EL MINISTERIO

DE LA ÚLTIMA PROFECÍA
PARA ESTA GENERACIÓN

Dr. William Soto Santiago

 EL MINISTERIO
DE LA ÚLTIMA PROFECÍA
PARA ESTA GENERACIÓN

PALABRAS DE SALUDO A LOS JÓVENES

Dr. William Soto Santiago
29 de Agosto de 1993
México

Cuando yo estaba pasando por esa edad de 19 años

en adelante, también yo estaba así en la Obra de Dios,
deseando hacer el máximo en el Programa Divino, y
comencé ya a los 22 años, más o menos, a predicar, ya
a los 23 ya estaba dando campañas evangelísticas, y de
ahí en adelante he estado viajando por diferentes
lugares, ya a los 23 años, ya yo estaba viajando a la
República Dominicana, que era uno de los sitios
donde iba a llevar a cabo actividades públicas, y
también en diferentes lugares de Puerto Rico.
Y como no tenía las facilidades que hoy en día
ustedes tienen, en la forma tan amplia que ustedes
tienen, yo me iba solito algunas veces, preparaba una
campaña, una actividad, conseguía la plaza pública, de
recreo, o un parque de pelota, y preparaba hojas
sueltas, mandaba a preparar hojas sueltas a una
imprenta, preparaba anuncios hasta para la radio, y
4 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

algunas veces hasta contrataba para que una emisora

de radio trasmitiera la actividad, e invitaba a las
iglesias de esa localidad, y así llevaba a cabo la
campaña, la actividad; y era una forma milagrosa que
fueran las personas así, porque yo preparaba algunas
veces todito, si no tenía el apoyo de agrupaciones, pues
yo preparaba todo, y como decimos nosotros: “La daba
porque la daba la actividad.”
Y así comencé en el trabajo, en la Obra de Dios,
pero ustedes tienen una oportunidad mayor porque
ustedes tienen un compañerismo los unos con los
otros, y una meta de trabajar en el Reino de Dios y de
llevar a cabo actividades en diferentes lugares, y estar
en actividades también en diferentes lugares para
trabajar en el Reino de Dios, aun hasta en otros países
también, a los cuales algunos de ustedes han ido para
estar en actividades también.
…Así que, el grupo de la juventud de nuestro
tiempo, de nuestra edad y de nuestra dispensación,
tiene más facilidades que las que yo tuve en el tiempo
en que pasé por la edad de ustedes, y en donde tuve
que abrir camino y Dios iba delante de mí abriéndome
camino para yo trabajar en Su Obra.
Yo le doy gracias a Dios porque comencé a esa
edad de 22 años ya, a los 23 ya estaba dando
campañas, y he dedicado mi vida al servicio de Dios y
de Su Obra, y yo le doy gracias a Dios por eso. Porque
cuando uno llega al Reino de Dios y comienza a
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 5

predicar la Palabra, cuando ya tiene muchísimos años,

uno mira para atrás y dice: “Todos los años que yo
perdí.” Pero yo le doy gracias a Dios porque de los 19
años en adelante aproveché mi tiempo en el Reino de
Dios, y continúo en el Reino de Dios aprovechando
bien el tiempo y trabajando en el Reino de Dios. Desde
22 años a 23 años, o sea desde el '62 al '63 hasta
nuestro tiempo, si contamos desde el '63 al '93 ¿son
cuántos? 30 años ya predicando la Palabra, y dando
actividades públicas por diferentes lugares, y viajando
también a otros países, y Dios nunca me ha
abandonado; Él todo el tiempo ha estado conmigo; y
me ha dado aún los temas que he predicado en los
diferentes lugares, y me ha dado el mensaje del
Evangelio del Reino para predicarlo en la
Dispensación del Reino y Edad de la Piedra Angular,
por lo cual yo le doy gracias a Dios, estoy muy
agradecido de Dios por lo que Él ha hecho conmigo, y
le pido a Él que me ayude para siempre ser fiel a Él y
que mi vida siempre esté dedicada a Él y Su Obra en
este tiempo final y por toda la eternidad.
…Adelante, y trabajando siempre en la Obra de
Dios, para que también ustedes puedan decir: “Desde
jovencitos empezamos en la Obra de Dios, sirviendo
a Dios y trabajando en Su Obra.” Y pueden decir como
dice nuestro hermano Bermúdez: “38 años bien
aprovechados en mi vida.” De los demás, antes de ese
tiempo, lo único que podrá decir Miguel es: “Me
6 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

