Las consecuencias psicológicas que sufre una persona que ha sido sometida a un proceso de acoso
laboral son catalogadas por los expertos como un trastorno por estrés postraumático. Este tipo de
trastornos, provocados por la exposición a un suceso traumático, es una reacción emocional del
organismo como defensa mental a situaciones que no puede asimilar. A pesar de que suele
diagnosticarse normalmente a personas que han sufrido traumas muy severos, como guerras,
atentados o agresiones físicas violentas y que puede pensarse que el acoso laboral no se
corresponde con ataques tan brutales y dañinos, las victimas de mobbing presentan exactamente
los mismos síntomas. Los más habituales son los siguientes:
http://www.elmobbing.com/consecuencias-psicologicas-mobbing-acoso-laboral
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El mobbing tiene unas consecuencias para la víctima, que si se extiende en el tiempo y el problema
no es tratado, pueden llegar a ser muy severas. Según un estudio, estas consecuencias pueden
llegar a ser más graves que las del acoso sexual.
Consecuencias físicas de sufrir acoso en el trabajo
De entre las consecuencias físicas podemos encontrar todo tipo de somatizaciones ante el
estrés y el malestar que causa el acoso.
Problemas cardiovasculares: hipertensión, arritmias, dolores en el pecho, dolor de cabeza.
Dolores musculares: contracturas, dolores cervicales, lumbares, temblores.
Problemas respiratorios: sensación de ahogo, sofocos, hiperventilaciones.
Dolencias gastrointestinales: dolores abdominales, malas digestiones, nauseas, vómitos.