubes presentes en las imágenes. Y es que justamente la zona
norte de Costa Rica donde se ubica la CHRF, es una zona de alta nubosidad que
imposibilita obtener imágenes limpias para su respectivo análisis. De hecho, las imágenes
de satélite aquí analizadas tuvieron porcentajes de nubosidad cercanas al 15%, sobre todo
en la parte sur y oeste de la cuenca.

[61]
7 Conclusiones

1. La CHRF tiene una superficie de 1.743 Km2 y en ella se pudo definir dos
socioecosistemas fundamentados en rasgos económicos, sociales y ambientales.
Estos son: (a) el socioecosistema de montaña que se encuentra en la zona alta y
cubre un 40% de la cuenca; y, (b) el socioecosistema de llanura que se localiza en
la cuenca baja y cubre el 60% de la cuenca.

2. La mayor cobertura terrestre en la CHRF fueron los pastos para ambos años de
evaluación, esta cobertura es utilizada para el manejo de ganado bovino. Se
presentó un 38.8% de cobertura de la cuenca para el año 1987 y un 39.5% para el
período 2001-2003. En ambas fechas de evaluación (1987 y 2001-2003), las
coberturas de pastos, bosque y bosque de yolillo (Raphia taedigera) cubren
prácticamente el 80% de la CHRF.

3. En total se identificaron 19 servicios de los ecosistemas para la CHRF, de los cuales


nueve son servicios de los ecosistemas de abastecimiento, seis de regulación y
cuatro culturales. Los servicios de abastecimiento fueron: agricultura, agua para
consumo, ganadería, pesca, acervo genético, madera, recolección plantas
medicinales, energía y leña. Los servicios de regulación identificados fueron:
regulación hídrica, regulación del clima, fertilidad del suelo, control biológico,
purificación del aire y control de la erosión. Mientras que los servicios culturales
fueron: belleza escénica, recreación, sentimiento espiritual y ecoturismo.

4. En el socioecosistema de montaña se ha impulsado un uso del territorio extensivo


y antagónico, donde se desarrollan dos actividades principales, el manejo de pastos
para la crianza de ganado bovino y la protección de los ecosistemas bajo la
modalidad de áreas protegidas. En este socioecosistema es posible que ya se
llegará al límite de la extensión ganadera y por tanto el impacto sobre otros

[62]
servicios sería mínimo. Aquí se debe plantear estrategias de restauración de zonas
prioritarias para provocar la infiltración del agua, la conservación del suelo y la
regulación climática. Permitiendo que exista un manejo del ganado bovino con
tecnologías diferentes.

En este socioecosistema de montaña hay que generar nuevas estrategias de


restauración de ecosistemas para mantener y asegurar el abastecimiento de agua
para los 28 acueductos rurales que distribuyen el agua en la cuenca hidrográfica. Se
podrían incluir tanto zonas de restauración, plantaciones forestales como
policultivos.

5. La disponibilidad de agua para consumo humano en el socioecosistema de llanura


se restringe al acuífero confinado, el cual es regional y transfronterizo. Ya que el
otro acuífero es libre y su superficie esta dominado por diversas lagunas que se
interconectan por el río Frío, caño Blanco y otros, los cuales actúan como filtros.
Este último acuífero se ve afectado con la ausencia de lluvias y por tanto afectando
el bienestar humano local.

6. En el momento de definir los límites del socioecosistema en el marco de cuencas


hidrográficas es prudente realizar un taller participativo con líderes comunales,
instituciones y empresarios para analizar los límites propuestos. Ya que por
circunstancias culturales, estos límites podrían ser modificados con el fin de
aumentar la apropiación de los grupos sociales así como la gestión y manejo de los
ecosistemas.

7. Utilizar un análisis multitemporal de la cobertura terrestre en tres períodos


distintos y distantes con el fin de poder realizar escenarios de futuro desde el
punto de vista técnico.

[63]
8. Esta aproximación metodológica para la gestión integrada de cuencas
hidrográficas basada en los servicios de los ecosistemas puede ser ampliada
incluyendo una valoración monetaria de los servicios de los ecosistemas
priorizados. También se puede incluir un análisis de escenarios de futuro, tanto
desde el punto de vista técnico como social. El escenario de futuro técnico se
puede lograr mediante la información del análisis multitemporal, utilizando el
programa Idrisi Selva que contiene el modulo Land Change Modeler para el análisis
y la predicción del cambio de uso de la tierra. Desde el punto de vista social se
puede desarrollar por medio de talleres participativos para la construcción de
escenarios de futuro, basado en el análisis de la gestión de cuencas basado en el
marco de los servicios de los ecosistemas.

[64]
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[69]
Anexo 1.

Figura 20. Matriz de contingencia empleada para evaluar la clasificación de uso del suelo
en la Cuenca del Río Frío, Alajuela-Costa Rica, a partir de imágenes satelitales de 1987.
La clasificación se realizó en el programa de cómputo ERDAS IMAGINE 9.0. (H inundado:
Herbazal inundado; T descubie: Terreno descubierto; C agua: Cuerpo de agua).

[70]
Anexo 2.

Figura 21. Matriz de contingencia empleada para evaluar la clasificación de uso del suelo
en la Cuenca del Río Frío, Alajuela, Costa Rica, a partir de imágenes satelitales del
período 2001-2003. La clasificación se realizó en el programa de cómputo ERDAS
IMAGINE 9.0. (H inundado: Herbazal inundado; T descubie: Terreno descubierto; C agua:
Cuerpo de agua).

[71]

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