lamento no haber comenzado antes,” y yo también

digo lo mismo.
Mi mamá me decía, y mi abuelita también, ustedes
saben que ellos recuerdan siempre esas etapas de
cuando uno era niñito y le cuentan a uno siempre, y
mi mamá me ha dicho y también mi abuelita me decía,
que cuando yo tenía como 3 años, que uno está
comenzando a hablar un poquito bien, todavía no
habla muy bien, era, no sé, de 2 a 3 años, ella decía que
yo me paraba así a hablar y a predicar y decía: “Dios te
estira,” que traducido al idioma de 5 años en adelante
es: “Dios castiga,” ya estaba predicando el mensaje del
día de venganza del Dios nuestro; y el primer mensaje
que prediqué después por ahí, por el 62 ó 63, pienso yo
que fue en el 62, fue un mensaje también así.

PALABRAS DE SALUDO
A LOS JÓVENES Y NIÑOS
Dr. William Soto Santiago
26 de Agosto de 1993
Torreón, México

Así que, jóvenes, la edad en la cual ustedes están es

la mejor edad de todas, porque es la edad que Dios ha
escogido para que los cuerpos eternos tengan esa
apariencia de la edad de 18 a 21 años.
Así que, cuando yo recuerdo el tiempo en que
tenía de 18 a 21 años, pienso en cómo será cuando esté
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 7

en el nuevo cuerpo, con ese cuerpo eterno y que por

toda la eternidad estará representado de 18 a 21 años,
que es la flor de la juventud y que es la edad que Dios
ha escogido.
Así también estaban Adán y Eva en el Paraíso,
jovencitos allí y podían vivir así por toda la eternidad.
Lo que Dios hizo en el Huerto del Edén fue un joven
y después le hizo una joven, así que Dios continúa en
este tiempo final, cuando transforme nuestros
cuerpos, Él continúa con esa labor dándonos un
cuerpo eterno y joven.
Así que, en esta temporada, ustedes jóvenes,
aprovechen ese tiempo de juventud como dice la
Escritura: “Acuérdate de tu Creador en los días de tu
juventud.” Yo le doy gracias a Dios, porque ya a los 19
años, ya yo estaba por completo en el camino de Dios,
y ya a los 22 años ya comencé a predicar, y a los 23
estaba predicando completamente y dando actividades
públicas, y a los 24 ya también… y a los 23 estaba
viajando a otros países y dando actividades, y a los 24
también, y a los 25, y todavía estoy viajando y estoy
llevando la Palabra, el mensaje del Señor. Han pasado
ya unos 30 años, y me siento con más ánimo que el
que tenía cuando comencé.
8 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

LA JUVENTUD DEL DÍA POSTRERO

Dr. William Soto Santiago
Martes, 8 de Junio de 1999
Cayey, Puerto Rico

Yo he tenido el privilegio de estar trabajando en la

Obra de Cristo desde joven, predicando el evangelio;
ya desde el 1962 ya estaba predicando el Evangelio, o
sea, que han transcurrido ¿cuántos años? Treinta y
siete años, y todavía tengo animo, mas ánimo, para
seguir adelante predicando el Evangelio. Y ya estamos
más cerca de nuestra transformación.
Y ahora muchas cosas que Él me decía en esos
años pasados, ahora yo las puedo entender más
claramente. Y vean ustedes, ya llevo esos treinta y siete
años predicando, sin contar cuando mi mamá y mi
abuelita me decían que ya cuando tenía… cuando
estaba aprendiendo a hablar (eso sería como a los 2
años más o menos), ya iba por la casa una persona de
una iglesia y le hablaba a la familia, les hablaba a ellos;
era una persona pentecostal muy buena y muy amigo
de la familia, y les hablaba a ellos; de seguro les
hablaba como predicándoles, y luego cuando él
terminaba y se iba, entonces me subía yo a una silla o
a algún lugar, o desde el piso, y ahí les seguía yo
predicando; y no hablaba bien, no hablaba claro
todavía, estaba aprendiendo a hablar. Pero me dice mi
abuelita y mi mamá que yo decía: “Dios testira,” o sea,
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 9

eso quiere decir: “Dios castiga,” o sea, que ya estaba

predicando el juicio divino que venía sobre la
humanidad.
…Y así como yo comencé jovencito (tenía unos 22
años) a predicar, esto sin contar cuando comencé a los
2 años más o menos. Vean, cuando tenía 2 ya
comencé, y cuando después estuve… le fue añadido un
2 al lado del 2 que tenía, ya comencé a predicar en una
forma más amplia. Y vean ustedes, Dios me ha
bendecido grandemente en estos treinta y siete años de
ministerio; esto es contando desde el 1962 hacia acá, si
contamos del 1963 hacia acá, serían solamente 36
años. Y todos los años que yo continúe sirviéndole a
Cristo y ministrando, Él me continuará bendiciendo.
Es una promesa divina para mí y también es una
promesa divina para todos ustedes. Él los bendecirá a
ustedes, trabajando ustedes en la Obra de Cristo.

UNA JUVENTUD CON PERCEPCIÓN

PROFÉTICA
Dr. William Soto Santiago
5 de julio de 1997
Cartagena, Colombia

Cuando yo estaba en la edad de ustedes (la edad de

ustedes en este cuerpo de carne), yo comencé a ver
todas estas cosas correspondientes a nuestro tiempo;
y miren, ya en el 1962 eso ya tenía unos 22 años; y en
10 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

el 1963 también tenía 22 años hasta la mitad del año,

o sea, hasta el mes de junio, de junio 14; y ya a los 22
años de edad ya yo estaba predicando, estaba llevando
a cabo campañas, actividades en parques de pelota, en
plazas públicas y hasta por la radio. Era un jovencito
como los jovencitos que hay aquí, de 18 a 22 años de
edad.
Y yo iba, preparaba todo, y en algunas ocasiones
hasta mandaba preparar en imprentas hojas sueltas, y
hablaba en la radio para transmitir en algunas
ocasiones las actividades; e iba a las iglesias y hablaba,
los invitaba, para que estuvieran allí presentes, y así
por el estilo. Y miren, todo eso lo hacía y Dios me
bendijo, Dios me ayudó; y así he estado toda mi vida
llevando el Mensaje, la Palabra de Dios.
Y cuando Dios colocó a mi lado a nuestro
hermano Bermúdez, ya la labor se extendió para toda
la América Latina y el Caribe en una forma mayor. Y
Miguel cuando comenzó también... ¿No les ha contado
Miguel a ustedes cómo comenzó? El comenzó más o
menos en la misma forma en que yo comencé. Bueno,
yo les contaré un poquito de cómo yo comencé y
Miguel les cuenta un poquito así a la ligera cómo él
comenzó.
Yo nunca había predicado, pero Dios me llamó, y
yo le dije: “Bueno, Tú me dices lo que yo tengo que
hablar y yo lo hablo; pero yo no voy a estudiar a
ningún lugar; sino Tú me dices, me muestras, lo que
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 11

yo tengo que hablar y yo lo hablo; y me enseñas a

predicar, porque yo no sé hablar en público.”
Y yo como no sabía hablar en público, pues me iba
frente al mar porque vivía cerca (así como ustedes son
costeños también yo soy costeño); y yo me iba frente
al mar, que no estaba muy lejos, me iba en bicicleta o
en el auto, y me paraba allá frente al mar, en la arena,
ahí frente al mar, y comenzaba a predicar. Bueno, ¿qué
hay allá en el mar? Bueno, allá hay peces; y a peces era
que yo le tenía que predicar: a hijos e hijas de Dios. Y
estaban en las aguas; y aguas representa pueblos, gente,
naciones y muchedumbre. Y yo comenzaba a predicar
hasta que ya no se me entendía nada; y cuando ya no
se me entendía nada, bueno, ya ese fue el ejercicio, la
práctica, de ese día. Y así fui haciendo para que Dios
me ayudara. Y Dios me fue ayudando.
Y en una ocasión pedí para predicar en la
congregación, en la iglesia en que asistía en ese tiempo.
Y le pedí que me dieran el domingo para predicar en
la noche, que ese es el momento en que el pastor es el
que predica; y me ofrecieron el miércoles, que era yo
creo que día de los jóvenes o de las damas. Pero yo
pedí el domingo; pero me ofrecían el miércoles, me
parece que era; por si acaso pues no lograba predicar
como debía predicar, o comenzaba y no podía
terminar porque a los cinco minutos, ya pues, ya había
hablado todo lo que podía hablar y ya de ahí para
adelante no tenía nada más. Así, pues, fuera, ustedes
12 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

saben, entre las personas nada más que iban a estar

ahí, pero yo pues decía: “Si Dios me ha llamado pues
El me va ayudar, y me va a dar lo que tenga que
predicar.” Y yo le dije: “Bueno, pero yo predico el
domingo, y predico hasta donde pueda, y de ahí para
adelante usted continúa.” Bueno, ya eso pues se
escuchó mucho mejor.
Me dieron el domingo en la noche para predicar y
prediqué; y cuando terminé de predicar, había
predicado como una hora; y eso fue para mí una
bendición grande; Dios me ayudó en todo. Por ahí
estuve predicando sobre Isaías, por ahí me parece que
fue el capítulo tres o el cuatro. ¿Y saben lo que
contiene ese capítulo? El día de venganza del Dios
nuestro.
Así que ese fue el primer mensaje oficial después
del primero o los primeros mensajes que yo llegué a
predicar, según me dijo mi abuelita y mi mamá; me
dicen que cuando yo comenzaba a hablar,
comenzando a hablar no pronunciaba muy bien, y yo
predicaba también... Por la casa iban unas personas o
una persona evangélica o pentecostal, y hablaba en la
casa, y cuando él se iba, empezaba yo a predicar; y me
dicen que yo hablaba acerca de “Dios testira,” o sea,
“Dios castiga”; pero como no sabía hablar casi, yo
decía: “Dios testira.” Así me dice mi abuelita y mi
mamá. Y vean ustedes, todavía no sabía hablar muy
bien y ya estaba predicando acerca del juicio divino,
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 13

del Día de venganza del Dios nuestro.

Y Dios ha estado guiando mi vida en todo; he visto
la mano del Señor en todo; y he visto que las cosas que
parecían ser imposibles para yo lograrlas, El las ha
hecho posibles. Y puedo decir que no ha sido mi
fuerza, ni mi inteligencia, sino la poderosa Mano del
Señor guiándome y cumpliendo el propósito que El
tiene conmigo.
Yo me he puesto en sus manos y le he dicho: “Yo
voy a hablar todo lo que Tú me digas. Todo lo que Tú
pongas en mi corazón y en mi boca para hablar, yo lo
voy a hablar; me quede solo o no me quede solo.”
Pero miren, es que Dios tenía mucho pueblo en la
América Latina y el Caribe, los cuales escucharían la
Voz de Jesucristo en el Día Postrero, en la Edad de la
Piedra Angular y en la Dispensación del Reino. Y yo le
doy gracias a Dios por este privilegio que me ha dado
de traerle el Mensaje a Su pueblo, a Su Iglesia, en la
etapa latinoamericana y caribeña: la etapa de la Edad
Piedra Angular y Dispensación del Reino y Lugar
Santísimo del Templo espiritual de Jesucristo.
14 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

LA ULTIMA PROFECÍA
PARA ESTA GENERACIÓN
Parte II
Por William Soto Santiago
2 de febrero de 1997
Bogotá, Colombia

Desde el 1963 en adelante, encontramos que

tienen que estarse cumpliendo las Profecías
correspondientes al tiempo final. Desde el 1963 en
adelante las Profecías o la Profecía, la última Profecía
para esta generación, tiene que estarse cumpliendo.
FEBRERO 28 DE 1963 fue el día en que
aparecieron siete ángeles mensajeros al precursor de la
Segunda Venida de Cristo. Y uno de esos ángeles
mensajeros lo arrebató y fue llevado juntamente con
los otros ángeles. En cuerpos teofánicos estaban todos,
y aun el séptimo ángel mensajero fue en cuerpo
teofánico también. Y allí estuvieron reunidos ocho
ángeles de Dios.
Cuando eso estuvo ocurriendo, el reverendo
William Marrion Branham se encontraba en las
montañas de Arizona, por Tucson, Arizona, por ese
territorio, y allí fue arrebatado en Espíritu, para estar
con esos ángeles mensajeros de Dios; por cuanto
William Marrion Branham era el ángel mensajero de
la séptima edad de la Iglesia gentil.
Ahora, todos allá reunidos, allí estaban completos
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 15

todos los mensajeros que Dios enviaría a Su Iglesia

durante todo el recorrido de la Iglesia del Señor
Jesucristo por esta Tierra. Y allí estaba uno de los
ángeles, que era muy diferente a los demás, el cual
tenía el Séptimo Sello; o sea, el cual tenía para cumplir
la Segunda Venida de Cristo, tenía para cumplir la
materialización en carne humana de la Segunda
Venida de Cristo, para eso ese Ángel tenía que venir a
la Tierra en carne humana, como habían venido en
carne humana los otros ángeles mensajeros. Y el
Ministerio de ese Ángel Mensajero que era muy
diferente a los demás, tenía que surgir en esta Tierra,
y tenía que tener una trayectoria ministerial trayendo
la Palabra de Dios en forma progresiva.
Y para ese tiempo en que todo eso estaba
ocurriendo sobre el territorio de Arizona y de Nuevo
México se encontraba allá en las montañas de Arizona,
por el territorio de Tucson, Arizona, se encontraba el
séptimo ángel mensajero buscando de Dios y
esperando la visita de los ángeles de Dios.
Para ese tiempo yo me encontraba en Puerto
Rico, también en las montañas de Puerto Rico, por
Lares, en una montaña de Puerto Rico, allá en un
retiro espiritual. Y de allí salí predicando la Palabra
de Dios. De ese tiempo en adelante ya comencé en el
Ministerio formalmente, llevando la Palabra de Dios
por diferentes lugares de Puerto Rico, en parques, en
plazas, en lugares públicos y en iglesias, en templos,
16 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

también viajando a otros países; y así llevando a cabo

la Obra de Jesucristo. Y todavía continúo viajando y
llevando la Palabra de Cristo por todos los lugares de
la América Latina y del Caribe, y también por
Norteamérica, para así cumplir el Ministerio que
Jesucristo ha colocado en mí.
EL MINISTERIO QUE HA ESTADO SIENDO
MANIFESTADO DESDE EL 1963 HACIA ACA, DE
AHÍ EN ADELANTE, HA SIDO EL MINISTERIO
QUE HA ESTADO TRAYENDO EL MENSAJE DEL
EVANGELIO DEL REINO Y HA ESTADO
ANUNCIANDO Y REVELANDO EL MISTERIO DE
LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO.
Ese es el Ministerio con el cual los escogidos de
Dios serían llamados y juntados en el Día Postrero. Y
para regocijo de los latinoamericanos, ese Ministerio
ha sido enviado a la América Latina y el Caribe,
porque ahí están en su mayoría los escogidos de Dios,
los Primogénitos de Dios que completarán el número
del Cuerpo Místico del Señor Jesucristo, y así se
completará el número de los miembros del Cuerpo
Místico de Jesucristo, de los miembros de la Iglesia del
Señor Jesucristo.
Por eso es que este Ministerio ha sido enviado a los
latinoamericanos y caribeños en el mismo idioma y
con el mismo idioma que hablan los latinoamericanos
y caribeños, exceptuando el Brasil que habla
portugués, pero que entienden también bastante el
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 17

español, muchos de los brasileños o brasileros cada día

van aprendiendo más español en el Brasil, para poder
entender el Mensaje del Día Postrero, el Mensaje del
Evangelio del Reino, enviado por Jesucristo a los
latinoamericanos y caribeños, por medio de este
Ministerio que nació allá en PUERTO RICO en el año
1963.
De ahí en adelante encontramos que este
Ministerio que ustedes han estado viendo trayendo la
Palabra de Dios, el Mensaje del Evangelio del Reino,
y dando a conocer el misterio de la Segunda Venida
de Cristo, el misterio de la última Profecía para esta
generación; este Ministerio que ustedes han estado
viendo, estaba prometido en la Palabra de Dios como
el Ministerio del Ángel del Señor Jesucristo enviado
para dar testimonio de estas cosas que deben suceder
pronto, dar testimonio de todas estas cosas
correspondientes a esta generación, dar testimonio
de la última Profecía para esta generación; y dar a
conocer que alrededor de esta última Profecía, la
Profecía de la Venida de Cristo para el Día Postrero
y para esta generación, giran todas las demás
Profecías correspondientes a este tiempo final. Todas
las demás Profecías dependen del cumplimiento de
la última Profecía para esta generación; o sea, de la
Profecía de la Segunda Venida de Cristo.
Ahora, hemos visto que así como comenzó el
Ministerio de Jesucristo dos mil años atrás, después de
18 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

un retiro espiritual que tuvo luego de ser bautizado

por Juan el Bautista; luego el Espíritu de Dios lo llevó
al desierto, y allí estuvo sin comer 40 días y 40 noches,
o sea, que estuvo en un ayuno de 40 días y 40 noches,
y después salió predicando el Evangelio, y llevando a
cabo el Ministerio correspondiente a aquella
generación, el Ministerio correspondiente a la primera
parte, a los primeros tres años y medio de la semana
setenta de la Profecía de Daniel.
Y el Ministerio final que la Iglesia del Señor
Jesucristo tendrá operando en medio de ella
(operado por el Espíritu Santo), es el Ministerio de
Cristo repitiéndose nuevamente en medio del Israel
celestial, o sea, en medio de la Iglesia del Señor
Jesucristo. Ese es el Ministerio del Hijo del Hombre
prometido para ser manifestado en el Día Postrero.
Ese es el ministerio también de Moisés y es el
ministerio de Elías nuevamente repitiéndose en el Día
Postrero en medio de la Iglesia del Señor Jesucristo.
Esos son los ministerios de los Dos Olivos, los
ministerios de Moisés y Elías, repitiéndose en el Día
Postrero en medio de la Iglesia del Señor Jesucristo,
para bendición de todos los hijos e hijas de Dios. No
importa dónde se encuentren, no importa que estén en
tal o cual país, y no importa que estén en tal o cual
grupo religioso, eso no importa; lo importante es que
escuchen la Voz de Cristo por medio del Ministerio
final, del Ministerio de Jesucristo a través de Su Ángel
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 19

Mensajero dando testimonio de estas cosas en las

iglesias; para así los escogidos de Dios recibir el
llamado final, el llamado de Jesucristo, para poder
recibir la fe para ser transformados y raptados, e ir a la
Cena de las Bodas del Cordero.
El Ángel dice: “Bienaventurados los que son
llamados a la Cena de las Boda del Cordero.” Ese es el
llamado de Jesucristo por medio de Su Ángel
Mensajero, llamando a todos Sus escogidos en este Día
Postrero, en este tiempo final, en esta generación, para
ir a la Cena de las Bodas del Cordero.
Estamos en el tiempo más glorioso de todos los
tiempos; tiempo que desearon vivir los hijos de Dios
de otras edades y de otras dispensaciones. Ya este
Ministerio de Jesucristo manifestado en carne
humana, este Ministerio que ustedes han estado
viendo desde el 1963 en adelante, ha estado en la
Tierra. Y ha ido en una forma progresiva, dándole al
pueblo de Dios, a la Iglesia del Señor Jesucristo, la
Palabra del Día Postrero, la Palabra correspondiente
a esta generación, para que así la Iglesia del Señor
Jesucristo esté despierta y esté viendo y escuchando
a Jesucristo, el Ángel del Pacto, velado y revelado en
carne humana en este Día Postrero a través de Su
Ángel Mensajero, dándonos Su Mensaje final bajo el
Ministerio de Jesucristo a través de Su Ángel
Mensajero.
PERO EL ÁNGEL MENSAJERO DE
20 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

JESUCRISTO NO ES EL SEÑOR JESUCRISTO. Así

que ninguna persona podrá decir que se está haciendo
Jesucristo; porque él no es Jesucristo; pero Jesucristo
estará en él operando el Ministerio final, para darle a
conocer a Su Iglesia todas estas cosas que deben
suceder en esta generación en la cual nosotros estamos
viviendo, y darle a conocer el misterio de la Segunda
Venida de Cristo, la Venida de nuestro amado Señor
Jesucristo en Espíritu Santo, velado y revelado en Su
Ángel Mensajero, dándonos Su Mensaje final.
Es el Señor Jesucristo el que dijo: “Yo Jesús he
enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas
en las iglesias.”
Ese Ángel Mensajero del Señor Jesucristo es el que
viene con el Ministerio de Jesucristo para este Día
Postrero y para esta generación en la cual nosotros
vivimos, para dar testimonio de todas estas cosas que
deben suceder, y así obtener el conocimiento correcto
de todas estas cosas que están profetizadas que deben
suceder en esta generación.
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 21

VI Encuentro Juvenil Latinoamericano y Caribeño

“Los Jóvenes del Futuro
en la Edad del Amor Divino”
PALABRAS DE SALUDO A LIDERES JUVENILES
Dr. William Soto Santiago
24 de febrero de 1996 P.M.
Santiago de Chile, Chile

Bueno, jóvenes, que Dios les continúe bendiciendo

a todos; que Dios les guarde y les use grandemente en
Su Obra. Yo sé lo que es vuestra edad, porque cuando
comencé a predicar yo tenía unos 22 años, vamos a
ponerle, y agarraba el micrófono y no sabía lo que iba
a hablar, hasta que por fin en una ocasión, en una
vigilia, me dieron para hablar unas palabras, y estuve
hablando un rato, o sea, unos cuantos minutos, y ahí
comencé a hablar la Palabra de Dios, y continúo
hablándola, y Dios continúa ayudándome en todo.
Aún en algunas ocasiones he tenido la garganta
bien afectada, como ustedes han notado, pero aún con
la garganta afectada, Dios ha tenido misericordia de
mí, y he podido dar el Mensaje, o de media hora o de
una hora, o hasta de más de una hora, aún con la
garganta afectada, como fue, creo que fue uno de los
domingos, no recuerdo en qué sitio fue... en Santa
Cruz, Bolivia (hasta por televisión, para colmo); pero
no puse por excusa que la garganta estaba mala, sino
que en el puesto del deber comencé, y Dios me ayudó.
22 DR. WILLIAM SOTO SANTIAGO

Así ha sido siempre y seguirá siendo siempre, hasta

que toda la Obra que El quiere llevar
a cabo a través de mí, sea realizada, y también así será
con cada uno de ustedes.
Que Dios levante entre ustedes muchos hombres
y mujeres jóvenes que lleven la Palabra por todos los
lugares de sus países y por toda la América Latina. Que
Dios les continúe bendiciendo a todos. Y buenas
noches.

VIGILIA: SUEÑOS Y VISIONES DE

WILLIAM MARRION BRANHAM
Dr. William Soto Santiago
Del 24 de diciembre de 1991
al 25 de diciembre de 1991
Cayey, Puerto Rico

Y en una ocasión El me dijo que el año del jubileo

y el mensaje que yo estaba predicando era exactamente
la trompeta del año del jubileo, y que estaba
proclamando el año del jubileo.
Y luego me continuó mostrando un sinnúmero de
cosas, en donde yo le dije a Dios: “Muéstrame esto en
Tu Palabra.” Y me lo mostró todo por Su Palabra. Y yo
le dije: “Esto yo lo creo, y yo lo predicaré aunque yo
me quede solo.”
Pero la sorpresa para mí fue que no me iba a
quedar solo, sino que ustedes lo que estaban esperando
EL MISTERIO DE LA ÚLTIMA PROFECÍA . . . 23

era la trompeta del año del jubileo para recibir ese

Mensaje y ser liberados.
Ahí yo salí de la Dispensación pasada y Edad
pasada de Laodicea, fui libertado de esa Edad de
Laodicea y de todo lo correspondiente a esa Edad; y yo
continué predicando lo que me libertó a mí, y he
estado viendo cómo los escogidos han estado saliendo
de la Dispensación y Edad que ya pasó, y han estado
pasando a la nueva Dispensación que ha comenzado
y al Mensaje del Evangelio del Reino que ha
comenzado.